-¡Oh!Ummmm... es posible. Si las lechuzas son diferentes y nos entienden, lo mismo ocurre lo mismo con el resto de animales, incluidas las mariposas y las arañas-Úrsula se había quedado pensativa dándole vueltas a la sugerencia de Colt y sin importarle lo más mínimo que una araña peluda andara suelta por el invernadero.
Pillar un sitio libre en clase fue más complicado que encontrar el asiento en un cine a oscuras pero por fin la clase empezó y con ellas las dudas. Aunque la profesora contestó a la suya de tamaño existencial, Úrsula no se quedó tranquila y miraba a las tres plantas que tenía delante con cara de circunstancias cuando les tocó practicar con ellas. Las espinas eran considerables y estaban muy juntas como para pincharse fácilmente y, además, eso de hacer cosas con los ojos cerrados no era muy de ella que siempre le gustaba ver por donde pisaba o, en este caso, por donde tocaba.
Levantó la mirada un poco y buscó a Colt en el lado contrario del invernadero. Vio como se colocaba los guantes y lograba pasar las tres plantucas a su tiesto nuevo sin incidentes. Le hizo la señal de victoria cuando terminó acompañada de una enorme sonrisa de alivio. Colt estaba fuera de peligro. ¿Y Luna?. Buscó con la mirada a su amiga que, en aquellos momentos se disponía a ocuparse de sus tres plantas y parecía superconcentrada, como había que estar. Así que no la distrajo y se puso ella misma a hacer su tarea. Sus tres Testia temporis la estaban esperando. Miró a su lado y, otro Gryffindor miraba a sus plantas sin llegar a decidirse a tocarlas. Úrsula lo había tratado poco, pero sabía como se llamaba.
-¿Qué te parece si te indico primero y después te ayudo yo, Oak?-levantó sus guantes e hizo un gesto hacia las plantas, mientras se los ponía-No podemos hablar muy fuerte para no asustarlas, pero si veo que va algo regular te iré indicando. Estoy segura de que no nos vamos a pinchar-intentó tranquilizar a su compañero mientras se ponía en posición para ir indicándole. No tuvo que hacerle casi ninguna indicación, solo un par de veces le dijo un suave un poco más arriba...ahí, o un poco más a la derecha...así...
Y ahora le tocaba a ella. Se terminó de ajustar los guantes y movió los dedos dentro de ellos. Eran tan gordos que temió no tener tacto y aplastar a las plantitas-Pues sí que son gordos... casi no puedo mover los dedos... en fin, ¡vamos allá!- Visualizó la primera de las plantas delante de ella y cerró los ojos con fuerza-Indícame si ves que voy muy mal esto de cerrar los ojos...
Era difícil ver donde poner las manos, donde estaba la planta y donde ponerla en el tiesto con los ojos cerrados, sobre todo la primera de las plantas que era la que iba a pagar la novatada pero, al cabo de un rato y de seguir alguna que otra indicación de su compañero de casa, Úrsula apretó con cuidado la tierra alrededor de la tercera y se alejó de ella con cuidado, abriendo los ojos y admirando el resultado de aquel ejercicio. No era lo mejor de lo mejor, pero no se había pinchado y las plantas no tenían aspecto de ir a morirse de un momento a otro del susto ni nada parecido así que respiró tranquila mirando a Oak-Vaaaaale, ¿misión cumplida entonces?, lo hemos hecho bien los dos, ¿no?-se encogió de hombros, esperando a que la profesora les comentara el resultado, sin atreverse a cantar victoria aún-Tete Uno, Tete Dos y Tete Tres en casas nuevas-indicó señalando una a una sus tres plantas-Y no han echado a correr ni la profesora nos ha gritado. A lo mejor es así de fácil y se nos da bien esta asignatura. Molaría tener una asignatura fácil...sí que molaría.
