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[DM08/20] La Telaraña

⋩ Capítulo 6: Interludio (Urthen + Hazzea + Morna) ⋨

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29/08/2020, 02:53
Narración

4º día del Doncel. Mes del Doncel. Año 242 D.D. 

Lugar: Despacho.

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29/08/2020, 03:23
Urthen Haffer

A diferencia de durante su nombramiento, Lord Urthen vestía ahora con un jubón de cuero azul oscuro de hombreras pronunciadas y mangas larga en color marrón, cuyo interor que se asomaba por el cuello, así como el detalle de los guantes que vestía, era del rojo característico de su casa. Sus pantalones eran marrón oscuro, al igual que sus botas.

Al llegar, el joven había anunciado su llegada con los guardias, y se había detenido fuera de la puerta a esperar pacientemente a que estos le dejaran entrar. Una vez eso había sucedido, Urthen se había adentrado en los aposentos de Lady Morna y había ejecutado una respetuosa inclinación frente a ella.

Mis más sinceras condolencias, Lady Morna - la miró a los ojos. Ambos estaban de luto, y aunque en circunstancias muy distintas, miembros de la familia del otro habían sido los verdugos de sus pérdidas. Si el hombre hubiese podido evitar incomodarla con su presencia, definitivamente lo habría hecho, pero tal no era la suerte de ninguno de los dos. - Entiendo que se trata de un mal momento para ocuparla con estas conversaciones, mas me temo no se nos ha concedido mucho más tiempo. - frunció ligeramente los labios - Estoy aquí para hablar de la boda. - concretó - He notado que lady Bessa se mostraba reticente, y me gustaría saber si han conversado al respecto, o si habéis tomado alguna decisión.

Notas de juego

Ropa 1 / Ropa 2

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29/08/2020, 09:38
Maestre Hazzea

La maestre Hazzea, siempre vestida de negro entró acompañando al recién nombrado Lord Haffer, las últimas frases que le había dicho el joven Urthen había dejado pensativa a la anciana mujer, porque al final de todo, con todo aquel desastre, había una clara casa ganadora y desde luego, no era ninguna de las que habían comenzado guerras entre ellas.

- Lady Morna, mi más sentido pésame... - dijo la maestre inclinándose ante la señora Hawick, observándola por unos instantes y esperando pacientemente el ser invitados, comentando Urthen el motivo por el que estaban allí, para parlamentar sobre la boda propuesta y es que tantas negociaciones no debían caer en saco roto... ¿o sí lo haría?....

La anciana mujer se mantuvo callada y no dijo absolutamente nada extra a lo que pudo comentar Lord Urthen, a la expectativa de lo que iba a suceder a continuación.

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29/08/2020, 10:54
Lady Morna Hawick

Morna esperaba, sentada en un diván, aunque erguida, y no estirada sobre el mismo. Su mirada parecía perdida, y su rostro exhausto, en el momento en el que Urthen entraba por la puerta de su despacho junto a la maestre Hazzea. Sus pupilas, estaban enrojecidas. 

Ambos manifestaban su pésame, y cada palabra, resultó ser igual de dolorosa y provocó en Morna un asentimiento contrito, antes de que se llevase a los labios una copa, y tomase un sorbo. Había otras dos copas, y una botella, sobre una mesa auxiliar, cercana a los tres. 

La señora de Fuerte Floresta inspiró hondo, mientras escuchó lo que el joven Urthen... O más bien, Lord Urthen, tenía a bien decir. Cerró los ojos durante un instante, tratando de encontrar la determinación- Estáis en vuestro derecho, Lord Urthen, de querer saber lo que ocurre con el matrimonio.-concedió, posando la mirada sobre el Lord, que ahora vestía los colores de su Casa. Apretó los labios, durante un instante, y depositando la copa sobre la mesa, habló.

Bessa no quiere casarse.-confesó- Nada me gustaría más que hacerla recapacitar, y con ello poder así... Honrar los términos de nuestro acuerdo. - añadió- Pero temo que tal tarea es prácticamente imposible en estos instantes, y yo... Yo no puedo obligarla, dadas las circunstancias. - concluyó, juntando las manos sobre su regazo, arrepintiéndose en aquel instante de haber soltado la copa.

