Partida Rol por web

DM: Rifts: Turno 4:

            Parece que habéis logrado aliviar las tensiones que os separaban, aunque eso no evitará que Hades permanezca resentido contra Shidi, a fin de cuentas los prejuicios de toda una vida no se eliminan así como así (y lo mismo es aplicable a Shidi, quien no puede evitar pensar en Hades como un chucho, un hombre perro como los mutantes Dog Boys que sirven fielmente a la Coalición, y en definitiva un ser inferior a un humano).

   -        Shidi: En cuanto la situación entre vosotros lo permite te quitas la power armor y procedes a limpiar el casco por dentro. También te limpias la cara con agua del arroyo y enseguida comienzas a sentirte mejor. Los cadáveres de los ghouls son repugnantes pues aún rezuman de gusanos y otras asquerosidades. Ayudas a los demás a incinerarlos. Luego en un intento de congraciarte con Hades ayudas a preparar la pira funeraria para los wolfen fenecidos. Este acto solemne te recuerda a lo que hacéis los soldados de la Coalición con vuestros muertos en territorio hostil: si no podéis llevároslos en bolsas de plástico los destruís con una granada o de un disparo energético, para que ningún mago hijo de perra pueda animar los cuerpos con su corrupta magia. Por desgracia no siempre hay tiempo de celebrar un rito y es necesario recurrir a esa eliminación rápida, pero al menos los camaradas caídos siempre son recordados, se brinda en su recuerdo y a menudo se les conceden condecoraciones póstumas. No está mal el grupo, aunque te incomoda un tanto Emil con sus antinaturales orejas puntiagudas. Además en la última lucha hizo gala de poderes mentales superiores a los que serían comunes en un simple contrabandista. Rolando también usa poderes mentales, aunque lo hace de un modo mucho más discreto, parece más un simple pistolero y al menos es humano. No puedes evitar sentir un poco de rencor por lo que Vicky ha hecho con tu armadura de potencia, a fin de cuentas le tienes un cariño especial. Eres un Comando piloto de SAMAS, esa es tu especialidad, pero si te la destruyen será muy difícil conseguir otra y perderás una parte de tu identidad.

   -        Emil: La lucha fue bien y al final se han evitado conflictos en el grupo, aunque habrá que andarse con ojo para que no vuelvan a surgir ocasiones así. Disponéis de los cadáveres y preparáis la marcha hacia el camión. Pero antes investigas un poco en los alrededores. Hablas con la viuda wolfen que te explica como un día llegaron los ghouls y primero exterminaron a una familia de leñadores que vivían más al norte y luego empezaron a atormentarles a ellos a continuación. Primero se llevaron a uno de los cachorros por la noche, encontraron los trozos a la mañana siguiente. Días más tarde hicieron lo mismo otra vez, sumiendo a la familia en la desesperación. Se lo dijeron a un leñador que iba a DarkGate para que consiguiera ayuda y el leñador se lo dijo a la Ranger, por eso llegasteis vosotros. Aunque casi no llegáis a tiempo pues los ghouls ya habían decidido dejarse de juegos y exterminar a los wolfen. La viuda wolfen está terriblemente afligida por su pérdida, pero al menos conserva a dos de sus hijos. Hades los escoltará a un cercano asentamiento de wolfens, coyles y kankoran. Rolando se ha ofrecido a acompañarle, pues ha decidido que a partir de ahora cuidará del joven Hades. Emil, te concentras en algunos restos de ropas de los ghouls e intentas tener alguna visión: ves a estos mismos ghouls realizando una carnicería con una familia de leñadores hace una semana y una visión fugaz de haber sido invocados a través de un portal dimensional para "sembrar el caos en DarkGate", aunque no llegaron tan al sur. No consigues una visión clara de su invocador, excepto una fugaz visión de una larga melena rubia y un cuerpo fuerte, pero delgado, y masculino. Después investigas la casa de los wolfen en busca de más pistas, pero no encuentras nada inusual.

   -        Vicky Morrisona: Observas como queman los cuerpos pestilentes de los ghouls y te alegras de haber librado al mundo de esos horrores. Se ha hecho justicia y los muertos han sido vengados, tu código de honor de Justice Ranger está satisfecho. Después viene la ceremonia por las víctimas, una pena que no hayáis llegado antes. Te comprometes en tu fuero interno a luchar por defender a los inocentes contra las atrocidades de los seres malignos. Te sientes resuelta a viajar a Santa Fe y averiguar qué le pasó a la chica desaparecida. Quizá aún continúe con vida y necesite desesperadamente vuestra ayuda. O quizá haya sido víctima de seres horribles como los que acabáis de matar, y en ese caso su muerte y sufrimientos deberán de ser vengados. Eso es lo que significa ser un Justice Ranger, defender la ley del Oeste, proteger a los inocentes y castigar a los culpables o destruirlos si sus crímenes los hacen merecedores de ello. No se te ocurre como compensar a Shidi por los daños en su armadura. Te preguntas si Mek el mecánico del Grand Garage querrá repararla en secreto, no es muy probable dado que la Coalición es muy impopular en DarkGate aunque quizá si tú intercedes puedas convencerle de que la armadura pertenece a un mercenario independiente que viaja con vosotros y no a un soldado en activo del opresivo imperio de la supremacía humana. Además para financiar sus costes quizá podrías darle tu rifle láser y tu armadura ligera de reserva, la CA-2.

