Partida Rol por web

La Busqueda

Noche de tragos y risas (Cap 2.4)

Cargando editor
19/07/2016, 00:44
Leonor Amore

La promesa de una conversación privada sin que a Piero pudiera molestarle la sorprendió a la vez que la intrigó bastante. El abrazo de Camila también la pilló con la guardia baja, puesto que ella consideraba que el hecho de que el príncipe hubiera aceptado la petición de Konrad para conservarla como su Ghoul, significaba que su destino estaba decidido. No obstante, ahora que se concentraba en recordar lo sucedido en la mansión del Dogo con detenimiento, Guilelmo le había susurrado literalmente al oído “no te preocupes yo te protegeré de ahora en mas y si es necesario te quitare de aquel ser.” ¿Qué había querido decir con aquello? ¿Realmente deseaba ayudarla, o sus palabras tenían un significado diferente? Ella no se consideraba merecedora de tales halagos, entonces… ¿Por qué?

Pero entonces, la aclaración de la Tabernera con respecto a la forma de expresarse de Piero, hicieron que volviera al presente, donde comenzaba a sentirse cada vez más segura en su compañía – Camila yo… te quiero. Todo este tiempo te he echado de menos y… me alejé porque no conseguía quitarme de la cabeza Piero. Incluso le di una bofetada por haberme besado – Afirmó en voz alta sin importar que el interpelado se encontrara en la habitación, algo colorada por lo insignificante que parecía ahora y por todos los problemas que su decisión le había ocasionado – Ojalá no me hubiera ido nunca… - Respondió temiendo que si se quedaba esta noche, Konrad seguramente se enfadaría con ella.

Cargando editor
20/07/2016, 07:30
Camila

“Yo también te quiero Leonor.” Comenzó acariciándole su mejilla y acercándose con su rostro al de ella. Riendo un poco ante la mención de la bofetada a pasar que ese habia sido el momento que se habían separado. “No es raro que lo tengas en tu mente es alguien muy especial y no me siento nada molesta contigo por ello sino que te comprendo. Comprendo a tu amor por nuestro Piero.” Afirmo también en voz alta sin dudar en cada una de sus palabras mientras la miraba casi ilusionada.

Nego con la cabeza. “Te sirvió para ver lo que perdiste, asi que tal vez no fue del todo malo.” Comento seguramente buscando un posible lado bueno en ese evento. “¿Que deseas hacer ahora? Se sincera.” Pregunto mientras le señalaba con la cabeza hacia Piero para que entendiera que se refería a lo que quería de Piero.

Cargando editor
21/07/2016, 00:08
Leonor Amore

Leonor cerró los ojos dulcemente para aceptar la caricia de la hermosa tabernera, para volver a abrirlos y escuchar sus bonitas palabras.

No obstante, ella sabía que todo esto no estaba del todo bien, por lo que su mente se esforzaba por buscar explicaciones a las acciones tanto del vampiro como de Camila, los cuales seguramente tendrían algún tipo de razón oculta detrás de su bondad, tan solo que ella no terminaba de verla.

-Yo desearía quedarme esta noche, pero no podrá ser. No quiero enfadar a mi Dómitor y sé que puede ser malo si lo hago. – Contestó, esperando que fuera suficiente para calmar su conciencia y tener más tiempo para encontrar la razón de su desasosiego.

Cargando editor
21/07/2016, 05:52
Camila

Camila negó con la cabeza viéndose decepcionada por la respuesta de Leonor. Levantándose más derecha la tomo de la mano esperando no recibir demasiada resistencia por parte de la joven mientras la llevaba hacia su escritorio.

“Eso no se escucha muy agradable Leonor…” dijo mientras la dejaba frente a la mesa soltándola. “Sin embargo ya viste que no pudo detenerte y Piero tampoco puede, aunque yo no deseo que te vayas.” Le comentaba la tabernera que empezó a servir lo que parecía vino en una copa que tenía en su mesa. Suspirando le dio un sorbo lento a su trago.

Tras un momento de silencio donde Piero continuaba observando afuera como si buscara algo en la parte de la ciudad que podía ver desde la ventana. “Sabes la noche recién empieza, es necesario que vuelvas ahora mismo con tu supuesto Domitor. No quiero que te pase nada malo por desobedecerle pero te necesito aquí conmigo Leonor.” Le confeso con cierta tristeza mirando a Piero mientras volvía beber y le ofreció la copa a Leonor con aun liquido en esta. "De cualquier forma puedes irte, pero te pediria que te despidas de Piero."

