Partida Rol por web

Agradecida por la habilidad de su compañera de no perderse entre la infinidad de plantas del invernadero, comenzó a trabajar el Aloe Vera con toda la maña que podía. 

- Sólo hace falta moler algunas partes de las plantas, y sólo quedaría mezclar poco a poco para que coja la consistencia deseada. - Dijo mientras Suki, con el mortero, iba machacando cada ingrediente rápida pero trabajadamente. Aunque ninguna de las estudiantes tenían un gran talento, parecían compenetrarse a la perfección a la hora de realizar la tarea. Mientras la Slytherin preparaba los componentes, Dana los mezclaba cuidadosamente con agua, hasta lograr la textura perfecta. Ni demasiado líquida, ni demasiado pastosa.

Sonriente, le mostró a la rubia el resultado. Seguramente podría mejorarse, pero estaba orgullosa porque, gracias al trabajo en equipo, habían logrado completar la tarea.

- Lo hemos conseguido. He de admitir que hubo algún momento en que pensé que no podríamos hacerlo, y que perderíamos puntos... - Admitió algo avergonzada. Por suerte, la animaga no se rendía fácilmente, y su amiga tampoco se había desanimado. - Vamos a enseñarle el ungüento a lo profesores.

Entre Daphne y él habían trazado un plan de acción que tendría un resultado aparentemente positivo, por lo que se disponía ya a llevar a cabo su parte cuando apareció Beckia, para ensalzar a su compañera, aquello hirió el orgullo del muchacho, quien a su parecer había aportado de igual manera al plan, dando algunas ideas diferentes y a sus ojos, como no, más efectivas. Sin embargo no se dejó llevar por el orgullo herido, al fin y al cabo ambos eran de la misma casa y necesitaban esos puntos.

Sin embargo, hablando de puntos, si le dolió los 5 que se llevó ravenclaw únicamente por enumerar las plantas que se habían usado en la clase anterior, más aún cuando el mismo había propuesto usar una que su amigo Randall había mencionado.

-5 puntos por enumerar plantas en vez de elaborar una estrategia…- Le dijo por lo bajo a su compañera con una sonrisa maliciosa, esperando que ella pensase como él.

Tras esto se encogió de hombros y fue a buscar los ingredientes que habían acordado, estaba algo malhumorado, su casa no hacía más que perder puntos y las demás ganarlos, esperaba que todos los que no eran equipos de slytherin no consiguiesen hacer la mezcla e igualasen el marcador de la copa de las casas.

Linus estaba más concentrado en esto que en la tarea de buscar las hierbas, por eso no se dio cuenta de que había cogido una que estaba enredada a otra.

-Sus muertos…- ambas hierbas se cayeron al suelo llenándolo de tierra parcialmente y el chico las recogió a toda prisa poniéndolas en su sitio de mala manera y mirando de reojo a la clase a ver si alguno le había visto. En ese fingimiento no sabía dónde meter las manos así que con una se revolvió el cabello dejando algo de tierra en él y la otra jugueteo con su anillo. Estaba tentado a empezar a silbar, pero le pareció estúpido.

Cuando volvió a su sitio se puso a hacer la mezcla, en eso sí que era bueno, con su kit de herbología había practicado por su cuenta y ya sabía lo básico.

Las devoluciones de la Profesora no me agradan en absoluto porque al parecer nos ha obviado en lo que hemos dicho con Lauren, siendo las primeras en dar los nombres de las plantas con las que se podría hacer un ungüento práctico y sencillo. Así que sin ánimo de decir algo más, acompaño a la Ravenclaw en la búsqueda y elaboración de la tarea pendiente, obviando las palabras siendo los gestos o alguna que otra mirada, lo único que se refleja. 

Los demás van aportando parte de su conocimiento y otros como Randall, de quién me siento identificada, le corrigen a Beckia detalles que ha pasado por alto. Quizás no tiene un buen día la Profesora, o tal vez entre el ir y venir nuestro se ha perdido lo dicho. Indignada desvío la mirada hacia mi novio a sabiendas de que compartimos sentimientos, somos Slytherin y esto siempre supone ganar puntos, demostrar los conocimientos y de alguna manera coronarnos como los mejores. Aunque a veces, las situaciones no conspiren a nuestro favor. 

Sigo trabajando, lo bueno es que lo no encontrado por mi, Lauren lo logra. Así que de alguna manera, y curiosamente sabemos trabajar en equipo. Lastima el océano de diferencias que tenemos en medio, pues no todo se puede tener. Una vez terminado, le agradezco con un gesto mientras imagino cuánto debe me debe estar odiando. Da igual. 

Dana, junto con Suki, volvió donde se encontraban el resto de sus compañeros. Haberse mantenido en un lugar apartado y tranquilo había logrado que ambas alumnas consiguiesen concentrar y compenetrar sus esfuerzos para realizar la tarea de la mejor forma posible.

Con una pequeña sonrisa, se aproximó a la profesora. Era consciente de que el ungüento se podía mejorar, sí, pero, teniendo en cuenta las aptitudes de ambas estudiantes para la materia, aquello era para sentirse, por lo menos, algo orgullosas.

