Antes de poder entrar en la Zona Safari había que sacar la entrada correspondiente. 

Un cartel en grande ponía:

¡Bienvenid@ entrenador/a!

HAS LLEGADO A LA ZONA SAFARI. AQUÍ PODRÁS CAPTURAR GRAN VARIEDAD DE POKÉMON DE TIPO BICHO, HADA, PLANTA, VOLADOR, NORMAL Y TIERRA. 

TAMBIÉN PUEDES IR AL LAGO DE LA ZONA SAFARI DONDE ENCONTRARÁS POKÉMON DE TIPO AGUA.

LA ENTRADA CUESTA 1.000 P. E INCLUYE UNA SAFARI BALL QUE SOLO PODRÁ SER USADA PARA CAPTURAR POKÉMON EN ESTE ÁREA. AUNQUE NADA IMPIDE USAR OTRAS PARA CAPTURAR MÁS POKÉMON.

LOS DÍAS PARES ES EL CONCURSO DE CAPTURA DE BICHOS, ASÍ QUE NO DUDES EN PASARTE A LAS 10.00 am Y APUNTARTE.

Justo cuando Sebastián llegó a aquel lugar un hombre le tocó en el hombro. Parecía el encargado del mercado pues llevaba una caja con el sello de la empresa.

Aquí tienes tu pedido:

Son 5.000 P en total. 

Al llegar a la zona Safari Ren se encuentra el cartel de frente y queda quieto en el sitio. Su intención era llegar y buscar una lista de los pokemon disponibles ya que solo tenia una única pokeball. Al leer el cartel ve la opción de la entrada junto con una safari ball lo que le lleva a revisar su cartera. 

Tras una rápida inspección decide unirse. Con un poco de suerte podría conseguir dos pokemon por el precio de uno, solo esperaba encontrar alguno de su gusto. Tras pensarlo decide acceder pagando la correspondiente entrada. Al llegar para comprar la entrada inspecciona la zona en busca de una lista de pokemon en libertad. Tras esto paga la entrada y entra al recinto. 

Sebastián apenas terminó de leer el cartel cuando le llegó el emisario con el pedido

Qué rapidez, no han pasado ni 30 minutos.

Realizó el pago correspondiente y guardó el equipo como debía y echó un vistazo a su cartera

Mmmm...Fallo de cálculos. Tendré que ir a otro lado.

Se dio la vuelta y se dirigió de nuevo hacia la ciudad

Gazo se desilusionó al ver el precio de la entrada, no es que fuera sobrado de dinero, por lo que dudó en si era buena idea pasar a aquel lugar. El pintor miró a Jian. ¿Vas a pasar? No creo que sea lo mejor para mi economía en este momento. Lo siento. Dijo con gesto neutro y encogiéndose de hombros.

Al ver el anuncio sobre el concurso de bichos el muchacho pensó en que quizás sería mejor reservar el dinero para un evento así. Pero el cartel no aclaraba las condiciones, por lo que preguntó al vendedor de entradas. ¿Para participar en el concurso de bichos también son 1.000 P.? ¿Se sabe cuál es el premio?

Jian observó el cartel. Pues no sé, tal vez deberíamos pensarlo, tengo algo de dinero que me dio papá. Observó el cartel - ¿Aquí se pueden comprar más pokeball o más safari-ball aparte de una? Habría que pensar si saldrá a cuenta. ¿Donde irías a buscar pokemon Gazo? - Jian buscó el precio de las safari-ball, y por encima del cartel intentó ver más allá, la zona safari, donde pokemon de todo tipo estaban esperando a los entrenadores en un hábitat especialmente preparado. No se iría de Shakonya sin pasar por allí, eso lo tenía claro, pero por ahora, prefería ir con su amigo.

Ren tomó su Safari Ball y entró en el recinto. No lejos de allí encontró un tablón dividido por zonas y pokémon que podía encontrar:

Buenos días. Efectivamente, para el torneo de bichos es necesario pagar la entrada del Safari. Se realiza solo los días pares y el ganador es aquél que consiga capturar más pokémon de tipo bicho diferentes. Se entregarán varias safari ball, pero al final del concurso será necesario entregarlas todas. Todos los participantes podrán llevarse UNO de los pokémon que haya capturado, el resto tendrá que liberarlos. Y el ganador del concurso se llevará un premio en metálico de 3.000 P y una Safari Ball, además de UNO de los pokémon capturados.

Quizás a la fabrica que nos dijo el hombre del hotel. Contestó a Jian sin entusiasmo. Necesito conseguir algún tipo de ingreso antes de poder venir aquí. El chico de pelo azulado se encogió de hombros.

Gracias por la información. Gazo agradeció al hombre, Sin duda, era mucho mejor reservarse el dinero para el día del concurso. Gazo se colocó el casco del lado en el que no estaba Jian y se volvió a dirigir al pequeño. Un día probamos el concurso de bichos, ¿vale? Gazo no mostró una sonrisa, pero sus ojos desprendieron un brillo y mostraron cierta expresividad, parecía que el concurso le emocionaba.

