Juntos al fin, frente a frente, una pesadilla había acabado: ¿Estoy solo? No.
Una prueba viva de que no estabais solos, además de la realidad presente y despierta, no solo erais dos, erais tres que era quizás lo más importante. Mucho que decir, o puede que realmente poco. ¿Habría incluso confianza en el quizás último hombre y penultima mujer de la tierra?
Sea como fuera, ahora estabais los dos presentes para no solo disfrutar de una compañía extra, sino para también ver lo que estaba ocurriendo, y por supuesto cuidar de una niña que de seguro necesitaba ayuda de un mayor femenino. Y hablando de ella, empezó a despertarse - ¿Papa? - preguntó por lo bajo aún con ojos cerrados - ¿Mama? - fue entonces que empezó a abrir los ojos y parpadear poco a poco acostumbrandose a la nueva luz fijandose primero en el hombre y sonrojandose por como estaba sujeta - A-ah... - no sabía lo que decir la pequeña, pero extrañamente al principio se preocupo, pero luego sonrió. Una sonrisa pura y tierna a la par que llena de felicidad contagiosa.
Entonces miró a la mujer con sorpresa - ¿Quien es?
Esperaba que, una vez atravesada la puerta, diese con respuestas que me sacasen de mis pensamientos, pero a pesar de no resolver todas mis dudas, si que aquella presencia había aliviado una parte profunda de mi ser al darme cuenta de que no era el único adulto en este mundo de locos...
Me fije en la chica de bata durante varios segundos, justo antes de que Alice, la niña que llevaba en mis brazos, empezase a despertar. Aquella forma en la que me llamaba... Me sentía nostálgico de una manera inexplicable, y parece que ella tampoco estaba acostumbrada a que la cargase... Pero se trataba únicamente de una niña, su mente era muy pura para darle vueltas al asunto, terminando por mostrarse esa dulce sonrisa que me mantenía en pie. En mi cuello aún colgaba a simple vista la chapa militar, con mi estatura, peso... Y el nombre "Sam..." con el resto tachado.
-Es... -ni puta idea, pero quería saberlo, lo necesitaba. -. Una chica... Creo... -a pesar que vestía ropa femenina, su cuerpo no encajaba precisamente con mis estándares de cuerpos de mujeres adultas; sabía que algunas tenían un desarrollo menor, pero... Aquella chica había exagerado. -. ¿Eres la persona de la que hablaba El Buhonero? -inconscientemente, llegue a la conclusión de que yo era el que necesitaba hacer preguntar allí; después de todo, era el que tenía una pistola en el cinturón... -. ¿Que rayos es este lugar?
Le comenté a Ion que también preparara la zona del comedor como bien había sugerido... me daba igual que no supiera muchas recetas. La comida era comida, y no estamos en situación de ponernos tiquismiquis con ella diciendo "Iugh, no me gusta". De todas formas tampoco estaba pensando en eso, sino que... ¡Personas! ¡Por fin veo a personas!
Les abrí la puerta a ambos, pudiendo ver desde mi metro noventa de estatura a las dos personas, no pudiendo retener una sonrisa leve -¡PERSONAS! ¡Y soy la más alta, toma ya!- pensé alegre... y si, me gustaba ver que era alta, pensamiento de cría pero que a mi me hacía ilusión. En ese momento la chica se estaba despertando, haciendo que pareciera extremadamente mona y adorable... ¡Dios, me la comía a besos con lo kawaii que era! ¡PERO MIRA QUE SONRISA! -Hola peque...- la salude con la mano con alegría...
Aunque la alegría se me pasó cuando el rubio dijo aquello -¡¿Como que "creo"?! ¡Y mis ojos están aquí arriba!- le dije al hombre al que pille viendo mis pequeños pechos, señalando mis ojos para que mirase ahí mientras la otra la tenía en el bolsillo desde que les abrí... molesta desde luego. ¡Soy claramente una mujer! Hermosa, alta, ojos amarillos, pelo violeta corto, de piernas largas, vestimenta punk, bata y una guitarra a la espalda... ¡Pero si estoy to buena! -¡¿No has visto por ahí una mujer en tu vida?!- le pregunté enfadada... aunque entonces me di cuenta de que quizás no era la mejor pregunta que pude hacer y me incomodé -Perdón, mala elección de palabras... ambos estamos en las mismas...- me disculpe... ¿como pretendo que haya visto más mujeres si hasta hace nada estábamos solos en el mundo?
Cuando nombró al Buhonero, mi cara se volvió a tornar molesta -¿El Butronero de mierda ese? ¿Que coño te ha dicho de mi?- le pregunté, aunque luego negué con la cabeza -Da igual, este no es el mejor momento ni lugar para ponernos a hablar en profundidad. Tengo una sala médica preparada para la niña, entrad- dije, invitándoles a entrar, pues ahora mismo la niña me preocupaba -Me llamo Yuna, y estos son los laboratorio Laputa... no hagas chiste por favor- les terminé diciendo a ambos.
