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La Busqueda

Una luz faltante (Cap 1.2)

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27/02/2015, 06:32
Narrador

Claude se despertó en el lugar que había pasado la noche bastante tranquilo, preparado mentalmente para los planes que había edificado el día de ayer. Pero pronto descubrió que esta gran ciudad no esperaría su decisión antes de seguir moviéndose.

Pronto averiguo de su cruzado compañero que la noche no fue tan tranquila y algunos aprovecharon la distracción de la fiesta de bienvenida hacia el Cardenal para causar caos. Dos noticia lo recibieron mientras desayunaba. Una fue de un incendio en la zona de la ciudad donde se acostumbra localizar a los musulmanes que se quedan por la noche o por toda su vida, el incendio pareció extenderse por dos casas antes de que lo apagaran y termino cobrando la vida de las dos familias que las habitaban. La otra noticia fue el asesinato de un monje franciscano, al parecer fue muerto a golpes igualmente sus hermanos lo pudieron identificar y llevar con ellos a su monasterio.

Pero eso no era lo unco al parecer una dama deseaba verlo a esta hora de la mañana. Lady Celia Giovanni.

Notas de juego

El lugar es un principio una de las habitaciones para las visitas en el palacio del Dogo.

Edit: Al final es otro lugar XD

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03/03/2015, 17:34
Claude Frollo

Tras la fiesta, el despertar había comenzando siendo normal, pasó a cotidiano, de ahí a trágico y terminó quedando en inquietante. A medida que había ido recibiendo noticias, había ido intentando encajarlas en su lugar. Los incendios... bueno, eran un mal común en las casas de madera y barro en las que los perros vivían. Eran almas de Dios, así que a pesar de su impiedad pidió por ellos en sus rezos matinales. Sin embargo, el asesinato... uno de los miembros de la comitiva franciscana. Esperaba que no fuera Massimiliano... tendría que enterarse. Muerto a golpes... qué horrible final. En momentos como aquel agradecía tener a Jaçques al lado y que existieran esos paladines dispuestos a defender a los miembros de la Iglesia.

En cualquier caso, en aquel momento parecía urgir más atender a la señorita Giovanni. Pidió que la hicieran pasar y que sirvieran también algo de desayuno para ella. Esperó a que entrase, la saludó con una inclinación de cabeza y la invitó a sentarse y a disfrutar de lo que quisiese.

-Buenos días nos de Dios Todopoderoso, Lady Giovanni. ¿A qué habré de agradecer vuestra presencia?

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03/03/2015, 19:24
Celia Giovanni

Los sirvientes que tenía a su cargo prepararon rápidamente un segundo desayuno para ser servido para la dama, apoyándola en la mesa poco después que ella llegara. Cuando cruzo el portar de la puerta automáticamente el obispo recordó a la triste dama que termino marchándose con ojos rojos de la Basilica y que al parecer en su dolor no salio de su hogar para participar de la fiesta en el Palacio de Dogo.

En ese momento seguía con un rostro algo melancólico mientras avanzaba con un paso algo mas calmado que ayer. Saludando con una inclinación respetuosa al obispo. “Ojala Dios lo escuche su santidad. He venido a disculparme con usted, ayer no me comporte de buena manera y termine rechazando su pedido para hablar conmigo.” Explico mientras su mirada se mostraba algo insegura, tratando de que no se viera que prefería bajar su mirada en vergüenza.

“Si me permite me gustaría compensarlo con ello, sino se encuentra demasiado ocupado para recibirme.” Finalizo cerrando los ojos y suspirando un poco pareciendo incomoda.

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04/03/2015, 12:04
Claude Frollo

-Au contraire, Mademoiselle... -respondió el obispo con una sonrisa-. Estoy encantado de hacerlo. Entiendo que ayer no era el momento. Si el sacerdote era alguien querido para vos, es normal que le guardéis luto.

Claude tomó unos bocados más, señalando a la joven que podía hacer lo mismo si gustaba. Un pequeño silencio, no demasiado incómodo ya que no se alargó mucho tiempo se hizo en el salón. Al final de éste, el francés miró a la joven veneciana a los ojos, sin sonrisa ni reprimenda, más bien sin expresión alguna*.

-Contadme, hija mía, ¿qué relación teníais con nuestro hermano difunto? Que Dios lo tenga en su Gloria...

Notas de juego

*Algo más o menos así :P

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05/03/2015, 16:00
Celia Giovanni

Pareció obligarse a sonreír ante la respuesta positiva del Obispo, asintiendo cuando lo nombro como alguien querido por ella. “Le agradezco su santidad.” Dijo elevando su mirada a su rostro.

