Partida Rol por web

-¿Entonces ya lo has empezado? Oh, entonces seguro que te habra quedado ge..-se interrumpio Kendra, al ver llegar a Ithan. Y no fue su llegada lo que hizo que enmudeciera, sino su gesto. Ithan no brillaba, como de costumbre. Se le veia apagado, pensativo.

Kendra fruncio ligeramente el ceño en una mueca de preocupacion. Y, en cuanto se sento junto a ella, dejo un beso en su mejilla, cariñosa, demasiado cortada como para repetir lo del otro dia delante del resto. ¿Y si ese es el problema? A lo mejor se lo ha pensado mejor, Kendra...

Aquel pensamiento hizo que sintiera un pellizco en el estomago. Sin embargo, se obligo a desterrarlo, mirando directamente al chico- Ithan... ¿Que sucede? ¿Estas bien? - le preguntó, en un susurro, mientras asentia, como contestacion a su pregunta- Si, nosotros si... Estabamos.. Hablando de los disfraces... -añadio, mirandolo aun con aquel gesto preocupado, esperando a que respondiera a su pregunta.

Lincoln llegó junto a sus compañeras, que iban hablando sobre el ciencias de Anthony -Bah, dejad el tema, Anthony no le importaba a nadie, literalmente hablando, ni siquiera la arpía de su prima se ha preocupado lo mas mínimo por él, Ludmilla solo está atontada porque, como ha dicho, ha tenido mala noche, no le deis mas vueltas- Dijo con todo despreocupado, propio de él, al fin y al cabo, no le importaban lo mas mínimo, ni Anthony, ni Ludmilla -A mi el que me toca las narices es Aiden, enserio, hablad con él, porque como lo haga yo, igual me lo llevo a clases de Duelo para hablar- Se paró un segundo ante las caras de sus compañeras -No es broma...- Dijo levantando una ceja, pues Lincoln tenía muchas ganas de espabilar a Aiden -Enserio, no jodamos, si tiene horchata en las venas el puto crío, si se largara como Anthony solo nos haría un favor...- Soltó sin pensar en las consecuencias de sus palabras.

A Linc se le notaba que acababa de despertarse, y no solo eso, sino que le habían despertado y no había conseguido dormir suficiente, el cabreo era mas que notable en el joven Siral, pero justo cuando se disponía a seguir despotricando de los demás, por ejemplo de Cassius, llegó Ithan y todos se callaron -Buenas chaval- Estaba tan dormido que ni se había fijado en su fugaz entrada con esa cara seria, impropia de Ithan.

Los demás empezaron a hablar de los disfraces y Linc solo podía escuchar, hasta que salió el tema de la cara -Yo voto por unas mascaras tipo Mortífagos, al fin y al cabo es de lo que iremos... ¿Sabéis de dónde podemos sacar una?- Linc había pensado en un lugar, pero además de peligroso, era estúpido ir, pues si les pillaban, la cantidad de puntos que les quitarían, era un tanto grande.

Recibió el beso de parte de Kendra, y le sonrió dandole un pequeño apretón en el antebrazo para darle a entender que con ella todo iba bien. Escuchó de que estaban hablando sobre los disfraces, cuando Kendra le preguntó que le pasaba. Entonces, la miró, y lanzó un largo suspiro mientras se quitaba la palestina, dejandola junto a él, y mirando a los demás allí sentados. 

Lanzó un largo suspiro. - No. - Acabó por decir a su pregunta sobre si estaba bien, y se encogió de hombros. No sabía si aquel era el mejor momento y el mejor lugar. Así que frunció el ceño, y miró a Kendra durante unos segundos, y después miró a Linc y Asterope. - Es que... llevo unos días pensando. Es una tontería, no sé... Es que... A ver... - Hizo una pausa, mirando a su alrededor durante unos segundos. - Llevo unos días pensando que el sombrero se equivocó conmigo. - Acabó por soltar.

- ¿Al final de que iremos disfrazados? - Acabó por preguntar, desinformado, habiendo escuchado a Linc hablar de disfrazarse de mortifagos. A él le parecía bien, Halloween iba de dar miedo, después de todo, y aquel era un tema que tenía bastante por la mano. Sabía donde conseguir al menos un par de mascaras ya hechas. 

