Partida Rol por web

Tiempos Interesantes

Camarote de los Oficiales (Escena Paralela)

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29/03/2015, 23:20
Dr. McKay

-Adelante... Todo esta despejado. - dije, mirando a Venus, a la espera de que me acompañara al interior de aquel camarote. Moria de curiosidad por saber qué tenia que decirme.

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02/04/2015, 16:40
Meredith Vickers

Por fortuna el camarote de Rodney estaba vacío. Me ofreció entrar y asentí con una sonrisa mientras pasaba.

- Menos mal. Pensé que nunca encontraríamos un sitio  donde poder hablar tranquilamente. -Cuando entré me senté en una de las sillas.

- Rodney… antes de decirte nada, quiero que sepas que hago esto porque creo que eres de fiar. Sé que es raro, ya que apenas nos conocemos. Pero tengo la sensacion de que puedo confiar realmente en ti. Y créeme, soy bastante buena analizando a la gente.

La verdad es que McKay me había caído en gracia. En principio me aprobeché de que estaba muy interesado en mí. Aunque, no sabia muy bien por que, me encontraba cómoda en su presencia.  Tenía un gran ego, era muy prepotente, pero la verdad es que parecia genuinamente interesado en mi persona. Y me trataba muy bien. Muchísimo mejor de lo que estaba acostumbrada en el mundo de las corporaciones, donde a veces tenías que entretener a un gordo seboso que se piensa que es un galan de libro, cuando en realidad es un ser repugnante cuyo único atractivo reside en el poder y el dinero. Aunque claro, para que te gustara alguien por eso debías carecer de personalidad. O bueno, siempre estaban casos como el mío, que consistía en no tener mas opción que hacer lo que me mandaran.

- Necesito tu ayuda. Es en un campo que me resulta completamente desconocido. Hace unos días encontré unas pastillas. Estas pertenecen a alguien de la expedicion y me gustaria saber qué es... y claro, automáticamente pensé en tí.

Comenté mirándole con una sonrisa. Y le enseñé la pastilla.

Notas de juego

solo para el director

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02/04/2015, 16:42
Meredith Vickers

Por fortuna el camarote de Rodney estaba vacío. Me ofreció entrar y asentí con una sonrisa mientras pasaba.

- Menos mal. Pensé que nunca encontraríamos un sitio  donde poder hablar tranquilamente. -Cuando entré me senté en una de las sillas.

- Rodney… antes de decirte nada, quiero que sepas que hago esto porque creo que eres de fiar. Sé que es raro, ya que apenas nos conocemos. Pero tengo la sensacion de que puedo confiar realmente en ti. Y créeme, soy bastante buena analizando a la gente.

La verdad es que McKay me había caído en gracia. En principio me aprobeché de que estaba muy interesado en mí. Aunque, no sabia muy bien por que, me encontraba cómoda en su presencia.  Tenía un gran ego, era muy prepotente, pero la verdad es que parecia genuinamente interesado en mi persona. Y me trataba muy bien. Muchísimo mejor de lo que estaba acostumbrada en el mundo de las corporaciones.

- Necesito tu ayuda. Es en un campo que me resulta completamente desconocido. Hace unos días encontré unas pastillas. Estas pertenecen a alguien de la expedicion y me gustaria saber qué es... y claro, automáticamente pensé en tí.

Comenté mirándole con una sonrisa. Y le enseñé la pastilla.

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07/04/2015, 00:20
Dr. McKay

Alcé una ceja, con una media sonrisa, cuando Venus dijo que le parecía de fiar. ¿Acaso lo dudaba? - Pues claro que soy de fiar, qué iba a ser si no... - le dije, agitando una mano en el aire, mientras le indicaba que tomara asiento donde pudiera, mientras me aseguraba de que  nadie entraria allí sin que nosotros lo supieramos.

Entonces la dejé hablar, asintiendo, cuando me mostro aquellas pastillas. Y alargué una mano, con el ceño ligeramente fruncido, observandolas con atención- ¿Dónde las encontraste? ¿Sabes a quién pertenecen? - pregunté inicialmente, sin decir aún si sabía o no qué eran exactamente, o si podría ayudarla. Información, la piedra angular de cualquier tipo de investigación. Necesitaba saber más si quería que la ayudara. Si no, podría errar de una forma fatal.

-Puedes contarmelo todo. Soy una tumba, tienes mi palabra.

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14/04/2015, 14:54
Meredith Vickers

Sonreí cuando Rodney dijo que claro que era de fiar. La verdad es que me había caído en gracia. Y para mi decir eso de alguien era mucho decir. La mayoría de las ocasiones, mis pensamientos en referente a las personas se basaban en a los que tenia que matar y a los que quería matar. Pocas veces había gente que no me importara y mucho menos que me cayera bien.

Me senté en un silla mientras le miraba. Y escuche sus preguntas. Desde luego que la sinceridad ayudaría a su investigación pero la sinceridad absoluta seria peligrosa para el.