Le pidió si podía sentarse, esperando a que diera su positivo antes de hacerlo tomando un poco de jugo que los sirvientes habían servido. Mientras esperaba en silencio a que el obispo comenzara la conversación.

“Que Dios lo tenga en su gloria y que le haga olvidar lo que sufrió en sus últimos momentos de su vida…” agrego a tu comentario antes de mirar por unos a copa antes de mirar la expresión del obispo. “Cuando pequeños éramos amigos muy cercanos, a pesar que él no pertenecía a una familia comerciante importante, solíamos pasar mucho tiempo juntos. Aunque lamentablemente nos empezamos a separar cuando se volvió miembro de la iglesia.” Contesto con cierta melancolía que parecia conseguirle que apareciera una linda sonrisa en su rostro agraciado, a pesar que en sus ojos parecian volver a aflojar algunas lagrimas.

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08/03/2015, 18:52
Claude Frollo

-Recordad, hija mía, que allá donde está ahora ya no sufre. Su alma descansa junto a nuestro Señor, sentado a la derecha del Padre. Pues no dudo que su esencia era pura y devota... aunque hubiese recibido el castigo de la corrupción aún en esta tierra...

Claude seguía comiendo despreocupadamente, sin apartar la mirada de la joven. Seguramente algo hubiese oído sobre lo que le había pasado al sacerdote. Y siendo alguien tan cercana a ella...

-Decidme, joven, ¿conocíais qué contactos había mantenido nuestro hermano en los últimos momentos de su vida? Quizá éstos tuvieran que ver con aquello que causó su muerte...

Quizá supiese algo, quizá no. Pero la mera rumorología servía de mucho cuando se trataba de lanzar juicios. Él lo sabía, así había podido purificar a numerosas brujas e incontables herejes. El "rumor" era el comienzo de la indagación, y muchos terminaban confesando tan solo con un poco de insistencia.

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08/03/2015, 21:38
Celia Giovanni

Asintió levemente contenta con sus palabras que parecían levantarle de a poco el ánimo a ella, comió algunos bocados de la fruta que habían traído antes de hablar de nuevo. “Yo tampoco lo dudo y por eso creo que como usted dice ya no se encuentra sufriendo como lo hizo ayer.” En ese momento se detuvo como si fuera  a llorar pero se contuvo a ella misma.

Al escuchar sus palabras pareció meditarlo un largo rato buscando una satisfactoria respuesta a su pregunta. “Me gustaría poder contarle algo pero Vico no era de contarme mucho diciendo que no deseaba preocuparme.” Admitió apenada mirando para la mesa. “Aunque sabía que visitaba a varias de las comunidades que residen esta ciudad, a diferencia del Obispo de la santa iglesia de San Marcos.”

“Lo lamento seguro espera mas de mi, pero aun ahora no puedo entender como paso esto o porque. Pero tengo miedo, mucho miedo Obispo.” Le confeso mirándolo angustiada.

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08/03/2015, 21:49
Claude Frollo

Claude se mantenía tranquilo, comiendo como si no estuvieran hablando de lo que hablaban. Había conseguido comer en momentos mucho peores que aquel, más sangrientos o agónicos. Además, tenía que transmitir esa tranquilidad a la joven. A ella y a todos: un siervo de Dios debía saber que el Señor guiaba sus pasos, y todos los demás debían entenderlo con tan solo observar su comportamiento.

-Vaya, os tenía mucho aprecio, eso está claro. Protegeros así de sus actividades... ¿acaso creéis que consideraba que eran demasiado peligrosos? ¿Creéis que se avergonzaba de esas "comunidades" que visitaba, o es que acaso no eran dignas de confianza y no quería inmiscuiros? -el obispo tenía que ir ayudando a la dama Giovanni a sacar conclusiones, así se conseguían las cosas. Ella tenía en su mente todo cuanto debía saber, solo necesitaba una guía.

La miró con algo parecido a una sonrisa tranquilizadora. Un intento de ella al menos. Negó casi imperceptiblemente con la cabeza aún con aquel sucedáneo de sonrisa mientras se llevaba otro trozo de comida a la boca. Lo masticó con tranquilidad, se limpió con la servilleta de fina tela y volvió a mirarla para hablar de nuevo.