- Ya hemos terminado... - Le dijo a su tutora, mostrándole el bálsamo. Se notaba que tanto ella como su compañera lo habían preparado con dedicación, atendiendo a que no resultase demasiado denso, y, por consiguiente, pudiese resultar molesto para el Kneazle. 

Podría no ser perfecto, era cierto, pero al menos no perderían puntos.

AULA DE HISTORIA DE LA MAGIA

-Bienvenidos de nuevo, queridos alumnos. Por favor, por favor, tomad asiento en grupos de 3, a ser posible. - Esto lo decía Ulfric von Hoggen señalando a la clase, dado que en el aula… habían desaparecido los pupitres, se había quedado todo en unas mesas altas, con bancos altos, blancas, con unas cajas de madera que estaban en las mismas, cerradas. Mientras los alumnos se colocaban, Ulfric se puso a mirar un viejo libro que tenía en su mesa, y mirando a los alumnos. Una vez sentados, les miró con una sonrisa… ligeramente tramposa. Tenía una cosa preparada.
 

- Bueno, hoy no vamos a empezar con un examen, pero… si con una pequeña redacción. Que deberéis entregar antes de pasar a la segunda fase de la clase. - Los miró a todos, divertido nuevamente… y cogió el viejo libro de su mesa, encuadernado con cuero negro, y con unas cintas para cerrarlo, y lo abrió por la mitad. 

- Esta es una edición del Libro de los Muertos Egipcio. Es un antiguo compendio de rituales, de breves hechizos, de procedimientos, para llevar las almas al Otro Mundo. A todos debería sonarles, por cultura general. - Dijo el subdirector, mirándolos a todos con cierta exigencia. El conocimiento general era sobre lo que les iba a pedir la redacción, de modo que deseó profundamente que todos ellos tuvieran alguna idea sobre ese tema. - Pues bien, su redacción sobre conocimientos previos debería versar sobre el siguiente tema. Cojan todos pergamino, pluma, y anoten…- esperó a que todos hubieran cogido el material, y cuando vio que estaban listos, les dictó: - El título de la redacción es: “El Más Allá en Egipto, sus momias y el Libro de los Muertos”. Es bastante libre, comenten lo que saben, y, por favor, terminenlo en 20 minutos, que la actividad de después… es la interesante. - Se sonrió a si mismo, y se encogió de hombros mientras decía lo siguiente: - Estos pergaminos… no se entregan solos, así que… ¿me los traen, por favor, al terminar?
 

Dejó el profesor von Hoggen que los alumnos escribieran adecuadamente en sus pergaminos, mientras se paseaba entre ellos, haciendo breves comentarios a algunos de ellos sobre corrección de nombres, o de términos un poco más difíciles. Por otro lado, les iba animando cuando algunos se quedaban sin saber que decir, y dándoles algunas pistas de por donde avanzar… 

Cuando todos se levantaron y entregaron los pergaminos, el profesor adoptó un tono y una pose extremadamente seria, ligeramente severa, y con mucho aplomo, comenzó a explicar la segunda parte de la clase… 

- Saben que soy partidario de que la Historia se entiende cuando se puede entender a aquellos a los que estamos estudiando. Por tanto, tenemos que ponernos en aquel lugar y aquel tiempo. Pues bien. - Haciendo un gesto dramático, cogió una caja de piedra pequeña que tenía en la mesa, que parecía un pisapapeles grande… y la abrió. - Hoy momificaremos un escarabajo. Como este de aquí. - Lo mostró, seria y solemnemente. - Quiero que sepan que este es un proceso muy importante, magnífico, y el que no lo trate como tal, perderá puntos para su casa, y tendrá un severísimo castigo. 

- Si bien existe un modo de momificar “muggle”, que tarda más tiempo, diríamos que los hechizos permiten hacerlo de modo más eficiente y más rápido, además de más correctamente. Las instrucciones y los hechizos están bajo las cajas de madera que tienen delante. Realizarán la momificación de un escarabajo, que también está en el interior. Por favor- Su cara se tensó, se puso extremadamente serio, avisando a los alumnos de la importancia de lo que iban a realizar, y de las posibles consecuencias: -Extremad los cuidados, y respetad el proceso y los hechizos. Están transcritas las letras al alfabeto latino, y la pronunciación, con calma, se dice bien. Es un proceso que de salir mal, puede que los hechizos se os vuelvan en contra, y recibiriais una antigua maldición. Vosotros lo haréis con varita, cosa que los antiguos no, y lo haréis sobre un escarabajo, cuya alma es poco poderosa, pero debéis evitar fallar. En cualquier caso, o os ayudaré si sale mal, y evitaremos alguna maldición… Ya podéis comenzar… 

(INSTRUCCIONES - Son varios papiros, con los siguientes títulos): 

- 1- Extracción del cerebro. Procedimiento y hechizo. 

- 2- Evisceración. Ritual. 

- 3- Deshidratación. Ritual y hechizo

- 4- Vendaje. Ritual, procedimiento y hechizo. 

Clase de herbología, invernadero

Me puse roja como un tomate.  No sólo Beckia había escuchado aquel desafortunado comentario, si no que Randall podía estar metiéndose en líos por querer aclarar algo que realmente para mi no tenía importancia. Formaba parte de un mal entendido.

Estaba paralizada de la vergüenza, sólo podía mirar hacia la mesa.

