SS GABRIELLE
Este barco de vapor utiliza gasoil como combustible, y fue botado en 1913, en Escocia, en principio construido para operaciones en las aguas del ártico, y estaba construido en hierro forjado sueco de tres centímetros. No es un rompehielos.
Un barco mercante es como una ciudad en miniatura, construida por habilidosas manos. Su longitud es algo mayor que la de un campo de fútbol americano y, en el caso del Gabrielle, tiene una anchura de trece metros. Las gruesas paredes del casco evitan que entre el agua (es una embarcación completamente estanca). Hay generadores eléctricos, camas, cocinas, despensas, duchas, librerías y un pequeño hospital. No hay niños, aunque también podría darse el caso. Las calles y vías de acceso de una ciudad son aquí pasillos, escaleras y puertas estancas. La gente cruzará estos pasillos, pero nunca lo harán a la vez, pues son estrechos. En el barco hay ceremonias, aunque nunca se vea un desfile.
Tripulación (48 en total)
El capitán y cuatro oficiales más. El oficial de máquinas y cuatro oficiales de máquinas. Médico de a bordo. Radio, carpintero, contramaestre, habilitado. Quince maquinistas (engrasadores, bomberos, limpiadores, operadores hidráulicos). Brigada de cocina (cocinero, pinches, friega platos), brigada de servicios (jefe de servicios y cinco camareros)
Equipo adicional.
Dispone de seis grúas de una tonelada. Seis de 10 toneladas. Dos de 30 toneladas. (Situadas al final del almacén número 2)
Fusil de pesca, 18 salvavidas con luces, bengalas y cohetes, 4 botes salvavidas. Botes salvavidas con capacidad para 25 personas cada uno; dos de ellos con motor que alcanza una velocidad de seis nudos.
Incendios: el barco tiene una serie de mangueras contra incendios alimentadas por bombas independientes que utilizan agua de mar. Hay catorce extintores de CO2, situados en su mayoría en la parte central del barco, en general, todos más o menos a mano desde cualquier punto del mismo.
La rutina del barco.
Según la tradición, el trabajo en la mar está dividido en guardias. Hay tres guardias cada doce horas: de 12:00 a 4:00, de 4:00 a 8:00 y de 8:00 a 12:00.
El jefe capitán se encarga de las guardias de 4:00 a 8:00, am y pm. El segundo se encarga de las de las 12:00 a las 4:00, mientras que las otras le tocarán al siguiente en el escalafón. El contramaestre no hace guardia; el cuarto oficial en importancia va rotando sus guardias, y estará dispuesto a hacer substituciones en caso de enfermedad o accidente.
Los oficiales de máquinas siguen una rutina similar, el jefe no hace guardias, como tampoco las hace el carpintero, el contramaestre, el encargado del economato o los camareros; ellos llevan a cabu sus trabajos según un horario diurno regular.
El oficial puede estar al timón mientras uno de los marineros está de guardia, y los otros dos llevan a cabo sus tareas diarias. Cinco de los tripulantes de la sala de máquinas estarán de servicio durante cada guardia.
Los servicios de comidas comenzarán a las 7:30 am, 11:30 am y 7:30 pm.
Las bodegas del barco son inspeccionadas por lo menos una vez por semana, por el oficial más antiguo, el carpintero del barco y el oficial de guardia. La única excepción a esta norma está en el almacén refrigerado, que contiene productos perecederos. El jefe de servicios tiene una llave de este almacén.
PLANOS DEL SS GABRIELLE
Detalle: camarotes de entrecubiertas, popa.
El Gabrielle tiene cinco cubiertas, que utilizan los pasajeros y la tripulación. Comenzando desde arriba, tenemos el puente, la cubierta de botes, la principal, la segunda cubierta y la de máquinas.
Los pasajeros y la trupulación a bordo del Gabrielle, cuando no estén en cubierta, estarán en una de las tres zonas destinadas pare ellos: el castillo de proa, el castillo de popa o la superestructura.
El castillo de proa es un pequeño conjunto de camarotes en la cubierta principal, en la parte delantera del buque, justo detrás de la proa. Normalmente estos camarotes solo son utlizados por la tripulación, asignados normalmente a los marineros e intendencia.