-Aparte de ser la asistenta de la Consejera Wray tengo otras tareas. Asuntos de corporaciones. Tengo que investigar si la Weyland Yutani a metido a operativos especiales. Tengo ciertas sospechas de alguien y he encontrado que siempre toma estas vitaminas. Una cada día. Según averigue solo son vitaminas. Pero cuando fuimos despertando del hipersueño le observe , estuvo bastante tiempo sin tomarlas y parecía muy cansado y hasta enfermo. Pero cuando volvió a tomarlas pareció recuperar la forma.

Vale era un forma un poco chapucera de contarle la historia. Pero que podía decirle. ¿Son mías? Pero tenia que contarle los síntomas que había tenido para que pudiera investigar. Quería saber a toda costa que era la mierda esta que me hacían tomar.

Notas de juego

solo para el director.

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14/04/2015, 15:01
Meredith Vickers

Sonreí cuando Rodney dijo que claro que era de fiar.

La verdad es que me había caído en gracia. Y para mi, decir eso de alguien era mucho decir.

Me senté en un silla mientras le miraba. Y escuché sus preguntas. Desde luego que la sinceridad ayudaría a su investigación, pero la sinceridad absoluta seria peligrosa para él.

- Aparte de ser la asistenta de la Consejera Wray... tengo otras tareas. Asuntos de corporaciones. Tengo que investigar si la Weyland-Yutani ha metido operativos especiales a bordo. Tengo ciertas sospechas sobre alguien y he encontrado que siempre toma estas vitaminas. Una cada día. Según averigué, sólo son vitaminas... pero cuando fuimos despertando del hipersueño le observé, estuvo bastante tiempo sin tomarlas y parecía muy cansado, hasta enfermo. Pero cuando volvió a tomarlas pareció recuperar la forma.

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19/04/2015, 17:31
Dr. McKay

Fruncí el ceño, atendiendo a la explicación de Venus sobre aquellas pastillas- No, no es el efecto que suelen causar las vitaminas. ¿De quién son? - volví a preguntar, con las pastillas en la mano y aire pensativo, sin pasar por alto que no había contestado a mi pregunta la primera vez que la habia formulado.

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19/04/2015, 23:50
Meredith Vickers

Asentí cuando dijo que no era el efecto que solían causar las vitaminas.

-Que me vas a contar. Pensé divertida. Con el despertar olvide tomarlas y me sentí morir , de una manera demasiado literal.

Aunque si algo bueno tenia Mckay era su inteligencia en este caso jugaba en mi contra. Pues no había olvidado el asunto de que no le había dicho de quien eran. Por motivos tan obvios como su propia vida no podía decirle que eran mías. Si descubría mi tapadera lo mas lógico seria que le matara de tal manera que pareciera una muerte natural. Algo que no me apetecía lo mas mínimo. Por no mencionar que dudaba mucho que mis ``adorables´´ jefes no hubieran metido a mas de una persona con el mando de activación de mi dispositivo. Y aunque estaba segura al 99´99% que Mckay no era uno de ellos no me olvidaba de ese 0'01% tan importante. Si algo había aprendido en la vida es que para que pasara algo malo con un pequeñísima posibilidad bastaba , para que pasara algo bueno era mas complicado. Suponía que eso podía deberse a Dios. Sin duda creía en el. Algo raro y que nadie sabia. Creía en el y odiaba a ese cabrón a muerte. ¿Quien si no salvo un ser divino podía orquestar los hilos de la historia? Seguramente encontraría divertido sentarse a mirar sus creaciones. Ver como sufríamos y sangrábamos. A mi creador le gustaba mucho hacerlo. Por lo que era de imaginar que al suyo también.

Así por la seguridad de Mckay decidí mentir. Y puestos a mentir. Mejor hacerlo en mi beneficio.

Suspire cuando Mckay insistió en saber de quienes eran. Me acerque a el y le puse las manos en las mejillas.

- Rodney. No quiero ponerte en peligro. Cuando menos sepas mejor. Esto es peligroso. Me mordí el labio. Me gustas...me gustas mucho. Curiosamente era de las pocas verdades que habían salido de mi boca en los últimos tiempos. Esta bien. Son de la secretaria del Smith. La Señorita Monnipenny. Le mire a los ojos. Pero tienes que prometerme que no harás nada ni dirás nada a nadie. Esa mujer puede ser muy peligrosa. Si descubriera que la investigo y que tu me has ayudado podría matarnos. Hace tiempo escuche que la Weyland Yutani tenia muy avanzado un programa de creación genética. Creaban guardaespaldas para sus grandes ejecutivos. Las historias dicen que son letales. Letales de verdad Rodney. Así tienes que guardar silencio y ser discreto. Prometemelo. Le mire con cara de suplica y preocupación. Prometemelo.

Había manipulado a personas durante gran parte de mi vida. Que coño si eso era de lo mas suave que había hecho. Había matado a todo tipo de personas. Sin vacilas. Mujeres ,hombres , niños , ancianas bebes. Lo que fuera sin vacilar y sin remordimiento. Y aquí estaba sintiéndome mal por que estaba mintiendo a un hombre al que había conocido pocos meses antes. Pensaba que me habían creado sin corazón. Pero aquí estaba sintiendo uno.

Notas de juego

solo para el director.