   -        Hades: Estás resentido con Shidi y es posible que tu rencor dure mucho. Por otro lado en este combate eliminaste enemigos y quizá seas merecedor de un nombre. Has decidido acompañar a la madre y los dos cachorros wolfen al asentamiento de las razas caninas en el bosque por lo que tendrás una buena oportunidad de reclamar un nombre de los ancianos. En cuanto termináis de eliminar los cuerpos emprendéis la marcha. Rolando os acompaña y te sientes aliviado, pues tu armadura está en pésimo estado y, aunque la de Rolando también, dos guerreros son mejores que uno.

   -        Rolando: Estás algo asqueado después del combate y no del todo satisfecho por los resultados. Hades y Shidi casi se lían a tiros. El pobre Hades es aún un poco inmaduro y quizá lo mejor será que te encargues de él. Por eso has decidido acompañarlo en su viaje. Necesitas una armadura nueva, pero eso tendrá que esperar. Al parecer vais a pasar por DarkGate y sabes que te sería muy sencillo aparecer por tu finca y pedirle una nueva al mayordomo, Will Dearborn, pero no estás muy decidido a hacerlo por una cuestión de orgullo personal. Vicky insiste en que debéis investigar lo de Santa Fe y tú no puedes estar más de acuerdo, pues en realidad estás bastante conforme con sus ideales de justicia. No estás demasiado de acuerdo con la visión de Emil de que este grupo aventurero se mueva sólo por intereses mercenarios o que sea visto como un "negocio", tú crees que es algo más serio y noble que todo eso.

   -        Mouser: Al principio te pareció estupendo quedarte en el Titan disfrutando de todas sus comodidades. Pero después te has comenzado a sentir inquieto, están tardando mucho, y has pensado más de una vez en arrancar el camión y largarte de aquí. A fin de cuentas, ¿qué es lo que te une al grupo? Sí, tu viejo socio Emil, pero ni siquiera él parece hacerte mucho caso últimamente, no pareció muy molesto cuando decidiste quedarte en el Titan. Y además esta misión sin sentido, cuando deberíais estar en algún pueblo consiguiendo un cargamento de buen contrabando que vender. Pese a todo, sigues escuchando música y tamborileando con los dedos sobre la consola de mandos del Titan, esperando nervioso a que por fin se decidan a volver.

   -        Quick Silver: Has estado como ausente desde el inicio de esta misión. Durante el combate funcionaste a base de reflejos, los proverbiales reflejos del metabolismo híper-acelerado propio de tu raza. Sin embargo, no puedes seguir así mucho tiempo. Esperas salir pronto del bache y ponerte en la onda.

DM: Rifts: Turno 4:

            Shidi ha terminado de limpiar el casco de su SAMAS, aunque aún le queda mal olor, está deseando hacer uso del kit de limpieza que guarda en el contenedor de la armadura en el Titan. Encabeza la marcha en dirección al camión, seguido por Emil y Vicky. Cierra la marcha, pensativo y cabizbajo, Quick.

            Rolando y Hades emprenden la marcha con los wolfen hacia la aldea canina de Zhurrgh.

            Es la mañana del día 26 de diciembre del año 103 Post Apocalíptico y luce un sol brillante de invierno. Emil se ha puesto sus gafas y además ha sellado el yelmo de su armadura, pues no soporta el sol.

            El trayecto a pie transcurre sin complicaciones y Mouser saluda por radio a Shidi (lleva radio incluida en los sistemas de su power armor) cuando os acercáis al Titan.

            Vicky monta en su caballo y toma las riendas de los caballos de Hades y Rolando para hacerse cargo de ellos. Piensa que quizá lo mejor sea esperarlos aquí. Emil no parece estar de acuerdo en que Vicky se quede sola en la linde de un peligroso bosque, pero ella enojada responde que puede cuidarse solita y además ahora ha cambiado su rifle láser por el rifle pesado de partículas que guardaba en la funda de la silla de su corcel por lo que es muy posible que tenga razón y pueda cuidarse.

            Mouser, Quick y Shidi parecen ansiosos por regresar a DarkGate y al final Emil cede y arranca el Titan rumbo sur.

            Mientras, Hades y Rolando emprenden la marcha hacia la aldea de Zhurrgh con los deprimidos wolfen supervivientes. Lo más peligroso que encuentran en el día es una manada de grandes saurios herbívoros (¿diplodocus?) que pastan junto a un lago. Afortunadamente los enormes dinosaurios no les prestan atención, e incluso pueden recoger agua sin problemas. Prosiguen el viaje, los wolfen no hablan mucho y Hades también se mantiene silencioso, aunque a Rolando se le hace evidente que sigue guardándole rencor a Shidi. El pistolero tiene mucho tiempo para sumirse en sus pensamientos durante el viaje.

