Partida Rol por web

Mindy se levantó del sofá y caminó hacia Daphne hasta que se puso a su lado. - ¿De que va todo este rollo? Hace un rato en la estatua de la libertad no paraba de acusarla de a saber qué y ahora se quiere encerrar con ella en el baño. - se cruzó de brazos y se apoyó en la pared, soltando un sonoro suspiro. - Mira que hago el esfuerzo, pero es que es rarita como ella sola... Solo espero que no esté mal, no parecía encontrarse bien.

Una vez llegaron al baño, abrió el grifo y le lavó con suavidad la cara. - ¿Qué quieres realmente? - dijo mientras la limpiaba con cuidado. - Sé que después de lo de hoy, quieres hablar conmigo, pero es que de verdad, no puedo decir nada, tampoco es que sea relevante, no sé quien es el asesino ¡y yo tampoco lo soy!

Cuando terminó de lavarla, la miró a los ojos, con una gran determinación. - De verdad, si supiera algo que pudiera ayudarnos, lo diría.

—Tienes razón. Osea no, no tienes razón... Argh, el asunto es que todo esto es raro. Seremos todas amigas y todas... Pero nunca he visto que haya tanta confianza entre ambas. Espera un momento. 

Daphne llenó un vaso con agua y tomó otro vacío. Con mucho cuidado se acercó a la puerta y apoyó el vaso vacío con la parte abierta pegada  contra la pared y apoyo la oreja en la base, en las películas solía funcionar. 

Le hizo una seña a Mindy para que guardase el secreto y se dispuso a escuchar que estaban diciendo dentro Lara y Drea mientras en la otra mano mantenía el vaso que le serviría de excusa. 

Noté una increíble molestia al pasar el brazo por encima del hombro de Lara -Joder, joder- Pero claro, estando delante de Daphne, disimulé con una sonrisa congelada _{que quité en cuanto la rubia cerró la puerta del baño y me lavó la cara}.

-Lara- creyendo que había tragado agua por la nariz _{"gracias" a la energía con la que me echó el agua}, intenté abrir los ojos y apartar algunos mechones de pelo _{que también me había mojado}.

-Tranquila. Sé quién es tu familia y mi intención es protegerla- cogí una toalla _{confiando en que no fuese de los pies u otra parte distinta a las manos} -Lo único que necesito preguntarte es si tienes hermanos. Si conoces a alguien que pudiera serlo...

_{Taaake ooon mee} Esa canción me vino a la cabeza _{ya era el himno de mi primer beso...}

-Por favor, confía en mí y no le cuentes de esta conversación a nadie. ¿Vale?- al dejar la toalla sobre el retrete, busqué agarrarme a sus manos _{con cierto mareo}.

-Ah y tampoco vayas al museo del terror. No me pidas los motivos, simplemente no te acerques. Hay un Ghostface bueno y, otro que no lo es. El malo finge ser Erick _{que es el bueno}- dije manteniendo el tono de voz bajo.

Entonces sabes que soy hija de Ryan Mui y la hermana de Erick Hallwinter... - suspiró y apartó la mirada. Acto seguido negó con la cabeza. - No tengo ni idea de quien puede ser mi hermano, de hecho me enteré de todo esto anoche, cuando salí corriendo del parque de caravanas.

Simplemente me hizo un "click" en la cabeza y pensé que cuadraba todo, así que llamé a mi padre y... - se ahogó un poco, parecía que aún estaba procesando todo aquello. Exhaló algo de aire y retomó la conversación. - No le diré nada a nadie, como he hecho hasta ahora, no quiero que sospechen de mí por ser quien soy. - fue entonces cuando cerró el puño y volvió a mirar a Drea con determinación. - Pero no voy a huir. Mi padre es una persona completamente distinta a la que sale en las películas, es el ser más bueno y pacífico que he conocido ¡ha cambiado!

