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La Busqueda

Juntando tinta (Prologo)

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23/11/2015, 22:12
Nikeia Athanasis "Minerva"

Nikeia sonrió ante lo que sucedía. Feliciano había tenido una idea que ella no había considerado todavía aunque sin duda se le hubiera ocurrido. El favor de la gente podría ser usado por el Cardenal y así presionar en las negociaciones. Sí.. eso tiene sentido.. la verdad es que Feliciano está teniendo buenas ideas.. me sorprende.. me sorprende

- Tienes razón, sin duda esto no le ha venido bien para su poder... para su posición .- murmuró sonriendo a su acompañante. - El Cardenal podría aprovechar esto para llevar las negociaciones a su favor.. jeje ahora entiendo mejor la cara del Dogo - dijo con cierta malicia en sus palabras. 

Nikeia anduvo tras Feliciano para salir de aquel balcón y bajar a la plaza una vez la multitud se había dispersado un poco. No paraba de darle vueltas a lo sucedido.. cuantas cosas se mueven en la ciudad sin que una se de cuenta.. debería estar más atenta a los rumores.. 

- No tengas envidia Felix, seguro que tus trabajos son más interesantes que pasar una noche... bailando - dijo aunque claramente ella tenía en mente beber. Cuando pensó en la fiesta y en lo que bebería le entraron unas ganas terribles de beber. - Me alegra saber que no pasará nada, así podré estar tranquila con mi amiga - dijo y le guiñó un ojo con complicidad. 

Nikeia agradeció a los dueños de la casa el habérsela alquilado y bajó a la plaza con decisión.

- Bueno, Felix, nos vemos esta noche.. o mañana - le dijo y se acercó a él para darle un beso en la mejilla a modo de despedida.

Notas de juego

Voy a buscar a María.

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24/11/2015, 19:19
Narrador

El genovés sonrió contento ante las palabras de ella, recibiendo el beso pareciendo más halagado que otras veces. Si bien tuvieron que esperar un poco para que la gente dejara espacios libres para que ambos pudieran marcharse, la espera no fue tan grave teniendo una oportunidad para hablar con uno de los dueños y agradecerles. Finalmente les pidieron que hicieran un poco de propaganda con cualquier amigo que tuvieran y que no dudaran en volver si así lo deseaban.

Luego de aquella conversación el camino a la casa de Feliciano fue más sencillo aprovechando que la gente empezó a dispersarse. Pero como habían dejado claro a cada uno, ninguno de los dos se dirigiría a aquella casa por el momento ni al mismo lugar. Por lo que en un momento se despidieron el uno del otro.

Nikeia decidida a averiguar mas cosas de lo que había pasado y de paso lograr avanzar algo más de su venganza fue con uno de sus contactos. El contacto en este caso era una jovencita linda que no había tenido la suerte de contar con suficiente dinero para no dedicarse a lo que hacía para poder vivir con cierta decencia en la ciudad estado.

Al llegar al establecimiento donde la chica trabajaba fue recibida por un hombre de gran tamaño que la miro con cierto fastidio pero le dejo pasar dentro. Dentro parecía encontrarse algo más tranquilo que en otros días, probablemente porque algunos de los clientes se encontrarían en la Plaza. Por otro lado el ambiente aun desierto seguía siendo atrayente con su olor relajante y unas cuantas de las prostitutas parecieron ponerse a posar luego que la puerta se abriera. Entre ella se encontraba Maria que sonrió cuando se dio cuenta que se trataba de Nikeia.

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27/11/2015, 01:30
Nikeia Athanasis "Minerva"

Cuando se despidió de Feliciano no tardo mucho en perderse entre las calles de Venecia. Le gustaba poco la ciudad, no conseguía acostumbrarse a sus gentes ni a sus costumbres.. mucho menos a las inundaciones. Se dirigió con paso ligero al establecimiento donde trabajaba María, lo más parecido a una amiga que podía tener por aquellos lares.. el resto de personas que le rodeaban eran hombres. 

Una vez se hallaba delante del establecimiento Nikeia suspiró. No le gustaba tampoco frecuentar esos locales, ella prefería las tabernas. Se encogió de hombros y entró al local. No pudo evitar sonreir cuando las chicas se pusieron en pose cuando entró. No tardaron en volver a sus asuntos al darse cuenta de que era Nikeia y no un cliente. Nikeia normalmente solía acompañar a sus contactos a ese establecimiento cuando quería tenerles en un ambiente más relajado y de esa forma poder sacar toda la información posible. Además, la griega se dejaba bastante dinero en bebida y no generaba jaleo. 

