-¡Burnell!. -Le gritó al recién despertado- ¡Aisha fue la que te resucitó!. ¡Y el Jinete confirmado por Hanon es Edmundo!. ¡Yo y Amaranto nos hemos encargado de la otra, confirmada por tres fuentes distintas de su culpabilidad!. ¡Que no te engañen la parejita de enamorados ni el Jinete si es que te han dicho mentiras insidiosas!. ¡Es necesario que veas la verdad!.
Realmente había poco que podia hacer más allá de advertirle a aquel hombre de lo que estaba a punto de suceder; si tenían suerte iban a conseguir pasar un día completo sin víctimas humanas, pero si la peor de las condiciones llegaran a pasar, lo más probable es que fuera el fin de la humanidad.
-Oh, -comentó encogiéndose de hombros que su carrera no sirviera de nada- Si no puedes votar pues entonces nada... estas votaciones van a ser complicadas, pues entre los 3 Jinetes que quedan más algún engañado por motivos externos, o la humanidad con dos dedos de frente...
El muchacho se percató que habían sido des-hormificados (o como fuera eso), por lo que señaló hacia atrás.
-¿Alguien le dijo al resto que pueden dejar de ser hormigas?.
Estaba pasando una vergüenza horrorosa con todos delante, pero ver a Juan feliz le hacia a ella feliz. Y haber recuperado a Burnell... Eso había que celebrarlo.
La risa mientras salpicaba a Juan y otros que quedarán en el agua se cortó de repente.
- Aquí nadie está hablando de votos ni engaños. Estamos celebrando que nuestro compañero está vivo, que las heridas se curan y que varios dejaron de ser híbridos extraños - su gesto se endureció
- Creo que queda claro quién quiere manipular aquí - se apartó de Juan y salió del agua a grandes zancadas. Le habían jodido el momento de tranquilidad. Al mirar alrededor no vió a Hanon ni a Amaranto...
Aquello le dejó un regusto amargo en la boca pero no dijo nada más, simplemente cogió ropa seca para cambiarse
Simon sigues empeñado en saberlo todo, pero mira ahora el que mas sabe es Burnell y por lo que dice lo que tenia oscuro su atacante era el pelo, por lo que Simon tu también estás dentro de ese grupo. Solo tiras blasfemias intentando poner al grupo en disputas internas. Como dice Kira alegrate por que Burnell esta bien, y no solo ellos, los otros infectados del hormiguero, a los que no ayudastes por cierto, también parecen estar curados. O es que estás nervioso al saber que te quedan 48 horas de vida.
Kira Sprite era para Simon Morozov tan agradable como un buen dolor de muelas; por lo que este simplemente la saludó como mejor supo hacer, es decir le levantó ambos dedos y le hizo la peineta.
-Por si acaso, -indicó encogiéndose de hombros- a pesar de que tres personas distintas te confirmaran que Krysta era un Jinete bien que lo negabas hasta el final y no te parecía suficiente... Espero y supongo que esa actitud haya cambiado para las próximas elecciones... porque la siguiente en ser investigada serás tu, si es que no me matais antes, claro está...
Alarico que había estado sujetando a Burnell todo el rato desde que lo sacó de la tienda para meterlo al agua, le miró fijamente.
—Me alegro que hayas vuelto al reino de los vivos, pero para mi es vital que nos digas todo lo que recuerdas de tu atacante. Como te has dado cuenta tu vida está en peligro, es posible que la bestia que te atacó, acabe su trabajo esta noche, si nadie se lo impide, por eso es vital que recuerdes todo lo que puedas. Si hay alguien que pueda protegerte, seguro que lo hará. Aunque también Simón…..
En fin, es que luego parece que Alarico no hace nada... Aunque da un poco lo mismo... pero por lo menos que se sepa..
Las aguas del oasis comenzaron a secarse sin dar ninguna señal de que algo extraño estuviera sucediendo. El aire comenzó a ser más fuerte y a lo lejos pudisteis ver una tormenta de arena acercándose a vosotros, por lo que rápidamente recogisteis cuanto creísteis necesitar para salir corriendo hacia donde está el resto esperando.
Tirada oculta
Motivo: ¿Quién ve la puerta? Orden alfabético
Tirada: 1d8
Resultado: 8 [8]
Pasais todos a la otra escena.
Mientras agarras unas vendas de una de las tiendas de campaña, tus ojos se van hacia la tormenta de arena, nerviosa por creer que quizás no puedas escapar. No es eso lo que hace que tardes un segundo en reaccionar, sino una puerta, oculta detrás de las tiendas de campaña, donde puede leerse "Sala 25 - Secreta". No tienes tiempo para mirar más tiempo antes de tener que salir corriendo.
Este mensaje es solo para ti.
Por tus antenas sabes que no había trampa en el lugar, pero no has tenido tiempo de aliviar tu transformación.