Los camarotes del castillo de popa están reservados a los maquinistas y a otros especialestas, como los carpinteros, que tienen allí sus literas. También reseervado para ellos hay espacio en la cubierta principal y en entrecubiertas cerca de la popa y de la zona de hélices.
El capitán y los oficiales y algún que otro pasajero dormirán en la superestructura, que se alza tres pisos en la zona central del barco. La superestructura está justo encima de las máquinas del barco. El puente está en la cubierta más alta, orientado hacia la popa.
Los camarotes del castillo de proa y popa están dispersos y no son demasiado cómodos. Además, carecen de ojos de buey o portillos. En su mayoría son compartidas por varios habitantes, que duermen en unas estrechas literas. Las puertas de los camarotes tienen unas ranuras por las que entra el aire, y esa es toda su ventilación. Los camarotes sí poseen radiadores que, asegurados a las paredes, sirven para caldear el ambiente cuando es necesario.
El resto del barco sirve para almacenar la carga. Hay cinco bodegas, numeradas del 1 al 5 desde popa a proa. Las bodegas 1 a 3 están después del puente, mientras que las número 4 y 5 están en dirección a la proa. Hay un gran espacio refrigerado (el "almacén del contramaestre") situado directamente delante de la bodega número 4, sobre el principal depósito de combustible del barco.
CAMAROTES Y BODEGAS
(equivalencias del mapa de compartimentos y camarotes)
1.- Cuartos de baño, de diversos tipos y tamaños.
2.- Duchas, con una o más divisiones.
3.- Camarotes triples en el castillo de proa para el oficial de intendencia y sus subalternos.
4.- Camarotes triples en el castillo de popa y más abajo, para el personal de máquinas, los camareros, el encargado del economato, el carpintero, el contramaestre y 12 de los miembros de la expedición.
5.- Cabina del jefe de a bordo. Los libros, instrumentos de navegación, periódicos, notas, nóminas de los trabajadores y detalles sobre la carga llenan la mesa y muchas estanterías. También tiene teléfono.
6.- Camarote del jefe de máquinas. Una mesa y varias estanterías contienen libros e información sobre máquinas y estructuras del buque, y también sobre mecánica naval.
7-12.- Camarotes dobles para tres oficiales de cubierta, cuatro de máquinas, el radio, y cuatro miembros de la expedición. Los camarotes número 11 y 12, que son los mejores, en principio destinados a Starkweather y a Moore, han sido cedidos a las cuatro féminas de la expedición. Ellos se han ido a dormir con la tropa (13-18)
13-18.- Camarotes triples, destinados a los otros miembros de la expedición. Uno de ellos está ocupado por el doctor Green, que tiene una impresionante caja de licor embalada, atada y encadenada bajo la litera. En otro están los jefes, desterrados voluntariamente para hacer sitio a las chicas.
19.- Cámara de oficiales, también destinada a los miembros más importantes de la expedición y a las mujeres. Posee extintor, teléfono y entretenimientos.
20.- La cocina, que es de carbón. Posee un extintor.
21.- El comedor de la marinería; los miembros de la expedición estarán casi siempre en él, leyendo, jugando a las cartas, tocando la guitarra o la armónica, poniendo el tocadiscos o la emisora de onda corta, etc. Posee un extintor.
22.- Espacio abierto que conduce a la sala de máquinas. Hay una bajada de cinco plantas hasta allí, entre plataformas, tuberías, maquinaria, generadores, bombas, y escaleras. Siempre hace calor y hay mucho ruido cuando el motor está funcionando. Donde trabaja el maquinista, hay un telégrafo, potentes teléfonos y un tubo mediante el cual se comunica con el puente. También hay dos extintores.
23.- En este compartimento oscuro y mal ventilado se almacenan los recambios del contramaestre: luces, cable eléctrico, cuerdas, bloques, lona, herramientas, mucha madera etc. Un grueso candado vela la escotilla que conduce e ella. Cinco extintores más están situados en la zona, así como algunos extintores vacíos. En una pequeña caja cerrada que hay dentro de un armario alto hay detonadores y temporizadores de la expedición. Si alguien trae armas de fuego, también se guardarán aquí, etiquetadas en una caja hasta que el barco llegue a su destino. Dos pequeñas escotillas en el suelo conducen escaleras abajo a otro compartimiento, en el que están almacenados instrumentos que se utilizan muy poco, y piezas rotas de equipo.