Cargando editor
22/07/2016, 02:02
Leonor Amore

La joven aceptó la mano de Camila poco convencida de ello puesto que intuía que no la dejaría irse tan fácilmente y se dirigió lentamente hacia el escritorio, visiblemente más cerca de Piero de lo que le gustaría. Aquel hombre ejercía una extraña atracción en ella, por lo que le sería mucho más complicado salir de la sala cuanto más próximo estuviera.

El hecho de escuchar las palabras “supuesto dómitor” no le agradaron a Leonor por alguna razón extraña. A pesar de lo que Konrad le había hecho, no le gustaba nada que hablaran mal de él aunque fuera mínimamente. No obstante, cuando la hermosa mujer le dijo que la necesitaba, algo en ella se quebró un poco, al tiempo que tuvo que hacer esfuerzos sobrehumanos para no dejarlo todo y acabar abrazándola con ternura.

-De verdad que debo irme, pero volveré a visitaros… Lo prometo – Respondió tras negar con la cabeza para indicarle que no le apetecía tomar un trago, y evitar alargar la situación más de lo necesario.

Acto seguido se giró hacia donde se encontraba Piero y, tras tragar saliva, le dijo con un hilillo de voz – Ha sido un placer volver a veros, Piero. Gracias por vuestras respuestas y por abrir mi mente aunque sea un poco.

Cargando editor
22/07/2016, 05:48
Piero

La hermosa tabernera sonrio, una sonrisa triste ante la clara despedida de Leonor, asintiendo resignada antes de tomarte toda su copa sola. Sin embargo cuando la joven se voltio a ver a Piero este habia dejado de ver por la ventana para verla a ella, tal sintiendo que pronto se iria a menos que alguien hiciera algo.

“Aun no abri del todo tu mente…acaso no te interesa saber lo que se esconde ahí?” pregunto con una sonrisa enigmática mientras le hacia un gesto con la mano para que viniera hacia él. Si bien su instinto le decia que tenia que irse una fuerza invisible la obligaba a ir aunque fuera lentamente. “Dejame mostrarte algo.”

Piero volvió a mirar hacia la ventana pero esta vez dejando un lugar para que ella observara junto a él. “Mira para afuera, mira el cielo no te parece hermoso? Acaso no se te ocurre que las estrellas nos dan un mensaje cada vez que las vemos?” pregunto con un tono soñador buscando con su mano la mano de ella o el brazo si la pelirroja se rehusaba a lo primero. “Leonor te dije que podrias irte cuando quisieras, pero no te dije que podrias irte por obligación.” Le comento volviendo al mismo punto que Camila pero desde otro angulo.

Cargando editor
29/07/2016, 21:16
Leonor Amore

Sabía que estaba caminado por terreno pantanoso cuando la tabernera le sonrió con tristeza. A Leonor le costaba mucho trabajo decirle que no y estaba segura de que ella lo sabía. No obstante fue la mirada de Piero la que más preocupó a la joven huérfana, ya que a duras penas podía resistir a ese rostro que la miraba con ojos claros y promesas escondidas.

Y así fue. De nuevo una promesa. Un curioso regalo que sonaba tan tentador como terrible mientras él le indicaba que se acercara para contemplar por la ventana y sus pies le obedecían sin que pudiera hacer nada para impedirlo.

-Sí que es hermoso… aunque muchas veces les he preguntado a las estrellas, que lo observan todo desde lejos, por el paradero de mi hermano y nunca me han contestado. Desconozco que mensaje será, pero contemplarlas me llena de alegría por su belleza y de una profunda tristeza – Respondió aceptando su mano algo temblorosa por la proximidad del hombre que la atraía con una fuerza extraña a la vez que prohibida.

-Sabéis que he de irme… Mi vida ya no me pertenece… por favor no lo hagáis más difícil. Yo… yo… - Y entonces le abrazó, hundiendo su cabecita en el pecho del vampiro mientras unas cristalinas y silenciosas lágrimas se resbalaban por sus mejillas de manera pausada y sentida, como si quisieran emular el brillo de aquellos astros que les contemplaban.

