Partida Rol por web

Las crónicas de Hogwarts: No me olvides

Capítulo 4. El Quidditch y otros deportes de riesgo

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19/08/2022, 12:58
(1S) Alondra Sparks

Tal y como me temía, Salazar Slytherin nos recibió con idéntica crueldad que a Kyle y a mí, ignorando la reverencia que sentíamos antes de entrar por alguien que representaba a nuestra casa y todo cuanto deseábamos conseguir, porque parecía disfrutar más con nuestro dolor y la furia que despertaba en nosotros, humillándonos, que con el respeto que en teoría le debíamos.

Yo me mantuve en un segundo plano, intentando hacer oídos sordos a cuanto me decía, pero observando al mismo tiempo el efecto que causaba en Ivy, la cual pareció enfurecerse con sus palabras. Había insultado a su familia y ella reaccionó contraatacando con rabia, hasta que su cuerpo se quedó como en una especie de trance, lo que interpreté como que también a ella le estaba leyendo la mente y analizando toda su vida como si tuviese todo el derecho a hacerlo.

Sabía que esto ocurriría. Intenté impedirlo... pero Ivy no me hizo caso. Sus palabras eran las de alguien fuerte, más fuerte que yo, tenía que reconocerlo, aunque solo fuese en aquella situación, pero seguro que eran porque le había hecho daño. 

Cuando le dijo todo lo que parecía querer responderle a Salazar, se volvió, cogió mi mano y tiró de mí para salir de allí. Yo estaba sollozando, no sabía si por la tensión y el horror del momento o por el recuerdo de todo lo que había sentido la primera vez que entré en aquel lugar, pero solo cuando estuvimos fuera, logré respirar tranquila e intentar calmarme.

Me dejé caer de rodillas, sobre el suelo, mientras hiperventilaba.

-Te... lo dije... y no me hiciste caso... Te pudo más la curiosidad... y mira lo que ha pasado. Es un ser despreciable, ¡DESPRECIABLE!. No sé si será el verdadero Salazar Slytherin pero lo odio con todas mis fuerzas. No sabe más que decir cosas horribles.

Y al mirar a Ivy entendí que ella también sentía que aquel mago, el supuesto mejor mago de todos los tiempos, nos había traicionado, porque una cosa era creer en la pureza de la sangre mágica y ser ambicioso, y otra muy diferente atentar contra aquellos que seguíamos sus colores y símbolos, que intentábamos emularle y que siempre lo habíamos visto como nuestro referente para todo.

-La directora... no dejará que cambies de casa. Nunca lo permiten -le dije entonces, recordando lo que había dicho antes de salir. Yo también lo había pensado, pero al final decidí que no merecía la pena, que en una casa o en otra, quién podía saber en dónde estaría mejor, si al final lo que importaban eran las notas y estaba sola la mayor parte del tiempo.

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19/08/2022, 13:57
Directora
Sólo para el director

Cuando salisteis de aquel lugar, y os encontrasteis de nuevo en la sala en donde refulgían las puertas de las casas, aún sentíais todas las emociones que había generado Salazar Slytherin. Ignorabais si el resto de fundadores de las demás casas serían igual, aunque algo os decía que no, que el más odioso de todos quizás fuese el vuestro. ¿Por qué? Eso no lo sabíais; quizás no era el auténtico Salazar Slytherin, o a lo mejor reunía solo lo peor de él, pero el caso era que conocerlo no había sido para nada lo que ninguna de las dos esperabais.

Alondra no había conseguido enfrentarse a él y por tanto, de alguna manera, desquitarse, y en cuanto a ti, la rabia te invadía por todas partes, hasta el punto de que no deseabas representar más a Slytherin. 

Bien pensado, Kyle tampoco es como si fuese un representante de la casa que se amoldase a lo más clásico y en cuanto a ti... siendo tu padre un Gryffindor, estaba claro que no tenías tampoco sangre pura "de serpiente".

Una vez fuera, os alejasteis de las puertas, subisteis las escaleras y empujasteis la trampilla, para regresar de nuevo a la Sala de Trofeos, que afortunadamente parecía seguir vacía... ¿o no?

Con el corazón encogido, mirasteis a vuestro alrededor en busca de cualquiera que hubiese podido veros, sin ver a nadie, aunque sí que oísteis una especie de bufido o maullido.

¿Sería el conserje?

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19/08/2022, 14:07
Director

Notas de juego

No actualizo. Creo que puedes seguir ahora mismo tú narrando y yo te sigo ;)

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19/08/2022, 19:51
Directora
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Percy había llegado dos días más tarde, pero tenía ganas de aprender y sobre todo, de demostrarle a todos, a sí mismo el primero, que no solo merecía estar en aquella escuela sino también obtener unas buenas calificaciones. El hecho de tener a un grupo de chicos y chicas que habían creado una especie de grupo de estudio, a pesar de estar en diferentes casas, facilitó muchísimo las cosas, puesto que gracias a ellos disponía ahora de apuntes y todas las tareas que debía hacer para ponerse al día.

Debía practicar los hechizos, por supuesto, y demostrar en cada clase que no era casualidad que estuviese allí, pero por lo pronto, estaba decidido a alcanzar a los demás y para ello, trabajar cuanto fuese necesario.

En Defensa contra las Artes Oscuras, el profesor Persimom había mostrado una gran capacidad para infundirles respeto y sobre todo, la valentía que sin duda necesitarían para enfrentarse con cualquier cosa. Todos decían que era un profesor que sabía lo que se hacía y cuando fue a clase por vez primera se dio cuenta por qué.

En cuanto llegó a la clase, después de haber estado todo el fin de semana trabajando, le mostró sus apuntes al profesor y también efectuó los movimientos que debía realizar para efectuar los hechizos.

-Bien hecho, señor Wildsmith. Se nota que ha trabajado usted mucho, aunque hay todavía algunas cosas en las que tiene que mejorar. No obstante, esto es una carrera de fondo, recuérdelo, y no importa tanto los problemas con los que pueda encontrarse como la manera en la cual desarrolla sus habilidades para enfrentarse a la magia oscura y toda aquella que tiene como objetivo acabar con lo bueno que existe en el mundo. Continúe así, señor Wildsmith.

Las clases de Encantamientos fueron harina de otro costal. La profesora Tauris era desde luego, durísima, tanto en su trato con los alumnos y las alumnas, como en lo que exigía de ellos. Se notaba a la legua que todos la odiaban, al menos Ravenclaw y Gryffindor, porque con Slytherin, como era de su propia casa, la cosa cambiaba. Percy tuvo suerte, porque disponía de los apuntes completados por varias personas y tiempo para copiarlos, así como para practicar unos hechizos que en su momento, teniendo que llevarlos a cabo inmediatamente, serían mucho más complicados.

Pero no acabó de entender los deberes que mandó y cuando se los presentó a la profesora, así se lo confirmó.

-Espero que este no sea el nivel habitual, señor Wildsmith. Me ha satisfecho la manera en la cual ha desarrollado los hechizos y sus anotaciones, pero no así sus conclusiones.

La práctica de su hechizo ocasionó varios problemas y muchas miradas recriminatorias dentro de su misma casa. Aunque no era la primera vez que alguien armaba follón o rompía cosas, el lío que se generó, tanto en el momento como al equivocarse de dormitorios, hizo que a partir de entonces tuviese mucho más cuidado a la hora de escoger el lugar en el cual practicar.

El resultado fue que cuando regresó en la siguiente clase de Encantamientos, había mejorado bastante, aunque la profesora solo emitió una especie de gruñido, seguramente para indicar que no había nada malo que pudiera decir de lo que le estaba presentando, lo cual ya era todo un éxito. 

Con Transformaciones ocurría algo parecido que con Defensa. El profesor, subdirector de Hogwarts, era respetado por todos los alumnos y las alumnas, y por lo que Percy pudo ver en los apuntes, parecía explicar bastante bien. Pero sus hechizos le resultaron especialmente complicados, sobre todo al principio, y así se lo dijo al propio profesor, aunque al final, pudiera demostrarle que era capaz de seguir el ritmo de la clase.

