En días anteriores marchaste a Desembarco del Rey para hincar la rodilla ante el Rey Quentyn, asegurando así la estabilidad de tus fronteras, al menos por el momento.
Sin embargo pese a que han pasado los días no has podido marcharte pues el Rey pretende charlar contigo a solas esta misma mañana, en las cámaras tras el salón del trono de Hierro. Escoltado por varios de sus soldados Dornienses te diriges allí, desarmado.
Qarios Chelsted estaba tranquilo mientras andaba con los soldados dormineses a la entrevista con el rey de Dorne... NO de poniente, debía recordarse eso. Había incado la rodilla unos dias antes, como la mayoría de los nobles cercanos a Desembarco, las tierras eran de quien controlara la capital pues los intereses iban de la mano. Los nobles apoyaban a la capital sólo si esta era ganadora. A diferencia del resto de tierras ellos no sentían nada por familias como stark, Greyjoy... ellos pertenecial al reino pues el reino estaba al lado de ellos. Con tierras tan prosperas y cercanas a la capital sus alimentos eran los primeros que se vendían pues eran los de menor coste de trasporte.
Estaba vestido con su mejor túnica, sin duda era casi una baratija comparado con los lujos que tenían otros nobles pero el joven aún no se consideraba como el líder de su casa, había perdido a sus padres y aunque se le consideraba un hombre no tenía ni la sabiduría ni la paciencia que tenía su padre. Su amada esposa murió como si los siete se quisieran reir de él y dejarlo solo ante la inmensidad del mundo sin un heredero. Por si fuera poco la guerra llamaba a su puerta, mercenarios habían asaltado algunas tierras cercanas a sus vecinos y desde el norte los stark no paraban de ganar terrenos. Ya tenía casi frontera con ellos lo que no era decir poco. Pronto si esto seguía así sólo quedarían 3 casas y unos eran piratas.
Estando vestido de noble solo podía pensar en lo bien que estaría con la lanza en la mano subido en su caballo de caza con sus hombres por el bosque de sus tierras mientras al pasar por las granjas las gentes saludaban con una inclinación en forma de respeto. Añoraba los paseos con su amada, cómo esta le decía de ir a visitar todo el mundo conocido para así ganar sabiduría que les ayudara en un futuro a dirigir sus tierras. Por desgracia ella ya no podria hacerlo y él lo tendría muy dificil pues el señor no se podía ausentar mucho si no tenía alguien cuidando de todo y sin un heredero por si algo le sucedía.
El rey estaba tardando, era lo malo de ser rey que podía hacer lo que quisiera dentro de unos márgenes, eso solo hacía que el muchacho se ensimismara más en viajes imposibles y guerras extrañas. Aún tenía que pensar que hacer con sus fronteras y todos los posibles peligros que le hacechaban. Si estar cerca de desembarco era bueno pues el rey protegía sus tierras, si alguien iba a atacar al rey donde primero atacaría sería a los nobles cercanos a desembarco para saquear e impedir llevar suministros a la capital.
Cuanto añoraba su arma y armadura
Los guardias te hacen entrar en una gran sala, con varios guardias apostados en las paredes, donde el Rey Quentyn charla con un hombre frente a un mapa del Reino. Al verte entrar ambos se vuelven y te muestran sus rostros, furioso en el caso de Quentyn y serio en el otro hombre.
Lord Chelsted, siento la espera -te saluda el rey con buenos modales y cierto respeto -pasa, este es Lord Arron Qorgyle, el general de mis ejércitos.
El hombre se acerca a ti, tendiéndote la mano. Aunque no lo conoces en persona su fama le precede, más como dotado general que como Lord de una de las Casas de Dorne.
Estamos revisando la situación de Poniente y temo que mis tierras, las vuestras, son una zona conflictiva -con una mano te guía hacia el mapa, señalándote varias posiciones -los hombres de la Casa Libertad se han escondido por el Bosque Real y asaltan y hostigan a nuestras tropas desde allí. El viejo Lord Hogg aún no nos ha presentado su fidelidad, la Casa Sunglass ha decidido rebelarse contra la corona y sus anteriores señores, la nueva casa, Espada del Amanecer, aún está decidiendo sobre cuando y a quién servir y, además, sus tierras se han visto atacadas por grupos de mercenarios.
Vuestras tierras se encuentran en una buena situación estratégica aunque bastante problemática -interviene Lord Arron, señalando las tierras que rodean tu señorío-No me fío de la Casa Espada del Amanecer, demasiados intereses enfrentados se encuentran en su sede, aunque espero que no sea un problema de aquí a unas semanas. Al Norte se encuentran las tierras del rebelde Stark y, pese a que esperamos que no ataque, sabemos que está movilizando a sus ejércitos -su dedo se mueve hacia el Norte, mostrando una posible ruta por la que pasaría el ejército, justo por en medio de tus territorios.