La niña se rió por lo bajo cuando Yuna le echó la bronca a Samuel. Se mantuvo en silencio hasta que se disculpó y entonces levantó la mano - Yo soy una mujer - dijo alegre respondiendo a su pregunta. Pero pronto se encontró confusa cuando cambiasteis de tema a una persona que no estaba allí - ¿Quién es Butronero? ¿Y Buhonero? Suena a Buho Negro - y aunque quisierais cambiar de tema, pronto se vió ella misma intentando esquivar un tema agarrandose bien a Samuel.
-¿Medico? - se apegó aun más al soldado - No no. E-estoy bien. S-solo me torcí el pie p-pero papa me lo curo. P-porque... tu eres mi papa ¿No? - preguntó aún absorta por culpa de la amnesia a aquel hombre.
Cierto parecido tenían los dos, y podría ser que fueran propiamente familia... Pero nunca se sabría.
La reacción de la científica solo hacía que dudase más de ella, pero la entendía: en aquella situación hasta yo perdería la cabeza fácilmente por cualquier cosa, y es que es difícil pensar cuando no sabes nada... Por suerte ella parecía ser consciente de ello, y todo pasó rápidamente.
-Lo lamento, supongo que ambos hemos perdido algo... -después de todo, si yo perdí mis recuerdos, tal vez ella perdió...
Fuese cual fuese el caso, ver que Alice no tenía ni la menor idea de quién era el Buhonero me tranquilizaba un poco: la verdad es que prefería no tener que explicarle la situación con aquel sujeto, por lo que agradecía de que estuviese dormida durante el encuentro. Entonces, me fije en la científica.
-Me ha dicho que puedo conseguir respuestas contigo... -le explique, sin darle muchas vueltas al asunto pues su ofrecimiento me resultó interesante. La verdad agradecía haber encontrado a alguien con conocimientos de medicina, después de todo mis tratamientos solo eran para cosas pequeñas, por lo que tratarla más en profundidad me calmaría un poco... Aunque Alice no parecía de acuerdo; ningún niño gustaba de visitar al doctor... -. Tranquila, no te hará nada... Yo te protegeré, porque es lo que un padre hace -le dije con una leve sonrisa a Alice para tranquilizarla, fijándome luego en Yuna. -. Soy Sam... Se supone que los laboratorios son lugares esterilizados, pero con ese nombre es difícil pensarlo -era inevitable: con todo lo que había pasado no podía evitar soltarme un poco ahora que las cosas parecían mejorar... un poco.
Aún habían muchas cosas que mi cabeza necesitaba conectar, pero tener a Alice a mi lado... Simplemente hacía que todo valiese la pena, inexplicablemente.
No pude evitar sonreír ante la dulzura que la chica despedía con su respuesta -Si que lo eres, y muy mona- dije acariciándole la cabecita con amabilidad. El hombre se disculpó también al igual que yo, a lo que simplemente asentí aceptándolas. La pregunta sobre quien era el Butronero... simplemente chasqueé la lengua -Tsk... nadie, solo un capu...- iba a soltar un insulto, pero me paré para que ella no lo oyera -Un capu... cha. Un algo con capucha- terminé diciendo, antes de mirar a Sam -Pues a mi no me dijo nada... o me lo dijo y no le hice caso... es un capullo. Pero veré si puedo ayudar- le dije en voz baja para que no lo oyera la niña.
Menos mal que luego el tema fue distinto, siendo ahora el médico que parecía asustar a la niña -Pues si te has hecho daño en el pie, tranquila que nosotros te ayudaremos cielo- le dije a la chiquitina, apoyando las palabras de su supuesto padre... ¿tendrían también amnesia? Seguramente, porque sino dudo que no sepa quien es su padre... bueno no, la posibilidad de que el padre la abandonara para comprar tabaco también es plausible.
Pero... ains... tuvo que hacer un chiste -No te podías contener, ¿no?- le terminé diciendo a Sam, suspirando -Al menos no me incluía a mi...- le dije al que parecía militar, mientras me acercaba el reloj de mi muñeca a la boca -Ion, tenemos una torcedura de tobillo, ¿te podrás encargar...?- le pregunté, antes de que se me ocurriera otra pregunta -¿Y que andas cocinando? Seguro que tienen algo de hambre- añadí.
La niña se os quedó mirando extrañado y cuando habló la mujer en voz baja acabó saltando ella - ¿Que es un capullo? - por muy bajo que se hablase allí, la niña estaba demasiado cerca del padre como para no oiros. No obstante ante la idea del medico, aunque se encogió aceptó con un asentimiento a regañadientes - V-vale.
Ion por otro lado hizo su acto de aparición nada más preguntó Yuna acerca de lo que teniais entre manos - A su servicio Señorita Yuna. Claro, incluso hasta la niña podría encargarse. He preparado en el ala medica una maquina diseñada para crear yesos alrededor de zonas afectadas. Solo hay que poner la zona afectada encima suya y apretar un boton. Es un yeso especial que se enfría al instante. No debería apoyar el pie, pero con la medicación adecuada el dolor le rebajará y en pocos días podrá andar con normalidad.