- No guardo ninguna animadversión hacia vos, ni hacia vuestro hermano. Sé que habéis hecho lo posible, por evitar esta desgracia, y por manteneros a flore, en esta vorágine de... Rencores, rumores y medias verdades. -apretó sus manos entre sí, mientras mencionaba aquellos tres términos, mirando durante un instante hacia la mesa, para volver a centrar su atención sobre Lord Haffer- No así mi hija. 

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29/08/2020, 11:40
Urthen Haffer

Fue con esas únicas seis palabras de la maestre que Urthen, sin apartar la mirada de la señora de la Casa Hawick, inclinó ligeramente la barbilla hacia el hombro del lado en el que Hazzea se paraba con el ceño ligeramente fruncido, como quien acaba de caer en algo. Sin embargo,se trató de solo un momento, y enseguida volvió a lo que le traía a los aposentos de Lady Morna. La boda.

En silencio, escuchó las noticias que le proporcionaba la mujer, asintiendo en comprensión a sus preocupaciones. Él tampoco le deseaba ningún mal a lady Bessa, y aunque ciertamente no veía lógica en su resentimiento hacia él, los sentimientos rara vez la tenían. - Agradezco vuestra amable disposición hacia mi y mi hermano, Lady Morna - dijo antes que nada.

Si no os molesta que pregunte, ¿fue el rencor hacia mí por las acciones de mi padre la única razón que os dio para evitar la boda? - preguntó intrigado.

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29/08/2020, 14:15
Lady Morna Hawick

Morna asintió, ante el agradecimiento. La pregunta del joven Urthen la hizo guardar silencio, como si debiera sopesar su respuesta. Se llevó de nuevo la copa a los labios, y tras un sorbo, se decidió a contestar- No. No es el único motivo. Pero ese tema preferiría tratarlo en la intimidad de mi casa, y con nuestra señora Lady Harriet. No es algo que tenga que ver con vos, o con vuestro padre.-aseguró, con un suspiro entrecortado.

En cualquier caso, mi hija ha perdido a su padre, y ha tenido que hacer algo... Sumamente difícil, ante todos, en el transcurso de un solo día. Confío en que sus sentimientos se irán atemperando. -dijo, contrayendo momentáneamente el rostro, y aclarándose la garganta- Entiendo lo mucho que esto puede dificultaros las cosas. Y que para vos y vuestro hermano toda esta situación debe ser complicada- añadió- Mi buena voluntad hacia vuestra Casa no ha cambiado, a pesar de todo. Y si lo requerís, os compensaré de manera proporcionada por la ruptura de este acuerdo. E incluso me ofrezco a ayudaros, en lo que necesitéis.-indicó. 

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29/08/2020, 15:17
Urthen Haffer

Entiendo - asintió, aunque reticente, al secretismo que mostraba Lady Morna frente a él a un tema que, por donde se viera, le concernía.

Las excusas siguientes, en cambio, si bien las comprendía, por su reiteración le hicieron bastante menos gracia. Él no solo había ayudado a condenar a su padre en nombre de la justicia para Lord Esthal, sino que lo había visto morir por tres flechas justamente a manos de una suficientemente diestra lady Bessa. Si resentía las excusas era, justamente, porque él mismo no pensaría si quiera en escudarse en ello. 

Me parece, Lady Morna, que nos encontramos en una situación complicada - respiró profundo - Como os dije, comprendo vuestra motivación como madre para no llevar a cabo este enlace. Sin embargo, me cuesta daros la razón como señora de vuestra Casa. - se humedeció los labios - El tema de compensación es complicado. Vos y yo lo sabemos. Socialmente, no podréis compensarme por la deshonra sobre mí y sobre mi Casa, y tampoco podéis ofrecerme un enlace tan provechoso como el pactado con vuestra hija. Esto tendrá un efecto no solo en la reputación de los Haffer, sino que también en nuestra economía y recursos. - la miró a los ojos - Sé, perfectamente, que no poséis los recursos económicos para comenzar a compensar una ofensa así, o para evitarme consecuencias en ese aspecto. Entenderéis, entonces, que me pregunte exactamente como pensáis compensarme por anular un enlace el mismo día de la boda.

Tras tomarse una breve pausa, continuó.

Lady Morna, no sé que impresión tendréis de mí, pero a pesar de mi juventud tendréis a bien saber que llevo mi vida entera preparándome para llevar el título de Lord Haffer que ahora porto. Sé perfectamente cuales son mis derechos, y si no me ofrecéis el enlace pactado o una compensación adecuada, habrá consecuencias.