24.- Este pequeño recinto, al que solamente se puede acceder desatornillando una placa en el castillo de proa, contiene tan solo un sistema de tuberías y válvulas para el tanque de proa.
25.- La máquina de gobierno ocupa la mayor parte del espacio de este extraño e irregular compartimento. El eje de la caña entra en este sitio desde abajo, y un engranaje de casi dos metros de radio lo hace rotar. El propio engranaje está accionado por un sistema de vapor de dos cilindros de unos tres metros de ancho y otros tres en sentido popa proa. Esta máquina carece de caldera, pero está conectada a una batería de vapor muy bien aislada de diez centímetros de diámetro que viene directamente de la sala de máquintas. Una llave de vapor permite el control de la máquina desde este recinto, en caso de emergencia; hay una tubería de comunicación, y teléfonos para no perder el contacto con el puente en todo momento. También se encuentra en este compartimento el sistema de gobierno a mano compuesto por dos bloques y cuerdas y alambres para manejar la caña del banda a banda con cabestrante. El cabestrante será similar a los que hay en cubierta, pero si no se dispone de la presión a vapor de las calderas del barco, cuatro marineros pueden gobernar el barco a mano.
26.- Equipo de refrigeración. Este espacio tiene un fuerte olor a amoniaco, y está lleno de depósitos, conductos, diales, válvulas y tubos procedentes de la sala de máquinas. También hay tuberías por las que circula agua de mar, y conductos de ventilación que suben hacia la cubierta...
27.- Camarote del capitán, conectado con todos los teléfonos del barco.
28.- Oficina del capitán. Una mesa, estanterías, libros y cartas de navegación salpican la estancia. Hay tratados de derecho marítimo, de historia, del clima polar etc. De nuevo, ambos tipos de teléfonos están presentes (para todo el barco). La caja de caudales del barco está aquí. En un pequeño compartimento hay un baúl cerrado y un pequeño botiquín (con material quirúrgico y de primeros auxilios suficiente para curar a unas doce heridas graves) En este viaje está previsto, sin embargo, que sea un médico el que se encargue de curar las heridas y dolencias de la tripulación, el doctor Lansing, y tiene su propio material. A todo ello habría que añadir, en caso de emrgencia, el del doctor Green y el del doctor Hirch. La caja fuerte del barco contiene todos los documentos necesarios, drogas, armamento privado, dinero, contratos... El capitán y el primer oficial conocen la combinación. Hay otra caja en el camarote del propietario (ver 30)
29.- El compartimento de la radio. Cuenta con equipo de onda corta y larga. También la centralita de teléfonos está aquí. Una serie de baterías amontonadas en un armario pueden proporcionar en caso de emergencia bastantes horas de electricidad. Dado que tan solo hay un hombre cubriendo las funciones de radio, el barco cuenta con un sistema automático de alarma que se dispara en caso de que se detecte la señal de Morse (un punto seguido de una ralla en repetidas ocasiones). Este sistema suele fallar bastante. Algunas veces se activa sin razón, y en otras puede ignorar una señal auténtica, pero es mejor que nada.
30.- La suite del propietario. Se utiliza raras veces, en la actualidad hace las veces de oficina, laboratorio y gabinete psicológico del doctor Hirch, en servicio de la expedición. Los materiales delicados y de gran valor se almacenarán aquí durante el viaje a la Antártida. En uno de los armarios hay una pequeña caja fuerte con variados documentos y objetos valiosos. Starkweather, Moore y el capitán tendrán la combinación de esta caja.
