Partida Rol por web

DM: Rifts: Turno 24:

 

Nota: De nuevo este va a ser un turno doble como el anterior, puesto que el grupo aventurero se encuentra dividido en dos grupos más pequeños. Por cierto, aún está pendiente el tema de elegir nombre para el grupo aventurero, creo que uno de los que se barajaba era el de "Vengadores de DarkGate" o "Justicieros de DarkGate", comentadle a Maximus qué nombre queréis que tenga el grupo y haced una votación al respecto por IRC. Por cierto me gustaría que todo el mundo que no lo haya hecho ya me informe de la fecha de nacimiento y religión de su personaje (si quiere decirme el signo del zodiaco del PJ también es un dato de interés que apuntaré en la ficha).

 

Introducción individualizada:

 

Grupo A:

 

• Cuchillo: Comienzas este turno estando en coma. Probablemente cuando te recuperes atravieses un breve estado de lucidez, en los que aunque pretendas los contrario eres plenamente consciente de tus acciones pasadas. Tan sólo te queda la armadura que perteneciera a Chupux y te sientes reacio a utilizarla puesto que tan sólo le quedan 2 MDC. Es decir, está hecha un colador, y el más leve impacto podría destruirla y es uno de los pocos recuerdos que queda del "hombre-cactus", pero posiblemente no te quede otro remedio que utilizarla, al menos hasta que encuentres otra cosa.

 

• Jimily: Es irónico lo que dices acerca de buscar una sacerdotisa que te bendiga en el próximo pueblo al que lleguéis, puesto que tienes a una al lado. Se llama Noa y sirve al poderoso dios del sol Apolo. Es evidente que últimamente estás confuso, las cosas no te están saliendo redondas, pero al menos sigues vivo y eso es lo más importante. Tal vez la Rueda de la Fortuna dé una vuelta pronto y tu suerte cambie. Tan sólo llevas una armadura Juicer y está hecha pedazos. Además, no es muy buena idea llevar equipamiento Juicer en el Pecos Empire, hay unos cuantos Juicers que si ven a uno que no es de los suyos llevando una pieza de su equipamiento típicamente Juicer pueden reaccionar con violencia. Le das un IRMSS usado a Maximus, que como tiene ciertos conocimientos de paramédico tal vez pueda usarlo adecuadamente.

 

• Maximus: La pérdida de tu armadura extra pesada es un duro golpe, era una de tus posesiones más preciadas. Pero un cibercaballero no se aferra a sus bienes materiales y su valor para él es el servicio que le puedan prestar para combatir al mal y a la injusticia. Es cierto que necesitas una armadura nueva urgentemente, este mundo es demasiado peligroso para recorrerlo sin protección alguna. Has oído que los campeones de la luz y justicieros no están nada bien vistos en el Pecos Empire, tal vez tu próxima armadura debería de ser discreta para no llamar excesiva atención indebida y correr el riesgo de poner en peligro al grupo. Tampoco vas demasiado bien de munición de rifle y usar las espadas psíquicas te podría delatar como cibercaballero. Por suerte tienes una nueva Six Shooter con suficiente munición.

 

• Mouser: Cierto, sufriste un pequeño caso de ataque de pánico en la lucha contra los vampiros, pero no vas a permitir que nadie comience a dudar ahora de tu utilidad para el grupo. Eres muy bueno consiguiendo información, sabes conducir vehículos y eres un hábil administrador y negociador. No es culpa tuya si los Ratlings no se han destacado nunca por su valentía. Es más, tú crees que, para ser un Ratling, eres excepcionalmente valiente. Te preocupa bastante el estado actual del grupo, al parecer eres el único que aún conserva su armadura más o menos en buen estado. Quizá debido a ello te toque hacer de explorador avanzado, el mero pensamiento hace que te pongas muy nervioso y tu cola sin pelo se agite incontroladamente de un lado para otro. Estás en plena crisis nerviosa y tomas la única decisión que te es posible adoptar dadas las circunstancias. Le dices a Maximus que cuando sigan camino te vas a quedar atrás, en tu actual estado no puedes ayudar al grupo e incluso temes que no hagas más que estorbarles si te quedaras con ellos.

 

• Noa: De repente Noa se pone de pie con los ojos muy abiertos y todos tenéis la sensación de percibir como algo que se rompe. Incluso los miembros del segundo grupo que conocían a Noa pueden percibir algo, una vaga inquietud, un cierto desasosiego. Noa se eleva por los aires lentamente mientras cierra los ojos y extiende los brazos, una energía solar la envuelve. En ese momento se abre un círculo de luz dorada y una gigantesca mano dorada la coge suavemente y se la lleva. Momentos después el portal solar se cierra y Noa ya no está con vosotros. Una sensación de tristeza y de pérdida os embarga. ¿A dónde habrá ido? Esperáis que se encuentre en un lugar mejor.

 

• Sanakin: Te sientes abandonado de la mano del destino. Totalmente, y lo peor es que no es la primera vez. Vas a seguir por el grupo más por inercia y desesperación que por auténtica convicción.

 

Grupo B:

 

• Geoffrey Mournfolk: Tu viaje está siendo agotador. Resulta algo descorazonador el saber intuitivamente que Maximus aún está muy lejos, aunque debes seguir adelante. Tu fiel Tifón cabalga incansable, aunque tú no eres inmune a la fatiga y estás casi agotado cuando de repente se escuchan unos gritos salvajes detrás tuyo y a los lados. Le das rienda suelta a Tifón al tiempo que te arriesgas a echar un vistazo: te persiguen seis tipejos a caballo, son calvos, con tatuajes negros en la cara, especialmente en el contorno de ojos, y tienen expresiones salvajes. Parecen bandidos o bárbaros de la carretera, algo en ti les debe de haber atraído y sus intenciones no parecen nada buenas. Si fueran armados con vibro sables o algo similar, te detendrías a luchar. Pero la mayoría llevan pistolas TX-5, de proyectiles explosivos de alto impacto y el resto revólveres láser. Te superan mucho en potencia de fuego, por lo que decides espolear a tu montura robótica con la esperanza de encontrar un paso estrecho desde donde sólo puedan atacarte de uno en uno para girarte y plantar cara. En un momento dado pasas a menos de cien metros de un farallón elevado desde donde unos aventureros junto a un Montañero ATV comienzan a disparar contra tus perseguidores.

 

• Furia: No te sientes demasiado bien, estás ligeramente confuso. Tienes flashes extraños de un pasado alternativo que nunca sucedió. Esperas que los demás no se den cuenta de tu estado mental, no estás precisamente en tu mejor momento.

 

• Solomon King: Esta primera jornada de viaje ha ido bien. No has sido descubierto, en buena parte y aunque te duela un poco admitirlo, gracias a los poderes del mago Thomas, el enmascarado cara de lata. Ahora que Los Alamo ha quedado atrás te sientes algo más tranquilo, aunque sabes que no estás realmente a salvo. Es sólo cuestión de tiempo que se den cuenta de que te has fugado de la ciudad y que los directivos del equipo envíen caza-recompensas en tu búsqueda. No confías plenamente en ninguno de tus compañeros, aunque Thomas te parece bien intencionado y en cuanto a Vicky, supones que es normal que le preocupe que seas un fugitivo siendo como es ella una Justice Ranger. A fin de cuentas, ella no tiene forma de saber que, si bien eres realmente un fugitivo, tu causa es justa. En cuanto a Furia está claro que además de no ser humano sus procesos mentales tampoco son humanos.

 

• Thomas: Percibes con fuerza el momento en que Noa desaparece de este mundo, aunque te sorprende porque creías que no estaba. Ahora comprendes que ella y Luna en realidad eran la misma persona. Supones que ahora eres el único mago del grupo, el pensamiento te pone triste. Crees que Solomon es un buen tipo, aunque un tanto chulo, pero conociendo la forma arrogante de ser de los Juicers eso es normal.

 

• Vicky: Tú también percibes el momento en el que Noa abandona este plano, aunque de un modo menos intenso que Thomas (o que Maximus que estaba a su lado). Te sientes triste por un momento, te embarga el desasosiego sin saber por qué. Después te repones y te dices a ti misma que hay que seguir adelante, que tu causa es buena y justa y que debes de luchar siempre en defensa de tus ideales. Te sientes un poco sola aunque vas con otros compañeros. Furia, aparte de recordar el pasado contigo no ha vuelto a hablar apenas contigo, y mucho menos con los otros. Thomas es un poco cabeza hueca, o tal vez es que como es un mago tiene la mente puesta en otras cosas que los ojos normales no perciben. Sea como sea a veces parece que no se entera de las cosas o como si no recordara claramente las cosas pasadas. En cuanto a Solomon la verdad es que no te gusta demasiado la forma desafiante como a veces parece mirarte. Primero piensas que tal vez tenga algo en tu contra, pero enseguida te das cuenta de que es su forma de ser, su forma de enfrentarse a un mundo que a veces puede ser cruel y despiadado. Tal vez todos los Juicers son así, la certeza de que van a morir pronto les hace ser un poco truculentos y poco dados a la simpatía. Sea como sea, no puedes evitar pensar que es tu responsabilidad conseguir que tus compañeros lleguen sanos y salvos contigo a reunirse con los demás.

 

DM: Rifts: Turno 23:

 

Grupo A:

 

Lunes, 4 de abril de 104 PA:

 

            Estáis bastante destrozados. Noa acaba de desaparecer de un modo espectacular e increíble. Mouser tiene la moral quebrada y dice que no quiere seguir adelante. Sanakin está "desactivado" para ahorrar energía. Y Cuchillo está inconsciente, aunque parece que sus procesos regenerativos Crazy están en marcha y es previsible que en unos días se recupere y vuelva a estar consciente. Eso deja únicamente a Maximus y Jimily como los miembros operativos de este grupo. Ambos se turnan para mantener el campamento vigilado continuamente, dado que los demás compañeros a duras penas están en condiciones de defenderse si fuera necesario. Tampoco están mucho mejor Maximus y Jimily, el primero sin armadura y casi sin munición y el segundo con la armadura llena de grietas y agujeros.

 

Maximus nota durante todo el día unos molestos picores en muslos, hombros, antebrazos y sobretodo en todo el torso. Es una sensación tan molesta como inexplicable. Hacia el atardecer se lo comenta a Jimily, quien posee algunos conocimientos rudimentarios de medicina y le pide al Wolfen que le deje examinarle. Maximus se quita su túnica y Jimily observa con asombro que la ciber armadura implantada, de la que sólo quedaban los restos hasta no hace ni un día, está volviendo a "crecer", algo del todo imposible, sino fuera porque Jimily lo ve con sus propios ojos. Maximus se toca el pecho y lo nota recubierto por una dura lámina de acero MDC que parece como "fundido" con su cuerpo de un modo distinto a como estaba antes. ¡Si incluso parece que tenga sensación de tacto en su nuevo blindaje metálico! Jimily se pregunta cómo es esto posible, pero Maximus vuelve a colocarse la túnica y le pide al mercenario que deje estar el tema, no merece la pena preguntarse más por lo inexplicable. Además Maximus sospecha que este es uno de los secretos mejor guardados de los cibercaballeros, y posiblemente no el único, y se pregunta si no habrá cometido un error al permitir que Jimily se enterase. Tendrá que hacerle prometer al mercenario que guardará el secreto.

 

            El día y la noche transcurren tranquilamente, cosa de la cual Maximus se alegra pues si él y Jimily volvieran a ser atacados por vampiros o algo peor, el cibercaballero no las tendría todas consigo respecto al resultado de un posible combate.

 

            Transcurren tres días más de esta guisa, al tercero Cuchillo ya ha recuperado la conciencia, pero está débil y delira. Jimily y Maximus le cuidan mientras se recupera a marchas forzadas. Ambos han conseguido cazar algunas palomas de campo que han sido rudimentariamente asadas en espetones sobre el fuego de campamento. Con esto y el agua de un arrollo cercano el grupo consigue sobrevivir y poco a poco incluso recuperar fuerzas.

 

Viernes, 8 de abril de 104:

 

            Cuchillo ya se encuentra mejor. Ha cogido los restos de la armadura de Chupux (le quedan 2 MDC) y los ha unido usando cordeles y esparadrapo en una chapuza sin precedentes, después se ha puesto esa "armadura". Jimily tuerce el gesto cuando lo ve recubierto de pedacitos de armadura sujetos con esparadrapo, es la armadura más infame que ha visto en toda su carrera como mercenario. Maximus piensa que eso es mejor que nada y la verdad es que se alegra de ver al Crazy de nuevo activo y recuperado. Cuchillo por su parte no parece recordar apenas nada del combate contra los vampiros y rebosa entusiasmo y optimismo y ganas de reemprender el viaje. Sanakin sigue "desactivado" todo el tiempo, ya ni siquiera se comunica usando la ciber radio. Mouser le pasa a Jimily una frecuencia codificada de comunicaciones para que pueda llamarle si alguna vez le necesita, después el Ratling se despide de todo el grupo y emprende el camino de regreso, rumbo Norte. Sus compañeros le desean suerte, algo entristecidos porque otro compañero haya decidido seguir un camino distinto.

 

Cuchillo se pone a los mandos del hovercoche, listo para abrir la marcha fuera de este bosque. Maximus ha programado en la computadora de navegación del hovercoche la ruta a seguir. Él con la hovermoto sigue a Cuchillo a muy baja altura, pues sin armadura no puede exponerse a abrir la marcha y ser un blanco tentador para posibles francotiradores. Cierra la marcha Jimily a los mandos del hovercamión.

 

            De este modo los tres compañeros (cuatro si contamos al dormido Sanakin) prosiguen su viaje. Hacia el atardecer han dejado atrás los bosques y penetrado en una llanura un tanto árida y pedregosa.

 

Domingo, 10 de abril de 104 PA:

 

            Cuchillo ha conseguido cazar un búfalo del modo más absurdo y disparatado que Maximus jamás viera: primero se lanzó con el hovercoche a toda velocidad hacia un rebaño de búfalos. Al llegar junto a uno redujo la velocidad para igualarla a la del animal, abrió la compuerta del conductor ¡y saltó del vehículo en marcha! Cayó a horcajadas sobre el búfalo y le rebanó el pescuezo de un tajo con su cuchillo rojo (puesto en modo vibro, no incandescente). Maximus, viendo que el hovercoche seguía solo (y con el pobre Sanakin durmiendo dentro sin saber nada), se lanzó con su hovermoto a recoger al Crazy. En un alarde de buen pilotar, lo cogió al vuelo con una zarpa, se situó junto al hovercoche y lanzó al Crazy adentro, justo de manera que quedara sentado ante los mandos. Cuchillo estaba excitado y emocionado y no paraba de gritar todo el tiempo como un adolescente en una montaña rusa, se lo estaba pasando de miedo. El Crazy frenó el vehículo y después entre los tres recogisteis el búfalo muerto y lo despiezasteis y preparasteis como mejor supisteis (es decir, con tiradas de supervivencia apenas exitosas).