            Al ocaso llegan a la aldea, es un asentamiento primitivo de cabañas de madera, muchas de ellas construidas en lo alto de los árboles. Se trata de un asentamiento de cazadores y recolectores. Hades y Rolando explican a los ancianos de la aldea lo sucedido, que es corroborado por la viuda wolfen. Los ancianos os reconocen como unos héroes y os agradecen lo que habéis hecho. A continuación Hades expone su caso y solicita que se le reconozca la mayoría de edad. Los jefes deliberan durante varias horas durante la noche. Mientras los dos aventureros aguardan, son agasajados con carne asada y cerveza wolfen. Finalmente los ancianos deciden otorgar a Hades el nombre de Furia Ciega y lo nombran guerrero valiente. Como símbolo de su mayoría de edad le entregan un amuleto del coraje (a efectos de juego le da +2 a las TS contra control mental y Horror Factor). Y a Rolando le entregan una saca con provisiones (20 raciones en carne de ciervo ahumada). Duermen en una cabaña tras la celebración y a la mañana siguiente emprenden el regreso a DarkGate.

            Rolando y Furia Ciega (Hades) tardan la mayor parte del día en llegar al linde sur del bosque, pasan por el escenario de la batalla con los ghouls, donde aparte de los restos de la cabaña, cenizas y algunos cráteres de la lucha no hay nada más. Los animales del bosque parecen rehuir el claro.

            Mientras, el camión Titan sigue por la vieja carretera anterior a las Grietas hasta llegar finalmente a DarkGate. Para Shidi la ciudad no representa gran cosa, tal vez un refugio temporal, aunque no uno muy tranquilizador con tantos magos y D-Bees (seres de otras dimensiones). Quick y Mouser se dirigen enseguida al Saloon, donde hablan con Ebon y otros conocidos que frecuentan el lugar. Shidi traslada sus cosas a su furgón, donde limpia a fondo el interior de su SAMAS. Después sale con sus ropas civiles y sin armas. A fin de cuentas, no espera problemas en esta ciudad y si los tuviera no tendría escapatoria contra tantos magos y mercenarios. Es mucho mejor pasar desapercibido. Vuelve a alquilar su vieja habitación en el Saloon y se da una buena ducha.

            Emil aparca el Titan en su refugio-garaje. Ordena sus cosas mientras habla distraídamente con su mascota Glo-glu, que parece solidarizarse con él, aunque quién sabe tratándose de una descerebrada masa viscosa. Después se asea y por último se tumba en la cama y se pone a pensar en lo que hará mañana.

            La espera en la linde del bosque pone a Vicky de los nervios, afortunadamente los caballos permanecen tranquilos todo el tiempo, lo que indica que no hay visitantes inesperados. El caballo robot tiene avanzados sensores electrónicos, aunque Vicky se fía más del comportamiento de los caballos de carne y hueso de ella y Hades. Es bien sabido que los caballos y los perros son capaces de sentir lo sobrenatural y reaccionan con miedo ante ello. Cuando Rolando y Hades Furia Ciega emergen del bosque suspiran aliviados al ver que sus caballos les esperan. Le agradecen a Vicky lo que ha hecho pues de este modo se ahorran una pesada caminata de vuelta a la ciudad. Vicky propone alegremente una carrera y los tres la emprenden. El caballo de Hades es el más ligero e inicialmente coge ventaja, después Rolando demuestra ser un jinete excepcional y su caballo robótico acaba dándole la ventaja definitiva pues pese a ser mucho más pesado que los otros también es muy rápido y no se cansa como los de carne y hueso. Vicky pone un mohín al comprobar que queda la última. Su corcel no puede correr demasiado deprisa cargando con la protección de su sofisticada barda (armadura para caballos).

            A las dos de la tarde del miércoles, día 28 de diciembre del 103, todo el grupo aventurero se halla reunido en una comida en el Saloon de DarkGate. María la encargada parece que ya os tiene asignada una mesa habitual. Lo suficientemente apartada del espectáculo en el escenario como para poder hablar con tranquilidad, pero en una situación que permite observar todo el local.

            Ebon se os ha unido durante un rato, interesado por vuestras aventuras. Se trata de un elfo jovial de largo pelo negro. Por alguna razón parece sentirse algo incómodo en presencia de Emil, aunque éste también es elfo.

            Shidi tose mucho y además ahora tiene un pulso malísimo, casi parece que tenga parkinson. A todos os extraña verlo tan enfermo, cuando hace unas horas, en especial en las situaciones de tensión y combate parecía encontrarse bien. Al parecer la adrenalina neutraliza en buena parte los síntomas de su extraña enfermedad (tranquilos, que no es contagioso, o al menos eso dice él), que vuelven a manifestarse plenamente en situaciones de tranquilidad.

            Emil también ha dejado en casa su armadura, aunque porta su vibroespada colgada al cinturón. Rolando y Hades han dejado también sus cosas. Es raro ver al pistolero sin sus pistolas, aunque él afirma jocoso que: "mis dedos son armas mortales", se ríe, pero podría ser que dijera la verdad... Furia parece satisfecho con su nuevo nombre y exhibe orgulloso el amuleto que le regalaron los ancianos de Zhurrgh. Emil señala que Vicky también lleva un amuleto de aspecto mágico, pero ella por alguna razón no quiere hacer ningún comentario sobre su origen.