-No…no pasa nada- expresé finalmente casi en un susurro tras lo que el Slytherin dijo- ha sido fallo mío, no tenía que haber dicho eso –expresé restando valor al error y mirando seguidamente hacia Beckia, ya que Lestrange había bajado la cabeza. Si es que esto me pasa por hablar e intentar...hacer...¿la gracia?

-Pero no se preocupe, sé lo importante que es la asignatura y vamos a ir ahora mismo a buscar todo lo necesario, lo solucionaré- esbocé una sonrisa un poco forzada por los nervios que sentía (no me gustaba ser motivo de equívocos y mucho menos llamar la atención), pues aunque no fuera nada malo, yo de por sí tenía facilidad para angustiarme.

Me levanté disponiéndome a hacer el trabajo de manera más silenciosa.

Esperaba que no hubiese represalias para Lestrange y que aquello saliera bien. Me concentré para dar lo mejor que pudiera. Adoraba las pociones aunque no lo pareciera y lo intentaría demostrar.

Y es que, aunque al principio estaba algo desorientada para buscar (casi se me resbalan los frascos incluso, pero sólo fue un susto), al final conseguimos hacer correctamente los ungüentos.

AULA DE HISTORIA DE LA MAGIA

Dana esperaba llegar antes de que el resto de sus compañeros llegasen, ya que quería solicitarle a von Hoggen un momento a solas al finalizar la clase. En la última, su actitud no fue precisamente buena, y la Gryffindor consideraba que debía disculparse con el profesor. Tuvo suerte de ser la primera en entrar en el aula, así que se acercó rápidamente hasta él con un ligero gesto de disculpa.

- Disculpe, profesor, me preguntaba si podría hablar con usted al finalizar la clase... - La joven no tenía vocación de historiadora, pero encontraba la materia sumamente interesante, de sus favoritas, de hecho, y entendía que podría haber dado las señales contrarias, o, incluso, ofender al profesor, quien, como se notaba, preparaba sus clases con mimo. 

Cuando hubo recibido la respuesta y la clase comenzó, buscó rápidamente a Daphne por la sala, y se aproximó hacia la Slytherin, quien había entrado a la clase con Ralph. Sin duda, junto a ambos jóvenes podría aprender grandes cosas, así que se propuso solicitarle que estuviesen ambas en el mismo grupo. - Hola, Daph, hola Ralph. Esto... b-bueno... tenemos que ponernos en grupos de tres, y... quizá... ¿podría ir con vosotros? -  Dijo con una sonrisa vergonzosa, se notaba que a Dana no le resultaba nada fácil pedir aquello, funcionaba bien con grupos establecidos por los profesores, pero tener que buscar ella misma a sus compañeros... era otro cantar. 

Tras esto, se sentó en uno de los pupitres, y comenzó a escribir su redacción, procurando hacer memoria de todo lo que sabía. 

El Más Allá en Egipto, sus momias y el Libro de los Muertos

La civilización surgida en las cercanías del río Nilo, conocida como Antiguo Egipto, estuvo, desde sus inicios, interesada en la vida después de la muerte. Según la religión egipcia, cuando el Khat , o cuerpo físico de una persona, moría, el Ib, o corazón de dicha persona era extraído por el dios Anubis, y contrapesado con la pluma de Maat en el juicio de Osiris. Si la sentencia era favorable al difunto, su Akh, o espíritu, podía vivir eternamente en el paraíso. En el texto funerario nombrado comúnmente como Libro de los Muertos... 

Cuando consideró que había terminado, le entregó el pergamino a von Hoggen, esperando que este considerase que su trabajo había sido lo suficientemente bueno como para obtener una buena nota.

Dana notó como el profesor adoptaba un gesto y una actitud más seria de lo normal, por lo que puso todos sus sentidos en marcha para prestar toda la atención posible a la explicación sobre la actividad que debían llevar a cabo. Al mismo tiempo que se sintió algo intimidada por las posibles consecuencias, la Gryffindor encontró la tarea más que interesante, y se ofreció para realizar los procedimientos que necesitasen el lanzamiento de algún hechizo.

- Dudo poder ser útil con la evisceración, he de admitir que soy bastante torpe... pero podría realizar los hechizos, si os parece bien. - Dijo con una sonrisa mientras sacaba su varita.

Linus saludó al profesor con un gesto de la cabeza y tras escuchar sus indicaciones tomó asiento junto a Anne, como no. Sin embargo se pedían grupos de tres y supuso que su amigo Randall ya habría escogido compañera. Una sonrisa se dibujó en el rostro del rubio. Miro a Anne esperando que fuese ella la que escogiese al tercero en discordia, a él no le quedaban más candidatos. Entonces se fijó en como Yllka ya venía hacia ellos, a la cual recibió con un gesto de cabeza. No se había fijado mucho en ella anteriormente, pero ahora que estaba con Anne habían interactuado más y le caía bien, sobre todo si sabía momificar  a un escarabajo.

De momento comenzó con la redacción, le gustaba el tema, pues él mismo hacía un par de días había dado la idea al profesor, por lo que ya había leído algo para aventajar a la clase.

