Partida Rol por web

Fue un despertar incómodo. Me espabiló la luz que me golpeaba y el hedor tan raro que había alrededor, provocando que me despertase confundida -Agh... mi cabeza...- balbuceé mientras me incorporaba poco a poco en aquel extraño lugar con la mano delante de los ojos para paliar la luz -Se siente como una resaca de las buenas... agh... ¿tanto bebí anoche?- me pregunté a mi misma mientras que poco a poco me iba espabilando y mirando a mi alrededor.

Parecía estar... en lo que parecía un laboratorio abandonado -¿Donde... donde estoy? ¿Hay alguien más...?- me pregunté a mi misma algo preocupada al no reconocer nada de mi alrededor, antes de darme cuenta de otra pregunta que me pasó por la cabeza -¿Quien... soy?.

Dios... ¡menuda borrachera me tuve que pegar anoche para que ni recordara quien soy! Y ahora que me daba cuenta... ¿porque pienso que esto lo ha provocado una noche de juerga? No sabía porque... pero mi cabeza había hecho automáticamente la relación de encontrarse mal y desorientada con la resaca de una noche de bebercio... era curioso... a la vez que algo preocupante. 

Me examiné la ropa y los bolsillos, aprovechando también para examinarme y ver que estaba bien... quizás llevaba cartera o algo que me dijera quien soy. No mucho, lo único que llevaba era ropa que parecía de una fan gótica del rock adolescente... que sinceramente me gustaba pese a que me sentía algo mayor para llevarla, y una bata de laboratorio -Si llevo bata, supongo que... ¿quizás trabajaba aquí?- pensé uniendo cabos. Ni en los bolsillos de los pantaloncitos ni en los de la bata encontré una identificación... pero si que encontré un vial con una etiqueta y un nombre -Yuna...- lo pronuncié para mi misma. Me sonaba estaba claro... ¿pero de que? -Quizás sea... yo. O tal vez fuera mi jefa y debía darle esto... que raro... C.U.R.A...-  me iba diciendo intentando encontrar sentido a esta situación.

De momento, mejor sería mejor salir de aquí... no veo demasiado seguro quedarme en un lugar en ruinas. Y sin duda tenía razón; porque al mirar al techo pude ver como un armario metálico caía desde uno de los agujeros -¡COÑO!- grité mientras me alejaba pegando un salto para atrás por puro instinto de supervivencia de no querer ser aplastada.

El armario cayó de una forma que te permitía alcanzar medio metro de altura más, pero lo más importante era lo que estaba por encima de el. El agujero mostraba algunos muebles más al borde, una  pequeña tabla a lo que serían unos 3 pisos de altura que conectaba como puente en ese hoyo, luz mucha luz y un pequeño cable sobresaliendo del piso superior al tuyo en el que te encontrabas. Si había alguna forma de salir de allí, sin duda esa era la mejor manera que podías ver. La pregunta era como bajar ese cable

Una exploración más a fondo del sitio donde te encontrabas te reveló algo más que solo raices de plantas. Había otros armarios igual al que habían caido, totalmente vacios, algunos incluso aún abiertos. Habían algunas cajas que si las movias por su peso parecian estar vacías, y al mismo tiempo no estabas segura de cuan endelebles eran. ¿Probarlas? Podría ser una opción. En un rincón de todo aquello había una escoba, una mopa y un cubo de fregar. Quizás entre el palo, la altura ganada por el armario y tu propia estatura, lograbas tocar el cable. Tirarlo a tu posición sería cuestión de tu destreza.

Sea como fuere, probar a agarrar el cable o no, también tenías la posibilidad de hacerte tu propia escalera con los muebles que habían por ahí. Que fuera una buena idea o no te tocaría probarlo a base de fuerza para moverlo todo. Trataste de buscar una puerta o unas escaleras más normales para subir, pero estaban invadidas por las raices, y tampoco tenias nada para poder cortarlas, y aunque las tuvieras, algo en ti te decía que no querías cortarlas.

Puff... desde luego menudo susto me he pegado al verlo caer... pero por suerte no había nada que temer, me había podido apartar a tiempo a una buena distancia. Ahora podía ver con más calma a través del agujero... y aparte de descubrir que estaba bastantes pisos bajo tierra, encontré un buen punto de salida -Debo alcanzar ese cable...- terminé diciéndome a mi misma una vez analicé toda la situación: ese cable sería mi escapatoria de este laboratorio.

Viendo todo lo que había a mi alrededor, creo que la solución era bastante fácil. Primero comprobaría si esas cajas vacías podían soportarme de pie encima de ellas... por supuesto lo haría a ras de suelo... no quiero caerme desde encima del armario. Entonces cogería una de esas cajas haciendo fuerza hasta que me sirviera de escalón para subir al armario metálico que había caído abajo del agujero. Si eran muy endebles, siempre podía apilar unas pocas puertas de los demás armarios que estaban rotos y abiertos como escalón. Una vez encima, con mopa y escoba en las manos, y el cubo colgado como si fuera un bolso, tocaba alcanzar el cable.

Me quité el cinturón de mis pantaloncitos y uni fuerte con el ambas herramientas de limpieza... para tener super-palo largo. Con eso, aunado a mi altura... dudo que no consiga alcanzar ese cable... lo dificil será escalarlo luego creo.