            Quick está charlando animadamente con unos mercenarios en la mesa de al lado, entre ellos el enano Halberd, el ex-comando de inteligencia de la NGR Victor von Karlstein y un tipo nuevo, un mercenario con un brazo biónico que según cuenta se acaba de graduar en la academia de mercenarios del Gremio. Se presenta ante vosotros como Arlec Zealot y os dice que le gustaría unirse a vosotros, una cosa más que tendréis que deliberar.

            El hombre rata Mouser os anuncia su decisión de dejar el grupo y quedarse en DarkGate: - "Demasiadas emociones para mí, a fin de cuentas soy una rata de ciudad..." - Emil parece decepcionado con la decisión de su socio, pero a estas alturas ya no le extraña. Por suerte ahora tiene a otros compañeros.

            Shidi habla un rato con Arlec y le hace algunas preguntas para averiguar si ha recibido un buen entrenamiento. Al parecer así es, además el joven mercenario vestido de azul también sabe conducir un hovercraft con lo que podría ser el chofer que Shidi necesita para su carro.

            Arlec parece un tipo frío, especialmente con sus evidentes ojos y oídos cibernéticos cromados. Su mirada de círculos de espejo es un tanto enervante y su brazo derecho biónico tiene incorporado un potente disparador de partículas adosado en el antebrazo, es bastante voluminoso y evidente, y contrasta un tanto con la baja estatura y constitución delgada de Arlec.

            En la sobremesa de la comida Quick y Arlec siguen en la mesa de los mercenarios de al lado, junto con Ebon que se les une después.

            Quedáis Shidi, Emil, Rolando, Furia y Vicky para deliberar acerca de los próximos pasos del grupo. Quick se desentiende de esto y dice que aceptará la decisión del grupo, está un poco raro.

            Enseguida Vicky insiste en que vuestra primera prioridad debe de ser la muchacha desaparecida de Santa Fe, María García. Rolando está de acuerdo, aunque para él es prioritario que repongáis vuestras armaduras y cargadores gastados (él particularmente aún va bien de munición, pero a Emil, Vicky, Furia y Quick no les vendría mal reponer cargadores en el Grand Garage, cuesta unos 1500 créditos cada uno que se recargue).

            Emil dice que con la recompensa de 50.000 en Santa Fe no tenéis ni para empezar y Vicky le reprende: - "No se trata de un asunto de dinero, la vida de una chica inocente está en juego y tú sólo piensas en lo que puedes sacar". –

            Furia cree que es honorable ayudar a los demás sin que las ganancias sean el único criterio prioritario. Shidi parece de acuerdo en lo de Santa Fe, pero está preocupado por el mal estado de su SAMAS, parece que va a ser difícil repararla si no tenéis ni para recargar todos los cargadores gastados. Más preocupante que los cargadores es conseguir armaduras nuevas para Rolando y Furia (aunque la armadura ligera CA-2 de Vicky le podría venir bien a Furia, que es bajito y delgado). Shidi puede usar su armadura Comando en caso de que su SAMAS no pueda ser reparada ahora por falta de fondos. Y Rolando podría pedir una armadura a Will Dearborn si renuncia a esa cuestión de orgullo en favor de la necesidad, esa es su decisión.

            Debéis comentar si admitís a Arlec y qué hacéis en cuestión de repuestos y reparaciones. Ebon os comentó que en vuestra ausencia el dinosaurio que acosa algunas granjas del sur se ha zampado a todos los habitantes de una de las granjas más aisladas, después de acabar con todas las vacas.

            El Sheriff Pearce está pensando en enviar tropas. Los rancheros ofrecen una recompensa de 100 cabezas de ganado por eliminar el problema (Emil calcula que se podrían vender por entre 50.000 a 100.000 créditos). Furia dice que nunca ha cazado una bestia tan grande y que debe de ser todo un desafío.

            Se supone que la carne de dinosaurio es comestible, aunque es muy difícil de conseguir. Algunos aventureros han matado dinosaurios, pero después de un combate pesado con armas energéticas la carne suele quedar más bien achicharrada y poco presentable. En el mejor de los casos es una carne muy difícil de cortar y transportar y es habitual que los dinosaurios muertos por el hombre acaben siendo pasto de los carroñeros.

            En cuanto al trayecto hacia el sur es un terreno llano y en su mayor parte hay caminos de tierra apisonada por los que el Titan podría circular sin problemas. Cuanto más al sur más árido el paisaje, con zonas de auténtico desierto en que sólo sobreviven cactus, serpientes, alacranes y algunos lagartos.

ALEXA: RIFTS: TURNO 4.

            Habían pasado ya varios días desde que murió su abuela. Desde entonces las cosas habían ido de mal en peor. Sentía la necesidad de alejarse de aquella ciudad decadente aunque sólo fuese por unos días, la mayoría de las calles le recordaban los días en que aún vivía con su abuela. No podía continuar allí por mucho más tiempo.

