Mientras se llevaban al mago, el gobernador se llevó a la comandante aparte, y le comentó rápidamente:
- Esperemos a que el asunto con la galera amniana esté resuelto antes de interrogarlo. Que se quede un hombre de guardia vigilándolo mientras tanto.
Después miró de reojo a Amiël, quien tenía la misma postura que un gato que se estuviera relamiendo con anticipación.
Orlamm quiere interrogarlo esa misma noche. Quiere averiguar más cosas sobre el origen de la mezcla alquímica, de como se activa y desactiva y de los trucos mágicos para escapar que pensaban utilizar. Usará la diplomacia y las amenazas.
- Yo también lo espero, gobernador Doranin. Lamento el espectáculo, pero no podía arriesgarme a que ese hombre encontrara alguna manera de salir de aquí antes de ser apresado. - dijo la mujer, torciendo el gesto. Brynhildr captó la mirada de Valeus hacia Amiël y también miró a la consejera popular. - No sé el trato que tiene con ella, pero si no está muy seguro de eso podría encargarme de hablar con ella y dejarle claro el asunto para intentar que nos deje en la mejor posición posible respecto al resto de la colonia... -
- Lo que tengo claro es que esta decisión va a tener parte de consecuencias negativas en todo esto. Aun así, es un mal necesario. -
- Está bien.- dijo el gobernador Doranin.- Ya nos ocuparemos de este asunto más tarde, no quiero entretenerla más, seguro que tiene que organizar la defensa contra la galera de Amn.