Desde que había terminado la clase, cada vez que Linc abría la boca era para soltar una burrada. Y como Asterope se había cansado de fruncir el ceño y mirarlo con reproche, optó por no hacer caso a su mal humor. Estaba claro que seguía afectado por "haberse levantado con el pie izquierdo", como había dicho Cassius. Qué había pasado, la niña lo ignoraba; pero esperaba que su amigo pudiera echarse una siesta antes del baile o hacer un esfuerzo por cambiar su ánimo.

Siguiendo con el tema de los disfraces, Linc había hablado de llevar unas máscaras. ¿Pero cómo podrían encontrar unas? Justo ese detalle se le había escapado y podía haber aprovechado esa semana anterior para resolverlo. Pensaba que igual ya no les daría tiempo, cuando Ithan confesó cuál era su problema.

A Asterope no le sorprendió el comentario en sí. Ya era un tema que habían tratado todos, que el león quedaría muy bien en Slytherin por lo bien que se llevaba con ellos tres. Lo que sí le sorprendió fue que le preocupara tanto. Aunque lo consideraba muy orgulloso de su casa, la pequeña también creía que el niño estaba muy por encima de esa división-. Bueno, Ithan, si quieres mi opinión te diré primero que el sombrero es un objeto muy poderoso. Si te ha puesto ahí es porque tus características son principalmente de Gryffindor. No creo que se equivocara contigo; lo que creo es que has encontrado gente –Miró medio segundo a Kendra- con la que te sientes más cómoda en otras casas. Al final eso es lo que nos importa a todos -¿Acaso ella no había deseado por un momento acabar en la misma casa que sus compañeros de vagón, fuera la que fuera, por lo bien que le habían caído y por la comodidad de no tener que conocer a nadie más?

Asterope no lo había confesado a nadie, pero ella también se había sentido fuera de lugar en Slytherin. En cierto modo comprendía la preocupación de Ithan, así que intentó ayudarlo de la misma forma que ella había conseguido superarlo: No dándole tanta importancia al tema, pues era algo por lo que poco podía hacer. La pequeña estaba muy orgullosa de ser una Slytherin y de trabajar duro por ella; pero ahora no lo consideraba como algo vital ni algo que la definiera. Simplemente una circunstancia temporal.

- De todas formas, no todos tenemos únicamente características de nuestro fundador. No somos solo valientes o solo ambiciosos o solo inteligentes. Todos tenemos un poco de todo –Ella misma dudaba de dónde acabaría al empezar el curso, tras sopesar sus habilidades, a pesar de lo segura que había estado hasta entonces de ser una Slytherin-. Me parece un buen sistema para conocer a gente, fomentar una competición de estudio y sentirse incluido en un grupo. Pero he visto en este tiempo que no hay que darle tanta importancia a esta separación –Sí, era cierto que acababas pasando más tiempo con tus compañeros, pero eso no impedía en ningún momento juntarte con los demás, como si no existiera tal división-. Creo que al final se reduce a que los profesores querían crear grupos pequeños de estudiantes en lugar de tenerlos a todos juntos. Y se inventaron esto. Así que no le des muchas vueltas. Piensa que lo único que implica ser un Gryffindor es dormir en tu sala común, llevar un uniforme diferente y cumplir un horario de clases específico. El resto del tiempo, eres igual que nosotros y puedes hacer lo mismo que nosotros.

Esperó a ver cuál era la reacción del chico y si había conseguido animarlo antes de seguir con los disfraces.

Lincoln escuchó a Ithan mientras dejaba la mochila en el suelo, levantó una ceja y cruzó los brazos "¿Enserio?" pensó para si mismo, nunca había pensado en ello, porque Linc estaba muy contento de ser un Slytherin, era lo único que siempre había querido, pero en cierto modo comprendía a su amigo, al fin y al cabo, ¿Quien no querría ser un Slytherin? -Igual si que deberías ser uno de los nuestros- Dijo rompiendo su silencio y descruzando los brazos para poner sus manos en la cintura -Pero es mejor que no estemos juntos macho ¿Sino con quien iba a competir yo? ¿Con el Weasly?- Bajó la mirada a modo de burla, mientras suspiraba y movía la mano como abanicando el aire -No hay color jaja- se empezó a sentar en una piedra enorme que había en el patio mientras seguía hablándole -Enserio, no le des tantas vueltas, siempre puedes ver a tu "arpía" novia justo después de clase y... Siendo sinceros, podría haber sido peor, podrías haber acabado en Ravenclaw o Hufflepuf jajaja- Dijo sonriendo para quitar importancia a sus palabras.

