Tras dos semanas de viaje tu y tu grupo llegáis a una zona cercana a Seto de Piedra. Todos sabéis como debéis actuar, entrando en la ciudad en pequeños grupos, hospedándose en posadas separadas y sin mostrar ningún símbolo o palabra que pueda crear sospechas sobre vuestras ideas o sobre vuestra fe.
Te toca formar grupo junto con la salvaje y tres devotos, un anciano entrado en años,un joven vigoroso lleno de esperanza y su mujer, una cría de poco más de quince años, cariñosa y amable.
Gaheris, si puede ser, refréscame nombres de algunas de las personas con las que viajas, junto con el nombre de la salvaje. Me temo que no lo recuerdo y no tengo tiempo ahora mismo para mirarlo.
Gracias por todo.
El viaje con mis dos compañeros, el soldado Adam y nuestra prisionera, Gark, a la que llevaba todo el viaje vigilando de cerca. De momento no había intentado darnos problemas, pero aún así yo no bajaba la guardia, ya que seguramente solo estaba esperando el momento adecuado para escapar. Con el fin de no destacar entre el grupo de peregrinos, los tres llevamos túnicas de peregrinos, que cubre nuestra indumentaria y armas, junto a, en caso de nuestra prisionera, los grilletes que inmovilizan sus manos.
Finalmente llegamos a Seto de Piedra, y, marchando en un grupo pequeño con mi prisionera y acompañados por un anciano y un joven matrimonio, nos dirigimos a una de las posadas, esperando poder conseguir una habitación individual para mi "acompañante".
¿Vas a compartir habitación conmigo, joven caballero? Tal vez pueda enseñarte cosas que las mujeres de alta cuna no se atreven a hacer -te preguntó Gark, con una sonrisa llena de crueldad y lujuria.
Tus acompañantes la miraron con cierto reproche pero no dijeron nada.
Miré a la salvaje con severidad, pero no dije nada, en su lugar cogí la llave y pedí algo de comida y agua para los dos, para luego llevarla con nosotros al cuarto, tras desear un feliz descanso a nuestros compañeros de viaje. Una vez dentro de la habitación, cerré la puerta con llave y dejé que Gark se sentara en la cama:
- Tu numerito de seducción funcionaría mejor si no fuera porque sé que me cortarías el cuello a la menor oportunidad, para poder escapar, ¿me equivoco?. - Le pregunté, divertido, mientras le ofrecía algo de caldo con una cuchara, tras asegurarme de que no quemara.
La salvaje te sonrió ampliamente. Sabías que disfrutaba de esos juegos de amenazas y seducción que ambos habías practicado durante el viaje -Te equivocas, si me estuvieras haciendo disfrutar no te mataría a la primera oportunidad. Pero si me aburriera, bueno, tendríamos que comprobar como eres de divertido con una mujer.
Después de comprobar de que el caldo esta bueno y que no quemaba, sonreí, mientras le daba a ella una cucharada, como si fuera un niño recién nacido, ya que como tenía las manos inmovilizadas, le sería difícil comer con ellas. Además, disfrutaba dándole de comer:
- Bueno es saberlo... Pero lamentablemente, como sabes, soy un hombre casado y, por mucho que quisiera y me tentara, faltaría a mis deberes de esposo montar a tan hermoso ejemplar salvaje...
Mientras ella aceptaba la cuchara, inclinó descaradamente su busto, con la intención de que yo apreciara su escote. Los dioses me ponían a prueba, sin duda... Ojalá mi esposa estuviera aquí y me ayudará en esta situación tan... Dura. Lo dos siempre hemos hablado de la fantasía de hacer un trío con una mujer, pero nunca la habíamos cumplido, ya que la única manera, hasta ahora, sería obligar a una criada, cosa que no queríamos, o pedírselo a una noble, cosa que no confiábamos. Gark era una buena opción, sobre todo si podíamos ganarnos su confianza y sacarle información, pero antes era esencial dos cosas: Llegar vivos a Nido de Águilas y hablar con Miriamele sobre la idea, ya que no quería tocar a la salvaje sin el consentimiento de mi mujer primero, por mucho que la deseara ahora mismo...
La salvaje te mira sonriendo dulcemente, como si disfrutara de algún manjar delicioso -Hombres casados, que cosas más estúpidas hacéis vosotros, los que os llamáis civilizados. ¿Y si vuestra mujer no os da un hijo? ¿Dejáis morir vuestra semilla? Un hombre debe conquistar y ser merecedor de acostarse con las mujeres, sin existir otro lazo entre ellos que el del mutuo respeto por las habilidades del otro. Los salvajes escogemos a nuestros amantes por sus habilidades, al resto los violamos para demostrarles su debilidad. ¿Tu que eres? ¿un hombre débil o fuerte?
La miré sonriente, mientras acariciaba su mejilla, antes de darle otra cucharada de comida:
- Fuerte... Pero mis costumbres son diferentes y cambiarlas según me conviene en lugar de seguir con ellas hasta el fin, por mucho que quiera hacer otra cosa, no me haría si no un hombre débil, ¿no te parece?... Pero cambiemos de tema, tú lo sabes todo de mí, pero yo no se casi nada de ti, ¿estás casada o lo que se llame a tener pareja entre vosotros?. ¿Familia?.
La mujer soltó una queja ante tu respuesta -¿Entonces los hombres fieros y fuertes, casados con una mujer estéril, perderán su simiente? Con razón vuestro pueblo es tan debilucho. ¿Casada, pareja? Nosotros tenemos muy claras las relaciones, si alguien se gana pasar la noche en la cama de otro podrá disfrutarlo tantas veces como el otro lo permita. El clan cuida del clan, no necesitamos esas relaciones de pareja. Ellos son mi familia.