-Vos sois una piadosa dama, Lady Celia. No tenéis culpa de nada, eso lo sé -dijo para tranquilizarla y confiarla-. Sin embargo, debo saber con exactitud lo que le pasó. He confiado en que el alma de Vico era pura... pero si tenía alguna mácula necesita de más rezos para que sea purificada y pueda descansar eternamente a la luz de Nuestro Señor. Así pues, decidme, querida, ¿qué os preocupa? ¿De qué tenéis miedo?

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09/03/2015, 16:57
Celia Giovanni

Si bien el objetivo de calmarla al transmitirle calma propia era una buena idea no parecía funcionar con la joven o tal vez no aun. Sin embargo lo escucho con atención y se quedó meditando un largo rato ante sus múltiples preguntas.

“Ahora que lo pienso podría ser un poco de todo, aunque no creo que se avergonzara de visitarlos pero no poseía más que una relación de cordialidad con ellos…” le respondió quedándose un tiempo callada. “Creo que debí decirle que su misión con cada visita a esas comunidades era convertirlos de apoco al cristianismos y además civilizarlos con nuestras costumbres. Algo que a veces sentía muy agotador ya que solían ser bastante tercos en creer que lo que hacían era lo correcto. Eso sí lo compartía conmigo.”

Ante tus palabras para calmarla simplemente asintió mecánicamente mientras observaba la manzana que tenía en la mano y que solo había mordido una sola vez. “Me preocupa que no sea el único que perezca de esta forma tan horrible o que no sea el único.” Confeso genuinamente preocupada. “Tengo miedo que yo haya sido la causante…” confeso deteniendo sus palabras rápidamente.

“Yo he pecado su santidad. Debo confesarme.” Dijo soltando la manzana y mirando la puerta preocupada de que alguien fuera a escucharla.

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09/03/2015, 19:30
Claude Frollo

Claude se mantuvo callado todo el tiempo que habló la joven. Pudiera parecer distraído, pero escuchaba atentamente y si lo hacía saber mirándola de cuando en cuando, abandonando sus quehaceres con el desayuno que degustaba. Así que... iba a visitar infieles... ¿Judíos? ¿Musulmanes? En aquel momento pidió a Dios que no fuera algún tipo de comunidad herética... Realizaba una labor apostólica y... "se contagió". Aquello tenía sentido en la mente del obispo. La corrupción podría haber nacido allí donde pocos entraban. Las criaturas de la noche gustaban de elegir suburbios como aquellos para esconderse de la luz de Dios.

Cuando la joven se mostró tan preocupada, el francés dejó lo que hacía y comenzó a limpiarse las manos con el trapo, clavando sus ojos inquisidores en ella. Su culpa... confesar... Se la veía realmente arrepentida. Ese era el camino para la redención. Se limpió la boca y le hizo una seña con la mano para que se levantara y se acercara hasta él. Mientras ella lo hacía, llamó al sirviente y le pidió que se marchara y cerrara la puerta... y que nadie los molestara...

-Acércate, hija mía, coge aquel cojín y arrodíllate al lado de mi silla... -indicó el religioso-. Sin duda todo lo que dices me hace pensar que eso tuvo que ver con su muerte... Debemos evitar que otros buenos cristianos caigan en eso -esperó a que se colocara como le había pedido y le dio unos toques de consuelo en la mano-. Pongámonos en paz con Dios, hija mía... Ave María Purísima... -comenzó la fórmula de la confesión.

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10/03/2015, 19:39
Celia Giovanni

Obedeciendo las palabras del obispo tomando un cojín para apoyar sus rodillas, una vez estuviera arrodillado junto a Claude. Cerrando los ojos y uniendo las manos en un gesto de rezo.

“Debemos evitarlo…quiero ayudarlo Obispo…” Dijo en susurro bajo que por el tono parecía un pedido de ella. Luego quedo en silencio para que el obispo continuara con el rito de confesión para empezar a hablar.

Una vez hecho volvió repetir las palabras de antes. “He pecado su santidad… he tenido pensamientos de carnales con el sacerdote Vico, también lo he tentado con gestos de los cuales me avergüenzo siendo los besos que le entregaba en secreto sin que nadie nos viera.” Confeso temblando mientras hablaba.

Notas de juego

Pense que habia contestado esto :S

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12/03/2015, 21:13
Claude Frollo

Claude escuchó la confesión de la joven con una de las manos apoyadas en su cabeza. Así que... su pecado era la lujuria. Las jóvenes, muchas de ellas, se solían sentir tentadas por Satanás de esta manera. Eran muchas la que caían, llevando a los hombres a caer también en el pecado. Ese era el pensamiento del obispo parisino. Y, aunque no quería ser demasiado duro, sabía que tenía que atajar aquello...