-Está bien, señor Wildsmith. Ha hecho muchas cosas en muy poco tiempo y eso le honra. Demuestra que es usted un trabajador nato. Pero no puede confiarse ni bajar la guardia. Debe continuar esforzándose porque el nivel de esta clase no dejará de incrementarse y podría quedarse atrás. Confío en usted, pero al mismo tiempo, es usted quien debe demostrar esa confianza mediante un trabajo continuo y elaborado.

Sí, efectivamente el profesor Partwulf parecía ser una persona exigente pero justa, que daba a la gente segundas oportunidades, pero por sus palabras, que pocas veces disculpaba la traición o la pérdida de confianza.

Finalmente, Percy se concentró en herbología.  Al ser la profesora Cassowary la jefa de Ravenclaw, tenía claro que no deseaba fallar en esta materia. Una vez tuvo todos los apuntes cogidos, se acercó al invernadero para ver en persona las plantas de las cuales hablaban y con las cuales habían trabajado sus compañeros. De hecho, nada más llegar, procuró sonar educado y respetuoso con las plantas, pues sabía bien que si sentían su presencia, lo mínimo era que no lo viesen como algo desagradable. Había muchas cosas de las que no se había enterado bien, pero Percy sí que sabía tratar a las plantas, y el hecho de estar a gusto en aquel lugar, ayudaba mucho. Todo aquello transmitía una sensación de paz interior imposible de adquirir en otros lugares del castillo. 

Cuando regresó, estuvo a punto de encontrarse con la guardiana de los terrenos de Hogwarts, esa mujer tan extraña, que caminaba como si bailase, pero hasta en eso tuvo suerte, pues logró atravesar los terrenos y entrar sin ser visto, justo a tiempo para que las luces se apagaran.

A pesar de haber pasado mucho tiempo solo para lograr recuperar todas las tareas pendientes, poco a poco Percy había ido sintiéndose uno más de todos los alumnos y las alumnas de aquel lugar, y cuando llegase la siguiente clase, ya nadie podría decir que acababa de llegar.

Había demostrado que podía con lo que fuera.

Notas de juego

Respuesta a tus recuperaciones ;)

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21/08/2022, 12:21
Directora

Á la mañana siguiente, después de las pruebas para la selección de quidditch, todos los alumnos y las alumnas estaban hablando sobre lo difícil que había resultado todo y también respecto a los equipos. Aunque cada uno "barría" para casa, estaba claro que la calidad de todos los equipos no era la misma.

Slytherin, que había conseguido llevarse la copa los últimos años, disponía ahora de un grupo de alumnos experimentados, mezclados con otros que necesitaban entrenar y mejorar para alcanzar el nivel que se esperaba de ellos. La presión comenzaba a notarse respecto a los comentarios que todos hacían sobre Alondra, Kyle, Ivy y Wesley, los jóvenes de primer curso que habían entrado, y muchos estaban enfadados por la salida del experimentado Willy Aves.

En Gryffindor, en cambio, se veían con esperanza las nuevas incorporaciones, aunque todavía quedaba mucho trabajo que hacer para que el nuevo cazador, Colton, y el nuevo bateador, Lavender, estuviesen a un buen nivel.

Ravenclaw también había acabado por sustituir a uno de sus jugadores del curso anterior y disponía de cuatro incorporaciones que daban bastante esperanza al equipo, pues el guardián y la buscadora habían mostrado un gran nivel.

Mientras desayunabais y hablabais de ello, el techo del Gran Salón se llenó de lechuzas que traían el correo, y que no tardaron en depositar cartas y otros objetos encima de la mesa, y por supuesto, dentro de tazas y platos, llenando a más de uno y de dos con restos de lo que estaba comiendo o bebiendo.

En la mesa de Slytherin, Ivy se encontró con el siguiente ejemplar de "Corazón de Bruja", mientras que Percy, en Ravenclaw, lo hizo con el número que correspondía a "El Profeta". 

Había cartas para casi todos, aunque para algunos todavía alguna que otra cosa más, como por ejemplo en el caso de Luna, que además de tener correspondencia de sus madres, se encontró con un gran paquete y una tarjeta que decía lo siguiente:

Estimada Señorita Ferlet.

Me he permitido la libertad de enviarle esta muñeca, que se parece mucho a la que estuvo contemplando en mi tienda, cuando aterrizó por error en su chimenea. Por supuesto, no se trata de la misma muñeca, sino de su hermana gemela, y no debe tener miedo de ella porque no es igual. Simplemente pensé que le gustaría disponer de una compañera que le ayudase a conciliar el sueño.

 

Atentamente, George Essex

 

Al abrir el paquete, Luna se encontró con una muñeca que efectivamente, era idéntica a la que ella se había encontrado en la tienda.

Todos vosotros os encontrasteis cartas procedentes de vuestras familias, aunque en el caso de las familias muggles, no exento de problemas a la hora de poder entregarlas. Las lechuzas siempre tenían que darse prisa para recoger las cartas antes de que fuesen introducidas en los buzones ordinarios.

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21/08/2022, 13:41
Kyle Goldfinch

Me levanté temprano con sensación de resaca. Fui al baño, me aseé, y me peiné hasta quedar impecable, mirándome en el reflejo con una sensación extraña en el cuerpo.

Menuda noche. Entre mis preocupaciones, que no paraba de leer y leer, y que no podía creerme que al final me había visto obligado a aceptar el puesto de bateador en el equipo, mi mente era un torbellino. No podía ceder, si demostraba debilidad todo se vendría abajo rápidamente. Por suerte el otro bateador era el hermano de Ivy, compensaría mis fallas? lograría llegar a hacerlo bien?...Más suerte aún había con el hecho de que, aunque todo el mundo hablase todavía de las pruebas y el juego, de mi casa se centraban todos en hablar sobre Alondra, Ivy y Wesley. Habían demostrado grandes habilidades y yo había quedado totalmente en segundo plano, lo cual era un alivio. Además estaba el drama de que no cogieron al tal Willy Aves, el anterior guardián que fue sustituido por Wesley, nuestro compañero de primero. *Tendrá que hacerlo realmente bien para que no les comparen.- había un grupito enfadado al respecto de la decisión de Donovan, pero tenían que tragárselo con patatas.

 

Las demás casas parecían más animadas al respecto. Siempre la diferencia de ambientes. Los Slytherin no estaban contentos ni con su propia casa, para variar. *Tenía que renovarse casi todo el equipo, que se esperaban?

Saludé a los demás antes de ir a mi mesa con Ivy (?). Esa mañana mi cerebro tenía una necesidad increíble de azúcar. Apenas pude cenar por los nervios y el cansancio de ayer me hizo sentir bastante hambre esa mañana. Cogí cruasanes rellenos de mermelada y algún que otro bocadillito de pan tierno con jamón y queso. Desayuné con un gusto increíble, lo cual ayudaba mucho a despejar la cabeza. Estómago contento, mente contenta. 

O eso decía siempre Rob. Hablando de lo cual, las lechuzas llegaron y lanzaron y depositaron el correo de todos por entre las mesas. *Jamás entenderé semejante caos! - Pero era divertido ver como algunos accidentalmente caían sobre otros. Yo había aprendido que siempre a esa hora era mejor apartarse un poco de cualquier cosa que pudiera salpicar con la caída de un periódico. A Ivy le llegó la revista Corazón de Bruja, de la que tanto hablaban con las chicas. - ¿Cómo haces para pedirla? una subscripción? - pregunté curiosamente mientras me acercaba para echarle un vistazo si la abría. ¿Qué tipo de revista sería? 

En mi caso me llegó una carta, con algo de retraso, al parecer hacía algunos días que la envió -Rob! - exclamé con alegría y la abrí, comenzando a leerla con una sonrisa enorme. Habíamos intercambiado un par de cartas desde que llegué a Hogwarts, no paraba de de preguntarme cosas sobre cómo me estaba yendo todo, la magia y todo lo que hacía en casa. Ahora estaban de viaje al parecer, de negocios. Se aburría. Me contaba anécdotas absurdas y cosas que sabía que me harían reír. - Tengo que enviarle una carta y contarle sobre el equipo de Quidditch. Cuando se entere no se lo va a creer. - no, definitivamente no se lo creería. La de veces que intentó que chutase una pelota y animarme a jugar a algún deporte, siempre quedando en el fracaso y en el olvido de los juguetes menos usados de mi armario.