(…) El libro de los muertos permitía recitar una serie de rituales que permitían el paso del alma del difunto al más allá. El juicio de Osiris era el más determinante de todas las pruebas que se tenían que pasar. En este juicio el corazón del difunto se pesaba en una balanza por el dios, para determinar si era merecedor o no de cruzar (…)

Al acabar se dio cuenta de que Anne le suplicaba con la mirada. Con un suspiró le paso lo que había escrito y comenzó de nuevo:

-(…) El libro por tanto, era una llave al más allá. Tras la muerte, la persona fallecida se despertaba en el “bajo mundo”, donde se enfrentarían a los distintos desafíos. El libro era el salvoconducto que permitía el paso entre las criaturas malignas, protegiendo al difunto con sus conjuros que la persona debía recitar a la perfección. La similitud de estas prácticas con las fórmulas de los hechizos que conocemos parece indicar el conocimiento, al menos de forma superficial, de algún tipo de magia, pudiendo ser los conjuros del libro hechizos reales (…)

Tras terminar su redacción y quedar satisfecho con ella (aunque tampoco era una maravilla él creía que sí) la entrego con decisión al profesor.

Cuando les enseñó la siguiente tarea se puso manos a la obra, no dudó un segundo en coger el escarabajo.

-Yo me ocuparé de la extracción del cerebro…- aunque lo cogía con respeto, estaba claro que no tenía manos de cirujano y cuando se dio cuenta de las miradas de sus compañeras lo dejó en la mesa para dejarlas actuar- Vale… pues de la evisceración- Sonrió con algo de malicia. Otra mirada de sus compañeras. Resopló- Vale, de la deshidratación.

Sacó su varita e hizo el hechizo indicado para cumplir la tarea, sin duda le habría gustado más hacer cualquiera de los otros pasos. Aunque viendo cómo se desenvolvían sus compañeras dudó que él lo hubiese hecho mejor. Aunque esto último no lo iba a mencionar.

Como ya es una costumbre, ingreso al aula junto a Linus mientras saludo al Profesor con la mano y una sonrisa. Desde que hemos compartido una conversación después de clase, está claro que ambos tenemos un concepto muy diferente el uno del otro. Una vez ubicada al lado de mi novio, voy sacando del morral los pergaminos y la pluma, dispuesta como de costumbre a centrarme en la clase y comprender lo que se está explicando. 

Después de todos los lineamientos a seguir, estoy en ese instante donde tengo que redactar algo y no tengo idea alguna de que poner, así que comienzo mi petición con morritos hacia el rubio y le susurro al oído unas palabras. Y mientras aguardo para ver qué diantres escribo, leo lo que está escribiendo Linus. Es un genio, de alguna manera me roba una sonrisa pura de satisfacción y rápidamente comienzo a escribir lo que me ha pasado. 

“El Más Allá en Egipto, sus momias y el Libro de los Muertos”

El libro de los muertos permite recitar una serie de rituales que conceden el paso del alma del difunto al más allá. El juicio de Osiris era el más determinante de todas las pruebas que se tenían que pasar. En este juicio el corazón del difunto se pesaba en una balanza por el dios, para determinar si era merecedor o no de cruzar (…)

Ya al terminar lo indicado, acaricio su mano por debajo del pupitre y sigo con lo mío. Esta vez toca hacer grupo y obviamente nos falta un integrante, así que llamo a mi amiga para que comparta con nosotros esto. También le hago morritos para que lo acepte así sacamos la tarea entre los tres y no terminamos malditos. 

- Ya veo... Yo me encargo de la parte mágica... - digo al morder mi labio inferior, tranquilamente podría conjurar un specialis revelio y comprobar si las palabras del Profesor son ciertas, eso me llevaría a tener un - 100 en Slytherin. La cuestión es que si fallamos, tendremos la maldición encima. Algo muy osado, y al ser una estudiosa de ellas, me sorprende que el Profesor se arriesgue a que terminen sus alumnos malditos o perdidos bajo el influjo de la misma. Alzo una ceja, con varita en la mano y voy pensando mientras contemplo fascinada el escarabajo. - Hm... ¿Cuál será? - me pregunto en medio, más razones para viajar a Medio Oriente y es evidente que un brillo especial en mis ojos se revela. 

Daphne se sintió orgullosa y sonrió ante el halago de la profesora de herbología, no queriendo defraudarla y realizar una buena elaboración del ungüento y esencia para restaurar las heridas del Kneazle. No pudo evitar reprimir una sonrisa ante el comentario velado de Linus al ver como Ralph obtenía 5 puntos por enumerar las plantas, pero tampoco le dio mayor importancia, por qué lo realmente importante era el trabajo que se llevaban entre manos. Si hacían el mejor remedio para la criatura, probablemente sería ese el que se emplearía, por lo que los puntos para la casa Slytherin llegarían por partida doble.

Daphne había escuchado con atención los apuntes de Linus, asintiendo ante algunas de sus sugerencias. La Kava podía ser perfecta para calmar y sedar lo suficiente a la criatura sin que se sintiese violentada, pudiendo incluir unas pocas semillas de adormidera en la mezcla que deberían machacar hasta reducir todo a una papilla, tras disolver con agua. Mezclarla con la comida del animal aseguraría que la tomase sin problemas al camuflar el sabor y olor. Por otro lado, una vez dormido el animal, limpiarían la zona dañada con gasas esterilizadas en las que incluyesen el ungüento que iba a elaborar Linus, a base de lavanda, laurel y una solución de yodo, lo que favorecería la limpieza de la zona. Usar el Tergeo podría ser una solución eficaz, pero tal y como había mencionado la profesora, quizá no siempre podrían hacer uso de la varita para todo.