31.- El puente. Posee teléfonos de diversos tipos, el telégrafo y tuberías de comunicación que permiten a los oficiales de guardia controlar en todo momento el barco. La bocina de niebla y la sirena del barco, así como las luces de navegación se controlan desde este lugar; la brújula de bitácora y la caña del barco dominan el centro de la estancia. Un indicador de corredera señala la velocidad del barco, y otro señala el ángulo del timón respecto a la quilla del barco. Las estanterías y alacenas del puente contienen banderas para hacer señales, banderas nacionales y tres pares de banderas de situación, tres pistolas con bengalas, cinco cohetes pirotécnicos de señalización, bengalas, plomadas pare medir la profundidad, tres pares de binoculares, dos lámparas de señalización, seis lámparas de flash, dos extintores y otros instrumentos.
32.- La derrota. El diario de a bordo se guarda aquí. Tiene teléfono. La sonda que hay instalada puede medir mediante un rudimentario sistema de espaldilla situado en la quilla del barco.
Al final del compartimento hay seis fusiles 30-06 descargados, almacenados bajo llave y candado. Una barra de hierro los une a la altura del gatillo. Una caja fuerte cercana contiene munición. El capitán y el primer oficial tienen las llaves del candado y la combinación de la caja.
LAS BODEGAS
Las bodegas tienen escotillas en sus mamparos. Para ir de una bodega a otra uno deberá subir a cubierta, para descender a la siguiente bodega. Justo en entrecubiertas, esta tarea se llevará a cabo mediante una escalera vertical, que está contenida por un tubo metálico de algo más de un metro de diámetro y que conecta entrecubiertas con los recintos inferiores. Durante el viaje las escotillas que hay en este trayecto estarán bien aseguradas. Los materiales con que están construidas (maderas de gran dureza recubiertas de lona impermeabilizada) las hacen casi tan resistentes como aquellos que las rodean. Cada una de estas cubiertas está bien aislada de su vecina; la resistente madera del suelo puede soportar grandes pesos, imposible de mover sin el torno.
Las bodegas carecen de luz, salvo las de emergencia. Estas luces constan de un reflector de unos 43 centímetros sobre el que hay una sólida rejilla. Dentro de esta caja hay cuatro bombillas de 200 vatios. En su parte trasera hay un gancho que permite colgarlas en lo alto de las bodegas. El barco dispone de dieciséis luces de este tipo.
La bodega refrigerada ("el espacio del contramaestre"), carece de escotilla en la cubierta. La carga se estiba a su interior desde un hueco de tres metros y medio que hay en el mamparo de la entrecubierta número 4.
Aunque han sido cargados con todo lo necesario para viajar a la Antártida, las bodegas del Gabrielle poseen todavía espacio en abundancia.
Número 1: En entrecubiertas está toda la maquinaria pesada de la expedición: los tractores de nieve, generadores, y los aparatos para derretir el hielo. El almacén que hay debajo está casi vacío, y tan solo contiene botellas de oxígeno cuidadosamente embaladas y recubiertas de materiales aislantes.
Número 2: También entrecubiertas estará almacenado uno de los aparatos boeing (el Shakleton), con las alas desmontadas más allá de los salientes del motor, y el morro desmontado y situado frente a la cabina. Estará fuertemente asegurado a la cubierta, y la punta de la cola rozará ligeramente el techo, de 4 metros de alto. Las cajas que contienen las alas tienen una longitud de 10 metros y una anchura de 5, una a cada lado del avión y bien sujetas al suelo. Los motores y turbinas también han sido desmontados, y están almacenados en grandes contenedores, asegurados e los mamparos del mismo modo que el morro y los motores y turbinas de repuesto. En el almacén de abajo, hay apilados bidones de 220 litros de combustible cada uno, separadas cada una de las tres hileras formadas por tabjas aislantes de 2,5 x 15 cm. Algunos de los bidones contienen lubricante, otros gasolina y, uno de ellos, alcohol industrial. El fairchild monoplaza de la expedición (el RF Scott) está situado encima de todos estos bidones, con las alas plegadas y asegurado con gruesos cables, ganchos, cadenas y cuerdas. Sólo algunos de los bidones de la capa superior pueden ser abiertos (desatornillando sus tapas) sin tener que utilizar las grúas del barco.