Por unos momentos dudó sobre lo que debía hacer. Nunca le había gustado aventurarse fuera de los protectores muros de Darkgate. Su última experiencia cuando

visitó a la familia wolfen no había sino reforzado su creencia de que en el exterior de Darkgate el peligro acechaba en los lugares más insospechados. Recordó el dolor de la viuda y los cachorros, tan parecido al suyo propio. Podía imaginar el horror que habían supuesto los ghouls para ellos. ¡La mitad de la familia muerta! No había podido

hacer gran cosa por ellos salvo asegurarse de que los supervivientes no hubiesen contraído ninguna enfermedad por efecto de los ghouls.

            Pero aquello no era lo que más preocupaba a Alexa. Por lo menos el problema de los ghouls estaba resuelto ¿o no? ¿Cómo habían llegado hasta ahí esos ghouls? Probablemente nunca lo sabría. Sin embargo, tal vez sí que podría hacer algo para encontrar a la chica perdida de Santa Fe. Ella ya no podría recuperar a su abuela, pero aquella muchacha, de la que ni siquiera sabía el nombre, podía seguir viva.

            Comprendió que sin darse cuenta había tomado una decisión. Pero para llevar a cabo sus planes de rescate necesitaría ayuda…

            De pronto vino a su mente una conversación que había escuchado en la escuela de magos por casualidad. Muxu hablaba con un compañero de su intención de unirse a un grupo de aventureros. No conocía demasiado a Muxu, en realidad casi no conocía sus compañeros, pero era un modo de empezar. Sin duda no era una mala idea hablar con ella. Lo peor que podía pasar era que rechazase su ayuda. Por otro lado haría falta más gente para llevar a cabo la misión, las afueras de Darkgate eran un lugar peligroso.

            Se estremeció al recordar las habladurías sobre el dinosaurio que había matado a una familia ganadera. Le indignó que el sherif no hubiese hecho aún nada al respecto. Aquello reforzaba su creencia de que los poderosos nunca se preocupaban por lo que pasase a otros.

            Abandonó aquellos pensamientos al recordar lo que debía hacer, tenía que encontrar un grupo de aventureros dispuestos a aceptarla y ayudarla a encontrar a la chica de Santa Fe. Tras años entre los muros de Darkgate, no era difícil saber que la mayoría estarían emborrachándose en el Saloon. Dirigió sus pasos con renuencia hacia allí, nunca le había gustado demasiado aquel lugar lleno de gente. Entró en el local detrás

de unos tipos fornidos, haciendo lo posible por pasar desapercibida.

            Una vez dentro echó un vistazo a los parroquianos. Afortunadamente no se había equivocado, en una mesa apartada del escenario se encontraba el grupo de aventureros que habían acabado con la amenaza de los ghouls.

            De hecho, estaba de suerte ya que Muxu también se encontraba allí. Se encaminó a la barra, necesitaba tomarse algo fuerte antes de reunir el valor para acercarse a ellos. Le inquietaba la idea de tener tantos pares de ojos sobre ella y sin duda así sería cuando se acercase a la mesa donde ellos se encontraban.

            Se bebió de un trago el tequila y se dirigió con paso seguro a la mesa en donde Muxu parecía hablar con un hombre implementado y un wolfen. El wolfen le resultaba familiar pero no podía recordar de qué. Reaccionó a tiempo para apartarse del camino del enorme ser de aspecto lupino.

            Parecía que ya había terminado de hablar con Muxu y su acompañante y, sin duda molesto en un edificio pensado para seres más menudos, se abrió paso hasta la salida. Alexa se recompuso y arregló un poco sus ropas antes de acercarse y saludar a Muxu cordialmente.

            Muxu pareció algo sorprendida de ver a Alexa allí. Como su habitación estaba al lado de la de ella habían hablado bastantes veces. Pero el Saloon era el último lugar donde hubiese esperado encontrarla. Percibió que Alexa no se encontraba cómoda en aquel lugar, pero no dijo nada al respecto. En cambio le presentó a su acompañante, Arlec, y la invitó a sentarse. Alexa sonrió agradecida y dedicó una sonrisa tímida a Arlec antes de comenzar a hablar.

- Verás Muxu, últimamente he estado dándole vueltas a  la idea de ir en busca de la chica desaparecida de Santa Fe. - La voz de Alexa sonaba dubitativa, como si no supiese por dónde empezar. - Por la escuela de magos se comenta que has decidido unirte a un grupo de aventureros y he pensado que tal vez también estés interesada en rescatar a la chiquilla perdida. Y puede que tu amigo también. - Dijo recordando la presencia del silencioso Arlec. - Yo por mi parte estoy decidida a intentarlo. No podría mantener mi conciencia tranquila sabiendo que tal vez podría haber hecho algo.

- Ahora no puedo responderte, aún no hemos decidido que hacer. Tal vez podrías preguntar en la mesa de al lado. - Con un gesto Muxu señala la mesa en la que se sientan Emil, Rolando, etc.- son aventureros y puede que te puedan ayudar.