- ¿Cómo vas con la recogida de las plantas? ¿Encuentras todo lo necesario? - y entonces vio que su compañero estaba teniendo algunos problemillas con dos plantas enredadas. Daphne habría reído en otro momento, pero deseaba que su compañero obtuviese los puntos, por lo que demos ocurrió usar el hechizo que habían aprendido en el Ministerio, perfecto para ese tipo de situaciones. ¡Potentiator Buscar! Susurró haciendo agitar la varita, para rápidamente ayudar a su compañero y terminar de encontrar las plantas que necesitaban. Anda, te echo una mano...

Ya con el díctamo entre sus manos, no le fue en extremo complicado realizar la elaboración de la esencia, y al ver que Linus había terminado por completar el ungüento eficientemente, le sonrió con afecto. No había ido mal la experiencia al final, y podían decir que pese a no ser el equipo perfecto, si que habían sabido complementarse y alcanzar el objetivo propuesto.

- Bueno, al final creo que lo logramos, ¿No crees? Ejem, buen trabajo y eso... - y terminó guiñándole el ojo, no pudiendo evitar sacar de su mente las imagenes como había estado apurado y lleno de tierra. Aun tienes tierra y algunas ramitas sobre la túnica... Daphne terminó por sonreír.

- Me ayudas y te lo compenso muy muy bien. - susurro en la cercanía de su oído, rozando ligeramente con mis labios la zona. 

CLASE DE HERBOLOGÍA

Ralph casi no escucha la opinión de su compañero, que había hablado tan bajo que dudaba que nadie le hubiese escuchado.

Kava, Lavanda y Díctamo con Aloe Vera. Claro, supongo que es más eficaz que la leche de Amapola. ¡Vamos!

Le concedió. Probar cosas diferentes siempre le gustaba y aunque conocía de memoria la preparación de la leche, su opción era bastante más completa y además la profesora había dictaminado que no se podía usar magia. Se fijó en que había colocado las tres hierbas bien separadas, con lo que ya podían trabajar en ello sin problemas. Sólo esperaba que les diese tiempo.

Miró a sus compañeros, algunos se habían hecho un lío con las plantas y quiso ayudarlos, pero no tenía tiempo para tanto ya.

HISTORIA DE LA MAGIA

Aquella clase le gustaba a Ralph, le gustaba bastante. Probablemente era a causa del profesor, quien daba un enfoque tan práctico a sus lecciones que era imposible no sentir la historia penetrando tu ser en cada momento. Entró con ánimo a la clase, saludando con una leve inclinación a todo el mundo, hasta que comenzó la faena. Se preguntaba con qué les sorprendería aquella vez el profesor.

Y vaya si fue una sorpresa, el mítico Egipto y las Momias. Un tema del que Ralph podría estar hablando durante horas sin cansarse y sin que lo interrumpieran. Sonreía, quería dar lo mejor de sí mismo y se había olvidado de la multitud de otras personas que habían presentes. De hecho, ni le importaba demasiado aquello de los grupos. Por ello en cuanto Dana se acercó para proponer un grupo asintió sin dudarlo.

Miró entonces a ambas chicas y levantó una ceja divertido. Se preguntó si él tendría sangre de gato o algo similar. Que aún siendo una coincidencia, era curiosa y divertida.

Será un placer colaborar de nuevo, Dana.

Aquella chica estaba cayéndole mejor desde que comenzaron el curso y comenzó con la redacción, hasta que escuchó el comentario sobre la evisceración, haciendo que levantase la mirada del pergamino que estaba escribiendo.

Por mí sin problemas. De ser necesario mi habilidad con la medicina no es mala, pero tampoco es buena. Posiblemente -inspiró- a Daphne se le de mejor que a mí.

Miró hacia la última citada y sonrió, esperando su respuesta. Se centró en regresar al texto, pero era tarde, tenía la mente embotada y en otras cosas, dudas que no le permitían concentrarse bien, lo cual mermó el énfasis con el que el muchacho había comenzado las clases.

... y muchos de los dioses a los que adoraban tenían que ver con la muerte, pues para los Egipcios era sólo un paso del que aprender, un paso con tantos aspectos como divinidades. Es por ello, y porque cada divinidad era más o menos adorada según el poder político de la ciudad que algunos piensan que en realidad se trataba de Magos.

Suspiró y con ambas manos revolvió sus cabellos. Así era complicado concentrarse.

CLASE DE HERBOLOGÍA

Todo lo que apuntaba Altair le parecía óptimo a la Raven, al fin y al cabo herbología no era su punto fuerte y seguro que un punto de vista como ese iba a resultar mejor que cualquier aportación propia y decidió seguir los pasos de Altair acompañando todo lo que pudiese e intentando sugerir lo poco que podía. Poco a poco le fue cogiendo el tranquillo y la ayuda de sus dos compañeros hicieron que la chica estuviese contenta con el resultado.

