- ¿Y qué te parece en el parque? Podríamos poner unos globos o guirnaldas en los árboles y proponer algunos juegos, como ese en el que cada uno tiene una tarjeta y tiene que encontrar a su pareja, ya sabes, Christian y Annastasia, Cloruro Sódico … Yo podría hacer una tarta. ¿Una tarta light? – se corrigió rápidamente adelantandose a las posibles protestas de Hilv. Susan le ponía todo el entusiasmo del mundo a casi todo lo que hacía, o al menos lo intentaba. A veces hasta se pasaba...
Estaba con Hilv en su apartamento, concretamente en el pequeño salón. Aun era de día o al menos eso le parecía a Titán, pero tenían la persiana bajada porque hoy tocaban pelis de terror y era más apropiado así. Habían llegado a una especie de acuerdo en sus sesiones cinematográficas. Una semana le tocaba a Hilv escoger el tema y a la siguiente le tocaba a ella, elegían dos o tres peliculas del repertorio y se encerraban en la habitación de alguna de las dos para, básicamente, hacer algo normal y sobretodo, poco trascendente. Era una bonita tradición nacida de un periodo de cuarentena tenso, largo y también aburrido.
Esta vez habían acabado con los cojines en el suelo para acercarse más a la tele, además, se acercaba el cumpleaños de la más joven y por supuesto, Susan creía que debería hacer una fiesta para celebrarlo.
Pero que no... ¿globos y guirnaldas? Todavía no terminaba de entender porque estaba discutiendo sobre una posible fiesta de cumpleaños con Susan eso es la hostia de cursi se rió y puso cara de estar flipando con lo de las tarjetas ¿qué dices de Christian y Annastasia? ¿Cincuenta sombras? ¿en serio? Partiendo de la base de que leía poco o nada, se había animado a intentarlo con aquellos libros visto el furor que causaron en el instituto, a espaldas de su madre por supuesto, y la verdad es que se había aburrido bastante, de hecho ni siquiera llego a la mitad del segundo libro, la parecieron más ciencia ficción otra cosa ¿alguien se cree que un tío como Grey puede existir realmente? Así cambiaba de tema ¿existen las tartas light? Si era así habría sido cruel no descubrirlas antes.
Dio una patada a una zapatilla desperdigada que había junto a unos de los cojines metiéndola casi debajo del sofá. El apartamento de la chica estaba bastante desordenado, sobre todo de ropa, ya que en este caso lo que era basura y restos si que parecía tenerlos más o menos en el sitio adecuado.
Llevaba puestas unos ajustados pantalones cortos de color blanco y una camiseta de un rosa bastante chillón de manga larga e iba descalza, como casi siempre que se encontraba en su casa.
Escucha, si es que no conozco a mucha gente aquí en Titán, sólo a unos pocos, y de esos pocos, después de la movida del funeral... lanzó un suspiro, habían pasado unos cuantos días y no había tenido contacto con Marko desde entonces, no sabía si estaba bien, pero es que no se atrevía a llamarlo y de los que conozco creo que algunos se llevan mal entre ellos no tenía que haberle dicho nada, se lo toma todo a la tremenda era un poco exagerada en algunas cosas, pero le agradaba la compañía de Susan, se sentía cómoda con ella, a veces era un poco bastante madre, pero otras parecía comportarse como una hermana mayor, aunque realmente ella no sabía como se comportaban las hermanas mayores Hoy empezamos por Ovejas Asesinas siempre elegía una mala de leche la primera y luego Cabin in the Woods informó mientras le tendía una lata de coca cola zero a Susan y se dejaba caer sobre los cojines con la ligera esperanza de que el tema de la posible fiesta de cumpleaños pasara a segundo plano.
- ¡Pero es tu cumple, hay que celebrarlo! – Exclamó con entusiasmo, casi le hacía más ilusión a ella que a la pròpia Hilv (y sin el casi). Después, se inclinó hacia un lado para alcanzar el bol de palomitas. – Está bien, nada de guirnaldas – concedió - ¿y una pancarta? ¿una pequeñita? – Continuó tanteando. No parecía que fuera a rendirse con facilidad.
Cuando su compañera cambió de tema al buenorro de Cincuenta Sombras, Susan no pudo evitar dejar escapar un pequeño suspiro de anhelo. Volvió a dejar el bol en su sitio y lo intercambió para abrazarse a un cojín. – Seguramente no, pero es tan romantico... -
De repente, pareció caer en la cuenta de algo - Y hablando de tíos buenos y esas cosas –Siguió con un cierto tonillo cantarín - ¿Qué pasa con Marko? – Preguntó muerta de curiosidad alcanzando la lata que le tendía Hilv con una amplia sonrisa espectante.
