Partida Rol por web

La mujer de rasgos orientales ofrece una apabullante demostración de inexpresividad. Resulta imposible discernir ninguna respuesta emocional en su rostro cuando habla. Eso es una cara de póker, y no la de Tigh:

- Actúe como considere conveniente, comandante Adama -sentencia- Yo por mi parte, haré lo propio.

Hace una casi imperceptible seña a su asistente, indicándole algo. Probablemente que guarde silencio.

- Y ahora, si no tiene nada más que añadir, me gustaría concluir la conversación que tenía a medias con la señorita Vickers y que su llegada ha interrumpido.

Desde luego, resultar simpática y ganarse el afecto de sus colaboradores no es una de sus prioridades.

Frente a la inexpresividad de Wray yo trato de hacer lo propio con resultados muy diferentes. No puedo evitar apretar la mandíbula y los puños, alzar los hombros y morderme el labio. Es evidente que su falta de cooperación me es insultante.

- Así lo haré, como Comandante de esta nave. Tengan un buen día -concluyo saliendo del camarote.

Y ahora que William Adama las ha dejado de nuevo a solas, Camile Wray vuelve a dirigirse a su singular asistente, esa agente secreta modificada genéticamente y puesta a su servicio para algo más que servirle de guardaespaldas:

- Meredith, tenemos que hablar -su rostro se ha vuelto tan inexpresivo que parece una máscara de mármol- Adama tiene muchas sospechas, pero poco más... si dispusiera de alguna prueba concreta ya hubiese emprendido medidas disciplinarias, su sentido del honor y del deber le hacen demasiado directo, no es el tipo de hombre que debamos temer como conspirador... sin embargo Smith da el perfil perfecto de un manipulador en la sombra, alguien que se guarda bazas en la manga para sacarlas más adelante, cuando más le convenga -eso difícilmente nadie podrá discutírselo- Por eso necesito que hagas tu trabajo, tú eres mis ojos y mis oídos ahí fuera. Debes identificar a todos los posibles agentes infiltrados de los weylos, aquellos que haya sobornado o extorsionado para que trabajen para él... considera incluso la posibilidad de que cuente con agentes dobles, ese Gaius Baltar cada vez me merece menos confianza.

La consigna está clara.

- Averigua todo lo que seas capaz, e infórmame tan pronto como puedas.

Por fin Adama se había marchado. No era un mal tipo, pero demasiado estricto. El mundo no era blanco y negro, había grises. Aunque yo no es que supiera qué hacer con ellos...

Miré a Wray cuando dijo que teníamos que hablar y me senté con mi habitual anti-naturalidad. Al fin y al cabo, con ella no tenia que fingir. La verdad es que yo también quería comentarle un tema, tenia una misión que cumplir y necesitaría que hiciera algo.

Escuché todo lo que dijo analizando sus palabras y cuando terminó comencé a hablar:

- La rigidez de Adama puede ser útil, eso le hace fácil de predecir y por lo tanto de manipular. Como le dije hace tiempo, Smith es un depredador. Como todos los grandes directivos... -poco importaba si se lo tomaba a mal, cada cual era lo que era. Yo no me ofendía cuando me llamaban monstruo. Me había ganado con creces ese calificativo. Por lo tanto. ¿Por que ofenderme?- Gaius Baltar... -dije en un susurro- He oído que fue excesivamente motivado para unirse a esta misión. Es más, diría que fue amenazado. Por lo que no me extrañaría que pudiera cambiar de bando. Tengo la forma de investigarle. La pregunta es... si es un traidor ¿Le elimino?

Lo dije seria y directa. Los remilgos a la hora de quitar una vida me eran desconocidos. O por lo menos, para con la mayoría.

- He descubierto que la secretaria de Smith, Monnipenny no es humana. Es una androide, una replicante. Tenga cuidado. Y para conseguir más de Smith necesito que haga algo. Tiene mala fama. Eso es un hecho. Pues bien necesito que me humille, maltrate y que la gente lo sepa. Que me dé motivos suficientes como para que Smith piense que podría ser factible que la traicione. Que prefiera trabajar para ellos y no para usted. Es una directiva de alto nivel, estoy segura de que sabrá hacerlo. Y llegado el momento de convencer a Smith, necesitaré información para darle. Algo importante, que sea significativo para convencerle... pero no tanto como para perjudicarnos seriamente, claro. Si logramos que la gente piense que quiero cambiar de bando, o que estaría dispuesta a considerarlo, puede que Smith o algún topo suyo contacte conmigo. Aunque no es un plan rápido ni sencillo. Si quiere la opción B también esta disponible. -comenté con una sonrisa gélida. La opción B incluía sangre, tortura y deshacerse de cuerpos. Pero eso tampoco sería un problema.

