Mañana del Día 9

Ya ha amanecido, el sol aún no está en lo alto del cielo, pero ya no estamos en el alba. Todos los comercios están abiertos y la ciudad empieza a tener un tránsito mayor. Más gente por las calles. Más lugareños moviéndose de un lugar a otro.  El cielo está completamente despejado y del viento del día anterior no se sabe absolutamente nada. Pero los escasos rayos de sol no son suficientes para calentar la ciudad y aún hace algo de fresco.

Tarde del Día 9

El sol deja de lucir en lo más alto del firmamento y empieza su descenso, aunque aún queda mucho tiempo para que anochezca va siendo hora de comer. Todos las tabernas están preparando sus guisos, preparando las mesas de sus locales y enfriando todas sus bebidas. ¡Es hora de ir tomando algo porque es cierto que tú estómago está empezando a rugir de hambre!

Las tabernas desprenden un potente olor a comida que hace que vuestros estómagos empiecen a tener hambre, si es que no lo tenían ya, ahora mismo tienen que estar en su máximo auge, pues todo el mundo busca algo que llevarse a la boca.

Hace algo de frío, pero se nota que la temperatura ha aumentado, pero nada que ver con los días anteriores.  El cielo está completamente despejado, y no corre ni una brizna de aire lo que hace que los viajes o los paseos por la ciudad sean de lo más agradable. ¡Hacía semanas que no había un día tan bueno como aquél!

Ocaso del Día 9

La temperatura ha descendido considerablemente, aunque el viento de días anteriores continuaba dando tregua. Sigue habiéndose quedado una buena tarde, pero el vaho se escapa de la boca y todos los cristales de las tabernas están empañados. Seguramente, sea mejor meterse en alguna de ellas, para refugiarse al calor de un buen hogar.

Las tabernas han dejado de preparar los almuerzos para empezar a preparar la cena. Pronto será de noche y el tiempo no invita a andar por las calles de Tormentos Cristalinos. Todavía queda gente por las calles, pero son los que acaban de salir de sus jornadas laborales o aquellos que tienen asuntos más importantes que atender. ¡En cuanto se haga de noche habrá que ir pensando en la cena!

Aún así el que no ha comido en todo el día siente que su estómago le golpea repetidamente pues tiene demasiada hambre. Y ya no hay mucho que decir sobre el que no ha pegado ojo en todos esos días, pues ahora está a punto de desfallecer y apenas tiene fuerzas para moverse.

Además, es la hora de la arena de Kord. A aquéllos que se hubieran apuntado en el templo les había llegado su momento.

Noche del Día 9

La temperatura ha descendido considerablemente. El cielo está despejado, se pueden ver un montón de estrellas, pero el frío se siente en las mejillas como si fueran alfileres clavándose en ellas. Los pies no entran en calor por muy en movimiento que estén y las manos tres cuartas partes de lo mismo. 

Los árboles se agitan para desprenderse de todas las hojas que tienen. De vez en cuando un montón de tierra se levanta con alguna corriente e incluso os deja cegados por unos instantes. Las calles de la ciudad están vacías y la mayoría de sus habitantes se han cobijado bajo sus techos o en una posada cercana. Normalmente las calles suelen estar iluminadas con antorchas pero con esa ventolera no hay forma de que se mantengan todas prendidas. Lo cuál hace que la ciudad esté oscura y sea más peligrosa que cualquier otra noche. 

Las tabernas están sirviendo las cenas y las posadas preparando las habitaciones de sus huéspedes. 

Aún así el que no ha comido en todo el día siente que su estómago le golpea repetidamente pues tiene demasiada hambre. 

Los rumores dicen que Tormenos Cristalinos es muy peligrosa por la noche, que ocurren cosas que durante el día no. Por eso es mejor estar ya resguardado en una posada y en algún sitio caliente. Y más en una noche tan peligrosa como aquélla.

Además de que ya iba siendo hora de meterse en la cama. Mañana será un día muy largo.

Alba del Día 10

Comienza a amanecer, los primeros rayos del alba alumbran Tormentos Cristalinos. El cielo está completamente despejado y vuelve a lucir un hermoso sol en la ciudad. Todavía hace algo de frío, pero se empieza a sentir el aumento de las temperaturas. Aún así todavía corre algo de viento pero es bastante tímido y cada vez molesta menos.

Poco a poco, y a medida que el sol se vaya alzando, las temperaturas se irán elevando un poco más pero aún así lo mejor será abrigarse bien, pues tiene pinta de que va a seguir siendo una mañana fría.

Los posaderos despiertan a todos sus huéspedes, anunciándoles el rico desayuno que les tienen preparados. Es hora de vestirse, colocarse la armadura, preparar los conjuros (hacedme la lista solo para el director, en el mismo hilo) y bajar a desayunar.

Hay personajes que se han pasado la noche en vela, así que será buen momento para que descansen. Los demás pueden ir despertando si lo desean. (Aquellos que lleven más de un mes durmiendo "off rol" pueden despertar, el resto tendrán que esperar unas semanas más para justificar lo tarde que se fueron a la cama, son aquellos que tienen junto a la "Durmiendo" una fecha dd/mm/aa, hasta ese día no podrán despertar si quieres dormir en condiciones).

Aquellas personas que no hayan dormido en todo el día, o hayan dormido al raso tendrán junto a su nombre el estado: Fatigado. No podrá ni correr, ni cargar. Sufre -2 a la FUE y -2 a la DES. Cualquier acción que pueda causar fatiga le dejará exhausto.

Tormentos Cristalinos vuelve a abrir sus puertas, un nuevo día comienza. Esto implica que voy a abrir de nuevo un hilo de reclutamiento, y quien lo desee puede plantearme un nuevo concepto de personaja para la partida.