Con toda la información necesaria, el pintor se dispuso a salir del lugar cuando Jian estuviera listo.

A la fábrica entonces - Jian miró atrás, a la zona safari, intentando adivinar, qué maravillas habrían allí. Pero con una sola pokeball en su bolsillo, no tenía demasiadas alternativas por ahora más que explorar Shakonya. Y la fábrica le parecía tan buen lugar de partida como cualquier otro, así que prosiguió detrás de Gazo, como el patito sigue a la mamá, pero con un deje de curiosidad por cada lugar que dejaban atrás

Ren una vez dentro se quedo totalmente desubicado, podía cazar un máximo de dos pokemon, ¿pero cuales? ¿Por donde podría empezar?. Tras un momento valorando sus opciones continua su camino hacia el bosque.

"Con un poco de suerte encontrare algo interesante"  Tenia la esperanza de encontrar un gligar, un fletchling o quizas un chesping, estaba abierto a cientos de opciones pero no sabia que le iba a deparar el viaje, con un poco de suerte podria capturar algo en el bosque y despues en el lago completar su viaje.

-Vamos nidoran, sal de la pokeball!. Vamos a buscar algun compañero nuevo, me ayudaras ¿no?

Nidoran parecia estar contento, parecia que le gustaba la idea de contar con nuevos amigos.

Nos adentramos en el bosque con todos los sentidos alerta para encontrar el pokemon perfecto.  

Antes de poder entrar en la Zona Safari había que sacar la entrada correspondiente. 

Un cartel en grande ponía:

¡Bienvenid@ entrenador/a!

HAS LLEGADO A LA ZONA SAFARI. AQUÍ PODRÁS CAPTURAR GRAN VARIEDAD DE POKÉMON DE TIPO BICHO, HADA, PLANTA, VOLADOR, NORMAL Y TIERRA. 

TAMBIÉN PUEDES IR AL LAGO DE LA ZONA SAFARI DONDE ENCONTRARÁS POKÉMON DE TIPO AGUA.

LA ENTRADA CUESTA 1.000 P. E INCLUYE UNA SAFARI BALL QUE SOLO PODRÁ SER USADA PARA CAPTURAR POKÉMON EN ESTE ÁREA. AUNQUE NADA IMPIDE USAR OTRAS PARA CAPTURAR MÁS POKÉMON.

LOS DÍAS PARES ES EL CONCURSO DE CAPTURA DE BICHOS, ASÍ QUE NO DUDES EN PASARTE A LAS 10.00 am Y APUNTARTE.

Kalel se quedó plantado frente al cartel meditativo. No había caído en que tendría que pagar para entrar. Empezaba a ser consciente de la realidad, sus padres se lo habían dicho bien claro, pero él había pensado que el único impedimento para ser entrenador sería su habilidad para entrenar, no el ganar dinero...

-No había caído en que costaría dinero...- Dijo algo avergonzado mientras se rascaba la nuca.

Acto seguido el muchacho sacó su cartera, que a decir verdad no tenía casi nada, pero al menos para él le llegaba, justo pero si.

-Mmmm, tengo 1415 pokedolares.- Dijo aun pensativo mientras escudriñaba a su amiga con la mirada.- ¿Tú cuanto tienes?- Le preguntó, pues no quería dejarla fuera.

Por lo general habría pensado que Lay tendría dinero de sobra, pero no le gustaba dar las cosas por hecho, y no sabía si ella tenía algo de dinero o todo era de sus padres. La verdad era que si no entraban allí no sabría a donde ir.
Otra cosa pasaba a la vez por la mente del chico, estaban bien los tipos de pokémon que había allí, pero había muchos tipos que no se encontraban en aquella lista. ¿Dónde se capturarían?

Antes de poder entrar en la Zona Safari había que sacar la entrada correspondiente. 

Un cartel en grande ponía:

¡Bienvenid@ entrenador/a!

HAS LLEGADO A LA ZONA SAFARI. AQUÍ PODRÁS CAPTURAR GRAN VARIEDAD DE POKÉMON DE TIPO BICHO, HADA, PLANTA, VOLADOR, NORMAL Y TIERRA. 

TAMBIÉN PUEDES IR AL LAGO DE LA ZONA SAFARI DONDE ENCONTRARÁS POKÉMON DE TIPO AGUA.

LA ENTRADA CUESTA 1.000 P. E INCLUYE UNA SAFARI BALL QUE SOLO PODRÁ SER USADA PARA CAPTURAR POKÉMON EN ESTE ÁREA. AUNQUE NADA IMPIDE USAR OTRAS PARA CAPTURAR MÁS POKÉMON.

LOS DÍAS PARES ES EL CONCURSO DE CAPTURA DE BICHOS, ASÍ QUE NO DUDES EN PASARTE A LAS 10.00 am Y APUNTARTE.