            Alexa entrecerró los ojos considerando la sugerencia. En la mesa que Muxu le había indicado se encontraba el contrabandista elfo llamado Emil acompañado de Furia Ciega, el kankoran; Rolando, el pistolero; Quick Silver, el extraño alienígena; Vicky Morrisona, la Ranger, y otras personas a las que no pudo identificar. Los supervivientes de la familia wolfen le habían hablado de ellos y de su hazaña rescatándolos de los ghouls. Eso la infundió ánimos, tal vez estuviesen dispuestos a buscar a la desaparecida.

            Se fijó luego en las otras personas sentadas a la mesa de las que no sabía nada. El enano con aspecto de tecnomago que parecía absorto en su cerveza. Otros dos tipos permanecían un poco apartados del resto, manteniéndose al margen de la conversación general. Por último, estaba un hombre de aspecto pálido e indispuesto que claramente se encontraba enfermo. Alexa se preguntó dónde se había dejado el sentido común aquel hombre. ¿Qué hacía en una taberna cuando debería estar descansando? De todos modos tal vez podía aprovechar la situación para congraciarse con ellos.

            Esbozando la mejor de sus sonrisas se acercó al experimentado grupo de

aventureros y se presentó.

- Hola. Me llamo Alexa y quería preguntaros si pensabais ir en busca de la chica desaparecida en Santa Fe. Me gustaría saberlo porque yo pienso ir y tal vez sería más fácil encontrarla si colaboramos. - Los presentes la examinaron en silencio antes de responder. Alexa se mantuvo inmóvil durante el escrutinio, ya sabía que tendría que pasar por aquello.

- Si al final decidimos ir te lo haremos saber. - El que hablaba era Emil, que parecía haberse erigido en portavoz del grupo. - De todos modos no veo en que podrías sernos de utilidad, no eres la única que quiere unirse a nosotros.

- Creo que mis habilidades podrían ser de utilidad para encontrar a la chica. Entre otras cosas, soy psiónica. Me gustaría que me aceptaseis pero, tanto si lo hacéis como si no, yo no puedo permanecer aquí mientras esa chica sigue desaparecida. Bien, si decidís ir a buscarla, podéis encontrarme en el colegio de magia…

            La tos de Shidi interrumpió lo que Alexa estaba diciendo. Más por costumbre que por otra cosa Alexa comenzó a examinarle.

- ¿Se encuentra mal vuestro amigo? Tal vez pueda hacer algo para ayudarle si me permite hacerle un reconocimiento. -

            El aludido no parecía en condiciones de protestar. Alexa se concentró y usó su poder para intentar conocer el origen de su mal. (Uso mi poder de diagnosis). Notó que el hombre se inquietaba por ello e intentó calmarle. Si puedo le curo o intento aliviar los síntomas.

-Bueno, tal vez deberías descansar un poco. El Saloon no es el sitio más apropiado para alguien enfermo. Me temo que debo irme, mañana tengo muchas cosas que hacer.

            Dicho esto Alexa abandonó el Saloon. Estaba cansada y al día siguiente tenía que comenzar los preparativos para salir de viaje. Aún tenía que comprar provisiones, equipo de acampada, conseguir mapas… Y luego estaba el problema de conseguir acompañantes. Ella sola no llegaría muy lejos, pero no podía demorarse en exceso pues no sabía en qué situación se encontraba la chica de Santa Fe. Si tardaban demasiado podían encontrarla muerta. Por lo menos sí que sabía dónde encontrar a Muxu.

            ¿Y el wolfen? ¿Estaría dispuesto a ayudarla? Bueno, para saberlo primero tendría que encontrarlo. Sin duda iba a tener un día muy ajetreado.

ARLEC ZEALOT: RIFTS: TURNO 4.

He oído que necesitan reparar el Samas, pero que es poco probable que, el mecánico de DarkGate se lo repare por ser de la Coalición, me gustaría proponer al grupo si quieren que lo haga pasar como de mi propiedad como acto de buena voluntad (no creo ser capaz de  reparar nada).

Les pido si puedo unirme a ellos, no me irán mal unos compañeros para empezar, tengo un problema, no tengo ningún transporte y me irá bien viajar con un grupo con transportes para poder llevar mi armamento pesado.

Visitar el Gremio de Mercenarios y pedir información sobre el dinosaurio que vamos a intentar cazar. En el interior encuentro el maestro un enano guerrero. Me cuenta un par de consejos espero poder utilizar me dice que tenga cuidado ya que es muy peligroso y hacer lo mismo en la biblioteca consultar los libros sobre especies, y libros cartográficos sobre Santa Fe. Toda la información posible, puede que encuentre algún punto débil o algún sitio donde buscar e intentar llegar la mejor forma posible.

Vuelvo a ver que han decidido sobre si me quieren en el grupo, les recuerdo que un grupo numeroso tiene más posibilidades de sobrevivir en este lugar.

Mi NG-E4 Eyector de Plasma sería de gran utilidad con este tipo de bichos, y que podría ofrecer mi otro C-12 Rifle Láser de Asalto, para poder pagar las reparaciones, no me sirve de mucho tener dos en estos momentos. Puede que luego me arrepienta, pero ahora puede que me sea más útil de esta manera, incluso les recuerdo que puedo pilotar un hovercraft y que pudo llevar alguno de sus vehículos.

