Partida Rol por web

Asher se encaminaba hacia la salida del callejón cuando, de repente y de improvisto, se da de bruces contra una barrera invisible, haciéndose daño en la nariz. Al parecer alguien o algo los había encerrado usando una poderosa mágia o quizás tecnología, sea como fuera, era conocimiento ajeno a aquel grupo de desconocidos.

Por otro lado, tras aquella minipuerta nadie respondía, tan solo era silencio... ¡Ojalá hubiera una forma para pasar por esa mini-puerta!

Saco el plateado medallón y pienso que quiero convertirme en ratoncita.

Si eso no funciona entonces lamo el medallón y me lo pego en la frente diciendo:

¡Vamos a un mundo fantástico, soy la guerrero luna y... yo tengo el poder! (Sólo si lo anterior no funciona).

No pasa nada... 

-¡Hey!- exclamó cuando choco contra algo al intentar salir del callejon. Y ese algo...¿No es nada? No hay nada ahí, con las manos palpo lo que fuera que estuviera ahí. Es como si hubiera una pared o algo así atrapandonos en el callejón.

-Mmm- Poke poke tocó la pared invisible con un dedo. Volteo hacia la minipuerta con la que estaba jugando Asrai, luego al callejón con a pared invisible, puerta, callejón, puerta callejón. -Aah- exhalo No sé por qué ya no me sorprende pienso medio divertido.

Si quería salir de aquí parecia que tenía que ser por ahí... Una mini puerta por donde al parecer entro un ratón con ropa. -Espera...¿un ratón?- miró a Clover que hace nada era una ratón. -Hey...- la llamo -Dijiste que cuando ataste está cosa a tu paraguas te convertiste en un ratón ¿no? digo mientras saco el emblema que me había dado hace poco. El caso es que....yo no tengo un paraguas...entonces ¿donde lo podria colgar? Busco en mis bolsillos...nada...lo único que tengo es...siento el peso de mi espalda. Mi tabla.

No sé muy bien que pensar, pero bueno no puedo salir de aquí a no ser que sea como un ratón, así que no pierdo nada. Tomando el emblema, me sacó la tabla de la espalda y la cuelgo en una esquina. A ver si pasa algo o solo estoy haciendo el tonto

El callejón se iluminó por unos instantes hasta mostrar a un Asher "Ratonificado" con una espada en forma de llame en su mano, de la cual, en efecto, colgaba el amuleto que aquella ex-ratona le había entregado minutos atrás. Desde esa "nueva posición" podía ver sin mayores problemas a su alrededor, así como aquella misteriosa puerta que ahora era de su tamaño.

Clover se quedó mirando inquisitiva a Asrai. No tenía ni idea de lo que estaba diciendo, pero era una chica muy peculiar. Su buen ánimo era incluso contagioso.

Al ver a Asher transformado en ratón, imitó al chico. Cuando recuperó su aspecto de roedor se percató de la pequeña puerta de madera que se alzaba frente a ella. Así que con eso estaba jugando Asrai.

-Pues si no podemos salir del callejón, habrá que pedir ayuda-Clover llamó a la puerta con los nudillos y levantó la voz- ¿Hola? ¿Nos pueden ayudar?

Tanto Asher como Clover ya se encontraban armados y en sus formas de ratón, tan solo faltaba Asrai quien aún seguía siendo una gigantesca humana... o una humanita pero gigantesca en comparación con el tamaño de sus dos compañeros ratoncillos. Sea como fuere, la puerta seguía cerrada a cal y canto y no había sonido alguno del interior... pese a ello, debido a los golpes insistentes de Asrai, se podía ver varios pasadores de metal en la puerta, los cuales ahora eran accesibles por las pequeñas manos de los ratones, incluso desde el exterior.

Y yo... ¿Donde pongo el medallón? Pregunto a mis dos compañeros ratoniles

Todos podíais ver que Asrai tenía atada a su cintura una enorme cimitarra, la cual arrastraba debido a su baja estatura.

-Ooh- exclamo cuando me veo convertido en roedor. Miro mi mano mientras le doy un par de vueltas, luego miro para atras, tengo cola. Soy peludo y pequeño, esto si que es nuevo. Sin embargo lo mas interesante es mi tabla, como dijo Clover que paso con su paraguas, ahora es una especie de llave gigante de la cual cuelga el medallon que habia colgado de mi tabla con un cadenilla. -Esto es interesante- digo mientras hago girar la llave con un dedo, obsevandola por todos lados. La lanzo y la vuelvo a tomar en el aire mientras compruebo el peso y longitud de esta. Es demasiado grande para ser usada como llave....bueno para el tamaño que tengo actualmente claro. Pero, el caso es que ahora puedo entrar por la puerta de antes.

Por su parte Asrai parece no saber donde colgar su medallon par convertirse en rato. Levanto la mirada, pues ahora es una gigante para mi. -¿Por que no pruebas con la espada esa que llevas en la cintura?- le pregunto. Aunque era raro que no me haya dado cuenta de que la llevaba antes.

Pero bueno, ahora con este tamaño me dirijo hacia la pequeña puerta que hay en la pared. Parece que ahora si quepo normalmente. Ni corto ni perezoso, abro la puerta si puedo y entro al lugar -¡¿Holaa?!- digo fuertemente mientras lo hago

Pongo la cimitarra que me regalo Peter hace algún tiempo en mis manos y la miro pensando que si la pasara algo no podría reemplazarla nunca, luego miro la puerta y como los dos ratoncitos con sus ropajes me miran.