Linc ya no hacía mucho caso al tema de los disfraces, pues no paraba de pensar como sería tener a Ithan en Slytherin... y habría sido interesante, igual podría haber hecho mas de una cosa, que por culpa de sus FANTÁSTICOS compañeros, no había podido, como "hablar" con la maldita profesora que no le dio los puntos extras por su Sonitus...

Kendra miró a Ithan, con el ceño ligeramente fruncido, en una expresion concentrada, mientras escuchaba el problema del chico. - ¿Por qué dices eso? - preguntó entonces, mirandolo durante unos segundos, antes de que Asterope y Lincoln se pusieran a dar su opinion al respecto. Kendra tenia claro lo que opinaba sobre aquello en particular, tenia clara cuál era su postura en cuanto a la confusion del sombrero. Sin embargo, no era aquello lo que preocupaba a la pequeña de los Lestrange. Era el hecho de que Ithan se lo hubiera planteado, saber como habia llegado a aquel punto.

Aquello, ademas, habria otro interrogante. ¿Lo decia con preocupacion? No tenia muy claro si el problema era que se sentia poco Gryffindor, o si lo que temia era ser demasiado Slytherin. Y esta ultima opcion, desde luego, no la dejaba a ella en muy buen lugar.

Apretó entonces el antebrazo de Ithan, mirandolo de reojo, con una delgada sonrisa en los labios. -Ithan... - susurro, en un tono comprensivo, ladeando la cabeza para mirarlo - Eres una persona inteligente, extrovertida, valiente y ambiciosa, entre otras. Y si te guiaras por eso, tienes características de las cuatro casas. ¿Y que? ¿Que tiene que ver eso? -dijo, mirandolo, aun con aquel aire comprensivo- ¿Cual es tu duda, que quizás deberias haber estado en Slytherin, como nosotros? Piensa en por qué no lo estás... ¿Fue por falta de aptitudes, o porque querias estar en otro sitio? El mago tambien elige su destino Ithan. -añadio, con total tranquilidad- Y no tienes por qué ser como el resto, ni comportarte como el resto. -dijo, negando lentamente- Mirame. ¿Crees que me comporto como me comportaba antes? ¿Crees que tengo mucho que ver con la chica que entro al colegio hará unos meses? Pues claro que no. Aquella chica no estaria ahora aqui sentada, agarrandote la mano, ni seria feliz, ni lo hubiera hecho. Y no creo que eso signifique que debiera estar en otro sitio sino que, como dice Asterope, alguien necesitaba una forma de organizarnos a todos, y aquella fue la mas sencilla. - dijo, acabando por sonreir ligeramente.

Y entonces afilo aquella sonrisa, dandole un ligero codazo, bromeando, -Aunque,... si te soy sincera... Creo que eres mas Slytherin que Linc. No te creas que no estaria mal que os cambiarais de casa.... - dijo, burlando a Lincoln, mientras acababa por reir, intentando arrancar aquella sonria a Ithan.

Entonces el chico retomo el tema de los disfraces, a lo que Kendra respondio con una ligera sonrisa- ¡De mortifagos! ¿A que mola? Aunque aun no tenemos muy claro como hacerlo... SObre todo el tema de las mascaras, las tunicas son faciles...

Miró a Kendra cuando le preguntó por que decía aquello. La respuesta era sencilla y simple: Se sentía más agusto entre Serpientes que entre Leones. - Por que es la verdad. - Contestó a Kendra como si fuera una obviedad. Fue aquella respuesta, la que pareció devolverle el brillo en la mirada, aquella seguridad en lo que decía. - En Gryffindor les falta ese... deseo por ser el mejor. - Acabó por decir, con resignación.

Esa ambición que yo si tengo.

Miró entonces a Asterope, que fue la primera en dar su opinión. Su opinión estaba muy bien, tenía razón en todo lo que decía, exceptuando un pequeño detalle. Uno mínimo y casi sin importancia. Uno que visto ahora, a esta altura de curso y de compañías -todas Slytherin- me planteaba que me hubiera equivocado en el pasado. Y eso era, a titulo real, lo que me había jodido. - Yo le pedí al Sombrero Seleccionador entrar en Gryffindor. - Acabó por soltar por su boca. - Y me jode pensar que me equivoqué. - Y de ahí venía gran parte de aquella ralladera que llevaba encima. Había sido él quien había condicionado al sombrero para que lo pusiera en Gryffindor y no en Slytherin.