Y no podemos olvidar a los Lannister, no me fío de ellos, Lord Tyrion siempre ha sido demasiado astuto. Y los mercenarios ya acosan a vuestros siervos -concluye Lord Arron mirándote directamente a los ojos -tus ejércitos deberían movilizarse para repeler la amenaza pero no deseamos movilizar a vuestros hombres sin vuestro permiso ni opinión. ¿Decidnos, que haríais vos?
El joven Qarios Chelsted entró por fin a la presencia del señor y rey Quentyl Martell. Junto a él pudo ver a Lord Arron situado frente a un gran mapa de poniente. - Mi Rey - Añade inclinando la cabeza, sabía que no debía ser muy formal pues él era ahora uno de los grandes señores de poniente, pero con sus 20 primaveras no era capaz de llegar a pensar que podía hablar con aquellas leyendas vivas cara a cara. - No tiene importancia, sin duda hay cuestiones que deben priorizar. Es un honor conocerlo Lord Qorgyle, he escuchado grandes historias vuestras. Sus capacidades militares os preceden. - Inclina la cabeza con respeto luego deja su abrigo y demás cosas molestas en una silla y se acerca al mapa a tiempo de escuchar la explicación obia que el rey le brinda. - Sin duda la posición de las tierras de la corona se encuentran en un momento difícil, hay demasiados enemigos cercandolas y además los Stark llaman a las puertas. Que la casa GoodBrook haya decidido apoyar al norte sin duda es algo difícil de aceptar y han abierto camino por el río por mis tierras hasta desembarco. Aunque no se puede saber en qué está pensando el señor de Atranta, su posición es fuerte si quisiéramos negociar con él. Por desgracia el ejercito stark bajaría más rápido siguiendo el camino Real, dando mayor importancia a Cuerno de la Puerca que a mis tierras. A fin de cuentas mis tierras son fácilmente defendibles en tres puntos clave en caso de necesitad. - Señala la horquilla del rio frontera con la casa norteña, el pueblo que está junto al rio y finalmente el castillo. - Con esos tres puntos defendidos los norteños tendrían la necesidad de un ataque fuerte y prolongado para poder llegar a desembarco. Por desgracia la caída en manos de norteños de Cuerno de la Puerca de ser posible si aún no ha jurado lealtad, dejaría desembarco con un camino límpio hasta desembarco salvo por Hayford. Siendo así en el frente norte lo más importante diría yo es hacerse con el control y vasallaje de Cuerno de la Puerca. Una vez conseguido eso - Su voz dejaba claro que considera que sería difícil - Atranta tendría que pensar seriamente si desea seguir siendo norteña o no. Pero al menos habría perdido mucha fuerza a la hora de negociar con vos. Al fin y al cabo lo que todo lord desea es aumentar influencia en la corte y tierras para sus herederos. - Se calla, parece recordar que aún es demasiado sincero con sus palabras, la juventud le traiciona y en su mente la voz de su padre le riñe por no haber estado atento a sus propias palabras.
- En cuanto al sur y oeste de mis tierras, si bien es cierto que Lord Tyrion no es de fiar pues su inteligencia ha sido probada, aún no está en condiciones de oponerse abiertamente a nadie. Tal vez con la promesa de tierras al norte de las suyas pueda hacer caer algo del poder del norte... aunque eso podría hacer caer a un lobo para que crezca el león. - Se encoge de hombros pues no tiene suficientes datos como para dar voz. - Por último, La casa de Espada del Amanecer, como ya dijera mi padre hace tiempo antes de su muerte, no puede ser fiable, son impredecibles y sus componentes velan cada uno por sus propios intereses. Lo que puede llevar en un futuro a una guerra entre ellos o a guerras con sus vecinos. Tal vez el apoyo del rey y de mis tropas a uno o dos de esos nobles hiciera que las tierras fueran de nuevo tranquilas. En cualquier caso esa casa no puede terminar bien.
- Yo soy demasiado jóven pues no he participado en ninguna guerra importante aún y mis años no me permiten haber combatido en muchas. Mi casa ha apoyado a quien estuviera en el trono de Desembarco durante muchos años y así seguirá siendo, por tanto no necesitan mi permiso para llamar a las armas pues es mi Rey. Comenzaré a llamar a las tropas para que se preparen pero quisiera saber cuales son los objetivos.
