Partida Rol por web

Diana entró en el vagón con la jaula de Vicky a cuestas así como una marmita con golosinas y varias ranas de chocolate tratando de escapar de sus bolsillos. Depositó sus cosas donde pudo y miró con quien le había tocado.

- ¡COLIN!- exclamó contenta por haber coincidido con su amigo- ¿Cómo estás? Que sorpresa- se acercó a él y lo abrazó- Vaya estás más alto- declaró tras mirarlo mejor con su encantadora sonrisa en los labios.

¿Donde? Exclamó, alzando el tono por el pasillo. Ithan estaba señalando hacia atrás, cuando Ian, su hermano mayor, le hizo gestos para que siguiera hacia adelante. El numero tres. Los tíos nos dijeron que estarían en el numero tres. No te enteras ¿eh? ¡Y dale un abrazo de parte de todos! La fuerte voz de Ian resonó por todo el pasillo, mientras se daba la vuelta y marchaba hacia el vagón de prefectos.

Joder, que capullo. Se quejo Ithan, cuando su hermano mayor ya había partido, cruzándose de brazos, mirando a su alrededor, mirando otros compartimentos que ya estaban llenos. Ithan había visto el año pasado a Diana en varias ocasiones, pero el último mes, entre unas cosas y otras, no pudo coincidir con ella. Así que se giro sobre sí mismo, caminando hacia el compartimento.

Iotek, el hurón de Ithan, parecía nervioso con tanta gente de aquí para allí. Acabó por quedarse quieto, en el hombro del chaval, mientras caminaba por el pasillo, con ese suave tintineo que le acompañaba al chocar las correas y hebillas que llevaba colgando de un pantalón de tela amplio, de color oscuro, y con una camiseta de un color rojo vivo.

Ithan no tardo en llegar al compartimento, el numero tres, y abrió la puerta, viendo a Diana abrazando a Colin. Se cruzo de brazos, con una media sonrisa propia de quien está pensando en alguna capullada, y se encoge de hombros. Si quieres me voy al siguiente, prima. Ithan la había reconocido. No lo había dudado, y se mantuvo en la puerta, con esa pose y esa sonrisa, esperando una reacción por parte de la pareja.

¿Casualidad? No lo creo, pero estaba muy contento de compartir el viaje con Diana. - ¡Diana! - Estaba muy contento por verla de nuevo. Entonces ella me abrazó, yo correspondiéndole con una sonrisa. Encantado de volver a notar su suave piel. - ¿Había crecido? Bueno supongo que algo si... - Entonces reí. - Gracias, tu también has crecido, a demás, estás mucho más guapa. - Le dije con una amplia sonrisa. Entonces fue cuando un chico entró. Y parecía ser que conocía a Diana. - Oh vaya, buenos días. ¿Tu eres... ?

Diana estaba escuchando a Colin cuando el vagón se abrió y reconoció una voz familiar.

- ITHAN...- se abalanzó hacia a él y lo abrazo con alegría- ¿Que alegría? Hemos coincidido en el mismo vagón y todo...- entonces se percató de la presencia de Colin y tirando de Ithan hacia el interior comenzó las presentaciones- Colin te presento a mi primo Ithan, Ithan este es Colin uno de mis mejores amigos, está en Ravenclaf ¿sabes? y el año pasado coincidimos en el mismo vagón y todo- dijo feliz- he comprado unas chuches ¿Queréis?- la chica estaba radiante.

- Oh ya veo. Mucho gusto Ithan. - Le dije amablemente, con una sonrisa y tendiéndole la mano. Bueno, al menos era familiar de Diana, así que no tengo que preocuparme mucho más. Entonces Diana sacó de su mochila unos dulces. - Oh, gracias Diana, cogeré una con tu permiso. - Dije mientras cogía una chuche. Entonces me la metí en la boca y la saboreé deliciosamente. - Y bueno Ithan, ¿qué curso harás? ¿Primero? - Le pregunté por casualidad.

Ithan descruza los brazos, alzando el dedo índice aun sin borrar esa sonrisa cuando entreabre los labios y es Diana quien le interrumpe, con la misma palabra que él iba a decir. Su propio nombre. Pero no lo duda, abre los brazos, abrezando a Diana con una amplia sonrisa, estrechándola con fuerza, o al menos, toda la que un crio de once años puede.

Kayla e Ian Dos de los muchos hermanos mayores de Ithan Me dijeron que estarías aquí. La suelta, guiñándole el ojo, con gesto divertido, y se deja tirar hasta Colin, a quien le ofrece la mano, con una amplia sonrisa. ¡Encantado, tío! Los amigos de Diana son mis amigos.

¡Ravenclaw! ¿En serio? La mirada se desvió hacia el asiento, donde estaba el libro de Colin. Con la nueva información, aquello tenía sentido. A mí me gustaría que el sombrero me ponga en Gryffindor. Asiento con la cabeza, y una pequeña sonrisa. Entonces debe ser una buena señal, ya verás.

