Charles estaba al pie de un enorme charco marrón. Sobre una repisa de cerámica contemplaba ese líquido acuoso sin entender bien qué estaba ocurriendo. ¿Estaba soñando? Se giro alrededor pero se mareó. No podía reconocer donde estaba y todo parecía extraño y distorsionado. Se levantó y casi pierde el equilibrio. La repisa donde estaba era estrecha y rodeaba el charco. Entonces oyó un enorme estruendo y estuvo a punto de caer en el líquido.
Su corazón casi se para cuando vio que a unos metros de él había el enorme rostro de un gigante. Se restregó los ojos mientras intentaba conservar la compostura y pudo observar unas enormes lentes y un gigantesco candelabro a su lado. Volvió a mirar al gigante. Era una anciana y estaba durmiendo. Sus ronquidos enormes eran lo que había provocado el ruido.
La reconoció. Era la Vieja Tata, con la que había estado el día anterior. Pero él... ¡¡ÉL ERA DIMINUTO!!
Se dio cuenta de que esa era la razón por la que no había logrado identificar el resto de la habitación. Todo estaba a escala gigantesca y el lugar donde estaba era el borde de una taza de te con leche que habían debido traer a la anciana antes de dormir.
¿Qué le había pasado? Sabía que al resto de sus familiares les habían pasado cosas terribles pero aún así, el hecho de verse reducido al tamaño de un terrón de azúcar le producía una angustia paralizante.
Entonces oyó un zumbido siniestro. Desde el techo que parecía estar a kilómetros... Avanzando hacia él desde el aire... una monstruosa y horrible polilla gigante se dirigía hacia él.
Ya está la situación montada.
Tienes hasta el domingo a las 23:59 para hacer tu movimiento y en función de ello se te dirá qué tienes que tirar.
Aquello era una locura, una alucinación delirante. No podía ser otra cosa que un sueño. Los acontecimientos de los últimos días le estaban provocando a Charles una tensión y una ansiedad que le pasaba factura. Estaba tan enfrascado en resolver el rompecabezas en el que estaban inmersos y que evidentemente ponía en peligro a sus hijas, que había descuidado su salud.
El sueño era tan vívido y real que tardó unos momentos en retomar el control. La habitación de Vieja Tata estaba reproducida al detalle. Charles no recordaba haber soñado antes con ese nivel de precisión, seguramente todo aquello lo estaba afectando más de lo que podía admitir.
Bien, si allí estaba no quedaba otra que responder a sus propios estímulos, a su propio inconsciente. Su mente le daba la oportunidad de descargar algo de la tensión que llevaba acumulada y no quiso desaprovechar la oportunidad.
Recordó sus épocas de boxeo, lo vivo que se sentía cuando entrenaba, él y su propia respiración, golpeando el saco, y luego en los combates, donde se permitía analizar al rival pero siempre competía contra él mismo. Aprovechó que era un sueño para imaginar que su cuerpo respondía como antes, con el mismo balance y equilibro que tenía, y fue buscando los puntos de apoyo para ir hacia el asa del tazón, buscando un punto en el que afianzarse. Miró a su rival, el monstruo sin nombre ni rostro, que seguramente en su mente representaba aquella pollilla pero en realidad era la mansión, el huidizo Harry, sus miedos, la situación misma.
Respiraba rítmicamente, flexionando sus rodillas. Cuando viniera el insecto utilizaría su técnica boxística para esquivarlo, y contraatacar con fuerza, un jab, un upercut. Aunque fuera en su imaginación, se desquitaría con todas sus frustraciones.
Charles deseó ser mayor y a la vez más joven.
Ser de una escala normal para con un simple palmetazo quitarse a esa polilla de encima.
Ser más joven para poder hacer esa maniobra y poder hacer el quiebre esquivo y golpear a ese monstruo que era aún más grande que él.
Como estamos en una situación de difícil... tienes -2 a tu Físico.
¡Ánimo y suerte!
Tira 1d10 y saca igual o menos de 5... Tienes un 50% de posibilidades pues.
Voy a esperar un poco para tirar, por si alguien quiere lucrar con mi muerte. Buitres. =)
El plazo de apostar ya acabó... Hay varios que han apostado por ti pero todos a que vivías.
Ten el buen gusto de no defraudar a tu audiencia ;)
jajaja Como si estuviera en mis manos...
Bueno, pero igual espero hasta mañana, para darle suspense.. Y para tomar coraje, que no todos los días uno se enfrenta a la muerte a un cara o cruz.
Motivo: Aplastar polilla
Tirada: 1d10
Dificultad: 5-
Resultado: 8 (Fracaso)
RIP. =(
Charles arquea su cuerpo, tratando de superar el horror de la monstruosidad que como un dragón vuela hacia él. Pero no logra superar el paso de los años que hacen que su cuerpo ya no sea el que fue, el de un boxeador deportista sino el de un juez recio que falla en el último instante a la hora de patear a la polilla.
Nota el impacto y de repente todo se vuelve oscuro.
Despierta entonces tumbado. ¿Está en su cama? Entonces...¡todo ha sido un sueño!
Trata de incorporarse sintiéndose aliviado y entonces, frente a él ve los horribles apéndices de la polilla. No está en su cama sino en su nido. Y grita cuando esas pinzas peludas empiezan a abrirle en canal para devorarle.
FIN DE LA NOCHE Y DE LA VIDA DE CHARLES.