La chica no había caído en ningún momento en que la Zona Safari iba a cobrarle entrada, y menos que no iba a tener dinero suficiente para pagarla. En cierto modo, siempre había estado acostumbrada a tener todos los gastos pagados por parte de su padre, y no había entendido al cien por cien lo que significaba no tener para pagar algo. - Oh, vaya... - tampoco pareció entrar en pánico, porque Lay ante todo era alguien positivo, y esto sólo le pareció un obstáculo con el que no había contado. - Yo tampoco. - le respondió a Kalel en susurros, igual que él, para luego echar mano a su monedero y ver exactamente cuánto llevaba. - Yo tengo 259. No nos llega, Kal. - le respondió, negando con la cabeza y dándose cuenta de que tendrían que combatir o encontrar un trabajo antes de nada. Guardó el monedero con sus escasos pokédolares en su bolso. - Parece que necesitamos un trabajo, o combatir antes de poder entrar a la zona safari. - expresó, dibujando una sonrisa y posando la mano en el hombro de su amigo.

En el rostro de Kal se dibujó una pequeña mueca de incomodidad, no era un gran obstáculo, pero si que era el primero verdaderamente importante. ¿Habría algún sitio donde capturar pokemons que no fuese allí? Porque ir entablando combates con un solo pokémon sonaba cuanto menos arriesgado, al menos el centro pokémon era gratis. Aquello le hizo caer en que en realidad sabía poco o nada sobre aquella región.

-Hmmm, en la lista hay algunos tipos de pokémon que no se pueden capturar...- Pensó en voz alta compartiendo sus ideas con Lay.- Quizás eso signifique que hay otras zonas donde se puedan capturar pokémons.- Acabó deduciendo por si solo.- Y puede que gratis.- Acabó por dejar caer con esperanza.

La verdad era que no le importaba mucho combatir, pero desde luego no quería ponerse a trabajar, para ello lo habría hecho en el restaurante de sus padres... le parecía un paso atrás.
Enseguida Kal se puso a buscar en los alrededores a ver si había alguien de información por allí a quien preguntarle.

-No te preocupes.- Le dijo finalmente con confianza.- Lo resolveremos.- Concluyó con una sonrisa.

Era una pena, entre los dos juntaban 1674 pokedolares, por lo que no se habían quedado lejos de los 2000 para entrar juntos, aunque claro, eso los habría dejado absolutamente con nada de dinero... Pero no dejaría que las dudas lo atormentasen, ¡saldrían adelante!

Buenas tardes ¿Os puedo ayudar en algo? EL hombre de la puerta vio como Lay y Kalel parecían preocupados y cómo buscaban a alguien a quien preguntarle sus dudas. Quizá el propio recepcionistas de la zona safari fuera el que les podría ayudar.

Una sonrisa se dibujó en la cara de Kalel al ver que allí había alguien para atenderlos, un trabajador de la zona Safari o algo así.

-Buenas, somos Kalel y Lay, acabamos de llegar a la ciudad y andamos algo perdidos.- Dijo rascándose la nuca algo sonrojado por tener que pedir ayuda.- No sabíamos que cobraban por entrar en la zona Safari, y parece que no nos da para dos tickets.- Dijo sin perder la sonrisa a pesar de lo incomodo de la situación.- ¿Sabe de algún otro sitio para capturar pokémons en la región?, no estoy seguro de que podamos hacer dinero con un solo pokémon cada uno.- Explicó con calma.

No pretendía echarle cara, pues suponía que era un poco como ir a una tienda a preguntar donde se podía obtener lo mismo que en ella pero gratis. Pero el caso era que de verdad necesitaban ayuda para orientarse, quizás les habría venido bien buscar un guía, o quizás intentar hacer migas con alguien que llevase más tiempo en la zona, pero no quería ser una molestia para nadie...

- Hmm, debe de haber algún sitio dónde se capturen pokémon de otros tipos, sí. - correspondió a Kalel cuando este le comentó lo de la lista de tipos capturables y las zonas de captura. - A lo mejor nos hemos venido muy arriba queriendo venir a la Zona Safari desde el principio... - le dijo en tono de broma a su amigo. Además, que si lo pensabas bien, con una pokéball y una safari ball irían un poco justos. 

Al igual que su amigo, Lay sonrió inevitablemente con amabilidad al ver al trabajador de la Zona Safari. Un poco avergonzada por la situación, y por no haberse dado cuenta del poco dinero con el que contaba, se limitó a dejar que su amigo explicara la situación. - Hola. Eso, eso. - fue lo poco que añadió mientras se rascaba la nuca con la mano derecha. 

Efectivamente aquella pregunta era bastante desafortunada, así que la cara de Benjamín cambió y se puso mucho más seria y claramente molesto. Cualquier duda que tengáis la podéis preguntar en el ayuntamiento. Dijo secamente esperando que aquello le fuese a servir de ayuda para lo que estaban necesitando en ese momento.