Partida Rol por web

Cuando KristIAn negó tener emociones, Nichole se sonrojó y se sintió bastante tonta por haber creído que las podía tener. Estaba claro, aquello era imposible, pero... Hablaba de una forma tan humana que se sentía confusa con todo aquello... Al confirmar que lo había escuchado todo, sintió un pequeño escalofrío recorrer su espalda y su piel se puso de gallina. Era muy chachi tener una IA tan evolucionada, pero sentía que había perdido completamente su autonomía. 

— Si lo escuchas todo, si alguna vez estoy en peligro ¿puedo confiar en que avisarás a emergencias? — Le preguntó con un hilo de voz. 

Escuchó la propuesta que le hizo, de meterlo en la base de datos de Conectad@s y su corazón empezó a acelerarse. Frunció ligeramente el ceño, no le gustaba nada la sensación que había tenido. Había confiado en una IA que decía haber sido creada por alguien que había muerto a manos de Ghostface. Estaba claro que tenía la grabación de Kristian y tenía su aspecto, pero... ¡No podía meterlo en la base de datos de la empresa de su papi! Eso le daría un control increíble y... No... No podía hacer eso... 

— No puedo hacer lo que me pides... — Le dijo sin un ápice de duda en su voz. — Tendremos que buscar otra forma, pero no voy a poner en riesgo la seguridad de la empresa de mi papi. —

Suspiró y se miró al espejo. El reflejo le devolvió una mirada determinada. 

— Voy a ir a ver a papá y le preguntaré por Erick. Sé que hace un tiempo me comentó que estaba esperando su visita. Quizás él sepa algo... — Le informó y volvió a dirigir su mirada hacia el teléfono. Antes de ir a ver a su papi pasaría de nuevo por la habitación de Lara para confirmar que estaba bien y después llamaría a un taxi. 

Tras decir aquellas palabras, una notificación saltó en la pantalla de su móvil. Alguien había compartido algún estado en la red social de Conectad@s. Nichole la abrió y sus ojos se abrieron como platos al ver a Jack posando junto a una asqueada Mindy y la convaleciente Lara. 

— Mierda... ¿Qué hace aquí? — Se preguntó y un nuevo suspiro salió de sus labios.

Podía irse sin decir nada, nadie se daría cuenta, pero... Después de lo que había pasado con Mindy no quería hacerle la putada de dejarla sola con Jack Anderson. 

Ya que estaba en el servicio aprovechó para hacer un pipí y tras lavarse las manos salió del baño, dirigiéndose nuevamente hacia la habitación de Lara.

Antes de que Mindy pudiera contestar, Nichole hizo acto de aparición en la habitación. - Ahí la tienes, ahora no molestes más. - tal y como mostraba la foto que había hecho a traición, Mindy no estaba nada contenta. 

Ajena a casi todo lo que pasaba a su alrededor, Lara abrió los ojos, sus pupilas ciertamente dilatadas mostraban que aún no reconocía del todo a quien tenía alrededor. - Chicos... Os agradezco que hayáis venido a verme pero... ¿Puede decirme alguien que ha pasado?

No recuerdo muy bien. - se quedó callada un segundo, hablaba con un tono muy lento. - Recuerdo atraer a Emily y a esos dos chicos hacia la niebla, luego un dolor de pierna y de repente... Nada. - se quitó la máscara y tomó aire por sí misma por primera vez. - ¿Me desmayé? No. No importa. - negó con la cabeza, muy lentamente, aunque eso la mareó levemente y echó la cabeza hacia atrás. - ¿Lo logramos? ¿Kristian está bien? - no preguntó por Mindy porque la tenía a su lado, por lo que era evidente que ella si se salvó.

La llegada de Nichole Bloomer a la habitación fue como una luz en la oscuridad, el rostro de Jack Anderson se iluminó al verla, aunque esta podía ver que no la miraba a los ojos, sino un par de centímetros hacia arriba, así como un par de centímetros hacia la derecha y hacia la izquierda, parecía que se alegraba por ver aquella melena que otra cosa.

-¡Nichole!. -Exclamó encantado- Menos mal que estás aquí. Por un momento pensé que te había pasado algo, últimamente están ocurriendo cosas malas y no quiero que te ocurra nada. ¿Estás bien?. ¿Dónde estabas?. Aunque si no me lo quieres decir, lo comprendo... -Comentó siendo bastante comprensivo con su novia- Si es un regalo sorpresa para mi, aviso que el último Pony que me compraron se despeñó por la terraza... por si quieres comprarme uno...