 

Asasteis la carne como mejor pudisteis (atravesada en un palo y puesta sobre la fogata de campamento) y de este modo os disteis un festín de supervivientes. Lo malo es que no tenéis los medios para preservar la comida largo tiempo, así que os dais un atracón y guardáis el resto para un día o dos más a lo sumo, ya que con este calor la carne no dura más antes de comenzar a estropearse.

 

            Así, bien alimentados proseguís el viaje algo más animados y esperanzados. Lo cierto es que Cuchillo es como una fuente inagotable de optimismo y entusiasmo. Su verborrea constante ya no os resulta tan pesada, sino que a su modo demencial y estrambótico contribuye a animaros y a recobrar la esperanza con respecto a la misión.

 

            Maximus se percata de que su Cyberarmadura implantada se ha regenerado por completo. No sólo está como nueva, sino si acaso parece más fuerte que nunca, aunque eso parezca imposible. Además ya no parece un implante cibernético normal, pues pese a su peso y a ser algo artificial a Maximus no le resulta en absoluto incómoda, sino que la siente más bien como si fuera una parte viviente de su propio cuerpo.

 

Miércoles, 13 de abril de 104 PA:

 

            Estáis en una llanura de terreno más fértil, hay abundante hierba, matorrales y bosquecillos dispersos en lo alto de las colinas circundantes e incluso en la lejanía veis el sol brillar sobre la superficie acuática de un pequeño lago. En un momento dado, los sentidos extrasensoriales de Maximus y Cuchillo se activan y ambos se ponen en guardia. De repente, de entre los matorrales salen unos bandidos de aspecto zarrapastroso armados con escopetones Big Bore de Bandito Arms (estas armas tienen un tremendo calibre y elevado factor intimidatorio y lanzan proyectiles concusivos que causan derribo por su tremendo poder de impacto, aunque el daño sobre el blindaje es moderado) y equipados con armaduras caseras llenas de mugre hechas a base de piezas mal soldadas de otras armaduras y materiales MDC. Son cinco, tres a vuestra izquierda y dos a la derecha, más un líder en el centro ante vosotros.

 

El jefe viste con una armadura blanca con un símbolo satánico en rojo pintado en su placa pectoral. Se alza orgulloso con los brazos en jarras, las manos no muy lejos de los dos revólveres pesados de iones enfundados en sendas pistoleras en su cinturón. El individuo tiene la cabeza afeitada para que se vean claramente sus cilíndricos implantes cerebrales M.O.M. Jimily masculla: - "Oh, no. ¡Otro Crazy!". –

 

El bandido Crazy del símbolo satánico adopta una peliculera pose orgullosa y exclama: - "¡Alto ahí peregrinos! ¡Temblad ante la furia de Luz Oscura y sus furibundos Caballeros Infernales! Vuestras almas padecerán un tormento eterno... ¡a menos que nos hagáis entrega de vuestros vehículos!" - Uno de los otros bandidos añade: - "¡Venga! ¡Bajad de los vehículos con las manos donde yo pueda verlas y no os haremos daño!" –

 

Jimily se baja del hovercamión con las manos sobre sus dos revólveres de iones IP-10 (iguales que los que tiene el jefe Crazy), listo para disparar sobre los bandidos. También Maximus se prepara para lo que parece un combate inevitable, dudando si emplear sus espadas psíquicas o si gastar la poca munición que le queda de su rifle púlsar de Wilk's.

 

Cuchillo ha posado el hovercoche negro sobre el suelo y se baja del mismo con una mala ostia increíble... ¡ya está harto de que gente mala amenace a sus juguetitos! Sale con su cuchillo rojo encendido en la mano derecha y las vibro garras listas en su guantelete izquierdo. Una vena palpita en su sien y las cicatrices de su cara están rojas y casi parecen retorcerse en su rostro como serpientes enfurecidas.

 

La visión del Crazy con su armadura hecha trizas y su expresión feroz resulta impresionante y los bandidos de baja estofa se inquietan a ojos vista, de repente sujetan sus escopetones con manos flojas. El líder bandido está mirando a Cuchillo con la boca abierta: - "¡Vos! ¡Vos sois el Heraldo del Dolor y del Éxtasis! ¡Os conozco, os he visto en mis sueños!" -  y diciendo esto el demente de la armadura blanca se postra de rodillas en señal de sumisión ante Cuchillo.

 

Los otros bandidos se miran dubitativamente entre ellos y finalmente, aparentemente más movidos por el miedo que por el fervor, también ellos se ponen de rodillas. Ante esto el rostro furibundo de Cuchillo se va relajando gradualmente y es sustituido por una sonrisa (que también debe de ser espantosa para quien no conozca al Crazy y su talante juguetón).

 

Cuchillo dice: - "¡Qué juguetes más obedientes!" - sonríe satisfecho a sus compañeros, que están más que sorprendidos ante el giro que han tomado los acontecimientos. Después a Cuchillo parece ocurrírsele una cosa de repente: - "Tenemos que ir a un mercado que está a unos días de viaje de aquí. ¿Podéis indicarnos si vamos bien por este camino?" - A lo que el jefe del símbolo satánico responde: - "¡Oh, sí, vuestra Eminencia! ¡Nosotros os escoltaremos hasta allí, os protegeremos con nuestras vidas!” - Jura el Crazy, los otros bandidos se estremecen, seguramente ahora se arrepienten de haberse puesto a las órdenes de un jefe tan demente, aunque sea mucho más poderoso que ellos.

 

            Los bandidos os escoltan durante los siguientes días de viaje. Conocen mejor el camino que el pastor gigante y os llevan por atajos seguros, evitando a algunos clanes menores de Simvans Cabalga Monstruos. Los seis bandidos viajan en desvencijadas motos Wanderer (como la de Jimily) y comparten con vosotros sus provisiones (queso y carne en salazón fundamentalmente). El jefe Luz Oscura trata en todo momento con el máximo respeto a Cuchillo (y con educada deferencia a sus acompañantes, a quienes considera sus guardaespaldas o lugartenientes), y esto hace que sus "caballeros infernales" traten al grupo con un respeto aún mayor, tanto que más bien parece miedo y pavor.

 

A Maximus toda esta situación le parece irónicamente divertida, aunque ligeramente repugnante. Jimily se pregunta si no se estará volviendo loco él también al estar rodeado de dementes. En tanto que Cuchillo parece disfrutar de lo lindo en su papel de "Profeta Satánico" o cualquier otro de los absurdos títulos que respetuosamente le adjudica el otro Crazy.

 

Sábado, 16 de abril de 104 PA:

 

            Vuestro viaje ha ido como la seda desde que os encontrasteis a estos "caballeros infernales". Luz Oscura os ha dicho que mañana por la mañana llegaréis al mercado, que ya estáis muy cerca. Todos os sonreís con alegría, ya era hora de que algo saliera bien.

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Grupo B:

 

Lunes, 4 de abril de 104 PA:

 

            Habéis dejado atrás la zona de Los Alamo al finalizar este día y Solomon ya se siente más tranquilo y actúa con más normalidad. Vicky cree notar en el Juicer cierta actitud hostil o cuanto menos hosca hacia el grupo. Sin embargo, intenta no darle demasiada importancia. Se acuerda de que Goldman también actuaba de un modo parecido al principio de unirse al grupo aventurero, era hosco, antipático y no confiaba en nadie ni se llevaba especialmente bien con ninguno de sus compañeros de aventuras. Fue posteriormente poco a poco cuando trabó amistad primero con Maximus y luego con sus demás compañeros. Vicky tiene la esperanza de que si Solomon pasa tiempo con el grupo acabe abriendo poco a poco su concha. Ella y Thomas lo comentan durante la guardia esa noche.

 

Thomas tiene la teoría de que los Juicers tienen una especie de "cultura común", una forma de ser muy suya. Todos saben que van a morir en unos pocos años y habitualmente el que se convierte en Juicer es por algún motivo muy duro. Goldman, por ejemplo, lo hizo porque quería vengarse de la banda de Cuchillo Sangriento porque habían asesinado a su novia. Solomon parece que lo hizo para llegar a lo más alto de su carrera deportiva y convertirse en una verdadera estrella del deporte rey de Los Alamo, el Juicer football. Furia se muestra si cabe aún más distante y silencioso de lo que es normal en él, tanto que Vicky se pregunta en su fuero interno si el joven kankoran no será un caso perdido.

 

            Vicky encabeza la marcha montada sobre BlackThunder (y no, pese a lo que pueda pensar algún Juicer que no sabe nada sobre animales, no "hace sufrir al animal", pues es  evidente que se trata de un poderoso corcel pura sangre, fuerte y resistente y con una especial empatía que le une con su dueña, a la que parece más que feliz de llevar encima sobre su silla de montar).

 

La sigue Solomon conduciendo el Montañero ATV, el vehículo modificado responde admirablemente en terreno accidentado con sus tres enormes ruedas de potente tracción mecánica. La única preocupación de su conductor es la batería, que aunque estaba al 100% en Los Alamo es previsible que se quede con la reserva al llegar al Pecos Empire, por lo que habrá que repostar por allí en algún sitio. Solomon está también preocupado por la comida, él siempre tiene mucha hambre y come fácilmente seis veces más que cualquiera de sus compañeros. Es previsible que haya agotado su parte de la comida en menos de diez días. Tiene algunas raciones conservadas más que se llevó de su piso de Los Alamo, pero cuando se agoten tendrá que pedirles comida a sus compañeros o esperar que Furia cace algo (Solomon no tiene ni idea de caza o de supervivencia en las tierras salvajes pues ha vivido siempre una vida protegida en la seguridad de Los Alamo).

 

Thomas le ha explicado a Solomon que van a reunirse con el resto de la compañía aventurera que están en el Pecos Empire, la tierra de los sin ley, buscando a una chica, María García, que fue secuestrada de un pueblecito del sur de Nuevo México hará unos seis meses.

 

La verdad es que las oportunidades de meterse en líos en un territorio como el Pecos son muchas. Solomon piensa que sobrarán oportunidades para el combate, se siente excitado sólo de pensarlo, pues su sangre alterada por las drogas le pide acción de forma imperiosa. Ya hecha de menos en buena parte las sensaciones de un partido de Juicer Football, enfrentarse a adversarios de valía, Juicers como él, claro está, en un estadio lleno hasta el tope de su capacidad y ante las cámaras de televisión que transmiten en directo el evento a todo Los Alamo y las poblaciones de los alrededores. El fluir de la adrenalina, el sentirse "en el límite", rápido y poderoso, como un dios, es una sensación casi más adictiva que las drogas en sí mismas. No es de extrañar que tan pocos Juicers intenten el proceso de desintoxicación, puesto que además tan sólo tiene posibilidades de éxito si se intenta durante los primeros años como Juicer e incluso si se consigue el ex-Juicer se queda hecho un pellejo de huesos (como un preso de un campo de concentración, toda la musculatura desaparece), estado que ya dura para siempre sin importar que antes de ser un Juicer la persona ya fuera fuerte y robusta. Debe de ser una sensación espantosa después de haber sido un poderoso Juicer quedar convertido en una piltrafa semejante. Debe ser lo mismo que ser un pájaro que se ha quedado sin alas y ya no puede volar. No es de extrañar que los Juicers, que se consideran a sí mismos verdaderos guerreros, prefieran morir gloriosamente en el campo de batalla. Los Juicers son famosos por su temeridad, pues creen fielmente en su credo de "vive deprisa y deja un bonito cadáver".

 

Thomas acompaña a Solomon en el Montañero ATV, la mayor parte del tiempo en el puesto de copiloto, pues al Juicer le gusta conducir y es bastante infatigable físicamente. Cierra la marcha en su vulgar corcel Furia el cazador, que viaja distanciado del resto del grupo, como buen solitario que es.

 

            Los días se suceden, sin nada remarcable excepto su monotonía conforme os acercáis a la cordillera Sur, que parece marcar la frontera natural, o al menos geográfica, entre Lone Star y el Pecos Empire. Solomon está cada vez más aburrido, nervioso e inquieto. La inactividad y el aburrimiento que conlleva son el talón de Aquiles de todo Juicer, ya que es lo que más afecta a sus alterados nervios.

 

A Thomas le toca sufrir la compañía de un Solomon día tras día más irritable y "a la que salta". El mago acaba también nervioso, se ha dado cuenta de que Solomon es propenso a sobre reaccionar ante el menor ruido o estímulo y eso puede ser muy peligroso si se le sobresalta. Vicky y los demás, Thomas especialmente, que son veteranos de aventuras no pueden más que alegrarse de esta inusual inactividad, preferible ante el riesgo de muerte o de quedar lisiado que supone un verdadero combate.

 

Viernes, 8 de abril de 104 PA:

 

            El terreno está ahora salpicado de colinas peladas a excepción de algunos cactus y matorrales aquí y allá. Estáis ascendiendo trabajosamente una empinada colina. Hace mucho calor bajo este ardiente sol y todos tenéis sed, aunque procuráis no gastar mucha agua, pues parece que por aquí escasea. Llegáis con esfuerzo al altozano, una corta franja de terreno llano donde os detenéis un momento para que Furia, cuyo agotado caballo se ha quedado muy retrasado, pueda daros alcance. Solomon ve por el espejo retrovisor una polvareda detrás de vosotros y Thomas mira en esa dirección con sus Macrobinoculares distanciadores láser.

 

Enfoca y amplía la escena y descubre que la polvareda es causada por una persecución: Un jinete albino con mucho maquillaje azul y una armadura muy decorada monta un caballo robot y es perseguido por media docena de tipos a caballo (estos de carne y hueso), todos llevan armaduras chatarra pintarrajeadas y con correas y cadenas colgando, y son calvos con tatuajes negros en la cara y su piel es muy pálida.

 

Los asaltantes de aspecto barbárico van armados con rifles Triax de munición explosiva y con revólveres láser Six Shooter. Mientras que el albino de la armadura elaborada lleva a su espalda un rifle de aspecto clásico Wilk’s-Remi.