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20/04/2015, 00:08
Meredith Vickers

Asentí cuando dijo que no era el efecto que solían causar las vitaminas.

Aunque si algo bueno tenia McKay era su inteligencia, en este caso jugaba en mi contra. Pues no había olvidado el asunto de que no le había dicho de quien eran. Por motivos tan obvios como su propia vida, no quería decirle mas. En el mundo de las corporaciones, la gente podía trabajar para el enemigo. Y aunque estaba segura al 99´99% que McKay no era uno de ellos... no me olvidaba de ese 0'01% tan importante. Si algo había aprendido en la vida es que para que pasara algo malo con un pequeñísima posibilidad bastaba, para que pasara algo bueno era mas complicado.

Suspire cuando McKay insistió en saber de quienes eran. Me acerque a el y le puse las manos en las mejillas.

- Rodney. No quiero ponerte en peligro. Cuando menos sepas mejor. Y esto es muy peligroso -me mordí el labio- Me gustas...me gustas mucho -curiosamente era de las pocas verdades que habían salido de mi boca en los últimos tiempos- Está bien. Son de la secretaria de Smith. La señorita Monnipenny -le mire a los ojos- Pero tienes que prometerme que no harás nada, ni dirás nada a nadie. Esa mujer puede ser muy peligrosa. Si descubriera que la investigo y que tú me has ayudado podría matarnos. Hace tiempo escuché que la Weyland-Yutani tenia muy avanzado un programa de diseño y modificación genética. Creaban guardaespaldas para sus grandes ejecutivos. Las historias dicen que son letales. Letales de verdad, Rodney. Así que tienes que guardar silencio y ser discreto. Prométemelo -le mire con cara de suplica y preocupación- Prométemelo.

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20/04/2015, 13:10
Dr. McKay

Escuché atentamente la explicación de la mujer, mientras mi cabeza era todo un torbellino de ideas inconexas que, a velocidades imposibles, intentaban enlazar entre sí.

Había diferentes variables en aquella ocasión y todas debian estar relacionadas de alguna forma. La cuestión era, ¿como?

Pastillas. Lo primero eran las pastillas. Inocentes vitaminas capaces de alterar el comportamiento de una persona.

Monypenny. La segunda variable. Una mujer bella, con trazas de rubia tonta por lo poco que habia podido observar pero que, segun Venus, podia ser letal. La cuestion era... ¿hasta que punto?

Smith. Un comp,eto hijo de puta. No hacia falta ser un lumbreras para saberlo. En aquel caso estaba seguro de que su etica no iba ser ningún problema a la hora de experimentar con diferentes sujetos, sin importar que fuera su secretaria... o la de otro.

Las corporaciones. Despiadas, y capaces de hacer cualquier cosa, incluso "crear" seres a su antojo y conforme a sus necesidades. Pero entonces...

-Pero entonces, si ha sido "creada" por ellos... ¿De que estamos hablando? ¿De una superhumana o algo asi? La dominatrix nos advirtio de la presencia de entes posiblemente no humanos entre nosotros, nos pidio que absolutamente toda la tripulacion fuera examinada aunque, en aquel momento, lo pase por alto, ofuscado como estaba por el enorme desperdicio de talento que iba a suponer para mi tener que ponerme a revisar la nave entera en busca de fallos tecnicos de algun tipo.

De hecho... - continue hablando, mientras mi mente parecia ir 50 pasos por delante mio. Y entonces, de repente, todo cobro sentido. Paso a paso, aquella compleja obra fue tomando forma en mi mente.

-Eres una de ellos... - dije, acabando por mirarla, con la mayor expresion de sorpresa que jamas hubiera visto en mi rostro. Claro que si, ¿como no lo habia visto antes? Wray nos encarga un examen exhaustivo de la tripulacion, a excepcion de su secretaria y el macaco de Miles. Acto seguido nos habla de posibles modificaciones geneticas entre miembros de la tripulacion. Ahora, Venus acababa de confirmarme que muchos peces gordos los habian usado como guardaespaldas. Y ella... era la guardaespaldas de Wray. Blanco y en botella. Minipunto para ti, Rodney.

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20/04/2015, 22:52
Meredith Vickers

Observaba a Rodney. Su silencio implicaba que estaba pensando demasiado lo que le había dicho. Y es inteligente.

Asentí cuando preguntó si estábamos hablando de una superhumana. Siguió razonando y acabó llegando a un punto, a una deducción, de la que por puro despiste no me había percatado. Estaba tan distraída con él que no había tomado todas las precauciones. Por primer vez en mi vida, había sido descuidada.

Cuando dijo ese "De hecho"...

No pude evitar pensar: No lo digas Rodney. Por favor. No lo digas.

Pero lo dijo. "Eres una de ellos".

Esas cuatro palabras que no quería escuchar y me hicieron reaccionar por instinto. Estaba muy cerca de McKay. Mi mano derecha se movió a la velocidad del rayo apresando su cuello mientras lo levantaba en vilo, sosteniéndolo el aire sin el menor esfuerzo mientras sus pies se agitan sin tocar el suelo.

