La anciana Aleü se dirige renqueando hacia el fiero y malencarado guerrero conocido como Horen en un momento de descanso en el campamento en el que pueden hablar a solas y le sorprende con sus palabras:
- Saludos, poderoso guerrero, no había tenido ocasión de agradecerte que luchases por todos nosotros durante el asalto de los incursores – le sonríe solícita – Y aunque tu temerario valor te hizo salir malparado, todos hemos sido testigos de que la única baja real entre nuestros enemigos cayó bajo tu implacable hacha de guerra. Gracias te sean dadas por ello.
La vieja le mira unos instantes y parece titubear un poco… pero finalmente se decide a seguir hablando:
- Verás, valiente Horen, no he podido evitar fijarme en que has mostrado cierto interés por esa exuberante belleza pelirroja que os acompaña, esa altiva arquera… pero también es evidente que ella no parece apreciar adecuadamente tus intenciones – habla con suma cautela pues sabe que éste es un tema delicado – Creo que te debo algo por haber luchado por nosotros, así que me atreveré a advertirte lo que he apreciado: esa mujer es una vingana y eso la convierte en alguien orgulloso y voluble como el viento de su padre Orlanth… será muy difícil que tus deseos lleguen a buen puerto – sus ojillos se convierten en dos rendijas cuando añade – Difícil, sí, pero no imposible… especialmente si cuentas con la ayuda mágica adecuada…
Parece que por fin, después de tantas vueltas, hemos llegado al meollo de la cuestión:
- No sé si sabes que me dedico a leer la buenaventura y a fabricar filtros de amor – un nuevo brillo, ahora de interesada avaricia, asoma a la mirada de la astuta anciana – Y no me hace falta leer tu destino para saber que si no recibes ayuda, jamás obtendrás tu victoria sobre esa Gábriel ¿Te interesa comprar mis productos?
Anciana, no me andaré con rodeos. Dime qué pócimas vendes, y su precio. Y cuéntame si han sido bendecidas por algún dios o sólo por tus artes. Y a ser posible... ese jugo amoroso del que hablaste. Un guerrero como yo tiene necesidades que han de ser satisfechas, y algunas mujeres no quieren entenderlo...
La vieja sonríe, no sin cierta malicia, al detectar el ansia apenas disimulada en la voz del hombre…
- Bien, bien, bien… - se dispone a contestar – Mis pócimas y mis productos nacen exclusivamente de mi antigua sabiduría, un conocimiento ancestral, no hay dioses por medio y no puedo decir que sean baratos… pero sí puedo aseguraros que su efectividad es incuestionable – dice con cierto aire jactancioso – Podéis escoger entre gran cantidad de dones, desde algunos que os hacen más rápido, o más vigoroso… hasta los filtros de amor que os rejuvenecerán, potenciarán vuestro carisma y os harán irresistiblemente atractivo…
Haciendo una pausa teatral, la anciana le mira de soslayo, como calculando cuanto estaría dispuesto a pagar.