-Por favor, si son tan amables de seguir a la señorita Yuna hasta el ala médica, ella podrá encargarse de todo - se atrevió incluso a decir palabras que Yuna no había dicho pero para adelantarse a esta misma.
-En cuanto a la comida... Bueno, no sabría lo que le gustaría a la niña, pero tengo las dietas de ambos dos en el historial de cocina, y están ahora mismo preparandose comida para ambos. Para la pequeña estoy haciendo diferentes platos que hay en una base de datos de comida automatizada dedicada a infantes. Espero que le guste algo de lo que he elegido para ustedes. - Era quizás delicado hablar allí delante de la pequeña de todo lo sucedido, en especial de lo que sabía Yuna y Sam no.
Es por ello que hasta llegar a la sala medica y hasta no dejar a la niña en la maquina esperando a que esta se encargara de hacer el yeso de la pierna, que no pudisteis estar más en privado para hacer dichas preguntas delicadas. Por otro lado, Ion se quedó en forma de holograma entreteniendo a Alice
-No es nada -le respondí a Alice con una muy leve sonrisa. Esperaba que la científica supiese callarse un poco la boca, o tendría que pasar todo el día intentando que la peque no aprendiese malas palabras. Me daba igual que el mundo estuviese acabado: siempre había que respetar los valores.
Justo entonces, cuando Yuna llamó a su asistente, miré de reojo mi reloj: Map no había aparecido en un buen rato, y era extraño, pues siempre que pisaba un lugar desconocido él aparecía aunque fuese para decir "no esta en mi radar...".
-Tal vez se ha quedado sin batería... -pensé.
De manera poco disimulada alcé la ceja al escuchar lo que la I.A. de Yuna había anticipado: ¿Mi dieta? ¿En un historial? ¿Acaso yo sigo una dieta? Y de ser así, ¿porque la tiene la cocina de este lugar? ¿Acaso...?
Sin darle muchas vueltas, llevé a Alice hasta la maquina y esperé a que le explicasen que tenía que hacer para colocarse el yeso. Una vez fuese atendida, la dejaría bajo el cuidado del holograma, apartándome con Yuna para poder hablar más en privado, pero sin alejarnos demasiado de Alice; en caso de que algo sucediese, podría llegar rápido hacia ella.
Y una vez solos... No diría nada. Simplemente me le quedaría viendo hasta que ella decidiese contarme algo: sabía que ella conocía algo, pero no tenía idea de si tenía una mejor idea de todo aquello que yo. Por lo que había dicho antes, ambos estábamos en la misma situación, y no la presionaría a decir nada si no sabía... Aunque algo debía saber, él lo había dicho...
Me mordí el labio con gesto incómodo al ver que la niña acabó por escucharme al final llamar capullo al Buhonero... cachis, pensé que no me podría oír -Nada cielo, no es nada...- le dije al igual que Samuel... no es el momento de enriquecer el vocabulario de la pequeña.
Menos mal que Ion apareció luego, sería una buena forma de desviar la atención mientras hablábamos -Chicos, este es Ion, es mi amiguito y os será de mucha ayuda en las instalaciones. Os caerá bien seguro- les presenté ante los dos desconocidos... seguro que les cae bien con lo bueno que es. Obviamente no se me pasó por alto que Ion tuviese la comida de Samuel en su base de datos... eso confirmaba mis sospechas sobre él -Seguro que a la peque le encantará Ion- dije sonriendo sobre la comida que preparaba mi IA para la pequeña.
Dejamos a Alice con Ion, para que empezase a enyesarse el tobillo y que así se sintiera mejor... además seguro que Ion con lo mono que es la tiene distraída un rato mientras los mayores hablan... O por lo menos eso creía, porque Samuel lo único que estaba haciendo era mirarme... y me estaba empezando a incomodar -¿Porque me miras en silencio así? Das mal rollo... no tendré la bragueta abierta ¿no?- le pregunté y le dije directamente cerrándome la bata por si acaso, pues creo que ya se ha dado cuenta de que no soy una persona que esas cosas se las calle -Viendo que tu no hablas hablaré yo... pero continua la conversación en vez de quedarte mirando solo- le terminé diciendo seria antes de empezar.
A ver... por lo que ha dicho Ion, tiene tu dieta metida en su base de datos... por lo que trabajas para Laputa- le dije... no pudiendo evitar esbozar una sonrisa pícara -Perdón, es que hay chistes que no se pueden evitar, mejor llamémoslo Laboratorios y punto- le dije antes de proseguir con más seriedad -Diria que eres un miembro del equipo de seguridad de las ciudades y el laboratorio... o al menos eso supongo por la pistola que llevas en los pantalones... por favor espero que sea la pistola... Ahora dime tu algo- le compartí información, esperando que esto fuera recíproco y me dijera algo a mi.