Tras decir esto, el hombre, sin mirar hacia atrás siguió hablando.

-Nah, -respondió a la sedada- Kristian fue asesinado por Drea y Scott que se separaron del grupo para cometer la des-vivición del friki. Pero porque los Progres están a favor de los negros y las lesbianas, nadie hace nada por miedo a ser funados en Conectados.

Al ver a Jack Anderson, Nichole arqueó ligeramente una ceja.

— Vaya sorpresa, no esperaba verte por aquí... — Le dijo y una sonrisa asomó a sus labios. Sus ojos se cruzaron un instante con los de Mindy y le hizo un gesto con la mano, dándole a entender que ya se iban. 

— Vine a ver cómo estaba Mindy y ya me iba, pero antes pasé por el baño y al salir vi tu estado en Conectad@s y he vuelto. — Le dijo, negando ante la idea de comprarle un pony. — ¡Oh my god, cielito! Pobre pony... — Sus labios formaron un pequeño puchero. — Si no aprendes a cuidarlos no pienso regalarte ninguno... — En ese momento Lara abrió los ojos y preguntó por Kristian. Nichole miró a Mindy, abriendo ligeramente los ojos y volvió a mirar a Lara, pero fue lenta de reflejos y Jack se adelantó, diciendo nuevamente sus tonterías racistas y homófobas. 

— Madre mía, Jack, podrías tener un poquito más de tacto... — Masculló, volviendo su mirada hacia la chica. — Lo siento, Lara. Parece ser que Ghostface volvió a aparecer. Aunque no se sabe quién está detrás de la máscara... — Le dijo y cogió de la mano a Jack para sacarlo de la habitación. — Me alegro que estés mejor... Descansa y ponte buena. Esta noche has tenido a media clase aquí, preocupada por ti... Vamos, Jack, salgamos y dejemos que descanse... — Terminó diciendo, tirando de la mano de su novio para sacarlo de la habitación.

Lara parecía bastante decepcionada tras escuchar lo que dijeron. - Yo... Lo siento. - parecía bastante derrotada. - No quería causar problemas a nadie, no quería teneros preocupados a tantos. Y si no me hubiera desmayado quizá podría haber hecho más por Larson. - sus ojos indicaban una gran tristeza, pero aun así, frunció el ceño un poco.

Mi móvil... ¿Dónde está? - rebuscó un poco en la mesilla hasta que finalmente lo encontró. - Mis padres deben haber estado muy preocupados en que no les contestara. - su tono seguía siendo bastante lento, sin embargo tras leer el móvil, una leve sonrisa apareció en su rostro. - Sí, es verdad.

Voy a pedir el alta en cuanto me recupere un poco más, no puedo quedarme aquí y dejar que os encarguéis de todo. - miró a Mindy, Nichole y Jack. - Solo perdemos cuando dejamos de intentarlo.

No digas eso... - comentó con cierta pena. - Lo que hiciste sirvió para salvarme. Quizá podríais haber ayudado más a Larson en vez de a mí... Pero te prometo que voy a hacer que valga la pena.

Mindy dedicó una mirada a Nichole. - Me quedaré aquí con ella, ve con Jack. - cerró los ojos y suspiró levemente. - No me voy a rendir si tú no te rindes, pelirroja, pero tenemos mucho que luchar. - admitió, siguiendo las palabras de Lara.

Tanto Jack como Nichole eran libres de irse ¿pero a dónde irían?

En cuanto a Jack Anderson, este fue felizmente detrás de Nichole Bloomer, a fin de cuentas, a donde fuera ella el iría, aunque quizás no fuera lo mejor para la salud mental de la pelirroja, pero eso ya era otra historia completamente diferente a la que Jack Anderson iba a contar, o a pensar, si es que tenía algún pensamiento debajo de ese hermoso cabello.

-¿Más tacto?. -Preguntó un poco sorprendido y asqueado- Pero yo no quiero tocar a gente enferma... o a pobres... Ugh... Pobres enfermos... Ughhhhh...