Número 3: En entrecubiertas está almacenado gran parte dle material relacionado con la acampada y los trineos. Trineos, tiendas, herramientas, lámparas y cuerda se apilan en los palets, y se acumulan en lugares apartados. La bodega que hay en la parte más baja está completamente vacía. Debajo está la rampa de madera prefabricada que se utilizará para descargar el barco cuando éste llegue a la plataforma polar de Ross.
Número 4: Hao otros dos boeing, uno en entrecubiertas y otro más abajo (el Enderby y el Weddell); sus alas y motores han sido desmontados y embalados. En la parte orientada hacia popa de entrecubiertas hay otra bodega, pequeña pero construida con gran solidez: está rodeada de sacos de cemento. La puerta está asegurada por un grueso candado; el primer oficial es el único que tiene la llave. Dentro, dispuesto sobre un lecho de arena, hay una caja de dinamita.
Número 5: También en entrecubiertas están los perros y una reserva de madera para construir el campamento base (bodega de la parte inferior)
Además de la comida que va a ser consumida por la expedición una vez llegados a la Antártida, la cámara refrigerada también tiene comida "común" para la tripulación y la expedición durante el viaje. El almacén refrigerado está dividido en una cámara de frío pequeña y otra de mayor tamaño.
MAS INFORMACIÓN SOBRE EL BARCO
Sobre el puente está el puente alto, cuyos alerones se extienden a lo ancho; una lona se puede poner sobre una estructura de manera que la tripulación quede protegida del sol. Si el tiempo es bueno, el barco será gobernado desde el puente volante, que está provisto de una brújula giroscópica, un telégrafo, comunicadores etc. en baúles protegidos y una conexión a la sirena del barco. La gran lámpara de señales del barco está situada aquí, y hay un sextante, aparato utilizado para trabajar con ángulos en cada ala del puente. Las señales con banderas también se hacen desde aquí. Hay una caja llena de banderas pegada al riel.
El fusil de pesca del barco, de 25 mm (también conocido como arma de Lyle), parece un pequeño mortero de la Guerra Civil. En una caja forrada de corcho y cerrada con llave hay siete bolsas de pólvora de 225 gramos cada una, ideales para lanzar los proyectiles, de 7 kilos cada uno.
En otro baúl cerrado hay una caja de 25 fulminantes de percusión para que se prenda la pólvora, los siete proyectiles, el andarivel de salvamento y varias piezas suplementarias del equipo.
Cuatro cables ligeros, de 510 metros cada uno, se guardan en cubas no muy lejos, listos para ser disparados; hay dos cubas más en el almacén del contramaestre (compartimento 23). Hay otro cable de 2,5 cm de grosor y una longitud de 450 metros, cerca de un pesado torno, y que sirve para soportar el andarivel de salvamento. En realidad no hay manera de acertarle a nada con ese fusil que sea más pequeño que una ballena.
Hay 18 salvavidas con luces sumergibles guardados en dos alacenas en este nivel. Estos salvavidas llevan un pequeño tubo de cobre con una luz de emergencia que se enciende 30 segundos después de lanzarse al agua, y que tiene una duración de unos 45 minutos. Hay otros 18 salvavidas, sin luces de emergencia, pegados a los rieles y repartidos por el barco.
Varias cajas en la cubierta y a la altura de proa y popa del barco contienen teléfonos. Hay un último teléfono en lo alto de la cofa.
ALGUNOS TÉRMINOS NÁUTICOS
Babor: parte izquierda del barco (mirando desde popa) Estribor: parte derecha del barco. Caña: timón. Contramaestre: oficial de autoridad media en el barco (enlace entre oficiales y marinería, encargado de los materiales) Crujía: parte central del barco. Popa: parte trasera. Proa: parte delantera.
Turlow es un tipo duro de Colorado que ha estado soñando con el mar desde que era crío. Hay cierta vena fatalista en él que le hace parecer algo gafe al resto de la tripulación. Es un gran tipo si está de buenas, pero tiene algunos arranques repentinos bastante peligrosos y desagradables. Por fortuna, el capitán le tiene pilladas las vueltas, y sabe cómo manejarlo cuando se obceca. Por lo demás, es muy competente y cuando domine su carácter, tendrá todo lo necesario para ser un buen líder.
