Partida Rol por web

Tafuna, como buena chica que es. Se puso los cascos y escuchó la música que tocó MonoGuitar

... La música era muy ruidosa, parecida a la que tocaba Neku...

... Pero por alguna razón le daba fuerzas para enfrentarse a todos los demonios del infierno... O parar el tiempo y conquistar ZAWARUDO el mundo.

¿Monokuma y sus cachorros eran... una inteligencia artificial? Claro... Tenía sentido. Era o eso o animales de peluche robóticos a control remoto. Si Monokuma era una inteligencia artificial... ...¿quizás podríamos hackearle? ¿Desactivarle? Tsk, pero tenía cubiertas las espaldas, las reglas prohibían hacerle nada a él o a las cámaras de vigilancia... Estuve dándole vueltas a las reglas, buscando un agujero en las mismas, hasta que mis pensamientos los interrumpió el propio Monopachi, no con sus desvaríos extraños sobre temas musicales, sino con el comentario que soltó sobre Neku. "¿¡C-cómo que no le estimaba!? ¡Era un amigo! ¡Claro que...!" empecé a protestar, pero me callé y tragué mis palabras escuchando lo que decía primero...

"¿Neku te... mintió sobre la visión? Pero aún así... lo hizo por nosotros. Él sabía que era una trampa, y eligió caer en ella para que idiotas como yo no lo hicieran..." tomé la pistola-jeringuilla del suelo... mientras que Monopachi me advertía de que no funcionaría si la disparaba sobre otro a traición. "Claro que no voy a usarlo sobre nadie más que yo... no soy tan cruel..." murmuré, con manos temblorosas. Fuera lo que fuera que me esperaba, tenía bastante miedo de verlo. Pero debía ser fuerte. Por los demás, por mí... y también por Neku...

Tragué saliva, pegué la pistola-jeringa a la altura de mi hombro... y disparé.

-T-tsumiko...-niego con la cabeza-Me quedare aqui contigo, no te preocupes, he estado muchas mas horas seguidas sin dormir que solamente dos noches, lo podre aguantar como si nada-la mira con algo de preocupacion cuando ve como se inyecta la inyeccion mientras dice-Bueno... realmente no creo que sean tanto inteligencias artificiales, puede ser incluso que sean los propietarios de los informes que hemos estado encontrando o...-realmente ya se me habia pasado por la cabeza una teoria con bastante sentido, mas realmente aun tenia cabos sueltos... mira un momento a Monopachi, si realmente tenian una tecnologia tan avanzada entonces seria posible, no?-Igualmente dudo que sean inteligencias artificiales... si fuera asi entonces Monokuma no habria cometido ese fallo en el juicio... Tsumiko... como te encuentras? No te habra afectado de mala manera, verdad?-.

En un instante, todo deja de existir.

Hope’s Peak Academy deja de existir… Tafuna deja de existir… Monopachi deja de existir…

… La persona llamada Tsumiko Komacho, deja de existir.

ERROR ERROR ERROR

DESPAIR OVERDOSE. SUBJECT SUBCONCIOUS IS OVERTAKING PROGRAM.
CAN’T ACCESS TO KIBOUGAMINE GAKUEN DATABASE.

ERROR ERROR ERROR

UNABLE TO INITIATE PRIMARY FUNCTION. CHANGING TO SECONDARY.

ACCESS TO LOCKED PROCEDURES REQUIRED. REQUESTING PERMISSION…

PERMISSION GRANTED BY MAIN ADMINISTRATOR.

LOGIN AND PASSWORD CONFIRMED.

RESTRICTIONS UNLOCKED.

FULL ACCESS TO SUBJECTS MEMORY GRANTED.

ANALIZING…

SENSIBLE DATA FOUNDED AND CONFIRMED.

PROCESSING DATA… DATA FULLY PROCESSED.