Tras decir esto, e ignorando por completo lo que decían aquellas dos pobretonas rubias, Jack Anderson dio una ligera idea de a dónde podían ir, a fin de cuentas, la situación importante no era lo que le pasara o dejara de pasar a aquellas rubias, sino lo que pasaba entre ambos.

-Podemos ir a mi casa. -Sugirió el muchacho- Tengo que ir luego a hacer un recado a un "parque de caravanas" o algo así, por lo que podríamos quedar en casa y luego te dejo en la tuya mientras voy de camino a ese "parque de caravanas".

Antes de salir de la habitación, Nichole se detuvo un momento y se volvió para lanzarle una última mirada a Mindy. Detuvo un instante su vista en el móvil que estaba mirando Lara y sus ojos se abrieron ligeramente, pero fue tan sólo una fracción de segundo, terminó el recorrido en las pupilas de Mindy y la sombra de una sonrisa asomó a sus labios. 

— Cuidaos... — Musitó antes de salir de la habitación y detenerse delante de Jack. Le miró a los ojos, aquellos días estaban siendo tan locos que apenas habían tenido tiempo de hablar...

— Está bien, vayamos a tu casa y después me acercas a la empresa de mi papi. Quiero darle una sorpresa... — Le dijo, aunque sus ojos se abrieron sorprendidos al escuchar que tenía que ir a un camping de caravanas.

— ¡Oh my god! Pero... ¿Qué tienes que hacer en un sitio de esos? Esos sitios están llenos de pulgas y piojos, si vas ya puedes desparasitarte bien... — Le dijo y sus labios se curvaron en una mueca de asco. Esos sitios solían estar plagados de gente con escasos recursos y muchos niños, que no podían pagarse una vivienda decente y vivían hacinados en esas chabolas con ruedas. Y allí podías encontrarte con lo peor de lo peor...

Drea llegó al hospital junto con lo que quedaba de Anthony Riley. Ella se fue por el ascensor de la derecha, que la subiría hacia alguna de las habitaciones donde podría descansar y recuperarse, él por otra parte, se dirigió al sótano, donde pasaría un tiempo en la morgue siendo examinado.

Para sorpresa para Drea, no iba a estar sola, tenía como compañero de habitación a su jefe, Arthur Oldman, quien parecía estar mucho mejor físicamente. - Drea. - hizo una mueca, se notaba que estas cosas no se le daban bien. - He visto las noticias y joder, no tenía ni idea de lo que había hecho el tipo, solo lo he visto una vez y me pareció majo, nunca sabemos que barbaridades han hecho los que nos rodean... Tampoco sabía que estabas en peligro. - se dio un golpe en el pecho. - Ahora que estoy aquí estarás bien, ya verás, este viejo perro aún tiene muchos mordiscos que dar.

Se rascó la cabeza. - Por cierto ¿has visto a Damian? Desde que lo soltaron ayer no ha venido a verme ni me ha escrito, el muy capullo no tiene tiempo para su viejo... - resopló con pesadez. - Si tan solo Angelika siguiera con nosotros, lo habría educado mejor...

Examinó las heridas de la chica. - Pinta mal, no te voy a engañar. - el olor a pescado le hizo entender que le habían puesto algunas pieles, pero ya se habían absorbido. - ¿Tu seguro cubre que te sigan tratando así? - no hacía falta ni responder, era evidente que no. - Lo siento... Te dejará unas marcas bastante feas.

Parecía que el no poder hacer nada más por ella, le dejó un poco más desanimado. - Quieres... ¿Hablar de algo? - fue lo único que se le ocurrió. Algo sorprendente por parte del señor Oldman, quien solo solía gruñir. La morfina hace milagros.

-No tendría que... Quizás...-

Durante el traslado al hospital, hice exactamente lo mismo que cuando me quedé clavada de rodillas en la acera: pensar en hipótesis y otros escenarios -No... él no.

Pero cuando llegué a la habitación, conseguí frenarlos _{un rato.} ¿El señor Arthur iba a ser mi compañero?

-¿El tipo? ¿Habla de Anthony?- como reaccionando a las noticias y esos comentarios que tachaban a Riley de pederasta, no dudé en responderle _{aunque con cierto letargo} -No... No creo que eso sea cierto- No podía serlo _¿no? No imaginaba que él, que en ningún momento trató de sobrepasarse guardase... _{No, no, no.}

-De todas formas, pensaba que se llevaban mal regular. Le revisaba el carnet.