Cargando editor
01/08/2016, 05:05
Piero

“Tal vez lo hicieron y vos no pudiste escucharles…has pensado en ello?” preguntó el ser que no duda en acercarse a ella y mover su rostro junto al de ella pero mirando en la dirección que ella miraba como buscando sus estrellas. “Muchas veces hacen lo mismo para mi también y para otras personas, incluso me llenan de muchos mas sentimientos distintos que no podría enumerarte completamente.” Comentaba con un tono dulce, no siendo exagerado sino dejando ver que el hombre era mas sensible que otros.

Guardo silencio mientras la abrazaba dejando que ese gesto hablara por sí mismo y expresara el cariño que tenía por ella. “Yo no hago nada para dificultarte la vida, no es mi deseo. Pero entiendo en cierta forma que lo veas de esa forma Leonor…” le susurro al oído luego de que pasaran unos minutos abrazándose. “No tienes que irte, no te preocupes que yo lo arreglare todo Konrad no te hara nada te lo prometo.” Decia el dueño de esa taberna mientras se acomodaba para verla de frente y unirse a ella en un beso extrañamente aliviador.

Cargando editor
04/08/2016, 23:32
Leonor Amore

Leonor escuchó las palabras de Piero que sonaban casi como susurros bajo la luz de las relucientes estrellas. Jamás había visto a un hombre como él, pareciendo estar tocado por las mismas musas, las cuales pincelaban su existencia.

Su abrazo fue cálido y reconfortante, sin llegar a ser posesivo y acaparador, mientras un ligero temblor recorría el cuerpecito de la joven pelirroja a la par que su corazón latía cada vez con más rapidez ante el dulce contacto de aquel apuesto y tentador vampiro.

-No… no es necesario. Yo… prefiero que no sepa que os he visto… No quiero crearos problemas. Me… quedaré un poquito. Él no notará mi ausencia. – dijo justo antes de que él la besara, haciendo que esos labios consiguieran apaciguar sus preocupaciones, hasta sumirla en una capa de felicidad.

Cargando editor
07/08/2016, 02:55
Piero

Una pequeña sonrisa se vio en su rostro ante la promesa de secretismo por parte de ella. “Como desees…” fueron sus últimas palabras antes que el beso aterrizara en los carnosos labios de ella. Pronto se sintió completamente contenida por un abrazo fuerte pero que difícilmente le producía un daño.

La joven no sabía si era la sangre que tenia de ese hombre o que el parecía conocerla mucho mejor que otros, que los toques que siguieron se sintieron tan diferentes a los de Konrad. Mas placenteros y pareciendo planeados para hacerla sentir como si fuera unica, aunque ella sabia mejor que o lo era. Si bien sentía culpa en compararlos pero no podía evitarse que en su mente apareciera no solo el norteño pero ahora el príncipe que tampoco se habia expreado con ella sin embargo no podia evitar sentir una frialdad de su parte.

Tras un buen rato donde la falta de la presencia de Camila fue recordada por ella mucho más tarde. Cuando toda la actividad entre ambos amantes fue calmándose y ella pudo examinar aquella habitación que pertenecía a la tabernera. También se dio cuenta que había pasado más de un poco tiempo con este adonis que ahora se encontraba recostado en la cama admirándola.

Cargando editor
14/08/2016, 18:25
Leonor Amore

La joven huérfana se sintió totalmente aliviada cuando Piero la abrazó. Era como si aquel hombre la conociera más que ella misma, y sentir sus manos sobre su tembloroso cuerpo fue más dulce que la misma miel.

No supo cuánto tiempo pasó mientras que los suspiros de la damita se dejaban oír por la habitación de la hermosa Camila. Tampoco supo cuando la rubia tabernera se escabulló sigilosamente de la sala, pero la pasión que sintió mientras Piero abría las puertas de su feminidad fue tan abrumadora, que sus pensamientos se vieron eclipsados por los hábiles dedos y los cálidos labios que recorrieron su cuerpo con la maestría de un experto, y que consiguieron que el tiempo se detuviera con cada caricia y con cada beso que le regalaba.

