Al recibir la llave, subes a tu habitación para dejar tus pertenencias y poder dar el recorrido más libremente, aunque no puedes resistirte y dar un pequeño paseo por la habitación. No es muy grande pero es lo bastante acogedora como para pasar una cómoda estancia allí.
La habitación que se te ha asignado tiene una distribución sencilla, pero puedes sentir la comodidad en cada parte de las paredes.
La cama es individual y a su lado, tienes una pequeña mesa con dos sillas. Ideal para un juego de cartas o un rato de relajación.
El baño tiene una bañera con una hermosa cortina de color turquesa que la cubre, decoración de caracoles marinos y
algunas estrellas de mar.
Todo parece perfecto, pero hay un detalle que llama tu atención. Justo encima de la cama, puedes ver una lámpara bastante peculiar, donde las manos sujetan las dos bombillas y el rostro de esa extraña muñeca mira fijamente en dirección a la cama.
A pesar de la temática del ambiente, podía ser que lo hubieran tomado muy a pecho. Su ropa parecía un poco vieja y su figura no era tan trabajada como las muñecas de la exhibición. ¿Por qué estaría allí?
Me llevo un pequeño sobresalto al observar la macabra lámpara, pero luego sonrío socarronamente pensando en las posibilidades y el morbo que podría tener montárselo allí. Desde luego tenía que lograr intimar más con Keelin o con la chica del pelo azúl, estaba deseando hablarlo con mi hermano.
Me subo de pie en la cama para intentar curiosear, es posible que quisieran darnos un pequeño susto inicial pero no me cuadraba el hecho de que esa muñeca fuese tan vieja y diferente a las demás.
¿Por qué estás aquí pequeña? - Digo buscando algo en ella que me pudiera orientar.
La curiosidad por la muñeca hizo que olvidaras por un momento la idea de hablar con tu hermano. Lo suficiente para sorprenderte por un parpadeo de las luces de la habitación.
Por poco caes de la cama al buscar a tu alrededor y puedes ver junto a la puerta de la habitación a aquella joven que habías visto desde el bus. Sus ojos brillaban con intensidad y podías ver ese odio que tu mirada representaba en ocasiones. Alimentado siempre por tu hermano. Con una voz de ultratumba pero con un eco más claro, haciendo que parezcan dos voces diferentes saliendo de una misma garganta comienza a hablar.
- Eres salvaje. Tan salvaje como la sed de sangre que surge en tu interior. Lo sabes. La conoces pero no te has enfrentado a ella completamente. Será tu perdición pero ahora, estoy dispuesta a liberarte - se acerca a ti despacio y puedes ver que sus uñas comienzan a crecer, hasta convertirse en garras. Unas garras negras y filosas. Sientes miedo, tal vez por primera vez en tu vida, porque vas a morir y no sabes qué hacer. Caes en la cama y ella mira tu pecho. Sus ojos brillan aún con más intensidad, hasta que apunta las garras a tu corazón.
Con facilidad, atraviesa tu pecho y puedes sentir un dolor terrible. Algo que nunca habías sentido. Te sientes mareado, la respiración se te hace difícil y antes de perder la visión, puedes ver que la joven tiene tu corazón en su mano.
Pierdes el conocimiento, aunque te entregas a la muerte. No sabes cuánto tiempo ha pasado pero te levantas y tu cuerpo está intacto. Estás solo en la habitación. Tocas tu pecho pero no sientes nada diferente. Te preguntas si todo habrá sido un sueño, aunque no estás seguro.
Te vas al espejo y te miras con detenimiento. Por un momento, no ves nada diferente, hasta que retiras la mirada pero sientes que tu reflejo no ha apartado la mirada de ti. Primero, lo miras aterrado, pero luego te unes a su sonrisa y una risa macabra sale de tu boca. La joven cumplió su promesa. Te había liberado.
HOMBRE LOBO ALVINO...
Eres un cazador, un sabueso. Tu sed de sangre no distingue ni amigos ni enemigos. Tal vez tu hermano se salve de tu hambre. Tu único objetivo es devorar a todos en ese lugar y eso es lo que harás.
Te mezclarás con los otros hombres lobo pero podrás permanecer despierto más tiempo que ellos y cada noche, cazar a cualquier personaje, sea o no hombre lobo. Tu objetivo es sobrevivir tú y sólo tú a este ritual de muerte.
DÍA 0
Al recibir el golpe en el pecho, tu rol secundario es revelado:
SABUESO...
Eres un animal salvaje. Puedes seguir el rastro de una persona hasta una habitación y por medio de su esencia, descubrir su rol. Único uso.
Tu excursión nocturna había sido todo un éxito y lograste acabar con Loren sin que nadie se diera cuenta.
Luego, sigues el rastro de Alicia hasta la 204 y te inundas de su aroma. Tus sentidos se disparan y tus ojos muestran ese brillo bestial de tu naturaleza. Tus músculos se tensan mientras condensas su esencia en tu boca.
Después de analizarla, puedes oler aquella semilla de maldad que estaba en tu interior pero aún no ha sido explotada. Ella sólo necesitaba ser despertada.
CONDENADO...
Sabes que morirás. Es tu destino, pero harás lo necesario para que no ocurra. Si eres atacado por los lobos, te unirás a ellos sin dilación. Si eres atacado con otro rol que te pueda llevar a la muerte, lo absorberás y podrás usarlo, pero luego lo perderás.