Resopló, recuperandose de aquella confesión. Para luego seguir añadiendo. - Y si. Me siento más agusto con vosotros. - Acabó por subrayar las palabras de Asterope. Después de todo, ella tenía razón, era como él lo veía desde siempre, pero en su estancia en el colegio se había dado cuenta de la importancia que le daban alguos a ser de una casa o de otra. Como si aquello los definiera. Kendra apoyó las palabras de Asterope, y el Rubio no pudo evitar pensar lo irónico que le resultaba todo aquello. Había escuchado a algunos de sus compañeros hablar de las casas como algo sagrado, un vinculo de lealtad impuesto, tildando sobretodo a las serpientes de elitistas y clasistas cuando eran estas, precisamente, las que estaban dando el mensaje totalmente contrario.

Entonces Linc rompió el silencio que se había formado. Ithan parecía haber recuperado aquel brillo que lo acompañaba, pero los comentarios de Linc acabaron por hacerle sonreir, asintiendo con la cabeza. - Bueno... no es solo ver a mi... novia...  - Dijo la palabra un poco más floja, como si aquello aun le diera vergüenza. - ...también es ver a mis amigos. Gracias a los tres. - Acabó por decir, recuperando poco a poco su buen humor, intentando ver las cosas como se las habían dicho. - Pero nada de decirle a nadie lo del tema del sombrero ¿eh? - acabó por decir, señalandolos con el dedo índice.

Miró a Kendra. No hizo comentario alguno sobre lo que ella había dicho, sobre como aquella niña que había entrado había cambiado y ahora era feliz. Aquello fue una de las cosas que más le llenó, que más le gustó escuchar. Simplemente la miró, dandole un pequeño apretón en el antebrazo como todo agradecimiento silencioso, un gesto que ella comprendería y que podía tener más significado que todas las palabras que se le podrían haber ocurrido.

Y la chica se metió con Linc, e Ithan no pudo evitar reir. - Bueno, hoy podremos ver como se integra Linc en la mesa de Gryffindor. ¿No? - Comentó, bromeando.

Ithan quería cambiar de tema, dejar de lado el tema de las casas, ahora que se había animado. Escuchó a Kendra cundo dijo que querían ir de mortífagos. - ¿De Mortífagos? Las túnicas son fáciles y mi hermano el año pasado se disfrazo de esto... aun guarda las mascaras que se pusieron él y Erin. Podría preguntarle si tiene más, o si podría ayudarme a hacer alguna. - Miró a los demás, planteando la idea de que su hermano podría tener la solución a este problema. - Lo que me faltará una túnica verde. -

Le alegró comprobar que Ithan iba mejorando con sus comentarios. Cada uno de los tres aportaba una visión diferente, pero todas ciertas y ayudaban al chico a no sentirse tan mal. La confesión de que había acabado en Gryffindor por una petición suya tampoco le pareció tan fuerte. Al fin y al cabo, antes de entrar en el colegio muchos venían con una idea preconcebida sobre su casa y era lo que querían. Ella misma le habría suplicado al sombrero ir a Slytherin de no haber tenido tantas dudas a última hora.

- Bueno, pero por eso no pasa nada. No se lo diremos a nadie, tranquilo, pero tampoco te preocupes. No es una elección para toda la vida y, lo dicho, no te impide quedar con nosotros –Sonrió cuando el Gryffindor les dijo que se sentía más a gusto con ellos que con su propia casa. Era algo que ya suponía, porque pasaba mucho rato con las tres serpientes (sobre todo con Kendra, claro). Pero escuchárselo decir era diferente. Solo una persona más le había dicho algo parecido y la pequeña nunca pensó lo importante que sería para ella que la gente se sintiera cómoda su alrededor, cuando la niña nunca antes se había sentido cómoda con nadie.

- Seguro que Linc estará estupendo rodeado de leones –Se imaginaba que lo más probable era que recibiera más de una mirada de odio en cuanto abriera la boca. Los comentarios de su amigo ya causaban controversia entre sus propios compañeros; peor sería con los demás si hablaba más de lo debido.

- ¿En serio? ¿Tu hermano tiene máscaras? Pues eso solucionaría nuestros problemas, porque es lo único que nos falta y no tenía ni idea de cómo hacerlas.