- Pero me habéis pedido que no me fuera con rodeos y no lo haré, mis mejores pócimas valen unas veinte ruedas de oro – vuelve a mostrar esa astuta sonrisa al contemplar la turbación en el rostro del guerrero – Y viendo vuestra cara, imagino que no disponéis de semejante cantidad en estos momentos… pero no desesperéis, hay otro tipo de acuerdos a los que podemos llegar, un bravo combatiente como vos seguro que ha hecho tratos alguna vez ofreciendo su protección a un patrón necesitado… y lo que yo busco ahora mismo, especialmente tras el último ataque de esos incursores bárbaros, es justamente eso: la custodia de un mercenario que vele por mi vida, mis bienes y mis intereses. Así que os proporcionaré una de mis creaciones si prometéis solemnemente que me acompañareis y me ofreceréis vuestra firme y sincera protección durante las próximas dos semanas de viaje. El trato es sencillo si hay buena voluntad por ambas partes…
Diciendo esto, extrae una redoma que contiene un líquido espeso y blanquecino de uno de sus refajos y se la muestra discretamente, como un tesoro:
- Esto que os muestro es un poderoso filtro de amor, debéis ingerirlo vos mismo, yo no ofrezco magia negra que pretendiese afectar al blanco de vuestros deseos… más aguardad, antes de haceros entrega de la pócima debo activarla con un conjuro, no iba a exponerme a que cualquier incauto me robase mis creaciones – ríe por lo bajo con su voz cascada – Además también debo haceros una advertencia, este bebedizo os dará un atractivo sobrenatural durante un día y una noche, pero lo que hagáis con semejante don es cosa vuestra, yo no puedo garantizar que tengáis éxito en todos vuestros intentos de seducción si os comportáis con una rudeza que ofenda a vuestra pretendida compañera – parece que la anciana ha vivido mucho y sabe anticipar problemas – Así que antes de dároslo debéis prometer que mientras la magia funcione correctamente, aunque las cosas no salgan exactamente como deseabais, no guardaréis rencor alguno hacia mi persona, ni emprenderéis jamás ninguna acción contra mí, contra mis bienes materiales o mi reputación y mis intereses. Jurádmelo en voz alta. Eso y que me protegeréis durante las próximas dos semanas de viaje. Hacedlo y pondré en vuestras manos una capacidad de seducción propia de un dios del sexo y la lujuria…
Sorprendentemente la vieja parece titubear un poco, alza una mano para hacerle guardar silencio mientras balbucea crípticas palabras y gasta largos minutos agitando la redoma con algo parecido al disgusto, chistando para sí misma en un par de ocasiones. Incluso da un sonoro pisotón en lo que se diría una pueril rabieta. Pero finalmente parece obtener lo que buscaba y esforzándose por centrar su errática mirada, vuelve a dirigirse a su comprador con tono algo seco:
- ¿Y bien? Estoy esperando que prometas todo lo que he pedido y cerremos el trato...
Motivo: Conjuro
Tirada: 1d100
Dificultad: 73-
Resultado: 92 (Fracaso)
Motivo: Conjuro
Tirada: 1d100
Dificultad: 73-
Resultado: 79 (Fracaso)
Motivo: Conjuro
Tirada: 1d100
Dificultad: 73-
Resultado: 58 (Exito)
Le ofrezco el Filtro de Amor Pasional
Motivo: PMvsPM
Tirada: 1d100
Resultado: 47
Motivo: Intensidad vs PM
Tirada: 1d100
Resultado: 8
Evidentemente, lanzo el Dominar Pacto intensidad 18.
Acompaño con tiradas PM sv PM y Intensidad vs PM (tengo 18 PM)
Horen mira con extraña inquietud a la anciana, no por miedo, sino por lo que esconde detrás de esas arrugas. Nunca ha confiado en nadie, ni joven ni viejo. Haciendo un alarde de valentía mayor incluso que cuando los bandidos atacaron la caravana, levanta la mano con la palma cerrada en gesto de "alto".
-No discuto que esa pócima me es muy útil, pero tampoco voy a volverme loco por una mujer que no sabe apreciar a un buen guerrero que sabría colmarla de placeres. Es cierto que esa mujer me atrae, pero también que puedo conseguir a cualquier otra que sí sabrá valorar... mis atributos. En cualquier caso, sabia anciana, mi destino está ligado ahora mismo a esa mujer, y también al hombre de piel oscura llamado Onaeko. No puedo perder su senda. En cualquier caso, espero poder encontrarte cuando lo necesite. Si el tiempo no me ayuda a domar a esta pelirroja temperamental, tendré que conseguirla de otro modo menos habitual; y para eso no dudo que necesitaré tus servicios.
Shargash, qué gran injusticia se ceba con los que te honran. La muerte de un enemigo cuesta menos que uno de estos brebajes. Mercaderes, qué arma más afilada es su lengua...