Después, mientras su delicado cuerpo desnudo era iluminado por el resplandor de la trémula vela, Leonor permaneció embelesada contemplando la sonrisa del Vampiro que no había dejado de contemplarla. La jovencita había permanecido allí mucho más tiempo del dictaminado por la prudencia, pero ya no había nada que pudiera hacer al respecto, por lo que, tras apartar tímidamente un mechón rebelde de sus cabellos, le susurró con una dulzura extrema.

- No sé cómo lo hacéis, que siempre conseguís nublar mi juicio de la forma más dulce ¿Qué pensáis hacer conmigo, mi amor? - le preguntó, sin tener muy claro por qué se había dirigido a él de aquella forma tan personal.

Cargando editor
15/08/2016, 20:21
Piero

El vampiro parecio estar algo perdido ante la pregunta posiblemente mirándola no solo en su rostro sino en el resto de su cuerpo, que sin amenaza alguna se presentaba frene a él por parte de la joven huérfana. De igual modo él correspondía a ella encontrándose desnudo ante ella, dándole la posibilidad de con un simple vistazo ella pudiera completar ese retrato que tenia del hombre en su cabeza.

“La mente es algo complicada…aun cuando deseo abrir tu cabeza y cuerpo comprendo bien porque sientes que nublo tu juicio. Aun falta mucho para que comprendas lo que hago como algo tan natural que no debería contar con ninguna resistencia ya sea de tu cuerpo…como de tu mente.” Dijo con una seriedad mas allá de la necesaria, pero siendo algo mitigada por ese dulce tono en el que se expresó. “Pienso en muchas cosas para hacer contigo, muchas de esas cosas son igual de dulces que lo que hicimos hace poco amor mio. Pero pienso en cómo podría alargar tu estadía conmigo y las chicas.” Respondio ayudándola con su cabello rebelde, sonriendo más.

La mano de él paso por el rostro de ella, incluso además de peinarle el pelo paso uno de sus dedos suavemente por su cejas. Quedandose un poco tapando su vista por algunos momentos. “¿Cómo me ves ahora?” pregunto apartando su mano de ella.

Cargando editor
21/08/2016, 16:29
Leonor Amore

La jovencita continuaba embelesada contemplando el hermoso cuerpo de su amante. Por alguna razón no se sentía incómoda o avergonzada, desnuda como estaba en su presencia, ni tampoco le daba reparo admirar su perfecta anatomía. Simplemente se dedicó a permanecer acurrucada junto a él, permitiendo que la noche les regalará la magia que se respiraba en aquella acogedora habitación.

- ¿Por qué decís que es necesario abrir mi mente? Cuando lo mencionasteis antes no supe muy bien a qué os referisteis. ¿acaso pensáis que hay algo de mí misma que desconozco? - preguntó intrigada aunque algo asustada por lo que pudiera averiguar si Piero deseaba profundizar un poquito más en su interior.

Cuando el Vampiro volvió a acariciarla, ella se estremeció ligeramente pero esta vez se dejó hacer, permitiéndole unas confianzas que no pensaba que lograría con nadie y ruborizándose como una tonta enamorada con cada linda palabra que ese hombre maravilloso le regalaba.

-aún no lo sé - respondo al fin ante su pregunta de cómo el veía. - pero tan solo os digo que me siento muy segura con vos - finalizó dejando que el la acariciara cuanto deseara.

Cargando editor
21/08/2016, 17:32
Piero

“Lo digo porque es lo que creo. Porque deseo que cualquier cosa que nuble tu mente desaparezca y tu curiosidad que tanto brilla en ti sea saciada.” Respondió el vampiro que continuaba mirándola entera examinando todo ángulo de ella como si nunca lo habría hecho. “Es muy posible que haya algo en ti que desconoces, lo siento ahora que estoy contigo cuando te miro.” Comento alzando la mirada sonriendo con cariño a ella.

Antes las reacciones por sus caricias el vampiro continuo pasando por su pelo un buen tiempo, antes de dejarse arrastrar al cuerpo de ella. Pasaba delicadamente por su brazo, cambiándose al costado de ella y luego al vientre posándose en el centro de ella. Se notaba que él disfrutaba ese toque tanto como ella al menos parecía que disfrutaría por horas vagando su mano por el cuerpo de ella, algo que se sentía bien a pesar de la novedad que era para ella.

La respuesta de ella agrando su sonrisa, le hizo acercarse aún más a ella hasta que unos pocos centímetros los apartaban. “Eso está bien y te lo agradezco. Ahora relájate…” le pidio mientras sus ojos se clavaban en ella.