Saludó con una mano sin que la sonrisa desapareciera de su rostro.- María - dijo y se acercó a su amiga.- Suponía que hoy no tendrías demasiado trabajo y pensé en venir a hablar contigo.- comentó distraída y miró a su alrededor para buscar una mesa en la que se pudieran sentar.- Pero si estás ocupada me doy media vuelta, no me gusta molestar, ya lo sabes.- dijo con respeto dando la oportunidad a su amiga de rechazar su compañía si es que las circunstancias así lo requerían.. pero confiaba en que no tuviera mucho que hacer. Se acercó a ella con complicidad.- No sabes lo que ha pasado en la plaza... - le dijo haciéndose la interesante.- O igual si.. no sé.. en estos lugares los hombres hablan con más facilidad.. tal vez alguien adelantara acontecimientos - le dijo y soltó una risa divertida, restándole importancia al asunto.. pero bajando el tono de voz.

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27/11/2015, 22:36
Maria

“Nikeia*” la saludo dándole un suave abrazo cuando se encontraba cerca. Seguía siendo la misma chica afectiva que habías conocido esa noche de tragos, a diferencia de otras mujeres de su profesión que solo lo fingían no notabas una máscara en los gestos amistosos de ella. “No. Llegaste en el momento justo amiga, según otras chicas dicen que la mayoría de clientes no llegaran hasta más a la noche luego que terminen de rezar.” Comento media sonrisa y una naturalidad que dejaba claro que era algo común entre los Venecianos.

La tomo de la mano para llevarla a la pequeña barra del establecimiento mientras escuchaba los susurros de ella. “Oh no, ojala nada malo.” Pareciendo genuinamente sorprendida. “No se no he escuchado nada, excepto que no podíamos ir para no ensuciáramos la plaza.” Dijo notándose molesta. “Yo no fui por los guardias, pero un par de chicas fueron disfrazadas para no ser echada.” Te informo mientras llegaban a la barra con el hombre lavando algunos tarros. “¿Que paso en la plaza? cuéntame por favor.” Dijo con ese tono de súplica que la hacía parecer mas inocente al menos para los hombres.

Notas de juego

*No se si le diste tu nombre real o tu sobrenombre. Cualquier cosa lo cambio.

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28/11/2015, 01:41
Nikeia Athanasis "Minerva"

Nikeia no dudó en corresponder a su abrazo con alegría al comprobar que su amiga tenía unos minutos para ella. María le caía mejor que el resto de mujeres que pudiera haber conocido por su sinceridad. Sabía que era una mujer honesta y ese tipo de mujeres generaban cierto respeto en Nikeia.. ya que ella estaba bastante lejos de ser alguien honesto en términos generales. Asintió a las palabras de la prostituta y la acompañó a la barra para pedir vino para dos. Si María no quería beber no había problema, se lo bebería ella todo. Rió con el comentario de que acudían después de rezar.- Nada mejor que limpiar el alma antes de cometer el pecado de la lujuria - dijo con cierta malicia. 

Cuando su amiga se interesó por el incidente de la plaza Nikeia abrió la boca simulando un suspiro largo, quería crear cierta expectación en su compañera. Las ganas de dramatizar lo sucedido se le fueron cuando comentó que no las habían dejado ir para no ensuciar la plaza. Negó ligeramente ofendida.- Eso es una hipocresía.. - dijo - ὑποκρίτης - repitió esta vez en su idioma.- Ya sabes en mi tierra así llamamos a los actores.. aquí le habéis dado un nuevo sentido que sin duda casi todos los que estaban en la plaza cumplían.- miró a su amiga con cierta indignación.Jesús decía que los pobres y los desfavorecidos se acercaran a él.. pero ahora es mejor dejarlos fuera de la plaza meditó  y suspiró tratando de apartar esos pensamientos de su mente. Las palabras de María captaron su atención.- Ah.. ¿si? ¿y de qué fueron disfrazadas? - preguntó con curiosidad. Nikeia estaba convencida que con un par de ropajes normales cualquier prostituta pasaría desapercibida.. aunque claro.. si están casi todos los clientes allí reunidos.. sería fácil que las reconocieran.. no pudo evitar sonreir con sus pensamientos.