 

La Ranger Vicky observa la escena usando una mira telescópica. Examina con atención al albino de larga melena y piel azul que está siendo perseguido por los seis asaltantes y le parece un enfrentamiento muy desigual. Es difícil juzgar por las apariencias, pero da la sensación de que los seis calvos tatuados son bandidos y el piel azul es un (¿tal vez inocente?) viajero. Sea como sea, el viajero del caballo robot se encuentra en clara desventaja numérica y Vicky se fija atentamente en que la armadura que lleva tiene decoraciones de un diseño muy similar a la armadura que llevaba Maximus. También Thomas se percata de esto último. Si el perseguido es un cibercaballero deberíais de ayudarle.

 

Solomon observa la situación y se sonríe de oreja a oreja con una sonrisa de lobo, piensa: “¡Por fin un combate!”. El Juicer detiene por completo el Montañero ATV y se baja del mismo con su rifle púlsar láser JA-12 en la mano. Rápidamente le quita el seguro, selecciona “púlsar” y apunta hacia los tipejos calvos, que están a unos dos cientos metros de vuestra posición. Vicky activa su medallón mágico de armadura y se concentra para entrar en acción en cualquier momento. Thomas también se baja del Montañero ATV, listo para lanzar sobre sí mismo un conjuro defensivo.

 

COMBATE CONTRA SEIS PSI-STALKERS SALVAJES:

 

Primera Melee:

 

Primer Ataque:

 

• Vicky le dispara media ráfaga de su rifle de partículas NG al primero de los jinetes salvajes, para un daño de 30 MD a su armadura chatarra.
• Thomas lanza sobre sí mismo el conjuro de Armadura de Ithan (30 MDC).
• Solomon dispara una ráfaga púlsar con su rifle púlsar láser JA-11 contra el segundo psi-stalker, el daño es 50 MD y el jinete cae derribado.
• El primer jinete intenta ver de dónde vienen los disparos, no lo consigue, pero logra ponerse a cubierto tras una roca. Los dos siguientes disparan con sus rifles de balas explosivas contra Geoffrey, media ráfaga cada uno. Uno falla y el otro es esquivado por el ágil Geoffrey. El quinto y el líder disparan ambos contra Geoffrey con revólveres láser, pero el joven Cyberknight maniobra ágilmente su corcel robótico y esquiva los ataques.
• Furia termina de subir la colina y se da cuenta de lo que pasa.

 

Segundo Ataque:

 

• Vicky dispara media ráfaga contra el líder, que falla su esquiva y recibe 30 MD y es derribado al suelo.
• Thomas dispara media ráfaga de su pistola de iones NG-57 contra el líder bandido, pero éste consigue rodar por el suelo y esquivar el disparo por los pelos.
• Solomon dispara una nueva ráfaga púlsar con su rifle de asesino modelo 12, pero falla el tiro.
• El primero dispara desde su cobertura media ráfaga de su rifle de balas explosivas contra Geoffrey, que consigue esquivar. El segundo se ha levantado y dispara balas explosivas contra Geoffrey, que logra esquivar de nuevo. Los dos siguientes disparan sus rifles de balas contra Vicky, que milagrosamente consigue esquivarlos a ambos. El quinto dispara contra Vicky con su revólver láser, la Ranger no esquiva y recibe un daño de 24 MD en su campo de armadura (restan 76 MDC), el impacto la derriba del caballo y cae al suelo.
• Furia desenfunda su pistola de iones Bandit IP-10 y dispara media ráfaga contra el tercer bandido, pero falla.

 

Tercer Ataque:

 

• Thomas le dispara la media ráfaga que le queda en su pistola de iones NG-57 al número 3 y le da de lleno, pese a que el psi-stalker salvaje intenta esquivar. El daño es 36 MD y el bandido es derribado y cae al suelo.
• Solomon dispara una nueva ráfaga púlsar, esta vez contra el 4, que falla su esquiva, para 30 MD.
• El primero dispara contra Geoffrey lo que le queda de cargador para un daño de 51 MD, el joven caballero aguanta sin ser derribado. El segundo recarga con un speed loader la mitad del cargador. El quinto recarga su revólver láser.
• Furia dispara lo que le queda de cargador en su pistola Bandit IP-10 contra el 5, que no logra esquivar, el daño es 21 MD y el bandido resulta derribado.

 

Cuarto Ataque:

 

• Solomon dispara una ráfaga púlsar contra el 2, pero falla.
• El primero recarga 8 balas de su rifle. El segundo termina de cargar su arma, para un total de 16 balas (el máximo). El 4 recarga 8 balas de su rifle TX-16.
• Furia recarga su pistola IP-10 con el último cargador que le quedaba.

 

Quinto Ataque:

 

• El primero termina de recargar su rifle. El segundo dispara media ráfaga contra Geoffrey, pero es un blanco móvil y falla el disparo. El tercero carga las primeras 8 balas de su rifle. El cuarto termina de recargar su arma.
• Solomon dispara contra el segundo, que consigue su esquiva.
• El líder dispara lo que le queda de cargador en su Six Shooter contra Thomas y le da de lleno para 24 MD (a su Armadura de Ithan le quedan 6 MDC).

 

Sexto Ataque:

 

• Solomon dispara una ráfaga púlsar al segundo, le impacta y lo revienta totalmente.
• El primero dispara contra Solomon, pero éste le esquiva con agilidad prodigiosa. El tercero termina de recargar su arma. El cuarto dispara 8 proyectiles explosivos contra Furia, atomizándolo por completo. El quinto dispara con su revólver láser contra Solomon, pero falla el disparo. El líder dispara con letal puntería contra Thomas y el Mago de la Máscara de Hierro queda hundido en un cráter, aparentemente muerto y destrozado por el terrible disparo.

 

Séptimo Ataque:

 

• Solomon dispara contra el líder gritando: ¡Cabrón hijo puta has matado a Thomas! El líder consigue esquivar el ataque.

 

Octavo Ataque:

 

• El líder recarga su pistola Six Shooter.

 

Segunda melee:

 

Primer Ataque:

 

• Geoffrey dispara una ráfaga total contra el líder, pero falla.
• Vicky recarga su rifle pesado de partículas.
• Solomon dispara una ráfaga púlsar contra el líder, atomizándolo por completo.
• Dos disparan a Solomon y uno consigue hacerle un daño de 60 MD a su armadura pesada y lo derriba, otros dos disparan a Vicky, pero la Ranger esquiva ambos.

 

Segundo Ataque:

 

• Geoffrey cambia de arma a su rifle Wilk’s-Remi, pero falla el disparo.
• El primero recarga 8 balas, el cuarto también. El quinto pone un nuevo E-Clip. El tercero dispara contra Vicky, que falla su esquiva y recibe 36 MD (restan 40 MDC), la Ranger es derribada por el impacto.
• Solomon se levanta.

 

Tercer Ataque

 

• Geoffrey vacía lo que le queda de cargador en su rifle, pero falla.
• Solomon dispara una ráfaga púlsar, pero falla.
• Los cuatro psí-stalkers salvajes supervivientes huyen.

 

Victoria aventurera muy costosa: Dos psi-stalkers muertos, uno de ellos el líder de la banda, otros cuatro han huido. En el bando aventurero ha muerto Hades Furia Ciega y a Thomas le han alcanzado con un casi letal tiro en la cabeza.

 

La moral de los psi-stalkers salvajes flaquea. Su jefe ha sido atomizado hace tan sólo unos momentos. Las armaduras de los cuatro que quedan están hechas pedazos, se les está agotando la munición de sus armas y han sido desmontados de sus caballos, se enfrentan a una Justice Ranger, un cibercaballero y un Juicer que no paran de dispararles andanada tras andanada. Estos bárbaros son salvajes, pero no son estúpidos ni suicidas. Han recibido demasiado fuerte para el posible beneficio potencial que puedan sacar (robar vuestros caballos, lo que haya en el Montañero y el alimento que puedan obtener de absorber la energía psíquica de vuestras almas al mataros, ya que de eso es de lo que se alimentan en buena parte los mutantes humanos conocidos como psi-stalkers). Así que emprenden una rápida retirada.

 

Podríais dispararles por la espalda cuando huyen, pero tanto Vicky como Geoffrey son demasiado honorables para algo así, y Solomon cree en el viejo adagio de "enemigo que huye, puente de plata". Geoffrey sube la colina a lomos de su corcel robot, se baja del mismo una vez llega frente a vosotros y se presenta y os da las gracias.

 

Nota del DM: Aquí dejo a los jugadores que desarrolléis el diálogo entre vosotros como os parezca mejor.

 

Geoffrey y Vicky atienden al pobre Thomas lo mejor que pueden. Al parecer ha recibido un tiro en la cabeza, su máscara se ha fundido y su cara parece un amasijo de cera derretida y quemada. Solomon intenta ayudar, pero no tiene ningún conocimiento médico y además está sufriendo arcadas ante el espantoso espectáculo. Con la excusa de que va a montar guardia por si los bandidos regresan se aleja de vosotros.

 

El Juicer encuentra en el campo de batalla a los asustados caballos de los dos psi-stalkers muertos, y una TX-5 Pump Pistol cargada con sus cinco balas junto a un speed loader con cinco balas explosivas, en el suelo junto al cráter que es todo lo que queda de uno de los bandidos. Reúne a los caballos y los ata junto al caballo de Furia y el de Vicky. Después se encarga de preparar un improvisado campamento en lo alto de la colina.

 

            Mientras, Geoffrey y Vicky se esfuerzan al máximo por salvar la vida del pobre Thomas. Geoffrey está muy impresionado, pues nunca había vivido un combate real y visto tan de cerca las terribles consecuencias que puede acarrear. Su armadura pesada y decorada, uno de los regalos especiales que le hicieron los cibercaballeros, está muy dañada, pero eso en estos momentos no preocupa en lo más mínimo al joven caballero, cuya única preocupación ahora mismo es salvar la vida del mago.

 

Vicky está anonadada por lo sucedido. Furia era uno de sus más antiguos compañeros de aventuras, estuvo con ella en el anterior grupo aventurero y era un vínculo con su pasado, no sólo de aventuras sino con su vida pasada en DarkGate. El pobre kankoran vivía anclado en el pasado y era muy silencioso y misterioso, pero era un buen guerrero y un valiente compañero. Otro más que se añade a la lista de compañeros que ha perdido Vicky en estos casi cinco meses de aventuras. Y luego está el lamentable estado en que se encuentra Thomas, tal vez no sobreviva. Sin poder evitarlo, la Ranger vierte lágrimas en silencio por todos sus compañeros muertos.

 

El caballero albino de piel azul se queda silencioso ya que no sabe qué decir. Le suministra morfina y endorfina a su paciente tras limpiar y desinfectar las heridas, todo el cuerpo del mago sufre quemaduras graves, y deja que el IRMSS y el RMK hagan su trabajo. Los indicadores del RMK señalan que las constantes vitales de Thomas son estables, aunque muy débiles. El caballero piensa que si sobrevive a esta noche tal vez pueda salir adelante, aunque padece un coma profundo del que es previsible que le cueste despertar.

 

Vicky se recupera de su tristeza y se siente agradecida en su fuero interno al caballero Geoffrey por su noble comportamiento. Pasáis todo el día en este campamento cuidando de Thomas. Habéis comprobado el cráter que queda donde cayó Furia, pero lamentablemente no ha quedado nada del joven kankoran, tan sólo unas pocas cenizas que tal vez sea todo lo que queda de él, eso y su caballo con algunas pocas pertenencias.

 

Solomon está impresionado, en sus tiempos de deportista ha visto luchas brutales, melees que parecían auténticas batallas campales, e incluso unas pocas muertes, más o menos accidentales, de jugadores de Juicer Football. Pero nada de eso podía prepararle para la crudeza de una lucha con potentes armas MD, cuya potencia destructiva es cien veces mayor que la del más violento de los deportes sangrientos. En parte se arrepiente de no haber sido más amable con sus compañeros, en el caso de Furia ya no habrá otra oportunidad y en el de Thomas aún no se sabe.

 

            Solomon monta guardia toda la noche sin dormir, aunque se ve obligado a tomarse más de un "tentempié". Está nervioso y alterado, su bio-computadora detecta un nivel perjudicial de estrés no de combate y le inyecta automáticamente un combinado de tranquilizantes y euforizantes. Poco a poco a Solomon le embarga una sensación de calma y bienestar inducido por las drogas.

 

Vicky y Geoffrey se van turnando toda la noche para cuidar de Thomas, aunque ambos pasan la mayor parte del tiempo en vela y conversan varias veces. Así Geoffrey averigua que Vicky es una gran amiga de Sir Maximus Claw, y Vicky se entera de que Geoffrey es un joven caballero que estudió junto a Maximus, con el mismo maestro, Clark Dalton. Geoffrey ha terminado hace muy poco su iniciación y es un cibercaballero novel, aunque él humildemente aún se considera a sí mismo un mero escudero hasta que consiga probarse.

 

El joven de piel azul manifiesta su voluntad de unirse al grupo pues es su mayor deseo viajar junto a Maximus y unirse al enorme Wolfen en sus aventuras. A Vicky se le hace evidente que Geoffrey idolatra a Maximus, y en buena parte lo entiende, pues ella misma piensa que Maximus es un gran caballero al que seguramente le espera un gran destino.

 

            La noche pasa y Thomas no solamente ha sobrevivido a su primera noche de coma, sino que muestra ligeros síntomas de mejoría. Aunque Geoffrey no se hace ilusiones, piensa que el coma va para largo. Además el mago ha perdido el ojo izquierdo, su vacía cuenca cubierta por los vendajes y un apósito y es casi seguro que desarrollará alguna clase de fuerte shock post traumático a consecuencia de esta experiencia tan terrible.

 

            Los tres, Vicky, Solomon y Geoffrey tenéis tiempo para charlar e iros conociendo mejor unos a otros.

 

(Nota del DM: Sería un buen momento para que Vicky y Solomon insertaran en sus turnos un extracto de la conversación que mantuvieron en el IRC).

 

Domingo, 10 de abril de 104 PA:

 

            Solomon encontró agua y rellenó los bidones, e incluso encontró una gran cantidad de moras y otras bayas comestibles con la que suplementar su dieta, esto no le llena en absoluto, pero le permite ahorrar unas pocas raciones. Ya quedan menos de la mitad de las provisiones con las que comenzasteis el viaje, en buena parte debido a que Solomon come como una lima (parece que lleve un Alien en el estómago).

 

            Geoffrey piensa que Thomas, aunque sigue en coma y seguirá así por un tiempo imposible de determinar, ya está lo bastante bien como para ser trasladado. Se podría improvisar una especie de camilla con unos palos, mantas y sujetarlo bien con cuerdas y correas para que no se mueva demasiado con el movimiento del Montañero ATV en el compartimiento de carga. Solomon se compromete a conducir con cuidado para que el paciente que transporta no sufra ningún daño.