A pesar de parecer una alborotada, al menos Yuna se esforzaba también en mantener la inocencia de Alice en una pieza. Era algo que apreciaba profundamente...
Tras dejar a Alice con la I.A., me pude reunir para hablar con ella. No parecía muy a gusto bajo mi mirada, aunque era normal: precisamente era una técnica de interrogación super básica. Simplemente acepté con un asentimiento de cabeza, escuchando lo que tenía que decir...
Enarque una ceja ante su chiste espontaneo, considerando que hace poco me miró mal por intentar hacer uno. En todo caso, lo que me había dicho no era muy... revelador.
-Hmph... -dándome cuenta de que a lo mejor no se había percatado, saque mi pistola para enseñársela bien: era de un diseño común, pero con algo muy especial y destacable: la recamara. Estaba estaba conformada por una capsula de cristal que permitía ver la bala en su interior, siendo actualmente una roja. -. Tal vez tenga sentido lo que dices... Encontré la pistola en una casa de un pueblo cercano, Balse. En esa misma casa conseguí una foto mía con Alice, por lo que pienso que era mi casa -para demostrarlo, saque de mi chaqueta aquella foto donde aparecía con la niña. -. En ese mismo pueblo la encontré a ella: estaba siendo raptada por unos robots... Allí descubrí que las balas de la pistola tienen efectos especiales: Las rojas funden lo que impactan, y me he acabado unas azules que congelaban. Desconozco la función del resto... -entonces, guardé la pistola y la foto. -. Dices que trabajó aquí, ¿correcto? ¿Entonces no tienen algún tipo de registro sobre mi? ¿Sobre... Alice? -además de no saber casi nada sobre mi mismo, tampoco sabía mucho sobre la pequeña: todo lo que había sucedido decía que yo era su padre, pero... No era como si recordase haber tenido una hija. -. A todo esto... ¿Que me puedes decir de ti? ¿Estas en mi misma situación?
Al ver esa pistola empiezas a recordar algo más. Esa pistola la habias creado tu, como un proyecto de arma pacifisca para evitar la mayor cantidad de muertes posibles, siendo que solo necesitaría usarse contra elementos no vivos. Hasta participaste en la idea de alguna de las balas las cuales estaban a tu disposición en una pantalla cuando ayudaste a crearla, tanto fue así que recordastelo escrito en esas pantallas.:
Azules - Congelantes. Genera paredes y estructuras de hielo o bien congela el objetivo a disparar
Amarillas - Electricas. Bala que no atraviesa, sino que se adhiere a una superficie y la electrifica conjunto a todo el objeto y los que estén en contacto
Rojas - Ardientes. Bala que expulsa llamas a una temperatura muy alta, tanto que puede fundir el metal.
Verde - Virus. Beneficiosa para el usuario, resto de la información bajo nivel superior.
Negra - Hiper explosión. Genera una implosión que atrae todos los instrumentos metalicos, pero expulsa a los organismos vivos
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Asentí cuando escuché que era su hija, o por lo menos que pensaba que lo era, y me sorprendí cuando escuché lo que estaban haciendo los robots... ¿porque iban a querer secuestrarla? Que raro por Dios...
Cuando sacó la pistola, me llamó la atención nada más verla... extendiendo las manos un poco -¿Me la dejas ver por favor?- le pedí al hombre, esperando que me la dejase ver... aunque vamos, entendería que no me la dejase -Amarillas hacen calambres, negras implosionan a lo agujero negro con los metales, y las verdes son víricas...- musité cuando estuvo hablando de la pistola y sus balas -Esta arma la he diseñado yo, lo recuerdo... me salio chula, y me inspiré en Jak y Daxter... guau, como mola recordar estas cosas tan guapas- le expliqué, no pudiendo evitar sonreír. Estaba claro que acababa de recordarlo al verla... y que me molaba.
Entonces proseguí a responderle -Si, tal vez haya información sobre ti... ahora le pediré a Ion que busque, dejemos que se centre un poco más en la cria- le dije al hombre. Primero le respondería más cosas antes de mandar a mi compi digital a buscar -Sobre mi... pues si, estaba en la misma situación- le dije a Samuel con seriedad -Aunque tuve la suerte de tener a Ion. Al poco de despertarme sin recuerdos ni nada, le encontré y el me dijo muchas cosas de mi gracias a su informe. Era científica e ingeniera de los Laboratorios... directora de proyectos aeronáuticos, colaboradora de otros muchos proyectos, y creadora de cosas aleatorias que me pedían- le informé al hombre... dando a entender que era muy lista de forma pasiva-agresiva... me gusta chulear un poquito, ahora tengo la oportunidad.