- Pues.. al parecer varios encapuchados intentaron atentar contra la comitiva - dijo dejando atrás el dramatismo que había planeado en un inicio pero bajando considerablemente el tono de su voz.- Pero la guardia, atenta como si fueran Argo, pudo detenerlos en una demostración de eficacia.. me turba pensar que la mayoría de los allí presentes no se dieron cuenta.. parecían estar en éxtasis ante la visita de su eminencia el Cardenal.- comentó.

Notas de juego

¿Cuanto dinero tengo? XD

Sobre lo del apodo: 

Yo había pensado que sería más bien una firma y el apodo con el que la conocerían sus clientes. No creo que hubiera problema en que María y el médico Judío supieran su verdadero nombre, sin muchos detalles de su pasado, claro.

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28/11/2015, 04:31
Maria

Cuando tuvo su tarro de vino frente a ella, la joven prostituta miro detrás de ella, tratando de ser sutil aunque no era algo que se le podía escapar a Nikeia, en un rincón apartado estaba su proxeneta que asintió con su cabeza una vez. Sonriendo al recibir el permiso tomo el tarro para brindar. “Jajaja Esa tengo que contárselo a la chicas que seguro se mueren de risa.” Comento la joven riendo y brindando contigo.

Era claro que la joven era el mejor publico para estas dramatizaciones pareciendo tranquila aunque sus ojos y otros pequeños gestos mostraban unas ansias de que la mujer comenzara a contarlo que paso. Pero eso cambio cuando escucho marcar la hipocresía del comportamiento de los guardias. “No te preocupes Nikeia, me imagino que así es mejor seguro me habría aburrido.” Comento la joven tratando de relajar de su indignación a la griega, aunque se le veía cierta resignación en la chica como si aceptara que no fuera su lugar.

“Oh, fueron vestidas con ropa mas humilde y reservada. No como estoy yo.” Respondio dándose una mirada a su vestido que si bien era lindo y con toques que la diferenciaba de muchas de las prostitutas de la calle. Pero igual la delgada camisa tenía un cuello lo suficiente bajo para mostrar los encanto de la chica aun mas que los vestidos que ahora formaban parte de la moda en Italia y luego estaba la falda corta que tenía un objetivo igual que la camisa al dejar visible las hermosas piernas de la joven. “Igual según me contaron fueron con la misión de conquistar a alguien de la comitiva…” dijo con una sonrisa traviesa antes de bajar la voz. “Asi que luego te cuento si paso algo.” Le susurro en un tono de complicidad entre amigas.

“Oh dios mio.” Fue la primera respuesta de la joven que no dudo en hablar con su tono normal e interrumpiendo un poco el relato de la griega. “Eso es bueno y algo impresionante de la guardia. También es extraño que la mayoría no se dé cuenta pero no sé, aunque tal vez como dices la visita del Cardenal fue algo preciado para ellos. Hay gente muy creyente en esta ciudad…no todos pecan con nosotras y no todos se sienten bien con los que creen en otros dioses aqui.” Comento tratando de justificar a esas personas.

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29/11/2015, 17:00
Nikeia Athanasis "Minerva"

Nikeia brindó con su amiga y se deleitó con el vino. Trató de no beber deprisa aunque si de manera constante. Dirigió la mirada brevemente  hacia el proxeneta de María aunque no le hizo ningún gesto. No le gustaba ese hombre. Podía ser majo y podía ser un hombre honesto no lo creo.. siempre hay algo ilícito en la riqueza. A ella aquellos que ganaban dinero del esfuerzo y en concreto del cuerpo de los demás no le terminaban de caer en gracia. Cuando María intentó quitarle hierro al asunto de su veto en la plaza Nikeia suspiró. La copista no quería perder tiempo debatiendo con su amiga, ya había resultado en balde en otras ocasiones.. ahora se limitaba a confiar en que el estudio y el aprender a leer y escribir abrieran en un momento dado la mente de su amiga y sintiera inquietud por buscar su lugar en el mundo lejos de los estigmas y dogmas de la sociedad. Se limitó a sonreir ante las palabras de su amiga. La sonrisa sólo era interrumpida cuando Nikeia decidía dar otro trago a la copa de vino, que era con cierta frecuencia.