- ¿Por que has tenido que ser tan listo? O yo tan descuidada. El caso es que sabia demasiado. Y en condiciones normales lo mejor sería que lo matara y me deshiciera del cuerpo. No sería la primera vez. Puede que en estas circunstancias fuera un poco mas complicado de otras, pero nada que no fuera capaz de solventar. Podía partirle el cuello con leve movimiento de mi mano y hay muchos conductos de ventilación que no revisa nadie...

Pasaron dos segundos... y mi mano no se movió. Entonces note como corría algo húmedo por mi cara. Eran lágrimas. No quería matarlo. Pero no sólo era eso, es que no podía matarlo. Le solté mientras lloraba.

- Lo siento Rodney. No puedo. No puedo hacerte daño. Suspiré mientras me sentaba, completamente perdida.

- Las... las pastillas son mías. Olvide tomarlas después del sueño y casi muero. A la mierda pensé.

Durante toda mi vida nunca había tomado una decisión propia por mí misma. Siempre había obedecido todo lo que me habían mandado. Por molesto o repugnante que fuera. Y luego, claro, estaban las circunstancias que no me dejaban mas opción, esas siempre habían sido las peores. Pero ahora, por una vez, haría algo que yo había elegido.

- Me crearon en la base de Utopia Planitia en Marte. Mi primer recuerdo es estar en un laboratorio. Fui diseñada para cumplir las tareas que la Compañía quisiera encomendarme. Por eso me dotaron de belleza, fuerza, resistencia... y un sinfín de cosas -suspiré- Soy lo mas parecida a un moderno monstruo de Frankenstein.

Mire a Rodney. Sin duda, a estas alturas, saldría corriendo y gritando... o me miraría con cara de asco y terror. Pero no podía culparlo. Ni tampoco podía matarlo, como sin duda el buen Doctor Schmidt insistiría, con su asquerosamente acaramelada voz: "Tienes que matarlo, querida. Eres una Avispa con apariencia de Mariposa. ¿Qué hacen las Avispas cuando se las acorrala? Atacan y matan sin dudar..."

Me daba igual. No iba a matarlo. Siempre me había dado igual matar, para mí era como apagar una luz... Pero con Rodney es diferente. A pesar de que mi cerebro me decía lo que tenia que hacer, mi corazón me indicaba lo contrario.

-No sabia que me había dado un corazón, Doctor Schmidt. Susurré metida en mis pensamientos.

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22/04/2015, 23:42
Dr. McKay

Esperaba muchas reacciones por parte de Venus: que lo negara, que se echara a llorar, que se enfadara, incluso que me dejara con la palabra en la boca... Habria esperado que me abofeteara, que lo confesara todo, que se desahogara... Estaba preparado para cualquier cosa... menos para que me empotrara contra la pared.

Mire a la rubia, con los ojos desorbitados, sintiendo como, de repente, el aire comenzaba a vaciar mis pulmones, de forma proporcional a la presion que ella estaba ejerciendo en mi tráquea. Y, de repente, mi vida comenzo a pasar por delante de mis ojos. ¿De verdad seria aquel mi fin? No, claro que no. No era posible. Yo era el gran Rodney McKay, merecia una muerte muchisimo mas exhuberante, algo tan impresionante como mi carrera. No merecia morir en aquel cuchitril, a manos de aquella impresionante mujer.

Sin embargo, de repente, Venus me solto, como si hubiera sido capaz de escuchar mis pensamientos. Y me deje caer al suelo, escurriendome por la pared, mientras tosia, intentando recuperar el aire y el color, llevandome las manos a mi propio cuello para comprobar que seguia de una pieza.

¿Que? ¿Que habia pasado? Iba a matarme, lo tenia clarisimo. Y, de repente, se habia detenido y... ¿Se habia puesto a llorar? Ni siquiera la mas poderosa de las menstruaciones era capaz de hacer eso. ¿Y por que se estaba disculpando?

Durante unos segundos, me limite a escucharla, en silencio, demasiado preocupado por recuperar la respiracion y que mi corazon siguiera latiendo como para contestar a cualquiera de sus afirmaciones. Y acabe por mirarla, con el ceño fruncido, y las manos aun en el cuello, respirando de forma ritmica, intentando llenar mis pulmones de aire, justo tras oir aquel ultimo susurro- Pues no estaria mal que antes de intentar estrangularme la proxima vez, te pararas a pensar un segundin de nada que, a lo mejor, los demas tambien tenemos el nuestro, y que somos capaces de guardar un secreto porque hay cosas que valoramos mas que otras. - dije, irritado. Me habia mosqueado. Joder, claro que me habia mosqueado. ¡Habia intentado matarme! ¡Joder, si hacia menos de una hora estaba retozando conmigo! ¡¿Como habia llegado a ese extremo?

Sin embargo, el hecho de que estuviera enfadado no descartaba el hecho de que, en medio de aquel enfado, tambien habia realizado mi propia "declaracion", de que tambien habia dejado claro que me importaba lo suficiente como para que el hecho de que ese mamonazo con cara de malo de pelicula de sobremesa la hubiera creado "a la carta" fuera a disuadirme. Siendo objetivos, Venus era eso, una diosa, una mujer perfecta. Absolutamente perfecta en todos los sentidos. Y yo, un amante de la ciencia al que, a aquellas alturas, lo que menos le preocupaba era que ella hubiera salido de una probeta o de la entrepierna de su madre. Esas cosas, al fin y al cabo, estaban muy sobrestimadas... ¿no?

