Partida Rol por web

Mientras los tres gladiadores se adentrabn en la arena, Morkhalee, un poco molesta por los recientes acontecimientos, se dirigió al público.

Bienvenidos, hermanos míos. A pesar de que fuerzas que no comprenden la importancia del Coliseo para nuestro pueblo y nuestro futuro, nosotros prosperamos. ¡Os presento la última creación de los Escultores de Carne! Parece más parca en palabras de lo normal.

Del enorme enrejado apareció un nuevo engendro, de gran tamaño, y coronado con dos cabezas. Armado con un enorme Garrote, y listo para matar.

El ser, mientras vigilaba a sus adversarios con sus dos pares de ojos, agitaba su masivo tronco con letal destreza.

El ogro es defensor y ya ha declarado

Te comentaba en tu escena que al final anda Hugo por aqui, asi que le he dado el puesto ya que lo pidio primero. Mañana voy a hacer un evento de grupos y te meto, tranquilo ;-)

El 2x10 tambien desmonta un 2x9. Decidan sus leñazos, y hagan su turno de atacantes, dama y caballeros.

(Que blandico que me ha salido este XD)

Dios, no se puede uno levantar a las 6:30
XDDDDD

Luego dirá Boudicca que no se entera de las reglas... ¡y las domina mejor que yo!

Pues una vez escogidos los ataques, podéis comenzar con el turno de atacantes. Si uno de vosotros me pone el estado final del bicho cada vez que acabeis un turno de defensores, seréis mis muy mejores amigos ;-)

A la espera de un nuevo evento me encontraba, a la espera de la llamada que me indicaría que debo ir a la arena. No sabía de que se trataba, tan sólo que en esta ocasión no tendría que luchar contra gladiadores….

Me encaminé con paso firme a la arena, el sol clavo su furia en mis ojos, pues en mi rostro no tenía otro blanco. Respiré hondo, y eché una mirada a mi alrededor y allí me encontré con los que iban ser mis compañeros…sin duda la dueña de la arena no podía haber elegido mejor…para torturar mi alma, para agitar mí espíritu…se contaban entre mis compañeros los dos hakhim…Kiurbu y...Ana...

Sus rostros envueltos con un rictus de concentración plena, miraban fijamente al que iba a ser el blanco de nuestras iras, y la delicia del público...una forma enorme con dos cabezas y brazos como troncos de un árbol, nos esperaba en el centro, preparado ya para el combate...

Sacudí mi cabeza, el combate ya había comenzado, mis compañeros ya se abalanzaban contra el enemigo común...no debía entretenerme, salí disparado a ayudar a mis compañeros, al menos el día de hoy...

Aquella horrible criatura, dirigió su furia contra el hakhim, que trato de esquivarla e incluso herirla, con movimientos elásticos y acompasados, furia, poder, serenidad...aproveche que se había centrado en él para realizar un ataque hacia su cabeza, blanco difícil por su gran altura. Mientras mi cerebro accionaba mis músculos para realizar el ataque, por un momento, tan sólo un instante mis ojos coincidieron de nuevo con la miel de Anat, pozo de calma, de paz...que lo envolvió todo, que alcanzó mi espíritu...en aquella serenidad comprendí que quizá sería mejor buscar otro blanco y así lo hice consiguiendo dañar a la criatura en uno de sus brazos...

La reja se retiró quejosa a mi paso cuando el caminar tranquilo me llevó a la arena... Y en ella entré con la cadencia orgullosa... con el gesto desafiante... mientras de nuevo los gritos feroces de aquel público atronaban oscureciendo el cielo y sus propias almas... y yo entornaba la mirada miel recorriendo las gradas mientras las dagas dibujaban de plata mis pasos... Con la barbilla alta y la Diosa en el gesto... en la frente... en el brillo de la mirada que iluminaba aquella tiniebla con su Fe... Pobres seres enfermos de la podredumbre de su esencia... Pobre pueblo maldito...

Un nuevo ser de infierno creado por aquellas mentes perversas me esperaba bajo el palco de la Dama negra... y a él me dirigía espigada y orgullosa cuando el crujir del metal a mi lado me obligó a detenerme y buscar con la mirada... El miel se enmarañó un segundo en sus ojos negros mientras la sonrisa se dibujaba en mis labios... Viento.... y un segundo después volví a encarar y caminar hacía a aquel monstruo... volví a perder los ojos en la bruja para cadenciosa acudir a mi destino sostenida por la brisa y la decisión ardiente de mi pecho... Orgullosa y fuerte... Blanca y plata... jazmín y sol... y frente a él me detuve... y la sonrisa se me me perfiló en los labios cuando le sentí a mi lado... Viento y Luna de nuevo... Orgullo del Desierto... Sangre de nuestra arena... valor de nuestra casta...