 

            Os enfrentáis a un tremendo dilema moral. Tal vez deberíais de llevar a Thomas al hospital de Los Alamo, ya que el compartimiento de un todo terreno que se dirige al Pecos Empire no parece un lugar adecuado para un moribundo. Geoffrey diagnostica que el estado de Thomas es estable, aunque si el Montañero tuviera un accidente o volcara moriría casi con seguridad.

 

En un principio Geoffrey piensa si tal vez lo mejor sería llevar al inconsciente Thomas de vuelta a Los Alamo, para ingresarlo en el hospital, donde tendría mejores posibilidades de recuperarse. Solomon es el único que podría conducir el Montañero ATV para llevar de vuelta a Thomas, pero si hiciera eso correría un tremendo peligro de caer prisionero de los caza recompensas que a estas alturas el equipo habrá enviado con seguridad en su busca.

 

Vicky no quiere que le pase nada malo a Thomas, pero se da cuenta de que el estado del mago es, por el momento, estable y que si vuelven a Los Alamo eso supone abandonar a sus demás compañeros que quizá estén en peligro. Vicky está preocupada por Maximus, Jimily, Sanakin... Sintió una sensación muy extraña como un presentimiento hace unos días con respecto a Noa o Luna (sospecha que de algún modo inexplicable pueda tratarse de una sola persona), y luego está Cuchillo, que en un momento dado podría suponer un peligro crítico para sus amigos.

 

Geoffrey también está ansioso por reunirse con Maximus y ayudarle en su misión, una misión en la que Maximus ha empeñado su palabra de honor de caballero, lo cual la convierte en un voto sagrado. Tras meditar los pros y los contras decidís de modo unánime proseguir vuestro viaje, aunque con especial preocupación por proteger y cuidar al pobre Thomas procurando que su estado no empeore.

 

Miércoles, 13 de abril de 104 PA:

 

            Atravesáis un desfiladero que os permite pasar la cordillera que os separa de las Pecos Badlands. Geoffrey tiene la impresión intuitiva de que Maximus y sus acompañantes pasaron por este mismo paso de montaña hará algo más de una semana. Vicky no logra encontrar ningún rastro que corrobore esa impresión del joven cibercaballero, pero se siente inclinada a creer a Geoffrey.

 

El muchacho de piel azul y larga cabellera blanca es un tanto extraño, pero tiene en él un aire de serena nobleza, casi parece rodeado por un aura de bondad y caballerosidad. Solomon no se siente tan impresionado por el escudero, como Juicer no siente un respeto especial hacia los justicieros y hombres de ley, en cambio sí que respeta la fuerza. Y últimamente la Ranger tiene en torno suyo una especie de aura de dureza y determinación, de peligro... que resulta ciertamente intimidatoria.

 

Ella no parece haberse darse cuenta, pero en sus ojos hay una fuerza que muy bien podría hacer retroceder a un hombre menos valiente. Solomon ya había oído en los bajos fondos de Los Alamo que algunos Justice Rangers, especialmente los veteranos en la lucha contra el crimen, tienen un aura de peligro y poder similar a la de los letales pistoleros del Nuevo Oeste, en buena parte debido a su reputación.

 

            Thomas no muestra síntomas de mejoría, aunque Geoffrey ya advirtió que podía ser un coma de larga duración.

 

            En un momento dado Geoffrey presiente peligro y os ocultáis tras unas rocas elevadas. Justo a tiempo, porque menos de un minuto después una escuadrilla de unas cinco SAMAS sobrevuela el terreno por el que acabáis de pasar. Vuelan a una altura de unos cien metros. Ninguno de vosotros se ha enfrentado nunca a esas power armor, aunque tienen la reputación de ser una de las armas orgullo de la Coalición.

 

Vicky se ha enfrentado en una ocasión a Skelebots, los robots no tripulados de la Coalición, y eran duros de pelar, se imagina que las armaduras de potencia voladoras SAMAS (Strategic Armored Military Assault Suit) deben de ser superiores. Además los pilotos de esas máquinas de guerra, los RPA, tienen fama de estar entre la élite de la Coalición, los más mimados y mejor entrenados de ese poderosísimo ejército, al menos en lo que se refiere al combate con power armors (armaduras de potencia, exoesqueletos que además de tener un blindaje superior a las armaduras normales, aumentan la fuerza, velocidad y reflejos de quien las lleva).

 

Vicky se alegra de haber podido evitarlas, lo mismo que Geoffrey (que no puede evitar recordar cómo fue el combate contra los psi-stalkers y eso que eran meros bandidos). Solomon, con la típica arrogancia y desprecio por el peligro de los Juicers, no cree que esos SAMAS sean tan duros y piensa que podría haberse enfrentado a ellos. Aunque, por otro lado, tampoco quería poner en peligro a Thomas y realmente debe de reconocer, al menos en su fuero interno, que no había razón para buscar pelea innecesariamente.

 

            Pasáis tres días más de viaje tranquilo.

 

Sábado, 16 de abril de 104 PA:

 

            Avanzáis en línea recta a través del territorio del Pecos Empire por la ruta más directa hacia las coordenadas que le dejaron a Vicky sus compañeros en los mensajes que le dejaron en la recepción del hospital de Los Alamo. Vicky piensa que esa ruta les lleva muy cerca de San Antonio, una ciudad de bárbaros sin ley, y eso no le da muy buena espina. Es como una especie de vago recuerdo enterrado en su subconsciente. Al llegar a unas colinas verdes por la hierba Vicky les pide a sus compañeros que la esperen unos minutos. Después se lanza al galope hacia una de las colinas del lado Este.

Al coronar la baja cumbre descubre un pequeño valle atravesado por un riachuelo. Los hierbajos cubren lo que años atrás fueran campos de cultivo. Vicky penetra en el valle, aunque tiene que insistirle un poco a BlackThunder para que se ponga en marcha. El caballo parece reacio. Lentamente la Ranger llega al centro del valle, el suelo está ennegrecido, no han crecido demasiados hierbajos entre las cenizas de las ruinas quemadas donde hace años se alzaba una pequeña aldea...

 

Los ojos de Vicky comienzan a cubrirse de lágrimas al llegar junto a los cimientos en ruinas de una casa en particular. Se detiene un momento ante esa casa, pero no se atreve a entrar. Después sigue un corto trecho por lo que una vez fuera una calle. Sobre un muro derruido aún se lee un cartel que dice: "Oficina del Sheriff Don Juan Guerrero".

 

Vicky se baja de su negro corcel purasangre y recoge un objeto del suelo. Lo limpia de cenizas y tierra hasta que el metal brilla bajo el reflejo del sol del mediodía: es una placa de Sheriff. La angustia de Vicky crece hasta un punto en que a duras penas resulta soportable, llega a su mente una escena de casas en llamas, gritos de terror de los vecinos del pueblo, los aullidos salvajes de los horrorosos vampiros no muertos y la espantosa sonrisa de un tipejo calvo y arrugado, con una túnica roja y un enorme rubí incrustado en el lugar donde debería de haber estado su ojo derecho...

 

Embargada por la tristeza y las lágrimas Vicky deja caer la vieja placa y cae de rodillas con los puños fuertemente apretados apoyados sobre el suelo de grava y tierra. Sus lágrimas se vierten sobre la placa de Sheriff y en ese momento Vicky siente una presencia extrañamente reconfortante. Sobresaltada, se pone de pie y su corazón se acelera cuando ve la aparición que tiene ante sí a pocos metros. Es la imagen fantasmal de un hombre de porte noble, serio, pero bondadoso. Luce unos largos bigotes en su rostro, va vestido como un Sheriff del Nuevo Oeste y en su pecho luce una placa igual que la que reposa en el suelo. A su lado aparece la imagen también transparente e insustancial de una mujer sonriente de aspecto joven y los ojos cerrados, siempre los tenía cerrados, junto a dos niños también fantasmales.

 

Después por un momento aparecen las imágenes de muchas más personas, todo un pueblo asesinado. Todos miran a Vicky con serenidad, muchos le sonríen. El Sheriff alza suavemente la mano y la placa levita desde el suelo hasta la mano de Vicky. Se ve un relámpago en el cielo, acompañado por el correspondiente trueno. Momentos después rompe a llover intensamente, una verdadera cortina de agua. Los fantasmas ya no están.

 

Vicky se sube en Black Thunder, que parece más que encantado de abandonar el valle y casi sin necesidad de que la Ranger lo guíe regresa al galope junto a los compañeros de Vicky. Geoffrey la mira serio, buscando en la mirada de ella una explicación, pero sin encontrar ninguna respuesta. Solomon conecta los limpiaparabrisas y arranca el Montañero. Seguís camino bajo la fresca lluvia, un cambio no del todo malo después de días de sol y calor abrasador.

 

            Al atardecer llegáis ante un asentamiento de alguna clase, tal vez sean las afueras de la ciudad de San Antonio. Disparos y explosiones iluminan la noche. Dejó de llover hace rato, pero los ruidos del combate sustituyen ahora al de los truenos. Solomon apaga las luces del Montañero y los tres observáis con cierto asombro la escena que se desarrolla a menos de mil metros de vosotros, desde el cobijo que os proporcionan algunos árboles y rocas junto al camino. Miráis con binoculares o miras telescópicas. El muro bajo que rodea la ciudad y las fortificaciones están llenas de agujeros y vehículos en llamas. Centenares de tipos con aspecto de forajidos y malhechores, equipados con roñosas armaduras caseras y gastadas armas (NG y Wilk's en su mayoría) defienden desesperadamente sus posiciones.

 

Parece que la mitad de ellos ya han muerto alcanzados por disparos o explosiones de mini-misiles, de los que quedan la mitad parecen más dispuestos a rendirse o a emprender la huida que a proseguir la lucha. Muchos de los defensores lucen el emblema de una daga de plata, veis algunos estandartes en llamas con ese mismo emblema. A Vicky ese símbolo le suena vagamente y despierta en ella un cierto sentimiento de odio y desprecio. Os fijáis entonces en los atacantes, que parecen menos numerosos que los defensores, pero aún así parecen estar sufriendo muchísimas menos bajas.

 

En el centro avanza sin cesar de disparar un frente compacto que parece compuesto en su mayor parte por Juicers, cyborgs pesados, Headhunters y Crazies. Les cubren dos helicópteros de combate. Mientras miráis uno de ellos dispara una tremenda andanada de mini-misiles que causan estragos entre los defensores. Por los flancos avanza rápida caballería Simvan, en su mayoría montada sobre Ostrosaurios, raptores y silonars (un tipo especialmente vil de dinosaurios carnívoros que corren velozmente sobre dos patas, como los velociraptores y otros similares).

 

Los Simvan hostigan a los defensores disparando continuamente sus pistolas energéticas a la vez que cabalgan rápido (una hazaña sólo posible para consumados jinetes), esquivando muchos de los ataques que se dirigen contra ellos. Los atacantes portan estandartes con el emblema del sable... ¡Estos son los Sabre Warriors! ¡El ejército personal del legendario Emperador Sabre Lasar! El hombre que pretende unificar el territorio Pecos en una única y poderosa nación de bandidos (él fue quien acuñó el término de Pecos Empire). La batalla que estáis presenciando parece una guerra entre bandas.

 

            En un momento dado del interior de la ciudad llegan refuerzos hacia las defensas exteriores, incluyendo varios robots pesados de combate Northern Gun. Entre esas fuerzas de defensa pesadas cabalga un jinete que vocifera órdenes. Tiene el pelo corto y una expresión de locura en su rostro y porta un enorme vibro cuchillo que utiliza como bastón de mando.

 

El contraataque parece surtir efecto y los atacantes, como si ya lo tuvieran previsto, inician una retirada ordenada sin sufrir más que unas pocas bajas. Varios ciborgs pesados de los Sabre Warriors se dirigen hacia vosotros corriendo mientras se retiran y disparan. Son más rápidos que Sanakin y corren más veloces que un caballo de guerra. Varios de ellos llegan ante vosotros y os apuntan con sus armas pesadas. El más enorme de ellos, que luce un rostro humano al descubierto (al contrario que la mayoría de los Full Conversion 'Borgs que suelen cubrir su cabeza con máscaras biónicas blindadas de aspecto feroz), tiene un cuerpo biónico con un blindaje asombrosamente pesado y porta un estandarte con el símbolo del sable.

 

Se para ante vosotros y con una voz amplificada biónicamente pregunta: "¿Aventureros?" - os sonríe con sorprendente calidez para un ser que es 95% mecánico. - "No creo que os queráis quedar en territorio de Warlord Don Marco después de la que hemos organizado. Debe de estar hecho una furia. Si apreciáis en algo vuestras vidas os aconsejo que vengáis con nosotros." - Diciendo eso anima al resto de su pelotón a seguir corriendo, posiblemente hasta un punto de reunión predeterminado para las tropas y sale disparado por el camino por el que habéis venido.

 

                                                       Fin del Turno 24 de Rifts.

 

                                                                  DarkMaste.

Cuchillo Rojo: Rifts: Turno 24:

 

Tras la embriagadora lluvia, cientos de flores adornan el suelo... Chupux me observa y yo le observo a él... Así pasa un buen rato, no sabría decir cuanto... nos damos las gracias mutuamente en silencio, si no hubiésemos estado luchando uno al lado del otro, posiblemente... él se habría hecho con el control.

 

Me despido de Chupux y me giro y ando tranquilo hacia el lado. El reflejo en el agua es claro y puro... Bebo un sorbo de agua, siento como el agua helada, pura y cristalina recorre mi garganta. Cierro los ojos, una grata sensación de paz me invade. Permanezco en la oscuridad un buen rato, me siento bien. Lentamente me incorporo, me duele todo. Tengo vendajes por todo el cuerpo, parece que los vampiros me dieron una buena paliza... Aún estoy algo confuso, recuerdo vagas imágenes del combate. Flashes, acuden a mi cerebro y me recuerdan el desafortunado encuentro. Mi cuerpo suda y me siento muy mal. Intento levantarme, pero algo me lo impide, apenas puedo ver y siento convulsiones. Estoy seguro de que vomito... de nuevo me siento pesado y vuelvo a perder la consciencia.

 

Una voz martillea mi cabeza... Un sabio de la antigüedad dijo: “El alma es inmaterial y simple, inmortal por naturaleza. La unión de alma y cuerpo es un estado accidental y transitorio... incluso podría caracterizarse como antinatural, ya el lugar propio del alma no es el mundo terreno y su actividad principal es la contemplación. Mientras el alma permanece unida al cuerpo, su misión principal es la de purificarse y prepararse para la contemplación. EL envilece el alma... y que mejor manera de ayudar a los demás, es evitarles el mal trago del viaje... Lo hago por su bien... Luego la voz cesa.

