Viendo que no quiere soltar prenda voy a ser más directa. Pregunto sin un tono muy directo. - En título en cualquier caso, tengo curiosidad. ¿Cómo se te ocurrió? - Cuando acabo de decir esto pienso.
"Niebla, por favor. Aparece ahora. Si escuchas y ves lo que yo veo queda claro para las dos que aquí está pasando algo muy extraño... "
"He leído todo al momento que tú, Lylia." - Son las únicas palabras de la niebla tras salir, mientras mira a Saburou.
La cara de Saburou en ese momento era... ¿miedo? ¿furia? No sabía bien que era, pero no le gustaba nada a Lylia.
De detrás de la cabeza de Saburou, apareció flotando una máscara.
La de la izquierda. Una máscara triste. De repente, de la parte frontal de la cara se despega la máscara de la derecha, y comienza a flotar hasta la parte trasera.
¿Qué coño estaba pasando?
- Sí. Por lo que veo, ya sabes un poco de que trata esto.
Se acerca a Lylia, hasta quedar la cara a un palmo de la suya.
- Escribir este guión me ha costado mucho trabajo. Confío en que no se te ocurrirá explicar a nadie de donde ha salido este título, ¿verdad?
¿Era... una amenaza?
En mis ojos se clavan en Saburou sin una gota de miedo. No porque no lo tenga, sino porque no me permito tenerla en esa situación. Con los músculos del cuerpo en tensión respondo.
- ¿Cual es tu intención con esta obra? - Para rebajar la presión del momento añado. - Estoy aquí para ser tu actriz principal. Pero antes deberiamos poder confiar el uno en el otro.
- Quiero hacer la mejor obra que haya visto el instituto. O la ciudad. O japón. Lo que sea. Quiero una obra que triunfe.
Segundos de tensión.
- Si quieres ser la actriz principal, tendrás mi mismo objetivo. Si en ningún momento mencionas a nadie de dónde he sacado mis ideas, creo que nos llevaremos bien. Y puede que esto sea más que conveniente.
La máscara feliz vuelve a su rostro, mientras que la enfadada vuelve a la parte de atrás.
- Si es algo que has vivido, podrás actuar aún mejor.
Sonrío. - Creo que nos llevaremos muy bien Saburou. -
Me levanto y digo. - Seré tu actriz y espero que la obra triunfe incluso más allá de estas fronteras. -
Antes de marcharme saco la carta de la sacerdotisa y añado. - Sé que sufres, si tu catarsis es dar vida a esta obra, espero que mi ayuda sea digna. Si necesitas hablar con alguien. Tienes mi móvil.
En ese momento, mientras Lylia sostenía la carta de la Sacerdotisa enfrente de Saburou, una luz les ciega. Lylia siente como deja de tener contacto con la carta, y cuando la luz para, pueden ver ambos que la carta no está ahí.
Saburou mira seriamente a Lylia:
- ¿Era la primera?
Intento disimular cuanto puedo la cara de sorpresa al ver que la carta desaparece mientras muevo los dedos como comprobando que realmente se ha desvanecido.
Las palabras de Saburou centran completamente mi atención y respondo sin sutileza alguna. - Sí. -
- Era mi primera carta del tarot ¿Sabes qué significa el que desaparezca?
- Significa que lo estás haciendo bien - dice Saburou con una media sonrisa en la cara.
Fin del capítulo.
Como extra, decirte que Satoshi habló por Whatsapp para presentarse y para preguntar qué sacasteis en claro de la reunión con Mei.
Por whatsapp no ha tenido respuesta.