Asentía de vez en cuando sin interrumpir a su amiga y cayó en la cuenta de que si que sabía algo. Que iban a por alguien en concreto. Los asaltantes tenían un objetivo definido y Nikeia sabía eso gracias a las palabras de su amiga. Antes ha dicho que no había oído nada... ¿me estará mintiendo? .. ¿o simplemente no le dará importancia? Se preguntaba al darse cuenta de la pequeña contradicción de su amiga.  Para para... no..te has equivocado está hablando de sus amigas... las prostitutas.. ¿querían acercarse a alguien..? Eso es interesante... Parpadeó varias veces y miró la copa de vino. Sin duda había comenzado a afectarle levemente. Se tomó unos segundos para reordenar sus pensamientos. Vale.. no sabía nada del ataque.. eran sus amigas las que tenían en mente conquistar a alguien de la comitiva... sí.. Pensaba y no pudo evitar sentirse ligeramente culpable al haber pensado inmediatamente que María podía estar mintiéndole. 

- Sí.. sí.. no dudes en contarme.. una persona interesante tenía que ser si captó la atención de varias de tus amigas - dijo manteniendo un tono de voz bajo y demostrando su curiosidad por lo planteado por su amiga. Dejó la copa en la barra con la firme intención de no beber más pero rectificó un par de segundos después.

Cuando su amiga terminó  de hablar sobre lo acontecido en la plaza Nikeia negó varias veces sin dejar de sonreir.- Si no pecan con vosotras pecarán con otras.. o con otros .- le dijo haciendo un gesto con la mano.- Nadie está libre de pecado .- dijo con firmeza y ladeo la cabeza. Suspiró.- No creo que haya nadie que sienta de verdad incomodidad porque haya gente que crea en otros falsos dioses. Simplemente es temor a lo desconocido, la ignorancia, amiga mía, es muy atrevida. - suspiró recordando su tierra y su vida antes de llegar a la península Itálica. Tras haber dicho esas palabras a su amiga se rió.- No me lo tengas en cuenta. Ha sido una situación tensa en la plaza si hubiera habido una estampida... - cerró los ojos y negó con la cabeza.- No quiero ni imaginarme lo que hubiera pasado. Creo que.. creo que en cierta manera el Cardenal los salvó a todos.- dijo con misticismo.

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30/11/2015, 22:15
Maria

Rio con dulzura y afirmo un par de veces. “Habra que ver a quien traen, ojala sea como dices una persona interesante.” Comento la joven sonando un poco como un secuestro aunque no te imaginabas que ellas pudieran llegar a hacer algo asi. “Igual eso lo sabré mañana o esta noche.”

Tomando otro sorbo, mas pequeño que el de Nikeia. Vos sabias que estas mujeres practicaban para que los sorbos de ellas se vieran como si tomaran la igual cantidad que sus clientes, aunque para alguien mas observador se veía la diferencia. “Esperemos que si. Yo te lo conté antes pero me parecen raras la gente que no se dejan llevar al menos un poco por la lujuria.” Le recordó la joven luego de escuchar las palabras de la copista.

Pero mas tarde se quedo callada mirándola con fascinación escuchando con atención las palabras que decía ella. “Es curioso porque yo escuche a otros hombres decir lo contrario…” comento de nuevo tomando poco de su vino. “No ahora.” Se adelantó a decir para que no haya confusión. “Pero hace unos días me contaron que podría ser el hombre responsable de que Venecia se metiera en la guerra. Al que al parecer la mayoría no tiene mucho interés, pero sabes como son algunos. Obedeciendo lo que diga el Dogo.” Le dijo en un tono algo bajo pero sin salir del habitual.

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01/12/2015, 22:17
Nikeia Athanasis "Minerva"

- Me pasaré mañana por aquí de nuevo entonces. O si lo prefieres podemos encontrarnos cerca del puerto, hay unas mercancías que quiero mirar - dijo bajando algo el tono de voz pues tampoco quería pregonar sus planes y que pudiera oirlos cualquiera. - Las historias peculiares sabes que me apasionan - le dijo mostrando interés por el plan de sus amigas. Era un interés sincero, sin duda una maniobra rara por parte de aquellas mujeres pero que podía responder a motivos interesantes. 

- Bueno. Querer controlar nuestros actos  y pensamientos no es nada a reprochar .- le dijo sintiéndose ligeramente ofendida por el comentario de su amiga. Ella era una rara pues no se había sentido nunca demasiado nublada por las bajas pasiones. No les había conferido un lugar importante en sus prioridades.. yo no tengo esas debilidades.. meditó mientras bebía de nuevo de la copa de vino. 