Y, aunque me habria encantado decirle lo que pensaba sobre todo lo que acababa de contarme, lo cierto es que aun necesitaba unos segundos para terminar de reponerme del todo.... Al fin y al cabo, a uno no intentan matarlo todos los dias... ¿o si?

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23/04/2015, 22:36
Meredith Vickers

Rodney podía haber gritado, huír corriendo o refugiarse en un rincón. Pero no lo hizo. Estaba sorprendido y también algo molesto, como era natural... había estado a punto de morir. De hecho, eso era lo que tenía que haber ocurrido. Pero al igual que no murió, no reaccionó como yo esperaba.

Y lo más importante de cuanto dijo fue que era capaz de guardar un secreto, incluso uno como el mío, por que había cosas que valoraba más que otras.

Oír eso fue un bálsamo para mis oídos, me alegro muchísimo, me dió esperanza. De hecho era el mejor momento puro y bueno que había vivido nunca. Mis únicos buenos recuerdos estaban plagados de muerte. Porque a veces sentaba de maravilla matar a ciertas personas. La gran mayoría de mis victimas lo merecían. Pero tenía que admitir que no eran buenos recuerdos, aunque el matar a alguien me pudiera hacer sentir bien. Sin embargo, en esta mierda de habitación, que se encontraba en una bañera flotante perdida en un rincón del espacio, se había desarrollado el mejor momento de toda mi existencia. El único realmente digno de valorar. Para cualquier otra persona esto podría parecer triste y lamentable, pero para mí era algo increíble. Lo que más podía definir como me sentía... sería la metáfora de un ciego que viera por primera vez. Nunca nadie había demostrado interés de verdad por mí... y que Rodney, después de casi haber muerto, hubiera dicho que me valoraba... era lo mejor del mundo.

- Si lo llego a saber, te estrangulo antes -comenté con un humor un tanto negro. Me limpie las lagrimas de la cara- Nunca le había contado esto a nadie. O al menos, a nadie vivo. Alguna vez me había desahogado con alguna víctima.

Me acerque a él muy despacio y le cogí de las manos, con suavidad y ternura.

- Siento mucho lo que ha pasado. Debo de haberte dado un susto de muerte. Pero si te sirve de consuelo, nunca en mi vida había ni tan siquiera dudado en matar a alguien. Simplemente lo hacía, como quien apaga una luz. Contigo no solo he dudado: no he podido. Ni podría. -pensé en lo que estaba diciendo. La verdad es que la sinceridad y la empatía no eran lo mío. Sabía camelar a cualquier hombre, o mujer, pero no sabía ser sincera de verdad. Y con él quería serlo- Lo que quiero que entiendas es lo importante que eres para mí. No sé cómo ha pasado, pero me importas. Me importas mucho. Tanto, como para haber roto todas las normas que me habían hecho adoptar de una manera tan férrea que parecían fueran comandos y yo un ordenador -le miré a los ojos- Lo siento mucho. Tienes todo el derecho del mundo a estar molesto conmigo. Pero quiero que sepas que nunca te haré daño.

Por primera vez en mi vida me sentía insegura. E imaginaba que aunque Rodney no era un portento en eso del lenguaje corporal, lo estaría notando. Pero es que nunca había estado en la situación en la que ahora me encontraba. Y la verdad, no sabía muy bien cómo actuar. No quería fingir o hacer un papel. Simplemente quería ser yo misma. Aunque eso tenía un problema. ¿Quien era yo realmente? A lo largo de los años había realizado mil trabajos, con mil diferentes personalidades y nombres. Tantos que no sabía quién era yo misma. Meredith Vickers no era más que un nombre que me dieron en un laboratorio. Aunque tenía la sensación que en compañía de Rodney había sido mas yo misma que en toda mi vida.

Cuando había reído con él lo había hecho de verdad. Y lo mismo cuando había disfrutado. Me había hecho sentir más viva y feliz de lo que podía recordar nunca.

Y para qué negarlo, eso asustaba. Asustaba mucho. Asustaba el nuevo abanico de emociones y sentimientos que parecía tener y asustaba el hecho de hacer algo mal y fastidiarlo todo.

Como si haber estado a punto de matarlo no fuera suficiente.

-Por favor di algo. Que estás enfadado, o lo que sea...

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27/04/2015, 00:25
Dr. McKay

Aun tarde unos segundos mas en reaccionar, los mismos que el aire terminaba de regresar a mis pulmones. Y, afortunadamente, tambien los necesarios para escuchar toda la explicacion de Venus, y aquella disculpa por su parte. Y, antes de que pudiera darme cuenta, la encontre sujetando mis manos, con las mejillas llenas de lagrimas, mas preocupada por lo que pudiera pensar de ella en aquel momento que porque acabara de conocer su mas oscuro secreto.