Lord Arron te observó durante unos segundos con un mudo gesto de sorpresa. A continuación te puso una mano en el hombro y te dijo con sinceridad -Lord Qarios, vuestro padre puede estar orgulloso de ti allí donde esté. Tienes una mente lúcida y tus palabras guardan gran sabiduría. De todo lo dicho me quedo con tres estrategias. Debemos anexionarnos la recién forjada Casa Espada del Amanecer, convenciendo a algunos de sus dirigentes, tenemos que firmar algún acuerdo con Lord Firion Hogg e intentar atraer a Lord Garse Goodbrock a nuestro mando. Él no es demasiado amigo de Bran y, si lo sirvió con fidelidad, fue porque cumplió la voluntad de la difunta reina.
El Rey Quentyn abrió sus manos en un arco tras escucharos a ambos y, mirándote, te ofreció tus posibilidades -Cualquiera de esos tres objetivos pueden ser completados por alguien tan inteligente como vos, Lord Chelsted y, creeme, yo jamás olvido a aquellos que me ayudan. Decide pues que crees mejor para vuestra casa y mi reino y partid de inmediato. Nosotros mandaremos hombres a los otros dos destinos y organizaremos la defensa de vuestras tierras durante la ausencia de su señor.
Qarios se quedó satisfecho, había estado repasando aquellas frases e ideas con su maestre y generales de las tropas durante horas. Entre todos habían conseguido pensar en que podría pensar el principe y qué podría obtener a cambio. No debía arriesgar demasiado pues lo importante era mantener sus tierras y defender a su gente. A él sólo se le daba bien la estrategia bajo el sol abrasador y con los ejercitos ya enfrentados, esas miradas al futuro eran para generales más curtidos. Cómo deseaba poder cabalgar junto a sus hombres por los campos viendo como las campesinas se volvian a mirarlos. - Me honráis mi Rey. - Quedó un momento pensativo pues le estaban dando a elegir - Como ya he dicho, Lord Garse Goodbrock aún está en buena posición para negociar por lo que primero hay que hacerlo con Lord Hogg. Lord Hogg sólo hablaría con migo por deferencia a mi padre pero no se cómo fueron sus relaciones en el pasado. Por tanto creo que lo más conveniente para mí sería introducirme en las disputas de los nobles de la Casa Espada del Amanecer apoyando a uno o dos y consiguiendo retirar al resto del poder. Dividir esas tierras en una o dos casas sólamente y así reforzar tanto su apoyo como el control de esos hombres en la zona. - Sin duda sería la misión más difícil de todas pues podía haber miles de variaciones en las acciones a llevar a cabo pero era la que más posibilidades futuras tenía. - Si dispongo del beneplácito del rey para adoptar esas medidas serán llevadas a cabo. Si consideráis que tenéis a otro señor más capaz de llevar este tema entonces iría a intentar hablar con Lord Hogg.
La corona confía en vos, Lord Chelsted, partid raudo y cumplid vuestro objetivo con éxito. Pero antes tomad, brindemos por nosotros, para que tras estos días aciagos vuelva a brillar la paz y la tranquilidad en Poniente -sentenció el Rey, rellenando tres copas y entregandoos dos de ellas.
Si quieres hacer algo más en la capital antes de partir dilo, si no prólogo acabado.
Un saludo.
Pd: este personaje te encaja como un guante :)
Qarios Cogió la copa ofrecida por el rey. - Mi Rey es muy amable con sus palabras, partiré de inmediato.- Brindó al aire en dirección al resto de hombres y bebió la copa.- Muy buen vino - Dicho esto recoge su túnica y se dirige a salir. Estaba deseando huír de la capital, aquella cuidad llena de gente traicionera y ávida de poder. Todos querían o el dinero o el poder que un noble podía ofrecer y aquello le disgustaba. - Os enviaré un cuervo en cuanto tenga noticias. También si pudierais mantenerme informado de los resultados de las conversaciones con los nobles al norte de mis tierras sería apreciado pues tengo que estar listo para cualquier situación.
Salió de la estancia y se fue a reunir con el jefe de su escolta. - Preparad a los hombres regresamos a mis tierras, tengo demasiadas cosas en mente, estaré en el septo, hacedme saber cuando estáis preparados y partamos de este nido de serpientes. - Dicho esto se dirige al la capilla a rezar y en cuanto pueda volverá a sus tierras.
Jo, eso es que mi Steth el loco mercenario no lo roleo bien? T-T
Gracias al menos xD
Si hay alguien interesante en la capilla o en mi camino a ella pues pararía a hablar si no pues regreso a mis tierras a preparar a los hombres.
PD: No puedo borrar o editar mis escenas por lo que me equivoqué de pj (es mi única partida que llevo dos pjs y no estoy acostumbrado a recordarlo) y escribi como Steth. Si puedes borra el post anterior gracias!