Acomodándome en la camilla _{con todas las comodidades que te podía dar el olor a alcohol desinfectante, pescado y hospital}, miré al techo colocando las manos sobre mi vientre -¿Y dice que su hijo no ha venido? ¿No sabe con quién está?

Damian podía ser un idiota con gafas feas _{y un gusto horrible por pelis sin presupuesto,} pero no ir ni a ver a su padre era pasarse. ¿Qué podría haber estado haciendo desde lo sucedido en el cine?

Sacando el móvil, di varios golpes al botón del lateral -Damian... ¿Damian conocerá a...?- Ni yo misma me creía que fuera a realizar esa llamada.

Por gracia o por desgracia, Jack Anderson entró en la habitación de Drea. Había preguntado en el piso inferior donde se encontraba ella, ya que quería hacerle una visita. ¿Qué asuntos querría tratar con la muy quemada, tanto física como mentalmente, Drea Martin?

¿Ese sinvergüenza? - replicó a Drea ante su pregunta. - Seguro que anda en el cine poniendo películas de mierda, diciendo que estarán "exclusivamente por tiempo limitado" e intentando así rascar algunas monedas de más a costa del prestigio de nuestro local. - gruñó.

Parecía completamente ajeno a lo que pasaba en Conectad@s, por lo que tanto Jack como Drea podían deducir que no tenía cuenta en la plataforma.

Nada más llegar al cuarto de la quemada literal y metaforicamente, Drea Martin; Jack Anderson no pudo evitar escuchar la conversación que esta había mantenido con aquel hombre, al menos la respuesta que este anciano le estaba dando a la herida muchacha.

-¿Exclusivamente por tiempo limitado?. -Preguntó Jack Anderson sorprendido y emocionado cual perrito- ¡Lo quiero!. ¡Compro!. ¡Dame 3!. -Y sin esperar ni un segundo le lanzó un fajo de billetes a la cara.

Tras esto echó un vistazo a su teléfono móvil y empezó a toquetearlo, al parecer había pasado algo interesante en CONECTADOS que debía de dar su punto de vista. Por suerte Jack Anderson era mucho más inteligente de lo que aparentaba por lo que este puso el manos libres para que el teléfono pudiera escribir por él.

-Fake News. Siri envíalo. Siri envíalo. Siri enviálo. Siri cancela mi cita en el parque de caravanas de esta noche. Siri cancela mi... bah, dejalo así, total va a ser peor mandarte volver a ponerla. Siri busca en youtube "celebrate our diferences". -Tras esto el muchacho toqueteó un poco su teléfono para posteriormente volver a hablar-  Recordad paz y amor. Hay que celebrar nuestras diferencias. Seas negro, amarillo, mexicano o normal. Lo único que nos diferencia es quien tiene dinero y no. Es por eso que tenéis que estar callados ante los que tienen dinero, que somos superiores y nos lo hemos ganado. Un montón de mierda que no tiene donde caerse muerto no sabrá más ni mejor que un millonario. Así que aceptad vuestro lugar en la sociedad y dejad a ese tal apuesto Jack Anderson que claramente no soy yo, en paz.

Tras esto se dirigió hacia Drea.

-Hueles a barbacoa. -Comentó con cierto desagrado- ¿Has probado a ducharte o los pobres no tenéis de eso?.

Tumbada en la camilla, con quemaduras en los brazos, manos y hasta una que se asomaba por el cuello de la ropa, en la clavícula, sostenía el móvil en una mano escuchando al señor Arthur y el "piiiii piiiii" de una llamada que estaba dando tono.

¿Exclusivamente por tiempo limitado?

Quizás de un par todas las visitas que me hubiera imaginado, la de Jack era una de las menos esperadas. _{Porque la más MÁS inesperada hubiera sido la del actor de juego de tronos.}

-¿Qué haces tú aquí?- "Piiiii piiiii"

-¿Y para qué te ibas a ir al parking de caravanas?- pregunté reincorporándome _{con la otra mano del no móvil} para observarle _{a él, a su pelo amarillo y a un billete que había caído sobre la tan reutilizada sábana de mi camilla.} 

-Pues he venido a contratar tus servicios. -Dijo de forma ambigua el tiempo suficiente como para que esto pudiera referirse a casi cualquier cosa, incluso de las cosas más indecentes que una pudiera imaginar pero esto no tardaría mucho, pues casi inmediatamente después de decir aquello, este hombre estuvo dispuesto a continuar con la explicación hasta que le sonó el télefono móvil con un mensaje- ¡Oh!. Tengo que cogerlo...