La Dama hablaba... y con el desprecio en la sonrisa la escuchaba con el desafío en el gesto... la saludaba con las dagas dibujando de plata el movimiento.... mientras aquel engendró gritaba rasgando el aire con su voz... con el movimiento agitado de su cuerpo y sus brazos... y aquel garrote gigantesco que ya buscaba nuestra sangre...

Su movimiento, demasiado rápido, demasiado diestro me sorprendió.. y le vi abalanzarse contra Kiurbu que enarbolando la lanza le esperaba... el movimiento inesperado a su lado... y sentí las pupilas dilatarse por la sorpresa... el entreabrir de los labios... De nuevo él...Tan rápido...

Perpleja observaba la escena...Cuándo había llegado? Hugo aparecía como una exhalación a nuestro lado... con el gesto certero de su acero buscando la frente del engendro mientras el ser levantaba su brazo armado contra Viento... y yo.. detenida en el centro de la arena...detenido el tiempo y el aliento, encontré la mirada de Hugo en la mía... el leve asentimiento... la sonrisa maliciosa... y el hombre supo.... Su acero sajaba el codo del Ogro mientras Viento hundía la lanza en su pecho... mientras la criatura lanzaba un grito desgarrador al cielo de aquel coliseo... y a los oídos de su dueña...

La sonrisa se me dibujo como un desafío en los labios mientras el miel de la mirada buscaba las pupilas de Hugo y Kiurbu... El plata brilló a mi alrededor...

Bien hallados.....

Falta Ormuz por defender...

-. Aghhhhhhhhhhhhhhh...- El brutal impacto de su enorme garrote contra mi protectora lanza resonó en el Coliseo... mis fuerzas amenazantes de ser incapaces de contener su arremetida...

Aquella enorme aberración de dos cabezas se había abalanzado sobre mi con un par de sus pequeños ojos inyectados en sangre pendientes de mis movimientos. Había reaccionado con rapidez... viento del desierto... pero quizás no la suficiente contundencia.

-. Aghhhhhhhhhhhhhhhh....- El rostro contraído por el increible esfuerzo que me veía obligado a someter a mi cuerpo.

Un sombra, rápida como un destello, apareció de la nada para intervenir... su letal filo se dibujó primero... poco después su afilado dueño... un filo arañó el brazo de la criatura que, tras profesar un gutural grito de dolor, amilanó su presa... una oportunidad brindada por el misterioso hombre encapuchado que no desaprovecharía. Aquella audaz maniobra había decantado la balanza a mi favor, conseguí desviar el peso de su presa... liberando mi cuerpo... cuerpo que giró como un torbellino bajo el enorme brazo para terminar por perforar su costado con mi obediente lanza. Al primer grito se le unió el segundo ensordecedor...

El hedor de sus nauseosas entrañas me abrazó... obligándome a alejar de él con un nuevo giro... que me condujo a otro abrazo, a otra esencia... esencia de flor blanca... esencia de Azahar. Mi cuerpo afianzado... mi voluntariosa lanza a una mano acariciando mi espalda... mi sangre escudando a la Sierva del Único... pudiendo sentir su aliento, coma la brisa fresca que reina en las noches de nuestra tierra... aliento que me erizó la piel de mi cuello irremediablemente... su sedosa túnica albina rozando mis piernas, enredándome en el suave torbellino... un escalofró recorrió mi espina dorsal... recordándome la misma sensación que tuve cuando su sonrisa iluminó la mia no hace mucho.

Céntrate Ormuz... céntrate...

Mis silenciosos ojos azabaches, pozos por los que asoma mi ardiente alma, buscaron, agradecidos, a los de la sombra... los tres formaríamos un equipo, más que eso... Sombra, Viento y Luna.

-. Siempre... bien hallada... Al-Azahar...- El deseo de sumergirme en sus pupilas pero aquellas otras amenzantes, pequeñas e inyectadas en sangre... no me lo permitirían. -. Bien hallado Sombra... hoy me has devuelto la vida que me arrebataste... te lo agradezco.- Tomé aire. -. Su piel es más dura que el cuero, no será fácil llegar a su corazón... tendremos que poner todo nuestro empeño... juntos!!!- El desafio arreció en mis ojos negros... como negro era mi cabello... como negras eran las vetas de mi alma... -. Intentaré protegeros con mi lanza en este turno...-

Afiancé mi lanza con fuerza... mis pies en la arena... y mis ojos en aquellos ensangrentados...