- Vaya vaya... - dijo sin apartar la vista de su amiga.- Así que se avecinan tiempos de guerra.. aunque, viviendo en esta península parece que tarde o temprano será algo inevitable .- comentó distraída.- No entiendo qué ganan con la guerra.. no hay apenas beneficio en una campaña militar.. solo muerte.. sangre.. y traición .- dijo y tragó saliva recordando sus años pasados y todo lo que padeció.- La guerra saca lo peor de los hombres. ¿Hablaron de los motivos? - preguntó interesada aunque buscaba nombres cercanos al Dogo. Seguro que uno de esos belicistas era el noble que tramó en Bizancio. Seguro.. tiene que ser de ese grupo..

 

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02/12/2015, 00:36
Maria

Ante la sugerencia de ir al puerto a comprar algunas cosas sonrió ilusionada. “Me encantaría acompañarte a otro lugar y pasear por ahí mientras charlamos.” Comento interesada, sin referirse al lugar donde irían conservando la confidencialidad que ella había deseado. “Me alegra, les preguntare todos los detalles para contártelo todo.”

La joven pareció darse cuenta de que su comentario no había sido bien recibido por su amiga. “Tienes razón, lo siento no me exprese bien por supuesto que controlar nuestros actos y pensamientos está muy bien. Solo decía que algo que más natural que haya algo de pasión en la personas, que no.” Comento tratando de recomponer su error que había cometido, viéndose algo nerviosa y avergonzada.

De nuevo se la quedo escuchando asintiendo a todo lo que ella decía. “Hay unos cuantos pero parece que el principal es orgullo. Tanto el emperador como el papa, no quieren dejar que su autoridad sea cuestionada y es por eso que se han empezado a mover buscando aliados.” Le respondio a la mujer viéndose triste de fuera por una razón que hasta la joven sabia que era tonta, por lo menos. “Tambien están las rutas de comercio marinas y terrestres, al parecer el emperador quiere controlarlas y eso no gusta a los comerciantes. Por ultimo esta la cuestión que no lo consideran su líder aunque se supone que todo es su territorio.” Le fue contestando con las razones que se le aparecían por la cabeza en ese momento y por un momento tuviste un recuerdo de palabras dichas por Feliciano sobre la independencia de las Ciudades Estado.

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10/12/2015, 15:50
Nikeia Athanasis "Minerva"

- Perfecto. Nos veremos mañana entonces para ponernos al día y pasear.. - dijo Nikeia sin volver a mencionar donde volverían a verse. No era la primera vez que quedaban fuera del horario de trabajo de María y siempre quedaban en el mismo lugar. Cerca de uno de los puentes que llevan al puerto. Nikeia miró a su amiga con una sonrisa y con interés por la historia del hombre al que tenían que... ¿¡raptar!?

- Las pasiones.. son humanas.. no naturales. No están en la naturaleza, solo son propias de los humanos.- comentó Nikeia.- Entiendo lo que me quieres decir, no te preocupes, es sólo que yo.. ya soy algo mayor como para dejar que mis pasiones puedan llegar a dominar mis actos de alguna forma. Los jóvenes sí podéis hacerlo.. debéis hacerlo de hecho .- dijo dándose cuenta de que su amiga tenía muchos menos años que ella.- No te sientas culpable.. a veces habla la vieja que llevo dentro, veo la vida diferente ya.. desde este extremo .- le comenta volviendo a beber pausadamente.

Nikeia se perdió ligeramente entre las pugnas políticas que le comentaba su amiga. Había intentado seguir la actualidad política de los Estados de la península Itálica pero le había sido imposible. Demasiados nombres. Demasiados motivos. Demasiados intereses... demasiados estados Ella, una griega, estaba perdida en temas políticos. Si mis antepasados levantaran la cabeza.... ¡Cómo pueden ser tan retorcidos los latinos! 

- Entiendo.. - dijo sin entender muy bien pero no lo demostraría.- Intereses cruzados... siempre dificultan llegar a un acuerdo y a un entendimiento... los consensos no gustan porque para ello cada parte debe ceder y perder algo... y María.. estos hombres..  no cederán ni un ápice de su orgullo... no vaya a ser que se les caiga el pene por hacerlo .- dijo riéndose con su comentario.- Antes declaran la guerra - dijo negando. ¡Que me dejaran a mi el poder! Yo si que podría gobernar con decencia la ciudad. 

Y cuando esos pensamientos cruzaron por su cabeza decidió que era el momento de dejar de beber y apartó la jarra y el vaso de ella. 

- No tardaré mucho en irme a mi casa.- le comentó a su amiga y se volvió a reir recordando el comentario anterior. Perdona. Se que tu tiempo vale dinero, literalmente.. no quiero entretenerte mas..