Mañana del Día 10

Ya ha amanecido, el sol aún no está en lo alto del cielo, pero ya no estamos en el alba. Todos los comercios están abiertos y la ciudad empieza a tener un tránsito mayor. Más gente por las calles. Más lugareños moviéndose de un lugar a otro.  El cielo está completamente despejado y del viento del día anterior no se sabe absolutamente nada. Pero los escasos rayos de sol no son suficientes para calentar la ciudad y aún hace algo de fresco.

Mediodía del Día 10

El sol luce en lo más alto del cielo. Todos los comercios están abiertos y la ciudad empieza a tener un tránsito mayor. Más gente por las calles. Más gente moviéndose de un lugar a otro. Las tabernas empiezan a desprender un potente olor a comida que hace que vuestros estómagos empiecen a tener hambre y ya lo tendrán todo preparado. ¡Es hora de llenar el estómago!

Hace algo de frío, pero se nota que la temperatura ha aumentado, pero nada que ver con los días anteriores.  El cielo está completamente despejado, y no corre ni una brizna de aire lo que hace que los viajes o los paseos por la ciudad sean de lo más agradable. ¡Hacía semanas que no había un día tan bueno como aquél!

Ocaso del Día 10

La temperatura ha descendido considerablemente, aunque el viento de días anteriores continuaba dando tregua. Sigue habiéndose quedado una buena tarde, pero el vaho se escapa de la boca y todos los cristales de las tabernas están empañados. Seguramente, sea mejor meterse en alguna de ellas, para refugiarse al calor de un buen hogar.

Las tabernas han dejado de preparar los almuerzos para empezar a preparar la cena. Pronto será de noche y el tiempo no invita a andar por las calles de Tormentos Cristalinos. Todavía queda gente por las calles, pero son los que acaban de salir de sus jornadas laborales o aquellos que tienen asuntos más importantes que atender. ¡En cuanto se haga de noche habrá que ir pensando en la cena!

Aún así el que no ha comido en todo el día siente que su estómago le golpea repetidamente pues tiene demasiada hambre. Y ya no hay mucho que decir sobre el que no ha pegado ojo en todos esos días, pues ahora está a punto de desfallecer y apenas tiene fuerzas para moverse.

Además, es la hora de la arena de Kord. A aquéllos que se hubieran apuntado en el templo les había llegado su momento.

Noche del Día 10

La temperatura ha descendido considerablemente. El cielo está despejado, se pueden ver un montón de estrellas, pero el frío se siente en las mejillas como si fueran alfileres clavándose en ellas. Los pies no entran en calor por muy en movimiento que estén y las manos tres cuartas partes de lo mismo. 

Los árboles se agitan para desprenderse de todas las hojas que tienen. De vez en cuando un montón de tierra se levanta con alguna corriente e incluso os deja cegados por unos instantes. Las calles de la ciudad están vacías y la mayoría de sus habitantes se han cobijado bajo sus techos o en una posada cercana. Normalmente las calles suelen estar iluminadas con antorchas pero con esa ventolera no hay forma de que se mantengan todas prendidas. Lo cuál hace que la ciudad esté oscura y sea más peligrosa que cualquier otra noche. 

Las tabernas están sirviendo las cenas y las posadas preparando las habitaciones de sus huéspedes. 

Aún así el que no ha comido en todo el día siente que su estómago le golpea repetidamente pues tiene demasiada hambre. 

Los rumores dicen que Tormenos Cristalinos es muy peligrosa por la noche, que ocurren cosas que durante el día no. Por eso es mejor estar ya resguardado en una posada y en algún sitio caliente. Y más en una noche tan peligrosa como aquélla.

Además de que ya iba siendo hora de meterse en la cama. Mañana será un día muy largo.

Alba del Día 11

Comienza a amanecer, los primeros rayos del alba alumbran Tormentos Cristalinos. El cielo está completamente despejado y vuelve a lucir un hermoso sol en la ciudad. Todavía hace algo de frío, pero se empieza a sentir el aumento de las temperaturas. Aún así todavía corre algo de viento pero es bastante tímido y cada vez molesta menos.

Poco a poco, y a medida que el sol se vaya alzando, las temperaturas se irán elevando un poco más pero aún así lo mejor será abrigarse bien, pues tiene pinta de que va a seguir siendo una mañana fría.

Los posaderos despiertan a todos sus huéspedes, anunciándoles el rico desayuno que les tienen preparados. Es hora de vestirse, colocarse la armadura, preparar los conjuros (hacedme la lista solo para el director, en el mismo hilo) y bajar a desayunar.

Hay personajes que se han pasado la noche en vela, así que será buen momento para que descansen. Los demás pueden ir despertando si lo desean. (Aquellos que lleven más de un mes durmiendo "off rol" pueden despertar, el resto tendrán que esperar unas semanas más para justificar lo tarde que se fueron a la cama, son aquellos que tienen junto a la "Durmiendo" una fecha dd/mm/aa, hasta ese día no podrán despertar si quieres dormir en condiciones).

Aquellas personas que no hayan dormido en todo el día, o hayan dormido al raso tendrán junto a su nombre el estado: Fatigado. No podrá ni correr, ni cargar. Sufre -2 a la FUE y -2 a la DES. Cualquier acción que pueda causar fatiga le dejará exhausto.

Tormentos Cristalinos vuelve a abrir sus puertas, un nuevo día comienza. Esto implica que voy a abrir de nuevo un hilo de reclutamiento, y quien lo desee puede plantearme un nuevo concepto de personaja para la partida.