Partida Rol por web

Cuando recobro la consciencia, me percato que me encuentro en la enfermería en compañía de Jackie, quien me está tomando la mano.

Jackie ¿Cómo llegamos aquí? ¿Te encuentras bien? - pregunto un tanto confuso.

Mi cabeza me daba vueltas, todos mis recuerdos estaban hechos un verdadero caos, una sucesión de imágenes inconexas, las mismas que me estaba costando un poco ordenar adecuadamente.

Tras tanto tiempo que parece haber pasado toda una noche sujetandole la mano, el bravo Artemis recupera el sentido. Un alivio, ya que todo este tiempo Jackie estaba preocupada. No sabia si volvería en sí, y si otro miembro del clan Flanel acabaría mal por su culpa.

Todo este tiempo le ha recordado a su padre, el señor Victor Flanel, cuando salvó a los estudiantes del Instituto Warren.
Quizá inspirado por él, ella estaba dispuesta a aguantar todo el dia y toda la noche si hiciera falta.

"Lo logramos" dice con una voz que más bien parece cálido susurro "Era un ser muy poderoso, pero con tu hechizo, lo hicimos. Y ahora te debo una... otra vez más, Artemis. Sin tí ahora seguramente mi alma estaría en manos de este ser"
Ella no alza la voz. Quiera que no, este lugar es una enfermería así que mejor no ponerse a gritar, a dar saltos sobre las camas y a tirar confetti.

"Pero esto no ha terminado. Bucón te ha declarado la guerra. Por algún motivo sabe lo que estás haciendo, que estás preparandonos más allá de los límites normales. Y quiere acabar contigo" le confiesa
"Se ha hecho pasar por un estudiante llamado Nocub... Y si me ha manipulado a mi, quien sabe a cuantos más habrá intentado "

"Parece que estamos fuera de peligro, por ahora"

Así que Bucón, en verdad soy muy popular entre los demonios, vaya suerte la mía. - digo con una sonrisa irónica.

¿Qué sabes de este tal Bucón? ¿Acaso es el demonio de la risa, la amistad y los arco iris? - pregunto con cierta resignación, conociendo de antemano la respuesta.

Estoes exactamente lo que necesito, otro loco intentando acabar conmigo. - pienso con indignación.

Jackie le cuenta acerca del demonio Bucón, acerca de cómo se le acercó, bajo la guisa de un estudiante llamado Nocub. Le prometió curarla a ella de su maldición y a su madre de su demencia "¡Y menudo estropicio me ha hecho con la cara! Hay un motivo por el que sigo llevando la careta".
De cómo ella no es la única al que ha manipulado... porque si Lex Mengele parecia una serpiente con piel de niño, ahora ni siquiera eso tiene, estando lleno de escamas.

Y le cuenta lo más importante: Intentó atacarle a través de ella. Intentó hacerle beber una poción llamada "Beso del Demonio" diciendo que era para ayudarle a que él, Artemis, se sintiera mejor, pero el profesor me la descifró primero y... bueno

"Sea lo que sea, este ser tiene MIEDO. Miedo de acercarsete. Miedo de tus poderes. Es eso, o directamente no puede"
"Y será mejor que tenga miedo tambien. Porque no voy a dejar que te haga daño, aunque me tenga que dejar sangre, sudor y lágrimas"
 

"Artemis, este ser tiene unos planes nefastos. Y si tu tienes una forma... y un plan para plantarles cara, cuenta conmigo. No quiero un mundo en el que los demonios campen, haciendo de las suyas"

Decidida, ella se levanta de la silla, aunque sigue frente a él

De pronto una sonrisa se deibuja en mi rostro, una que no refleja alegría sino nerviosismo.

En verdad quisiera ser el héroe que tu quieres que sea, pero la verdad sea dicha, no soy esa persona, a penas soy un chico de trece años cuyo principal talento es la hechicería, pero no tengo nada más que eso. - digo un tanto nervioso.

Aunque tal vez ella pueda ayudarnos, desde que me concedió su poder, nunca lo he usado y siempre lo he guardado en secreto, sólo Hellen sabe de eso. - confieso mientras sopeso las posibilidades.

Tal vez ella pueda darnos las respuestas que buscas, pero no quiero confiar en su poder, su fuerza es grande, casi tanto como lo es su capacidad de engañar a otros.

De pronto dejo escapar un gran suspiro.

Ante lo que ha comentado Artemis, Jackie se rasca el cabello, intentando colocar las piezas de este acertijo.

Aunque este colegio es un lugar mágico, los ultimos asuntos le parecen una maldita partida de Poker de Texas¹, en el que hay cartas ocultas, y cartas volteadas que nadie conocerá hasta el final de la partida.

"¿Quien es Ella? ¿Helga CaraAcelga?"
"Como sea, no te confundas, Artemis. El señor Potter no eligió lo que le ocurrió en Godric Hollow. Pero el si que eligió que pasos quería seguir. Igual que yo no elegí nacer... así. Pero eligo vivir cada día"

"Y por lo que sea, tanto Buc como parece que Chrono tienen un interés... o un miedo en tí. Cuando la luna de sangre, te necesitan fuera. Así que sólo por eso, no voy a fallarte"

No te equivoques Jackie, puede que Bucón tenga interés en mi, pero Kronos, dudo que me vea más que como una mera molestia.

Por lo que se de él, sus poderes no tienen límite, investigué un poco para ver que podíamos hacer contra él pues a menos que encontremos su ancla, no hay forma de hacerlo volver al infierno a menos que él quiera. - confieso con resignación.

Si él lo deseara, podría abrir varios portales al infierno y traer una horda interminable de demonios a la tierra. Por favor no le digas esto a nadie, no.quiero que los demás pierdan la esperanza.

Me tomó tiempo encontrar la forma de lidiar con Kronos, aunque al final todo parece inútil a menos que encontremos su ancla a este mundo. - añado cabizbajo.

"Espera... ¡Quizá SI haya una forma de conseguir esa respuesta, Artemis!"
"Hay un sitio donde puedes conseguir lo que buscas. Si tienes esperanza, si tienes intención..."

"Vamos ¡ven conmigo!" dice sacándolo de la cama

(Si llevaba pijama, o si está en calzoncillos y Jackie se tiene que dar la vuelta, avergonzada, eso es ya cosa del narrador :p  )

Escucho con calma y esperanza las palabras de Jackie, por lo que me pongo de pie, notando que llevo la camisa abierta, drjando expuestas sus múltiples cicatrices.

En serio madame Pomfrey tiene una fijación con mi camisa, de un modo u otro casi siempre termino sin ella cuando llego a la enfermería. - pienso al tiempo que empiezo a abrochar los botones de la misma.

Tras recoger mi túnica y calzarme los zapatos, mientras me pongo de pie un tanto cansado, pues pese al descanso y los cuidados de madame Pomfrey.

Estoy listo. ¡Vamonos Jackie!

Dolorida y aguantandose el brazo retorcido, Jackie entra en la enfermería

"Señora Pomfrey... AU!"
"Por favor, ayudeme. Me he dislocado el brazo"
 

La pobre de Jackie llega con su extremidad doblada de una forma antinatural, y con unos efectos claramente mágicos. Le duele mucho, MUCHISIMO, pero arrogantemente intenta no llorar.

Bueno, intenta no llorar MUCHO.

Visto que la enfermera no le hace caso, empieza a disgustarse, a poner caras de agonia y de dolor...

Claro que tras la máscara no se ven. Y como una nunca sabe los gustos de quien está enfrente... ¡mejor no quitarsela siquiera!

"Doctora... Por favor ¿Voy a perder el brazo?"