CREATING MEDIA REPRODUCTION…

WARNING. THIS VERSION OF THE PROGRAM HAS NO TACTIL AND TASTE-SMELL FUNCTIONS.
REPRODUCTION WILL NOT CONTAIN ALL THE DATA.

Y cuando el infierno de vacío y pantallazos llegó a su fin, volviste a donde querías volver.

El taller.

Estabas ante la mesa de trabajo que tanto anhelaste, cómo si no la hubieses abandonado nunca. Estabas fundiendo unos soldaditos de plomo. La aleación de estaño y plomo iba derritiéndose en el recipiente especial e introduciéndose poco a poco en el molde que daba forma al soldadito. Era una pena que no pudieses ni sentir el olor del proceso ni el calor. Pero sí pudiste oírte cantar felizmente con tu voz infantil.

FOUR little Soldier Boys going out to sea;

A red herring swallowed one and then there were three.

Fue entonces cuando oíste unos pasos reconfortantes, no necesitabas que la visión se girase para saber quién era.

-Papá: ¿Cómo vas Tsumiko? ¿Se están fundiendo bien los soldaditos?

La visión se giró a su espalda entonces para confirmarte lo que ya sabías: Era tu padre, bastante más joven que la última vez que le viste.

-Tsumiko: ¡Está chupado! Este se va a hacer ya mismo.

-Papá: Ja ja ja. Sabía que sería sencillo para ti Tsumiko. Igualmente es un trabajo para un pez gordo nostálgico. Es importante que salga bien.

La visión volvió a atender su trabajo y a cantar la extraña canción.

THREE little Soldier Boys walking in the Zoo;

A big bear hugged one and then there were two.

Los pasos de Papá volvieron a sonar. Se acercó más… Mucho más… Justo detrás de Tsumiko…

Y entonces empezó a sonar un leve sonido que Tsumiko no acababa de saber cuál era… Sonaba muy cerca… Era como una especie de frotación…

Era como si… Como si dos pieles diferentes… Se frotasen lentamente…

… La Tsumiko niña de la visión no paró su canción…

TWO little Soldier Boys sitting in the sun;

One got frizzled up and then there was one.

-Papá: Tsumiko… Sin ti, no podría hacer nada… Desde que nos dejó Mamá, no he tenido las fuerzas para seguir trabajando… Pero tú… Tú has hecho posible que podamos estar juntos y sobrevivir a este cruel mundo… Tsumiko…

El sonido de frotación empezaba a intensificarse… Empezabas a imaginarte que era aunque no tuvieses sensación de tacto… Incluso te imaginabas que deberías de oler…

… Y entonces empezaron a sonar… Click… Click… Click…

-Papá: Todo irá bien Tsumiko… Nunca nos separaremos… Porque… Papá te quiere mucho.

Y el metal se fundió del todo, introduciéndose por completo en el molde donde se convertiría en un soldadito de plomo.

ONE little Soldier Boy left all alone;

He went and hanged himself and then there were None.

Y llegó a su fin. ¿Simulación? ¿Reproducción? ¿Mentira? ¿Verdad Oculta? ¿Una nueva herida? ¿Una vieja herida?

… Nunca lo sabrás… El cruel juego de Monokuma no te dejará saber si la visión fue real… Ni siquiera sabrás si alguna vez cantaste tan siniestra cancioncilla…

… Tal vez no quieras saberlo…

Cuando Tsumiko se injectó con el extraño aparato, por un momento se quedó catatónica. Apunto de babear un poco. Pero apenas un par de segundos después salió del trance.

Mientras, Monopachi parecía nervioso.

¿¡Pero qué...!? ¿¡Qué está pasando!? ¿¡Cómo es que no puedo ver la simulación!? ¿Habrá habido algún error? No lo entiendo... Uh... Tsu... Tsumiko ¿Estás bien? Um ¿Has visto u oído algo? Parece que ha pasado algo inesperado, lo mismo ni siquiera ha funcionado... ¿Tsumiko?