Yo no digo que no haya que celebrarlo no había dicho eso en ningún momento lo que digo es que no hay que montar una fiesta en ningún sitio con pancartas y movidas de esas... esto iba a ser largo... seguro que se puede ir a un bar, tomar algo, incluso cenar o algo así lo que solía hacer en su pueblo un poco de música, nada fuera de lo común claro que en Titán había sitios un montón de chulos para poder hacer algo así, las opciones eran mucho más amplias que en Wrangell.
Y si, bueno, vale, Grey tiene su punto... sonrió, la verdad es que el actor de la peli estaba tremendo, eso no podía negarse un poco demasiado romántico si acaso la línea entre ser romántico y ser un empalagoso era muy fina y no pudo evitar pensar en Jake él no es empalagoso, es demasiado majo, o no, yo que sé, lo importante es que hice lo que tenía que hacer no pensaba mucho en eso, porque siempre le entraban las dudas, no por lo que sentía, sino porque como se había ido sabiendo que tal vez no volvería.
Se había puesto un poco más seria, hasta que lanzó un pequeño suspiro y recostó la cabeza en el brazo del sillón y Susan le hizo una pregunta que no quería contestar...o más bien que no sabía como contestar ¿Qué pasa con él? Preguntó con indiferencia abriendo su propia lata es guapo si decir lo contrario sería mentir, intento finalizar de nuevo la conversación ahí, pero la cara de Susan decía que no iba a quedarse sólo con eso sólo somos amigos dijo con calma o lo éramos, ahora no lo sé, después de lo que pasó miró al techo de su apartamento, luego dio un trago de su bebida sé que lo dije parece una locura, pero no era yo misma cuando lo besé, algo raro pasó la miró desafiándola a decir lo contrario joder, yo no hago esas cosas, él me ha enseñado un montón de cosas, me ha ayudado a entrenar, consejos para las misiones no era el más amable, ni el más divertido, pero no podía evitar echarlo un poco de menos y está bueno si, pero ¿liarme con él? Que va, es mucho más mayor, y además...nah, que no, tiene novia y no pegamos ni de coña lo hacían y seguro que ahora me odia, ¿sabes que le clave un flecha y estuve a punto de matarlo en un entrenamiento? Y fue curiosamente después de eso cuando su relación mejoró ¿tú lo conoces? nunca había salido el tema.
Bueno, también se puede hacer una fiesta en un bar – Coincidió, aunque era probable que Hilv no estuviera pensando en el mismo tipo de fiesta.
Un fundido en negro dio pie al opening de la peli. Ovejas Asesinas, Susan no tenía muy claro qué esperar, es decir, le gustaban los animales, todos, hasta los que no eran monos tenían un hueco en el corazoncito de Susan y eperaba que ninguna oveja hubiera sufrido en el rodaje. O al menos lo hizo durante los 10 primeros minutos de peli.
Se escurrió un poco en el sofá y recogió las piernas, abrazada a su cojín. - Bueno... No se si podría decir que le conozco, pero hemos hablado alguna vez – Dijo cabeceando con cierta inseguridad respecto a la pregunta sobre Marko – En realidad tampoco hablamos mucho. Bueno yo si – Corrigió, aunque no hacía falta. Que Susan hablaba hasta con las piedras estaba claro. - Normalmente soy yo la que habla y él escucha o gruñe o las dos cosas, así que... – Aclaró encogiéndose de hombros. Visto desde fuera, tenían una dinámica un pelín rara – Pero es guapo – volvió a coincidir con una sonrisa entusiasta.
- ¿Qué quieres decir con que pasó algo raro? Creía que, bueno, como esa chica, OA o como se llame, estaba, ya sabes, flipando y eso... Creía que intentabas calmar las cosas. - Dijo bajito mientras miraba la peli por el rabillo del ojo. Después pareció caer en la cuenta de algo. - ¿En serio le clavaste una flecha? - Preguntó sorprendida.
A diferencia de Susan, Hilv se rió con algunas de las primeras escenas de la película, le encantaba ese tipo de pelis de terror que más bien era una mezcla de humor gore raro, y es que desde los trece en el que Jake le metió el gusanillo por ese tipo de cine no había dejado de verlas nunca.
Me conozco la historia de gruñir... le dijo con resignación y el hecho de que, cuando habla, parece que te está dando el consejo de tu vida... se echó a reír y no sólo es guapo, es que el cuerpazo que tiene y... se encogió de hombros mientras se mordía el labio inferior, después de todo era prácticamente una adolescente …
Y no, no estaba intentando calmar las cosas frunció el ceño antes el comentario de Susan, pensaba que la había creído, pero no, estaba claro que la veía capaz de pegarle un morreo a un tío que era su amigo en mitad de un funeral sin importarle las consecuencias pasó algo raro, le estaba dando un abrazo en plan hermana y de repente, estoy casi segura que fue por el olor, tenía una marca en la cara que antes de la misión no tenía, pues me puse, bueno, ya sabes, bueno, que me puse un poco cachonda y no pude resistirme a besarlo la miró con algo de enfadao y me da lo mismo que no me creas, es lo que pasó se cruzó de brazos enfurruñada, ella podía ser muchas cosas, pero no mentía, y menos en una cosa así.