Me preguntaba si sería posible jugarme 500 créditos en el Casino. O gano más o pierdo los 500, si gano algo me planto en los 5000. Ya que hay un casino vamos utilizarlo. Siempre he jugado a todo tipo de juegos, pero no estoy acostumbrado a apostar dinero, se lo pediré a alguno del grupo si quiere venir y jugar como mi compañero sería ideal que me acompañara un psíquico, podría ayudarme a ganar, podríamos incluso ganar más dinero. Para poder mejorar la situación del grupo, ya que nos irían bien unos cuantos créditos más.

Estoy ansioso por entrar en combate y probar que puedo ser de gran utilidad al grupo, voy a buscar todo lo que necesito mi vestido y mi armadura, llenar las cantimploras,  y coger las raciones.

Quiero hablar con Shidi, saber más sobre él y la Coalición.

Acciones Futuras:

Quiero ir a Santa Fe sea como sea con el grupo o sin él incluso si he de ir andando, no tengo prisa por llegar.

Mirar el libro de rutas el mejor camino para llegar a Santa Fe.

Tomar una última copa en el bar, y visitar el salón de los baños, puede que pase mucho tiempo hasta que vuelva a DarkGate Keep.

Hablar con el grupo y saber que han decidido.

Maximus: Rifts: Turno 4:

Tras deambular por la ciudad de DarkGate, y pensar concienzudamente qué hacer después de la muerte de un buen amigo wolfen a manos de los ghouls, (al que ayudaron varios justicieros de esta ciudad) he decidido unirme a ellos para vengarme y para que la justicia se cumpla como buen cybercaballero que soy. Todos mis familiares han puesto su confianza en mí y todo el equipo que poseo se lo debo a ellos, espero no defraudarles.

Mi máxima preocupación es que Muxu la maga y Arlec el mercenario, me acojan en su grupo (me gusta luchar en compañía), creo que se hará realidad porque ellos están necesitados de nuevos colegas de aventuras después de que varios de ellos partiesen de DarkGate. No entiendo por qué lo hicieron si habían conseguido una fantástica victoria frente a los malditos ghouls.

Camino por la ciudad, sé que se reúnen en el Saloon así que me dirijo allí. Me siento extraño entre toda esa gente que me mira por las calles de DarkGate, parecen asustados, la verdad es que mi aspecto es bastante amenazador ya que mido 2,7 metros, peso 183 kilos y tengo el cuerpo completamente peludo, debido a mi condición de wolfen. Miran hacia mis patas traseras, cuyas rodillas se doblan al contrario que las de los humanos y me dirigen miradas de verdadero horror y desprecio.

Ya veo la entrada del Saloon, tiene esas puertas que se abrían en ambos sentidos y que eran típicas de las antiquísimas películas de western. Mi entrada en el Saloon es seguida por multitud de gente, he tenido que agacharme muchísimo para no golpear el dintel de la puerta con mi cabeza.

En una mesa en un rincón están Muxu y Arlec, discutiendo acaloradamente sobre algún tema. Se percatan de que les estoy mirando fijamente, dejan de hablar y colocan sus manos en sus armas temiendo que yo les agreda. Desvío mi camino y me coloco en la barra del bar, antes de hablar con ellos quiero fijarme en cómo son para conocerles bien.

Pido al camarero una cerveza bien fría y le doy un sorbo. Miro disimuladamente a mis dos posibles futuros compañeros, los cuáles, al darse cuenta de que no quiero pelea, han seguido hablando. Muxu parece una mujer sin complejos y muy habladora, mientras que Arlec es callado y tímido. Las personas calladas siempre me han dado la sensación de que no hablan porque tienen algo que ocultar. El brazo biónico de Arlec es muy aparatoso y no parece muy cómodo con él. En cuanto a Muxu, discute con énfasis, quizás porque su carácter sea abierto o porque el tema de conversación le conozca bien. Es una mujer de extraordinaria belleza, lástima que no sea una hembra wolfen.

Acabo la cerveza y camino hacia ellos y de nuevo me encuentro frente a su mirada de recelo, odio provocar esa sensación en la gente. Les explico que quiero unirme a ellos y su desconfianza les hace preguntarme las razones.

- Quiero acabar con las fuerzas del mal y defender la justicia, como cybercaballero me he entrenado para eso. Sé que vosotros habéis ayudado a la mujer y los hijos de un amigo mío que murió a manos de los ghouls y también sé que necesitáis nuevos compañeros de aventuras, por eso quiero acompañaros.

Sus miradas me examinan de arriba abajo, decidiendo si soy digno de su compañía.

- Vuelve mañana a esta misma hora y te daremos una respuesta – contesta Muxu.

Me despido de ellos y me alejo de allí, no tengo un lugar donde hospedarme, ya que acabo de llegar del desierto, donde estuve estudiando durante tres años con mi maestro, un cybercaballero retirado, así que doy un paseo por las calles mientras recapacito sobre lo hablado con Muxu y Arlec.

