Partida Rol por web

-. Bienvenidos nuevamente-. Declara de una forma animada Albert al ver a todos sus estudiantes-. Esperemos que hoy tengamos una clase tranquila, carente de cualquier tipo de accionar absurdo e ineficiente-.  Sus manos toman su característica taza de porcelana fina y bebe lentamente un sorbo de un café que inunda de forma agradable el ambiente con su aromática esencia-. En esta ocasión utilizaremos un practico hechizo que os puede ser bastante efectico para practicar su control mágico, esconder pequeños objetos valiosos o, también, en casos de emergencias ser utilizado como un buen distractor-. El heredero de los Von Vianden saca su oscura varita y con un suave movimiento susurra “Avifors” al mismo tiempo que apunta a un conjunto de viejos papiros. En ese mismo momento, los viejos e inertes papiros comienzan a tomar forma de decenas de bellos pájaros azules que comienzan a volar por todo el salón, inundando el lugar con su mágica e hipnótica presencia para luego aterrizar en diferentes lugares como pupitres, candelabros, ventanas, etc. Era como si nuevos inspectores hubiesen sido invocados   para vigilar a los jóvenes magos-. Comiencen, pueden tomar como material de practica las pequeñas esferas de vidrio que estan en la mesa de al frente-. finaliza, aun con su taza en una de sus manos, señalando con sus ojos una enorme mesa que en su superficie alojaba decenas de pequeñas y hermosas bolas de cristal traslucidas de diferentes colores ...

Esperemos que hoy tengamos una clase tranquila, carente de cualquier tipo de accionar absurdo e ineficiente

Poco a poco, el profesor Vianden iba dejando caer su auténtica forma de ser en las clases, esa misma que había mostrado en el despacho, capaz de seleccionar solo a los mejores, lo más ambiciosos, en detrimento de los que él consideraba mediocres. Arrugué la nariz. No me gustaba.

No obstante, no iba a dejar de estudiar por eso. Así que hacía caso a todo lo que decía.

En esta ocasión utilizaremos un practico hechizo que os puede ser bastante efectivo para practicar su control mágico, esconder pequeños objetos valiosos o, también, en casos de emergencias ser utilizado como un buen distractor.

Después, nos demostró su hechizo Avifors, por el cual transformó varios papiros en hermosos pájaros azules que revolotearon por toda la clase. Todos mirábamos embelesados las aves, pero también expectantes por empezar a trabajar.

Comiencen, pueden tomar como material de practica las pequeñas esferas de vidrio que estan en la mesa de al frente-

A-vi-fors... -repetí varias veces en voz baja, antes de agitar la varita simulando el movimiento del profesor y pronunciar el hechizo en voz alta.

-¡A-VI-FORS!

Una de las bolas de cristal se transformó automáticamente en un precioso pájaro amarillo, parecido al del profesor pero con mi color favorito, y recorrió toda la sala, hasta aterrizar en mi mesa.

Me había salido bien... y a la primera. Genial, pensé, aunque tuve que concentrarme bastante para conseguirlo.

Como ya se estaba convirtiendo en costumbre, cuando llegamos a la clase de Transformación nos sentamos en nuestros respectivos grupos. El comienzo de la clase hizo que algún alumno pusiese mala cara y otros bajasen la mirada cuando el profesor nos recordó los incidentes de la clase pasada; no entendía porque no les gustaba la actitud del profesor, al final un mago bajo presión si consigue no explotar sera mil veces mejor que uno con el que han sido complacientes; deberíamos estar agradecidos con por esta actitud.

En la lección de hoy nos enseño "Avifors" un hechizo que transformaba materiales en aves del mismo tamaño y composición que los materiales que utilizamos. Un hechizo bastante apropiado para un evento o para un romántico con un ramo de flores a mano.

El profesor nos indico que practicáramos con unas pequeñas esferas de cristal, pensé en que tipo de pájaro quería crear, decidió que serian unos pequeños gorriones, miro las esferas y pronuncio su hechizo pensando en unos gorriones negros.-Avifors-. Las pequeñas esferas empezaron a mutar y oscurecerse hasta que tomaron la forma de pequeños pájaros similares a gorriones; definitivamente necesitaba practicar pero un comienzo es un comienzo, también el color no era totalmente opaco, dejaba pasar algo de luz lo que le daba un tono extraño pero bonito... a veces de los fallos se descubren cosas mejores. 

-. Señorita Edevane, señor Lockhart-. Es lo que los labios del profesor invocan de la nada-. Realmente me ha gustado vuestro rendimiento en esta clase, sus creaciones, a pesar de poseer pequeños detalles que se pueden corregir, son de un nivel que fácilmente podría rivalizar con los de cursos superiores-. Sus claros ojos comienzan un recorrido en las dos aves invocadas-. A pesar de que queda tiempo antes de la hora de termino, vuestro trabajo merece una pequeña recompensa, por lo tanto, se pueden retirar-. Mira a sus alumnos con una enorme sonrisa-. La clase ha terminado, el resto… solo espero que asuman las consecuencias futuras de su patético actual-.  Se puede notar un leve desprecio al resto de la carroña para luego ir a su escritorio para dar otro sorbo a su taza.  

Satisfecha, asentí. Me había salido bien, y aunque sabía que aquello solo podía ser más difícil cada vez, pensé que para ser una simple muggle, como nos llamaban, había gente que tenía más dificultades que yo.

Me sentía muy animada y solo podía pensar, mientras recogía mis cosas para irme de clase, que aquello no se me daba tan mal como habría esperado.

-Gracias, profesor -le dije, antes de salir.