Partida Rol por web

Si le surge algún problema o duda, no dude en contactarnos- Le da una pequeña y elegante tarjeta con un número escrito, probablemente sea un número de teléfono, entonces se da la vuelta y se va caminando junto con Rhyuna.

-Disculpe -inesperadamente, la mano de Amara agarra con firmeza el hombro de Rhyuna, evitando su partida. La mujer es más fuerte de lo que parece, pero el agarre sólo dura un instante. Retira rápidamente la mano, como si hubiera cometido una imprudencia o violado alguna norma. Su otra mano, pegada al costado, juguetea con el pequeño dispositivo, un poco más grande que un disco de datos protegido.

-Mi pase autorizado es para las bodegas de carga -parpadea lentamente, mirando por entre los dos hermanos, hacia el extremo del hangar, donde se vislumbra la sombra masiva de la Juggernaut- soy estibadora, no trabajador de mantenimiento.

Pasaba de las nueve de la noche, Amara revisa su P-5000.

Durante el turno se había quejado de que el servo de la articulación inferior izquierda daba problemas, no lo suficientes para llevarlo al taller -Tess le había explicado que los trabajadores tenían que abonar una tarifa por la revisión-, ella debería poder ajustarlo.

-Puedo manejarlo, Rutger -dudó unos instantes y añadió- Gracias.

Amara espera unos minutos más, que aprovecha para lanzar el programa de análisis del P-5000. No espera encontrar nada, pero quedará el registro en la memoria de mantenimiento.

Luego, cuando ya no se oye nadie en el enorme muelle, echa a andar hacia la enorme sombra del Juggernaut...

A Rhyuna le aparece la notificación de que su trabajo debe comenzar. En ese momento Rhyuna estaba... ocupada con otras tareas igual de importantes, como jugar a videojuegos, comer, y tramar planes totalmente desbaratados junto con Rhyuk.

-¡¿Ahora?! Noo, quería terminarme este juego...

-Creo que es más importante la misión...

-Vaaaale.

Rhyuna tira la consola a uno de los puffs, cruje los dedos y se sienta en una silla rodeada de pantallas.

 -Bien, pues vamos a empezar- Sonríe y empieza a teclear rápidamente. Rhyuna comienza con su intento de hackeo junto con la "ayuda" de Rhyuk. El sistema de seguridad no parece ser muy complejo, y solo le hace falta un único intento para transferir y guardar los datos registrados en los últimos tres meses.

 - ¡Sí! Jejeje, pues no ha sido muy complicado. Bueno, haz una copia de los datos que quiere el viejales (códigos de acceso, lista de tripulantes, plan de vuelo...) y se los envío.

Rhyuk se pone manos a la obra y consigue meter esa información en una carpeta separada de los otros muchos datos.

 -Perfecto, bueno, nuestro trabajo habrá terminado en cuanto pulse este botón... Jijiji- Rhyuna aprieta el botón de enviar felizmente y se le escapa un suspiro de alivio.

-Jejeje... ¿No estará mi princesita cansada... no?- Rhyuna de repente da un brinco al oír sus palabras.

-¡Yo nunca me canso! NUN-CA... Eres tú el único... que...- Rhyuna bosteza y se queda tan dormida que casi se cae de la silla. Por suerte para ella Rhyuk la coge como si fuese un ratoncito y la lleva a uno de los puffs.

Rhyuna indica a Amara que ya puede desconectar el dispositivo. Esta lo recoge y abandona la nave por donde ha entrado; una torreta a medio montar que le ha permitido evitar las cámaras de seguridad que bloquean el acceso (cerrado) al buque. Afortunadamente no se ha cruzado con nadie a esas, pero es evidente que al menos parte de la marinería duerme en su interior.

Mientras Rhyuna duerme, Rhyuk repasa la información que ha apartado para enviar a Eraid Lloyd. La nave no dispone de sistemas de seguridad muy elaborados; tan solo un par de cámaras de seguridad conectadas al ordenador principal y un código de 4 cifras en las escotillas que dan acceso a la cabina y a la bodega. La tripulación está formada por 10 personas:

Capitán: Ernst von Goetling
Primer oficial: Cedric Stoltz
Oficial médico: Marianne Devriendt
Oficiales de ingeniería: Arla Manstein, Robert Sylz
Marinería: Thomas Gorn, Johanna Kempner, Wei Li, Durban Schecht
Asesor científico: Arsenic Lup

y lo más interesante que parece contener el registro de transmisiones corresponde a los últimos 20 días:

Mensaje entrante (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/03/26, 23:02]
Nuevo encargo. Ordenante: Drachenfels Bergbaubetrieb. Concepto: Exploración. Destino: Clasificado (Sector 9). Importe: 45.000.
[Fin de la transmisión]

Mensaje saliente (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/03/27, 03:19]
Aceptar.
[Fin de la transmisión]

Mensaje entrante (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/03/27, 17:41]
Destino: Fenitia (Theta Hydrae, Sector 9). Avituallamiento y refuerzo de sistemas defensivos a cargo del ordenante.
[Fin de la transmisión]