-Y dime, hija mía, ¿el sacerdote Vico te correspondía, rompiendo sus votos? -hizo una pausa, para que entendiera la importancia de la pregunta-. Y tú, ¿sigues teniendo esos pensamientos lascivos?

El obispo seguía con los ojos cerrados, una mano en la cabeza de la joven, la otra tapándose la cara para concentrarse mejor, escuchando a Celia...

Notas de juego

Y a mí no me llegó correo de que ya lo habías respondido :-s

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13/03/2015, 17:09
Celia Giovanni

La joven tardo un largo minuto en contestar la primera pregunta del obispo, posiblemente discutiendo en su interior como haría para contestarla. Lo que no sabía que su retraso ya daba una respuesta al obispo que podía intuir que el sacerdote le correspondía, pero ella no deseaba manchar la reputación de este aunque a la vez era obligada bajo la confesión a contestar con la verdad.

“Si, me devolvía los besos…” termino confesando. “Pero nunca deseamos llegar a nada más que eso, yo sigo siendo virgen. Se lo juro por dios.” Aclaro rápidamente cerrando con mas fuerza sus ojos y encogiéndose un poco.

“Yo…Yo no he pensado a ningún otro hombre de esa manera y no sé si en algún momento pueda hacerlo.” Confeso con profunda tristeza, dolida por la muerte de sus supuesto amor.

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13/03/2015, 18:09
Claude Frollo

Claude escuchaba en silencio, aún con una de sus manos sirviéndole de apoyo para sostenerse la cabeza, y la otra en la de la joven. Había escuchado confesiones similares. En París, era el confesor de damas de corte, y cosas peores hacía éstas. Sin embargo, eso no restaba gravedad al pecado capital de ambos.

-No os preocupéis, hija mía, Dios sabe perdonar si la penitencia es adecuada y sincera. Pero habéis hecho bien en decírmelo, Lady Celia, pues ahora podremos pedir por su alma pecadora, para que sea perdonada y aceptada en el Cielo -al religioso sí le molestó, en cambio, que jurase en nombre del Altísimo-. Y recordad, hija mía, no debes tomar el nombre de Dios en vano... -una pausa siguió para cambiar el tono punitivo al que había mantenido hasta el momento, de comprensión y atención-. Y decidme, ¿qué más os preocupaba? Me decíais de sus compañías...

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16/03/2015, 19:07
Celia Giovanni

Asintió rápidamente a las palabras de Claude que compartía en gran medida. “Le prometo que mi penitencia es sincera y por ello vengo con usted. Sabia que podría ayudarme sinceramente y no usaría lo que le digo políticamente como otros.” Le dijo queriéndole explicar mejor porque habia acudido a él.

“Lo lamento mucho Obispo, es que…su mano oprimiéndome me pone mas nerviosa.“ afirmo con miedo y Claude noto efectivamente que estaba generando un poco más de presión en la cabeza de la joven de lo que pensaba. “Pero igual no deseo culparlo de un error mio, lo siento.”

Se quedo de nuevo callada murmurando lo que vos creías escuchar como rezos. “Su compañía era muy peligrosa, iba muy seguido a los barrios mas humildes donde venían extranjeros del continente oscuro con sus costumbres y religiones extrañas. Luego también a barrios donde habitaban los musulmanes con dinero y los griegos traídos de Constantinopla. Yo siempre temí no volverlo a ver, pero me aseguraba que era algo necesario para que Venecia conservara su esencia católica.”

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04/04/2015, 22:05
Claude Frollo

-No dudo que lo será, hija mía, no lo dudo...

La joven lo sentía sinceramente, eso terminaría limpiando su alma de todo pecado. El acto de contrición era el primer paso para conseguir el perdón de Dios. Igualmente, Celia tendría por delante un largo camino hasta conseguirlo. Se decía que el pecado habitaba en la piel de las mujeres, y en este caso parecía que había seducido a un pastor de hombres nada menos...

Debió haber sido un buen hombre y un buen cristiano: -Entiendo... ¿Os mencionó alguna de sus compañías? ¿Algo sobre quién le acogía en esos barrios? Soltad, hija mía, toda la preocupación y toda la oscuridad que guardáis. Vaciad vuestra alma para que podáis aceptar la luz de Nuestro Señor.