 Pero no te confundas, si ha matado a alguien, Erick no es el "Ghostface bueno". - miró hacia la puerta. - He hablado con Daphne y ella me ha dicho que si tenemos en nuestra mano la capacidad de evitar que muera más gente, aunque sea de forma violenta, debemos intentarlo. Mi padre y mi madre me enseñaron a luchar, pero me insistieron mucho que solo en defensa propia, sin embargo... Debo hacerle entender a mi hermano que esto está mal.

La que no debería ir a ninguna parte eres tú Drea, quédate aquí por favor. -  volvió la mirada a la chica y le levantó con suavidad la camiseta, era evidente que estaba herida. - No tiene buena pinta, no puedes hacer mucho con esto encima. - admitió. - Es un milagro que sigas viva ¿no te das cuenta? - la voz de Lara sonó algo quebrada. - No quiero que mueras, ya ha muerto demasiada gente. Mañana se irán Daphne y Mindy, quédate con ellas y aléjate de esta maldita ciudad, por favor. - tampoco parecía necesario dar explicaciones para entender que la acción iba a ocurrir en el museo del terror el día de mañana.

Lara y Drea habían dejado el agua corriendo, lo cual dificultaba el poder escucharlas correctamente, pero gracias al vaso, pudo centrarse un poco y escuchar algunas cosas, que no todas.

Lara: De verdad, si supiera algo que pudiera ayudarnos, lo diría...

Drea: Tranquila. Sé quién es tu familia y mi intención es protegerla. Por favor, confía en mí y no le cuentes de esta conversación a nadie. ¿Vale? No me pidas los motivos, simplemente no te acerques. Hay un Ghostface bueno y, otro que no lo es. 

Lara: Me enteré de todo esto anoche, cuando salí corriendo del parque de caravanas. Pero no voy a huir. No te confundas, si ha matado a alguien, no es el "Ghostface bueno". 

Lara: He hablado con Daphne y ella me ha dicho que si tenemos en nuestra mano la capacidad de evitar que muera más gente, aunque sea de forma violenta, debemos intentarlo. No quiero que mueras, ya ha muerto demasiada gente. Mañana se irán Daphne y Mindy, quédate con ellas y aléjate de esta maldita ciudad, por favor.

Asentí a sus palabras, hasta que mencionó el nombre de Erick _{junto a la negación de no ser el Ghostface bueno}.

-¡Te equivocas!- ¿O era yo la que se equivocaba por millonésima vez? -Erick es quien me ha salvado la vida. Quien quiere parar las muertes de personas inocentes _{y que su ex compañero comete en su nombre}.

Le ayudé a levantarme la ropa.

-Mira- despegué un poco la camiseta, dejando que me viese el _{ensangrentado} costado con libertad -Me ha curado. No es un milagro... Él...- ¿Sería obvio que me gustaba un desconocido con barba y olor extrañamente familiar?

-Él... No se merece que le hagan daño. Ha sufrido mucho... e igual que tu padre ha cambiado, tu hermano podrá hacerlo sin necesidad de violencia- _{nueva gota deslizándose por la frente.}

-Lara, no puedo dejaros... voy a quedarme contigo y con Erick.

¿No te oyes? - parecía un poco decepcionada ante los comentarios de Drea. - ¿Quién es él para decidir quien es inocente y quien no? Nadie debería decidir quien debe morir, tú misma lo has dicho, todos podemos cambiar y hacer algo bueno.

La agarró de las manos. - No puedo impedir que vayas a ningún lugar, pero quédate al menos esta noche con nosotras y recupérate. Solo alguien de la universidad puede entrar en este recinto y estaré yo pendiente de que no pase nada. - parecía que era la única petición de Lara y con ella, quería terminar la conversación, empezaba a ser sospechoso que tardaran tanto en echarle un poco de agua a Drea para que se espabilara.

Drea: ¡Te equivocas! Erick es quien me ha salvado la vida. Lara, no puedo dejaros... voy a quedarme contigo y con Erick.

Lara: No puedo impedir que vayas a ningún lugar, pero quédate al menos esta noche con nosotras y recupérate.

