Phin se muestra muy interesado toda la historia, y su expresión se torna de sorpresa cuando Suzume habla del barco de casco blanco y velas blancas. Parece como si Phin supiera algo más sobre él, o al menos eso se nota en su expresión, pero no dice nada al respecto (Y si Suzume le preguntara, se negaría a revelar la información).
Al final del relato, Phin estaba muy serio y Suzume puede ver en sus ojos una llama que se había apagado hace años. Aunque fuera viejo y torpe ahora, su espíritu el del antiguo Phin O'Heigh, rey de los piratas.
- La situación ya ha ido demasiado lejos, sin duda. En primer lugar buscaremos al puesto vacante de la Mesa, aunque ya tengo a alguien en el punto de mira. - Sonríe. - Y después nos reuniremos. Ha llegado la hora de que esos desgraciados conozcan la ira de los piratas.
[FIN DEL PRÓLOGO]