Camile Wray ha permanecido en silencio y muy atenta a cuanto le proponía Vickers, tan inexpresiva como siempre, pero ahora hace algo que muy poca gente ha visto desde que está a bordo: sonríe.

- Así que ese Smith se ha traído un sintético... sumamente interesante -comenta casi para sí misma- Y me alegra descurbir que muestra usted iniciativa trazando planes de acción. Su propuesta es compleja, requerirá bastante tiempo para dar frutos, pero podría funcionar donde otras aproximaciones fracasarían -se detiene un instante para pensarlo y al final concluye- Me gusta. Adelante con el plan, querida, aunque tendré que pensarme cuidadosamente la información que le proporcionaremos como cebo...

Se recuesta en el cómodo sillón de su escritorio y observa a su agente con expresión calculadora...

- Y por cierto, nada de hacer desaparecer cuerpos, al menos por ahora -bromea- Ya le indicaré yo cuando llega el momento.

Sonreí cuando dijo que demostraba iniciativa.

- Mal operativo de cuatro mil billones seria si no lo hiciera...

Me hizo gracia que me llamara querida para dar cordialidad a la conversación. Dudaba que me tuviera mas aprecio que a su silla. Ambas servíamos para lo mismo. Salvar que su culo acabara en el suelo. Pero no por eso la aprecias.

-Esperare a que se decida -comenté a lo dicho de la información. Y la mire divertida cuando dijo lo de los cuerpos- Mis servicios cuentan con tres asesinatos gratis. Estos no son desembolsables. Si no los gasta, los pierde -comenté con una sonrisa, entre la broma y la sinceridad- Si me disculpa, iré a dar una vuelta por la nave.

Un familiar pitido indica que acaba de llegar un nuevo mensaje a su cónsola personal. Con un sutil gesto que realiza decenas de veces al dia Camile abre el fichero... y a continuación se lleva una de las mayores sorpresas de su carrera, puede que de toda su vida.

De: Gaius Baltar a Camille Wray

Consejera,

Adama me dio luz verde para fisgar en los sistemas mientras Young está fuera, una circunstancia a todas luces conveniente. He descubierto que Young es, en realidad, un agente de la W-Y. Le añado parte de la escueta correspondencia que ha mantenido con Monnipeny, la replicante de Mr Smith, y un archivo que a buen seguro le resultará de gran utilidad. Quiero hacerla constar que a pesar de continuar en el camarote civil, tengo más motivos para ayudarla a usted que a Mr Smith, y es por ello por lo que le hago entrega de esta documentación.

Verá que en ella se incluye un informe más o menos detallado de la W-Y de todo el personal que ha ido reclutando. Aunque me hago una idea de lo que está pasando a bordo, creo que sería interesante que nos reuniésemos en persona para discutir los pormenores.

Confío en su discreción sobre la procedencia de esta información. Me temo que el Comandante quiere mantenerla alejada de ella.

Un saludo,

Baltar.   

De: Everett Young a Monnipeny

Gracias. Tendré los ojos bien abiertos. 

De: Monnipeny a Everett Young

Alférez:

Le adjunto los ficheros con toda la información que necesita para el correcto desempeño de sus tareas a bordo. A partir de ahora no nos veremos si no es estrictamente necesario. Buena suerte.

La llamada de la consejera Wray, a través del intercomunicador personal que siempre lleva encima para contactar con su mando operativo, sorprende a Vickers. No se esperaba que fuese a recurrir a ese canal para mandarla llamar.

Pero el mensaje era breve y conciso: Acuda de inmediato a mi camarote. Camile Wray.

Estaba leyendo tranquilamente en mi abarrotado camarote cuando me llego el aviso de Wray. Me sorprendió bastante, la verdad, nunca había usado hasta ahora ese canal por lo que imaginé que debía de ser bastante importante. Rápidamente me preparé y fui hasta su camarote. Llamé a la puerta y esperé a que me dejara pasar...

Una voz tensa se oye tras la puerta:

- ¿Vickers? Pase, por favor... y cierre la puerta.

