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Jornada 11 (Padmanabha)

Nos encontramos ante la última jornada del legendario torneo de sangre. El esperado evento tendrá lugar en las solitarias ruinas de Padmanabha, otrora centro cultural y religioso del reino. Sin embargo, actualmente lo único que queda de este sagrado lugar son una multitud de edificios colapsados y estatuas derribadas. De hecho, los restos de piedra tallada salpican el suelo por doquier, perjudicando el libre movimiento de los participantes sobre el tatami.

El gran cataclismo acabó con el esplendor de la Ciudad Prohibida cuando los dioses decidieron explicarnos el lugar que ocupamos en el universo. Y ahora el recinto abandonado de Padmanabha nos sirve de recordatorio al respecto. 

El combate se dirimirá en el templo maldito de los dragones, donde se encuentra la única efigie que logró sobrevivir indemne al castigo divino. Se trata de la gigantesca representación de un apacible dragón oriental, cuya vasta figura queda difuminada continuamente por la insistente bruma que en todo momento os acompaña esta mañana.

Por último, justo antes de saltar a la arena se os informa de los peligros que pueden entrañar los sortilegios aleatorios que los sacerdotes y magos de la organización han creado para vosotros.

¡Adelante, valientes! ¡Luchad como héroes y demostrad quienes sois sin importar vuestra posición en el ránking de sangre!

Un humano moreno, de aspecto taciturno, un colgante con la forma de una calavera que muerde un reloj de arena destaca sobre las mallas que forman su armadura

En sus manos una jabalina, en la que se ve perfectamente por su claro color una muesquita recien hecha y un gran escudo de madera sobre el que se repite el simbolo de la calavera y a su espalda se perfilan otra jabalinas. Por ultimo en su cinturon, un par de bolsas repletas de abrojos medio abiertas, listas para ser utilizadas, un rollo de pergamino del que cuelgan varias cintas rojas y negras y una imponente maza de armas

Y donde esta el publico?, que decepcion de lugar de combate

Un elfo portando un arco largo y un escudo de rodela. En su cinto, una espada larga. Viste ropas de color marrón oscuro que dejan ver una armadura de cuero reforzado por debajo.

Visto que el enemigo lleva un arco y me va a costar mucho acercarme a el me acerco solo un poco y me dejo caer al suelo, tapandome con el escudo para defenderme de sus mas que previsibles flechas

Disi se mueve y disapara una flecha que se pierde entre la niebla.

con cara de aburrimiento musito unas palabras arcanas

Disi se mueve y dispara un flecha que falla.

Por un momento las runas tratan de captar mi atencion, pero me repongo enseguida, y me levanto, lanzando la jabalina, que viaja a traves de la neblina, haciendo un corte en la cara y me rio mientras me vuelvo a dejar caer en el suelo

Acercate, o esto sera largo y doloroso para ti

Disi dispara otra flecha.

Me levanto y me acerco hacia el oponente mietras noto como la energia positiva sube desde las runas por mi cuerpo

gracias, me habia rozado las rodillas con el suelo

Comento al aire cuando lo siento y despues fijo mi mirada en el rival

Pues nada, ya me acerco yo, a ver si mas cerca tienes un poco mas de punteria

Disi dispara una flecha.

Avanzo un poco mas, haciendo un complicado gesto

El señor del tiempo te mostrara como tu destino en esta batalla es morir lenta y dolorosamente, huye ahora que puedes!

Exclamo señalandole directamente entre los ojos

Disi tiene miedo.

Un escalofrío recorre la espalda del elfo arquero que, presa de un temor sobrenatural, no puede evitar salir corriendo del tatami para alejarse del sacerdote. Una vez más, las oscuras artes de Artagh le han valido para llevarse el gato a agua.