"Ah...a-ha-haah! ¡AAaaAAH!" No podía ser... ¡No podía ser! . Cuando volví en mí me noté con los ojos abiertos al máximo y la boca entreabierta, con expresión de absoluto horror. -...¡Tsk!- rápidamente cerré la boca y corregí mi expresión con rapidez. Con la cabeza gacha y la mirada perdida, ignoré las preguntas de Tafuna-tan y de MonoPachi sobre si estaba bien o no. Mi cabeza sólo podía darle vueltas a la visión que había visto, algo terrible, cruel y horrible...

"U-uuh... sniff..." lágrimas de tristeza y dolor empañaron mis ojos. ¿Pu-pudiera ser... que aquello que había visto... esa jodida visión... hubiera sido... ¿un recuerdo? Un recuerdo reprimido, una realidad horrible y enterrada en mis memorias para no recordar jamás... "No puede ser... no es verdad... él nunca haría... e-él no..." mi mundo empezó a derrumbarse, toda mi esperanza, mis defensas, mi fortaleza para soportar estos asesinatos y-y las desconfianzas, y-y la vida entera siquiera detrás de los muros de esta escuela... Y mientras, esa maldita canción resonaba y resonaba... una canción que sí que recordaba haber cantado alguna vez... porque me gustaba el toque sombrío que tenía...

"Sniff... El último verso... el último soldadito se colgó a si mismo y se suicidó..."

...Q-quizás yo debería...

.........................................

Pero entonces me di cuenta.

Que yo hubiera cantado esa canción alguna vez...

...Incluso que hubiera fundido unos soldaditos de plomo en un molde o no...

................No significaba que el resto de aquella visión fueran ciertos.

"Eres cruel... Monopachi..." empecé a murmurar, rechinando los dientes. "Tú, Monokuma y los demás... los que sean que os han construido y quizás controlando... sois jodida, pero jodidamente crueles..." Me daba igual si era verdad o no si el MonoCub había visto o no la visión, si siquiera los señores trajeados que habían montado todo este macabro juego de muerte sabían o no lo que me habían hecho ver. Les planté cara, y les respondí a todos. "Tomar aquello que da fuerzas a una persona, retorcerlo para transformarlo en una monstruosidad terrible... sembrando la semilla de la desesperación, la desconfianza y la discordia para que se arraigen sobre nuestros corazones con fuerza... "

"¿Pero sabes qué...?"

"Casi cuela."

"Casi."

...........

"Quizás él fuera tan patético y tímido como su hija... quizá ninguno de los dos sepamos bien cómo pedir perdón a una persona... ni cómo relacionarnos sin hacer chistes malos todo el tiempo... ni mucho menos el cómo confesar nuestros sentimientos sin esconderlos detrás de mentiras o medias verdades... Pero... aún así..." me sequé las lágrimas de los ojos, y después negué con la cabeza, con determinación en el rostro.

"¡Mi padre jamás me habría puesto un dedo encima con esas intenciones! ¡Nunca, nunca! Mamá le dejó porque lo único que hacía era trabajar... y trabajar, y trabajar. ...Y aunque es verdad que no se tomó bien la separación... lo que hizo no fue llorar lastimosamente como un cobarde, ni mucho menos ponerle una mano encima a su hija. ¡Lo que hizo fue seguir trabajando aún más duro!"

"...Empecé a estudiar el arte en parte para entender por qué mi madre prefirió escapar en lugar de intentar arreglar la relación rota... ¡y empecé a estudiar sobre mécanica para ayudar a mi padre porque era la única forma que tenía de relacionarme con él! Él me dejaba trabajar en el taller por la misma razón, porque era lo único que sabía hacer, lo que mejor sabía hacer, y lo que podía enseñarme... Si soy la Ultimate Arts and Crafts Student... es gracias a ambos, ¡y no dejaré que tus visiones, ni tú ni Monokuma ni nadie les quite el mérito ni los demonice!"