Vale Vale, ya voy. Suspiro fuertemente y pongo el medallón en la empuñadura.

Clover sonrió a la figura peluda y castaña que había aparecido ante ella. A pesar de lo extraño de la situación, no podía evitar pensar lo adorables que eran con su forma de roedor ¡Y sobre todo útil! Si aquella diminuta puerta era la única salida, esa mágica metamorfosis les vendría de perlas. Sin embargo, nadie respondía a pesar de las constantes llamadas de Asher y Clover y la puerta estaba bien cerrada. Además, sus llaves no podían usarse para su uso convencional ¿Cuál era entonces el propósito de esos gigantescos trozos de metal?

-Esto es una locura ¿Cómo vamos a entrar? Quizás les hemos asustado-Clover dio unos golpecitos a la puerta con su llave, jugueteando con ella mientras ideaba un plan.

Usando sus habilidades y probablemente, su tamaño recién adquirido Asher logra abrir la puerta al levantar el pestillo interior sin muchos más problemas, una vez quitado, con un leve empujón la puerta de madera se abrió para dar a los presentes una imagen desolada, lo que parecía ser un bar en miniatura (o un bar a vuestra nueva escala) estaba completamente destrozado.

El ambiente en aquel bar era desolador, no había ni un solo alma presente, las botellas desparramadas por el suelo, las mesas y sillas tiradas, incluso las cortinas del escenario se encontraban desgarradas. Al parecer todos los que ahí habían dentro se habían largado minutos antes sin siquiera prestar el más mínimo cuidado en su huida.

Ya dentro de aquel mini-bar, escucharon como la puerta se abrió tras ellos, ahí pudieron ver a dos ratones vestidos de manera elegante, uno flaco y otro gordo y con aparente bigote, el flaco iba delante portando una lupa que se acercaba a la cara y al papel que portaba ante su gran nariz; mientras que el otro asustado lo seguía de cerca tratando de comprender qué hacía su compañero.

-¡Y aquí debe de ser! -Dijo el ratón flaco mientras sacaba finalmente el papel de su nariz y miraba el ambiente desolado que había alrededor- ¡Mmmm...! -Dijo mientras se acercaba a cada uno de los "nuevos-ratones". - ¡No parecen ser secuaces del Profesor Ratigan!. Decidme; ¿Quienes sois?. -El ratón pasó la lupa por encima de cada uno de ustedes.

Yo soy Asrai Toujou maestra de artesanos de Nunca jamás, Y es un placer conocer a alguien con modales para variar, digo mirando de reojo a Asher.

¿Con quien tengo el gusto de hablar parece usted alguien inteligente y educado? Quizás pueda ayudarnos...

La ratoncilla Clover estaba maravillada, a pesar del auténtico desastre en que se había convertido ese bar en miniatura: Asrai debía de haber golpeado tan fuerte la puerta que los clientes y los dueños del bar se habían asustado, quizás creyendo que un terremoto los iba a sepultar.

Aún no concebía estar allí ¡había entrado por una puerta diminuta! Se preguntó cómo sería su propia casa desde esa altura y los secretos que podía guardar bajo los tablones de madera. A lo mejor recuperaba el anillo que perdió hace unos años.

La voz de Asrai la sacó de sus pensamientos y se percató de la presencia de dos ratones, vestidos al estilo londinense de la época. Se quedó ensimismada, escrutando cada movimiento que hacían. Le interesó el ratón que los observaba a través de su lupa: era la viva imagen de un detective de Scotland Yard en su forma animal.

-Ah... Sí, tal y como ha dicho mi compañera, necesitamos ayuda-se acercó lentamente a los ratones y les tendió una mano.

-Me llamo Clover Joris. No querría ser indiscreta, pero ¿quién es el Profesor Ratigan?

-¿Mas ratones parlantes?-pienso al ver la escena frente a mi. -¿Espera...ellos tambien son humanos convertidos en roedores?- Mmm- ladeo la cabeza mientras observo a los dos ratones. ¿Ratigan? ¿Quien es ese? Ademas...¿ustedes tambien son humanos? les pregunto mientras los miro por varios lados. Tengo la llave apoyada en mi hombro sin saber que hacer con ella. Aunque por ahora queria buscar la salida mas cercana hacia las calles

Basil ignoró por completo todas vuestras respuestas, de hecho ni siquiera os prestó la más mínima atención a lo que decíais, por su parte se encontraba rebuscando por el suelo recubierto de cristales hasta que finalmente llegó a una mesa apartada; usando ambos brazos la tumbó y bajo ella abrió una pequeña trampilla.

-¡Bingo! -Dijo mientras metía la cabeza dentro de aquel pequeño conducto y sacaba una hoja de papel y la leyó con atención. ¡Al fin lo he encontrado! Ese escurridizo murciélago...

Con esto dicho, Basil se metió en su bolsillo aquella hoja de papel y se dirigió hacia la puerta, metiendo dos dedos en su boca hizo un gran silbido atrayendo a un perro hacia la puerta, el cual se agachó para que Basil y aquel regordete raton pudieran subir.

-No sé quien sois, pero sé que sois personas de recursos. Tu y tu -señalando a Asher y Asrai- no sois de aquí, eso se os ve en vuestras vestiduras, en cambio usted, damisela, tiene la apariencia de ser alguien fuerte y tenaz; por lo que estáis invitados pero si subís ya a Toby.

Subo