Parecía que se acercaba el final de la conversación, por lo que era mejor que Daphne se apartara para que no la pillaran. 

—Mierda... 

Daphne apartó con suavidad el vaso de la pared y se alejó de la pared lentamente. Le hizo una seña a Mindy y se la llevó hacía la cocina. 

—Mira... —le dijo en voz baja, bajísima—, no pude escuchar mucho, pero lo suficiente para saber que ninguna es culpable, Drea está preocupada por Lara. Así que puedes estar tranquila... Pero creo que Lara no va a querer partir con nosotros mañana. Debemos tratar de convencerla o al menos averiguar por qué no quiere hacerlo. 

Se guardó los otros detalles. No quería que Mindy se preocupase de más o que simplemente se le fuese a salir algo. Aunque quizás confrontarlas pudiera ser la opción más acertada. Lo pensó mientras esperaba que salieraN, le preocupaba de que manera Lara había interpretado sus palabras

"Si pudieran hacer algo" ¿Pero que podrían ellas hacer?​​​​​

todos podemos cambiar y hacer algo bueno.

-Y... lo hará- musité volviendo mentalmente a la lista de alumnos tachada. A esa teoría de los colores que _{en caso de ser válida}, demostraría cómo el color rojo le correspondía a las muertes ocasionadas por el impostor. Y a él, en cambio... ¿sólo dos? ¿los azules? ¿Jack y Anthony?

-No- no me cuadraba lo de Anthony.

-De acuerdo. Me quedaré con vosotras esta noche- dije con la resignación de una niña pequeña a la que han regañado para irse a la cama.

Finalmente Drea y Lara salieron del baño, Daphne parecía estar hablando tranquilamente con Mindy. - ¡Bueno chicas, pues al final somos una más! Con su casa quemada, no creo que sea buena idea que se quede allí. - asintió. Aunque mirando las camas, hizo una pequeña mueca. - Pero estaremos algo apretujadas... _Je

¿Seguimos con la peli? - parecía que no quería hablar de lo que acababan de hablar en el baño y quería seguir disfrutando de aquella noche con sus amigas.

Finalmente, las cuatro chicas empezaron a pasar una noche muy agradable, la película fue lo suficientemente divertida para hacerles olvidar sus problemas. Sin embargo, poco a poco el sueño les iba venciendo cada vez más, hasta que finalmente no tuvieron más remedio que acostarse y dormir plácidamente. Algo de paz dentro de tanta locura.

Renata, Sydney y Denver llegaron a la habitación donde Daphne y Lara residían, para cuando llegaron el Sol ya había salido, lo cual hizo que estas se dieran cuenta de lo cansadas que estaban después de no haber dormido bien, algo que seguramente les pasaría factura más adelante.

Llamaron a la puerta, pero no hubo respuesta. Llamaron con más fuerza, seguía sin haber respuesta. No fue hasta que Sydney y Denver golpearon con bastante fuerza la puerta que lograron despertar a quienes se encontraban allí dentro.

Con algo de mareo, Mindy abrió la puerta. - ¿Qué pasa? - comentó con un bostezo, mientras se rascaba un ojo. - No hace falta aporrear tan fuerte la puerta. - parecía mucho más dormida de lo que debería, al igual que Daphne y Drea, que se encontraban algo mareadas.

Algo que llamó la atención de todos los presentes es que Lara ya no estaba en aquella habitación, solo una nota en su nombre.

He ido a cumplir con mi destino, no os metáis en medio.

- L.M.

—¿Sidney? ¿Ren? —pasándose la mano por la cara como si tratase de quitarse el sueño de encima, Daphne miró a todos lados para tratar de ubicarse—  ¿Está todo bien? ¿Que estáis haciendo a...? 

Solor entonces notó la ausencia de Lara. Iba a comenzar a buscarla cuando su mirada se detuvo en la nota.

—Maldición, maldición, maldición...  —masculló mientras comenzaba a recoger su ropa. Una vibración en el móvil que estaba sobre la cocina —¿El móvil de Lara seguiría ahí encima?— Llamó su atención. Cogió el aparato y leyó en voz alta el mensaje que acababa de llegar. 