+4 Monocoins por Simulación

-Tsumiko...-dice Tafuna, entendiendo mas o menos por las palabras de ella que es lo que habia sucedido, lo que habia visto-Tsumiko, no te preocupes, cuando Neku probo lo de las visiones ya quedo claro que simplemente inventan la vision con la intencion de dañar todo lo posible a quien lo ve, asi que como tu has dicho, no importa lo que vieras, esta claro que es algo que no ha pasado-le digo tratando de animarla, aunque por suerte parecia que ella misma habia conseguido superar lo que vio.

Asentí agradeciendo sus palabras de ánimo. "No se les puede subestimar..." reconocí. "Por un momento... lo vi todo realmente negro, perdí la voluntad de vivir, y de seguir adelante. Perdí toda esperanza. No se lo desearía a nadie."

"Bueno, si no te vas a ir a dormir y te vas a quedar hasta que termine... aprovecha y ayúdame. Tenemos mucho trabajo que hacer. Con suerte, con tu ayuda podremos hasta dormir un par de horitas y todo..."

Asiento con ganas a Tsumiko mientras la ayudo en todo lo posible para hacer los cuadros, realmente no se me da demasiado bien, pero aun asi intento compensarlo con las ganas que tengo en ayudar a Tsu-Tsumiko...-le digo despues de un rato-Realmente me gustaria no tocar el tema, sabiendo como te afecto... pero... Tsumiko, supongo que tu ya sabes cual era mi ficha, no? T-tu que opinas de ello? S-seguramente... seguramente creeras que soy alguien horrible, no?-.

Pronto Tafuna pudo ver que no eran cuadros lo que ibamos a crear, sino, una vez más, reproducciones a escala real de personas. Como al fin y al cabo iba a ver el parecido tarde o temprano, le informé de que ibamos a hacer una Twomiko nueva y también una Natwoki Mei. "Ojalá pudiera hacer una copia para todos... Al menos, los que me caen bien, heh..." me permití bromear. "...Pero eso no sólo no serviria para nada sino que encima nos complicaría los juicios..."

"Pero al menos, quiero corresponderle a Natsuki todo lo que hizo por mi. Me enseñó su escondrijo secreto... y hasta me ofreció compartirlo... Si eso no era confiar en mí, no sé lo que era... B-bueno, podría haber sido un intento de asesinato como decía Obinata, pero... No quiero creer eso... Así que quiero compensarla, dándole lo único que puedo crear que se asemeje al seguro de vida que intentó compartir conmigo..."

Tafuna-tan me preguntó que qué pensaba sobre su ficha. Que si eso la hacia algo horrible. "Tu ficha era la de los coches, ¿no? No seas tonta, ¿cómo va a hacer de ti eso algo horrible?" contesté. "Tu mayor miedo no es a los payasos, ni a que la gente te juzgue ni te critiquen... tu mayor miedo es perder a las personas que quieres. Eso no te hace alguien horrible, Tafuna. Te hace un ángel." tosí al darme cuenta de lo que había dicho, y rápidamente cambié el tema. "No me estoy quedando contigo. Sé que te referías al hecho de que tuviste que comerte los cadáveres de tus propios padres. Canivalismo, por sobrevivir. Pero dime... ¿alguna vez... has matado a alguien?"

-Y-yo...-asiento levemente-M-mis manos estan manchadas de sangre, muchas veces incluso ellos mismos lo pedian a gritos, en ocasiones su torso hacia abajo habia sido aplastado y no habian muerto de inmediato por el dolor, asi que sufrian y sufrian hasta les daba alivio... nadie mas lo hacia, nadie mas queria hacerlo...-.

-Es por eso que no me sorprendo cuando veo un cadaver o una ejecucion, pero aun asi, aun asi siento como si cada uno de ellos se subieran a mis hombros y me acusaran, me acusaran de seguir viva-mis ojos se humedecen-Yo... Tsumiko, yo no quiero ser una superviviente de nuevo, no si solo sobrevivo yo... Y si tu te fueras... Si tu te fueras entonces no podria soportarlo...-.

