Partida Rol por web

"Bien, bien... Y ahora fuera de mi vista." le espetó a la Toxicity, todavía manteniéndole la mirada despectiva mientras la sombra se iba de allí patinando a toda pastilla. Anemashi pensó que no era mucho dinero, una miseria para ella, quien después de todo era rica. Aunque bueno, bien era cierto que pese a ser rica había intentado no gastar de la hacienda familiar en todo este asunto de las sombras, sino más bien ganarse su propio dinero, como hacían los demás. En parte porque pensaba que era lo justo para ellos, y en otro sentido porque tener un trabajo quizás podría ayudarla a mejorar y madurar... Bueeeno, visto así, 200 yens por espantar a una sombra estaba bien, bastante bien... el negocio de la extorsión salía renta- ¡OSTRAS! ¡Se le había olvidado completamente que estaban allí! ¡Y la habían visto extorsionando a las sombras sin pudor! ¿¡Y ahora qué pensarían de ella!? ¡Seguro que pensarían que era malvada, que habían visto su verdadera cara y que ya no querían tener nada que ver con ella ni...!

- ¡Ayame-chan! ¡So cuuuute!

"¡¿E-eeeeeh?!" le pegó un susto como si la hubiera pillado haciendo algo malo. Que técnicamente era justo eso... Más aún porque Ayame no estaba 'actuando' cuando amenazó a la sombra... Así pues, la chica se llevó una mano al flequillo y empezó a hacer tirabuzones en su cabello todo nerviosa, e igual de nerviosa empezó a responderle, sin saber ya ni en qué idioma estaba hablando, si inglés, japonés, o los dos a la vez.

"¡Ca-calla! ¡No es cierto! ¡Estaba siendo...!" ¿Malvada? ¿Cruel? ¿Mafiosa? ¿Yakuza? "Estaba..." ¿Desahogándose sobre las sombras? ¿Liberándose de tener siempre que ser positiva? "U-um..." ¿Exigiendo dinero sólo por el sentimiento de poder y no realmente porque lo necesitara? ¿Marcando territorio? ¿Empujando a los débiles solo para sentirse más fuerte? ¿Descargando toda la negatividad acumulada sobre los monstruitos? "¡Tonta, ahora las sombras me han perdido el respeto! P-pero gracias... gr-gracias por el piropo... tú también eres cute..."

Para intentar salir de aquella situación embarazosa, Ayame llamó a Sumizome y procedió a atacar a las Sombras.

Los ataques de Ayame inflingieron un montón de daño al primer caballero esqueleto, aunque el segundo se preparó mejor para el golpe y con su espada logro desviar parte de este.

Estuvo a punto de dar paso a un All-Out Attack, pero había algo en el dragón que la llamaba. Quizás esa idea de ser una yakuza que exigía dinero a las sombras, o quizás por lo que simbolizaba: el poder, la buena suerte, el control en medio de un tifón y un maremoto. Eso era lo que necesitaba ella, en cierta manera. Control en la tormenta.

"Um... Lilie-chan... ¿podrías por favor capturar a otro Krek para mí?" pidió, decidiendo lanzarle un Garu al esqueleto en lugar del all out attack.

El vendabal de Ayame no causó demasiado daño, sin embargo los esqueletos estaban demasiado débiles como para tirar ninguna habilidad, por lo que decidieron hacer ataques simples contra su mayor amenaza.

  Igual estaba un poquito mosqueado por mi última jugada, pero que más se le podía hacer ... Si no quieren bailar... pues no bailarán...

  Escuchando la conversación de las chicas me quede mirando hacia el Dragón, el cual igual comenzaba a mostrar cierta fatiga - ehhhhh Anemashi-san... creo que el lagarto este no va aguantar otro cariñito de Lili... - mientras me acercaba hasta el lado del gran lagarto ... Primero se rompe los dientes antes de lograr morderme..

     A ver lagarto flotante... levanta que aún te necesitamos vivo... - terminaba de decir a la vez que sacaba de mi morral uno de los pastelitos que había preparado - di Aaaa~ahhhhhh - mientras se lo introducía en el hocico.

El dragón se come el pastelito, extrañado. Parece bastante contento con Yuuta.

¡Venga chicos no hagamos esperar a los demás, que ya no sé que más contarles en la habitación contigua! - decía Momoka preocupada, porque el tiempo se les echaba encima y pronto perderían más maná.

Por su parte Lilie, alzó la mirada ante el Dragón, y luego miró a Yuuta, a Ayame, a Yuuta de nuevo, a Ayame nuevamente, y finalmente al Dragón; con un suspiro cansado, la pequeña niña invocó a su Persona Principal, para que usara un ataque de oscuridad tal para noquear al Dragón y que Ayame pudiera charlar con él.

-Ayame -comentó lanzando una mirada letal- Tienes una oportunidad. Yo voy a hacer cosas importantes.

Tras esto, Lilie saltó sobre Yuuta en busca de más comida.

 ¿ N..niña ? - mientras sentía como la pequeña comenzaba a escalar por mi espalda como intentando dar con algo.

 ¿ A caso buscas... - metiendo mi mano en el morral una vez más sacando un pastelito con un decorado más verde y más de tienda -   Ésto ? - a lo que comenzaba a acercarcelo a su boca - ¿ Aaaa~aahhhhh ?

Tenía miedo de equivocarse, Lilie le había puesto toda la responsabilidad, habiendo ya la niña capturado uno. ¿¡Se trataba de una prueba de la pequeña!? Ayame asintió con firmeza, se acercó al dragón y le dijo... "Únete a nosotros..."