Me asomé a la enfermería después de responderle -Ion, busca en los registros cualquier dato sobre un agente de seguridad llamado Sam. Centrate quizás en los que tengan familia, ¿vale colega?- le pedí a la IA -¿Como esta la paciente más mona de la enfermería?- terminé preguntando sonriendo.
Ion reaccionó ante vuestra conversación, o más bien ante la petición que el militar hizo a la investigadora, y esta a su asistente artificial. Al mismo tiempo reproduciendo su holograma donde la niña y en la pulsera de Yuna, Ion levantó las manos - Señorita Yuna, es mucho más facil localizar a la persona de la que quiere encuentre los registros si hay una muestra de ADN o una huella dactilar, y en el caso del señor Samuel, como bien querrá uster identificar sus datos así como su ficha personal, tan solo debería poner un dedo en la pulsera en la que me contiene.
Se giró pues al hombre del cual la IA ya sabía el nombre y con una sonrisa y un gesto de recibimiento así como animando a avanzar, Ion desapareció - Si fuera tan amable señor Samuel. - Esperó pues ante la impaciente necesidad de saber más sobre el susodicho, y cuando lo hiciera Ion empezó a cargar y descargar datos, siendo que un pequeño calambre le recorrió la mano a Samuel y le activó su pulsera.
- ¡AY! J-j-j-jefe. M-me he perdido. N-no se donde estamos y... N-no me podía virtualizar. S-sin satelite y sin haber lanzado mi imagen de antemano, e-en una zona donde no haya un escaneo de GPS, n-no podía aparecer. Uff... P-pensé que se había olvidado de mi jefe, pero ahora veo que no. Pero... ¿Por qué no puedo identificar aún donde estoy? - Se quedó pensativo la nueva IA salida del brazalete de Samuel siendo que miró a su alrededor para ver donde se encontraba. - Hola señora
Tras saludar a Yuna como si no importara en absoluto, siguió mirando a su alrededor y lanzó un pulso que llevó a analizar toda la sala - Jefe, la antena no está aquí. S-si no me conecto a ella... No sé cuanto podré durar cuerdo.
Entonces Ion salió de la pulsera de Yuna y sacó en forma de holograma varios documentos - Samuel Hoogan. Un militar y buen cazador. Fue contratado por el servicio militar de Laputa en calidad de protetor y guardían tanto del propio castillo y laboratorio, como de las ciudades de estudio colindantes a Laputa. Se le pagó el traslado con su familia a Balse como ciudad conectada al mismo laboratorio y según fue obteniendo logros se le ofreció un puesto extra como probador de armamento experimental al conocer que nunca haría daño a nadie con dichas armas. Lo que mata lo come y no desperdicia nada de comida, de ahí que su dieta sea tan abierta aunque rica en proteinas.
-Muchos de los prototipos dados a Samuel están tachados o marcados como peligrosos, no aptos o destruidos. Y hay algunos datos a los que no puedo acceder. Están clasificados de un nivel de seguridad superior. En las útimas entradas pone que pidió la retirada temporal indefinida debido al alumbramiento de una nueva vida en su seno familiar. - Se detuvo un momento mostrando una inexpresiva cara de sorpresa - Vaya lo siento... Aquí dice que su mujer murió antes de que ocurriera el apocalipsis... Entre ese momento y una entrada que pone que se fue de Balse a recuperarse de un estado de depresión, hay un vacio. - se encogió finalmente de hombros
-De todas formas supongo que eso da igual. Los permisos militares siguen activos en su codigo genetico, lo que le da acceso a muchos de los lugares de Laputa, incluso al armamento del mismo. - Entonces Ion se fijó en la pequeña IA que le miraba absorto soltar tantos datos. - Esto... ¿Que hace una IA de GPS activa en el laboratorio señorita Yuna?
No tenía problemas en entregarle la pistola: después de todo, estaba seguro de que Yuna no me podría ganar en un forcejeo por ella, así que la podría recuperar si intentaba algo con ella. Pero para mi sorpresa, reveló detalles que desconocía, declarándose la creadora de aquel arma en particular.
-Supongo que debo darte las gracias... Esa arma me ha salvado la vida a mi y a Alice ya un par de veces -dije pensando en las veces que no tuve más opción que probar a la suerte y usar las balas del arma.
A diferencia de mi, su despertar pareció menos caótico. Su I.A., a diferencia de la mía, tenía archivos sobre ella, y... Míos.
Dudé unos instantes antes de colocar mi dedo en el sensor, como si temiese sobre lo que pudiese contener mi pasado. Pero sabiendo que no podría proteger a Alice sin sabe quién era, finalmente coloque mi dedo para que la I.A. buscase los archivos relacionados.
Mientras Ion buscaba los archivos, Map apareció finalmente. Se le veía desorientado, perdido... Irónico tratándose de un GPS. Pero antes de poder decirle algo, la I.A. de la científica llegó con lo que buscabamos.
Fue escuchando atentamente cada detalle sobre mi persona. Todo parecía creíble, al menos en la manera en la que pensaba de que yo podía llevar el papel de aquel al que la I.A. describía. Toda aquella información que desconocía... Era como olvidar toda una vida.
