Partida Rol por web

Y de nuevo, mientras se alzaba la luna, emergía la magia de la noche, y con ella aquellas tramas que podrían poner riesgos sobre todos aquellos apartados del gran halo de luz que rodeaba la historia de Oldland.... era el momento de centrar la mente y decidir una defensa que protegiera a la manada...

Miraste a Tyr, y éste concentrado encontraba unos cuantos rastros de olor parecidos al tuyo... debías de elegir uno, centrarte en él y defenderlo... pero ¿Cuál...?

De nuevo un rastro parecía desaparecer bajo un halo de muerte...

El panorama era desolador, cada vez quedaban menos rastros y mi postura delante de todos resultaba ser demasiado cuestionada. Había fracasado con mi deber en Odland y tenía que modificar todos mis planes, ahora no me quedaba otra más que preservarme. Mostrar a los demás sobre mi conocimiento y distorsionarlo, no quería caer en una trampa por segunda vez. 

Tyr estaba pendiente de tu mandato para seguir de nuevo un rastro... pero entonces, cerraste tu mano en su lomo, indicándole que no habría salida de investigación aquella noche.

El lobo asintió mientras se sentaba a tu lado, como dispuesto a dormir, mientras tenía la mirada centrada al frente.

Quizás pudieras utilizar sus fuerzas aquella noche para ayudarte una vez más... quizás el no conocer de los demás... te ayudaría a poder enviar de nuevo una carta a alguno de aquellas rastros...

Solo había que escribir de nuevo una nota y enviarla... luego los lazos oscuros ya harían su efecto... mientras tu te centrabas en apartar los ataques de tu persona y protegerte de los demás... 

Preocupada por la situación, decido no enviar la carta. Estaba jugando en ambos bandos y no podía tomar esa ventaja ahora, el riesgo era más grande.

Sin embargo,  me entristecía la situación porque estábamos en pérdida y con tanto afluente anti semillas, esto terminaba siendo tierra de nadie.  

Mientras la muerte se apoderaba de su alma, y justo antes de abandonarte a expirar, centrarse tu mirada en el centro de aquella sala, sobre aquellos símbolos escritos en un idioma que no llegabas a descifrar.

Eran como sellos, que ahora se alzaban del suelo y empezaban a danzar, como dispuestos a que tu alma los tocase, sin saber decir, cómo sabía que debías de aferrarte a uno, como si aquello fuera obligado, antes de dejarte marchar...

Debías de decir uno,  ¿Pero cuál...?

IV - V - VI  - XI - XIV - XV - XVII - XIX 

La muerte ha besado sutilmente mis labios hasta consumir la última gota de una vida perturbada,  ahora desde el vacío existencial en donde mi alma estaba dispuesta a navegar en el limbo, se encontraba ante mi los nombres grabados en la roca. 

Acariciando con mis dedos las grabaciones,  en mi mente un nombre surgía "Vyka" pero no podía detectar sus letras en una escritura que desconocía. Sin embargo,  una capta mi atención y es la elegida porque si he caído uno más debería hacerlo. 

- A tí...-  pronuncio esperando con ansias la visita de la muerte en el alma del elegido.