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10/12/2015, 21:15
Maria

La joven se veía muy contenta con esta salida que había logrado junto Nikeia, en parte porque era una forma de salir de todo esto teniendo una amiga con un oficio muy diferente a la de sus otras amigas. Aunque se empezó a poner algo triste cuando escucho las siguientes palabras de la griega, incluso terminando viéndola con algo de pena.

Por lo que toco con delicadeza su brazo acariciándolo con ternura. “No digas esas cosas amiga, aun no has llegado a ese extremo. Yo te sigo viendo joven por la forma en que hablas, no como las viejas de aca que solo hablan a través de la escoba y además seguís siendo hermosa. Como esas famosas estatuas griegas que lei en un libro.” Le halago tratando de hacerla sentir mejor como podía, sonriéndole con una energía que era claro que Nikeia tenia dificultad de hacer por todo lo que había pasado.

De nuevo sonrio complacida cuando su amiga le confirmo que había explicado bien, pero achico la sonrisa mientras escuchaba las verdades que salían de la boca de la griega. “Son como nuestros arrogantes duelistas.” Afirmo en medio de la risa tomándose más de su vino. Seguramente Maria opinaria algo como Nikeia que el poder en manos de una mujer como ella podria hacerle bien a la ciudad, pero ella como antes comprendia que eso seria dificil o imposible en su sociedad.

Nego con su cabeza. “Lo vale en parte pero disfruto pasarlo contigo. Incluso te sugeriría un método para que podamos pasar mas tiempo…pero me da mucha vergüenza.” Dijo la joven esta vez si poniéndose algo colorada ante sus propias palabras. A Nikeia se le ocurrían varios métodos pero solo uno podía ser vergonzoso para la joven y ese era alquilar sus servicios para ella.

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23/01/2016, 01:11
Nikeia Athanasis "Minerva"

Los intentos de su amiga por alejar los pensamientos de la vejez de ella la enternecieron. Nikeia sonrió y asintió a las palabras que le decía María. No tardó en darse cuenta de que el tiempo se había echado encima y todavía tenía algo más que hacer antes de irse a dormir a esperar un nuevo día. 

- No te preocupes María, ya me iba, debo hacer una cosa antes de ir a casa y no quiero que se haga muy tarde - explicó la griega a su amiga.- Creo.. que se a lo que te refieres.. tal vez otro día sea una buena idea para hablar - dijo complacida. Al parecer María quería hablar con ella y apreciaba su compañía. Eso le gustaba pero había una parte, la parte de los rumores que se podían generar, que no terminaba de convencerle. Sin duda Nikeia intentaba pasar desapercibida, que solo las personas adecuadas la prestaran atención y lo que María proponía no iba en aquella dirección, sin embargo lo tendría en cuenta por si debían hablar algún otro día. 

- Recuerda que mañana continuaremos la charla... me debes una historia - dijo riendo.- A ver que han hecho con ese pobre hombre .- dijo con media sonrisa y se inclinó para abrazar a su amiga.- Cuídate, es un peligroso oficio el tuyo .- le dijo y se despidió con un gesto amable.

Notas de juego

Se me borró el post la última vez que intenté postear y he tenido unos días ocupadetes de entregar trabajos, malas costumbres las de agobiarse.... -.- pero ya ando por aqui libre

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23/01/2016, 15:17
Maria

Por unos segundos parecio la sonrisa de la joven decaer, pero como mujer de estos servicios volvió rápidamente a esa sonrisa alegre que encantara tanto a sus clientes. “Como te sea mas comodo Nikeia…” dijo levantándose de su asintio luego de tomar un poco mas del vino. “Te estare esperando para nuestra próxima charla o lección amiga. Siempre son un placer.” Le dijo dándole un guiño amistoso, porque no habia de otra ya sabías donde iban los justos de esta chica.

Ante la mención de la historia su sonrisa no solo se incremento sino que se hizo mas traviesa. “Por supuesto nunca me olvidaría de eso, hasta pediré que me den todos los detalles que puedan asi te cuento bien la historia.” Comento y dio una abrazo a su amiga y maestra. “Lo hare, gracias.” Fue su corta respuesta antes de terminar de saludarla y dejarla a sus maquinaciones a la copista.