Luego probablemente iría a la lechucería, o esa tarde después de las clases. Me giré para mirar a los demás y algo de alboroto entorno a Luna. Le había llegado una muñeca. - ¿Cuantas lechuzas habrán echo falta para llevar algo tan grande? - dije antes de poner cara de "OH DIOS QUE MUÑECA MÁS HORRENDA", sin querer opinar me volví a girar a seguir comiendo. Estos magos tenían unos gustos de lo más extraños. Será mágica? Seguro que sí, tiene que ser mágica. ¿Los juguetes de los muggles serán todos... mágicos? 

Notas de juego

respecto a los comentarios que todos hacían sobre Alondra, Ivy y Wesley, los jóvenes de primer curso que habían entrado

Supongo que hablan sólo sobre ellos tres así que he posteado en consecuencia xD a Kyle ya le va bien.

Edit: Sorryyyyy, se me había pasado ponerte a ti también, que no te libras XD También se me había olvidado poner la foto, que al final con las prisas no lo había hecho.

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22/08/2022, 14:26
Michael Cramson

Michael despertó tras haber dormido bastante poco. Después de todo el esfuerzo y la adrenalina liberada durante las pruebas de quidditch, Michael pensó que caería en la cama como un leño aquella noche. Nada más lejos de la realidad. ¡Le habían escogido para el equipo de quidditch! Cuando uno de sus compañeros de Ravenclaw había ido corriendo a avisarles de que Winona quería hablar con Percy y con él, se había sentido intrigado. Entonces, nada más llegar a donde estaba el resto de sus compañeros de casa, la capitana les había informado a ambos de que a partir de entonces serían cazadores del equipo. Michael había pestañeado varias veces, atónito. ¿Él, cazador? ¡Si hasta hacía unos días ni siquiera sabía volar en escoba!

Todavía no podía creérselo del todo. Había pasado el resto de la tarde y de la noche preguntándose si había sido una buena idea presentarse a las pruebas. Aunque al terminarlas le había dado rabia aquella sensación de no estar a la altura, ahora que sorprendentemente era miembro del equipo temía no hacerlo bien. Pero ya no había remedio, no quedaba otra que dar lo mejor de sí mismo. Y además, ahora podría entrenar tanto como quisiera, y Keira parecía muy contenta de que hubiera conseguido una plaza (como sus costillas aún le recordaban). Además, varios de sus amigos habían sido escogidos también para los equipos de sus casas, y Michael tenía muchas ganas de felicitarlos a todos. Así que se levantó para asearse, vestirse y bajar al Gran Comedor.

Mientras atravesaba la Sala Común, se dio cuenta de que muchos alumnos de Ravenclaw hablaban de las nuevas incorporaciones al equipo. Muchos estaban especialmente expectantes con James y Elektra, lo que no era de extrañar. Sus actuaciones habían sido sorprendentes, sobre todo la de Leveret. Michael suspiró aliviado al comprobar que nadie hablaba de él. No estaba seguro de que ese tipo de presión le hubiera venido bien...

Al llegar al Comedor y entrar en la enorme sala, buscó con la mirada a sus amigos, mientras esquivaba un par de lechuzas que habían entregado sus cartas y volaban hacia las ventanas. Era algo a lo que ya se había acostumbrado después de aquella primera semana en el colegio. Fue primero a la mesa de Slytherin, donde Kyle ya se había servido un desayuno generoso.

¡Buenos días! —dijo, sonriendo y saludando con la mano—. ¿Qué tal habéis dormido? Yo he dado más vueltas que una peonza, aún no puedo creer que Winona me escogiera para el equipo... ¡Felicidades a vosotros dos, también! Me alegro un montón de que Donovan decidiera seleccionaros.

Se giró hacia Ivy para decirle algo a la chica pelirroja, pero cuando abrió la boca no salió de ella ni media palabra. Michael se puso rojo al instante. En realidad, tenía muchas cosas que decirle a Jade. Quería darle las gracias por haberle ayudado con el entrenamiento que habían compartido, ya que le debía su plaza en el equipo de quidditch a esa sesión. También quería decirle que tenía muchas ganas de volver a coincidir sobre una escoba, y desearle suerte con su puesto de buscadora. Pero todo aquello se convirtió en una bola que se atascó en su garganta.

Yo... esto... gracias, Ivy... —fue lo único que logró articular al fin. Se sintió tan torpe que prefirió no decir nada más, esperando que la niña entendiera. Y como quería felicitar a Luna y Colton también,  fue hasta la mesa donde desayunaban los alumnos de Gryffindor.

¡Hola! —saludó a Úrsula, Luna y Colton—. ¡Felicidades, guardiana y cazador de Gryffindor! Anda, ¿y esa muñeca...?

El regalo que había recibido Luna tenía un aspecto algo inquietante, pero a Michael le resultó muy curioso toparse con un objeto así en Hogwarts y se acercó para verla mejor... justo en el momento en que una lechuza dejaba caer una carta sobre su cabeza. Michael dio un respingo y la cogió. ¡Era una carta de sus padres! Sonrió, deseoso de leerla, pero al coger el sobre se había acordado de Percy. Aquello le quitó la sonrisa de golpe. Miró alrededor, buscando con la vista a su compañero de Ravenclaw. Como aún no lo vio, se volvió hacia sus amigos y amigas de las otras casas. Con las emociones del día anterior, se le había olvidado por completo que tenía una conversación pendiente con ellos.

Tengo que hablar con vosotros —dijo, muy serio de repente y bajando la voz—. Es importante. Es sobre... ya sabéis qué...

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22/08/2022, 14:28
Michael Cramson

Cuando el resto se acercó a él, Michael volvió a mirar por encima del hombro para comprobar que nadie les espiase. Entonces empezó a hablar.

Es sobre Percy —dijo aún en voz queda—. Nada más llegar, hablamos sobre Shadefian y sus ataques a alumnos. Parecía saber cosas sobre él porque...

Michael se interrumpió. No le parecía bien revelar todo lo que Percy le había contado en la Sala Común. No sin que hubiera una contrapartida por parte del grupo.

El caso es que le conté algunas cosas —siguió—. Sobre las víctimas de Slytherin y Hufflepuff, y sobre las fotografías que encontramos. La del tren que encontró Úrsula, y la de la Sala de Trofeos que descubrió Alondra. Pero no le conté cómo nos escapamos de Tauris. No quise revelarle que hablamos con los Fundadores de Hogwarts sin consultaros antes a vosotros...

Miró un instante a los Gryffindor y Slytherin que formaban el corrillo.

Yo creo que deberíamos contárselo todo —dijo—. Percy es muy listo, ya lo veréis. Y tiene buenas razones para interesarse por el tema de Shadefian. Confiad en mí.

Notas de juego

Desmarco a Percy para darle un toque de realismo a la "conspiración".

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22/08/2022, 17:29
Colton Derrick

Colton entró bostezando ruidosamente en el comedor. Se había levantado dos horas antes de lo normal para comenzar a entrenar. Se había trazado un plan especial. Allí no había la sala donde un año de entrenamiento era un día, así que decidió que se iba a levantar todos los días dos horas antes para volar y practicar para ser cazador, así de motivado estaba. A las chicas les gustaban los deportistas, así que seguro que cuando fuera un cazador Angeline le pediría volar, así, en plan Ivy, e igual hasta le daba un beso, y así se apagarían las risas de..... la innombrable calva.

Habían motivos adicionales para que tuviera sueño, y es que, por la noche había escrito una carta a su madre para explicarle que era el quidditch, y para que le diera permiso. Había sido una carta difícil, porque no quería mentirle, pero tampoco le expuso los riesgos y los problemas que tenía volando, así que, digamos, que ejercitó su escritura creativa. Le explico que volaba como los ángeles, que era de los mejores de la clase, y que jugaban forrados de papel de burbujas, el suelo estaba forrado de colchonetas y que tenían seguro dental por si se le estropeaba algún diente. No había riesgo. Era como jugar a fútbol, más o menos, y las escobas no se levantaban más allá de tres metros, porque sino te pitaban "altas". Vale, había mentido un poquito, pero es que si le dijera la verdad no le habría dejado de jugar y  el equipo le necesitaba, no porque hubiera habido una epidemia de gripe, sino porque, milagrosamente, todos eran peor que él, y mira que eso era difícil.

