- No no, tío, ya lo tengo. Con esta carta, tú... espera... mierda. Casi lo tenía.
Kyoya parece algo confundido también.
Hideki se ríe.
¡Se ríe!
- Tíos, vais más perdidos que yo.
Vuelve a coger su carta y se la guarda.
- La pena es que no sé cuál es mi Arcano, pero si me ha puesto a prueba, tendré que dar lo mejor de mi. No sé para que me servirá, pero tampoco veo qué mal podría hacer esforzarme. Quizá deberíais hacer lo mismo vosotros.
Sonrío
- Si por lo menos hemos logrado que aceptes un poco más la situación, aunque ahora mismo este yo más confuso que otra cosa... Algo hemos sacado. - hago una pausa - Tenemos un grupo para el móvil, por si quieres unirte. Realmente es para poder tener un contacto, dado que todos estamos bastante enfadados con la sacerdotisa.
- No queremos molestarte más, si necesitas cualquier cosa. Tienes nuestro número.
Hideki agradece vuestro interés y os da su número también. Dice que escribirá poco durante un tiempo, por el tema del brazo, pero que al menos se presentará.
Finalmente, os despedís y salís de su casa, contentos por los resultados.
En ese momento, suena el móvil.
A ambas.
Es una notificación de Whatsapp. Akito ha agregado a Hideki, el cual se disculpa con un mensaje por su manera de irse en la reunión de casa de Mei.
Poco después de salir, recibís una notificación de Whatsapp. Es Hideki, que se disculpa por cómo se fue de la reunión en casa de Mei la última vez.
Mientras contesto a Saki echo un vistazo al movil pero no digo nada al respecto.
- Sí, yo mismo temí un poco de lo que podía pasar en esa situación pero no lo veo relevante... -
Sonrío y digo. - Te preocupas demasiado, Saki. - El silencio sigue a esta frase por lo que añado.
- Conozco un puesto de gofres de camino a mi casa ¿Os apetece que os invite? - Digo mirando de reojo a Tsukihime
Parece que Saki se pone algo nerviosa cuando Lylia comenta que se preocupa demasiado.
- N-no, aunque gracias pero, bueno, suelo llegar justa a casa tras salir de la biblioteca. Así que prefiero no distraerme mucho por el camino... Pero podremos quedar otro día con más tiempo, si quieres. - Saki sonríe, pero la sonrisa es algo forzada.
Hace ademán de mirar también su móvil, mientras sigue caminando.
- ¿Hideki? Ah, ese tío... Tanto quejarse pero parece que al final Akito ha hablado con él. Este chico tan temperamental nos va volver locos, ¿No crees? - Saki dice la frase en un tono pensado para ser divertido, pero acaba siendo algo torpe.
- Ya, de verdad que quiero entenderlo pero me es imposible. -
Despidiendome con la mano concluyo la conversación. - Bueno, nos vemos mañana! -
Saki también se despide con la mano y sigue su camino. Se la nota meditativa mientras se marcha en otra dirección.
Tras ello, cada una va por su camino, pensando en todo lo ocurrido, y en lo que está por ocurrir.