Partida Rol por web

Michael mostró agradecimiento cuando Meredith le entregó el vaso de whisky. Lo cierto es que le vendría bien; le ayudaría a calmarse y afrontar las cosas de otro modo.

—¿Qué quieres hacer ahora Howard? —preguntó—. A mi me gustaría investigar ese libro de cuentas que encontramos en la mina. Seguro que apunta hacia algún lugar que todavía no alcanzamos a ver. Quizá tu mujer pueda averiguar algo más de esas iniciales de la bata que encontramos ahí abajo: A.W. También me gustaría investigar sobre ese símbolo. Quizá Norman pueda atar algún cabo dentro de su red de contactos... apesta a organización clandestina y ese licor o lo que Dios quiera que fuera aquello tiene que ser algo relacionado con ellos. Dioses, no pareciera que se pudiera beber pero quizá no está hecho con ese objetivo. ¿Qué te parece?

-Mmmm, quizá tengas razón-dijo Norman rascándose el mentón-. A ver qué puedo averiguar de esas botellas, o cualquier otro tipo de contrabando que lleve el símbolo.

– Supongo que no debería de ser muy difícil descubrir quien es el dueño de esa bata, señor Thomas. –respondió Meredith a la propuesta de su invitado–. Veré lo que puedo encontrar.

Y dio un sorbo al té caliente. Debía de reconocer que había olvidado por completo los extraños objetos que habían encontrado en aquel laboratorio ilegal. Michael estaba en lo cierto, sería bueno tratar de ganar ventaja a quien quiera que anduviera detrás de todo esto. Él (o ellos) seguro que no se iba a quedar de brazos cruzados.

Bedows entró en la sala con el correo en la mano. Lo dejó sobre una mesita y llamó la atención de Howard indicando que había recibido una carta con el sello del Club Blackstone.

Al abrirla indicaba que Howard había sido propuesto por el señor Wilkinson para su ingreso y que sería considerado en la siguiente reunión. Tanto si finalmente fuera aceptado como si no sería puesto en conocimiento por carta. Seguramente el resto de caballeros tendría la misma carta en su buzón.

—Vaya, yo contaba con ir al selecto club pero veo que todavía tienen que aprobar nuestro ingreso.

Descartó entonces esa vía de investigación y se centró en las que proponía Michael.

—Me da que para comprender el libro de cuentas vamos a necesitar más información, pero me parece bien tanto eso como lo del símbolo. Yo voy a hacer una visita a la policía para enterarme que ha pasado con el tema de la licorería y donde está el otro Norman que encontramos allí. Por la reacción de aquel individuo creo que estamos ante dos situaciones paralelas: un tema de tráfico de licor y algo mucho más siniestro. También aprovecharé para visitar de nuevo a Cobb.

Finalmente decidieron dejar para mañana el comienzo de las nuevas investigaciones. Tras pasar una agradable tarde en compañía, y sin nuevas interrupciones todos se fueron a su casa. Donde pudieron terminar de recuperarse si es que no lo habían hecho ya.

A la mañana siguiente, nada más despertarse, lo primero que les llamó la atención fue la portada del periódico. El artículo del periodista que les había entrevistado estaba en portada. En grande, ocupando el centro de la misma una fotografía del alcalde junto a los protagonistas del rescate de la mina de hace un par de días...

Tras tomar un desayuno y coger fuerzas, cada uno se fue a lo que tenía previsto.^[1]