Lilie muerde los dedos de Yuuta, no los de la mano que estaban sujetando el Pastelito de Trebol, si así lo hiciera tendría al menos un mínimo de sentido, sino la OTRA MANO la cual ni suponía una amenaza ni mucho menos un motivo más allá de ser mordida por la pura malicia de la criaja.

CHOMP

Auchhh - mientras sentía en mi mano libre un leve picor.

¿ Ehhhh L-lili ?

miraba como la misma me intentas arrancar los dedos aún sin resultado... ni siquiera dolía...

¿ Entonces no lo quieres ? - preguntaba con cierta malicia - por qué si es así... lo vuelvo a guardar y todo...

 ¿ Eso es lo que quieres ?

Lilie no solo derribó al dragón, si no que se comió un pastel para nada curativo de sabor a menta, además de una uña de Yuuta, la cual seguramente echaría de menos cuando hiciera actividades tales como cocinar, teclear y demás actividades que requieran ejercer presión con dicho dedo. A la próxima sabría que no debería darle en mano nada a la niña, si no con un palo.

Por otra parte, el dragón miró atento a Ayame y realizó tres preguntas.

Veo muchos dilemas en tu corazón, joven, así que voy a plantearte tres problemas de vida o muerte y debes decirme por qué.

¿Es mejor que muera un pintor de cuadros de un talento increíble o un señor que gestiona millones de perfiles en redes sociales?

¿Qué vale más, la vida de una científica con la cura del Sida o la de veinte niños?

¿Un grupo de temibles piratas o un magnate de las armas?

¿Es mejor que muera un pintor de cuadros de un talento increíble o un señor que gestiona millones de perfiles en redes sociales?

Ante la primera pregunta empezó a seguirle el juego, Anemashi pensaba que el dragón estaba planteándole un dilema filosófico, un juego dialéctico. "Entiendo... la clásica dicotomía entre el arte y la tecnología, las letras y la ciencia... Es una pregunta profunda..." desde luego que lo era, tan debatida a menudo en la epistemología. Ayame había leído sobre eso en su biblioteca, ya desde muy pequeña, aunque siempre era una lectura densa y difícil. "Creo recordar que Elistófenes¹ decía que la verdadera respuesta es que ninguna de las dos opciones es mejor que la otra. Para ser pleno el hombre tiene que tener un equilibrio entre su mundo emocional y el racional, ya que lo que nos hace humanos no es solo uno ni otro extremo, sino la suma de ambos."

¿Qué vale más, la vida de una científica con la cura del Sida o la de veinte niños?

Pero al oir la segunda pregunta ya Anemashi frunció el ceño con disgusto y repugnancia. "¿Te estás riendo de mí? No pienso elegir entre eso. " ¿La vida de veinte niños o la cura de una enfermedad de la humanidad, fuera sida, cancer o cualquier otra? "No es aceptable sacrificar ninguna de las opciones."

¿Un grupo de temibles piratas o un magnate de las armas?

"Bah, vale más el magnate de las armas. Ese hombre crea puestos de trabajo, mueve dinero moviendo mercancías. No es culpa suya que la sociedad legalice algo que no es ético, que sirve para matar. ¿Es parte del problema? Quizás. Pero no es el problema en sí. Mientras que los piratas sí lo son, son gente que hace daño a los demás usando esas armas. Culpar a la herramienta es dar palos de ciego."

Veo que sigues con demasiados conflictos y dilemas encima... ¡Quizá pueda espabilarte un rayo! - comentaba el dragón, mientras le lanzaba un Zio a Ayame.

    Puesss... si que tienes determinación niña...- mientras por fin lograba soltar a la pequeña tiburón de mi mano  ... el corta uñas meno ortodoxo... - toma tu premio - le arrojaba  el pastelito para que lo agarrara en el aire mientras comenzaba a ir donde Anemashi y el dragón con preguntas trampas ... y este parece que esta echo con los profesores del peliblanco .... 

  Pues juguemos a esto señor preguntas...- mientras cogía el pastelito que me quedaba bien lejos de la boca de la niña ... no sera que me lo intenta comer también ... - Te vienes con nosotros... y te dejo comer otro de estos....- mientras lo agitaba de un lado a otro...- hummmmmm~mmmm casero... glaseado fresquito.... ¿ que sera su centro.. ? que sera... que sera...

El sabio dragón se relamió al ver al pastelito y empezó a hablar.

¿Qué pasará, que misterios habrá? Puede ser mi gran noche... - se acercó y le dio un bocado enorme al pastel, mientras poco a poco iba siendo absorbido por Yuuta. - Al despertar, ya mi vida sabrá algo que no conoce... - se oía desde dentro de Yuuta.

Por otra parte los esqueletos no se quedaron impasivos, al estar tan débiles decidieron solo hacer ataques básicos. Contra Yuuta, porque si.

"Akuhi-kun, Lilie-chan... gracias." Tal vez la lección más importante que le había mostrado el dragón era no tanto esa tontería de las dicotomías... sino aquello que ya Saito le había adelantado antes, que podía depender un poquito de sus amigos... que ellos estaban ahi para ayudar igual que ella...

Por su parte, Lilie se resignó, bufando como si fuera un gato, volvió a morder la mano que le daba de comer, literalmente, pues pese que había cogido el Pastelillo al vuelo, se acercó a Yuuta para pegarle un mordisco así, gratuito, sin venir a cuento, pero bueno, eran cosas de niños... Al menos Lilie no usaba aparato.

Eiggghaaa

Dijo la pequeña, malamente, pues aún tenía los dientes agarrando la mano de Yuuta. Y por si las moscas, estaba señalando al enemigo esqueleto, no fuera a ser que su Persona principal decidiera lanzarle una bola de oscuridad al mordido.