Partida Rol por web

Cuatro semanas han pasado desde el incidente en el museo. Todo un mes desde los pocos días que hicieron que el resto de las vidas de los supervivientes cambiara drásticamente.

Pero en ese tiempo no solo ellos cambiaron, la ciudad entera y parte del mundo, también. Nueva York se convirtió en el foco del mundo, pues tal y como había pedido Erick, debían encontrar medidas no violentas para luchar por sus derechos. A pesar de que al principio no quería aceptar el cargo, pues se consideraba una revolucionara y reivindicadora, todo lo contrario a una líder, finalmente Phoebe Martin aceptó el puesto de alcaldesa.

A pesar de no tener programa electoral ni tener muy claro como llevar una ciudad, si que sabía lo que quería para ella y sus seres queridos, lo que había estado aclamando todo este tiempo, acabar con los favoritismos entre la gente adinerada y poderosa. Todo el mundo iba a ser igual ante la ley a partir de ese momento y no solo eso, si no que impuso algunos impuestos para aquellos que tenían fortunas tan exageradamente grandes que literalmente no sabían que hacer con su dinero.

A pesar de que solo fue un impuesto del uno por ciento, fue tal el dinero recaudado que logró instaurar una política verde en toda la ciudad, haciendo que la naturaleza poblase y recubriese la ciudad, combinándola con la tecnología con la que ya se contaba, utilizando las llamadas ecoreglas, unas reglas realmente sencillas que cualquiera podría aplicar.

"No extraigas del suelo más de lo que este te pueda aportar, distribuye las riquezas del medio por igual y no contamines más de lo que puedas reciclar."

Con ese dinero, también impulsó el cuidado de sociedades que fomentaran el cuidado de gente con necesidades especiales, en especial la CCSN, cuyo logo se podía ver ya en bastantes lugares de la ciudad.

Finalmente, también se adoptaron algunas medidas para los barrios más marginales, como el conocido Brownsville, donde se reforzaron los edificios más antiguos, además de construir nuevos edificios que aportaran interés a la zona, como centros comerciales.

Como es evidente, no todo podía ser bonito y puesto que la nueva alcaldesa se centró completamente en lo social, ocurrió un estancamiento económico, que si bien no fue grave, si que ralentizó en gran medida el desarrollo económico y tecnológico de la ciudad.

Aun así, la ciudadanía estaba tan contenta con el status de la ciudad, que el no poder recibir próximamente el nuevo modelo del smartphone de moda, pasó a ser algo que carecía de importancia.

Poco a poco y tras servir de ejemplo, no solo en otras ciudades, si no en otros países, empezaron a salir otros partidos políticos que tenían como medidas y programa electoral, replicar el status generado en Nueva York, partidos que aunque nacieron con mucha fuerza, debían librar sus propias batallas contra la corruptela de sus gobiernos.