Se sentó en el comedor al lado de Nolan y le dijo

- Venga tío, anímate, si lo más seguro es que necesiten hacer fichajes de invierno. Tuviste un mal día, pero estoy seguro que pronto estarás en el equipo... Si quieres puedes ayudarme a entrenar, y no te preocupes por lo de tu hermana, estoy seguro que al final tú eres tan bueno como ella, o mejor.

Y entonces miró a Luna y le preguntó

- ¿Como estás esta mañana Luna? - Y es que desde que había dicho que se ponía enferma la miraba más de la cuenta, intentando adivinar que le pasaba. Por fuera parecía estar bien, así que igual.... igual le pasaba como en el anuncio ese de la tele y sufría en silencio.... No, no parecía, pero algo le pasaba, pero no la iba a presionar, porque los buenos amigos esperan a que sus amigos se lo cuenten, al menos tres días, después ya si que podía insistir. A Luna le trajeron un pedazo de caja, y a él, tortícolis le trajo una carta, al recibirla vio que era de su madre. Glups. Había respondido inmediatamente, como si aquello fuera un email. Ay... Miró a Úrsula

- Tengo miedo de abrirla, le pedí a mi madre permiso para lo del quidditch, y creo que me va a decir que no...

Pero era un Gryffindor, así que la abrió con valentía. Inspiró y empezó a leer manteniendo la respiración, era una carta breve y venía con una foto, una foto de ella con una bufanda roja y fingiendo estar animando...al manchester United? Nooooo, su madre se había vuelto del united, nooooooo, tenía que haber una explicación.

Querido Colt,

Hijo, te conozco como si te hubiera parido. ¿Tan peligroso es?. Entiendo que si en el colegio te dejan hacerlo debe ser lo suficientemente seguro. Ya te has partido los dos brazos varias veces, aprendiste a montar en bicicleta a los coscorrones, y supongo que estarás haciendo lo mismo para volar. Eres un niño tenaz, nunca te rindes, y eso hace que me preocupe por ti, pero no por ello te quiero menos. Me he puesto una bufanda roja para ser tu primera fan, así que cuando seas el Lukaku de tu equipo, y seas famoso, puedas decir que yo fui la primera en creer en ti.

Tienes mi permiso, pero mejor no se lo contamos a papá de momento.

Tu fan número 1

Mamá.

Le enseñó la foto a Úrsula con una gran sonrisa y le dijo

- Mi mamá es la mejor. ¿Te ha escrito la tuya?, me pareció que era la caña.... ¿Te ha escrito alguien?

Y es que sabía que Úrsula era huérfana, pero que estaba muy unida con su cuidadora, y sus hermanas...y quería saber si estaba bien, porque no quería que se sintiera sola. Bostezó con una sonrisa y se pasó la mano por el pelo, más revuelto de lo normal, y es que esa mañana no había acertado a encontrar el peine.  Llegó Michael y le saludó con la mano.

- Buenos días Michael!, no hombre, felicidades a ti, te vi volar y.... bueno, los empollones no deberían volar así, vaya crack. Lo vas a hacer muy bien, seguro... - miró en dirección a a muñeca y Colton sonrió forzado - ¿A que es original? Le preguntaba a Luna quien se la había enviado....

Le iba a preguntar a Michael si él sabía si habían maldiciones que pudieran enviarse con muñecas, porque si alguien lo sabía era él, pero se les acercó para hablar de.... ya sabéis que, y lo demás pasó a segundo plano.

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22/08/2022, 17:41
Colton Derrick

No se esperaba nada que quien supiera de Shadefian fuera precisamente Percy. Enarcó una ceja, incrédulo, igual Percy sabía cosas, así, en plan teórico porque los Raven eran así, sabían todo de todo, pero muchas veces se quedaban en lo teórico. Colton se impacientó y dijo

- Pero a ver, saber cosas, así en plan, saber cosas de las importantes, o saber cosas así en plan biblioteca, sin aplicaciones prácticas. - Ahogó un ohhh cuando admitió haberle contado cosas. Lo miró a los ojos, no sabía si enfadado, pero expectante, sobre todo expectante. Entonces lo entendió, quería incorporarlo al grupo, quería que fuera otro mosqueperro más. Soltó el aire, cuanta más gente lo supiera peor, pero si lo sabía Alondra, ya con eso estaban jodidos si ella quería, así que sonrió. Confiaba en Michael. Era juicioso e inteligente, así que si creía que podía ser útil seguro que lo era. Asintió

- Claro que podemos contárselo, cuantas más cabezas pensantes mejor, y no hay nada mejor para pensar que un ravenclaw. Si tú confías en él, a mi me basta.

 

Notas de juego

Conspiremos ^^

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23/08/2022, 07:15
Ivy Jade Connor
Sólo para el director

No se arrepentía de estar allí, a pesar de las palabras de Salazar Slytherin, la joven pelirroja tenía claro que, si aquel era el verdadero fundador de su casa, la que no debería estar en su casa era precisamente ella. Y ahora tenía un problema. ¿Cómo plantear su marcha de manera inteligente? ¿Se habría equivocado el Sombrero Seleccionador al mandarla a Slytherin? En un primer momento pensó en ir a hablar con la directora, pero tenía a alguien que le quería mucho más cerca y que podía asesorarle. Donovan. ¿No sería mejor contarle a él lo que había pasado?

Alondra lloraba demostrando el malestar de lo vivido. Había vuelto a ese pasadizo para enfrentarse a Salazar, pero no podía, tenía miedo y no era para menos. Sin embargo, a Ivy le despertaba más animadversión que terror. Su familia era intocable para ella y Slytherin tan solo un referente mágico que había conocido por medio de historias de la abuela.

- La curiosidad te lleva al saber - Respondió la pelirroja a su compañera de casa - Si esta es la realidad de Salazar Slytherin, no quiero ser como él. Tú lo has dicho, es una criatura despreciable que no me representa con su forma de pensar - Suspiró frustrada - Ya veremos lo que hago, pero no estoy dispuesta a sentarme y no luchar. La casa Slytherin no tiene nada para mí, ni ideología ni amigos. La mayor parte de las personas que quiero están en Gryffindor. Al menos tengo que intentarlo, mira el lado bueno, si me dejan irme ya no tendrás que soportarme... - Y aunque ambas salían de la trampilla por donde habían venido, sabían que lo vivido no les hacía amigas.

Salieron de nuevo a la sala de trofeos. Ivy cerraría la trampilla y pondría bien la alfombra antes de encaminarse hacia su sala común. El día había sido largo y tenía mucho en qué pensar. Así que, silenciosa, recorrió el resto de la distancia que quedaba hasta su sala común. Jamás una mazmorra había podido resultar más fría.

Notas de juego

Post de cierre de lo anterior

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23/08/2022, 12:31
Luna Ferlet

Todavía me duraban las emociones del día anterior, con el quidditch y el partido que echamos entre todos. Aquello había sido como una inyección de adrenalina que todavía corría por mi sangre y no solo me resultó difícil dormir, sino también concentrarme.

Aquella mañana me sentía algo cansada por la falta de sueño, pero al mismo tiempo, estaba deseando reunirme con los demás, empezar el día y sobre todo, seguir hablando de quidditch. La verdad es que no contaba con estar en el equipo y ahora que así era, y que era Guardiana del equipo de Gryffindor… sentía como si nadie pudiese detenerme.

Y por lo que podía ver y escuchar, a todos nos sucedía algo parecido, porque tanto en nuestra mesa como en las demás, parecía que ese era el único tema. No quería ni imaginarme cómo estaría el ambiente cuando llegase el día del primer partido.

¡¡Qué emocionante!! ¡¡Y qué nervios!!

Colton se había sentado cerca de mí y me saludó con cara de sueño y mirada de curiosidad.

-Pues… bien, gracias. No he dormido mucho pensando en el quidditch; estaba muy nerviosa. Pero aparte de eso, me siento bien. ¿Por qué me preguntas? –le respondí.