CLASE DE HISTORIA DE LA MAGIA

Tocaba otra de las asignaturas que durante el curso  Yllka había tomado cariño gracias a que el profesor las hacía amenas y entretenidas. Mientras iba por los pasillos camino a la clase repasaba mentalmente que no hubiese olvidado nada, incluída su escoba. Era aparatoso ir siempre con ella a cuestas y algunos se burlaban de su enferma manía pero Yllka siempre que podía se escapaba a dar una vuelta en escoba y no podía perder tiempo en ir a buscarla cada vez.

Entró y escuchó con atención al profesor, con interés además pues lo que oía le resultaba realmente interesante hasta el punto de querer poner empeño de verdad en la redacción pese a no conocer gran cosa sobre el tema, se acercó a sus amigos con complicidad y una sonrisa y después procuró recordar algo que en su día le hubiese llamado la atención cuando lo leyó años atrás y comenzó a escribir todo lo que pudo. Al terminar no pudo evitar ver que era un puro desastre pero al menos lo había intentado.

La naturaleza del más allá que disfrutaban los fallecidos es difícil de definir, sobre todo por las diferentes tradiciones dentro de la antigua religión egipcia. En elLibro de los muertos"los difuntos eran llevados ante la presencia del diosOsiris, deidad confinada en laDuat" del inframundo. Había sortilegios destinados a que el Ba o el Aj del fallecido se unieran a Raen el viaje por el cielo en su barca solar y le ayudara a luchar contraApep.

Hora de colaborar entre los tres. Esperó a que Linus acabase su parte y Anne hiciese lo mismo. Le tocaba y en su mente solo podía pensar en la palabra maldición, tragó saliva y se puso a ello.

- Por favor, por favor, por favor...- susurraba mientras hacía su trabajo. - Mierda... - sentenció mientras miraba a los ojos a ambos compañeros.

CLASE DE HISTORIA DE LA MAGIA

Si había algo que ese año la había sorprendido eran las clases de Historia, con los nuevos métodos, prácticos y entretenidos que Ulfric les ofrecía, todo era mucho más sencillo, interesante y ameno.

Entró a la clase con Lauren como siempre, y saludó a su primo con la mano y una gran sonrisa, aunque cuando estaba en clase eran solo profesor y alumna, cada vez le costaba más hacer aquel papel y dejar a un lado el enorme cariño que sentía por él.

-¿Vamos juntas? – le preguntó a Lauren cuando les indicó que debían hacer grupos de tres y señaló hacia Altair que acababa de llegar, - podemos ponernos con él si quieres. – y sin esperar respuesta de la rubia saludó al chico con la mano y le hizo señas para que se sentara a su lado.

Escuchó las instrucciones del profesor y procedió con la primera parte de la clase: la redacción.

“El Más Allá en Egipto, sus momias y el Libro de los Muertos”

(…) Los egipcios también creían que el cuerpo y el alma eran importantes para la existencia humana, tanto en la vida como en la muerte. Sus usos funerarios, por ejemplo la momificación y el amortajamiento en tumbas, pretendían ayudar al difunto a encontrar su camino hacia el más allá. Las tumbas eran rellenadas de alimentos, de herramientas, de artículos caseros, de tesoros,...todas las cosas esenciales para garantizar la vuelta del alma en el cuerpo con el fin de que el difunto viva feliz durante toda la eternidad. (…)

Suspiró, realmente no era muy buena y no sabía si lograría aprobarla, pero escribió todo lo que sabía o lo que en ese momento recordaba, asi pues, fue hasta la mesa de Ulfric y depositó allí el pergamino.

Llegó la segunda parte de la clase y escuchó cada palabra de Ulfric, mirando la caja que tenían delante y tomando las instrucciones en sus manos, de forma que sus dos compañeros, sentados cada uno a un lado de ella, pudiesen leerlas también. Suki se llevó un dedo a los labios, no sabía si sería capaz de realizar aquella complicada tarea a su parecer, y encima se jugaban el recibir una maldición, pero tampoco fue muy optimista en herbología y sin embargo, gracias al trabajo en equipo con Dana lo habían logrado.

-Bien… ¿cómo hacemos? Podría encargarme de los rituales y vosotros de las partes mágicas si os parece.. como queráis.

La última clase de Historia de la Magia fue realmente distinta a lo esperado, quedando Daphne gratamente sorprendida de lo ameno e interesante que había resultado hablar de los guerreros azules, las máscaras rituales de los druidas celtas, y poder observar las marcas que aparecieron en el cuerpo al colocárselas, sacando a relucir la naturaleza del Patronus de cada cuál. La joven no sabía que les depararía esta siguiente clase, pero si el subdirector Von Hoggen ya les había sorprendido la otra vez, ¿por qué no esperar algo similar en la clase de aquel día?

Cualquiera que observase el rostro de Daphne podría advertir que se mostraba más contenta y relajada que los días anteriores, lo que a cualquiera le podría hacer pensar, y no estaría equivocado, que poco a poco estaba superando el desagradable suceso acontecido en el baile de Navidad, el de contra su voluntad fue secuestrada. Sin embargo, un nuevo detalle también podía darse de manifiesto, y es que el fuerte distanciamiento y animadversión con Ralph se había reducido considerablemente, percibiéndose que eran bastante más cercanos el uno con el otro. 