Linc no volvió a abrir la boca, pero si que miró a Kendra por encima del hombro, ya que claramente, él estaba por encima de ella en todo, hasta que Ithan decidió hablar sobre el sombrero y su influencia en él "Entiendo... yo pedí lo mismo con Slytherin..." Lincoln se rascó un segundo la barbilla, gesto que indicaba que estaba pensando algo, no diría lo de Ithan y el sombrero, pero información es información y no se sabe cuando podría serle útil, así que por ahora, la guardaría en la memoria.

Mantuvo la concentración en sus pensamientos hasta que el rubio y Asterope hablaron sobre la mesa de los Leones y él mismo -Oh... mierda, se me había olvidado- Dijo cambiándole la cara completamente -Menuda semana me espera...- Resopló colocando la mano sobre su frente -Como se me acerque Noah le pienso clavar el cubierto en la cabeza, avisado estas- Suspiro con solo pensar en estar en esa triste y aburrida mesa, aunque hoy por hoy, la suya había perdido a mucha gente, igual le iría bien cambiar un poco de aires y ver si entre los Leones había alguien mas, además de Ithan, que mereciera la pena tener cerca, o al menos, ser usado para algún fin.

Aunque la cara volvió a cambiarle cuando le explicó que sus hermanos habían llevado mascaras en la anterior fiesta de Haloween -Eh, buena ésa, habla con ellos cuando vayamos al comedor, ojalá tengan cuatro- Sino, ya se las ingeniaría para encontrar otras dos, al fin y al cabo, siempre lo hacía.

Kendra escucho a Ithan, en silencio, y su sonrisa se fue alargando ligeramente, aun fina, en sus labios- ¿Y te arrepientes de estar en Gryffindor? -le pregunté, mirandolo- Escucha Ithan: no conozco a nadie que sea tan buena persona como tu, ni que esté tan dispuesto a ayudar al resto, siempre, sin importar que eso vaya contra tus propios planes. Siempre estás ahi, tirando del resto, y eres noble y valiente unas cualidades que, desde luego, pocos tienen. Por eso el sombrero te escuchó y te puso donde querias estar. -dijo, como apunte final, entrelazando su mano con la del chico antes de pasar a algo mas distendido, afilando la sonrisa en sus labios- Y no te preocupes, pequeña culebrilla enmascarada... Te guardaremos el secreto, aunque creo que para navidad te regalaremos un jersey verde y plateado... - rio entonces, guiñandole un ojo, contenta de verlo mucho mas animado, ilusionada por todo lo que habia dicho de ellos tres.- Yo... tambien estoy muy agusto contigo. Y con vosotros dos, aunque Linc crea que va a conseguir algo estirando tanto el cuello, aparte de una contractura... - bromeo, ante su ademan de mirarla por encima del hombro, riendo de nuevo.

Y entonces asintio, cuando  Ithan hablo de la "semana de Gryffindor"- Oh si... llevo una semana esperandolo con ilusion... - dijo, asintiendo, con un gesto burlon, mirando a Lincoln de reojo.

Sin embargo, escuchar a Ithan hablar de las mascaras hizo que Kendra abriera los ojos, sonriendo abiertamente- ¡Pero eso es genial! Podriamos hablar entonces con tu hermano a la hora de la comida, si.  Asi aprovechamos que estamos todos en la mesa de Gryffindor- dijo, suscribiendo las palabras de Lincoln, sin caer en la cuenta de que, tecnicamente, iba a conocer a su cuñado por primera vez.

Ithan pensaba que Asterope se equivocaba. Si era una elección para toda la vida, en su familia se lo llevaban diciendo y recordando desde que tenía uso de razón. El recibidor de su casa estaba coronado por una enorme serpiente de Slytherin, el dormitorio de sus hermanos mayores estaba repleto de grabados con leones en unos casos, y aguilas en otros. Además, recordaba a su padre en alguna conversación preguntar siempre lo de "¿En qué casa estudió?" como si aquello fuera algún tipo de pista o indicativo de con quien estaba tratando. Pero había algo de verdad en lo que había dicho la serpiente.

Nada le impedía estar con ellos.

Kendra respaldó todo lo dicho anteriormente por los tres, para que no le diera más importancia y hacerle ver que estaba donde debía estar. No contestó a su pregunta retórica, pero tenía buenos motivos para tener sus dudas sobre si el sombrero debía ponerle en Slytherin y él lo había condicionado con deseos personales. Fuera como fuera, la suerte estaba ya echada. - Anda... no es para tanto... - Contestó a Kendra, algo sonrojado por todas aquelas palabras hacia él. - Pero si es un jersey verde y plateado que sea bonito ¿eh? - Acabó por decir, con una sonrisilla.