Mientras tanto, y a a pesar de todo, y de tener el estómago algo cerrado, me había decidido a tomar un chocolate y una magdalena, y ya los tenía en la mano cuando de pronto, montones de lechuzas invadieron el Gran Salon, volando por el techo y lanzándose hacia las mesas, depositando cartas y más cartas, y también otras cosas.

La mía no debía estar incluída entre todas porque no la había mandado con nada, por lo que lo último que esperaba era que me llegase algo… pero así fue. Una lechuza depositó una carta delante de mí pero otra dejó caer un enorme paquete sobre un montón de platos que lanzaron la comida por los aires como si fuesen trampolines.

Eso me obligó a cubrirme debajo de la mesa para evitar que me cayese encima y solo cuando la “lluvia de comida” hubo parado, salí de nuevo para ver de qué se trataba.

Había una carta de mis madres, que abrí rápidamente y sin pensármelo dos veces.

 

Querida Luna.

Hemos mantenido contacto con la directora así que estamos al corriente de todo cuanto ha sucedido y también de que te encuentras bien. Por lo que nos ha dicho, también parece que estás a gusto en tu nueva casa, que nos hace muchísima ilusión que se la misma que la nuestra. ¿Has hecho ya buenos amigos? ¿Y tu amiga Jade, sigues hablando con ella? Bueno, esperamos que así sea y que te encuentres estupendamente.

Nosotras te echamos mucho de menos y estamos pendientes de ti en todo momento. Sabemos que dentro de dos semanas llegará el momento y queremos decirte que tienes que estar tranquila y contar con el jefe de tu casa y la directora. No te preocupes por nada. Sin embargo, si necesitas hablar con nosotras, ya sabes qu epuedes hacerlo cuando quieras. Díselo a la profesora Crowland que ella sabrá cómo hacerlo.

Estamos impacientes porque nos cuentes todo lo que has hecho en las clases, cómo estás y también si te ha ido bien o no, así que mándanos tu lechuza, por favor, sin ahorrar detalles.

Te dejamos ahora, que no queremos que pierdas tiempo por nosotras. Recuerda que te queremos mucho.

 

Tus madres que te quieren, Eloise y Janice.

 

PD. Eloise está llorando mientras termino de escribir la carta, así que ya te imaginarás cuánto queremos saber de ti. ¡No tardes mucho, cariño!

 

No pude evitar llorar un poco al leer la carta. Yo también las echaba de menos y a pesar de que me encontraba bien en Hogwarts, y rodeada de amigos y todo eso, al leer la carta sentí que me faltaba algo. Aquella tarde les escribiría una carta y se las enviaría sin perder tiempo, contándole con todo detalle cuanto me había sucedido allí.

Seguro que se ponen muy contentas al recibir mi carta, pensé.

 

Me limpié las lágrimas y entonces pasé a mirar el paquete, que tenía una carta en el envoltorio. La abrí y comencé a leerla. Era del abuelo de Ivy, el dueño de aquella tienda en la que había aterrizado sin querer. Leí sus palabras con atención y después abrí el paquete, viendo aquella muñeca que me había enviado. Me decía que no era la misma, cosa que agradecí porque según me explicó, la otra era peligrosa. Pero no pude evitar preguntarme si aquella tendría algo mágico que yo no sabía.

La muñeca era un poco rara, y daba hasta repelús, pero había algo en ella que hacía que confiase en tenerla a mi lado y que me hacía sentirme bien, segura de que nada malo me iba a ocurrir.

Tendré que mandarle también a él una carta de agradecimiento, y de paso puedo preguntarle si es mágica de alguna manera, pensé.

Empezaban a acumulárseme las tareas.

A mi lado, mientras tanto, Colton abrió una carta que llegó para él. Era de su madre y por lo visto, le había pedido permiso para jugar al quidditch.

-¿Cómo no te va a dar permiso para eso? Anda, ábrela, que seguro que todo va bien –le dije, pendiente de lo que contuviese la carta, y por lo que llegué a leer, parecía que todo marchaba bien. Sonriente, me volví hacia mi magdalena -. ¿Lo ves? Te lo dije.

En ese momento, llegó Michael para saludarnos y felicitarnos por lo del quidditch.

-Gracias. La verdad es que yo tampoco me lo esperaba. ¡¡¡Y al final estamos todos en el equipo!!! Bueno, todos los que nos presentamos, pero necesitaremos a Úrsula para animarnos. Hay algunos que juegan muy bien.

Después me preguntaron ambos por la muñeca.

--Pues… me la ha enviado el abuelo de Ivy. Veréis, cuando viajé al callejón Diagon, aterricé en la chimenea de una tienda del callejón Knockturn, que resultó ser del abuelo de Ivy. Había una muñeca como esta en el interior y me quedé mirándola sin darme cuenta. Por lo visto es una muñeca peligrosa; él señor Essex me lo explicó. Y hoy me ha llegado esto, que es algo así como su hermana, pero según me ha dicho, no es peligrosa ni nada. Dice ´únicamente que me ayudará a dormir. La verdad es que. es muy rara, ¿verdad? –les dije, contemplándola algo extrañada, pero de nuevo sintiendo esa sensación de seguridad que me invadía al tenerla cerca.

Y después de explicárselo, Michael se acercó a nosotros y nos dijo en voz baja que quería hablarnos a solas sobre nuestras pesquisas. Miré a Colton y a Úrsula, que tenía más cerca, y asentí.

-Vale, vayamos allí, que no hay nadie cerca –le dije a Michael, haciéndoles una señal a Kyle y a Ivy, para que se acercasen a nosotros.

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23/08/2022, 12:53
Luna Ferlet

Cuando por fin estuvimos todos, Michael empezó a hablar. Por lo visto, Percy le había preguntado sobre Shadefian y le había contado algunas de las cosas que sabíamos.

-Bueno, tampoco es como si fuese un gran secreto. Lo que nosotros averiguamos podía haberlo descubierto cualquiera que hubiese tenido un poco de interés. Yo no veo mal que se lo comentases. En cuanto a los fundadores… yo todavía no he visto al de Gryffindor, y no creo que haya nada de malo en que lo sepa –le dije.

Michael sugirió que se lo contásemos todo y después de escuchar también a Colton, estuve totalmente de acuerdo con ambos.

-Por mí de acuerdo. Cuantos más seamos, como dice Colt, mejor. Además, si somos más quizás podamos descubrir quién es y decírselo así a los profesores para que acaben con él. Parece un poco increíble pero a lo mejor lo que estamos haciendo es algo que a nadie se le había ocurrido antes,y el tiempo corre para todos. ¡Quién sabe quién podría ser la próxima víctima?

Y lo más importante de todo; si caía uno de nosotros… ¿qué haríamos los demás?

-Creo que deberíamos reunirnos todos para poner ideas en común. Si no queréis hacerlo en la Sala Común, podemos ir a la Sala de los Menesteres, después de las clases. ¿Qué os parece? –sugerí a continuación.

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23/08/2022, 13:18
Ivy Jade Connor

Ivy había llegado hasta el Gran Comedor con un asunto que le quebraba en la cabeza; buscar la posibilidad de cambiar de casa. La joven se daba cuenta de lo liada que estaba, por un lado, no quería llevar más el emblema de la serpiente en el pecho y, por otro, sentía la presión popular. Ahora era miembro del equipo de Quidditch y estaba segura de que si renunciaba a todo, Donovan sería quien pagase las consecuencias. Y eso sin contar con la negativa mirada de aquellos compañeros tradicionales a quienes no les gustaba la renovación de casi toda la plantilla

No puedo hacerle esto a mi hermano, pero el Sombrero Seleccionador se ha equivocado conmigo. Yo no soy como Salazar. No lo soy...

Connor estaba sirviéndose una tortita al lado de Kyle, cuando las lechuzas entraron en tropel para traer la correspondencia. Como siempre, se generó expectación; así como un caos de objetos, cartas y plumas que caían sobre la cubertería. A Ivy le cayó un excremento en su copa de zumo. No era su día de suerte, al menos parcialmente.

- Maldita sea... - Afortunada era de que al menos se había dado cuenta - ¿Es qué todo me pasa a mí?... - Se le notaba de mal humor a pesar del éxito en la selección de Quidditch. Tanto como para no fijarse en las toneladas de alimento que su compañero de casa, Goldfinch, ingería.

