Partida Rol por web

Los dos chicos llegaron a las recreativas y se asombraron ante la gran cantidad de juegos que habían ¡y de lo grande que era el lugar! Podrían jugar a cualquier cosa que quisieran, juegos de baile, juegos de disparos, de lucha, de VR... Pero algo llamó la atención a los dos chicos. Parecía haber un corro bastante grande al rededor de lo que parecía ser la máquina que disponía el último juego de lucha ¡y una chica estaba apalizando a todo el mundo!

Tetsuya y Saito podrían ignorarla, parecía ser muy habilidosa... O podrían tentar a la suerte, quien sabe lo que podía pasar.

Tetsuya estaba realmente contento de que Saito le hubiera invitado a aquél lugar y sobretodo de que pareciera contento de que le acompañara el peliblanco. - Gracias por traerme Kitagawa-san, la verdad es que yo tampoco había venido nunca... - admitió, un poco triste por no saber que recomendar a su compañero.

Le sorprendió la de palizas que estaba dando aquella chica al resto de... ¿participantes? ¿Era un torneo? ¿O simplemente estaba destruyendo gente a placer? Como fuera, sabía que no sería rival para aquella tipa, sobretodo porque parecía estar tomandoselo muy enserio, al punto de parecer que fuera a destrozar los mandos.

C...Creo que no deberíamos luchar contra ella...

Cambió su foco de atención hacia Saito, esperando una respuesta por parte de este. O una propuesta de juego, después de todo Tetsuya se apuntaría a lo que fuera.

La mandíbula casi no podía bajar mas de lo que ya estaba y es que estaba flipando con este lugar, me encantaba, era enorme, lleno de juegos de todo tipos y con mucha gente. Era un auténtico paraíso. Y todo mejoro aún mas al ver que había alguien proclamado ya como campeón de un juego, sabía como se solían comportar esa clase de gente y me había quedado con las ganas de vencer al campeón de mi vieja ciudad, además ahora con Sanada me creía capaz de todo incluso de cosas en las que él no tenía nada que ver.

- No le des muchas vueltas... somo amigo al fin y al cabo ¿no? Este es el tipo de cosas que hacen los amigos. Y los dos vamos a jugar contra esa chica, no hay mejor forma de conocer gente que esa y al menos yo quiero conocer gente por aquí ya que tengo la sensación de que voy a frecuentar este lugar. Vamos -tire de Tetsuya en dirección a aquella chica- ¡Eh! ¿Podemos jugar nosotros?

Sabía que nos iba a dar una soberana paliza, tratar de ganar a un experto en un juego de lucha siendo tu un novato es un suicidio y este tipo de juegos no eran precisamente mis preferidos.

La chica vio entrar a Saito pasando por encima del corro que había al rededor de ella, haciendo que el peliblanco entrara también. - Dos noobs ¿eh? Venga, sentaos, lucharé contra los dos a la vez. - dijo completamente despreocupada, mientras se comía unos cuantos doritos.

Por lo que habíais visto sabíais que su nivel era muy superior, no teníais ni una sola oportunidad de vencerla... Pero a lo mejor si que conseguíais picarla un poco...

Mire de reojo a la maquina para asegurarme de que no tenía la mas pajolera idea de como se jugaba y efectivamente así era, se trataba de un juego nuevo del mercado que aún no había probado en absoluto así que esto iba a ser una carnicería.

- ¿A la vez? -por un segundo parecía que iba a decir algo de que sería injusto- Se pueden hacer peleas de dos contra uno, que guay...