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29/08/2020, 15:46
Narración
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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29/08/2020, 15:48
Narración

Notas de juego

MUY intimidada.

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29/08/2020, 16:38
Maestre Hazzea

La maestre había entrado en el despacho de Lady Morna y acomodado al lado de su señor Haffer, mientras comenzaba el intercambio de palabras, llegándose a varias conclusiones, siendo la más importante que Lady Bessa no deseaba tomar nupcias, rompiendo un pacto entre ambas casas que iba a ser muy provechoso, y todo en pos de las elecciones de una niña caprichosa.

Hazzea había dicho inicialmente de no decir nada y dejar al Lord tomar las determinaciones de la negociación, y aunque cumplió lo prometido, la maestre no pudo como menos negar con la cabeza mirando a la Señora de Fuerte Floresta, estaba claro que desde el punto de vista de la anciana, creía que erraba.

- Las decisiones sobre una casa la toman los señores de la misma, los cuáles deben demostrar que son fuertes en sus designios y que cumplen sus pactos.... - dijo la anciana tras las palabras de Urthen Haffer, y no aportó nada más, lo que daba a entender que su petición era más que adecuada dadas las circunstancias, permaneciendo Hazzea tan sumamente callada y seria como si aquel estuviera siendo su propio funeral, esperando que las negociaciones siguieran su curso, con la cabeza alta y a la espera de que hubiera una respuesta por parte de la mujer Hawick.

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29/08/2020, 17:22
Lady Morna Hawick

Morna se inclinó ligeramente hacia atrás, soltando su copa, al escuchar a Lord Haffer. Sus ojos se abrían un tanto más que antes- No dudo de vuestra preparación, ni pretendo burlarme de vos, en absoluto. Y si la situación fuera contraria, no esperaría menos que lo prometido o la correspondiente compensación.-convino.

Os seré franca. Y así quizá entendáis que mis motivos para no celebrar este enlace no son un simple capricho. Después de todo, acabaréis enterándoos, tarde o temprano. Y ciertamente, ya es la situación lo suficientemente complicada como para enturbiar nuestras intenciones sin pretenderlo-dijo, juntando de nuevo las manos, y posando brevemente su mirada sobre la maestre Hazzea, antes de volver a prestar atención a Urthen- Sólo, os ruego, que no divulguéis lo que os confío. No ahora, que el cuerpo de mi marido aún no ha sido enterrado. -pidió, tomando aire, antes de ser capaz de seguir hablando.

- El otro motivo que me lleva a cancelar este evento es que Bessa está embarazada.-confesó, notando cómo al repetir aquello se le formaba de nuevo un nudo en la garganta, que deshizo tomando de nuevo la copa de vino- Evidentemente, no es vuestro. Y yo no tenía ningún conocimiento al respecto, hasta el día de hoy.-expuso, absolutamente seria- Podría haber obligado a mi hija, a casarse con vos. Pero dudo mucho que os hiciera ninguna gracia, desposar a una mujer que ya porta un crío en su vientre. Un crío que no es vuestro y no lleva vuestro apellido.-indicó- Los Vance ya están al tanto de lo ocurrido. Debían saberlo. Después de todo, este asunto es responsabilidad de mi hija, a quien seguramente deba hacer enfrentar las consecuencias de sus actos, y de mi pupilo, Guileon Vance. -añadió, tensando claramente la mandíbula- Y tal asunto expondré a Lady Harriet, en cuanto me reúna con ella para comunicarle que no habrá boda.- dijo, suspirando.

Asumiendo que no vais a aceptar a mi hija en estas circunstancias, podemos hablar de vuestra compensación. Porque la habrá. -aseguró, mientras fruncía el ceño- Aunque entended que es una compensación que abarca tan sólo aquello en lo que la ruptura de nuestro acuerdo matrimonial pueda perjudicaros. El resto... Es algo que tendrá que enfrentar vuestra Casa. No puedo pagar por una afrenta que implica a mi propio marido fallecido.- dijo, incidiendo en ese punto, antes de tomar otro sorbo, guardando un instante de silencio, antes de concluir- Os ofreceré un tercio aproximado de mis tierras, y el oro que había reservado para los gastos de la boda.- ofertó, erguida, seria, a pesar de su desazón- O bien, si aún en esa circunstancia, podéis aceptar a mi hija... Me plantearía obligarla a cumplir con su parte. 