Notas de juego

Que mal, pero me alegra que estes mejor y mas libre. Continuamos como vos quieras y si queres preguntarme algo lo hablamos en el off. Bienvenida de vuelta ;)

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05/02/2016, 02:22
Nikeia Athanasis "Minerva"

Nikeia se despidió de su amiga con cordialidad y cierto cariño. Aquella mujer le caía bien y Nikeia no quería causarle molestias de ningún tipo por lo que dejó algo de propina al camarero que les había servido las bebidas. Todavía estaba algo perjudicada por la bebida y sopesó varias ideas en la cabeza. La primera acercarse al mercado, la segunda irse a casa a descansar para lo que iba a venir después. 

Salió del local y se puso a andar por la calle. Una cosa está clara... no estoy más cerca de vengar a mi familia.. no estoy cerca.... Los pensamientos se arremolinaban en la cabeza de Nikeia mientras paseaba sin mucho rumbo. Tras varios minutos de indecisión decidió pararse en seco. Miró a su alrededor y buscó la dirección al puerto. Hablaría con Tiberio o Piero, tenía que buscarles, quería hablar con ellos. La curiosidad surgida por las conversaciones tanto con María como con Feliciano requería ser saciada y Nikeia estaba dispuesta a buscar a sus contactos. Tenía que saber si algo se hablaba del Dogo.. de todo lo que parecía estar por acaecer. Esto parece una paz armada... y yo he tenido ya muchas guerras. Suspiró y asintió. Todo  su pasado le pesaba como una losa en su espalda. Se puso rumbo al puerto para buscar a los mercaderes, siempre atenta, siempre alerta.

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05/02/2016, 21:32
Narrador

Las calles de Venecia seguían muy vacías comparándolo con los días más habituales donde las góndolas en los canales eran un mejor medio para moverse por la ciudad. Pero aun siendo afectada por la llegada del Cardenal, las calles solo eran habitadas por algunos decoradores que parecían realizar los decorados para mas a la noche, algunos guardias en puntos estratégicos pareciendo rechazar a todos los que paseaban por las calles a esa hora y finalmente estaba la gente que por razones propias no se encontraba con todo el resto, probablemente una gran cantidad de ellos era por su fe o estando en Venecia por un negocio.

Ninguno de los pocos habitantes de esas calles impidió su progreso hasta llegar al gran puerto de Venecia. No había duda al verlo que este era una de las partes importantes de esta ciudad, llena de una enorme cantidad de barcos con distintas bandera de distintas nacionalidades incluso de musulmanes. Ademas este lugar permanecía ocupado, lo que te hacia recordar ciertas palabras de Feliciano sobre los hábitos de los comerciantes.

El lugar donde Piero Alghieri hacia su trabajo debía estar muy cerca, solo debía atravesar por los puertos donde el olor se mezclaba con la gran cantidad de mercaderías que pasaban por ahí, pero a diferencia de otros puertos no había una sensación de mal olor por mucha gente junta.

Finalmente cuando llego a casilla donde trabajaba Tiberio, con el mercader esperando en la entrada.

Notas de juego

Iré buscando una imagen pero si quieres dar una sugerencia en su aspecto soy todo oídos. ;)

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21/02/2016, 01:30
Nikeia Athanasis "Minerva"

El camino hacia el puerto fue llevadero. Mucho mejor que lo que esperaba. Sin duda la gente estaba ocupada con asuntos que a Nikeia le parecían banales y poco importantes. Recibir al Cardenal.. todavía pensarán que viene a verles a ellos y no a poner sus manos en los temas políticos. Nikeia no era ajena a aquellos que pensaban que la fe no debía interponerse en asuntos políticos pero la evidencia le mostraba que eran los menos.

Cuando llegó al puerto respiró con profundidad. Ese olor casi era más placentero que el de la propia ciudad. El mar.. el mar siempre traía buenas noticias para Nikeia. Paseó con discreción hasta que localizó con la mirada las naves de Tiberio. Sonrío para si misma y se acercó a hablar con el mercader. Primero esperó que el hombre no estuviera ocupado y para ello aguardó con paciencia hasta que le vio sin tarea alguna. Entonces se acercó a él. 

- Tiberius - le  llamó a sabiendas de que la reconocería inmediatamente. Echó un vistazo a su alrededor para cerciorarse de que podía hablar con calma y tranquilidad lejos de oídos indiscretos.- Aprovecho que la ciudad parece dormitar en estos momentos para pasear por aquí.. veo que los mercaderes no descansáis.. aquí parece que la ciudad no duerme - dijo sonriendo  y se acercó al comerciante para presentarle sus saludos. La heroica ciudad dormía la siesta.. sería un buen comienzo para una historia.. seguro..* meditaba Nikeia mientras no podía evitar sonreir.