- Sí tío, si sigues así te harás polvo el cuello... - Añadió a las palabras de Kendra sobre a Linc estirando el cuello. Y no pudo evitar reir ante una Asterope con ganas de ver a Linc entre Leones, a Linc pasando ya un mal rato y Kendra ilusionada con todo aquello. Miró a Linc cuando lo advirtió sobre el asunto de Noah. Él se encogió de hombros. - ¿Avisado yo? - Preguntó, divertido. - Avisalo a él. Creo que va a ser una de las semanas más entretenidas del curso. - Bueno, aquello sin duda iba a ser emocionante.

Miró a Asterope cuando le pregunto si tenían. Le vino a la cabeza una respuesta que solo se quedó en su cabeza. Claro. Y posiblemente mis padres también tengan... y mis tíos, y mis abuelos... - A la hora de comer hablaré con él, a ver cuantas tiene. Así que por ahora no nos preocupemos por esto. - Miró entonces a Linc, con una media sonrisa.

- Venga, si te lo pasarás bien en Villa León. Seguro que es más entretenido que las demás mesas. Una semana entera... cuando quieras volvemos a apostar otra semana en la mesa del otro. -

-Claro que será bonito, ya lo veras... - dijo, riendo, asintiendo, divertida al ver cómo Ithan le daba la razon con lo del cuello estirado de Lincoln.

Y, en cuanto vio la hora que era, y que ya estaba todo mas o menos decidido, Kendra acabó por ponerse en pie, estirando una mano en direccion a Ithan y otra en direccion a Asterope, para que ambos se levantaran. Linc podia levantarse solo, seguro. -Bueno chicos, va... Comamos pronto, que aun tenemos muchas cosas que hacer... -añadio, con intencion de salir de alli en direccion al Gran Comedor.

Sin embargo, y por desgracia, la diversion duró poco para las dos serpientes chicas. Nada mas llegar a la mesa de Gryffindor, uno de los prefectos se acercó a ellas, llamándoles la atencion sobre el hecho de que no podia haber tantos estudiantes de otras casas en una mesa que no fuera la suya- Que suerte tienes, culebrilla...- dijo Kendra a Linc, riendo por lo bajo, mientras se ponia de puntillas para dejar un beso en la mejilla de Ithan- Bueno, luego nos cuentas.... ¿Nos vemos después de comer, a la salida del Gran Comedor? - preugntó entonces esperando confirmacion para marcharse a comer con Asterope a su mesa.

Lincoln recogía las cosas sin mirar a Kendra mientras hablaba, pero si que dejó salir un leve suspiro -Aix... no es suerte "es ser mejor que los demás" y sobre Noah... que le den, el pobre es completamente inútil, otro como Anthony- Se giró a sus amigos y dijo -Bueno, acabemos con ésta maldita apuesta- se acercó a Asterope y le sonrió -Nos vemos después de comer en la salida del comedor ¿Vale?- Bailar no es que fuera una de sus pasiones y se le daba realmente mal, pero tenía ganas de ir con su amiga y disfrutar de un buen rato con ella.

Fue el primero en empezar a caminar y le dijo a los demás -Bueno ¿Nos movemos?- Prefería no entrar en el tema de las casas, para no agobiar a Ithan con éso, pero sin duda le parecía normal que prefiriese estar con Slytherin, al fin y al cabo, alguien dijo una vez que los mejores magos han salido de ésta casa, mientras caminaban hacia la entrada del castillo le preguntó a Ithan -Oye, ¿Tus hermanos estarán ya en la mesa? La verdad es que con que antes tengamos ésas mascaras mejor, porque no tenemos tiempo de hacer unas sino- El sueño aún le afectaba un poco, igual después de comer se encontraba mas animado y despierto.

Asterope caminó junto a los otros tres hacia el comedor y, cuando los prefectos no las dejaron a ella y a Kendra sentarse, no supo cómo sentirse. ¿Aliviada por no tener que comer rodeada de tantos leones o indignada por que le hubieran prohibido el paso? En cualquier caso, poco podían hacer.