Motivo: DES+Herbología +3
Dificultad: 6
Tirada (7 dados): 3, 8, 2, 8, 2, 1, 4
Éxitos: 1
1 éxito -> ni con 7 dados consigue Úrsula hacer algo mono XDDDD
La preocupación que tenía la profesora por sus plantas no era diferente a la de mis mamás conmigo, por lo que simplemente deduje que para ella, las plantas eran como sus pequeñas hijas y que cualquier daño que les hiciésemos iba a molestarle muchísimo.
Así que no solo había que intentar tratarlas bien para conseguir aprobar y sacar buenas notas, sino sobre todo para que ella no se enfadase y la tomase con nosotros.
Era lo último que nos faltaba.
Estaba tan concentrada en ella y lo que decía y explicaba, que no presté atención a Colton ni a Úrsula hasta que la profesora respondió a ambos, despertando un murmullo de sorpresa cuando explicó las consecuencias de pincharse y también volvió a insistir en la necesidad de cuidar sus plantas.
Después, como empezó a mostrarnos lo que teníamos que hacer y cómo, tampoco pude hacerlo demasiado, pero procuré colocarme al lado de ambos para trabajar después todos juntos, aunque Colton estaba muy cerca de Angeline, demasiado cerca.
La profesora hizo el trasplante sin guantes ni cuidado alguno; simplemente... lo hizo, seguramente porque llevaba tanto tiempo haciéndolo y se le daba también que no necesitaba ni siquiera pensarlo. Pero nosotros sí que debíamos andarnos con cuidado si no queríamos caer en lo que nos había dicho.
Anoté todo lo que fue diciendo y sobre todo subrayé lo de los guantes; no había que arriesgarse.
En cuanto acabó de hablar y nos dijo que podíamos empezar, busqué mis guantes y me los puse. Colton dijo que empezaba él, así que dejé que él fuese en primer lugar, delante de nosotras.
-Son gruesos para no pincharse. Ahora, asegúrate de cerrar los ojos y nosotras te indicamos si lo haces mal, no te preocupes -le dije, mirando a Úrsula y prestando atención a lo que hacía Colton, que estaba muy centrado en Angeline.
Quizás deberíamos dejarles a los dos a solas, pensé, mirando a Úrsula y levantando las cejas.
Úrsula se puso después manos a la obra. A ambos les estaba resultando un poco difícil mover las manos y sobre todo, encontrar el punto exacto desde el cual tirar y volver a enterrar. Cuando acabó y abrió los ojos, le sonreí.
-Lo has hecho muy bien, tranquila. Parece un poco difícil al principio pero después es todo igual -le dije, acercándome a mis tres plantas -. Está bien, ahora voy yo.
Fue complicado sacar la planta pero me pareció que lo hacía con bastante soltura. Después palpé a ver en donde estaba el otro tiesto y la introduje en él, para a continuación cubrir con tierra todo el hueco que había. Repetí la misma acción con las demás y cuando acabé y miré cómo lo había hecho, vi que no estaba muy mal.
De hecho, hasta parecía que me había salido bien y todo.
-Vaya, creí que sería más difícil, pero me parece que no se me da mal la herbología -comenté, con una sonrisa.
Úrsula también estaba animada por cómo le había salido y es que mirando a nuestro alrededor, nos dimos cuenta de que no todos lo habían hecho como nosotros. Oímos algún quejido al pincharse y también una especie de chillidos que parecían provenir de algunas de las plantas.
Las plantas... ¿chillaban?
Motivo: Probando a trasplantar
Dificultad: 6
Tirada (7 dados): 8, 9, 10, 4, 6, 7, 3
Éxitos: 5
6 éxitos
La clase se estaba desarrollando sin mayores contratiempos. Para variar, se trataba de algo relativamente sencillo e incluso agradable, lo que era todo un cambio con otras clases, que o bien tenían a un profesor o una profesora insoportable, como la profesora Tauris... o resultaban más complicadas de seguir.
El caso es que la profesora Cassowary pareció bastante satisfecha tras ver cómo manipulabais sus queridas plantas, lo que hizo que su humor fuese bastante bueno. Unos cuantos compañeros se habían pinchado, por lo que aparecieron algo angustiados a vuestro lado, por haber vuelto a vivir el mismo momento en varias ocasiones, pero no fue nada que no pudieran gestionar. Lo importante era que la profesora pareció quedarse con quienes lo habíais hecho bien.
