Partida Rol por web

Raelia volvió a mostrar los dientes al bardo, al mismo tiempo que devolvía la sonrisa a Coran. Está bien, pero espero que ése no venga con nosotros. Dijo señalando a Daélrick. Si quieres te ayudo a llevar sana y salva a esa Apestosa, pero cuando me ayudes con Mi Rata, prométeme que Ése no se implicará.

- No es mi amigo y apenas lo conozco.- Dije mirando de reojo al bardo.- Y más vale que no nos siga por su bien, o seré yo mismo quien le haga desear no haberlo hecho.

Mis palabras eran duras, pero era lo que el bardo se merecía. A mis ojos estaba anteponiendo una misión a la vida de una persona.

-Arriba hubiera creído que la druida te importaba como amiga, pero ya veo que me equivoqué...- sin decir más espero a que aquella mujer de pelo oscuro me ayude a subir a Lictea a la planta de arriba.

-Increíble... Vale, haced lo que queráis, al final resultará que sois tal para cual. Disfrutáos... -al parecer el que se autodenominaba paladín del bien o alguna tontería similar había decidido que la compañía de alguien que se apodaba a si misma "la oscura" era mejor que la suya y que no le importaba la vida de la druida. Desde luego hay gente suelta por el mundo con una tremenda falta de criterio. Pero de nada servía protestar, ya lo experimentarían ellos mismos.

Finalmente Raelia y Coran se marcharon de allí con el cuerpo de la druida apestosa. Les costó un poco subir la escalera de la trampilla pero entre los dos apenas tardaron unos escasos minutos.

Ahora tenías la libertad de seguir tú solo.

-Como suelen decir, más vale sólo que mal acompañado -dijo para si mismo el bardo, siempre conocedor de las palabras adecuadas, aunque fueran esta vez para consolarse a sí mismo.

Daélric respiró hondo y decidió que iba a jugarse la vida una vez más, tal vez de forma definitiva, pero fuera como fuera, no iba a dejar ese sótano sin ceder a su curiosidad o sería algo que no se perdonaría el resto de su vida. Así pues, se acercó con cuidado a la puerta secreta y examinó la zona y la cerradura con mucho cuidado, prestando especial atención a posibles trampas.

Decides investigar que era lo que había tras el tapiz de la sala. Parece que es un túnel que se retuerce durante más o menos una milla bajo la ciudad. El túnel tiene tres metros de ancho en su mayor parte y en algunos puntos se estrecha demasiado, aunque logras escurrirte para poder seguir avanzando. Finalmente llegas a un lugar del túnel muy estrecho , donde hay un sistema de rastrillos cerrados con llave.

También hay ocho barras de metal que bloquean el rastrillo a cualquier criatura que sea de un tamaño superior a Pequeño.

Los rastrillos están cerrados con llave mediante cerraduras sencillas.

Vale, ha habido suerte y no soy hombre muerto, no ha habido más sorpresitas, pero esto me supera, aquí hace falta un cerrajero o un revienta-cerraduras, pero no un bardo.

Llegado este punto está claro que no iba a poder seguir avanzando, así que Daélric volvió sobre sus pasos. Era un recorrido largo y dificultoso, especialmente en su estado, pero perseveró hasta llegar de nuevo al sótano. Allí se armó de valor y ascendió de regreso a la superficie. Necesitaba unas curas, un buen baño y una noche de descanso con urgencia... Y también tendría que informar de todo al capitán de la guardia, si es que el tabernero le permitía seguir con vida después de todo lo que habían hecho entre sus "compañeros" y él.

Blagh os lleva al interior de la taberna, abre una trampilla que deja ver unas escaleras y os pide que descendais. Cuando estais ya en la parte baja de la Pezuña en la Boca, os sonríe de oreja a oreja. ¿Bien, qué más detalles necesitais? Dijo dejando la trampilla abierta para escuchar por si entraba algún cliente.

Informacion sobre el objetivo. Profesion, familia, descripcion fisica, direccion... Tambien me gustaria saber por que lo quieres muerto. No es que me importe demasiado pero no querria verme atrapado en posteriores venganzas entre familias o algo asi.

Jukka va con ellos, y deja que el desconocido hable con el enano, solo se limita a asentir con la cabeza. se cruza de brazos esperando la respuesta del enano.

Pues a simple vista posee la altura y contextura fisica de un mediano promedio, aunque a pesar de llevar capa con capucha y usar las mangas de su ropa largas se ha de notar que algo esconde debajo de su atuendo, y mas aun al escuchar su voz que suena algo ronca, dado que es callado, normalmente da la apariencia de que esta calculando friamente todo su entorno.

Es un ladronzuelo que se dedica a ir envenenando la cerveza de los demás, concretamente la mía. Y no contento con eso se  ha dedicado a blasfemar sobre mi taberna y a decir cosas que no son ciertas. Además por su culpa, un semigigante que quiso ayudarme acabó en la cárcel y él ha salido ileso. Sé que la guardia lo tiene vigilado, así que sed precavidos porque el asesinato, como es lógico, no está permitido en la ciudad. Pero ya estoy harto de él y no aguanto más su presencia en esta ciudad. Si no lograis que se muera, al menos conseguid que lo detengan o que lo expulsen.

Y tiene que ser un forastero, porque hasta hace unos días no lo había visto nunca por aquí.

Después Blagh pareció escuchar ruido arriba. Daos prisa, creo que ha llegado alguien.

Jukka pone atención a sus palabras y luego se pone en camino a la salida de ahí. al salir del sótano mira a Filos y le hace señas para que ambos salgan del lugar. - vamos hay que hablar afuera, busquemos un lugar mas tranquilo - insta al muchacho de ojos verdes.

Filos asintio y siguio a su nuevo "socio". Cuando hubieron salido y buscado un lugar discreto, se pusieron al dia. 

-Bueno, como ya dije abajo soy Filos. Si vamos a trabajar juntos sera mejor que sepamos de que es capaz el otro. Soy un "filo del crepusculo", un guerrero que usa la magia ademas de la espada. Bueno, en mi caso, el mangual.

Que hay de ti?

Bueno amigo, has de saber que no conozco tantos trucos como tu, pero tengo mis mañas. Me llamo Jukka, y lo mio es buscar buenas recompensas -le dice de buen modo a su interlocutor mientras le extiende la mano.

Tenemos que averiguar mas sobre este Argot, alguien le debe estar pagando para sabotear a Blahg. Tenemos que conocerle, pero el no tiene que conocernos a nosotros. Sugiero que preguntes al semigigante que esta en la cárcel que es lo que sabe sobre Argot, pero se discreto y trata de ocultar tu identidad. - le dice bajando la voz - Yo voy a tratar de encontrar a nuestro objetivo, si le encuentras tu primero síguelo pero no le hables, solo tenemos que ver que lugares frecuenta. No puedo acompañarte a los cuarteles ya indague ahí y seria sospechoso inmediato si me ven dos veces por ahí. ¿Que te parece si nos vemos aquí en la pezuña al caer el sol? - luego guarda silencio y mira inquisitivamente a Filos - ¿alguna mejor idea? -

-Me parece bien, aunque lo de hablar no acaba de ser lo mio. Que paso cuando fuiste tu? Conseguiste hablar con el?