De inmediato me puse frente a la maquina señalando a Tetsuya el lugar que había a mi lado. El principio del combate fue totalmente desastroso perdí un 1/3 de la vida sin siquiera saber que hacía cada botón, luego mi barra de vida llego a la mitad mientras veía que hacía mi personaje siendo incapaz de hacer otra cosa que no fuera recibir golpes pero cuando apenas me quedaba un cuarto de vida parecía que le había cogido bastante el truco al juego y conseguía cubrirme de varios golpes, aprovechaba que estaba Tetsuya también para intentar conectar un golpe aprovechando cuando él la distrajera pero ni por esas fui capaz. Aún así yo estaba contento había aprendido las bases del juego, demostrado reflejos y trabajo en equipo, no estaba mal teniendo en cuenta que ya entraba sabiendo que iba a perder de paliza.

¡Ki-Kitagawa-san! - gritó con vergüenza Tetsuya mientras era arrastrado al centro de todo. Con lo poco que le gustaba que se fijaran en él y lo habían atraído allí, en mitad de un corro. La chica parecía muy confiada, tanto que incluso les dejó jugar a los dos a la vez contra ella. - Intentaré esforzarme, Kitagawa-san. - dijo no muy convencido, cualquiera podría ver que el peliblanco estaba temblando de puros nervios.

Pulso botones de forma aleatoria, no tenía ni idea de cuales eran los controles y era la primera vez que veía dicho juego. Dio puñetazos, pegó patadas, lanzó cosas... Pero casi nada le dio a aquella chica gamer y lo que lograba golpearla, lo bloqueaba e incluso a veces lo usaba para contraatacar. Menos mal que no había fuego amigo, si no se habría cargado a Saito nada más empezar el combate. - Menudo desastre soy... - murmuró. Quizá con un compañero mejor, Kitagawa habría logrado al menos golpear a aquella chica.

La chica, tras ganaros, parecía realmente molesta con vosotros. - Podría haber jugado con una mano y ganado igual... Ha sido muy aburrido. - siguió inflándose a Doritos, Mountain Dew y un chicle de sabor de fresa al final, para tener un aliento fresco. - Largaos. - se pudo entender (porque con un chicle en la boca, hablaba de forma extraña), mientras os dedicaba una mirada de entre odio, asco y desprecio.

Ha pesar de lo que dictaminaría la lógica mi sonrisa se ensancho cuando se pudo escuchar el anuncio de "Perfect" por parte de la maquina recreativa.

- Guau, eres increíble. Tienes que haber jugado muchísimo para jugar tan bien, ojala yo fuera así de bueno aunque no creo tener el tiempo para ello aunque... -de inmediato una bombilla se encendió en mi cerebro, puse ambas manos sobre sus hombros- ¡Enséñame a jugar! Por favor, porfa, porfa, porfi, porfi pls, venga, enséñame, vaaa, enséñame, porfa... -parecía que no fuera a acabar nunca de hecho tenía que estar siendo cansino hasta a la gente que había en torno a la chica- Me basta con verte jugar, venga va, porfa, ¿si? porfi... 

La chica ni se dignó a girarse hacia Saito, pero por si eso no fuera suficiente, el corro que había alrededor de ella los abucheó por intentar recibir una segunda oportunidad y los sacaron de allí de no muy buenas formas. Otra persona entró a luchar contra ella mientras os expulsaban de aquél juego.

Que desagradables... - dijo refiriéndose tanto a la chica como a su público.

Será mejor que vayamos a otra cosa...

Hablaba sin apartar la mirada del grupo, parecía un circo romano en el que iban mandando gente poco a poco a su muerte. Volvió la mirada a Saito y le sonrió. Había sido admirable el valor que había puesto el chico, no solo al entrar a luchar contra ella, si no por pedirle que le enseñara.

¿A que quieres jugar Kitagawa-san?

Tetsuya estaba dispuesto a probar cualquier juego que quisiera su compañero ¡sabía que se divertiría con él!

Me rasqué la nuca al ser empujado fuera por toda la gente, no entendía a que venía tanta agresividad pero finalmente me encogí de hombros dejándolo pasar.

- Bueno, que se le va a hacer -volví a mirar todos los juegos que había en el lugar y uno me llamo la atención, era uno que ya había jugado bastante por lo que me sería fácil sacar un buen puntaje pero mas que nada lo interesante era que como juego cooperativo era bastante bueno- Mira, ese de allí es Time Crisis. Seguro que te gusta vamos.