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29/08/2020, 18:40
Urthen Haffer
Sólo para el director

Tenéis mi palabra de que así será - dijo una vez Lady Morna rogó por su silencio, uno que por supuesto, mantendría. Urthen no era adepto a habladurías, y mucho menos las propiciaría sobre alguien por quién sentía sincero afecto, como era lady Bessa.

A continuación, el hombre escuchó en silencio. Su expresión no cambio, contemplativo de los hechos que se desplegaban frente a él, hasta que escuchó que los Vance ya habían sido informados de la condición de lady Bessa, confirmando así el rumor que el consejero de estos había declarado frente a todos. Entonces sus labios se fruncieron un poco, y tras respirar profundo, continuó en su imperturbable atención a la dama.

Una vez esta terminó de hablar, Lord Urthen se mantuvo con el ceño fruncido, analizando sus posibilidades. Se tomó un tiempo, un minuto o dos, para contemplar sus opciones. Finalmente, volvió a hablar.

Entiendo, por supuesto, vuestras motivaciones para anular el compromiso entre lady Bessa y yo mismo, y que la compensación debida sea solo por cuanto perjudique a mi casa vuestra decisión al respecto. - asintió solemne, aceptando aquellas condiciones y la razón que, aunque no fácil de asimilar, le parecía válida - Bajo ese concepto, si canceláis la boda, aceptaré la compensación que me ofrecéis. Un tercio de vuestras tierras y el dinero que ibáis a destinar a los gastos de la boda.

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29/08/2020, 19:39
Maestre Hazzea

Los ojos de la maestre se abrieron de par en par, llevándose la palma de la mano hacia la frente, pensando que aquello lo único que hacía era complicarlo absolutamente todo. Pero esta vez no calló y dijo lo que pensaba.

- El padre del bebé es Ser Guileon, un hombre sin tierras según tengo entendido, y nada que aportar a este matrimonio.... Debilidad para los Hawick..., como los Vance le han entregado las tierras a los Tully, inexistencia para ellos y los Haffer al no casarse y tener que pagar el precio de las acciones de Lord Lyonell también se verían afectados... Si queréis mi opinión, la dejaré clara, todo esto ha sido preparado por Lady Harriet de antemano, Guileon es un peón en sus manos que se ha movido según los hilos marcados por Ser Clarinthe... El objetivo de todo esto es debilitar ambas casas, la de los Hawick a la que pertenezco por nacimiento, Lord Urthen.... - dijo la maestre rompiendo su secreto -... Lady Morna es mi hermana.... - tomó aire -... Y la casa Haffer, a cuyos hijos he criado y los amo por encima de todo... - miró a Urthen dejando claro su postura -... Nada me satisfaría más que la unión de las dos casas porque a ambas les deseo beneficios.... Si queréis mi opinión, es que debéis seguir adelante con la boda, una que no debe llevarse a cabo por amor, sino por la unión de dos casas fuertes y el poder que ambas perdéis si ahora agacháis la cabeza y dejáis que los Tully os sigan manipulando...

La maestre suspiró -... El primer hijo puede ser considerado bastardo y no heredar nunca... y a partir de aquí, construir una historia fuerte entre ambas, usad el apellido que queráis, pero unid las tierras, las riquezas, y cread un heredero legítimo... Vuestra unión hace temblar a Lady Harriet... Si no dais el paso, las dos casas acabarán siendo cada vez más débiles, y la culpa de vosotros dos que sois los señores que la lideran.

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29/08/2020, 19:54
Urthen Haffer

Tenéis mi palabra de que así será - dijo una vez Lady Morna rogó por su silencio, uno que por supuesto, mantendría. Urthen no era adepto a habladurías, y mucho menos las propiciaría sobre alguien por quién sentía sincero afecto, como era lady Bessa.

A continuación, el hombre escuchó en silencio. Su expresión no cambio, contemplativo de los hechos que se desplegaban frente a él, hasta que escuchó que los Vance ya habían sido informados de la condición de lady Bessa, confirmando así el rumor que el consejero de estos había declarado frente a todos. Entonces sus labios se fruncieron un poco, y tras respirar profundo, continuó en su imperturbable atención a la dama.

Una vez esta terminó de hablar, Lord Urthen se mantuvo con el ceño fruncido, analizando sus posibilidades. Se tomó un tiempo, un minuto o dos, para contemplar sus opciones. Justo cuando se disponía a hablar, la maestre le interrumpió, y tras apenas unos momentos se alegró de que no hubiese hecho caso alguno a sus condiciones para llevarla a esa negociación.