Le dí otra cucharada, mientras le dedicaba una sonrisa triste:
- Entonces nadie se preocupa por ti cuando estás triste, o algo te preocupa o si necesitas hablar con alguien, ya que eso te hace parecer débil... Puedes pensar lo que quieras de mi y de mi pueblo, pero a mi me parece una lástima no tener a nadie en quien puedas confiar realmente o te abrace por las noches simplemente porque quiere hacerlo...
Una vez que terminamos de cenar, dejo los cacharros lejos de la cama y me acerco a ella para atarla con una cuerda al cabezal de la cama a los grilletes, después de tumbarla.
- Será mejor descansar, mañana nos espera un día largo...
La mujer soltó un bufido tras escuchar tus palabras -De verdad que no se como podéis compartir vuestra habilidad con las armas con esa clase de sentimientos. Si tanta necesidad tenéis de arrumacos y cariño no se como podéis dormir tras segar la vida de alguien. Por cierto, así no hay quien duerma bien, ¿podrías desatar mis correajes un poco?
Después de hacer como si lo meditara, respondí:
- Hummm... No. Considérate afortunada, otros te hubieran hecho dormir en el suelo o te estarían violando por todos los orificios. Ahora relájate y duérmete, yo he dormido de maneras más incómodas y se supone que pertenezco a un pueblo débil. - Le respondí con un guiño, sonriente. Era una prisionera y no pensaba darle la oportunidad para soltarse y que tratara de atacarme para escapar.
No solo se supone, venid por mi, embutido en tu armadura, en un combate sin armas. Veremos quien es el pueblo más débil -te desafió la salvaje desde su incómoda postura.
Sonriendo, le pregunté, curioso:
- ¿Te das cuenta que una armadura protege perfectamente de los puñetazos, verdad?... Esta bien, te soltaré de la cama, pero si intentas escapar, volveré a atarte...
La desaté de nuevo y volví a encadenar sus manos a la espalda y finalmente nos acostamos, cubriendo nuestros cuerpos con la manta:
- ¿Mejor?.
¿Sabes que, si sigues reteniéndome, alimentarás mi deseo de libertad y mi odio hasta el punto de querer matarte en cuanto tenga oportunidad? ¿Lo sabes verdad? -te respondió la salvaje, dejandote ver la rabia que sentía al estar encadenada -y no creas que acabaré contigo. Mataré a todos esos santurrones que te acompañan y, seguramente, acabe con la vida de tu amigo, ese Adam.
Todavía no hemos acabado, seguramente te deje un mensaje más aparte de este antes de seguir el camino.
Le dediqué una sonrisa feroz antes de responder:
- Pero antes tendrías que matarme, ¿no?. Además, ahora me perteneces, como tú misma has dicho, y tengo planes para ti, grandes planes, mi pequeña salvaje...
La cogí del cuello y la obligué a mirarme a los ojos, que soltaban fuego:
- ¿Crees que soy un débil sentimental, incapaz de hacer lo que es necesario cuando llegue el momento?. No he olvidado que tú y tus compinches matasteis a un chico inocente, porque era leal a mi, pero tampoco que solo obedecíais ordenes, por eso respiras... ¿Sabes que significa mi apellido, Bane?. Significa perdición... Y me voy a asegurar que tu amo lo sepa cuando lo destripe y lo estrangule con sus propios intestinos...
Luego acerqué mi rostro mas al suyo, de manera que sus ojos y los míos estuvieran a pocos centímetros:
- Él sabe eso, sabe de lo que soy capaz cuando me enfurezco, por eso los Lannister quisieron que me uniera a ellos, incluso que me uniera a su familia. Por eso no correrá el riesgo al saber que hay una superviviente de su grupo de asesinos y mandarán que te maten, antes de que hables, porque sabe que yo no esperaré a un juicio: Yo iré a por él directamente y le mataré, porque la sangre de ese chico me lo pide... Así que en realidad, pequeña, deberías de agradecérmelo, porque si te soltara y tu amo averiguara que has hablado conmigo, ¿que crees que te haría?. ¿Crees que te recibiría con los brazos abiertos, independientemente de lo que le cuentes sobre lo que me has dicho?.
A continuación la solté, pero mantuve la mirada depredadora en el rostro, la mirada que había dado el nombre a los Bane durante siglos...
Tal como yo lo veo, o la he acojonado o la he puesto húmeda... ;P
Tras soltar a Gark esta te miró llena de ira, parecía que iba a lanzarse a por ti de un momento a otro, usando los dientes para desgarrarte el cuello si es preciso dadas sus ataduras. Sin embargo la salvaje no actuó, permaneció quieta sobre la cama y, tras darte la espalda, susurró -Pareces muy seguro, veremos que te deparan los ancestros.
- Lo veremos... - Respondí, de manera imperturbable, antes de acostarme a su lado y cubrirnos a ambos con las mantas para no pasar frío, ya que ella no podría, debido a sus ataduras. A continuación respondí, con un tono neutro. - ... Buenas noches.
Fin de prólogo Gaheris. Voy a intentar aligerar con los otros para acabar lo antes posible.
Un saludo :)
Pues en esos tres días, me aseguro de que nadie nos siga, trato de limar asperezas con Gark, aunque sin parecer débil, y doy instrucciones a Adam de no rebelar a nadie, una vez que estemos en Nido de Águilas, la verdadera identidad de la chica. La versión oficial de lo que pasó a nuestro grupo, por el momento, será que fuimos emboscado por bandidos y logramos matarlos. Ella sería una ladrona que capturamos por el camino, intentando robarme, y que queremos que me sirva a mi esposa y a mi como compensación... Así los dos podríamos interrogarla sin llamar la atención.