Partida Rol por web

-No os preocupéis que lo entiendo. Si yo tuviera la suerte de tener una familia como la vuestra, procuraría protegerla lo mejor posible – Respondió con una sonrisa para darle fuerzas a la muchacha y para que no se sintiera mal en absoluto por no querer hablar de ciertos temas con ella – Y yo también estoy segura de que no atacarían a alguien sin razón. He visto a vuestro hermano Dante en acción y a pesar de ser un engreído prepotente, es un hombre de principios – Le comentó, recordando la reacción del Giovanni al darse cuenta de que los agresores que había matado en la alcoba de Gianna no eran más que chiquillos.

Tras examinar la cruz con cuidado y cerciorarse de que no tenía nada de especial, Leonor asintió ante las palabras de la noble – Estáis en lo cierto. Al menos creo que podemos estar tranquilas y descartar la posibilidad de que alguien quiera haceros daño tratando de conseguir algo que tenéis – Afirmó, tomándola de las manos y apretando ligeramente de forma alentadora. - ¿Qué haréis al final? ¿Os iréis a roma o preferís quedaros en Venecia? ¿Hay algo que deseéis que haga por vos? Sabed que podéis contad conmigo para lo que necesitéis – Le preguntó con dulzura, mostrando su verdadera naturaleza ante la joven.

La joven Giovanni sonrio y luego se rio un poco tapando su boca educadamente luego de escuchar el comentario sobre Dante. “Si, es un buen hombre mi hermano.” Afirmo tras parar su risa. “Igual seguramente podras cambiar su forma de ser con el tiempo.” Comento tomando la mano de ella con cariño y algo de confianza. “Si. Tu relación con él le hara mucho bien.” Comento dejándole ver que parecía pensar que tenías alguna clase de relación con èl por alguna razon.

Ante la pregunta directa se quedo pensando. “Me lo tendre que pensar Leonor, no eres la única que quiere que me quede pero no se hay cosas que no he podido contarte y no se si pueda contarte sin ponerme muy colorada.” Dijo y efectivamente se puso colorada. “No hay nada que necesite, solo cuídate y visítanos cuando puedas. Me alegro haberte conocido.”

Leonor miró a Celia con sorpresa ante las palabras que le dedicó sobre dante, al tiempo que abría los ojos y se sonrojaba – No… no os confundáis. Entre vuestro hermano y yo no hay nada. La única relación que tengo con él está basada insultos, pero nada más. – Le aclaró sintiendo que quizá era mucho mejor que no dijera nada más, por temor a que reafirmara sus pensamientos sobre aquella absurda idea.

Cuando Celia le dijo que se lo pensaría, la dama de cabellos azabache sonrió ampliamente con un encantador brillo en la mirada mientras le respondía – Tomaos todo el tiempo que necesitéis. Yo estaré ahí para vos cuando queráis y vuestro secreto estará a salvo conmigo al igual que el mío estará a buen recaudo con vos. Por supuesto que os visitaré… todas las veces que me sea posible. Soy muy afortunada por haberos conocido. – Afirmó con sinceridad, mientras le daba un caluroso beso en la mejilla…

Definitivamente aquella hermosa mujer tenía algo que la hacía muy especial.

La charla de ambas jóvenes no salió demasiado de una conversación común entre dos chicas, volviéndose menos seria mientras ambas se relajaban y parecía crecer cierto vínculo entre ellas mientras Celia se volvía más abierta con ella aunque claro que mantenía secretos que solo eran de ella y las personas con las compartió ese momento.

Cuando Leonor tuvo que marcharse la joven la acompaño de nuevo hacia fuera dándole un abrazo de despedida para mostrar su apertura. Aunque el abrazo no termino de ser lo agradable que prometía ya que la joven pelirroja sintió extrañamente como el cuadro familiar por el que pasaban parecía expiarlas a ambas de alguna forma algo siniestra.

Sin embargo al final la despedida fue buena y pareció que el lazo que Leonor tenía con esa familia empezaba a volverse más importante.