—Ha llegado el momento del acto final y estás más que invitado a participar. Te aconsejo venir y no llamar a la poli si no quieres que le pase nada a tu pobre profesora...Te espero esta noche en el museo de terror... Oh... Se ha borrado. 

levantó la vista para mirar a los demás.

—MIerda, mierda, mierda, deberíamos haberla confrontado anoche, quizas en que problemas se va  a meter ahora—Su mirada se cruzó con la de Drea—, ¿Dónde fue Drea? ¿Dónde fue Lara?

Le dolía el cuerpo del cansancio y le dolía el corazón. Mucho más de lo que quisiera reconocer. Todo era una puta mierda. En el camino había escrito a Juancho para decirle que estaba con unos amigos y que estaba bien.

Entró en la habitación con gesto cansado y se apoyó contra el primer mueble que pilló.

Se quedó mirando a las chicas despertar, sorprendida de encontrar a Drea allí. Habló con calma pero se le notaba algo enfadada - Estuvimos anoche buscándote, pensando que estabas muerta. Encontramos un gato destripado. Y resulta que estás aquí... Bueno, al menos eso es algo bueno. Aunque tengo que preguntarte una cosa. Quién te curó los brazos con ese tratamiento tan caro? - No sonaba a acusación, solo a curiosidad. Quería tener cosas atadas viendo que de nuevo el psicópata los había citado

- Daphne. Seguramente encontremos a Lara esta noche. A no ser que sepas dónde ha ido. En ese caso, no vayas sola - 

Dormía como un bebé _{con el hilillo de baba cayéndose a la almohada} y un pijama que bien parecía sacado de mi primera comunión _{porque en mi cuerpo el pantalón quedaba por los gemelos, en vez de por el tobillo.}

-Mierda- abrí los ojos mareada- ¿Qué hora es?- echándome la mano al costado, visualicé las nuevas figuras de Renata, Sydney y... -¿Denver? ¿Quién demonios es Denver?- No entendía muy bien cuánto tiempo había pasado desde que me dormí _{a los diez o quince minutos de sentarme a ver la peli.}

¿Dónde fue Drea? ¿Dónde fue Lara?

Apoyando la mano en uno de los muebles para levantarme y mostrar lo "bien" que me quedaba el pijama, busqué a la rubia con la mirada _{como si de repente fuese a aparecer con unas tortitas dándonos los buenos días}.

-Eh... ¿Lara?- Joder. 

Estuvimos anoche buscándote, pensando que estabas muerta [...] ¿Quién te curó los brazos con ese tratamiento tan caro?

Un mensaje del asesino, mi madre queriendo presentarse a la alcaldía y Lara desaparecida. Menuda situación.

-Fue Ghostface- revelé sin esconderlo _{total, era malísima mintiendo} -Anoche seguí a Steve hacia el ayuntamiento y mientras esperaba que saliera, vi a un Ghostface siendo escoltado por el lateral del edificio- tal y como le conté a Sydney por el móvil.

-Entonces decidí seguirle por el callejón cuando -_{como era de esperar}- me atacó- la mano que seguía en mi costado les resultaría prueba evidente de ello. 

-Por suerte pisó un gato. Este me dio tiempo a huir y...- a ver cómo les decía aquello -al final del callejón me recogió otro Ghostface. El que me salvó. El que me ha curado las heridas.

¿Increíble? Lo sé.

Negando con la cabeza, de repente una incrédula e incipiente sonrisa fue naciendo en mis labios -¡Erick Hallwinter! O sea. Él- él es quien me ha salvado, _{es... bueno}. Lo que ocurre es que su otro compañero está matando en su nombre.

—¿Espera Qué?

Tuvo que hacer un esfuerzo para preguntar cómo era posible que hubiese sido salvada por un gato, ya que habían cosas más importantes que preguntar. 