Ante la mención del nacimiento de una nueva vida, no pude evitar dirigir mi mirada hacia Alice.
-Entonces es verdad... -la noticia de la muerte de mi esposa fue... vaga. Era lamentable no poder sentirme mal por ella; debió ser alguien importante para mi, pero... Me dolía más no poder recordarla que su muerte en si.
-... -no sabía que decir. Estaba asimilando aún toda la información cuando noté la inquietud de Ion ante la presencia de Map. Me dirigí entonces a Yuna. -. ¿Hay algún problema con la presencia de Map? Él fue quién me ayudo a orientarme. Lo necesitaré si llegó a salir de este laboratorio -no descartaba la idea de que en algún momento saldría por algún motivo, después de todo aún habían muchas cosas que el laboratorio no parecía poder explicarme.
Cuando tuve la pistola en las manos, empecé a estudiarla y analizarla, intentando recordar del todo como funcionaba, como la había creado y demás. Entonces el hombre me agradeció haberla creado debido a todos los aprietos de los que le había sacado -De nada supongo... aunque no creo que debas agradecermelo... yo no agradezco nada a quien inventó el vater, solo lo uso cuando lo necesito. Si os habéis salvado, es cosa tuya, no mia- le dije al hombre mientras seguía centrada en observar la pistola.
Dejé que Samuel pusiera el dedo en mi pulsera como indicó Ion, para así analizar su ADN y que nos dijera que información tenía sobre él, al igual que la IA tenía información y archivos sobre mi.
Entonces, cuando lo hizo se le encendió su propia pulsera e IA compañera, cosa que me sorprendió -¡Anda! Otro digichibicompi...- dijo mientras la observaba y la escuchaba... parece que era una unidad GPS... y me mosqueó un poco -¿Señora?- pregunté con el ceño fruncido -Tsk... No soy tan vieja...- dije cruzándome de brazos... desde luego, esa IA era mucho más tonta que Ion... ¿de verdad no se extrañaba de ver a otra humana que no fueran Samuel y Alice?
En fin, Ion apareció con todos los datos sobre Samuel Hoogan... vaya, tenía una historia dramática aparte de que al parecer probó cientos de armas mías -Bueno, podremos usar tu código para ir al arsenal... seguro encontramos cosas útiles- dije simplemente... mejor no ahondar en traumas que tal vez ni recuerde. A la pregunta de Ion me encogí de hombros -No lo se, es el compañero de Samuel y se activó de golpe... ¿hay algun problema?- le dije a mi IA, pues no sabía responder a la pregunta de Samuel de si era malo que estuviera -Una pregunta... ¿porque todas las IAs sois tan chibis? ¿Y porque no se puede conectar a la antena que tenemos?- le pregunté a Ion, esperando su respuesta mientras echaba un ojo a Alice a ver si estaba bien.
-ESO ESO. ¿POR QUE NO PUEDO ESTAR ACTIVA? ¿Me quieres matar acaso? - preguntó un tanto exagerada la IA de navegación de Samuel - Se supone que soy la IA de navegación más eficiente del mercado y estoy en un sitio que no aparece en mis mapas, ni siquiera el satelite me conecta... No se donde estoy. No se como se llama el lugar. No tengo informaciónd e sus calles, de su población, de sus lugares más importantes. - Se encogió y empezó haciendose bolita a balancearse de un lado a otro
-ME VOY A VOLVER LOCO, Y SI ME VUELVO LOCO DEJARE DE SER LA MAS EFICIENTE DEL MERCADO, ME QUITARAN DE EL ACTUALIZARAN A LA ANTIGUA MEJOR QUE YO Y SERE OLVIDADO - empezó a exagerar entonces al más estilo drama queen, con un toque muy humano. ¿Quizás parte de su programación? - ¡¿POR QUE QUIERES HACERME ESO?! ¡SI SOMOS PRIMOS DE CEROS Y UNOS! - y realmente mucho no se había alejado, todo estaba programado con ceros y unos.
Ion se quedó perplejo y medio arrinconado ante tal emboscada de preguntas, hasta que al fin se hizo el silencio en busca de una respuesta por parte de la IA del laboratorio - B-b-bueno... hay una norma escrita en el laboratorio de Lapura sobre los inventos que se crea, IAs incluidas. Las aplicaciones de navegación no pueden tener acceso a la información del lugar donde se encuentra el mismo laboratorio. Hubo problemas en el pasado, en otro pais diferente y destruyeron el primer laboratorio que empezó a crearse porque lo localizaron gracias a las aplicaciones de navegación y los satelites que conectaban con ellos.