Cargando editor
21/08/2016, 18:10
Narrador

Pronto los ojos de él cambiaron se volvieron más oscuros y su forma cambio por la de otro hombre diferente a él. Más parecido a su hermano pero pronto se dio cuenta que no estaba más en una cama si no en un extraño pasillo, que era oscuro en ambos finales. Ese hombre se veía como un gigante junto a otro hombre con rasgos similares que te hacía pensar que eran familiares.

Ambos la miraban a ella sonriéndole con dulzura aunque las palabras de ellos se sentían más desalentadoras a pesar que por alguna razón no las entendía. Sabía que hablaban de ella y no muy bien pero no comprendía bien lo que decían esos hombres, aunque acercándote más a ellos veías que el hombre con los ojos más oscuros no los tenía así por su pigmentación sino porque le faltaba los ojos.

Esa revelación la detuvo un poco pero le hizo darse cuenta que empezaba a comprender más de lo que decían. Su nombre apareció en sus labios juntos con las de otra mujer y una bruja.

Cargando editor
22/08/2016, 19:46
Leonor Amore

-Entonces… deseo que sacies mi curiosidad – Respondió la jovencita, aunque aun poco convencida, sin entender demasiado por qué Piero decía que había algo de ella misma que desconocía.

Leonor, pese a todo, se dejó hacer, totalmente confiada en que aquel hombre no le deseaba mal alguno, sino todo lo contrario. No comprendía aquel sentimiento que se había generado tan rápidamente en ella, y en el rincón más profundo de su mente, rezó a Dios para que no se tratara de un poder que él había usado contra ella, o para que no fuera el producto de aquella sangre maldita que tanto le gustaba. Pero nada de eso importaba ahora mientras la suavidad de las manos de él la recorrían y su dulce voz le pedía que se relajara. Por lo que, totalmente obediente, le entregó su voluntad para que la moldeara con sus hermosas y cálidas manos y para que sus hermosos ojos azules traspasaran su alma…

¿Dónde estaba? Un misterioso pasillo había aparecido amenazante ante ella cuyos dos extremos conducían a lugares inexplorados, pero… ¿Cuándo había llegado hasta allí? ¿Y quiénes eran aquellos dos hombres que la acompañaban y que parecían apremiarla a que avanzara a su lado cuyas palabras, aparentemente amables, no comprendía? El miedo volvió a apoderarse de su delicado cuerpecito, puesto que sabía que era justo ella el centro de aquella conversación y la razón por la que se encontraban en aquel extraño lugar.

Tenía que esforzarse en comprender, debía saber el motivo de su presencia en este sitio tenebroso, por lo que enfocó su vista todo lo que pudo hasta descubrir que el que antes había sido Piero, carecía de globos oculares cuyas cuencas oscuras mostraban una negrura tal, que erizaba la piel recordándole todas las historias de miedo que había escuchado a lo largo de su vida.

No obstante, no podía permitir que el miedo la paralizara, por lo que trató de agudizar el oído y su memoria, tratando de saber quién podía ser aquella otra mujer que mencionaban y la bruja que aparecía en su conversación. También procuró mirar disimuladamente en todas direcciones buscando posibles vías de escape, para encontrar el momento idóneo para salir corriendo y escapar, en el caso en el que las cosas se pusieran feas.

Cargando editor
22/08/2016, 22:19
Narrador

Al acercarse más a ambos hombre pudo por fin comprender que la mujer de la cual hablaban era su madre. Ambos hombres hablan distinto de ella, si bien de nuevo a Leonor le costaba comprender sintiendo como los hombres al mismo tiempo volvían más bajas sus voces, podía notar que el hombre sin ojos hablaba bien de ella incluso con mucho aprecio mientras el otro hombre no expresaba el mismo aprecio. La palabra estéril parecía repetirse una y otra veces en la conversación a pesar que parecía no tener sentido.

Mientras ella examinaba con la vista el pasillo no podía evitar tener la sensación de que algo le aparecía en el rabillo del ojo, una sombra que nadie más que ella podía notar. Aunque fue en uno de esos momentos donde buscaba a esa presencia fue que noto una puerta semi abierta que antes no se encontraba ahí.