Mensaje saliente (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/03/27, 17:44]
Solicito información detallada.
[Fin de la transmisión]

Mensaje entrante (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/03/28, 09:20]
No disponible. Instrucciones adicionales tras avituallamiento.
[Fin de la transmisión]

Mensaje saliente (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/04/09, 13:55]
Entada en Theta Hydrae. Aproximación a Shiro.
[Fin de la transmisión]

Mensaje entrante (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/04/10, 11:32]
Contacto: Eraid Lloyd.
[Fin de la transmisión]

Transmisión orbital - Theta Hydrae 0 (Shiro) [475/04/12, 18:40]
-Control del astropuerto de Fenitia. Identifíquese, por favor.
-Al habla Ernst von Goetling, capitán de la Juggernaut, solicitando permiso de atraque.
[Datos adjuntos: Juggernaut.ID]
-Permiso concedido. Muelle A-2. Adelante, Juggernaut. Veo que no ha transmitido orden de carga y descarga. ¿Es correcto?
-Es correcto, gracias. Cambio y cierro.
[Fin de la transmisión]

Mensaje saliente (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/04/12, 21:03]
Contacto establecido. Iniciado avituallamiento. Tiempo estimado: 10 días.
[Fin de la transmisión]

Mensaje saliente (larga distancia) - Ulli Hoehenbach [475/04/15, 22:46]
Arsenic Lup (AICT) asesor científico.
[Fin de la transmisión]

-Jajaja mira Rhyuk, alguien quiere nuestra información....- Rhyuna sonríe maliciosamente, se vuelve a reír y agrega: -Bueno, hay que ir haciendo amigos ¿No? Bien, vamos a pasarle a Amara toda la infomación... A cambio de algo claro...

-¿Ya estás tramando algo...? Jejeje... Bueno, ¿Por qué no nos sentamos y lo hablamos? Quiero escuchar los planes de mi pequeña demonio...- Rhyuk empuja a Rhyuna a los puffs e intenta coquetear desastrosamente para sonsacar información.

-Jajaja ¿Esto es lo único que sabes hacer?- Rhyuna le da la vuelta y le inmoviliza completamente. Saca sus colmillos y sonríe mordiéndose el labio. De repente Rhyuk se pone tan rojo que se avergüenza de él mismo y aparta a Rhyuna de encima suya.

-Jajaja, uy que vergonzoso... ¡Nunca me sonsacarás información! A ver si con esta te queda claro.- Rhyuna se da la vuelta y se va dándose palmaditas en el hombro y diciendo por lo bajo: -Jejeje... Soy genial...

Rhyuna se sienta de nuevo en la silla y envía alguna información relevante que solo ellos saben... De momento.

Retrospectiva:

Al conocerse, Rhyuk, Rhyuna y Amara intercambiaron unas cuantas impresiones, además del dispositivo que permitía a Rhyuna conectarse remotamente a la CPU de la Juggenaut. Ninguno de los tres tenía muy claro qué les esperaba; la cita con la baronesa tendría lugar al día siguiente, y de momento nadie les había comunicado nada al respecto. Sin embargo, a partir de lo que saben unos y otra pueden intuir que, por alguna razón, Eraid Lloyd quiere hacerse con el control de esa astronave y está reuniendo una tripulación. Esa misma noche, Amara se encarga de colocar (y retirar) el dispositivo para que Rhyuna pueda llevar a cabo la ciberincursión. Aunque todavía no terminan de tener del todo claro hasta qué punto pueden confiar los unos en los otros, Rhyuk y Rhyuna deciden que es mejor empezar con buen pie y envían a Amara una copia de la información.

La verdad es que Amara no terminaba de entender qué podría querer Lloyd de la Juggernaut. Mucha de la información obtenida podría conseguirla él fácilmente. Carga, tripulación, incluso la última ruta estaban en la información que toda nave debe entregar al llegar a destino... o al menos así lo hacía Norver.

Tras una búsqueda en la infonet para refrescar sus conocimientos sobre ese modelo en concreto (*), Amara medita los pasos a seguir. Tess es la persona a cargo de los estibadores, concluye que es ella la más idónea para saber algo sobre la Juggernaut. Su aproximación a la mujer será directa y sincera, Amara no sabe mentir y se toma las cosas, a veces, demasiado literal, dado que no es tonta, conoce sus limitaciones. Así...

Termina otro agotador día, Amara teclea el último albarán y cierra su sesión. A unos metros, Tess termina de abroncar a un novato -no lleva una semana y ya la tratan como veterana, es un trabajo duro y repetitivo, en el que no hay que pensar más allá de la siguiente carga que hacer- y se acerca a la terminal, sudorosa y resoplante.

-Ya acaba el día, Amara. Menudos novatos me manda Lloyd. Es un milagro que no se aplasten con los exoesqueletos.

-Sí -responde Amara sin caer en la cuenta que ella podría ser uno de esos novatos-. Tess, ¿sabes si la Juggernaut contrata? -suelta a boca de jarro.