Y entonces llego su peticion, aquella peticion que resulto ser tan espontanea e inocente que consiguio arrancarme una media sonrisa, al tiempo que acababa por soltar una de mis manos, para llevarla a su mejilla, secando con la yema de mis dedos aquel rastro de llamas. ¿Acababa de decir que yo le importaba? ¿Que era importante para ella? ¿En serio?

La sonrisa se ladeo ligeramente en mis labios, y fui incapaz de contenerla por mas tiempo. A ver, uno era Rodney McKay, estaba claro, pero tambien tenia que reconocer que nunca habia triunfado de una manera como aquella.

-La proxima vez que me quieras calentar, en vez de intentar asfixiarme, prueba con unas esposas. - fue mi respuesta entonces, al tiempo que le dedicaba un guiño y una sonrisa, dandole a entender que, por mi parte, no tenia nada de que preocuparse. Y acabe por extender la mano hacia ella, indicando con un gesto de mis manos que se acercara, para poder abrazarla.  Y es que, aunque no lo dijera, aunque fuera incapaz de declararme, o de decir que sentia lo mismo, mis actos, mis gestos, y, sobre todo, mi mirada, decia que yo, el Gran Rodney McKay, estaba pillado de aquella rubia hasta la medula.

-Ven aqui, anda. - acabe por decirle, mucho mas tranquilo ahora que habia vuelto a recuperar el color. Aun habia mucho de que hablar, pero unos segundos de humanidad no suponian nada.

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28/04/2015, 00:10
Meredith Vickers

Pasaron unos segundos, desde que hable por ultima vez, que se me hicieron largos no, eternos.

Entonces Rodney sonrió y soltó su mano, secándome las lagrimas de la mejilla con ella.

Y reí un poco cuando dijo lo de las esposas.

- Jijijiji... eso lo dices... ¿Por que sabes lo que soy capaz de hacer con unas? -Por fortuna la cosa había acabado bien. Me había sincerado más de lo que había hecho nunca con nadie. Y por una vez me había mostrado como era. No es que Rodney me hubiera quitado el escudo, es que me había arrancado la armadura entera.

Había algo cálido y balsámico en el. No sabia qué era exactamente, pero tenía claro que quería que continuara a mi lado. No negaría que me hubieran gustado unas palabras más que correspondiesen a mi declaración de interés. Pero intuía que Rodney no era un genio en eso de los sentimientos femeninos. Por no mencionar que de poco no había muerto...

Entonces me acercó a su lado y me dio un abrazo. Correspondí con fuerza, pero sin pasarme. En toda mi vida, este era el primer abrazo real que daba y me daban. Nunca había entendido por qué la gente lo veía tan especial y con ese poder de revitalizar a alguien... hasta este momento. Hacia unos segundos me encontraba vacía, sin fuerzas... y ahora me sentía capaz de levantar el mundo.

Me separé con delicadeza de el.

-Gracias. De verdad. -dije con una sonrisa- ¿A propósito... de qué querías hablar? Por que lo mío eran las pastillas. ¿Pero y lo tuyo? Por cierto, no te acerques a la secretaria de Smith. Creo realmente que es peligrosa. Pero no creo que sea una mujer mejorada genéticamente. Su frialdad ante todo tipo de comentarios -la verdad es que mas bien parecía que no entendía lo que la trasmitía. Y sinceramente, no era por ser creída pero si una mujer como yo hacia gestos o comentarios del tipo que hice, la gente reaccionaba de una forma u otra. Pero ella no lo hizo de ningún modo en absoluto- y lo que la he observado en este tiempo me hacen sospechar. Es esa eficacia tan... perfecta. Creo que es un androide. Y no creo que sea una simple asistente. Imagino que proporcionará seguridad a Smith.

La verdad es que por una parte me llamaba la atención una confrontación física con ella. ¿Seria capaz de tumbar a un androide? Ya lo había hecho antes. Con graciosas consecuencias. Aun recordaba con una sonrisa a ese pobre sintético, partido por la mitad, moviendo cómicamente los brazos para tratar de agarrarme. Pero algo me decía que si Monnipenny era un androide, no seria del mismo tipo.

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29/04/2015, 01:01
Dr. McKay

Acabé por alzar ambas cejas, sonriendo, mientras liberaba toda la tensión del momento previo a aquel abrazo- Bueno, he visto qué eres capaz de hacer sin ellas... - dije, con cierto aire burlón, mientras acababa por dejar un beso en su frente como única muestra de mi humanidad, antes de acabar por separarme.

