Partida Rol por web

sentada y utilizando de respaldo a uno de los muros, Aurora escucha en silencio toda la conversacion, mientras mira sus cicatrices.
Me siento mal... Me duele todo el cuerpo... piensa.

Si Salo ya está fuera no hay que esperar a nadie intentó que sus palabras fuesen claras... había estado creyendo que estaban a varios metro bajo tierra, pero no, ¡estaban en la superficie! ...pero por qué ese tunel o pasadizo?... para qué servía? para que se utlilizaba?...sin duda a ellos les había servido enormemente, pero... para algo servirá.

El muchacho se levantó del suelo, y empezó a caminar hacia la luz, el verde, el aire....

Pero y esos chicos de Slytherin? No los esperamos? -pregunta Raúl, tras encontrar algo con lo que dejar la puerta entreabierta- Vale que conociéndolos a ellos segur que se hubiesen ido, pero nosotros no somos como ellos. Encima estamos ya reunidos y si se nos aparece otro de esos... Bueno, atacantes, seguro que podríamos entre todos con ellos.

No, no y no... el dolor que había sentido al ver irse a los dos alumnos con los enemigos, es el mismo que hubiese sentido un cabo al ver como uno de sus hombres, le abandonan en la batalla y se unen a los enemigos... El muchacho se sentía engañado, grustado y también cabreado, cabreado consigo mismo y con los slytherin... malditos Slytherin...

-Ellos decidieron tomar un camino distinto al nuestro, y se fueron, yo sólo espereraba a Salo, pero viendo que él ya se ha ido, vamonos... sus palabras intentó que fueran con desinterés y sabiduría, aunque fueron todo lo contrario...

Miro a Raul desde mi lugar y digo Esa Maldita Anais... ella me hizo esto.

-¿Que! ¿Te atacaron? ¡Hay que informar a la directora! Vamos, salgamos de aquí.- dice Markel, y cogiendo a Vicky de la mano sale por la puerta que da al... ¡Bosque Prohibido! *música de tensión*

Raúl asiente y sale tras Markel. Cree a sus compañeros, aunque le apena dejar a los de Slytherin atrás, si ellos dicen que les atacaron será mejor escapar ahora que pueden. Al salir fuera tiene a mano su varita por si acaso. Aún tiene fresco el recuerdo del funeral de su compañera y el ver tantos árboles alrededor le da una fría sensación de que lo están observando.

Vicky primero pone cara de sorpresa, al oír que una compañera había agredido a Aurora. Pero enseguida su expresión cambia y se sonroja, mirando a Markel que la llevaba de la mano, casi arrastrándola pues ella estaba en shock. Una vez reacciona acelera el paso, y se situa junto a él, sin dejarle ir la mano, y levantando la de la varita en alto, para iluminar el camino.

Tras el repentino y brusco movimiento de Markel, ita ayuda a caminar a Aurora. Alumno tras alumno, los cinco componentes del grupo salen del aquel lugar alejado de cualquier protección, para acabar en uno aun más peligroso, !El bosque prohibido!, ni con toda la imaginación del mundo podría haber pensado que acabaría en algún momento de su vida, en aquel lugar peligroso, frio y maquiavelico.

La cara de Ita palidecía frente a los centenares de arboles que se agolpaban alrededor suya, como si quisieran hostigarle con la mirada, y lo peor de todo, en aquel bosque, siempre tenía la sensación de que le observaban, algo que no agradaba a ninguno.

No tardáis en ver las puertas de la escuela... no hay ni una señal de los erumpent, pero sí de alumnos heridos que siguen entrando en el edificio. Distinguís la profesora de astronomía ayudando a algunos de estos haciendo camillas voladoras y llevándoselos al interior también al interior.

Que poco atentos estos compañeros mios... si no fuera por Ita iba a quedarme ahi tirada
Pensaba Aurora mientras caminaba ayudada por Ita, a todo momento estaba algo asustada de que saliera algo terrorifico de entre los arboles, pero se alegro bastante a ver la escuela a la lejania.

Espero que Cazen a esos Slytherin y los hagan pagar...

Al veros, la mujer, la profesora, os mira y sonríe aliviada.

- Por las Barbas de Merlín, suerte que estáis bien... pasar dentro del Gran Comedor, la directora os tiene que hablar...

El grupo de jovenes seguían medio caminando como podían, ita le dolía más si cabe el tobillo, y las heridas de Aurora no parecían mejorar...

cinco jovenes caminaban por un bosque, donde días atrás murió una compañera suya, y es que todo es tan diferente para Ita... dos semanas atrás no era más que un joven... un joven normal, y hoy...hoy he estado codo a codo con terroristas, a punto de morir bajo animales que no había visto en mi vida, he visto hadas, o lo que los magos llaman hadas... desde luego, si estos ataques no fuesen matutinos, que seguro que no lo son, el mundo mágico estaría muy bien

En estos pensamientos estaba enfrascado el joven, mientras que ayudaba a pasar a Aurora por encima de una raiz enorme...

el suelo estaba lleno de hojas, hojas machacadas y pisoteadas... ita miró hacia arriba. Las hojas no se veían, una densa niebla impedia el paso a la vista, y el tronco de los centenares de arboles cercanos a ita se cortaba por la mitad a causa de la niebla...

Cuando Ita volvió a mirar al frente divisó algo que no era bosque, que no era verde, que no era frio, que no emanaba tanto misterio e incertidumbre como aquel bosque... Era el castillo!

paso tras paso... dolor tras dolor... el castillo se hacía más visible, y se apreciaban gente fuera de este...

Cuando llegaron a distingir las siluestas, Una mujer, no sabía quien, aunque arecía porfesora les sorprendió con una orden clara y rápida.

Ita se guardó montones de preguntas... pero sólo el silencio emitieron sus labios esos minutos entre salir del bosque y poner un pie en el castillo.

...Al gran comedor pues...