¡Las chuches! El rápido gesto de llevarme la mano a la cabeza hizo que incluso Iotek se sobresaltara, cambiando de un hombro a otro, volviendo a quedarse quieto. Me las deje en el Baúl. E Ian se lo ha llevado... Espero que no al coja... Bueno, yo si quiero ¿Que tienes?  Pregunta, con curiosidad, mirando a Diana. El Tren inicio la marcha, haciendo que perdiera el equilibrio durante unos segundos Uho.... Nos movemos. ¡Nos vamos!

Ithan estaba ilusionado, contento y radiante. No podía acabar de creerse que por fin, su viaje hacia Hogwarts estuviera haciéndose real. Sí, haré primero... estoy de lo más nervioso, casi no puedo creermelo. Bueno... ¡tenéis que contármelo todo! ¿Es muy grande Hogwarts? ¿Cómo son los profesores?

Diana se sentó de golpe en el asiento al lado de su primo y de Colin, estaba tan emocionada o más que Ithan porque a parte de volver al colegio que más le gustaba del mundo, y seguir aprendiendo magia podía estar con su primo. Coincidían sólo en reuniones familiares, apenas unas 5 veces al año, porque Ithan vivía en Irlanda y ella en Londres, pero cada vez que se juntaban solían meterse en lios y pasarlo muy bien, y ahora que ella había descubierto que podía hacer magia y que se encontraban en un castillo mágico, las posibilidades de meterse en LIOS con mayusculas se incrementaban...

- Ithan... Hogwarts es GENIAL... hay fantasmas, cuadros que hablan, dragones de piedras, escaleras que se mueven solas, la comida aparece y desaparece sola y por si fuera poco te enseñan a hacer magia... estaba deseando volver al colegio... y me encantaría que fueras seleccionado para Gryfindor, ahí es donde yo estoy- declaró orgullosa- para mi todas las casas son iguales, de echo tengo amigos en las otras casas, pero si fueras para Gryfindor podría enseñarte como es la Sala Común... que ilusión- concluyó la niña con brillo en los ojos

Las palabras de Diana solo consiguieron emocionar al chaval. Toda su familia había hablado siempre maravillas de Howgarts, autenticas maravillas sobre lo que allí sucedía. Pero la emoción de Diana, la pasión de la chiquilla combinada con que fuera de su misma edad, y lo más importante, que él mismo estuviera de camino a aquel lugar mágico, le emocionaron.

Estaba nervioso. Eso se le podía notar, no solo porque no podía estarse quieto, si no porque además, hablar de aquello, hizo que inconscientemente metiera la mano en el bolsillo, donde llevaba la varita. En el colegio con sus hermanos y su prima, en un lugar como aquel. Aprender magia, meterse en líos, investigar y explorar... y por qué no, gastar algunas bromas. Desde su punto de vista, la cosa solo hacía que mejorar.

Tal y como lo cuentas no sé cómo he podido estar tantos años sin ir, Di... ¡Me alegro tanto que estés aquí! Ojala me cojan para Gryffindor. ¿Y cómo es la sala común? ¿Todo el mundo puede entrar a las salas comunes? ¿Que diferencia exacta hay entre las casas?

El chaval acaba asintiendo con la cabeza, decidido. Le diré al sombrero que me ponga en Gryffindor. No se hablé más. Y si no le diré que los deshilare hebra a hebra.  Comento, riéndose, mientras se encogía de hombros. El hurón de su hombro a cabo por descender hasta el asiento, donde se hizo un ovillo, dispuesto a dormir el resto del viaje.

Según libros, cada casa por dentro es algo diferente a las demás. Y no, cada uno solo puede entrar en su propia casa, que yo sepa...- Entonces cogí aire y me aclaré la voz. - En referente a las diferencias, en Gryffindor son seleccionados los alumnos con coraje, valor y honor. Un buen miembro de Gryffindor tiene gran osadía, temple y caballerosidad. Son capaces de todo por defender en lo que creen y nunca se dan por vencidos. También son capaces de romper las reglas si es necesario y les encantan los retos, cuanto más difíciles, mejor. Se atreven a lo que la mayoría no se atreve, y generalmente salen bien cuando se enfrentan a un problema. En cada obstáculo ven una oportunidad para demostrar quienes son realmente. En segundo lugar está Hufflepuf, dónde allí van los justos, leales y trabajadores. Los Hufflepuff son buenas personas y suelen caer bien a todo el mundo. Son pacientes, tolerantes y siempre harán todo de forma honrada, sin hacer trampas y respetando las reglas. Luego está Ravenclaw que van los alumnos con inteligencia, curiosidad y sabiduría, una mente dispuesta. Individualismo y creatividad. Y finalmente está Slytherin  dónde van los alumnos con inteligencia, astucia, ambición, ingenio, determinación, y "un cierto desprecio por las reglas". Tienden a dudar antes de actuar, con el fin de sopesar todos los posibles resultados antes de decidir exactamente lo que se debe hacer.

Cabe añadir, que no vas dónde tu quieres, sino donde el sombrero te diga, a lo mejor, tus pensamientos son diferentes a lo que quieres en realidad. - Añadí, aunque algo extenso a la conversación.