La mujer mira la mira de forma apreciativa, tratando de penetrar en su rostro inexpresivo: ¡Vaya, el pajarillo de ala rota ya quiere dejar el nido (**). ¿Tan mal te tratamos para que nos quieras dejar así de pronto? No sé qué pensará Eraid de eso, con todas las molestias que se ha tomado...

-Soy piloto -responde Amara-. Quiero volar -como si esa fuera toda la explicación necesaria- la Juggernaut me recuerda a mi anterior nave.

-Parece un buen buque carguero, ¿verdad? -sonríe-. Manufactura colosiana; no especialmente bonito, pero duro como una roca. El capitán es un tipo bastante avinagrado, ¿sabes? Fongotlin, o algo así, creo que se llama. Da la impresión de ser un completo capullo, pero mantiene su nave en orden, así que tan malo no debe de ser, ¿no? No me suena que esté contratando a nadie... pero supongo que algo se traerá entre manos, porque está reforzando escudos y armamento... ¿En qué nave servías tú? Yo nunca he salido de Fenitia, ¿te lo puedes creer? Pues créetelo, porque es la pura verdad. ¡Así como te lo digo!

-Ernst von Goetling -recuerda Amara. De seguro, Eraid Lloyd ya tenía esa información, así como el listado de tripulantes y la carga. Al menos la versión oficial, porque tampoco es imposible que la nave haya ocultado algo o alguien que no aparece en el registro. Los datos que había sacado Rhyuna no ofrecen gran cosa en ese sentido, pero ¿qué clase de inepto llevaría un libro de contabilidad del contrabando? Tal vez Norver, pero por lo visto no este otro capitán. O, si lo hace, lo ha ocultado suficientemente bien como para que la niña no lo haya encontrado. Quizá eso no sea tan difícil. La hoja de ruta no es obligatoria, aunque se podría reconstruir el punto de partida del salto a partir del ángulo de entrada. Lo que no hay manera de saber es el próximo destino. A juzgar por los mensajes, ni siquiera el propio capitán lo conoce aún.

-Escudos y armamento -repite las palabras de Tess.

-Sí, bueno, tampoco es tan raro, ¿sabes? Bah, ¿qué te voy a contar a ti, si has sido piloto? ¡Piloto! -exclama- ¿Cómo se llamaba tu nave? ¿En qué lugares has estado? ¿Es emocionante, o es igual de aburrido que aquí en tierra firme?

-Pero lo cierto es que tal vez se esté pasando un poco, ¿no? -murmura, pensando en voz alta-. Vamos, que un par de torretas láser y una bahía de torpedos ya está bien para un triste carguero, digo yo... ¡solo le falta el cartel de "voy buscando problemas; atacadme"! Porque nadie se gasta un pastizal en ese tipo de accesorios... ni en ese tipo, ni en otro... a no ser que esté pensando utilizarlos. ¿Estará metido en algún negocio sucio? No me tiene pinta de pirata, pero una no se puede fiar de las apariencias, ¿sabes? Una vez conocí a un tipo que parecía encantador, y resultó que estaba buscado por asesinato. ¡Asesinato! Vaya susto... el caso es que era muy guapo...

A Amara le cuesta seguir el ritmo de la cháchara, que salta de un tema a otro de forma prácticamente inconexa, mientras se concentra en lo que sabe del carguero. La tripulación, desde luego, parece completa; el modelo le recuerda al Colubra Morann, tanto por fuera como por la fugaz visita que realizó al interior. Entrar a través de una de las torretas le permitió acceder muy fácilmente al ordenador principal, pero es muy probable que esa vía se cierre en breve, a medida que avancen las reparaciones. Afortunadamente, dispone de los códigos acceso a través de las escotillas, pero éstas se hallan vigiladas por cámaras de seguridad, y probablemente el ordenador de la nave lleve algún tipo de registro de entradas y salidas...

-¿Un asesino? -Amara se obliga a prestar atención a Tess. Al final es lo que todos quieren. Hace un esfuerzo por responder adecuadamente- Increíble. Pero quizás tenía alguna buena razón.

-No me entretuve a preguntar, Amara -responde Tess algo sorprendida por la respuesta de la mujer. En verdad que era algo extraña.

-Es... distinto. Muy distinto a estar en tierra -retoma la pregunta anterior de Tess. Su diálogo entrecortado y a saltos parece encajar bien con las andanadas de Tess, quizás por eso Amara se siente cómoda con ella. De hecho, en los dos días que lleva ha cogido cariño al ambiente que se respira en el muelle.

-Pero aquí sois... amables -esboza una mueca que puede ser una sonrisa-. Buenos -concluye, lo que hace sentir a Tess cierto orgullo en su interior y se sonríe también. Es su trabajo, conseguir trabajadores eficientes y contentos.

-He pilotado cargueros. Parecidos a la Juggernaut, pero no fuertemente armados. No quiero problemas, aunque quiero volver a volar. En uno adecuado. 

-¿Dónde podría conseguir ropa elegante, Tess, para una cena? -dice de pronto Amara (*)