Asiente complacido ante tus palabras.
- Os mantendremos informado, no dudéis de ello, quiero que mis hombres hagan su trabajo lo mejor posible y para ello soy consciente de que necesitamos comunicación.. aún así habrá que tener cuidado para que no caigan en manos indeseables, nuestros planes pueden tener mucho interés para ciertos oídos.
Con un gesto te permite marchar.
- Toma lo que necesites para tu misión - te dice el Rey con una sonrisa en sus labios. Parece que las cosas empiezan a rodar de nuevo.
jajajaja no, no es que rolees mal con Sthet, es que este te viene como anillo al dedo y eso siempre se nota (emocionas con tus post y es mucho más fácil imaginar la situación)
P.D que no? que no? en mi partida de la locura del rey llevas dos PJ, la casa y tu PJ XDDDD o no? XDDD
En principio no hay nadie importante, pero siempre te puedes dar una vuelta ;=)
un saludo!
Qarios salió del encuentro muy feliz, las últimas palabras de su rey podrían interpretarse de muchas maneras diferentes. Las posibilidades impregnaban la cabeza del jóven que veía en su imaginación como el mayor lord de poniente. Se hechó la bronca en silencio, de verdad querría tener tal poder, tanta responsabilidad tantos problemas? Vivía bien, sus hombres eran fieles y leales, los súbditos no tenían queja que el supiera. Sólo la guerra podría destrozar todo eso. Tras ordenar la preparación de sus hombres, él decidió ir al templo a rezar al guerrero una plegaria antes de volver a sus tierrras. No todos los días tenía uno la oportunidad de rezar en la capilla principal del reino.
Entró a la capilla se acercó a la estatua y depositó a sus pies unas monedas. No sabía si algo así funcionaría pero mal no creía que le fuera a hacer. Sus antepasados ándalos trajeron la religión a poniente o eso le había contado el maestre en las clases de historia. Le habían dicho que debía tener algo de sangre ándala pues el color rubio era característica de una sangre fuerte, aunque el se veía igual que el resto.
Tras finalizar el rezo se levantó y volvió con sus hombres fuera ya de la fortaleza. Allí le dieron su lanza y con el casco sobre el otro brazo y el escudo enganchado en el caballo comenzó su procesión de vuelta a sus tierras. Tenían un par de días de camino no muy forzado y esperaba poder hacer algo de caza por el camino. Si eran capaces de hacerse con un ciervo o algo mayor que un conejo el viaje sería mucho más ameno para sus hombres.
Su cabeza estaba ya muy por delante del camino cuando el jefe de su guardia al ser informado de lo que iba a suceder a continuación, consideró que sería prudente enviar un cuervo para ir preparando a las tropas. - No amigo mío, mejor ir con pie firme y que esta información no sea capturada antes de tiempo. La diplomacia o guerra se iniciará sin avisar a terceros grupos. Si el norte o los Lánister se enteran podríamos tener problemas, pero peor sería incluso que varios nobles del territorio de la nueva casa de la espada del amanecer llegaran a saber que pretendo separarlos y dominarlos bajo el nombre de uno o dos podrían aliarse e ir en contra mía. Recordad, lo más importante es mantener nuestras tierras libres y seguras. - Después si podemos ampliar fortuna y territorios... a nadie le amarga un buen jamón.
Un pequeño apunte, compañero, antes de terminar el prólogo.
El templo de Baelor ya no está, es solo unas ruinas quemadas por orden del nuevo Rey, Quentyn, y sus aliados, todos ellos fieles a R´hollor.
Qarios se quedó mirando las ruinas de sus dioses, incinerados por bastardos adoradores del fuego. - Malditos sean aquellos que no pueden respetar, mi espada será la que mande a esos bastardos a sus queridas llamas.
Su enfado se fue diluyendo, aunque adoraba a los siete y en especial al soldado, no era muy ferviente religioso como otros nobles o plebeyos que habrían matado por esta osadía. Por desgracia los adoradores de R´hollor parecían ser más radicales. Así tuvo que salir de la fortaleza e irse a alguna capilla que todavía tuviera a sus dioses. El Rey perdería mucho poder tras tales actos en las tierras de los siete. Estos podrían unirse incluso bajo la religión norteña pues eran más tolerantes o eso le habían hecho creer.
Ahora tuvo que ir a rezar a las capillas del barrio noble pero esta vez acompañado de su escolta personal pues aunque estaba con guardias de la ciudad mejor no ir solo a ninguna parte. Un nido de serpientes y ratas nunca sabes quien puede morderte.
Gracias por la aclaración.