-Muy bien, así me gusta. Me parece que habéis comprendido la importancia de tratar a las plantas como os gustarían que os tratasen a vosotros, con cariño y suavidad. Muy pocos alumnos son conscientes de la importancia que tienen estos seres en nuestras vidas y como influimos en ellas. Dependen de nosotros pero también a la inversa.
La profesora se pasó entonces comprobando todos los trasplantes, asegurándose de que lo habíais hecho bien, añadiendo o quitando tierra en algunos casos y enderezando algunos tallos que habían sido manipulados con demasiada agresividad.
-Está bien. Par ala próxima clase trabajaremos con Phalaenopsis mirabilasis, una planta hermosísima cuyos pétalos son importantísimos para una buena cantidad de remedios caseros. Con ellos elaboraremos una cataplasma que podrá servirnos de ayuda cuando tengamos alguna herida abierta. Quiero que elaboréis una lista de los usos de las cataplasmas y las familias de plantas que pueden sernos de utilidad. Servirá como introducción la próxima vez. Y ahora... marcharos, que tengo mucho trabajo; chop, chop.
La profesora pareció conformarse con muy poco en aquella primera clase, dando así por terminado todo sin haceros sentir agobios de ninguna clase.
Desde luego, era un cambio a mejor.
Cerramos la clase y seguimos en la Sala de los Menesteres (y el quidditch) nada más ;)
Podéis escribir un post para cerrar ;)
Colton lo había conseguido, estaba feliz como una lombriz y cuando miró a sus amigos se encontró con la señal de la victoria y la sonrisa de Úrsula. Le lanzó su sonrisa más deslumbrante e hizo la V de Victoria también, mientras la animaba para que ella empezara con su trile de plantas. Se había puesto con Oak, y Oak la guiaba bien, así que no tenía que preocuparse. Úrsula había empezado a destetar a sus tetes perfectamente, así que se centró en Angeline, que estaba muy cerca, muy muy cerca. Miró hacia Luna, para intentar centrarse en algo que fuera menos, menos rubio, y le hizo otra V de victoria cuando vio que lo hizo tan tan bien. Se volvió a centrar en Angeline y esta cerró los ojos para hacer el trabajo, y al hacerlo parecía como si le estuviera pidiendo un beso. Movía los labios, se los mordía, y a Colton le daban calores, estuvo a punto de adelantarse y darle un beso, porque, ¿Se lo estaba pidiendo, no? ¿Estaba ligando con él, no? Pero entonces un comentario de la profesora le hizo tocar a tierra. No, no le estaba pidiendo un beso, esperaba que la ayudara a hacer su trabajo a ciegas y ya.
Se sintió avergonzado. Las posibilidades de que una chica tan femenina como Angeline se fijara en él eran tantas como las de que él fuera un empollón de Ravenclaw. Sonrió, riéndose de si mismo por lo tonto que era, y empezó a guiarla de manera total pro.
- Angeline, escucha, lo estás haciendo muy bien, pero el macetero está a 3.2 cm a la derecha de tu posición, velocidad del viento 0.7 km/h, día despejado, así, despacio, hacia abajo, muy bien, la planta ha aterrizado en el tiesto, ahora solo tienes que taparla de tierra y darle un par de golpecitos, así, muy bien, como si fuera un cachorrito pequeño, con cariño, no queremos que se estresen.
Y la chica lo hizo muy bien, y la profe les felicitó, informándoles que el próximo día trabajarían con una hipnosis milagris que servía para remedios caseros. Había que hacer deberes, eso no era tan bueno, y la palabra cataplasma le hizo recordar a su madre, que a veces le había llamado eso. Al acabar la clase se fue con su grupo de amigos habituales y se despidió con una sonrisa de Angeline. No se la iba a ligar, pero tenía 2 amigas increibles, y eso no lo podía decir cualquiera. Se sentía afortunado, aunque echara de menos a su madre. Ya habían pasado.... fua.... 3 días.