De repente, me acuerdo que tengo que revisar si la batería de mi hovermoto tiene energía, supongo que sí, ya que la recargué recientemente. Otra de las cosas que debería hacer es encontrar un lugar donde alojarme, me he informado sobre el precio de un piso de alquiler del doctor, pero llego a la conclusión de que mis escasos créditos no me lo permiten. Opto por alquilar una habitación en el Saloon, por lo tanto es muy fácil que vuelva a verme con Arlec y Muxu. También debería hallar la manera de ganar unos cuantos créditos.

Ya de vuelta en el Saloon (Muxu y Arlec se han ido ya, desconozco dónde), pregunto si hay alguna habitación libre para pasar la noche, espero que la haya porque sería el único sitio donde descansar y guardar las partes de mi equipo que no puedo llevar en la hovermoto.

La habitación que me han dado es un auténtico estercolero, está llena de bichos, las tablas del suelo crujen bajo mi enorme peso y tengo que andar agachado todo el tiempo. Voy a descansar un rato porque tengo la impresión de que mañana será un día muy largo.

Mxyzptlk

MUXU: RIFTS: TURNO 4.

Después de una dura pelea, decidí ir a tomar unas copas a la cantina del pueblo, sabía que allí me > encontraría con alguien conocido. La puerta era grande, de madera, como las que habían antes en los bares del antiguo oeste. La gente entraba y

salía alegremente, se oían gritos desde fuera, de gente dispuesta a empezar una bronca, pero enseguida se apaciguaban, sabía que tenían todas las perder si empezaban una.

Entré, nadie advirtió mi presencia, andé sigilosa y despistando a los borrachos, hasta situarme en la barra. Me pedí un whisky con hielo, para calentar mi cuerpo, que estaba bastante helado, ya que fuera hacía frio. Empecé a familiarizarme con el ambiente.

Era un local grande, con bastantes mesas de madera y todas ellas ocupadas por grandes hombres que bebían y reían, mientras jugaban partidas de cartas o disputaban a ver quién era más fuerte. Apenas se percibía la música de fondo, que el barman intentaba poner (a su gusto), debido al gran barullo de la gente.

El bar tenía dos plantas, en la de arriba, no dejaban de entrar y salir chicas de unas pequeñas habitaciones, iban ligeras de ropa, seguramente mujeres de alegre vida, que intentaban, pues eso, alegrar la vida de aquellos hombres, que después de una dura pelea contra el enemigo, necesitaban desahogar su rabia o simplemente relajarse.

Entonces me fijé en una mesa, que empezó a hacer bastante ruido, allí estaban los aventureros locales:

1) El contrabandista elfo Emil, con su espectacular cabellera dorada y su parche en un ojo.

2) El novato enano tecnomago Halberd Hammerstaff.

3) El pistolero Rolando Deschain.

4) El vagabundo kankoran ahora conocido ahora como Furia Ciega.

5) El crío alienígena de ojos saltones y veloces reflejos Quick Silver.

6) El mercenario del brazo biónico Arlec Zealot.

7) El extraño y misterioso J.T. Shidi vestido con sus informales ropas de calle y con aspecto de encontrarse mal.

8) La intimidatoria Justice Ranger Vicky.

9) Y un poco más apartados el mago Thomas, el ex-comando de inteligencia Victor y varios aventureros más del local.

Me habían hablado de ellos, y sabía cuál era su destino, el cual me interesaba, ya que yo también me disponía a partir hacía allí. Me habían dicho que eran bastante buenos en su trabajo y aprovechando la ocasión decidí acercarme a ellos, pues necesitaba con urgencia que me conocieran y me aceptaran, aunque sabía que más de uno no era muy amigo de los magos, pero debido a mis condiciones físicas y la necesidad que tenían de encontrar a uno (ya que el último, si mal no recuerdo, deja el grupo), imaginé que no prescindirían de mi, y sería aceptada rápidamente en su grupo.

Me acerqué con paso decidido, (otro inconveniente es que soy chica y no sé si me aceptarán en el grupo), ninguno se percataba que me acercaba hasta que Vicky Morrisona se percató que me  dirigía con paso ligero y apartando la gente a  empujones, hasta su mesa. Avisó a todos, que enseguida me analizaron, de arriba abajo, algún que otro gruñido y sonrisa, pero el silencio reinó en la mesa. Ya no se reían ni gritaban, ahora me analizaban y esperaban a que dijese algo.

Me presente: - "Hola -dije- me llamo Muxu, y me gustaría formar parte de vuestro grupo. Me han hablado de vosotros y todos han llegado a la conclusión que sois bastante buenos, y debido a que tenemos objetivos comunes, me interesaría ser aceptada en vuestro clan".

Nadie dice nada, es más, se quedan mirando atónitos, sin saber que decir. Hasta que la chica, celosa, dice:

- "¿Ah, sí? ¿Y qué puedes hacer tú por nosotros?" -

La miro con recelo y empiezo a comprender, que ella va a ser un obstáculo muy grande para ser aceptada en el grupo y si soy aceptada, para llevarnos bien. Me siento con ellos, y les empiezo a explicar quién soy y lo que puedo hacer. Me citan para mañana en un lugar más tranquilo y para hablar mejor del tema, que lo tienen que  pensar. Acepto, me levanto, pago mi copa y me largo.