 

Viernes, 8 de abril de 104 PA:

 

Amanece, la luz me da de lleno en la cara, llevo varias horas despierto, aunque con los ojos cerrados. Siento hormigueo por todo el cuerpo, quizás por el mordisco del vampiro. Me siento un poco preocupado, no me gustaría convertirme en una “cosa” de esas.

 

Me levanto de la cama y busco la armadura, está completamente destrozada. Tendré que repararla, porque no tengo otra a mano... el más leve impacto la destruiría, así que cojo esparadrapo y cuerdas y ato las escasas piezas de armadura MDC que quedan. Salgo de la tienda, aún un poco tambaleante. Maximus y Jimily se encuentran fuera, Jimily tuerce un poco el rostro al verme, parece un poco extrañado... Intento no caerme, me siento un poco mareado. Planto los dos pies en el suelo, y me miro los pies, lentamente subo despacio la mirada y finalmente, miro a Jimily...

 

Cuchillo: “¿Qué pasa? ¿Qué miras?... Ahhhh... la armadura... ¿Tienes una mejor para dejarme?... ¿No?... Entonces no te rías...”

 

Me siento bastante molesto, no me gusta que se rían de mí... le miro bastante enfadado, aunque hoy me siento bien, mis “neuras” parecen haber remitido un poco.  Maximus me pregunta sobre lo que recuerdo del combate, como es habitual me hago el “loco” y cambio de tema... Les digo que no recuerdo gran cosa, y les pregunto por los demás. Me dicen que Noa desapareció a través de una especie de portal. Mouser me lo cuenta bastante apenado: se abrió un círculo de luz dorada y una gigantesca mano dorada la cogió suavemente y se la llevó. Momentos después el portal solar se cerró y Noa ya no estaba con nosotros. Me siento terriblemente enfadado, estoy a punto de reventar... me alejo un par de metros del campamento y maldigo a Apolo con todas mis fuerzas, por haberse llevado uno de mis juguetes más lindos... le odio... le odio...

Cuando vuelvo en mí, veo que Mouser se aleja lentamente, con paso melancólico. Salgo a correr detrás suya, pero Maximus me agarra del brazo al pasar por su lado y me dice que es elección suya. Ha decidido marcharse y no podemos hacer nada por evitarlo.

 

Le doy un manotazo y me quito de la presa que me hacía en el brazo... Me siento muy enfadado y terriblemente molesto. En pocos minutos me he enterado de que me han abandonado dos de mis queridos juguetitos. Miro a Maximus a los ojos, a pesar de la diferencia de tamaño y le digo que no vuelva a ponerme la mano encima... Si sabe lo que le conviene...

 

La tensión podría cortarse con un cuchillo, nunca mejor dicho... jejejejejeje... pero... en fin... Ya he perdido demasiados juguetes como para tener que partir otro... Sonrío, como si le hubiese gastado una broma... Estoy ansioso por encontrar nuevos juguetitos... deseo marcharme lo antes posible de este asqueroso lugar. Arranco el hovercoche, el pobre trasto, parece que se alegra de que su legítimo dueño lo conduzca de nuevo y me saluda con un suave ronroneo de su motor. A pesar de todos los golpes que ha recibido... sigue funcionando bien.

 

Voy abriendo la marcha y los tres compañeros proseguimos el viaje. Dejamos atrás ese asqueroso bosque y volvemos a un terreno pedregoso y árido, que tan buenos recuerdos me trae...

 

Domingo 10 de abril de 104 PA:

 

Llevo varios días sin probar bocado, estoy hambriento a más no poder... Vamos avanzando por la pradera. A lo lejos, veo una columna de búfalos que avanza en nuestra dirección. Sin pensármelo dos veces, aprieto a tope el acelerador y me lanzo contra ellos... igualo la velocidad a la de uno de los búfalos... sisisisissisi... ¡¡¡comida!!! Sin pensármelo dos veces,  abro la puerta del conductor... fijo el volante, tomo el cuchillo y lo pongo en modo vibrofilo... me preparo y... salto sobre el desdichado bicho...

 

¡¡¡YYYYYEEEEEEEHAAAAAAAAAAAAA!!! Al caer sobre él, me apresuro a rebanarle el pescuezo, un borbotón de sangre cae al suelo. El bicho y yo rodamos por el suelo... La hovermoto se acerca a toda velocidad, puedo ver el polvo que levanta. Me preparo, Maximus se inclina y tiende su mano... aprovecho y salto, agarrándome a su brazo. Él acelera a tope, y me deja junto al hovercoche, que sigue desplazándose a buena velocidad.... ¡¡¡¡¡Yehhhhhhhhhhhhhhhhhaaaaaaaa!!!!! ¡¡¡¡EHHEHEHEHEHEHHEHEHEHEHEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!

 

Me lanza dentro del coche, y quedo sentado delante de los mandos... doy un frenazo y paro el hovercoche... ¡¡¡YUUUUUUJUUUUUU!!!

 

Me bajo del hovercoche, tremendamente excitado por el subidón de adrenalina. Grito: “¡¡¡Otra vez!!! ¡¡¡Otra vez!!!” Volvemos atrás los cientos de metros que nos separan del búfalo con la garganta completamente abierta. Tras despiezar de forma un poco rudimentaria el bicho, asamos el búfalo. No había probado bocado desde hace días, me pongo hasta las orejas... la carne no durará mucho sin conservantes, así que lo mejor que podemos hacer es llenar la tripa. Siisisisisisisisisisisisi...

 

Me encuentro bien, muy bien, ya tengo ganas de encontrar nuevos juguetitos... ahora sólo me quedan dos... bueno tres... pero uno de ellos no tiene pilas...

 

Miércoles, 13 de abril de 104 PA:

 

Tras unos cuantos de días, llegamos a una hermosa pradera, dejamos atrás la aridez anterior y comenzamos a divisar arroyuelos y bosquecillos. Hay arbustos a los lados de la senda que seguimos, vamos a buena velocidad, cuando de repente, salen a nuestro paso un grupo de bandidos de aspecto zarrapastroso armados con escopetones Big Bore de Bandito Arms, unas armas de enorme calibre. En total seis tipejos, uno de ellos parece distinto... como una especie de jefe... El jefe viste con una armadura blanca con un símbolo satánico en rojo pintado en su placa pectoral. El individuo tiene la cabeza afeitada en la que se ven claramente sus cilíndricos implantes cerebrales M.O.M. El bandido Crazy del símbolo satánico adopta una peliculera pose orgullosa y exclama: - "¡Alto ahí peregrinos! ¡Temblad ante la furia de Luz Oscura y sus furibundos Caballeros Infernales! Vuestras almas padecerán un tormento eterno... ¡a menos que nos hagáis entrega de vuestros vehículos!"

 

Siento el palpitar de mis sienes... esto era lo que nos faltaba... por momentos, me siento más y más furioso... antes de bajar del coche, veo de refilón mi rostro en el espejo retrovisor, mis ojos están inyectados en sangre y siento como la bestia está a punto de hacerse con el control... Esta vez no pienso retenerla... estoy harto de que intenten hacer daños a mis juguetitos... ¡¡¡LO ODIO!!!

 

Poso el hovercoche sobre el suelo. Mi respiración es rápida y muy sonora, casi como un gruñido... Grrrrrrr... grrrrrrrrrr... grrrrrrrrrrrr... Activo mis armas, el cuchillo y las vibrogarras están sedientos de sangre...

 

El líder bandido me mira con la boca abierta: - "¡Vos! ¡Vos sois el Heraldo del Dolor y del Éxtasis! ¡Os conozco, os he visto en mis sueños!" - Y diciendo el pobre infeliz se postra de rodillas en señal de sumisión ante mí. Los otros bandidos se miran dubitativamente entre ellos y finalmente, aparentemente más movidos por el miedo que por el fervor, también ellos se ponen de rodillas. Siento como mi furia se marcha gradualmente, y lentamente me siento un poco más contento, mi característica sonrisa vuelve a mi rostro. Mis sienes dejan de palpitar y digo: "¡Anda... qué juguetes más obedientes!" – Y sonrío satisfecho a mis compañeros. Mientras están allí arrodillados, se me ocurre que tal vez podrían indicarnos el camino... Sisisisisisisisisisisi, si es que soy un genio... jejjejejejejee... oeeeeeee... ooooeeeeeee...

 

Me acerco al Crazy de blanca armadura y me inclino sobre él... acto seguido digo: “Tenemos que ir a un mercado que está a unos días de viaje de aquí. ¿Podéis indicarnos si vamos bien por este camino?” El jefe sigue arrodillado,  y dice: "¡Oh, sí, vuestra Eminencia! ¡Nosotros os escoltaremos hasta allí, os protegeremos con nuestras vidas!” Una amplia sonrisa, de dibuja en mi cara, le ordeno que se levante. Y el pobre se levanta de un salto. Pongo mi mano sobre su hombro y le digo... “Me sirves bien... estoy muy contento”... El Crazy agacha la cabeza, y dice: “No merezco esas palabras, Su Malignidad... no soy digno de tales palabras, Luzbel, ilumínenos con su oscura sabiduría, muéstrenos el camino, todopoderoso profeta del mal…

 

Durante los siguientes días, los bandidos nos acompañan y en todo momento me tratan como un ser superior, me encanta tener unos juguetitos tan agradecidos... Por fin alguien se da alguien cuenta de lo que realmente valgo... Incluso corean mi nombre cuando toco la guitarra...

 

Me encantan estos nuevos juguetitos... Tal vez podría enseñarles a tocar la guitarra o a cantar y montaríamos un grupo... Fijo que arrasábamos... jajajajaja... Larga vida a los Caballeros Infernales...

 

Paso varios días pensando en una nueva letra para una canción:

 

¡¡Aaaaaaahahahahahaaaaaaaaa!!

 

From the night of the times,

in the darkness...

I have returned to look for

a gift for the humanity...

 

And you don't pronounce my name

although well you know who am...

Of your arrogance and your it hates

the reflection to me gives me to be able to...

 

¡¡Ahahahahahahahhhhhhhaaaa!!

 

I am the echo of your fury

the mirror in that...

your avarice is reflected and it gives me to be able to...

 

I flow through the lives

that they are not able to know

where the exit to find

that he opens the door of the wrong and the well...

 

They come toward me...

and allow me to live in you...

I am the desire

the dark thing that there are in you...

 

Sábado, 16 de abril de 104 PA:

 

Luz oscura, nos comenta que tardaremos poco en llegar al mercado. Miro contento a mis juguetitos, Maximus y Jimily... Estoy deseando terminar mi nueva canción... jejjejejejeeje... Por cierto...

 

Acciones Futuras:

 

• Comprar una armadura nueva... Chachi, chula, guay...
• Buscar información sobre María.
• Tal vez, irme con mis nuevos juguetitos, me encantan los caballeros infernales... jajajajaja.

Thomas Covenant: Rifts: Turno 24:

 

Algo muy fuerte me ha despertado del sueño, cierro los ojos para concentrarme, siento como la energía de una persona muy cercana a nosotros está disminuyendo, hasta el punto de desaparecer. Me recuerda mucho a la energía de Noa, pero si ella está muerta. Qué horror, está muriendo, Dios, ¿qué está ocurriendo allí? Joder qué injusta es la vida, ya no noto nada de ella. Ha muerto, dan ganas de mandarlo todo a la mierda, pero seguro que ella querría que siguiéramos luchando, nunca te olvidare Noa, hasta siempre.

 

Tengo el presentimiento de que este viaje va a marcar un antes y un después en mi vida, el tiempo de arrepentimiento lo hemos dejado atrás al igual que Los Alamo, el viaje ha comenzado y no parará hasta llegar a su destino, llevándose por delante a cualquiera de nosotros.

 

Ahora soy yo el único mago del grupo, la verdad es que me entristece que la gente muera y nos deje un vacío dentro. Se nota en la cara de Solomon que hemos dejado Los Alamo, pues ahora no se esconde cada vez que vemos a alguien. La noche se echó pronto encima de nosotros por lo que tuvimos que acampar en el primer lugar que era apropiado para pasar la noche.

 

Como es normal hicimos un fuego para hacer de comer, o mejor dicho, para calentar las latas de conservas frías. No nos podemos quejar ya que por ahora no nos falta y ya es mucho pedir en estos sitios. Solomon sigue comiendo mucho, como siga por este camino va a acabar con su parte de comida y lo que es peor con la nuestra. Después de comer tocaban los turnos de guardia, hicimos turnos dobles para no tener problemas, ya que una vez nos atacaron cogiendo desprevenido al que estaba haciendo guardia y no queremos que vuelva a ocurrir. Me tocó hacer la segunda guardia con Vicky, aprovechemos para hablar entre otras cosas de:

 

<Thomas> Vicky ¿Sabes lo que yo pienso de los Juicers?

<Vicky> Dime.

<Thomas> Yo creo que hay que tener una razón muy fuerte para convertirse en Juicers, porque cuando eres Juicer cambias completamente, yo creo que es como las religiones.

<Vicky> ¿A qué te refieres con lo de las religiones?

<Thomas> Pues que tienen una cultura propia, son muy suyos y se creen que lo suyo es lo mejor y lo de los otros es peor.

<Vicky> Estoy de acuerdo contigo en lo de que hay que tener una razón fuerte para convertirse en Juicer. Teníamos un ejemplo claro en Goldman, se hizo Juicer para vengar a su novia de la banda de Cuchillo Sangriento porque la habían matado o más cerca todavía tenemos a Solomon que se había hecho Juicer para llegar a lo más alto de su deporte y ser el mejor.

<Thomas> Es verdad.

 

Fue una conversación muy interesante, pues había mucho de que hablar. La conclusión que saqué es que Vicky parece que ha cambiado un poco, no me parece la misma persona que antes. La vida la ha tenido que tratar muy mal, se ha vuelto más fría y dura, pero así y todo creo que es la persona en la que más puedo confiar y la que nunca me fallará.

 

Después de la guardia me acosté en mi saco para descansar. Nos despertamos muy temprano, todavía no ha salido el sol, desayunamos y recogemos el campamento, cuando el sol sale por el horizonte de una montaña ya estamos en marcha, como ya es de costumbre Vicky encabeza el grupo montada en su caballo y Solomon y yo viajamos en el Montañero, cerrando el grupo Furia. Solomon todavía no sabe mucho de nosotros, por lo que se pasa todo el viaje haciéndome preguntas:

 

<Solomon> Thomas, ¿tú sabes a dónde nos dirigimos?