Dejé un momento lo que estabamos haciendo para mirar a Tafuna Iwa con tristeza en los ojos. Lo que esta chica había tenido que pasar por simplemente sobrevivir no era algo que una chica de instituto... no, ningún tipo de persona, tuviera que sufrir.  "Mira... no se me dan bien las personas... Yo... lo que hiciste se llama Eutanasia, no sé si has oído del término... Evitarle el sufrimiento a una persona, si lo pide, a costa de su vida... Y eso está bien, yo normalmente lo apruebo, aunque aun así siempre depende de qué contexto... Y hay gente que no la aprueba bajo ninguna circunstancia y tienen sus motivos para hacerlo... ah, joder, esto es complicado..." me rasqué la nuca en gesto de autovergüenza, por no saber encontrar las palabras adecuadas tanto como para hacerla sentir mejor y ayudarla como para expresarme...

"Lo que quiero decir es que... Las personas a las que mataste... lo hiciste por piedad, por librarlas del sufrimiento. Algo parecido a lo que intentó hacer Sakuraba-kun por nosotras... Y estuvo bien... pero estuvo mal. La vida... l-la vida es un montón de colores. A veces negros, a veces grises... A veces hacemos cosas que están bien pero que están mal. C-como yo cuando le pegué un puñetazo a Shimada en la cara... ja jaja..." Le puse una mano sobre un hombro. "Lo importante es que no lo hiciste por ni con maldad. Lo importante es que no quieres hacerlo de nuevo, porque sabes que estuvo mal. Lo importante es que te arrepientes, y que valoras una vida humana. Que no quieres pisar a los demás por sobrevivir, que es justo lo que Monokuma quiere que hagamos, y nos obliga a hacer. Y... y para mí eso es lo más importante. Tenemos que ser fuertes... y-y tener presentes que hacer daño a los demás no es una excusa para sobrevivir."

Timida y torpemente intenté abrazarla, un poco como había hecho con Neku aquella otra vez, en el incinerador, antes del juicio. "Yo... tampoco quiero que muera nadie más. Ojalá tuviera palabras bonitas que decir, pero... s-solo puedo abrazarte y-y decirte que no estás sola. Todos estamos sufriendo. Todos... tenemos miedo." me separé y señalé a los muñecos que estabamos montando. "Mírame a mi, montando otra Tsumiko Komachi..."

"Mira... no puedo decirte que no matar a nadie es la salida, porque no lo sé de verdad. Pero sí puedo pedirte que no lo hagas, pedirle a todos que no lo hagamos. No está bien." negué con la cabeza. "Quiero creer que hay otra salida. Y me alegro mucho, de verdad, que hayas decidido que no quieres mancharte más las manos de sangre. A-al menos, no directamente..." suspiré "...los juicios son otra historia.." Agh, vaya unos ánimos más inútiles que le estaba dando...

"M-mira, sé que el futuro se ve negro, joder, yo misma hacía un par de minutos había considerado seriamente el suicidarme directamente... P-pero tenemos que ser fuertes, y aferrarnos a la poca esperanza que podamos encontrar. S-si vamos a morir al final todos... que sea sin convertirnos en monstruos... por favor..." 

Mientras Tsumiko y Tafuna estaban en la Sala de Arte charlando y trabajando, una sombra se deslizó a través de la puerta, por desgracia para aquella sombra, no pasó desapercibida por ambas chicas quienes ya tenían demasiado que hacer como para que Monokuma viniera a molestarlas, esas miradas terribles que echaron contra el pobre director hizo que este comenzara a sudar, dejando en el suelo de la habitación una hoja y dando marcha atrás, saliendo de la estancia.