Ballard es un atento y extravertido neoyorquino que todavía está descubriendo los entresijos más ocultos de su profesión. Adolece de la experiencia de Turlow o Vredengurgh, pero compensa esta carencia gracias al mucho tesón y dedicación que pone en su trabajo, a lo que hay que sumar la presencia de una mente ágil y despierta y el don de aprender con rapidez. Según aumenta su experiencia a bordo, de igual manera lo hace su seguridad en si mismo. El capitán cree que Ballard, al igual que Turlow, llegará algún día a ser un buen capitán. En sus ratos libres, Ballard disfruta enormemente manteniendo largas conversaciones con quien sea y sobre cualquier tema. Eligió la carrera de marinero en un intento por ver el mundo y por encontrarse con alguna que otra aventura. A pesar de sus contrapuestas personalidades, Ballard y Quingley son muy buenos amigos.
Quingley es un hombre grande y fornido, mucho más dado a los esfuerzos físicos que a los intelectuales. Es un oficial competente, aunque no demasiado. Nacido en Virginia, sirvió en la marina de los Estados Unidos durante la Gran Guerra. Tras la experiencia bélica, Quingley pareció encontrar el sentido a la vida navegando por los océanos, de forma que, sin dudarlo, eligió la carrera de marinero. Aunque habla poco, sabe hacer oír a sus hombres cada orden que lanza, y se preocupa mucho de que las tareas se cumplan lo antes posible sin la menor dilación. Su mayor defecto es su falta de carisma y liderazgo. A causa de este problema es muy probable que nunca llegue a ascender mucho más allá en su profesión, pero esto parece no importarle.
Driscoll es el más joven y menos experimentado de todos los oficiales del barco, y debido a esta razón se toma su trabajo más en serio que ningún otro. Siempre es muy metódico y ordenado, quizás demasiado, y por ello es víctima de un montón de bromas y chistes por parte del resto de los marineros. No obstante, Driscoll es un oficial competente y siempre intenta dar lo mejor de sí. De esta forma, aún sin tener a muchos a los que poder acercarse como amigo, tampoco nadie le odia.
Un hombre de mediana edad, de baja estatura, cabello cano. Tal y como se le supone a un marinero de su rango, Vrendenburgh comanda su nave con determinación siguiendo a rajatabla los procedimientos habituales de navegación, sin vacilar o dudar ni un momento, al menos en público. No tiene ningún reparo en verse las caras con quien quiera que se atreva a poner en peligro la seguridad del barco. Debido a esto, toda la tripulación le admira y le respeta por su firmeza y lealtad. Así, éstos recurren a él para que tercie ante cualquier conflicto que pueda surgir a bordo, aceptando sus resoluciones sin ninguna oposición. Aunque demuestra maneras algo toscas, Vrendenbourgh es sorprendentemente ágil y preciso en sus movimientos.
Un nutrido montón de alegres muchachos...
Lista de la tripulación:
Médico de a bordo: Ray Lansing
Jefe de ingenieros: Charles Drummond
Ayudante del jefe de ingenieros: Bert Pacquare
Ingenieros: Willia Wheeler, Marck Folsom, Clyde Abernathy
Operarios de la sala de máquinas: Tom Humphries, Bartholomew White, Sidney Beakins, Philippe Brunel, Samuele Girolamo, Michael Fitzpatrick, Albert Webb, Rechard Hartz, Carford Montaigne, Edgar Cawley, Sanley Rupert, Gregory Stanislaw, Lucios Morelli, Wylie Loden, Hugh O'toole
Técnico de radio: Robert Macilvaine
Carpintero: Lysander Bertolli
Contramaestre: Toger Blunt
Almacenero: Thomas Price
Furriel: Michael Oates, Darren Horst, Gregory Houlihan
Marineros de primera: Peter Stokeley, Abelard Almondale, Truman Cotter, Gordon Cooke, Nicolas Pellerin, Alexander Moseley, David Waters, Jude Pierce, Chipper Green
Jefe de cocina: Judas Whitney
Auxiliares de a bordo: Niles Abraham (cocina), Adam Henning (pinche) David Wylie (lavandería)