<Thomas> Claro, hace tiempo que dejé de ser un incrédulo. Nos dirigimos hacia Pecos Empire.

<Solomon> Y... ¿para qué vamos allí?

<Thomas> Pues para reunirnos con el resto de la compañía aventurera, somos más de los que estamos aquí, ya los conocerás

<Solomon> ¿Y qué se supone que estáis buscando?

<Thomas> Estamos buscando a una chica que fue secuestrada de un pueblecito del sur de Nuevo México.

<Solomon> ¿Cuánto hace que desapareció?

<Thomas> Pues hará como ocho meses.

<Solomon> ¿Y cómo se llamaba?

<Thomas> María García. Por hoy ya sabes bastante, dejemos las preguntas para otro día.

<Solomon> Venga.

<Thomas> Y tranquilo, que tendrás oportunidades de vivir nuevas experiencias, yo diría que mucho más fuertes de las que hayas vivido.

<Solomon> Jejejeje...

 

Me encanta viajar en el Montañero ATV, es un espléndido vehículo, muy seguro y cómodo. A veces le pido a Solomon que me deje llevarlo, pero se nota que es un tipo duro pues aunque esté cansado sigue llevándolo él. Sólo insistiendo mucho consigo convencerlo para conducir yo un rato. Cuando voy de copiloto aprovecho para estudiar un poco sobre hechizos, poco a poco quiero volver a tener una continuidad en la lectura, ya que tengo que recuperar todo el tiempo perdido, y eso no es fácil. Solomon se ríe de mí al verme leyendo cosas de magia y dice que no vale para nada, que estoy perdiendo el tiempo, que me ponga a hacer ejercicios físicos. En cambio cuando yo voy de piloto, Solomon le toca ir de copiloto, eso quiere decir que va sin hacer nada. Entonces es cuando va atento de todo lo que ocurre en el exterior...

 

<Solomon> Silencio, Thomas, ¿has oído ese ruido?

<Thomas> Sí claro, era el viento arrastrando un matorral...

<Solomon> Eso no digo yo, creo que alguien nos está siguiendo.

<Thomas> Tenemos un problema cada uno... el tuyo es que estas nervioso y el mío es que me vas a poner a mí también.

<Solomon> Necesito hacer algo.

<Thomas> Ya tendrás tiempo, te lo aseguro, ponte a leer.

<Solomon> No me hagas reír, jejeje.

 

Este es el panorama que tengo que soportar durante unos días, si no fuera por Solomon todo sería perfecto, pues el viaje está siendo muy tranquilo y hemos entrado en una monotonía que aunque generalmente no sea buena, es preferible esto a tener un verdadero combate con cualquier enemigo. Saldríamos mal parados de un combate en estos momentos. Es mejor primero unirnos con los demás del grupo y luego lo que venga bienvenido sea.

 

<Thomas> Qué suerte estamos teniendo Solomon.

<Solomon> No me jodas, Thomas, ¿a esto le llamáis aventura?

<Thomas> Algún día lo comprenderás.

<Solomon> Esto es aburridísimo.

 

Hasta Vicky se acerca al Montañero para decirme...

 

<Vicky> Qué suerte estamos teniendo, Thomas.

<Thomas> Estoy de acuerdo contigo, se agradece un viaje así...

<Vicky> De todos modos, hay que tener los ojos muy abiertos.

<Thomas> Sí.

<Vicky> ¿Cómo se encuentra Solomon?

<Thomas> Se está volviendo muy pesado, pero se podrá aguantar.

<Vicky> Me voy a mi puesto.

<Thomas> De acuerdo.

 

Viernes, 8 de abril de 104 PA:

 

Empezamos el día en un terreno llano por donde Solomon me dejó conducir, pero muy pronto lleguemos a un terreno de poca vegetación, algunos cactus y matorrales desperdigados por ahí, y sobre todo muchas colinas y rocas. Nos tocaba subir una dura colina empinada, por lo que Solomon se pone al volante y yo de copiloto. Prefiere conducir en este terreno él ya que es mejor conductor que yo. Hace un día muy caluroso y el cuerpo te pide mucha agua. Ya se están agotando los bidones que llevábamos de aprovisionamiento. Vicky nos indica que un poco más adelante hay un pequeño llano donde podemos para a descansar y esperar a Furia, que se está quedando atrás. A esto que Solomon me dice...

 

<Solomon> ¡Mira Thomas la polvareda de humo que hay detrás nuestra, nos están persiguiendo!

<Thomas> Tranquilo Solomon, déjame que mire con mis Macrobinoculares distanciadores láser para asegurarnos.

<Solomon> ¿Qué ves? Venga dímelo.

<Thomas> Espera que tengo que enfocar un poco más la escena. No, no nos están persiguiendo a nosotros. Están persiguiendo a un jinete.

 

Media docena de tipos a caballo están persiguiendo al jinete azul montado en su caballo robot, me he fijado en que el jinete llevaba una armadura muy decorada. Esa armadura me he muy familiar, ya recuerdo, es parecida a la que llevaba Maximus. Miro a Vicky para ver si se ha dado cuenta de ese detalle y me hace una señal con la mirada de que sí. Entonces tenemos que ir a ayudarle, ya que está en inferioridad y necesita nuestra ayuda. Me concentro para poder recordar cualquier hechizo que me haga falta usar y saco mi pistola para poder atacar.

 

Tenía ganas de tener un combate por el simple hecho de probar la Armadura de Ithan, ese hechizo lo aprendí en el Gremio de Magia. Los magos no tenemos armadura por eso tenemos que aprender hechizos que nos sirvan de armadura por lo que yo me lo voy a hacer sobre mí mismo. Como este hechizo ya lo tengo controlado no necesito mucho esfuerzo. Ahora ya que estoy protegido tengo que atacar, me ha llamado mucho la atención un bandido que lleva la armadura negra. Voy a dispararle a él, mierda, el cabrón lo ha conseguido esquivar. Ahora te vas a enterar, voy a dispararle la otra media ráfaga que le queda a mi pistola, pero al de antes no lo veo, hay mucha humareda en el suelo, debe de estar por ahí, no consigo verlo. No importa, tengo otro a la vista, te vas a enterar, toma de lleno. Qué bien se siente uno cuando consigue darle al enemigo. Ahora tendré que recargar, pero antes de que me diera tiempo a cualquier movimiento recibo un fuerte impacto de lleno en el pecho, Dios qué es esto. Menos mal que tenía la Armadura de Ithan si no me hubiera reventado, no van a acabar tan fácil conmigo... Qué es eso, no...

 

No siento nada... ¿Dónde estoy?... ¿Qué es lo que veo?... Veo a mis compañeros... Están luchando con esos bandidos... ¿Dónde estoy yo?... Hay un cráter en donde yo me encontraba... ¿Estoy muerto?... Qué me está pasando...

 

<Thomas> ¿Quién eres tú?

<Noa> ¿No me recuerdas Thomas?

<Thomas> Eres tú Noa... pero tú, no puede ser.

<Thomas> ¿Estoy muerto?

<Noa> Sigue luchando Thomas... no te rindas. Me voy.

<Thomas> Espera, espera, espera Noaaaaa.

 

Por un instante vuelvo a sentir mi cuerpo, lo sé porque siento dolor. Me duele mucho la cara, estoy desorientado, no sé lo que está pasando fuera... Ahora escucho voces, parece ser Vicky, ha venido a salvarme y ayudarme, no consigo reconocer la otra voz, no sé quién podrá ser. Están hablando de llevarme con ellos de aventura, escuchadme, escuchadme. Yo prefiero volver a Los Alamo al hospital para poder recuperarme más pronto y mejor, no pueden escucharme. Quizás sólo pienso en mí y quiero que lo abandonen todo para llevarme a mí a Los Alamo, quizás es que tengo miedo a morir y volver a mi otro cuerpo, por eso le doy tanta importancia a que me lleven al hospital y no seguir con ellos de aventura.

 

Acciones Futuras:

 

• ¿Acciones futuras? Mi futuro no está en mis manos, pero a poder elegir:
• Recuperarme del coma.
• Volver a ser todo como antes.
• No tengo nada más importante que pedir.

Vicky_Mor: Rifts: Turno 24:

 

Lunes, 4 de abril de 104 PA:

 

            Hemos dejado atrás el territorio de Los Alamo y seguimos avanzando. Parece ser que Solomon se va adaptando mejor a las circunstancias y al grupo, a pesar de que su actitud es a veces hostil y distante, cosa a la que no le doy demasiada importancia, ya que a pesar de todo él es un Juicer, su actitud me recuerda a veces y a menudo a Goldman, otro Juicer como él, al que también le costó su tiempo adaptarse al grupo. Era algo antipático y no confiaba en nadie, fue poco a poco como empezó a ganar confianza y a unirse más, de algún modo, al grupo. Así que, seguramente, cuando pase el tiempo, Solomon haga lo mismo.

 

            En la pasada guardia, Thomas y yo estuvimos comentando ciertos aspectos de la actitud de Solomon. Thomas dice que los Juicers son así, que tienen una forma de ser muy suya. Ellos mueren en pocos años y el que se convierte en Juicer es por alguna causa muy dura, dado el precio que tienen que pagar por ello. Y tiene razón, en realidad es normal que no les cueste arriesgarse ni les importen muchas cosas, debido al corto plazo de vida que les toca vivir.

 

            El que también me preocupa es Furia. Parece haberse encerrado en sí mismo. Apenas habla con nadie y se muestra distante. Pese que conmigo ha compartido algunas palabras, pero las justitas y parece estar sumido en su mundo de pensamientos. No sé qué le pasa. Quizá se sienta deprimido por alguna razón, no lo sé, o quizá es que ésa sea su forma de ser y en ese caso, no tengo nada que hacer.

 

            Seguimos avanzando.

 

            Montada sobre BlackThunder, encabezo la marcha de la comitiva. Me sigue Solomon con el Montañero ATV. La verdad es que el Montañero responde admirablemente al terreno después de sus modificaciones y Solomon parece muy orgulloso de llevarlo. Lo único que le preocupa, por lo que nos comenta, es la batería del vehículo. Así que llegando al Pecos Empire deberemos parar a repostar en algún lugar. Bueno, lo único no, otra de sus grandes preocupaciones, y más que la de la batería diría yo, es la comida. Puesto que él come por siete personas o más incluso. Y muy posiblemente, haya agotado su parte en menos de diez días. Aunque él va cargado con algún que otro alimento, que cogió antes de salir, no creo que eso sea suficiente para el Juicer. Quizá Furia pueda cazarle algo.

          

Al lado de Solomon, dentro del Montañero se encuentra Thomas y Furia cierra la marcha. Como siempre apartado de los demás. Él va a su aire y parece que está en otro mundo.

 

Los días van pasando, mientras seguimos avanzando. La monotonía empieza a hacer mella en algunos de nosotros, mientras delante de nuestros ojos se va levantando la cordillera sur, que bien parece marcar la frontera entre Lone Star y el Pecos Empire.

 

En el rostro de Solomon, se percibe un aburrimiento total. Su inquietud por entrar en combate es exagerada. Parece que su sangre hierva y está muy susceptible. Ese es el carácter de un Juicer y a Thomas parece haberle tocado la peor parte, puesto que él es quien acompaña a Solomon durante la travesía. Lo que hace que Thomas a veces, pierda también los nervios a causa de la inestabilidad de Solomon. Sin embargo, a Thomas y a mí, nos parece estupenda esta tranquilidad, ya tendremos tiempo de luchar. Quizá eso es lo que Solomon no puede comprender todavía. Dado que no ha tenido oportunidad de enfrentarse a ningún combate, no puede saber lo duro que resulta después de todo. Pero sin duda, lo sabrá tarde o temprano.

 

Seguimos avanzando hacia el temido territorio. Llevamos 4 días de viaje, sin novedad al frente.

 

Viernes, 8 de abril de 104 PA:

 

El paisaje es entre desértico y fértil, colinas peladas, tierra vasta y paciente. Luego, de nuevo, las estribaciones de la sierra, paredes de roca de diferentes colores en que las piedras han escrito la historia de su origen. Y algún cactus es todo lo que tenemos al frente.

 

La vegetación define el paso, pero lo sorteamos, una enorme grieta ahora, la rodeamos. Un gran desnivel, buscamos el punto más benigno y lo subimos con la reductora. Una laguna de arena blanda, la pasamos a gran velocidad para no quedar atrapados. Así vamos superando todas las pruebas. Sabemos que tiene que haber un camino más fácil, pero esto es como todo, hay que saber por dónde. Llevábamos más de media hora avanzando, parecía que estaba cerca, pero se resistía a ser alcanzado. Por fin llegamos, el esfuerzo merece la pena.

 

Somos un grupo lleno de ánimo, enterados de todo este asunto, con una buena camioneta perfectamente equipada.

 

Así que decidimos emprender la empresa de descubrir donde estaba el lugar que buscábamos. Una empinada colina se erguía delante de nosotros.

 

El acceso no fue fácil, ya que para llegarse no hay carretera, ni siquiera camino de tierra.

 

El calor era agobiante, pero la belleza del lugar compensaba todas las molestias. A pleno mediodía, estábamos llegando, pero había que subir la empinada cuesta.

 

Había reptiles arrastrándose y extendiendo las zarpas.

 

Así avanzamos por la empinada cuesta, parecía como si todo el calor del mundo se hubiera venido sobre nosotros para quemarnos las cabezas. Era una tortura, pero avanzábamos.

 

Aunque tenemos mucha sed, procuramos no beber demasiada agua, ya que no disponemos de gran cantidad y será mejor procurar no gastar demasiada, ya que nos encontramos en un territorio en el que será difícil encontrarla.

 

Seguimos subiendo a marchas forzadas y estamos muy cansados, hace un sol de justicia, lo que no nos ayuda a que subamos despejados. Al llegar al altozano, paramos a reposar unos instantes. Además, así Furia puede darnos alcance. Parece ser que se ha quedado un poco distanciado del grupo, y su caballo parece exhausto, así que le esperaremos y de paso, descansamos aunque sea unos instantes.

 

Solomon informa de que detrás del vehículo se observa una polvareda, Thomas, toma sus macro binoculares y mira en esa dirección. Yo hago uso de la mira telescópica y hago lo mismo. Al parecer se trata de una persecución. Una especie de jinete albino y muy pintado de azul monta un caballo robot, y es perseguido por seis tipos a caballo, que portan unas armaduras algo desaliñadas, muy pintarrajeadas y sujetas con correas y cadenas que cuelgan de ellas.

 

Los tipos son calvos y muy pálidos, llevan una especie de tatuajes negros en la cara. Van armados. Sus armas son rifles Triax de munición explosiva y pistolas láser Six Shooter.