Le devuelvo el abrazo con ganas mientras la miro a los ojos-Lo comprendo Tsumiko, no hace falta que te pongas tan nerviosa-Entierro mi cabeza en ella mientras le susurro-Te quiero... y mientras que este contigo me enfrentare a lo que haga falta para protegerte-en ese momento se da cuenta de Monokuma, quien habia dejado el papel en el suelo-... Ya voy yo haber que pone en el papel, vale? Tu continua con las estatuas-le digo con una pequeña sonrisa mientras me seco las lagrimas y tomo el papel que habia dejado Monokuma, echandole un vistazo.

Se escuchó un "Click" del otro lado de la puerta.

Yo... esto... no sé...

La Sala de Arte está fuera de los límites...

La voz de Monokuma parecía insegura en sus primeras frases de la noche; pese a ello, una frase dicha con firmeza se intercaló en la conversación.

Romper el mobiliario escolar, lo que incluye la puerta o paredes, será considerado un incumplimiento de las normas, por lo cual serán severamente castigadas las infractoras como "grupo", ambas, aún si una no hubiera cometido el incumplimiento de las normas.

Tras un par de segundos de silencio, la voz de Monokuma con un tono más nervioso volvió a hablar.

¡Do-Dormirse en una zona ajena a las Habitaciones, ta-también!

Tras eso escuchasteis los pequeños pasos del oso alejarse.

-...-Tafuna suspira-Por esas cosas en verdad creo que Monokuma esta siendo controlado por alguien... Diria que quiere que nos marchemos-miro a Tsumiko-Entonces que hacemos? Vamos a descansar a tu cuarto?-digo pensativa-Quizas quienes manejan esto sean los estudiantes que no fueron admitidos, en ese caso diria que Monokuma podria estar siendo manejado por ese Yoon...-suspiro, aunque tuviera sentido habia otra teoria con mas papeletas... pero entonces la unica salida seria.. no, mejor no pensar en ello.

Qué duro era todo esto... era como un juego en el que hicieras lo que hicieras, ibas a perder. Mientras Tafuna-tan me abrazaba una vez más, suspiré de dolor y tristeza. Esta chica parecía decidida a cometer el mismo error que Neku de sacrificarse por sus seres queridos... Y eso era algo bonito, pero no estaba bien... ...no estaba bien. Pero no podía decirle nada, porque sería ser hipócrita: yo misma había decidido ver esa horrible visión de MonoPatchi para poder usar los servicios de MonoGuitar sobre el que lo necesitara... ...¿Había hecho siquiera realmente lo correcto? Al ponerme en peligro, ponía en peligro a Tafuna Iwa a su vez... pero al mismo tiempo, quizás pudiera salvar una vida...

Monokuma fue el tercero de los osos que hizo acto de presencia. Con extraña timidez nos dejó una nota en el suelo y se fue sin más. Luego, cerró la puerta, se oyó un click, y nos recordó las normas y se inventó algunas nuevas, cambiando el tono de voz cuando decía una cosa y otra. "¿Pero qué le pasa al oso...? Es como si tuviera doble personalidad o algo..." murmuré. Entonces caí en la cuenta, cuanto Tafuna-tan me preguntó si nos debíamos ir. "¡Mierda!" Fui a la puerta e intenté abrirla. Muy probablemente no lo haría: el click significaba que la había cerrado con llave. ...Ja, ja ja. ...Me cago en el oso de marras.

Sorprendentemente, la puerta estaba cerrada.

"Cerrada." Me llevé la mano a la frente. "Sí, nos la ha jugado. ¿Recuerdas el castigo de Asuka Mori? ¿Aquel donde Fuki y ella estuvieron corriendo por el gimnasio toda la noche? Pueeeees se ve que nosotras tampoco vamos a poder dormir nada de nada..." negué con la cabeza. "Meh, al menos confiamos la una en la otra... Si me hubiera tocado con Shimada-san estaría de los nervios... En fin, da igual, no es que fueramos a dormir mucho esta noche, con el trabajo que hay..."

"Dime, ¿qué pone en el papel?" me acerqué para verlo juntas. ¿Serían las normas nuevas? ¿Otra trampa de Monokuma? ¿Un mensaje de otra persona?