Cuando Meredith cruza el umbral se encuentra con una Camile Wray más seria que nunca, está mucho más pálida de lo habitual pero sus ojos chispean con rabia contenida. Sin embargo, está esforzándose por mantener el tono de su voz absolutamente neutro.

- Quiero enseñarle un mensaje que ha llegado a mi cuenta de correo, seguro que también es de su interés.

Y dicho esto, enciende un holoproyector que empieza a dibujar palabras e imágenes en el aire.

Pasé y cerré la puerta. Su cara y su tono me decían mucho de su actual estado emocional. Sin duda estaba tensa, muchísimo, pero lo extraño era que lo mostrase. Y para una persona tan controladora como ella, era un signo evidente de que las cosas no estaban saliendo como ella quería.

Pero cuando activó el holoproyector y empecé a leer todo lo que salía, comprendí al instante su estado.

- ¿Toda esta información tenían?. Es increíble. Y ese maldito Smith está mucho mejor relacionado de lo que pensaba, la verdad. Que conociera directamente al jefazo de los Weilos era a todas luces algo que no había considerado.

Por suerte de mi no tienen nada. Lo que si que era curioso era Bester... 

- Bueno al menos Baltar quiere trabajar para nosotros, lo cual nos da ventaja. -me dirigí directamente a Wray, mirándola a los ojos y preguntando a las claras- ¿Qué hacemos ahora? ¿Y cómo nos ocupamos del Alférez?

Camile sostiene la mirada de su agente encubierta y se permite una pequeña sonrisa, aunque la tensión sigue reflejada en su postura corporal, en los hombros y la espalda...

- He estado tentada de aceptar uno de esos tres homicidios de su oferta... -se permite incluso hacer una pequeña broma- Pero de momento creo que vamos a dar una respuesta algo más contenida... ya estoy pensando algunas cosas, aunque tengo claro de que es el momento de poner en marcha la jugada de la que habíamos hablado, nuestro numerito de distanciamiento mutuo...

El plan de fingir una pérdida de confianza que abriese la grieta a una posible captación por parte de Smith.

- Deberemos escenificar nuestra discursión ante bastante público, supongo que el comedor es el escenario idóneo... esperaremos a que esté atestado y le echaré en cara haber fallado en, por ejemplo... la gestión de datos de mercado ante la compra-venta de cóndrulos de olivino y piroxenos ricos en titanio y manganeso, es el principal producto que extraen en esa prospección minera de Palas -explica lo que ha tramado- Me pondré... algo desagradable con usted, y la amenazaré con desembarcarla en la próxima estación orbital en la que atraquemos. Eso debería bastar.

- Al final todo el mundo sucumbe a ellos. Dije con una sonrisa divertida. Algo que no solía hacer delante de Wray.

La mire intrigada cuando dijo de poner en marcha el plan que había ideado. Escuche su idea inicial.

- Tiene que ponerse mucho mas que desagradable. Llevaré uno montón de papeles sobre la compra-venta de cóndrulos de olivino y piroxenos -menos mal que por mi trabajo tenia que estar al corriente de todo- En el momento final de la discusión, aparte de amenazarme con dejarme en la próxima estación, añada algo sobre que da igual si es de la peor reputación del universo. Incluso haga alguna alusión sobre que soy una rubia tonta y florero. Arránqueme los papeles de las manos y tíremelos a la cara -sonreí- Quedará muy dramático el que acabe de rodillas, llorando mientras recojo los papeles que mi malvada jefa me a tirado a la cara, como si fuera una estúpida -hice una pausa- Y añada cualquier cosa que se la ocurra.

- ¿Cuando ponemos en marcha el plan?

Camile Wray se sonríe con malicia ante las aportaciones de Meredith:

- Veo que tiene un buen sentido del dramatismo teatral -ironiza- Realizaremos nuestra actuación tan pronto como ese maldito Smith acuda a la sala común, necesitamos que sea testigo personalmente, no que le llegue de oídas... así que su función adicional será vigilarle y enviarme discretamente un mensaje cuando esa vívora de la W-Y esté allí.

- Es que leo mucho -sonreí- Estaré por el comedor a menudo. En el momento que la avise, tiene que venir hecha una furia. Si todo sale bien debería de comerse el anzuelo hasta el fondo.

- Iré a preparar todo.

Y me dispuse a irme.

La consejera Wray asiente, aunque su ceño permanece tan fruncido como al principio...

- Vaya, vaya... -se despide- Para avisarme, bastará con enviar un mensaje a mi PDA.