En resumidas cuentas se trataba de un juego de disparos estático con coberturas así que lo único necesario era apuntar y disparar o no apuntar para cubrirte.

- Tu has estado usando un revolver así que estoy seguro de que se te dará bien este -le dije algo mas bajo y avanzando ya a la máquina

¡Oh! Conozco ese juego. - dijo ilusionado Tetsuya. - Nunca lo he jugado, pero en la escuela hablan mucho de él ¡dicen que es muy divertido jugarlo entre dos! - fue junto con Saito hasta la máquina. - A esta invito yo, que estuve trabajando el otro día y tengo bastante dinero encima. - actuó rápido para que a Saito no le diera tiempo a meter una moneda ¡ya que le había invitado a acompañarle que menos que pagarle una partida!

Vamos a ver si me ha servido de algo todo lo que hemos vivido.

Sujetaba la pistola con una mano, con firmeza y a absolutamente todo lo que salía por pantalla lo inflaba a balazos, pero de pronto su pistola dejó de disparar y los malos acabaron con él rápidamente. - ¿Hmm? Mi pistola no se recarga... - miró a la pantalla de su compañero, parecía que él si sabía recargar y ocultarse de los tiros. - Lo siento Kitagawa-san... Me parece que estoy haciendo algo mal...

Para cuando miro a mi pantalla pudo ver una cara totalmente diferente de mi, una mas cercana a la que tenía durante las peleas contra las sombras, totalmente concentrado iba sentenciando uno por uno a cada enemigo de un único dispara lleno de confianza empuñaba el control que simulaba una pistola con ambas manos destrozando por completo a todo enemigo que apareciera en la pantalla, se notaba que había jugado mucho a tanto este juego como otros del estilo, era impresionante. No tanto como aquella chica pero se notaba que no era un novato aquí.

- Solo tienes que levantar el arma para cubrirte y recargar -dije esbozando una sonrisa mientras encadenaba tres muertes seguidas- Ahora en cuanto acabe con este grupo vas a reaparecer, no te preocupes lo haces muy bien.

El contador de puntos no paraba de subir y la máquina no paraba de emitir sonidos de fanfarria a cada tanda nueva que despachaba. Disparar a enemigos virtuales no era como jugarte la vida contra monstruos ahora esto me parecía mil veces mas fácil que la última vez, aunque estuviera jugando casi igual.

A pesar de que estaba muerto, al bajar el arma vio como en la pantalla aparecieron más balas. - Oh, entiendo, entiendo. - debería haberse leído las instrucciones ¡tampoco habían tantas! Pero algo de lo que le dijo Saito le llegó muy dentro en la cabeza. ¿Lo estaba haciendo muy bien? Pocas veces le habían dicho eso, se emocionó y no pudo evitar agradecérselo a su compañero de juegos.

Gracias, Kitagawa-san. Intentaré seguir así.

Cuando Saito logró destruir a los enemigos que aparecían en pantalla, un boss apareció frente a ellos, al igual que Tetsuya, que resucitó. - ¡Hay que buscar su punto débil! - dijo mientras le disparaba. - Oh no, no es débil contra los ataques a distancia, habrá que probar otra cosa. - pero pronto se dio cuenta de que lo único que tenían en ese juego eran pistolas y se autocorrigió. - Oh, parece que tendremos que vaciar muchos cargadores. - decía sin dejar de disparar.

La gente empezaba a irse del local, se estaba haciendo tarde y los dueños del lugar no tardarían en echarlos de allí de una patada. Debían acabar rápidamente con el malo ¡o se quedarían a medias!

Se hacía de noche y las recreativas estaban por cerrar. Decidisteis que lo mejor era irse a casa, que ya habíais pasado un buen rato juntos ¡ya habría tiempo de volver!