Partida Rol por web

 Anata se encontraba en frente de la habitación de Kaori, golpeando respetuosamente la puerta en búsqueda de alguna respuesta desde el otro lado. Viendo que sus esfuerzos fueron en vano, y percatándose de que estaba cerca del grupo que fue a la habitación de Katsumoto, la sommelier se aproxima a Natsuki.

- Me he enterado por el mensaje de Tadayo-san sobre el estado de Obianat-san... tendría que ver si es alguna intoxicación que yo pudiera distinguir. En cuanto a Miyazono-san, parece que no hay nadie en la habitación. O nadie que quiera o pueda responder... ¿crees que este en contra de las reglas intentar forzar la puerta para entrar?

 Se podía notar que Kizoku hablaba con total seriedad y preocupación. Cada tanto, la sommelier volvía a tocar la puerta con la esperanza de escuchar a la violinista del otro lado.

Pasillos de las Habitaciones

Al ver a Kizoku y a Mei me acerqué a ella a paso ligero.

- Hola, chicas, ¿hay alguna respuesta de Kaori? Mei-chan, ¿crees que podrías abrir la puerta?

Natsuki iba a responder a Anata cuando llego Hana-chan, así que extendió la respuesta a ambas.

No será necesario forzar la puerta, solo necesito un alambre u horquilla y vuestra ayuda para abrirla. Normalmente vendría equipada, pero... - Natsuki seguía vestida únicamente con una toalla.

¿Alguna tenéis una horquilla? Si no podremos intentar hacer algo con el aro de un sujetador o la hebilla de un bikini.

Lo que haremos es lo siguiente. Necesito que una anule el cierre electrónico intentando acceder con una PDA equivocada de manera continuada y yo me encargo del resto.

Podéis ver a Neku Sakuraba entrar por el pasillo, pasar detrás vuestra, abrir la puerta de la puerta de la habitación que está enfrente de la de Kaori Miyazono y finalmente entrar en dicha habitación, a fin de cuentas es la suya.

Rebusqué entre los pliegues de mi kimono y saqué un par de horquillas adornadas con pequeñas piedras.

- ¿Esto te sirve? - le pregunté sacando también mi PDA y preparándome - cuando quieras.

Vimos pasar a Neku hacia su habitación, pero no lo interrumpí. A no ser que necesitáramos ayuda, prefería no retrasar más la entrada en la habitación.

Usando la horquilla y con la ayuda de Hana-chan, abro la habitación.

La habitación se abre de par en par ante las tres chicas, por desgracia para ellas tras dar un ligero repaso por encima a la estancia, incluso tapándose alguna la nariz como medida de seguridad, no había nadie en la habitación, lo único que pudieron encontrar, encima de la cama era una pequeña muñeca pegajosa... probablemente una de las cosas que tenía en su habitación al igual que el violín, los YoYos de Yoshida o el perro de Asuka.

La muñeca tenía un interruptor ajustable en el fondo.

 Kizoku estaba a punto de ofrecer la hebilla de su sujetador para que se abriera la puerta, pero viendo que Hana se adelanto con sus horquillas adornadas, la sommelier suspiro con alivio. Luego de que la puerta fuera abierta, la muchacha se adentra en la habitación junto a sus compañeras para encontrar que efectivamente no había nadie.

- Esto es realmente extraño... si no esta aquí y no esta en la habitación de Obinata-san, entonces... ¿en donde esta?

 En ese momento, la sommelier ve el extraño artefacto sobre la cama de la violinista. Extrañada por su aspecto y sin saber cual era su utilidad, Kizoku lo toma con la punta de los dedos y acciona el interruptor de la parte inferior.

- Que peculiar adorno... ¿por qué estará tan viscoso al tacto?

La muñeca empieza a vibrar en distintas velocidades e intensidades.

Natsuki ignora la muñequita y se acerca a la puerta del baño, para confirmar que su situación no es la misma que Obi-sama.

El Baño brilla, se podría comer encima de la tapa y beber de la taza directamente... aunque evidentemente no se recomienda hacer ninguna de esas dos cosas por motivos más que obvios.

 Al sentir las vibraciones que procedían de aquel muñeco, a Anata le tomo un par de segundos atar los cabos y pensar en la utilidad de aquel instrumento; que quedaba más que clara al ver la viscocidad en la que se encontraba cubierto. Asqueada, la sommelier suelta automáticamente el muñeco sobre la cama.

- ¡Increíble! Que se haya filtrado una cosa como esta en una academia de tal prestigio... no me sorprendería si Miyazono-san aparece en alguno de estos documentos de "estudiantes rechazados".

 Intentando no ruborizarse más y dejar de lado aquel muñeco, Kizoku miró hacia dentro del baño.

- ¿Aquí tampoco esta, no es así?

A parte de eso la habitación no tiene nada más, ni siquiera la PDA de Kaori Miyazono.

Pues aquí no está... ¿Dónde podrá estar? ¿Creéis que estará bien?

Se paró y pensó un poco sobre el tema. El zumbido de fondo de la muñeca vibrante acompañaba sus pensamientos.

Ella estaba siempre pegada a Obi-sama. Obi-sama está intoxicado. Ayer todos nos fuimos a las habitaciones. ¿Cuándo pudo intoxicarse? ¿Estará allí ella?

Un cadáver ha sido descubierto.

Después de un tiempo libre, el juicio escolar comenzará.

Se me quedó cara tanto estupefacta como escandalizada cuando la muñeca comenzó a vibrar. Creía saber para qué era y no podía creerme que pudiera tener algo así. ¿Pero qué tenía en la cabeza esta muchacha?

- Deberíamos buscar en la enfermería tal vez... - entonces, llegó la peor de las noticias en forma de oso bicolor - no puede ser...

Sin mñas palabras me encaminé hacia la puerta con pasos apresurados.

Seguí silenciosa y apresurada a Hana-chan

Vamos Anata-sama

 Escuchando la noticia con una gran mueca de disgusto, la sommelier se remite a seguir silenciosa a sus compañeras; ya haciéndose una idea de quien era la víctima de esta ocasión.

Pasillos de las Habitaciones