- Bueno, yo tengo que escribir a mi familia, así que iré a la lechucería justo después de comer –Informó a sus compañeros antes de partir caminos. En efecto, tenía muchas cosas que contarles a su abuelo y a sus padres y no quería esperar más-. Pero será rápido. Ahora hablo con Kendra para saber dónde quedar con vosotros.

Sonrió a Linc de vuelta cuando se giró hacia ella-. Que te vaya bien con los Gryffindor –Se le acercó un poco-. Intenta no acabar en la enfermería, que me quedo sin pareja, ¿eh? –Se despidió de los chicos y se puso con Kendra de camino hacia la mesa de Slytherin.

- Nos vemos a la salida del Gran Comedor después de comer. - Reafirmó las palabras de Kendra, con una pequeña sonrisa que se amplió cuando la chica le dio un beso en la mejilla. A él, que le diera besos (aunque fuera en la mejilla) delante de más gente aun le daba vergüenza, por lo que no pudo evitar que cierto color sonrojado acudiera a sus mejillas. - Ahora nos vemos. - Acabó por despedirla devolviendole el beso de una forma fugaz y rápida.

- Hasta luego, Aste. - Despidió a la chica, y finalmente se encaminó junto aLinc hacia la mesa de Gryffindor. - ¿Acabar con esta apuesta? Hoy solo será el primer día de toda una semana. - Comentó con una amplia sonrisa, dandole un par de golpecitos de apoyo en el hombro. - Bueno, mi hermano Ian esta obsesionado con la puntualidad, así que él seguro que esta en la mesa ya. - Fue explicandole a Linc.

Nada más salir al exterior, Daphne se puso la ropa de abrigo. Hacía mucho frío, sí, pero era realmente agradable sentir el fresquete después de tanto tiempo con el fuego a dos metros de su cara. Se sentó en uno de los bancos, de manera que sus pequeñas piernecitas le quedaban colgando. Apenas lograba tocar el suelo con las puntas de los pies.

Se sacó los mini bocatas que se había preparado. Estaban realmente deliciosos. Esos elfos sí que sabían hacer la comida. ¡Y eso que las pechugas a la plancha es de lo más sencillo de cocinar! Ahora que pensaba en eso, se acordó de sus libros de recetas. Hacía tanto tiempo que no preparaba uno de sus postres. Pero, claro, en Hogwarts no podía hacerlos. Ni tenía los ingredientes, ni las herramientas... Y tampoco le hacía gracia que todo el mundo se enterara de su hobby. Pero sí tenía muchas ganas de que llegaran las vacaciones de Navidad para practicar en su casa. Podría mandarles paquetes de dulces a Sara, a Mircea, a las gemelas y, por qué no, a Morgana también, que le había caído fenomenal.

Sus fantasías culinarias terminaron justo en el momento en el que tragó el último cacho del primer bocadillo. Se había preparado varios, pues necesitaba muchas fuerzas para la siguiente clase. Duelo-. Ais, qué horror –exclamó al recordarlo. No tenía muchas ganas, ya que siempre lo fallaba todo. No obstante, esta vez intentaría no deprimirse mucho si no lo conseguía. Al fin y al cabo, había tenido una racha bastante buena en otras asignaturas, no tenía por qué desanimarse.

- Va, Daphne, que seguro que esta vez lo consigues –se dijo a sí misma una vez terminó de comer-. Vas a entrar en clase y vas a sacar el hechizo de duelo –Ni aun juntando todo su optimismo y esperanzas se lo terminaba de creer-. Bueno... y, si no lo consigues ahora, lo harás rápidamente. Seguro.

Aunque hablaba en voz baja, gesticulaba bastante y los pocos valientes que salían al patio la miraban como si estuviera loca. Pero ella necesitaba esos ánimos para no derrumbarse en cuanto entrara en el aula y viera a uno de los Knower. Le resultaba muy pesado que pasara una clase tras otra de Duelo y no sacara absolutamente nada. Mircea  le había dicho alguna vez que creía saber cuál era el problema y podría ayudarla, pero no había visto avances en sí misma.

Se quitó el gorro, pues con el enorme moño que se había hecho hoy le molestaba un montón. Sus orejas habían sufrido bastante esa mañana, pero tendrían que hacerlo un poco más en pro de la comodidad de la tejona. Además, no iba a estar mucho más tiempo fuera. Ya quedaba poco tiempo para que comenzara la clase, así que tendría que ir levantando el campamento.

Unos minutos después, recogió todo y entró en el castillo.