- Tiradas (1)

Notas de juego

** XDD

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21/02/2016, 19:26
Tiberio Dimartino

El hombre no se encontraba ocupado mas bien parecía estar mirando los barcos que entraban y salían del puerto desde el banco donde se encontraba sentado. Su atención salio de las naves al escuchar su nombre volviéndose a la mujer con una sonrisa que crecia a la par que la terminaba de reconocer.

“Nunca, ni en la noche.” Respondio con una sonrisa picara mientras le hacia un gesto para sentarse junto a èl en el banco de madera. “Los mercaderes no tenemos el tiempo para lo espiritual lamentablemente…” dijo con una falsa tristeza. “Debemos trabajar para alimentar a la familia y para ayudar a crecer a la ciudad. Dios nos entiende seguramente…el Dogo tambien. Comento con complicidad susurrando lo último y dante un guiño.

“Nikeia, es un placer que vinieras a visitarme.” Dijo finalmente con algo más de seriedad pero sin salirse de su tono amistoso. “En especial porque cada día te ves más linda.” Agrego con un tono casi romántico, pero la griega sabia mejor que ese tono lo empezó a usar luego de conseguir los papeles que le permitieron conseguir muchos negocios lucrativos.  “¿Hay algo en que pueda ayudarla?” pregunto distrayéndose un poco con los barcos, antes de volver.

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21/02/2016, 20:24
Nikeia Athanasis "Minerva"

- Pasear por el puerto lejos... de la hipocresía de la ciudad siempre es agradable .- dijo pues no quería de momento hacer ver que quería algo del mercader. Sonrió ante las palabras de Tiberio y asintió con complicidad.- En efecto, nuestro Dogo conoce y perdona. Sabe que hay oficios que no descansan, como el vuestro. - dijo Nikeia sonriendo de igual manera al mercader.

- ¡Ay Tiberio! Tus halagos me sonrojan. Aunque mucho me temo que lo único que adquiero con la edad son arrugas y la belleza en vez de venir, se me escapa de las manos .- dijo consciente de que si en otro tiempo fue bella, ahora sólo quedaba de aquello el recuerdo. Pero le gustaban los halagos de Tiberio y para muestra de ello sonríe a su compañero. - ¿Cómo van las cosas por el puerto? He visto.. miradas largas entre los nobles.. y bien se que si algo se cuece, primero se nota  en la mar.- dijo desechando la idea de mantener sus intenciones ocultas. Quería saber cómo percibía la situación el mercader. - No me malinterpretéis, no quiero ser pájaro de mal agüero, pero cuando se tienen negocios como.. los nuestros, conviene estar siempre alerta.

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21/02/2016, 22:27
Tiberio Dimartino

Afirmo levantándose de su asiento tal vez entendiendo que prefería un paseo en vez de quedarse sentada. “Sin duda, por eso prefiero no internarme más de la cuenta.” Comento dándole la razón con sus palabras.

“Eres muy dura contigo misma mujer.” Fue su única respuesta antes los comentarios de ella sobre su pérdida de belleza, teniendo la última de la palabra como muchos de los italianos. Le ofreció el brazo por si deseaba ir a pasear por el puerto. El cual no estaba vacío como las calles algo que era de esperarse por el hecho que los mercaderes y marineros seguían con su trabajo sin ver el dia como uno de festejos u ocio, por eso mismo habia gente de distintas edades y aspectos trabajando por el puerto.

Rio un poco divertido con tus frases. “No sé qué esperas que te cuente, en el mar ocurre lo de siempre, nobles partiendo desde acá a tus tierras para asentarse y piratas ruines arruinando muchas de nuestras rutas de comercio. Lo único nuevo es que ha venido mucha gente por el puerto, muchos de ellos los veo como consecuencia de la llegada del Cardenal.” Le respondió con simpleza no pareciendo dar muchas importancia a las noticias o al menos no dejándolo ver. “Igual las cosas van bien el puerto…todo tranquilo con mas guardias puesto en este.” Dijo pareciendo morderse antes de seguir hablando como si se callara a si mismo.

Se veía lo que èl decía con un par de grupos medianos de guardias cerca de varios barcos grandes. Algo que bien no debería ser mas que una molestia para los mercaderes pero para uno con algo que ocultar podría llegar a ser mas fatal.