Ante la mención del secreto de la maestre, Urthen abrió los ojos de par en par. Luego frunció el ceño, luego un poco más pero mirando hacia un lado y luego volvió a mirar a su maestre, aunque esta vez casi con una sonrisa. Habían tantas cosas que entendía ahora. Su mismo padre le había dicho que favorecía a los Hawick aunque no los perjudicara directamente a ellos, y ahora entendía por qué: porque le era leal a su familia, a su sangre. Si algo podía entender Urthen, era justamente la entrega y el amor que podías tener por un hermano. Y aunque podía estar molesto aún por algunas cosas, también sabía que esto cambiaba radicalmente muchas otras.

Os diré esto, Lady Morna - dijo finalmente, desviando su atención a esta - Hablad con vuestra hija. Decidle que estoy dispuesto a criar a su hijo como si fuera de mi propia sangre, y darle mi apellido, como sería natural a un hijo concebido por los dos. Mientras el rumor no sea de conocimiento público o confirmado de alguna manera, bastará con decir que ha nacido antes. Si eso cambiara y fuese necesario, fingiremos que ha perdido este embarazo y ocultaremos el bebé en Puño del Río unos meses más tras su nacimiento. Mis sirvientes son leales, y no dirán palabra, podéis tener certeza de ello. - aseguró, convencido - Sin embargo, como Lord de Puño del Río, tendré que marchar allí tras la boda, y llevármela conmigo. Es algo que vos y ella debéis considerar, pues sé que a vuestra hija le preocupaba dejar Fuerte Floresta. - aclaró, firme a su palabra. - Y supongo que, ahora que rechaza mi presencia, tampoco le gustara la idea - para su desgracia. 

Podemos pactar condiciones de buena fe con Lady Harriet y demostrarle nuestras intenciones de serle leales. Por mi parte, no tengo intención alguna de que eso cambie, y cada palabra que pronuncié hoy en mi nombramiento ha sido de corazón. Quiero servirle a la Señora de la Tierra de los Ríos, y quiero hacerlo de la mejor manera posible. - dijo, para luego respirar profundo un momento antes de continuar, algo más serio.

Si lady Bessa, aún así, no quisiera contraer matrimonio, entendería vuestras motivaciones para anular el compromiso, y que la compensación debida sea solo por cuanto perjudique a mi casa vuestra decisión al respecto. - asintió solemne, aceptando aquellas condiciones y la razón que, aunque no fácil de asimilar, le parecía válida - Bajo ese concepto, si canceláis la boda, aceptaré la compensación que me ofrecéis. Un tercio de vuestras tierras y el dinero que ibáis a destinar a los gastos de la boda.

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29/08/2020, 20:50
Narración

Tras las palabras de Lord Urthen tres golpes secos sonaron en la puerta, que no tardó en abrirse. Era una pareja de guardias de los Tully, que no esperó a oír ninguna autorización antes de abrir la puerta.

—Lady Morna —dijo ella—. Lady Harriet os está esperando.

No parecía una petición. Sacaron de allí a Lady Morna con buenas maneras, dejando allí a Lord Urthen y su maestre.

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29/08/2020, 20:51
Lady Morna Hawick

¡Areza!- exclamó Morna, al escuchar a Hazzea, incapaz sin embargo de negar lo que decía la maestre, atendiendo sus palabras de hito en hito, temerosa de lo que éstas pudieran ocasionar en el recién nombrado Lord Haffer,.

Urthen hablaba, y Lady Morna lo escuchó con suma atención. Asentía, indicando que entendía toda palabra que se le confiaba, y durante un instante, pareció a punto de romper a llorar. Una profunda tristeza, y un alivio difícil de ocultar acabaron por asomar en su rostro, que antes de que llamasen los guardias, centraba su atención absoluta en Urthen- Sea. Diré a Lady Harriet que aún hay boda. Espero que mi hija recapacite, Lord Urthen. De veras que lo espero. Los Siete nos asistan. -dijo, por último, tomando la mano del muchacho y apretándola, momentáneamente, una vez de pie, en un gesto que pretendía reforzar sus palabras, acercar sus posturas. 

Lo soltó, tan pronto como fue consciente de su deber inexcusable.