Cuando Dana les propuso hacer grupo, asintió sin muchas contemplaciones, dado que la Gryffindor había ido ganándose con el tiempo una buena relación con la Slytherin.

- Claro, sin problema. Sentémonos juntos en ese banco y veamos qué sorpresa nos tiene preparada hoy el profesor Von Hoggen... - les comunicó animádamente, al tiempo que empezó a sacar sus libros, papiros, tinta y pluma. ¿Egipto? ¿Momias y el más allá? Esto promete!

Cuando Ulfric les hizo realizar la redacción, Daphne bufó porque en verdad hacia bastante tiempo que no leía sobre el tema, y probablemente sus conocimientos estarían un tanto dispersos, pero aún con todo lo hizo lo mejor que supo y tampoco consideró que su redacción fuese a ser una decepción. Un extracto de su texto rezaba...

(...) se buscaba mediante textos que el difunto pudiese desplazarse libremente, tanto por el cielo como por los espacios que componen el Más Allá. Los encantamientos le otorgarían todos los conocimientos necesarios para ello: las palabras mágicas, secretas, que debería de pronunciarle a los monstruosos guardianes que guardan las puertas, de enormes y afilados cuchillos, para que le dejen pasar, o los nombres de las partes de los barcos que le permitirían cruzar las aguas del Inframundo o surcar el cielo a diario (...)

La parte práctica de la clase si que logró captar la atención de la joven Fowle, debiendo los tres completar un ritual funerario de momificación en un escarabajo, siendo posible que si lo hiciesen mal, una maldición les afectase. Daphne aceptó el desafío con una sonrisa traviesa, y tomando de los hombros a Dana y Ralph, los motivó a empezar a organizarse.

- Me parece perfecto lo que propones Dana, tú podrías encargarte de recitar los conjuros de los distintos pasos del ritual, y entre Ralph y yo nos encargaremos de sacar el cerebro, eviscerar, deshidratar y vendar al escarabajo. ¿Preparados?

​​​​​​Ralph era sumamente inteligente y rápidamente fue capaz de determinar e indicar dónde realizar las incisiones, que Daphne no dudó en realizar en el coleóptero. A diferencia de los humanos, el sistema nervioso de los escarabajos era mucho más primario, pequeño y alargado, por lo que las incisiones fueron longitudinales desde el extremo apical al basal, y que al cortar emitía crujidos que sonaban bastante siniestros, pero que no les coaccionaron a continuar. Dana realizó perfectamente los hechizos y conjuros que venían descritos en el libro, y no tardaron en completar la primera de las partes del proceso. Después fueron sacando una a una las vísceras de la criatura, y no fue hasta que llegaron al tercer paso, la deshidratación, que no fue menester que Dana volviese a conjurar nuevos hechizos mágicos. La última parte del ritual consistía en vendar con finas vendas el artrópodo, en las cuales los tres colaboraron para escribir las palabras que le permitiría el renacer en la otra vida a la diminuta criatura. 

- WoW, esto ha sido bastante extraño, inspira bastante respeto, la verdad. Sin embargo, tengo la impresión de que lo logramos, chicos. - y los tres levantaron la vista para ver cuál sería el veredicto del profesor Von Hoggen. Al menos de momento no parecían estar malditos ni que les hubiesen crecido antenas o extremidades articuladas...

Llegaba a la clase de historia conversando con su amiga, tomadas del brazo pero solían hacerlo, un chico le tocó el hombro a Lauren y le preguntó algo ella asintió y siguió dentro del salón para comprobar que esa clase volverían a experimentar algo distinto. Muy distinto. Lauren asintió a Suki, irían juntas, como no y señaló a Altair, afortunadamente las cosas con el chico habían tomado un mejor caris y se acompañarían en lo que sentían, así que pronto buscaron un lugar donde ponerse y descubrir que abrirían a un escarabajo, o mejor dicho, lo secarían. 

Lo que no escapó de los ojos claros de la ravenclaw fue el libro que el profesor tenía, era negro y causó curiosidad en la chica, ese terrible mal que siempre la aquejaba y que la metía en problemas. Siguió con atención las indicaciones del primo de su amiga, sin embargo la idea de abrir al animal le produjo un creciente repelús sin embargo era parte de clase y debía hacer sus deberes. 

Con el pergamino en mano, comenzó a escribir, debía reconocer que en Historia no era muy buena, no era algo que la apasionara pero ahí estaba, escribiendo lo que había conocido sobre el Libro de los Muertos egipcio. 

“El Más Allá en Egipto, sus momias y el Libro de los Muertos”

Los textos del Libro de los Muertos son de muy variada índole, pero siempre relacionadas con invocaciones o salvoconductos para que el alma del muerto pueda unirse al sol en su viaje y no quede en las penumbras eternas, por lo mismo, está confirmado por cánticos o fórmulas que luego eran seguidas por sus correspondientes palabras mágicas o textos que señalaban lo que el alma del muerto debía hacer ante el juicio de los dioses y el peligroso camino que lo llevaba ante ellos. Destacan especialmente las invocaciones relacionadas con el corazón, como, por ejemplo, para que este órgano no testifique contra su dueño durante el juicio de los muertos, en el que se valora si se es digno o no de disfrutar de una existencia eterna tras la muerte. Y son constantes los hechizos destinados a proteger al muerto de animales peligrosos y de algunos de los habitantes del Inframundo.