Cogí aire una última vez, quedándome en el suelo, como si aún temiera que, al ponerme de pie, fueran a temblarme las piernas o algo por el estilo. Y entonces la escuché preguntarme sobre por qué queria hablar con ella, lo que me hizo resoplar, con una expresión algo cómica- Uff... ahora mismo creo que ni me acuerdo...- dije, con una media sonrisa, mientras acababa por mirarla de reojo, con la espalda apoyada en aquella pared de metal.- Oh, si. Ya recuerdo... en realidad quería hablar de tu jefa, y de lo que estamos haciendo aquí. Creo que estamos de acuerdo en que ni siquiera esos primates de la cantina se tragan eso de que estamos aquí para encontrar a esas pobres ovejitas que se han perdido... Y supuse que tú sabrías algo más sobre todo esto. Sobre qué es lo que teme tu jefa; sobre la extraña fauna que hay aquí reunida; y sobre por qué nos han traido aquí. Tengo sospechas de que alguien podria haber intentado boikotear la nave y atentar contra nosotros... y si es posible que estemos en peligro, mas vale que seamos capaces de saber de dónde procede la amenaza, como poco. -añadí, recuperando la compostura, mientras apoyaba tambien la nuca en la pared, echando ligeramente hacia atras la cabeza, con las rodillas flexionadas y los brazos extendidos hacia ellas.

Y entonces habló de aquella rubia, la secretaria de Smith, dejando al descubierto sus sospechas- Espera... ¿Un androide? ¿Me estas diciendo que esa rubia es una maquina? - le pregunte, con el ceño fruncido. Lo cierto es que no había pasado el tiempo suficiente en su presencia como para saber si aquello era posible o no.

Entonces fruncí el ceño, pensando, de repente, en la doctora Roslin- Meredith... ¿Crees que si sugiero a la doctora Roslin que haga las pruebas a la muñequita saldra a la luz? Si te digo la verdad, a estas alturas, creo que no me fio ni de mi sombra, pero creo que eso era, precisamente, lo que tu jefa estaba buscando.

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30/04/2015, 00:20
Meredith Vickers

No pude evitar sonreirme cuando hizo el comentario acerca de lo que me había visto hacier sin necesidad de unas esposas. Pero debía centrarme, no era momento para juegos. Escuché la exposición de Rodney y negué con la cabeza.

- Desde luego que tienes razón. No estamos solamente para investigar eso. -hice una pausa- Pero no conozco muchos más detalles. -me encogí de hombros- Para la compañía siempre he sido un bien utilizable, una herramienta. Podría decirse que como una perra de presa, o una maquina, que va donde se le dice y hace justo lo que le dicen. -suspiré- Habitualmente sólo me cuentan lo imprescindible para el desarrollo de mis misiones. Y créeme, he hecho cosas horribles e inenarrables.

La verdad es que echando la vista atrás, había sido un monstruo. Aunque hasta cierto punto soy lo que soy por que alguien tiene que serlo.

- Aunque desde luego no ha habido nunca un inocente que me hayan marcado como blanco. Hay muy pocas gente inocente. -matizo- O otras veces mi cometido era simple espionaje... o animar las fiestas de los altos ejecutivos...

Me coloque el pelo. ¿Que mierda me pasaba? ¿Por que narices estaba tan parlanchina? Nunca en todos los años desde que salí del laboratorio había hablado con nadie nada de las cosas que hacia, o a lo que me dedicaba. Pero con Rodney parecía que tuviera una picada que no paraba de gotear.

- El caso es que Wray no me cuenta nada. Sólo sé que estoy aquí para protegerla y vigilar a Smith. Una persona muy misteriosa, todo sea dicho.

Escuché muy atenta lo que dijo acerca de que podríamos estar en peligro. Entendía que estuviera preocupado. Para Rodney, el poder morir en cualquier instante convertía el día en el mas importante de su vida. ¿Para mi? Solo era martes...

-No te preocupes. No dejare que te pase nada malo. -dije con una fría determinación.

Entonces escuché su reacción a mi sospecha sobre Monypenny.

-Sí, eso creo sinceramente. -y sonreí cuando Rodney propuso su plan- Me parece una buena idea, la verdad. Aunque no le recuerdes que yo tampoco he pasado las pruebas. Llevo mas implantes y tecnología que toda esta nave -le confesé- Y haces bien no te fíes de nadie.

Entonces me callé unos segundos y le hice una advertencia.

- Si alguna vez digo en la misma frase cuadrado y círculo te vas. Te vas lo mas lejos posible de la sala, de la nave o de donde mierdas estemos. ¿Me entiendes Rodney? Nada de hacerse el héroe, ni chorradas del estilo. Te inventas una excusa y te vas... y si no hay excusas, te vas también. Yo puedo moverme mucho mas rápido que una persona normal, o atravesar el pecho de un hombre adulto de un puñetazo. Tu no. Así que si digo en la misma frase cuadrado y círculo, te marchas.

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01/05/2015, 13:06
Dr. McKay

Suspire, al ver que, al parecer, Venus estaba menos informada de lo que yo pensaba. Pues iba a resultar que la Dominatrix se cubria mejor las espaldas de lo que parecia.

-La verdad es que... Bueno, estuve hablando con el doctor Baltar, y tanto Gaius como yo hemos llegado a la conclusion de que aqui algo huele a quemado... Al parecer, alguien boikoteo el sistema informatico de la nave, y tenemos motivos de sobra para pensar que Young podria estar implicado de alguna forma en el asunto... De hecho, voy a intentar descubrir algo mas sobre eso, aunque la verdad es que aun vamos bastante a ciegas. - explique entonces de donde venian mis dudas y mis pesquisas- Ademas, al parecer, tu jefa no ha sido tan "amable" como conmigo en todos los casos. Gaius me dijo que a el llegaron a amenazarlo si no se unia a la mision. - segui comentando, haciendo entonces una pausa para que Venus expusiera sus argumentos.