—Drea, necesito saber adónde puede haber ido Lara para que vayamos a buscarla. No sé por qué tiene esa extraña ide ade que debe y puede hacer algo en todo esto. Si.. las escuche cuando te lo dijo. Pero Lara va a salir lastimada. Todo le esa cosa de su familia que no logró entender. 

se volteó a mirar a Renata

—No, para nada... ¡Y tú tampoco Mindy! Exclamó antes de que la otra rubia saliera a hurtadillas de la habitación. Si no iba a hacerlo, mejor para todos. Luego se volteo hacia la persona que acompañaba a Sidney y a Renata. 

—Ahora... ¿Quién es?

Sydney había dejado hablar a Renata, que a su parecer, estaba conteniendo demasiado su enfado. Esperaba que la historia de Drea disipara todas las dudas y el shock de haberla encontrado ahí. Pero cuando escuchó su punto de vista, no aguantó más.

-Pensábamos que estabas muerta.-repitió las palabras de Renata, porque Drea parecía no entender la gravedad de lo que le estaban contando.-¿Y estabas aquí, simplemente durmiendo?

-Te despediste de mí, pidiéndome que cuidara de tu hermano como si te fueras a morir. Te seguimos hasta el ayuntamiento, te buscamos siguiendo un rastro que nos llevó a un callejón sin salida con un gato muerte y dos fuentes distintas de sangre, en lo que parecía una trampa. Pero lo que ocurrió fue que apareció un Ghostface que te salvó del otro Ghostface, y entonces te fuiste del ayuntamiento, sin volver a encender el móvil ni avisarme de que estabas bien.-clavó su mirada ojerosa y cabreada en Drea. No quería creer la teoría de Nichole, pero el relato que había contado le contaba a cuento chino. Y eso sin contar lo que había sacrificado por haber ido al ayuntamiento.-¿Qué querías, matarme?

-Vale, si dices la verdad, entonces tendrás pruebas, pistas, lo que sea, sobre su identidad. Dinos que te contó, como sonaba su voz, cual era su altura. Quién crees que es. Porque cuanto antes descubramos quienes son los Ghostface, y resolvamos todo el tema de Erick (ya sea el falso o el verdadero), su hermana y Ryan Mui, antes acabará todo esto.-explicó, mirando a las presentes, pero sobre todo a Daphne.-Tú y Lara les estabais investigando, ¿verdad? ¿Qué descubristeis? ¿Por qué Lara se ha ido?

Casi se había olvidado de que Denver estaba con ellas, hasta que preguntaron por él. Sydney se las quedó mirando sin entender que no vieran la evidente relación entre ella y su versión masculina tres años menor que ella*.

-Es mi hermano pequeño, Denver. Denver, estas son mis compañeras de clase Drea, Daphne y Mindy.-se limitó a decir, señalando a cada persona al nombrarlas.

-Es que yo misma tenía pocas esperanzas de salir con vida- le reproché comprendiendo en parte su molestia. _{Y en otra parte no porque ella no había sido justamente la más sincera conmigo esos últimos días.}

-Erick me pidió que no encendiese el móvil y... y lo siento, pero no lo hice -además, que llegué a la residencia de estudiantes más pálida que una pared blanca. Si hablaba como una persona medio normal era por las curas _{y los medicamentos que me tomé antes de caer rendida}.

-Párate a pensarlo. Piénsalo un momento. ¡Me salvé de milagro!- _{bueno, técnicamente fue él quien me salvó}- ¿Cómo iba a contarte todo esto por teléfono? ¿Para que lo escuche el otro Ghostface? No... O sea. No podía hacerlo.

Moví las manos en señal de impotencia -En serio, Erick no es el malo. Quiere parar a quien está cometiendo los asesinatos. Al que acabó con Steve...- mi gesto denotaba cansancio y no tardé en bajar los ojos cuando me pidió saber algo más de él.

-Yo... no le he visto la cara. Sólo sé que...- recordé su olor _{y un intenso ligero rubor bañó mis mejillas} -tiene barba.