Lo mismo digo, señor Kirkham - respondió Louis estrechando la mano que le era tendida - Estoy convencido de que quedará satisfecho de su viaje.
Le sonrió con confianza y recuperando su mano se volvió para dirigirse hacia la salida del local, con la única intención de llegar cuanto antes a su alojamiento y dormir profundamente hasta el día siguiente....un buen colchón sería de gran alivio para el cansancio que le acosaba en esos momentos.
Hasta mañana - fueron sus últimas palabras al tiempo que alzaba la mano en señal de despedida, aunque lo hizo sin volverse.