Partida Rol por web

Freddy atravesó la última puerta y vio a dos demonios. Entonces recordó todo lo sucedido con sus ataques y comenzó a temblar mientras le insultaban.

No sabía que debía hacer en ese momento.

Los demonios se empiezan a reír y te arrojan de la habitacíón.

Freddy intentó volver y enfrentarse a los demonios, pero no es capaz. Debería esperar para pasar esta prueba, quizá el próximo día pudiera completarla.

Cuando decides regresar te encuentras en una sala redonda en dónde Artemis te espera algo desconcertado.

¡Eh! Freddy, si que te tomaste tu tiempo para bajar, aunque me temo que no hay nada de utilidad aquí. 

Salvo por la estatua de Gryffindor, la sala está vacía, ya la revisé de cabo a rabo. - digo algo decepcionado.

- No superé todas las pruebas - dijo entristecido Freddy. -Creo que tendré que volverlo a intentar mañana-

Por un lado no quería contar su fracaso, pero su compañero merecía saber lo sucedido. Y quizá tuviera alguna idea para superar esa prueba. - ¿Cómo puedo dominar mi miedo a pasar entre dos demonios maleducados?- terminó convencido

Pruebas ¿Qué pruebas? - pregunto confundido.

Vamos Fred, no te cortes, cuéntame ¿Qué pasó? Vamos no te cortes.

- De acuerdo - comenzó Freddy - Cuando bajamos Alastor Muddy se me presentó para realizar unas pruebas. Eran tres puertas. En la primera tuve que enfrentarme a la amenaza de Lord Voldemort, en la segunda llevar una copa a través de un camino y conseguir llegar al final sin derramarla mientras algunas vivencias me ponían en tensión. Por último, la prueba que falle, fue enfrentarme a dos demonios que me insultaban. No conseguí dominar el miedo. - terminó.

Se sentía apesumbrado y algo avergonzado. Había superado las primeras pruebas  sin demasiadas dudas pero la última, que parecía la más fácil, se le había resistido.

¡Vamos! ¿Por qué tan cabizbajo? Dos de tres no está mal, incluso te enfrentaste a Voldemort y venciste. 

No te sientas mal Freddy, ya verás que la próxima te irá mejor. No por algo él te escogió a ti. - digo señalando a Gryffindor.

Bueno, será mejor que nos apresuremos o nos perderemos el Quidditch. - agrego con una sonrisa.

Y en cuánto a esos demonios ya encontrarás la forma de vencerlos y decirles sus verdades. Jejeje. Yo siempre voy a apoyarte amigo mío.

Freddy asintió a su compañero y le siguió, más animado, a las pruebas de Quiditch. - Tendrás que dejarme tu escoba - le dijo con una sonrisa en la cara.

No te preocupes, además es lo menos que puedo hacer para honrar a tu escoba que se sacrificó como toda una heroína. - bromeo mientras me preparo para correr escaleras arriba.

Freddy intentó de nuevo superar la prueba de los demonios, algo tembloroso.

Una vez ante los demonios,quienes  nuevamente intentan hacerte dudar de tu capacidad, tu te paras firmemente ante ellos y una serie de respuestas mordaces empiezan a salir de tu boca.

- Uy sí, miren quien lo dice, el demonio miedica que no pudo con un atado de criajos prepubertos que le patearon la cola y el otro gran señor infernal que no es capaz de vencer a un simple eco del pasado.

No señores, ustedes ni siquiera valen mi tiempo y les diría una que otra cosa más pero se me hace tarde para el almuerzo así que mejor se me van esfumando y regresan llorando con su papá Kronos antes de que me ponga serio y saque la varita para repartirtirles ostias como panes en mañana del domingo.

Nunca supiste de dónde vinieron las palabras, sólo fluyeron de tu boca como una marea de llamas y finalmente ante ti se hallaba nuevamente la estatua de Gryffindor con su varita en la mano.

Adelante muchacho, te la has ganado, aquí tienes mi llave, sólo debes encontrar las otras tres y lograrás encontrar el corazón de Hogwarts. - dice el fundador mientras la estatua baja el brazo y te ofrece su varita.

Freddy, con una reverencia, agradeció a Gryffindor su ayuda.

- Honraré el escudo y usaré la varita para proteger la escuela - dijo convencido. Debía hablar con sus amigos para encontrar el resto de las llaves.