El enfado le dudaría poco, pues una lechuza parda depositó delante de ella el ejemplar de la revista "Corazón de Bruja", haciendo que en su rostro se ampliara notablemente una sonrisa. Kyle pareció interesado en saber sobre ella.

- Sí, va con subscripción. Escribí una carta con destino a las oficinas de la revista, y pasé la factura a casa de mis padres - Sonrió divertida, inicialmente iba a pagarla ella, pero intentó jugarse una reprimenda pero ahorrarse unas monedas - Si el mes que viene no me llega, tendré que abonarlo por adelantado y vía lechuza - Explicó a su amigo, pues él, al provenir de familia muggle, no podía saber cómo funcionaba 

Kyle se aproximó a cotillear la revista, e Ivy la movió un poco para facilitarle la lectura, compartiendo con él su tesoro - Oh mira, consejos para tener un pelo perfecto, un cutis sin granos y también vienen ingredientes para hacer filtros de amor más duraderos... - Miró el artículo por encima - Vaya, viene una receta básica, me pregunto si en mi kit de pociones tengo todos los ingredientes o... - recordó la sala de los menesteres. Allí tenía todo lo que podía desear, así que posiblemente en su tiempo libre se dedicase a hacer "brujerías" - Me encanta esta revista. Mira esto, ropa para un mago con estilo... Oins... Y cómo hacer amuletos de la eterna amistad. Tengo que fabricar un par... - La gracia de Corazón de Bruja es que no sólo era una revista informativa, había trucos, pociones y hechizos que llevados a la práctica prometían mejoras en quien se molestase en probar.

Goldfinch perdió interés en ella cuando recibió su propia correspondencia. Rob le había escrito, provocando en el joven una genuina alegría que Jade compartió con él - Sí que tienes que contarle lo del equipo de Quidditch, y también comentarle que vas bien en clase. Seguro que se alegra mucho de saber que las cosas te van bien - Permaneció un momento callada - ¿Qué te cuenta? Seguro que te extraña... - Intentaba conocer un poco más a Kyle, pues era alguien extremadamente reservado y con tendencia a ocultar sus pensamientos.

No le pasó desapercibida a Ivy la fea muñeca que le habían traído a Luna. El caso es que le recordaba a una que tenía su abuelo en la tienda, pero no tenía sentido que George Essex le regalase un presente a Ferlet, o al menos eso pensaba la pequeña Slytherin.

Espero que pueda dormir por las noches con esa cosa al lado...

Sus ojos se posaron entonces en Colton, el cual estaba cerca de Nolan. A su mellizo se le veía bastante desilusionado e Ivy comenzó a preocuparse por él. No debía descuidarle, al fin y al cabo le había prometido a sus padres que le cuidaría. Suspiró despacio, temiendo que no haber sido cogido por el equipo de su casa, pudiera ser una forma de enfrentarles. Apenas le hablaba desde que estaban en Hogwarts.

La llegada de Michael provocó en Ivy una amplia sonrisa y, más cuando se acercó a su mesa a saludar y felicitarles por el éxito de haber sido seleccionados.

- Muchas felicidades por tu incorporación, Michael. Estoy segura de que lo harás genial en el campo el día que se celebren partidos - Se sentía muy orgullosa de él. Tenía un sueño y, tras superar sus miedos, se había esforzado en conseguirlo. Para Jade no había mayor logro que ese.

Cramson parecía estar a punto de responderle algo, pero no salían las palabras de su interior, pero eso sí, un rubor marcaba sus mejillas.

Supongo que está agobiado por el calor del Gran Comedor...

Y fue entonces cuando el muchacho le dio las gracias. Ivy hizo un gesto como para quitar importancia al hecho de haberle ayudado, pues en el fondo, haber coincidido con él había sido un placer. Se lo había pasado en grande a su lado, y estaba deseando que llegase ese día para que le invitara a cervezas de mantequilla.

Jade observó entonces que ella había recibido una carta de su abuela. No la abrió inicialmente, puesto que Michael aún tenía algo privado que decirles, la mirada azul de la pelirroja se posó momentáneamente en Percy, mientras asentía despacio.

Una vez que la conversación con Michael y los Gryffindor se completara, Ivy abrió la carta de su abuela, la cual contenía un suave olor a especias extrañas, posiblemente ingredientes mágicos de su tienda.

Apreciada nieta,

me siento muy orgullosa de ti por haber sido seleccionada por la Casa Slytherin. No esperaba menos, ya sabes que, durante siglos, nuestra familia por vía materna nunca se ha desviado del camino de la sierpe, y que incluso en los círculos druídicos del pasado, las brujas de nuestra estirpe ya veneraban el tótem de la serpiente. No decepcionas, al menos de inicio.

Eso sí, ha llegado a mis oídos que tienes amigos muy peculiares, y que te relacionas con gente de otras casas. Tengo la sensación de que comienzas a perderte porque nadie te sabe guiar adecuadamente. Pero para eso ya estoy yo, tu querida abuela.

En Hogwarts os separan porque no todos sois iguales. Tú estás por encima de los alumnos que no sean Slytherin. Es un hecho. Y es más, no me equivoco si además de ello aseguro que estás por encima del resto de los de tu casa. Y si no es así, deberías poder remediarlo cuanto antes. Por el honor de las brujas de Cork.

Te reitero que estudies mucho en pociones, encantamientos y transformaciones. El resto de las asignaturas muy poco tienen para aportarte. Y no pierdas el tiempo en Quidditch, ni juegos absurdos que no te dan aprendizaje de tipo alguno. Eso es para descerebrados. Recuerda que una bruja elegante y bien educada no usa escoba para volar, simplemente se aparece. Ya comprenderás eso cuando seas más mayor.

Estas Navidades tengo planeado que vengas conmigo a mi Aquelarre de Cork. Ya va siendo hora de que aprendas los misterios de nuestros ancestros. Vas a ser la digna nieta de tu abuela, estoy convencida de ello.

No olvides, Ivy Jade, de que lo único realmente importante es tu familia. Y por edad soy la que más sabiduría tengo. No dejes de confiar en mi criterio.

Un abrazo y sigue estudiando.

Tu abuela.

Tras la lectura de la misiva, la joven se guardó la carta en el bolsillo y se mordió el labio. Tenía la sensación de que la abuela sabía lo que hacía en el colegio, como si tuviera ojos allí, en todas partes acechándole.

No, eso es imposible. Quizás haya escrito a Nolan y él le haya contado...

Pero la abuela no se llevaba apenas bien con Donovan o Nolan, para ella lo importante eran las mujeres de la rama familiar, pues eran las más fuertes para seguir manteniendo el Aquelarre.

Si no pregunto, no lo llegaré a saber nunca...

- Hola Nolan. ¿Estás bien?... - Se acercó a su hermano para ver cómo estaba, pues parecía que la esquivaba - ¿Cómo te va en las clases? Ya sabes que si necesitas mi ayuda, suelo ir a la biblioteca... - Comentó con suavidad en la voz, prestándose a ayudarle - Por cierto. ¿Te ha escrito la abuela o el abuelo? ¿Y mamá o papá?... No le dirás lo del Quidditch, ¿verdad?... - Y es que no pensaba pedir permiso para estar en el equipo. Si se enteraban, ya lidiaría con el problema más adelante.

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23/08/2022, 13:18
Ivy Jade Connor

Ivy asentía mientras Michael explicaba que Percy estaba interesado sobre el tema de Shadefian. Ella había pasado un tiempo con su compañero poniéndole al día con los deberes, y Wildsmith le caía bastante bien.

- Yo he estado estudiando con Percy durante unas horas y debo confirmar lo que dice Michael. Es muy inteligente - Comentó la pelirroja - Además, estoy segura de que Cramson siempre actúa con buen criterio - Miró al Ravenclaw con certeza y encanto - Yo confiaba ya en Percyval, pero si tú también lo haces, mi seguridad en Wildsmith es doble. Además, es buen muchacho y apenas conoce a nadie. Sería buena cosa que sea de nuestro grupo de amigos...

Jade era bastante social y abierta. No solía bloquear a nadie, a no ser que esa persona fuera como Alondra. Colton por su parte, parecía estar de acuerdo con lo propuesto, así como también Luna.