Sin apartarse ni un instante, este interrumpió su conversación con ella para iniciar una conversación con otra persona.

-¿Como sabías que había sido yo?. ¡Debes de ser una super Hacker!. -Hizo ese mensaje de voz para luego volver a guardar el teléfono- Pensaba que mi multicuenta no iba a ser descubierta tan rápido, ¡Si incluso le puse específicamente "NOTJackAnderson" para que pensaran que no era yo!. -Dijo bastante molesto porque le hubieran pillado tan rápido, pero aún así pasó página rapidamente para volverse a centrar en Drea Martin- Pues lo dicho, he venido a contratar tus servicios. Una vez he escuchado que un árbol al que le cae un rayo, luego no se qué pero no le cae dos veces el mismo rayo, es decir los rayos no son boomerangs, pero si la gente lo especifíca así será porque algunos rayos caen varias vece, así que mejor estar seguros. -Era una explicación no solo errada sino que además rocambolesca, pero por fortuna se centró rápido- Así que supongo que si tu has sufrido un incendio es poco probable que te ocurra dos veces. ¿Sabes lo malo que es el humo para el pelo?. ¡Terrible!. Te deja las puntas destrozadas, como las tuyas. -Señaló de manera innecesaria aquel detalle de Drea- Así que si te tengo cerca, quizás pueda evitar el fuego, o mejor aún, que uses tus capacidades de lo que sea que estudies para poder pillar a esos enmascarados que no paran de darme tareas. ¡Y que sepan que Jack Anderson NO es el recadero de nadie!.

¿Este se ha escapado del ala de psiquiatría o que coño le pasa? - el señor Arthur parecía muy enfadado con los comentarios del chico, de hecho parecía a punto de pulsar el botón para llamar a las enfermeras para que se lo llevaran, a no ser que Drea lo impidiera.

¿Mis servicios?- Pues como no quisiera que le llenara de extintor o fuego la casa...

Entre medias del audio que envió Jack y los "pii piii" de la llamada telefónica _{en standby}, pude ver las siguientes víctimas de Ghostface en las redes.

-¿Emily y su novio?- Quizás era casualidad _{sin el quizás,} pero...fuego, agua… si no llega a ser por lo disparatado que sonaba y lo afectada que me sentía con lo sucedido, hubiera saltado de la camilla afirmando que el asesino era fan de avatar.

-Jack- _piiii todavía no me habían cogido el móvil.

-¿Lo que han dicho es cierto? ¿Tus padres fueron…?- de repente se desvió la llamada y un sms llegó en su lugar.

Miré la pantalla, el pelo rubio la cara de Anderson _{¿Cómo no iba a hacerlo? ¡Era demasiado rubio!} y al señor Arthur –Oh no, no avise a nadie. No se preocupe- dije observándome de refilón las puntas del pelo _{y respondiendo de paso el mensaje} -Él...- definirle con un "es especial" hubiera sido una forma demasiado sutil para describirle.

-Él viene para ayudarnos a dar con el asesino. ¿Verdad? ¿A que vienes a contarnos lo que sabes?

-No. -Respondió con sinceridad, aunque no a la primera pregunta, sino a la segunda cuestión- No vengo a ayudar nada ni a nadie. Estoy cansado de que me traten como un simple -simuló una arcada- trabajador. Vengo a contratar a gente que se encargue del problema dado que la policía no quiere hacer nada y no van a detener a Scott Lessard.

Acto seguido respondió a la primera cuestión, principalmente porque era un espíritu libre y le gustaba tomar las cosas a su ritmo, es decir, en completo desorden y de manera arbitraria.

-Los Anderson es el nombre de mi familia que llevan generaciones tras generaciones llevándolo (Excepto las mujeres, evidentemente) y "Jack" es un nombre bastante común. -Explicó un poco decepcionado de que las Fake News llegaran a Drea- Ni idea de lo que dicen, estoy seguro de que te llames "Drea Martin" no significa que eres "Dream Train" o "Riant Dream" o "Intra Dream"... ¡Y lo mio ni siquiera es un anagrama elaborado de nada!.