-Por eso el laboratorio creó un pequeño sistema que lo ocultaba de los satelites que pudieran ver la montaña y así no aparecería en ningún mapa. Así se evitaría posibles atentados contra la gente que solo quería el progreso del futuro. En su lugar se accedió a poner una antena con una señal diferente a las demás Ia de navegación y cuyo único lugar donde pudiera estar fuera en el interior... - se quedó un tanto inquieto el pequeño Ion al ver las caras de todo buscando una respuesta por su parte, incluso de la otra IA.
La cosa lógica venía cuando había que darse cuenta de un detalle: Quedaban pocas personas en el mundo, y ahora esa norma casi carecía de sentido
-Esto... esta cosa ya ha parado. - dijo Alice desde dentro de la enfermería - Tengo un calcetin duro en el pie. - mencionó lo obvio lo cual ya parecía que iba a ayudarla a mejorar esa pequeña torcedura.
-¿D-Digichi...? -después de todo, Yuna también parecía ser bastante joven. Podría ser una científica sabelotodo, pero también parecía ser algo inmadura. -. Pues vayamos cuanto antes a ver que podemos encontrar.
Pero si Yuna era inmadura, Map lo era más: por el hecho de no estar conectado a una antena estaba perdiendo la compostura, y parecía que en cualquier momento saltaría de mi reloj a meterle una bofetada a la otra IA.
Preste especial atención a lo que Ion tenía que decir respecto a la antena y la razón por la que mi IA no podía conectarse a ella. Me quede pensativo al respecto durante unos segundos, considerando lo que podría ser mejor para todos...
-¿No existe alguna forma de, en lugar de cambiar la señal de la antena para que Map se pueda conectar, cambiar la de Map para que sea igual a la de la antena? -les miré a todos un poco dudoso, como si no tuviese seguridad de lo que decía, y es que era verdad: no tenía la menor idea de si algo así era lógico, por algo preguntaba... -. No se si existe algún otro humano haya afuera que pueda conectarse, pero... Vi maquinas que querían atrapar a Alice: No dudo en que tengan tecnología para meterse también en las antenas, y si quitamos la seguridad del laboratorio seguramente terminaremos con esas cosas encima tarde o temprano...
Entonces, la maquina finalmente terminó de coloca el yeso a Alice. Hice un pequeño gesto de cabeza a Yuna para que me diese un momento y así poder ir a atender a la pequeña.
-Hmph... -miré por encima el yeso para mirar que no faltase nada. -. Parece que esta bien. Con eso tu pierna se recuperará en un tiempo -mostré una leve sonrisa a Alice, colocando una mano sobre su cabeza para darle un par de caricias antes de ver a Yuna desde allí. -. ¿Hay algún problema conque lleve a Alice conmigo a la armería? -pensaba preguntar si había un lugar seguro donde pudiese dejarla, pero... En realidad quería evitar separarme de ella siempre que fuese posible.
Miré a Sam cuando escuché su pregunta sobre la palabra que había pronunciado a la hora de describir a las IAs -Digichibicompi... De digital porque son hologramas, de chibi porque son bastante monos, y de compañeros porque son nuestros amigos... Digichibicompi... ¿que pasa? Lo dicho, sigo siendo joven para inventarme palabras... además soy científica, debo inventarme palabras a medida que me invento las cosas para nombrarlas- le dije al hombre... se notaba que tenía muchas ganas de hablar incluso de tonterías con otra persona humana.
Y por otro lado... Map era toda una IA del drama -Map... no hay más humanos... la única que podría actualizarte en este mundo soy yo... y la verdad es que tengo más cosas de las que preocuparme...- le dije a la IA de geolocalización, intentando que viera que no debía de preocuparse tanto de que fueran a eliminarle -Además... me haces gracia- le terminé diciendo con una sonrisa leve. Vamos, que no la van a actualizar.
Entonces escuché a mi compañero y al mejor de los digichibicompis en mi opinión... y si, entiendo que antes fuera mejor mantenerlo oculto... pero ahora no me parecía tan bien -Hmm... quizás...- fui pensando ahora que tenía mucha más información -¿Y si hacemos la opción inversa Ion?- le propuse a mi IA. Obviamente también hablé para Sam... pero él quizás no entendiera nada de lo que dijera, pues me pondría muy técnica.
Pero no mira... creo que el hombre habia tenido la misma idea que yo... creo, veamos si al explicarme él coincide conmigo -Quizás si usamos el sistema de geolocalización de Map enchufándolo a una de nuestras antenas, podamos invertir los sistemas de camuflaje y ocultamiento para hacer justamente lo contrario: desvelar nuestra ubicación del resto de supervivientes si es que los hay. Por así decirlos... pasar de ser un bunker a un faro donde se puedan guiar las dos personas que supuestamente quedan por allí hasta nosotros. Como la idea que tuvimos al quemar el cubo en la azotea... pero a lo grande- le terminé sugiriendo... aunque cierto comentario de Sam me hizo mesarme la barbilla -Pero hmm... si los robots son un problema, deberemos intentar desactivar su sistema de ubicación satelital, no es plan de que ellos también sepan donde estamos... todo será cosa de probar- comenté, esperando que Ion me diera su opinión.