- Bueno, ya somos cuatro a favor... - Dijo la pelirroja mirando a los demás, en espera de saber qué opinaban.

Notas de juego

Rol sin Percy

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23/08/2022, 16:26
Kyle Goldfinch

Ivy estaba de un humor extraño. Empezaba a pensar que ella era simplemente así, tan efusiva como eufórica y a veces preocupada. Será cosa de algunas chicas. Definitivamente la cagada en su copa de zumo no fue de mucha ayuda para su humor. Pero se le pasó rápido tras abrir aquella revista de corazón de bruja y la abrió bien permitiéndome que leyese una parte de los artículos. 

*Aaaah entiendo. Marujeo total. - mi interés por la revista fue de medio a bajo a normal a interesante, a normal de nuevo. Vaya, no tenía ningún interés en pociones de amor, cosa que no me acababa de creer a simple lectura, pero habían trucos para la imagen que quizás me pudieran interesar. Aunque a Ivy parecía encantarle esa revista. El estilo y la moda de los magos? eso era interesante... 

-Mmmm interesante. Quizás puedas dejármela. O podríamos compartir una subscripción, quizás hayan algunas cosas que me puedan servir para entender mejor el estilo actual entre los magos. - lo de la subscripción no me parecía mala idea, si sus padres no se la pagaban más. *Sí que es atrevida pasándoles la factura a sus padres, o quizás se lo paguen todo y eso sea algo normal. - Solía pasar en gente bien adinerada, no era un problema en realidad. En mi aso no es que mi padre me pagase "todo", me permitió intercambiar una parte en galeones para mis estudios, aunque sí que era cierto que todo el dinero que tenía era suyo. Por suerte Rob insistió en que la cuenta de Gringots para cuando hicimos el cambio de moneda fuese únicamente a mi nombre, mintiéndole a mi padre con la excusa de que era "sólo para magos", y él no podía abrirse una cuenta allí. 

Cuando Ivy me preguntó que qué me contaba Rob se lo expliqué, sin darme cuenta de que se me enternecía la mirada - Pues me pregunta si me lo estoy pasando bien, si he echo amigos, y que fue de nuevo al callejón Diagon para preguntar en la tienda de Articulos de Calidad para Quidditch, porque le mandé ir allí cuando empezaste a hablarme del Quidditch el primer día. Ya te puedes imaginar su cara cuando le explicaron las reglas. Dice que le enseñaron posters con imágenes que se movían y se pensaba que eran pantallas de televisión extra finas! - me reí - son cosas del mundo muggle. Las imágenes muggles suelen estar quietas.  Además ahora están de viaje por Europa con mi padre, tiene que acompañarlo a todas partes, y ... bueno, no quiero aburrirte, son negocios suyos. La cuestión es que Rob se está aburriendo mucho y no para de pensar en el callejón Diagon. Es lo único mágico que conoce. - le extrañaba. Mucho. Pero era imaginármelo intentando subirse a una escoba del hotel y se me quitaba toda la nostalgia, como si lo viera aquí mismo. -Esta misma tarde le escribo. - entonces dije con una sonrisa torcida - me muero de la risa con imaginar la cara de los estúpidos muggles del hotel de Alemania cuando una lechuza aparezca por la mañana con una carta para Rob - terminé de tragar mi comida y me quedé serio durante un rato.

Michael se nos acercó y nos felicitó. - Gracias, ehm... felicidades a ti también. Tu hermana estará muy orgullosa. - le felicité sinceramente, de los del grupo eran Michael e Ivy quienes más estresados estaban por hacer las pruebas, y habían entrado. De hecho habíamos entrado casi todos! Era de lo más extraño. Me daba la sensación de que no tardarían en cuchichear sobre ello por toda la escuela. Y lo que era peor, Alondra no había dado señales de vida todavía, y algo en mi interior me decía que no tardaría. Pero entonces la conversación se bloqueó un poco cuando intentó darle las gracias a Ivy. Al parecer sí estuvieron entrenando juntos. No tardó en marcharse hacia la mesa de Gryffindor, donde Colton hablaba animadamente con Luna y probablemente Úrsula, con la nueva muñeca de Luna de por medio. 

Me distrajo la cara seria de Ivy mientras leía su carta. Parecía un asunto importante. Pero no quise meterme, pues no tardó en dirigirse a su hermano. Aproveché para a Luna que estaba emocionada por el regalo, o eso parecía tras verla leer su carta. En ese momento  Luna nos hizo señas para acercarnos a Ivy y a mí, así que me levanté y me acerqué a la mesa. 

Me imaginaba de qué iba a ir el tema.

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23/08/2022, 16:55
Kyle Goldfinch

Y efectivamente, el tema era Shadefian. Pero esta vez se trataba de incluir a Percy en la ecuación. Y al parecer Percy tenía información que darnos. 

Miré al resto, estaban confabuladoramente atentos, y al parecer aquella información era algo que necesitaban. Yo todavía no había encontrado nada sobre los Shadefian y su relación con Salazar, por lo que no tenía ninguna novedad que aportar.

-Si crees que pueda ser de ayuda, supongo que tiene sentido. Además dices que sabe algo sobre él. - cuando mencionaron a los fundadores, me puse pálido y tragué saliva. - Si crees que pueda servirle, podrías decírselo, claro. Díselo. - pero no me iba a ofrecer para volver allí. No. Eso lo tenía muy claro. La duda me alcanzó la mente: *los fundadores siempre tienen ese enlace allí? no es algo muy peligroso? quiero decir... si conecta con el pasado... - mi pensamiento se quedó ahí, cuando Luna sugirió ir a aquella Sala de los Menesteres.

-Eso sería una buena idea. ¿Dijisteis que era una especie de sala privada, no? -  parecía que no había duda que Percy era alguien que podía sernos útil, así que todos estábamos de acuerdo en integrarle. Solo esperaba que no llamásemos demasiado la atención, ya nos miraban raro de que nos juntáramos tanto, y sentía las miradas en la nuca del gran comedor más ahora que estaba cerca de los otros. 

El quidditch y sus equipos iban a dar mucho de qué hablar.

 

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26/08/2022, 18:19
Úrsula Galloway

Abrió los ojos y descubrió que era de las pocas que ya quedaban en la habitación.

-¡Jolín! Ya voy tarde... -se tiró, literalmente, de la cama. La noche anterior se habían dormido todas tarde en la habitación hablando sobre la elección de los equipos de quidditch. Luna, feliz por haber sido elegida, otras chicas porque habían elegido a algún chico que les molaba, otras contando batallitas de cosas que solían suceder alrededor de aquellos partidos y la competición entre casas. Miles de cosas que habían hecho que se quedara dormida.

Ni se duchó o no tendría tiempo de desayunar. Se vistió como hacen los bomberos, todo del tirón y bajó corriendo las escaleras para descubrir que todos estaban ya en la mesa hablando.

-¡Buenos días!, ¡buenos días!, ¡buenos días!, donuts, donuts, donuts,... ¿dónde estáis? vosotros no, los de azúcar...-mariposeó por la mesa hasta que encontró los ansiados dulces, cogió un par de ellos y se sentó junto a Colt-¿Que tal habéis dormido jugadores de quidditch gryfindorianos?-se echó un vaso de batido de chocolate y se metió medio donut en la boca-No te he escuchado levantarte Luna, un poco más y no llego a desayunar. 

De repente vio a una lechuza pasar volando por encima de sus cabezas y se volvió a mirarla-¿Puede estar aquí?, ¿dejan bajar al comedor a las lechuzas?, porque creo que... ¡ey!, ¡si hay mogollón!-agachó la cabeza para que una que volaba así como si estuviera despistada, no chocara con ella. De repente, la comida empezó a saltar sobre ella al caer paquetes y cartas en la mesa. Se quedó quieta y se puso las manos en la cabeza, agachada, esperando que algo más o menos grande, con más o menos plumas, la golpeara. Pero el golpe no llegó y sí que llegó una carta que su lechuza dejó delante de ella en la mesa.