Y si, le clavé una flecha, el muy idiota se puso delante de un blanco justo después que disparase, prácticamente se tiró contra la flecha contestó a esto sin mirar a Susan, ofendida al menos en apariencia fue una putada, aunque por suerte sólo le costó una par de semanas en el hospital unos centímetros más a la izquierda....
- Te creo, claro que te creo - Se defendió la chica levantando las manos levemente en son de paz. - No sería lo más raro que pasa en Titán, después de todo - Visto en perspectiva… Ya ves, ovejas asesinas...- Qué fuerte - Sentenció antes de volverse otra vez hacia Hilv - ¿Y qué crees que es? ¿Una especie de super feromonas? -Estaban viendo una peli en la que un experimento científico termina convirtiendo a unas dulces ovejitas en máquinas de matar, este tipo de cosas sugestionaban un poco a Susan. Por otro lado, no era como si le hiciera mucha falta, Marko era de esos tíos que iban por ahí chorreando masculinidad ya de serie.
- ¿Has vuelto a hablar con él?-
Hilv asintió con un gruñido que no tenía mucho que envidiar a los de Marko para confirmar que aceptaba la ofrenda de paz de Susan, tenía pronto, pero no era en absoluto una persona rencorosa. No tengo ni idea, pero lo que está claro es que algo de después de la misión, antes de la misma había pasado mucho tiempo con él y nunca sentí nada raro se quedó unos instantes pensativa se lo dije a Arabelle, ella es botánica, y en nuestra misión nos encontramos con una especie de árboles que tenían una sabía que te hacía querer acercarte a ellos, a mi no me pasó, pero si a ella y a Alejo creía recordar y si la sabia te pillaba, te quedabas pegado y te iba deshaciendo poco a poco esa era la explicación poco científica ya ves, una putada de la hostia que te pase eso había formas y formas de morir.
Está parte es buenísima... la escena donde la manada de ovejas atacaba una boda siempre sacaba una sonrisa a la joven y no, no he hablado con él desde entonces centró de nuevo su atención en Susan es que... no sé que decirle, estoy segura de que tiene un enfado de la leche conmigo, a ver, yo lo entiendo, por mi culpa ha tenido una movida de la leche con la psicótica de su novia parecía afectada por el asunto, era fácil leer las emociones en Hilv no veas la que me montó la tipa la primera vez que nos vimos porque fui a ver a Marko al hospital por lo de la flecha... tenía esa sensación de intranquilidad en la boca del estómago, era algo que la molestaba, pero siendo sinceros, no sabía como afrontarlo no quiero liarla todavía más explicó.
Susan recogió las piernas en el sofá, escuchando con atención y gesto lívido las palabras de Hilv. Árboles que te deshacían para convertirte en sustrato y ovejas asesinas de fondo. Se preguntaba cómo puñetas acababa siempre en semejantes tesituras. Ay Susan, con lo bien que se te daba el ganchillo...
- Bueno… No se si seguirá enfadado o qué habrá pasado con su novia - Comentó recordando como había hecho falta un cifrado para reducirla - Pero si lo que dices es cierto y algo le pasó durante la misión, a lo mejor ir a visitarle no es lo más prudente. Quiero decir, si le permitieron asistir al funeral debió de haber superado limpiamente todos los exámenes médicos. - O lo que era lo mismo, Titán y toda su tecnología no había sido capaz de detectar el problema.
- ¿Tú te sientes bien? - Terminó por preguntar, un poquito preocupada. Habían visto Alien la semana pasada... -¿Que te dijo tu amiga, la botánica? -
Estuvo de acuerdo en que ir a visitarle no era lo más prudente. Corría el riesgo de que su novia loca siguiera siendo su novia y esta la atacara de alguna manera imaginativa, porque imaginación tenía un rato la tía. También existía la posibilidad de que él estuviera muy enfadado con ella y no le apetecía que la echaran de malas maneras. Y luego estaba la opción que sugería Susan y que a ella se le había pasado por alto...
¿Qué si me siento bien? ¿qué estaba insinuando? ¿Crees que me ha podido pegar alguna cosa? Le estaba dando mal rollo yo estoy bien, y Arabelle no me dijo que esto pudiera ser contagioso o algo ya había conseguido que se preocupara o sea, sólo fue un beso, joder, no es que nos acostaramos o alguna movida de esas ahora si que tenía que llamarlo, para ver si había ido al médico como le dijo que fuera, pero si le dejaron salir de la cuarentena... ¿a ti te parece que estoy rara o me has notado algo chungo? Le preguntó totalmente seria mientras se echaba un poco hacia delante para quedar un poco más cerca de su amiga.