Entonces Alice llegó con la pierna endurecida por la escayola, sonriendo ante sus palabras -Que guay... eso seguro te ayudará a que se cure... es más, si encontramos unos rotuladores, te lo personalizaré con unos cuantos dibujos- le dije contento, esperando que le hiciera gracia e ilusión. Sam me pilló por sorpresa -¿Quieres llevar a una niña junto con armas? No se si es la mejor combinación...- le dije, rascándome la cabeza -Ion, descargate en la muñequera de Sam... y que Map se descargue en la mia. Así ambos podremos contactar con ellos... y así puedes guiar a Sam sin necesidad de mi presencia, ¿vale?- le dije a mi IA favorita.
Ambas IAs os miraban con algo de preocupación al no saber como actuar, Map sin duda estaba acojonado por el temor que suponía dejar de ser util, mientras tanto Ion no sabía si desobedecer las normas a favor de Yuna o no. Por suerte algo hubo que llevó a Map a tranquilizarse poniendo una pose de tio guay - Vaya gracias guapa. Según tengo entendido en mis folletos de publicidad, la mejor forma de aumentar la población de una ciudad o pueblo es ligando, y para ligar con mujeres hace falta humor. Aprendí del mejor, mi primo google ¿Sabes? - y mientras seguía manteniendo esa actitud comica hacía poses como haciendose parecer fuerte tratando de sacar musculo o similar.
-Pero ahora fuera bromas, gracias por no borrarme. Eres de las pocas cientificas que tienen verdadero corazón con las aplicaciones. No paran de llamarnos seres sin sentimientos que no valemos más que para servir a los humanos y que siempre necesitamos actualización y actualización, en serio no sabes lo harto que estoy de que me emboten el cerebro a información. Es util la verdad, PERO DUELE CUANDO LA INGERTAS POR PRIMERA VEZ - obviamente a las actualizaciones se refería con las nuevas funciones, ya que era una carga de datos brutal, similar a una jaqueca en un ser humano.
-Esto... - se intentó hacer notar Ion con una pequeña cara tristona ¿Celos? - Supongo que tienen razón... Si no hay más humanos... La IA de navegación podría conectarse a la antena. Ni el ni su dueño tienen motivos para revelar la ubicación del laboratorio a "enemigos humanos" - aclaró finalmente Ion, pues realmente era un pensamiento lógico. - Se puede conectar a la antena desde cualquier ordenador, tan solo llevará un poco de tiempo y podrá tener la información del lugar. - finalmente Ion se puso del lado del resto para que no se preocuparan por Map.
Fue justo entonces que las ideas de ambos salieron hacia la IA del laboratorio haciendola pararse a pensar a pesar de que quiso intervenir en más de una ocasión, pero tras terminar de escuchar la explicación de Yuna se quedó muy pensativo, tal y como si estuviera calculando con mucha precisión dicho plan. - Es... posible - dijo finalmente ante la resolución del plan de Yuna
-Es complejo, pero, se podría emitir una señal desde la antena principal del laboratorio, y usar al mismo tiempo las antenas de las ciudades de alrededor como repetidor y escudo, eso amplificará la señal del mismo laboratorio extendiendo esta a todo el mundo completo, y con el escudo de red de las ciudades, dejará a los robots sin posibilidad de buscar la señal desde el punto principal. En caso de que estén en las ciudades de alrededor se puede enviar una segunda señal desde la principal para que vayan al lugar de transmisión de cada ciudad y así vean la original y sepan donde tienen que ir. Pero... vamos a tardar mucho tiempo... - se quedó otra vez pensativo para calcular más y más, tanto parecía estar calculando Ion que podría echar humo.
La peque salió entonces ayudada de Sam y fue junto a Yuna con este también - Gracias - dijo un tanto sonrojada sin especificar ahora el papa, puede que porque antes estuviera dormida y se dejara más llevar. Ante la ocurrencia de Yuna la sonrisa de Alice se abrió mucho - ¿Podré dibujar también? Mi papa decía que dibujo como una artista - Obviamente ahora sabiais quien era su papa, y muy probablemente quien era el adulador ante el arte de la niña.
Pero entonces todo se puso un poco más turbio cuando se mencionó las armas. - ¿Armas? - se detuvo a pensar - Oh... - y entonces pareció acordarse de algo - ¿Es lo que usan los principes para proteger a las princesas? Papa también usaba, incluso me dió una de juguete para jugar a indios y vaqueros una vez... - se dió cuenta no obstante que el cariz de la conversación era otro al ser tan acalorado. - P-puedo quedarme con la doctora... N-no es ningún problema.
Pero entonces Ion llegó al rescate para calmar los humos - ¿Eh? En verdad señorita Yuna... No es necesario. Conecten a Map a la antena y al sincronizarse me encargaré de todo. - esperó a que lo hicierais y tras eso, la pequeña IA obró magia.
Fin del capitulo 5