-No se nada de ese Smith, pero tiene pinta de ser un hijo de puta de los buenos... No se, no me gusta ese tio... - añadi, cruzandome de brazos, mientras miraba a la mujer, con expresion pensativa- Y no te preocupes, intentare ser todo lo sutil que pueda... Sabes si... ¿si hay alguien mas como tu? - pregunte entonces, intentando saber a quien me estaba enfrentando en cada caso.Y es que, por lo que Venus estaba dando a entender y por la forma en la que me acababa de empotrar contra la pared, la verdad es que no estaria mal saber quien podia aplastar tus huesos de solo un plumazo.

Entonces la mire, con aire descolocado, cuando me hizo la advertencia. Una cosa era vigilar a la lata rubia, y otra lo que Venus estaba diciendo- ¿En serio? ¿Crees que puede llegar a ese punto? - dije, algo esceptico, alzando una ceja. Y entonces suspire, mirandola. No, lo cierto era que, por mucho que mi orgullo masculino me dijera lo contrario, yo no podia compararme con ella ni en mis mejores sueños. Y, en cuanto a lo de hacerme el heroe.... Bueno, la verdad es que heroismo y yo no soliamos ir juntos en la mayoria de los casos... Podriamos decir mas bien que era un... superviviente, si. Ya se sabe... Huir para luchar otro dia y todas esas cosas- No te preocupes. Sere obediente. - acabe por decirle, alzando las cejas, con una media sonrisa, acabando por mirarla por el rabillo del ojo- Bueno... ¿Vamos al laboratorio a ver que son estas pastillitas tan monas que te estan dando? - dije, con la curiosidad azuzandome a saber mas de ella, de que era lo que estaban intentando hacer para controlarla y hasta que punto eran necesarias. 

Notas de juego

Si alguna vez digo en la misma frase cuadrado y círculo te vas.

Jajajaja, hice esa mision del ME el otro dia xDDD

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02/05/2015, 00:27
Meredith Vickers

Escuche el suspiro de Rodney. Debía de imaginar que sabia algo mas. Pero por desgracia no era así.

-Uhm me parecería raro que Wray estuviera detrás de los sabotajes.  La misión no es lo que nos han dicho. Por una nave desaparecida no movilizas esta nave y a todo el grupo de expertos. Es mas yo tengo pastillas para varios años. Si es una misión de búsqueda no me hubieran aprovisionado para tanto tiempo. Sea cual sea el verdadero motivo de la expedición no es una cosa que nos vaya a llevar poco tiempo.

Sonreí cuando dijo que a Gaius llegaros a amenazarle.

-Rodney así es el mundo de las corporaciones toman lo que quieren y cuando quieren.

Escuche el comentario sobre Smith y asentí.

-Sinceramente no creo que sea muy diferente de Wray si algo tienen en común los altos ejecutivos es que todos quieren mas beneficios y mas poder . En eso son todos iguales. Da igual a la corporación a la que pertenezcan.  Me recosté un poco en sillón. La verdad es que estaba tremendamente cómoda en su compañía. Siempre si había gente delante me sentaba anormalmente recta sin importar el asiento. En cambio ahora me descubría medio tumbada y la mar de relajada.

Aunque creo que Smith es algo peculiar. Mi compañía no sabia casi nada de el. De hecho mi misión aparte de las que surjan es vigilarlo y averiguar todo lo posible de el. Suspire cuando pregunto si había mas como yo. Como yo lo dudo. Dije divertida. Soy única. La mayor creación de un loco todo sea dicho. Pero única al fin y al cabo. Aunque si te refieres si hay burdas imitaciones genéticas mías. La respuesta es que si. Casi seguro que el Cabo Quarich . La primera vez que le vi me percate de que tenia mas implantes potenciadores que toda la nave junta. Seguramente haya sido modificado con tecnología o terapia genética. Dudo que naciera en un laboratorio como yo. Pero nunca se sabe. Aunque estoy segura de que por parte de la Weyland tiene que haber alguien mas. Si nosotros tenemos un programa de mejora genética ellos tienen que tener uno propio.

Por fortuna se tomo en serio mi aviso y dijo que obedecería.

-Rodney. Llegarían hasta ese punto y mas allá. Yo soy una esclava. Una posesión como pueda ser una computadora. Me crearon en un laboratorio , me modificaron y entrenaron hasta limites que ni imaginarias.  Las corporaciones no tienen limites. Llegarían a cualquier lugar por su ambición.

Asentí cuando dijo de ir al Laboratorio.

-Sera lo mejor. Vamos.

Notas de juego

Jajajaja, hice esa mision del ME el otro dia xDDD

jajajaja lo que hace el subconsciente XDD me encanta la triologia y la he jugado un monton de veces. Pero cuando lo escribir no lo pense por eso XDD dije una clave y se me ocurrio XDD pero ahora que lo dices si me acuerdo XDD