 

El jinete azul parece estar algo en desventaja en este aspecto, pues su única defensa parece ser un modesto rifle Wilk’s Remi, algo inferior a las armas de los bárbaros atacantes. El albino está en desventaja de todas, todas. Y aunque resulta difícil juzgar por las apariencias, el jinete azul, parece ser un pobre viajero inocente.

 

Y además de encontrarse en desventaja, su armadura, me resulta familiar. Por alguna razón me recuerda a la de Maximus, es muy similar. Thomas parece hacer un comentario a esto último, parece que a él también le recuerda al wolfen. Así que, si se trata de un cibercaballero, no puedo hacer otra cosa que ayudarle, en honor a Maximus.

 

En el rostro de Solomon, se dibuja una enorme sonrisa. Su sangre parece estar hirviendo de ganas de entrar en combate. Hay que ayudar al caballero azul de blancos cabellos. Atacamos.

 

Solomon rifle en mano. Yo, activando medallón mágico. Thomas lanzando conjuros de protección.

 

El combate es fuerte. Ellos parecen en ocasiones invencibles. Pero… hay un momento en el que un disparo poco fortuito alcanza al kankoran Furia. Su cuerpo queda atomizado por completo. Thomas también ha sido alcanzado. Y siento un escalofrío por todo mi cuerpo.

 

El combate sigue.

 

Finalmente, los acechadores psíquicos emprenden retirada. Su líder ha muerto y sus armaduras no aguantarán mucho más. Lo único que pueden sacar son los caballos y la absorción de nuestra energía, puesto que de eso se alimentan estos mutantes humanos llamados psi-stalkers. Así que inteligentemente por su parte se retiran huyendo. Podríamos atacarles por la espalda y acabar con ellos, pero eso sería un ataque a traición que va contra mis principios y… a enemigo que huye, puente de plata.

 

El caballero azul de blanca melena sube hasta la colina, se acerca con curiosidad hacia el grupo aventurero, desmonta y se presenta.

 

[Geoffrey]       Saludos viajeros, muchísimas gracias por la ayuda.

 

Enciendo un cigarrillo y miro a Geoffrey.

 

[Vicky_Mor]    Hum.

 

[Solomon]       Saludos.

 

[Geoffrey]       Mi nombre es Geoffrey Mournfolk... Sir Geoffrey Mournfolk.

 

[Vicky_Mor]    Yo soy Vicky Morrisona.

 

[Solomon]       Yo Solomon King.

 

Geoffrey nos hace una reverencia.

 

[Vicky_Mor]    Hola amigo. ¿Qué te trae por aquí? ¿Qué eran esos bichos? ¿Y por qué te perseguían?

 

[Geoffrey]       Pues...

 

Geoffrey se queda pensativo unos segundos.

 

[Vicky_Mor]    Es que...  Me llamó la atención tu armadura... Sin duda me recordaste a  alguien que conozco...

 

[Geoffrey]       Mis asaltantes no sé muy bien qué eran... pero supongo que querrían                              robarme o incluso algo peor...

 

[Vicky_Mor]    Es que por estas tierras... cualquiera sabe.

 

Sonrío a Geoffrey, sus ojos me transmiten buena energía, hay algo que hace que confíe en él.

 

Geoffrey y yo observamos la colina y vemos un enorme cráter en el suelo

con un cuerpo dentro.

 

[Geoffrey]       Vuestro amigo tiene muy mal aspecto.

 

[Vicky_Mor]    Sí, es Thomas. Le han alcanzado, tenemos que ayudarle enseguida.

 

[Solomon]       Uf, pues no hemos salido muy bien del encuentro (mirando los restos de Thomas y Furia).

 

Geoffrey desmonta de su caballo y se acerca al cuerpo casi destrozado.

 

[Vicky_Mor]    ¿Pero se salvará? ¿Qué opinas Geoffrey? – Mis manos tiemblan.

 

[Geoffrey]       Necesita ayuda urgente. Acércame el botiquín de emergencia por favor...

 

Miro a Thomas. Aguanta Thomas. Sé fuerte. Nosotros te ayudaremos. Solomon también se acerca, pero al ver el aspecto de Thomas retrocede. Sus constantes vitales son estables, aunque muy débiles...

 

Geoffrey se pone manos a la obra e intenta mantener a Thomas con vida.

 

[Geoffrey]       Eso parece... Si no le movemos demasiado posiblemente salga de esta... Aunque su rostro...

 

[Solomon]       ¿Cómo está?

 

[Geoffrey]       Se recuperará.

 

[Vicky_Mor]    De eso nos encargaremos hasta el último momento... No le dejaremos morir... dejémosle descansar, está inconsciente.

 

[Geoffrey]       Siento muchísimo lo que ha pasado... estoy muy apenado por lo sucedido.

 

Yo miro a Geoffrey, después a Solomon, pienso en Furia. Dirijo la mirada a Thomas y me quedo pensativa. De nuevo miro a Geoffrey. Mis lágrimas se deslizan silenciosamente bajando por mis mejillas para morir en mis labios.

 

Enciendo otro cigarrillo y miro al horizonte con la mirada perdida en algún lugar, llorando en silencio por mis compañeros, mis lágrimas de nuevo recorren silenciosamente mis mejillas.

 

Subo penosamente y casi arrastrando los pies al cráter donde ha muerto Furia. Un fuerte sentimiento de rabia e impotencia por ver morir a tan valientes guerreros se apodera de mí.

 

Llego arriba y sólo encuentro cenizas, posiblemente eso es todo lo que queda de Furia, era un buen tipo, aunque últimamente andaba muy raro. He perdido a otro amigo - pienso. Y lloro.

 

El caballo de Furia relincha, su nombre es Little Fury.

 

Geoffrey intenta animarme, pero yo estoy sumida en mis pensamientos, me pierdo en los recuerdos. Al cabo de un rato, Geoffrey decide dejarme a solas.

 

Levanto la cabeza y mira a Sir Geoffrey.

 

[Vicky_Mor]    Geoffrey.

 

[Geoffrey]       ¿Sí?

 

[Vicky_Mor]    Una Justice Ranger también llora.

 

Geoffrey]        En realidad. Acabo de empezar a andar el camino. Aún no he demostrado mi valía en el campo del honor... Os acompañaré en vuestro viaje. Vayáis donde vayáis. Me siento culpable de todo esto... Debo expiar mis culpas antes de seguir mi camino...

 

[Vicky_Mor]    Estaremos encantados de que nos acompañes... pero... una cosa. ¿De dónde vienes? Tu armadura me es realmente familiar. Me recuerda a alguien que conozco y al que tengo especial estima y admiración.

 

[Geoffrey]       Soy discípulo de Sir Clark Dalton.

 

[Vicky_Mor]    ¡¡¿¿Sir Clark??!!

 

[Geoffrey]       Sí... en efecto.

 

[Vicky_Mor]   ¡¡¡¡¡¡¡Sir Clark !!!!!!! Con razón... esa armadura... Conozco a alguien que fue alumno de Clark... uno de mis mejores amigos... Maximus.

 

Geoffrey se sorprende muchísimo.

 

[Vicky_Mor]:   A él y a los que están con él vamos a buscar.

 

[Geoffrey]       Yo quería encontrarme con Sir Maximus... para que me ayude a    mejorar como persona y caballero. Si puedo hacer algo no dudéis en pedirlo...

          

[Vicky_Mor]    Nosotros vamos al Pecos Empire... en busca de los demás... Nuestra misión es encontrar a María García. Una chica que fue secuestrada por una banda de criminales y vendida al Emperador Lasar.

 

[Geoffrey]       ¿¿¿Secuestrada???

 

[Vicky_Mor]    Sí, así es Geoffrey. Además... he de llegar allí como sea... Maximus entregó su palabra de honor de caballero en esta búsqueda... No pienso dejarle solo. Te mostraré algo.

 

Saco de mi mochila las coordenadas que Mouser me dejó en el hospital y se las muestro a Geoffrey. Él, observa las coordenadas y piensa sobre la localización.

 

[Vicky_Mor]    ¿A cuánto crees que estamos? Es un territorio peligroso... una tierra sin ley…

 

[Solomon]       Espero que no estemos muy lejos, no queda mucha batería en el Montañero.

 

Sonrío a Solomon.

 

[Geoffrey]       Creo que este no ha sido un cruce casual. Dios nos ha dirigido para que encontremos a esa pobre chiquita y la rescatemos de esos viles rufianes.

 

Solomon y yo miramos a Geoffrey algo extrañados. Y Geoffrey me mira a mí.

 

[Vicky_Mor]    Debemos ir hasta allí... aunque Thomas viene con nosotros...

 

[Geoffrey]       ¿Estás segura de eso? Es arriesgado llevarle en esas condiciones.

 

[Vicky_Mor]    Sí,  pero no quiero dejarle solo. Aunque sólo pueda dedicarme a cuidarle... No quiero dejarle solo en un hospital;  Él ha luchado por volver con nosotros y estoy segura de que también él lo haría por mí sin dudarlo.

 

[Geoffrey]       Es admirable tu devoción por tus compañeros. Digna de todo elogio. Muy bien... como desees... Tendremos que viajar con cuidado, pero esta noche será mejor acampar aquí.

 

[Solomon]       Tranquilos, haré todo lo que pueda.

 

[Geoffrey]       Creo que nuestro amigo Juicer podría montar guardia por si algún indeseable decide acercarse.

 

[Vicky_Mor]    ¿Estás de acuerdo Solomon? - Solomon sacude la cabeza en un gesto de afirmación. - Ok Geoffrey.

 

[Solomon]       Puedo permanecer despierto toda la noche, para que nadie nos ataque.

 

[Geoffrey]       De este modo Vicky, yo te ayudaré con Thomas.

 

[Vicky_Mor]    Bien. Entonces compartiremos la guardia para el cuidado de Thomas... es lo más importante en estos momentos...

 

Me acerco silenciosamente a Thomas para ver cómo está. Tomo un pañuelo algo humedecido y se lo paso por la cara, ¿cara? Después pongo en su frente mi mano, su rostro está pálido y frío y acariciando con cuidado sus cabellos, le doy un beso en la frente.

 

Un suspiro sale de lo más hondo de mi cuerpo.

 

[Geoffrey]       Mm… No deberías de tocar mucho su rostro... Lo mejor será vendarlo para evitar que se infecte.

 

Después me dispongo a coger una manta y con ella tapo con cuidado el cuerpo de Thomas para que no coja frío y me quedo esperando mientras Geoffrey toma su botiquín y venda a Thomas lo mejor posible... con mucho mimo y esmero. Yo le miro asombrada, realmente el vendaje que le está aplicando a Thomas es casi perfecto.

 

Después tomo un poco de agua, mis labios están secos, enciendo un cigarrillo y Geoffrey me acompaña en la vigilia y me cuenta parte de su historia. Estuvimos horas hablando.

 

Me invade una enorme tristeza. Hay un compañero en estado de coma y del que ni siquiera sabemos si va a salir. Y... Otro ha muerto... Furia. Ése con el que tantas cosas compartí. Uno de mis mejores amigos. Uno de los primeros miembros del grupo. Furia era un pasado y un presente. Formaba parte de mi vida. Habíamos compartido ciudad durante años, además de amistad y aventuras, peleas, combates y riesgos. Ahora nunca volveré a ver su sonrisa. Una sonrisa que últimamente no se dibujaba muy a menudo en su rostro.

 

Miré al cielo un instante...

 

Era de noche y hacía frío. Hacía frío, sí, pero hacía ya tiempo que yo no lo sentía de la misma manera. ¡El cielo puede llegar a ser de un azul tan intenso! Incluso, de noche el cielo continúa siendo azul.

 

De ese color, del color de la noche cuando la luna llena se apodera del firmamento, cuando el sol acaba de caer por el horizonte y las primeras estrellas comienzan a brillar.

 

Furia era un amigo veterano que además me conocía mejor que el espejo, porque sabía lo que pensaba. Pero supongo que no tiene ya caso recordar esos detalles que lastiman el alma. Detalles como la frescura de su sonrisa, o la sencillez de su forma de ser. No tiene caso que llore mientras la lluvia cae frente a mí sin tocarme.

 

El horizonte ha perdido el brillo del sol, la noche es oscura, tan oscura... y me pregunto si así sería para él, si la oscuridad en sus ojos era como esta noche helada sin estrellas, sin luna. Se lo pregunto a la noche y le pido que le lleve el mensaje.

 

La luz de la luna se abrió paso entre las oscuras nubes, como abriendo una herida, dejando escurrir su sangre blanquecina. Sé que nadie contestará mis preguntas con la calidez de su voz, con el color de sus ojos. Adiós, Furia.
 

Lloro en silencio. Callada, tragándome con las lágrimas mi amor y mi pena.

 

Recuerdo el día que aprobé la admisión de él en la Guardia con tanta claridad como recuerda un rey el día de su coronación o un cardenal el de su elevación a esa dignidad.

 

Fue muy difícil. Cuando me enteré de que había ganado una placa de auténtica Justice Ranger, colmaron mi vanidad de visiones románticas: amigos bañados en lágrimas que me besaban por haber hecho justicia.

 

Ahora, años después, y tras estos últimos cinco meses de pérdidas de tan valerosos amigos, se me ha desvanecido toda visión romántica. He trepado por escaleras de infiernos miles de veces; y me he arrastrado por infinidad de corredores hasta descender a abismos de negrura, cargados de venenos, a sabiendas que en cualquier momento podía desplomarse sobre mí cualquier criatura extraña de estos mundos perdidos, o estallar un explosivo oculto.

 

He visto morir a amigos y he llevado muertos en mis brazos. Justa es la razón de haber escogido este mundo como metáfora del infierno. ¿Qué podría ser más espantoso que la lenta agonía de un amigo que muere luchando hasta que se obstruye la garganta?

 

Miro hacia Thomas, y veo que Geoffrey está administrándole pequeñas dosis de morfina y endorfina. Ha estado desinfectándole las heridas. El cuerpo de Thomas está totalmente quemado. Sus heridas son importantes, quemaduras de primer grado.

 

Me acerco hacia allí para comprobar las constantes vitales de Thomas y veo que los indicadores del RMK señalan que son estables, aunque muy débiles.

 

Geoffrey me comenta que Thomas se encuentra en un estado de coma bastante profundo, pero que si sobrevive a la primera noche, tendrá muchas más posibilidades de curarse. Me siento muy agradecida a Geoffrey por su noble comportamiento hacia nosotros. Aunque todavía no se lo he dicho. La verdad es que me siento un poco más fuerte y un poco recuperada de mi tristeza, pero aun así, no siento ganas de hablar con nadie mucho más de diez minutos seguidos.