Luego de escribir, justo después de Suki, va donde el profesor y entrega su trabajo, no está contenta, sabe que no ha logrado un buen rendimiento.

Ya de vuelta en la mesa, luego de terminar el examen sorpresa, tocaba la parte de abrir al pobre insecto. Lauren se sienta entre sus amigos y les sonríe. 

— ¿en realidad quieres hacerlo? — le pregunta con un evidente tono de duda, pero luego pone su mano en su hombro — está bien, lo haremos así, Altair, usarás la varita y yo iré leyendo los rituales para ir haciéndolo lo mejor posible ¿le parece? — se acomodó las gafas redondas que usaba y se agachó para buscar las instrucciones bajo las cajas con los rituales y conjuros que el profesor había dicho, cada cosa debía ser retirada con una gran habilidad y debía procurar no fallar. Pero era difícil, aunque por ganas no se quedarían atrás.

— bien, lo primero es la extracción del cerebro, bien aquí dice que debe ser con cuidado por uno de sus orificios... — miró al escarabajo, no sabía, cual seria la verdad, — y se debe sacar tal como si sacaras un caracol, con cuidado, sin romper su frágil exoesqueleto — le mostró el pergamino a su amiga mientras le hacía el gesto, lo mismo hizo con los demás procedimientos, como el sacar las viseras pero... ¿cómo iban a saber cual era el corazón o el páncreas o si el escarabajo tenía esas cosas? así que debieron armarse de valor y empezar. 

AULA DE HISTORIA

Poco a poco me estaba acostumbrando a este giro de tuerca y bueno, sabía que, con algonde suerte hoy sería mejor que ayer, pero cuando vi el horario de clase, no pude más que enarcar una ceja y maldecir por lo bajo, ya sea en Ámerica, Asia, África o Europa, la historia siempre sería historia, un conjunto de libros viejos sobre mucha gente muerta, en Uagadou al menos tenía a Afogutu para echarme unas risas y a Kali para que nos jale las orejas, pero aqui aún no habia podido estrechar vínculos con nadie.

Con suerte, esta tarde, finalmente podría quedar con mi primo para algo y quizá con Lauren, si es que gustaba acompañarnos, al menos ahora que había comprobado que ella estaba tan afectada por lo de Tyler como yo, pues creí que podríamos acompañarnos en nuestro duelo.

La clase de historia en Uagadou no era de mis favoritas, aunque la voz de urraca del profesor Scotch, sí que me daba material para hacer reír incluso a Kali.

El profesor Von Hoggen era  muy distinto a Scotch, sin embargo su asignatura era la misma y tenía en claro que, sin importar lo que hiciera, difícilmente lograría captar mi atención en la materia.

Buen día profesor. - digo a modo de saludo mientras ingreso al aula con la misma agilidad de un caracol reumático.

Nuevamente tocaba trabajar en grupo, así que observe el salón en busca de alguien con quien trabajar, hasta que la voz de Suki llamó mi atención, proponiendo quebtrabaje junto a ella yba Lauren, así que asenti y me ubique junto.a ellas mientras el profesor nos mostraba un ejemplar del libro de los muertos, ese texto me resultaba bastante familiar, pues más de una vez había dormido sobre sus páginas en la biblioteca de Uagadou.

El progesor nos pidio que hicieramos un ensayo.sobre la momificación y bueno pues, tocaba lanzarbtinta sobre el pergamino.... el tiempo límite era muy breve, así que hice las cosa lo mejor que pude.

El Libro de los Muertos

Este antiguo tomo contienenlos secretos de la vida y la muerte, así como los ritos preparatorios para que el alma llegue lo más ligera posible al juicio de Anubis.

Los muggles consideram quenla mayoría de ritos contenidos en el mismo son de maturaleza religiosa, cuando lo cierto es que sólo el 10% del mismo tiene contenido religioso, lo ciertones que es uno de los tratados de medimagia más antiguos que existen.

De acuerdo a sus páginas, el proceso de momificación cumple un doble rol, uno científico y otro religioso, pues gracias a la extracción de los órganos, los medimagos de la antigüedad pudieron tener una mejor comprensión de como trabajaba el cuerpo humano.

Terminado el ensayo, me acerco al pupitre del profesor y dejo mi trabajo sobre el mismo. - Disculpe la mala calidad del trabajo profesor, espero lebresulte aceptable, historia nunca ha sido mi fuerte. - confieso mientras me alejo del pupitre sólo para escuchar que el profesor nos estaba pidiendo que realizaramos una momificación.

En ese momento, mis ojos se abrieron como platos y, por primera vez en siete años, tomé verdadera atención a una lección de historia, la expresión de mi rostro cambio y en ese instante me dirigí a mis compañeras.

Chicas, se los ruego, permítanme a mi hacer los encantamientos, sé que puedo hacerlos correctamente, en Uagadou nunca nos dejaron hacerlos, pero nontengo duda quebpuedo lograrlo con facilidad. - digo poniendo ojos de borrego.

Tras un leve momento de duda, las chicas me dieron subpermiso para probar los encantamientos y lo que sucedió luego fue simplemente épico.