Sin duda, no utilizaría lo que le dijera para extorsionar a la joven, pero sí para avanzar en su propia investigación...

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05/04/2015, 07:08
Celia Giovanni

Una linda sonrisa decoro su bello rostro al escuchar tus primeras palabras y un corto asentimiento se sintió en tu mano. “No sabe lo feliz que me hace que lo crea santísimo.” Dijo con devoción y una clara felicidad.

Ante tus numerosas preguntas la joven sé que pensando un buen tiempo, claramente haciendo un esfuerzo de buscar en su memoria cualquier ayuda que pudiera darle al Obispo en este interrogatorio. “Reis…con un apellido que ahora no me acuerdo. Es un comerciante musulman, que Vico decía que lo trataba bien y genuinamente lo escuchaba cuando le hablaba de Dios. Aunque poseía un defecto importante…” dijo mientras recordaba. “Ya lo recuerdo! Le gustaba apostar.” Agrego rápidamente mientras recordaba un detalle que ella presintia que podría serle útil al obispo.

Luego se quedó quieta esperando las siguientes palabras del obispo teniendo una actitud bastante sumisa como él tan acostumbrado estaba de algunas personas que pertenecían a su rebaño.

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05/04/2015, 15:01
Claude Frollo

Un musulmán... perros infieles. Un comerciante oscuro y usurero al que le gustaba apostar. Quizá el sacerdote Vico hubiese podido llegar a hacer de él un cristiano, pero lo mataron antes. Hablaría con ese "Reis". Por el momento debía concluir con aquella confesión y la limpieza de la joven.

-Entiendo. No debéis sentiros mal. Vuestro pecado está pegado a vuestra piel, como lo estuvo en el de la primera mujer, Eva. Sin embargo, veo en vos la intención de curar vuestra alma inmortal, ¿no es así? -dijo haciendo una pausa-. Decidme, ¿hasta dónde deseáis el perdón? ¿Cuánto estáis dispuesta a hacer por obtenerlo?

Claude cerró los ojos y se llevó la otra mano a la frente, apoyándola en ésta. Mientras esperaba la respuesta de la joven, comenzó a rezar en su mente. Pedía a Dios que le diera entendimiento para elegir la correcta penitencia...

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06/04/2015, 19:02
Celia Giovanni

Asintió ante su primera pregunta bastante segura de su respuesta, aunque pareció algo más nerviosa ante las preguntas que siguieron volviendo levemente coloradas sus mejillas. “Deseo el perdón necesario para que mi alma sea purificado de mi horrible pecado. Para eso hare todo lo que me pida su santidad.” Termino diciendo haciendo un notable esfuerzo para no temblar esperando cual seria la siguiente acción del Obispo.
 

Notas de juego

Sabes...esta pagina me obliga a hacer mas privadas ciertas escenas ;)

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06/04/2015, 22:32
Claude Frollo

Claude enarcó una ceja al ver la reacción de la joven. ¿Habría pensado...? Sin duda su juventud aumentaba la gravedad del pecado que habitaba en ella. No cabía duda que era una joven de buen parecer, y ya había atraído hacia el pecado a un pastor de la Iglesia, lo cual la hacía aún más tentadora...

Pero hacer o pensar en aquello era simplemente una abominación...

-Está bien, hija mía. Yo te diré lo que harás para conseguir la salvación de tu alma... -dijo dejando un poco en suspense su veredicto mientras baja delicadamente la mano que tenía en su cabeza, lentamente por su mejilla hasta posarla en su barbilla obligándola a mirarle-. Debes alejar al Maligno de tu piel, y para ello pedirás a tu familia que quieres entrar a formar parte de una de las congregaciones religiosas de Venecia. No será de por vida, pero sí al menos hasta que expíes tus pecados a través de la oración y la meditación con las monjas de clausura... -se calló durante apenas dos segundos, dejando que terminara de asimilarlo. A continuación, con su pulgar derecho, dibujó la señal de la cruz en su frente a la par que recitaba-. Ego te absolvo a peccatis tuis in nomine patris et filii et spiritus sancti...

Dicho ésto, colocó su anillo obispal frente a los labios de la joven para que lo besara, como si ya estuviese todo dicho.

Notas de juego

¡Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja! Sabía que alguien pensaría ésto xDDD Seguro que Leo también... Ains... ¡mentes sucias! Y aunque sí, a es muy tentador exculpar a la joven y hermosa Celia a través del acto carnal, Claude va mucho más allá de eso. Para su desgracia, no es de esos xDDD