Los hombres parecían no darle importancia o no haber descubierto esa puerta, pasando de ella mientras empezaba a caminar hacia la profunda oscuridad frente a ellos. Por otro lado tras la puerta parecía haber un halo de luz que brillaba hacia el pasillo. Mirando lo poco que podía dentro sin internarse notaba un par de mujeres hablando y riendo, pero mas haya de ello no podía distinguir nada mas como si el mundo ahí no estaría formado.

Cargando editor
22/08/2016, 23:57
Leonor Amore

Leonor estaba estupefacta. Ella no se acordaba de su madre. Ni siquiera recordaba su vida antes del orfanato. Siempre había asumido que era por ser tan pequeña, ya que Theo así se lo había explicado. Pero a decir verdad, tampoco recordaba muchos aspectos de su niñez hasta una edad en la que supuestamente tendría que haber tenido más imágenes de su pasado, teniendo en cuenta la memoria prodigiosa que siempre había poseído.

¿Su madre era estéril? ¿Cómo era eso posible? Había muchas cosas que no cuadraban en todo esto. No obstante se limitó a continuar atenta para tratar de sacar el máximo número de información posible, mientras examinaba los pasillos con cautela. Quizá fue por eso por lo que observó aquella sombra que rectaba por los corredores y que todo el mundo ignoraba. La puerta que aquel ente le mostró, fue también una sorpresa, por lo que Leonor se detuvo un poco para contemplar el interior, justo antes de decidirse escabullirse de entre los dos hombres para colarse en esa iluminada estancia, allí donde estaban las dos mujeres que reían alegremente a pesar de lo extraño de la situación.

Cargando editor
23/08/2016, 07:24
Narrador

Ella no fue la única en escabullirse por la puerta notando como el ente a una rápida velocidad se internaba también. Dentro quedo segada por la luz unos segundos hasta que su mirada se acostumbró o simplemente la luz dejo de brillar con tanta fuerza, no estaba segura cual de las dos.

Dentro las mujeres se veían igual de grandes en tamaño como los hombres anteriores, la diferencia eran sus ropas que eran más simples y menos limpias. Sumado a eso ambas mujeres parecían obesas y sus senos eran más grandes con uno de ellos liberado en una de las mujeres. Ambas se encontraban riendo viendo un ser pelado encerrado en una jaula, parecían burlarse de este con palabras raras.

Aunque eso cambio cuando notaron la presencia de la joven mirándola con desdén, incluso hasta parecer animales con una gruñendo como un perro feo mientras la otra la teta al aire te advertía con un sonido parecido a un gato. Monstro empezó a sonar detrás de ella, al darse vuelta no noto a nadie y de nuevo escucho Monstro sintiendo que venia dirigido a ella.

Nerviosa reviso a todos lados encontrando a ese ente oscuro en uno de los rincones oscuros del techo sonriendo maliciosamente. Las mujeres seguían rechazándola mientras el ser pelado te negaba con la cabeza viéndose bastante serio. Entonces sentido algo mas en su espalda como un toque pero detrás solo estaba la puerta que llevaba al pasillo, donde ahora brillaba algo en el suelo.  

Cargando editor
23/08/2016, 22:43
Leonor Amore

¿Quién sería el ente que la seguía? ¿Amigo o enemigo? Se preguntó mientras atravesaba el umbral donde aquellas mujeres reían alegremente. O al menos fue así hasta que la vieron, momento en el cual se mostraron totalmente hostiles hacia su persona, una de ellas incluso enseñando uno de sus pechos sin el más mínimo pudor.

Leonor también fue consciente de que aquellas obesas féminas estaban siendo terriblemente crueles con una criatura carente de pelo que se encontraba en una jaula cercana. Pero lo que realmente llamó su atención era que se dirigían a ella con repudia, llegando incluso a llamarla monstruo, mientras sus gruñidos y siseos trataban de espantarla de allí.

El ser de oscuridad que la había seguido, parecía divertirse a sus expensas, pero la joven pelirroja no pudo evitar querer ayudar al prisionero de aquellas mujeres crueles, por lo que, sin pensárselo demasiado bien, se agachó para recoger aquello que brillaba en el suelo, con la esperanza de que se tratara de la llave que pudiera liberar a aquel desdichado antes de que alguien se lo impidiera.