 

Mientras Solomon está montando guardia en el campamento para vigilar a posibles asaltantes y malhechores que pudieran poner los pies en nuestro campamento, Geoffrey y yo nos turnamos la guardia de la vigilia de Thomas, pese a que ninguno de los dos pegamos ojo, y pasamos la mayor parte del tiempo despiertos y charlando durante la noche de varias cosas.

 

[Geoffrey]       ¿Así que tú eres amiga de Sir Maximus?   

 

[Vicky_Mor]    Sí, así es. Uno de los guerreros más fuertes, nobles y valientes que he conocido. Somos grandes amigos, sí.

 

[Geoffrey]       De acuerdo contigo. Yo estudié con él, con el maestro Clark Dalton. De hecho, acabo de terminar mi iniciación. Soy un cibercaballero novel. Una de las mayores razones por la que deseo ir con vosotros es poder reunirme con Maximus. Quiero aprender de él y unirme a sus aventuras. Ese es mi mayor deseo.

 

La noche pasó, y el sol sale de nuevo en el horizonte. Thomas ha sobrevivido a la primera noche. Eso es una muy buena noticia. No está recuperado, pero eso demuestra que es fuerte y lo conseguirá, seguro.

 

Domingo, 10 de abril de 104 PA:

 

            Solomon se acerca hacia nosotros con una sonrisa que se le va a salir de la cara. Viene cargado con los bidones y dentro de ellos hay agua. El Juicer ha encontrado un sitio donde rellenarlos y no lo ha dudado ni un segundo. Además, trae un cargamento de moras y otras bayas comestibles para ir matando el apetito de vez en cuando... Aunque dudo mucho que Solomon resista con esas cosas durante mucho tiempo, jeje. Ahora mismo tenemos menos de la mitad de las provisiones con las que empezamos el viaje...

 

            Geoffrey me comunica esta misma mañana que Thomas está bien como para proseguir el viaje, pese a que su estado es coma y permanecerá así durante algún tiempo, imposible determinar cuánto. Tal vez podríamos improvisarle una camilla en el Montañero con palos y mantas, bien sujeto con cuerdas y correas para que no mueva demasiado.

 

            También dice que otra posibilidad es dejarle en un hospital de Los Alamo, pero a mí no me parece tan buena idea. No quiero dejarle solo. Solomon se compromete a llevar el Montañero con el más alto esmero, cuidado y dedicación.

 

            Por otra parte, no quiero que le pase nada malo a Thomas, pero su estado es por el momento estable, y si volviéramos a Los Alamo, supondría abandonar a nuestros otros compañeros, que quizá estén en peligro.

 

            Y tras discutir y debatir durante un rato esta situación y que cada uno de nosotros expusiera sus puntos de vista y opiniones respecto a este tema, decidimos de modo unánime continuar el viaje.

 

Miércoles, 13 de abril de 104 PA:

 

            Pasábamos por un desfiladero para pasar la cordillera que nos separa de las Pecos Badlans cuando Geoffrey me dice que no hace mucho más de una semana que Maximus y los demás pasaron por aquí. Yo, pese a que no estoy totalmente convencida al cien por cien, le creo. Geoffrey es un noble caballero, casi rodeado de un aura de bondad. Y hay algo en él que me da confianza. Es un buen amigo, o lo será...

 

            Solomon sin embargo, sigue a la suya. Él es un Juicer y como tal, no resulta impresionado por determinados valores… ¿humanos? Que poseen algunas personas. Está claro que él ve el mundo desde otra perspectiva y que muchas veces seguramente tampoco entienda nuestras actitudes, como nosotros no entendemos a veces muy bien las suyas.

 

            Thomas no muestra síntomas de mejoría. Pero tampoco empeora. Me paso la mayor parte del tiempo vigilando su estado y sus constantes vitales. La vida de Thomas es lo primero y Geoffrey me ayuda con ello.

 

            [Geoffrey]       ¡¡¡¡Cuidado!!!!  ¡¡¡¡Apartaos!!!!

 

En ese momento, nos ocultamos rápidamente detrás de unas enormes rocas negras y elevadas. Nos ha ido por un pelo. Inmediatamente pasan sobrevolando a menos de cien metros de altura, una escuadrilla de cinco SAMAS. Nunca he luchado contra estas power armors y creo que los demás tampoco. Pero me recuerdan a un combate contra los robots no tripulados de la Coalición, llamados Skelebots. El combate con aquellos robots fue duro. Eran muy potentes y resistían bien. Estas power armors deben estar mejor preparadas incluso y con una tecnología más avanzada.

 

Por suerte les hemos dejado atrás. Lo último que nos hacía falta ahora es un combate así de chungo y menos en el estado en el que se encuentra Thomas. Eso sería poner su vida en peligro, así que mejor nos quedamos en la retaguardia hasta que haya pasado el peligro. Geoffrey también se alegra de que les hayamos podido esquivar, al contrario de Solomon que sólo piensa en combatir, y además cree que puede vencer a cualquier cosa que se le ponga delante.

 

El viaje continúa. Seguimos avanzando.

 

Sábado, 16 de abril de 104 PA:

 

            Avanzamos en dirección a San Antonio. En línea recta, según la información que me dejaron en la recepción del hospital de Los Alamo, Mouser y los demás. Esa es la ruta más directa hacia las coordenadas que poseo.

 

            El lugar hacia el que nos dirigimos, San Antonio, no me da muy buena espina. Ésa es una ciudad de bárbaros sin ley. Algo me dice que no es un buen lugar, por alguna extraña razón que no sé explicar, siento que algo no va demasiado bien en mi interior.

 

            Mis ojos ven unas colinas verdes por la hierba y me detengo un instante.

 

[Vicky_Mor]    Ahora vengo. Esperadme. - Volviendo mi vista de nuevo al frente. - ¡Corre BlackThunder! ¡Rápido! ¡Hacia aquella colina! ¡Vamos! - Y con un suave golpecito de mis botas sobre su negro pelo, BlackThuder galopaba.

 

            Al llegar al valle, he de insistir a BlackThunder de que siga adelante. Hay algo a lo que él se pone algo reacio cuando ha de atravesar el campo. Hay un riachuelo. Y algunos hierbajos, que años atrás fueron tierras de cultivo.

 

            Lentamente voy entrando en el valle, el suelo está ennegrecido, sólo quedan las ruinas y cenizas de lo que había sido una pequeña aldea. Mis ojos se humedecen. Al llegar a las ruinas de una casa en particular, mis lágrimas se deslizan una vez más silenciosamente por mis mejillas.

 

Ni siquiera desmonto de BlackThunder, no tengo valor de entrar. Me quedo delante de esa casa, mirándola. Me gustaría pensar que todo esto es un mal sueño del que pronto despertaré, pero creo que no es así.

 

Sigo un poco más. En ese momento puedo leer un cartel sobre un derruido muro: “OFICINA DEL SHERIFF Don Juan Guerrero”, en el suelo hay algo que brilla. Desmonto de BlackThunder y, me agacho a recoger ese objeto que me ha llamado la atención desde arriba. BlackThunder me mira y parece saber lo que pasa. Incluso lo que siento.

          

            Sacudo el objeto de cenizas y tierra y lo froto con mis vaqueros, el metal del que está hecho, brilla bajo el reflejo del sol. Es una placa de Sheriff. Siento de repente una angustia que apenas creo que puedo soportar. En mi mente pasan rápidamente escenas de casas en llamas, gritos de terror, y aullidos horribles de vampiros no muertos. Y una imagen realmente escalofriante, la sonrisa espantosa de un tipejo calvo y arrugado, con una túnica roja y un enorme rubí por ojo.

 

            En ese momento, una gran tristeza me embarga. La placa se me cae de las manos, la oigo llegar al suelo. Caigo casi desplomada de rodillas al suelo, con los puños cerrados fuertemente apoyados sobre el suelo de grava y tierra. Mis lágrimas caen sobre la placa del Sheriff que yace en el suelo, solitaria... y en ese momento una extraña sensación reconfortante se cierne sobre mí.

 

            Casi de un salto me pongo en pie. El corazón se me va a salir del pecho, cuando veo lo que tengo a muy pocos metros de donde me encuentro. Es la imagen fantasmal de un hombre noble. Va vestido de Sheriff y en su pecho luce una placa como la que acabo de encontrar entre las cenizas. Al lado de esa imagen otra de una mujer, con los ojos cerrados, siempre cerrados y dos niños. Después veo más imágenes, muchas más personas. Las imágenes de todo un pueblo asesinado. Todos me miran, algunos me sonríen. ¿Me está pasando esto de verdad? ¿Qué me está ocurriendo?

 

            Veo el fuerte destello de un relámpago en el cielo, a continuación un espectacular trueno y rompe a llover intensamente. Una cortina de agua cae delante de mí, y ellos... ya no están. Las imágenes han desaparecido. Qué extraño.

 

            Monto sobre BlackThunder, y sin decirle apenas nada, él solo coge el camino de regreso hacia los otros compañeros. Parece tener prisa por abandonar este lugar.

 

            Cuando llego de nuevo al grupo, Geoffrey me mira serio, buscando en mí una explicación, una respuesta. Yo bajo la cabeza y callo.

 

            Seguimos avanzando, estamos llegando a la ciudad de San Antonio. Ha dejado de llover hace un rato. Pero, ahora, los ruidos de las explosiones y los disparos sustituyen al de los truenos. Miro con la mira telescópica de dónde proviene todo eso.

 

            Una especie de muro que rodea la ciudad y las fortificaciones están llenas de agujeros. Los vehículos arden. Unos extraños tipos, ataviados con una especie de armaduras caseras y roñosas, y portando gastadas armas defienden desesperadamente sus posiciones. Tienen aspecto de malhechores. Algunos lucen un emblema que a mí me resulta vagamente familiar, algo que a la vez despierta en mí al mirarlo una especie de odio y desprecio. El emblema: una daga de plata.

 

            Los “atacantes” sin embargo, son en número inferiores a ellos, pero parece ser que sufren menos bajas.

 

            Se está batiendo un sangriento combate en toda regla.

 

            Los atacantes portan el emblema del sable... No hay duda, son los Sabre Warriors. El Ejército del Emperador Sabre Lásar. Es una guerra entre bandas.

 

            Llegan refuerzos desde las defensas exteriores, y hasta hay robots pesados de combate. Hay un momento en que veo un jinete que vocifera órdenes. Tiene el pelo corto y posee un enorme vibro-cuchillo. Después de esto, los demás retroceden y proceden a retirada.

 

            Parece que nos han visto. Varios ciborgs pesados de los Sabre Warriors, se dirigen hacia nosotros mientras disparan. Son rapidísimos. Llegan delante de nosotros y nos apuntan con sus pesadas armas. Uno ellos, el más grande, se dirige hacia nosotros:

 

[Ciborg]           ¿Aventureros? No creo que os apetezca quedaros en este territorio.

          

FIN DEL TURNO 24_VICKY_MOR.

 

ACCIONES FUTURAS:

 

Seguir cuidando a Thomas.

Intentar reponernos de armas lo antes posible.

Averiguar más sobre los ciborgs del combate y sobre el combate.

Encontrar al grupo.

Seguir buscando a María.

Gombuk: Rifts: Turno 24:

 

¡WAAAAAAAAAAAAAAAAAAAARGH! Dos años con estos bandidos, ¿y qué he conseguido? Robar a simples inocentes en los caminos, ataques rápidos, asesinos, aburridos... ¿Esto es lo único que me ofrece esta vida? ¿Convertirme en una simple máquina a las órdenes de ese psicópata? ¡Y las armas! Ya ni recuerdo la ultima vez que usé un bazooka. Se gastan todo el dinero robado a esos pobres inocentes incapaces de defenderse en cosas absolutamente inútiles.

 

Pero no todo es malo, era mucho peor cuando era un esclavo de esos repugnantes Simvans. ¡Juro que yo personalmente arrancaré la cabeza de su líder y me comeré sus sesos!

 

Y nuestro líder, ¡oh dios! Jodido psicópata, seguidor de adivina qué religión satánica que usa como excusa para sus abominables actos, pero a pesar de eso se merece mis respetos. Es fuerte como un toro y la última vez que uno los chicos le desafió hizo tal estruendo que hasta yo llegué a sonreír...

 

Miércoles, 13 de abril de 104 PA:

 

Hoy los exploradores han detectado un grupo de peregrinos, por suerte esta vez no me ha elegido para ser del divino grupo de recolección de almas, como le gusta llamar esta semana a los grupos de caza. Bien, no veré el espectáculo... por lo tanto no me afecta... No pensaré en los cuerpos mutilados de los exploradores cuando ese jodido Crazy haya acabado la faena...

 

WAGH, hoy estoy muy nervioso, le he roto la cara a Jack porque me ha gastado una estúpida broma, hoy va a pasar algo, lo presiento...

 

¡¡POR LAS FURCIAS DEL INFIERNO!! ¡Quién lo hubiese dicho! Esos peregrinos están vivitos y coleando, y no sólo eso, Luz Oscura ha tomado a uno de ellos como a una especie de dios o alguna chorrada así. Esto es increíble, estos tipos parecen mas interesantes de lo que creía, llevan armas grandes, ¡¡¡y el robot!!!! ¡¡Qué pasada de trasto!! Aunque no me han dejado mirarlo (normalmente me importaría un rábano lo que ellos quisieran, pero estos tipos me caen bien) le he echado un par de miradas y seguro que lleva armamento pesado. Dios, tengo ganas de ver a ese trasto activado PAM PIM PUUUUUUUUUUUUUUM CATACLUM, warg, no hay duda estos saben divertirse, la armadura del "Heraldo del dolor y el éxtasis" (como lo llama Luz Oscura sin parar) lo confirma. Destrozada por todas partes, juntada a lo bestia, dios, ¡¡¡debió ser destruida en un combate espectacular!!!

 

Viernes, 15 de abril de 104 PA:

 

Hoy me he acercado a aquel que llaman Maximus, y me he mostrado amigable con él (aunque cuando he mostrado los dientes sonriendo al estilo de los humanos parece que no le ha hecho mucha gracia...). Hemos estado hablando del tema y parece que no les vendría mal una ayuda... La idea me gusta, la verdad es que un cambio de aires no me iría mal. Está claro que ser bandido no es lo mío. Lo he decidido, voy a hablar con Maximus, desde ahora llamadme… ¡¡¡GOMBUK EL PEREGRINO!!!!

 

Fin del Turno 24 de Gombuk Kamchak.