Se quedó mirándola pasmada, con los ojos bien abiertos al igual que la boca-Menuda caca... ¡no he escrito a casa y prometí que lo haría nada más llegar!-dijo en un suspiro antes de mirar con cara de circunstancias a Colt-Colt, tus padres no están aquí, ¡no te pueden prohibir nada!. Además, es una actividad que organiza el cole... ¡Ábrela a ver que te dicen!-Lo animó a que la abriera, estaba segura de que sus padres no le iban a prohibir nada. Tan segura como que ella se la acababa de cargar.

 

Pequeña osita.

Si no fuera porque tus hermanos y yo te conocemos tan bien, estaríamos preocupados. Pero, como ya sabemos como eres y lo olvidadiza que te vuelves cuando estás haciendo algo que te gusta, no nos ha extrañado recibir ninguna carta durante estos días. Además, la lechuza que comprobamos ha venido y, cuando le hemos preguntado por ti, ha puesto cara de circunstancias, algo así como "Bah, no hay que preocuparse por ella, se sabe cuidar sola". Y todos le hemos hecho caso y sabemos que estás bien. Me gusta esa lechuza pero no me dijiste al final cómo la querías llamar y por aquí todo el mundo tiene curiosidad por saberlo. Ha sido la atracción del día, todo el colegio habla de ella y todo el mundo le ha hecho fotos en la ventana desde el patio.

Por aquí también hemos empezado las clases. Ashley va la primera de la clase, como siempre, Henry ya está aprendiendo a dividir y parece que le gustan las mates, no como a ti, y Roy me ha pedido apuntarse a clases de chino porque dice que le han dicho en el cole que es el idioma del futuro. ¿Crees que debe ir?. Te pedimos consejo de grupo. George ha estado bastante ocupado en su próximo plan para la casa, es secreto, no te puedo contar nada, aún (aunque si escribes rápido lo mismo te cuento algún pequeño secretillo). Ashley opina que sí, Henry que sí a cambio de que compremos una Play y George dice que una Play no que, como mucho, una canasta y un balón de baloncesto nuevo.

Libra te echa de menos. Sigue durmiendo junto a tu cama y la huele todas las noches. Cuando llegó la lechuza la miró y aulló largo y profundo, creo que sabe que la lechuza está contigo y le mandó recuerdos de su parte en lengua perruna. Lo que no sé es si la lechuza la entendió. ¿Le preguntas?. Por curiosidad. Lo mismo los animales hacen magia y se entienden entre ellos aunque sean de razas diferentes.

Escríbenos pronto y cuéntanos cosas del cole nuevo, estamos deseando saber de ti. Hemos escrito la carta entre todos, pero ha sido cortita porque lo que queremos es que nos cuentes tú y, sobre todo, tu opinión para el consejo de grupo. Las clases empiezan en un par de semanas y las plazas están contadas y tenemos a Roy todo el día insistiendo con el tema (Está bastante pesadito. Bastante, bastante).

Te mandamos desde aquí un beso muy fuerte: Ashley, Henry, Roy, George y Libra.

Mary.

 

Se quedó un rato mirando la carta, con los ojos húmedos, y echando terriblemente de menos no poder abrazarlos a todos, aunque la sensación de saber que se había olvidado de ellos era extraña. El tiempo se le había pasado muy rápido allí y no había tenido tiempo de escribirles.

-Sí, mi madre. Y mis hermanos también. Hay consejo de grupo... tengo que contestarles rápido, ¿me da tiempo antes de clase?-miró a Colt y supo que él no sabía qué era eso de consejo de grupo-Un Consejo de Grupo... es cuando tenemos que tomar una decisión en familia. Se pone en común el problema y se decide entre todos que hacer. Mi hermano mayor quiere ir a clases de chino porque es el idioma del futuro aunque, conociéndolo, seguro que le mola una chica que va a esa clase-puso los ojos en blanco un instante-según Mary, está entrando en la edad del pavo. Como cuesta dinero hay que sacarlo del fondo común que tenemos reservado para nuestro grupo. Yo diré que sí. De todas formas, yo no me voy a gastar más dinero... bastante se han gastado en mi para que pudiera venir aquí... -terminó con un hilo de voz doblando la carta-¿Que te han dicho tus padres? ¿Te dejan participar en el equipo?-le preguntó, animada y curiosa por saber qué le habían dicho a Colt.

Se inclinó hacia un lado, llevando la vista más allá de Colt, justo a su continuación, y se quedó mirando lo que Luna tenía entre manos. La muñeca más rara que había visto nunca. ¿Iba a tener a esa muñeca en la habitación?. Daba miedo allí en el comedor, no quería pensar en qué sería cuando apagaran las luces en la habitación. ¡Daba susto!. ¿Quien le había hecho ese regalo?.

¿Alondra?, no me extrañaría...

-¡Buenos días, Michael! ¿Has recibido carta tu también?-saludó a su amigo cuando se acercó a su mesa y asintió cuando lo vio mirar asustado a la muñeca. Vale, no era la única a la que no le gustaba el regalo, ya era algo, no era ella la rara-¿Original? Jo, yo diría otra cosa pero... vale, original. ¿El abuelo de Ivy?-preguntó con curiosidad a Luna, levantándose y acercándose a mirar la muñeca de cerca. Pero no, no mejoraba a aquella distancia. Daba susto y punto- ¿Para ayudarte a dormir?, ¿en serio?-miró a Luna con cara de incredulidad-Pues no sé cómo. Yo más bien diría que no vamos a pegar ojo... ¿la podemos meter en la caja por la noche?. Porfi....

¿Una muñeca peligrosa?. Mierda. No iba a dormir. Lo sabía. 

Asintió a todos, para hablar del tema, mejor lejos de oídos indiscretos y malvados como los de Alondra.

-¡Vamos!-exclamó cogiendo su donut y olvidándose de nuevo de contestar a su carta.

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26/08/2022, 18:23
Úrsula Galloway

-No tengo problema porque le contemos todo-dijo después de escuchar al resto y terminarse su donut-Además, si sabe sobre ese tal Shadefian lo mismo él puede descubrir algo más que nosotros no, ya sabeis, algo así como que él ve algo raro donde los demás vemos algo normal. Además, Ivy también lo conoce de antes, otro punto para él. Y sí, es verdad-afirmó mirando a Ivy-estuvimos en la biblio y, no sé, para haber faltado los primeros días era como si no le hubiera hecho falta ir a clase, se ha puesto al día muy rápido.

Estaban de acuerdo, ninguno tenía problemas en que Percy se uniera al equipo. Había estudiado con ellos y compartido deberes así que, técnicamente, ya lo era para ella.

-Vale, decidido entonces, todos estamos de acuerdo-miró a Michael y ladeó la cabeza, chupándose un dedo lleno de azúcar del donut-Así que... venga, ¿qué te ha contado? ¿qué sabe él que nosotros no? y, lo más importante.... ¿por qué él sabe cosas de Shadefian? 

La cara de Úrsula era la intriga personalizada.

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27/08/2022, 22:21
Percyval Ignatius Wildsmith

Después de las pruebas de Quidditch comió en el desayuno como si llevara varios días sin comer. Posiblemente esto era debido a varias razones. Había hecho un gran esfuerzo, sacando tiempo incluso de las comidas para ponerse al día y era la primera vez que bajaba a desayunar, algo que resultó caótico y entretenido a la vez. Las mañanas al ser el momento de recibir las lechuzas quedaba todo más mágico y además ayudaba a que cualquiera que bajase algo dormido se desperezase rápidamente. Pudo comprobar que la lechuza que había enviado para suscribirse al profeta había llegado a destino, obtuvo su número del periódico y se puso a leer concienzudamente. No buscaba sólo noticias relacionadas con Shadefian, si no cualquier cosa que pudiera resultar algo fuera de lo común aunque no se considerase relacionado. 

En ese momento el rostro de Percy estaba oculto por la portada de "El Profeta" que leía con avidez mientras comía de manera despistada. Se había sentado en una zona cercana a Michael, aunque al haber llegado un poco más tarde no se sentó junto a él, teniendo este oportunidad para hablar con el resto del grupo de estudio si quería, de aquello que fuera. 

Notas de juego

Perdonad que no me centre mucho en conversaciones, pero ha sido una semana complicada que apenas he tenido tiempo y prefiero no saltarme el turno aunque quede un post más cutre que dejarlo correr.