Pero quizá, si Gábriel accediera a ello, podríamos ir juntos, y ambos sacaríamos beneficio... Le preguntaré si está de acuerdo. Seguro que es fácil convencerla de un combate más. Supongo que no tendrías ningún inconveniente en tener a una guerrera más tan capaz, protegiéndote, ¿verdad? Y sonríe entrecerrando los párpados, pensando lo que podría hacer con esa mujer tan voluptuosa.
La anciana tuerce el gesto llenando aún más, si cabe, su avejentado rostro de arrugas. Sin duda está disgustada porque le hayan hecho perder su tiempo y sus energías mágicas activando la poción, para después acabar dándole largas sin compromiso alguno… así que dedica una mirada estrábica al guerrero y masculla entre sus ya escasos dientes:
- Tú mismo, pero quién va dejando pasar las oportunidades no siempre vuelve a encontrarlas…
Ha oído a la vingana hablar, en torno a la fogata del campamento, de su intención de dirigirse al Bosque de las Maravillas para cazar alguna pieza exótica y eso seguramente marcará el punto en que sus caminos se separen.
Aleü puede comprobar cómo Horen se acerca a Gábriel para preguntarle, seguramente, si desea acompañar a la anciana. Horen está seguro de que aceptará, aunque no las tiene todas consigo. Cuando termina de hablar con Gábriel, gira la cabeza y parece pedirle paciencia con la mirada. Horen necesita ese "sí" más de lo que quiere creer. Su cuerpo se estremece sólo de pensar que podría tocar a Gábriel... Y es la primera vez que no puede tomar a una mujer por la fuerza. ¿Tal vez porque sienta respeto hacia esta guerrera bárbara? ¿O tal vez es algo más que el profundo respeto por su habilidad en el combate?
Entonces, con un gesto imperceptible, parece secarse una gota de sudor que recorre su sien.
Al cabo de un rato se acerca de nuevo a Aleü.
-Está hecho -le dice-. Te acompañaremos... los tres. Tú tendrás el triple de protección, y yo tendré mi brebaje. Los tratos que debas hacer con ella los dejo de tu cuenta. Supongo que no será un problema mayor teniendo en cuenta que estarás mejor protegida aún. Yo ya me considero pagado.
La vieja le mira de reojo con los labios firmemente fruncidos, se diría que no le gusta nada que le hagan perder el tiempo con titubeos, idas y venidas… pero extrae de nuevo la redoma y vuelve a salmodiar algo ininteligible… parece que no sale bien al principio, así que reniega en silencio y vuelve a intentarlo. A la segunda, sonríe.
- He tenido que volver a activar la magia de la pócima – murmura entre dientes con cierto disgusto – Pero insisto en oír de tu propia boca que te comprometes no sólo a protegerme durante las próximas dos o tres semanas de nuestro viaje, sino a que jamás harás nada contra mí persona y mis intereses, aunque las cosas no te salgan exactamente tal como esperabas…
Motivo: Conjuro
Tirada: 1d100
Dificultad: 73-
Resultado: 79 (Fracaso)
Motivo: Conjuro
Tirada: 1d100
Dificultad: 73-
Resultado: 35 (Exito)
Conjuro
-¿Y por qué tendrías que temer nada por una poción que me vendes? ¿Acaso no confías en tus propias aptitudes? ¿Por qué voy a hacerte nada? ¿ Y por quién me tomas? ¿Por un simple bandido bárbaro como los que nos ha atacado? Yo soy un guerrero, combato contra hombres y bestias, no contra ancianas. Está bien, señora Gaal. Pero ten en cuenta que estoy poniendo mi vida en esto, así que el precio a pagar es mucho más alto que el que yo te pongo a tí. Sólo te prometo que cumpliré mi parte de lo acordado, pero nunca pondré en riesgo la vida de los que me acompañan, y menos aún la mía. Por lo demás, la acompañaremos durante dos semanas, ni más, ni menos.