Intenté una y otra vez alcanzar el cable... hasta que conseguí desengancharlo -¡Si! Soy genial...- me salió decirme a mi misma mientras que bajaba el palo y desataba el cinturón para volver a ponérmelo... no era plan de que se me cayeran los pantaloncitos en plena ascensión. Así que ahora llegaba la parte que verdad sería un esfuerzo físico: subir aquel cable que gracias a Dios no tenía corriente. Era mejor no pensarlo mucho, así que estiré un poco, y con el cubo de fregar colgado en el hombro por el asa (nunca se sabe cuando va a venir bien un cubo), me dispuse a subir.

Fue difícil, no estaba muy en forma... pero bueno, había conseguido llegar al final. Y mi premio fue encontrar lo que parecía ser un superordenador gigante -Guau... menudo cacharro...- dije sorprendida. Me acerqué a el, y entonces vi un snack de cereales y una botella de agua -Iugh... cereales integrales...- no pude evitar quejarme... eran cereales de fibra, no de chocolate. Aunque supongo que... este no era momento para ser quisquillosa. Los cogí y los guardé en los bolsillos de mi bata, que eran los más amplios.

Podría irme colándome por uno de esos zurcos para llegar a la puerta abierta... pero... había una fuerza muy superior a mi que me tenía enfocada en el super-ordenador -No puedo irme de aquí sin intentar encenderlo...- pensé, quizás más por infantilismo que por otra cosa. Pero vamos, aparte del impulso, quería usar el ordenador para ver si podía saber más cosas de mi... si he trabajado aquí, tal vez me sepa decir mi identidad, quien era Yuna, y que era C.U.R.A. Así que me acerqué al teclado, y pulsé el botón de encendido... veamos si había suerte.

Al encender el ordenador, este empezó a hacer un poco de esfuerzo, como si fuera un vehiculo a punto de arrancar y poco a poco las pantallas empezaron a escenderse. El pequeño circulo que sobresalía empezó a cubrirlo un pequeño cubo de cristal, y en su interior empezaron unos laseres a dibujar una forma 3D. Pero algo más importante te llamó la atención cuando la pantalla principal lanzó una luz a tu cara - INICIANDO RECONOCIMIENTO FACIAL, POR FAVOR, ABSTENGASE DE REALIZAR MOVIENTOS HASTA QUE TERMINE EL PROCESO - El cual, y por suerte, solo duró unos segundos.

-VERIFICACIÓN CONFIRMADA. ID: Yuna. Area de trabajo mecanica, robotica y diseño aeronautico. BIENVENIDA Yuna - terminó de decir el ordenador antes de que su voz se volviera más pequeña y debil.

-Hola Yuna, encantado de que vuelvas a usar el superordenador central. ¿Cuanto tiempo ha pasado? Oh si, cierto los protocolos: - dijo un pequeño ser pequeño con forma de capsula que salía en forma de una figura trasparente 3D del circulo dentro del cubo de cristal - Bienvenida al centro de investigación privado. El Castillo Laputa, denominado así por el castillo del cuento y gracias a que los esfuerzos humanos nos han traido aquí. Mi nombre es Ion, y soy tu IA personal. ¿En que puedo ayudarte?

Cuando esto empezó a hacer ruidos no podía creérmelo... ¡que el trasto funcionaba! Me asusté un poco cuando lanzaron los láseres a mi cara... pero al parecer era para identificarme. Y volvió a salir ese nombre -Yuna... definitivamente tengo que ser yo... y sin duda tenía un puestazo- me dije a mi misma.

Ahora miraba con cierto asombro al pequeño holograma que me saludaba -Hola...- la saludé de vuelta... sin duda me gustaría saber cuanto tiempo hacia -Eso vas a tener que decírmelo tu....

Después de las formalidades y presentaciones, me preguntó si necesitaba ayuda... y tanto que la necesitaba -Pues verás Ion... me he despertado con amnesia ahí abajo. Así que ahora mismo salvo el nombre... no se mucho más- le comenté al ordenador sin estar segura del todo si podria entender y procesar mis palabras rascandome la nuca -Muestrame los archivos que tengas sobre mi, Yuna. Y si tienes registros o algo... explícame si puedes porque está el lugar en ruinas por favor- le fui diciendo y pidiendo a Ion a ver si eso me ayudaba a entender... -¡Ahhh! Y también busca algo sobre C.U.R.A... perdón por pedirte tantas cosas. Estoy confundida y eres el primero con quien puedo hablar...

La pequeña IA se quedó sorprendido al oir tu petición - ¿Amnesia? - se quedó procesando un par de segudos y miró entonces a las pantallas, las cuales empezaron a encenderse mostrando información principalmente de ti. Ion se puso entonces a hablarte de quien eras, de que trabajabas, todo lo que era publico sobre ti como estudios y trabajos realizados. Lo más sorprendente pasando hasta los detalles más nimios como color de ojos, tallas de ropa o incluso afecciones tanto externas (cicatrices, tatuajes, piercing) como internas (alguna enfermedad), fue que eras jefa de algunos proyectos, algunos de esos eran en el campo de la aeronautica

-Esa es toda la información que hay guardada de ti en la base de datos de este lugar... en cuanto al sitito. No hay datos de por qué esta así, pero si que puedo indicarle que es este lugar.