Acto seguido, extiende la mano para recibir el brebaje. Tú la preparaste -dice mirando la poción- antes de que aceptara tu precio. No es culpa mía que malgastaras tus energías. No voy a beberla ahora, así que espero que los efectos se mantengan dentro de la redoma hasta que la necesite.
- ¿Unos guardias que "nunca pondrán en riesgo su vida"? Eso no parece muy útil...
Horen no tiene paciencia. Sus discusiones las ha acabado siempre a golpe de hacha, y lo cierto es que se siente tentado a hacerlo.
-Vigila tu lengua, anciana. Has dicho que te jure que jamás haría nada contra tí ni contra tus intereses. Yo te he respondido que no pondré en riesgo la vida de los que me acompañan -dice, recalcando las últimas palabras-. Teniendo en cuenta que te debemos acompañar dos semanas, eso te incluye. Pero no sé por qué debería actuar contra tí... a menos que vayas a hacer algo que ponga en peligro mi integridad y la del resto de mis compañeros -o que hagas algo contra nosotros-, y en ese caso actuaré en consecuencia. Nosotros te escoltaremos a donde quiera que desees ir, pero tú me obedecerás en caso de peligro si veo que nuestra vida está en juego. Arriesgaré la vida para defenderte, si es lo que preguntas. Para eso me contratas, y esas son las normas.
Horen no suele tener mucha paciencia, y menos con los que tratan de vencerle usando la lengua. Ya le han engañado muchas veces de este modo, y aprendió a ignorar rápidamente las conversaciones que no son simples y directas, como "mata". Sigue con la mano extendida esperando la redoma.
-Eso es lo que te ofrezco. El riesgo a caminar por estos lares es importante. Haré cuanto esté en mi mano, pero te ofrezco mucho más de lo que me ofreces a mí. No te engañes. Mujeres las tengo, a cientos. Deberías considerarlo un favor, teniendo en cuenta que será difícil que encuentres una escolta mejor que una matadragones, un bendecido por el hijo de Yelm, y un buscador de espíritus.
- Mmmm… de acuerdo, tendrá que bastar con eso – susurra la anciana con una sonrisa críptica mientras le tiende la redoma, pero al tiempo que se la entrega le hace una última advertencia – Piensa, mi bravo guerrero, que el contenido de la poción mejorará tanto tu aspecto que puede llegar a hacerte irreconocible, así que si lo deseas podrías incluso hacerte pasar por otra persona… úsalo como desees y no temas por que los efectos sean perecederos, a menos que la atesores sin usar durante varias estaciones… te aseguro que funcionará perfectamente y te cambiará durante todo un día… tiempo suficiente para satisfacer cualquier deseo libidinoso, incluso los de una bestia salvaje…
Horen está bajo los efectos del hechizo de Dominar Pacto (después de haber visto su rango de PM no hay duda)
Se ha comprometido a lo siguiente:
Nosotros te escoltaremos a donde quiera que desees ir, pero tú me obedecerás en caso de peligro si veo que nuestra vida está en juego. Arriesgaré la vida para defenderte, si es lo que preguntas. Para eso me contratas, y esas son las normas.
Si bien ha sido lo bastante astuto para matizar:
...a menos que vayas a hacer algo que ponga en peligro mi integridad y la del resto de mis compañeros - o que hagas algo contra nosotros - y en ese caso actuaré en consecuencia.
Ese es el Pacto que está obligado a cumplir (o para vulnerarlo, superar una tirada PMvsPM contra 18)
Tras la conversación con Hensheen:
-¿Debo entender que su viaje de dos semanas -y nuestro compromiso- empieza ahora, pues?
Empezaba en el mismo momento de cerrar el trato, así que ya llevamos media semana (fué hacia el final del viaje)
Aquí nadie engaña a nadie... (je, je, je) ;)