Partida Rol por web

Con denodada velocidad, Liu An avanzo hacia Parnassus, que ya evolucionba con sus escudos, antes siquiera de que el guerrero pudiera comenzar a ver caer la peligrosa lava que resbalaba por las paredes magicamente protegidas.

A pesar de su preciso ataque, los escudos de Parnassus detuvieron su avance con impresionante destreza.

-Querida, la ultima vez nuestra conversacion se trunco un tanto rapido... acaso no quieres hablar un poco mas?- jugueteo el guerrero con las palabras, comenzando un cauteloso avance hacia la mujer -Cuentame algo mas sobre ese repentino interes por Delderius. Se ha prendado el frivolo elfo oscuro de su companera de coso acaso? No paece su estilo.- explica el esclavo.

La lava comenzó a caer y al ver aparecer al gigante de los escudos mi alegría fue… como describirlo… demasiado intensa…

Empecé a notar el calor que incendiaba las paredes a cada paso… del gladiador… esos movimientos suyos eran tan precisos tan calculados que daba miedo…

Recordando el breve encuentro anterior supe que lo mejor era lanzar uno de esos escudos al mar de lava… así tendría alguna posibilidad y le demostraría lo que había mejorado…

El látigo se movió rápido en mi mano, preciso perfecto pero sin la curvatura suficiente para enredarse en las púas para arrancarlo…era demasiado suponer para mi, juntando los dos escudos el látigo golpeo ruidosamente el ellos, casi parecía que le había hecho recular unos centímetros…

Sus palabras amables me devolvieron a la arena y al calor sofocante de la lava…

Claro que si, últimamente he estado aburrida y muy desocupada, quería volver a sentir “el contacto” de mis… amigos… y volver a charlar con ellos…

¿Estas bien?… poco te vi la ultima vez…y poco charlamos…

La de Delderius... una apuesta perdida...

Cita:

-Yo he procurado mantenerme ocupado: el entrenamiento de Oliver ha sido duro e intensivo, y he tenido que hacer algunas salidas inesperadas a la ciudad; pero todo esta mas tranquilo ahora y me alegro de tener un poco mas de tiempo para los mios.- dijo Parnassus mientras su escudo volvia a detener el peligroso latigo y aferraba el cuello de Liu An someramente entre una de las nuevas aristas laterales de su escudo -Pero esta costumbre de dialogar solo cuando estamos jugandonos el tipo no es lo mas recomendable, pequena...- anadio tratando de cerrar la presa.

si no coincidimos mi paladin...

Mirando el brazo magullado de Parnasus... ya he visto que has mejorado muchísimo mas si era posible... yo un poco. Pero por lo que veo en la arena sigo yendo a la zaga de todos los demás...

Ahora vamos a ver si conseguimos alguno de nuestros propósitos vitales… como recuperar el nombre de mi familia.

-Te gusta mi brazo?- bromea Parnassus al seguir la mirada de Liu An -Oh, claro, lo olvidaba: para recuperar el nombre de una familia hacen falta ninos, no?- anadio Parnassus mientras se lanzaba hacia su adversaria en un rapido y atenazador abrazo.

Pronto en cuello de Liu An estaba entre las protuberancias anadidas a sus escudos, castigandolo con sana. El aire desaparecia de sus pulmones, dejando paso a la muerte:

-El caso es que, a pesar de lo que disfrute abrazandote, no estoy muy seguro de que los dirigentes de Angkortak aprobaran una familia noble de semielfos... Que opinas?- comento mientras la mujer boqueaba -No... supongo que no.- fue su despedida.

Delderius entró en la arena especial y se sorprendió, levemente, al ver en ella a Juan. El gladiador humano no solía frecuentar esos lugares.

En fin... Delderius saludó con una medio sonrisa y miró el tipo de arena que les estaba reservado. La lluvia de ácido. Probablemente un combate rápido por tanto.

Movió los kukis, sonrió.

- ¿Vas a seguirme hablando de ese honor humano? - dijo con evidente sardonismo mientras sus kukris hacían rápidas y perfectas evoluciones en el aire

Juan Bautista contuvo sus ancias de lanzarse sobre el elfo apenas verlo, y demostro el respeto y la tranquilidad que lo caracteriza en general, aunque no contra el... siempre tuvo la habilidad de decir las palabras justas, tocar los temas apropiados y sacar a Juan Bautista del combate.. ganando asi con facilidad.

Esta vez el espadachin buscaria un nuevo enfoque, un nuevo acercamiento.. para ver si cambiando la tactica puede superar a su rival.

-No tiene sentido que siga hablandote sobre ello elfo... nunca lo entenderias... los de tu raza siempre relacionan todo con la guerra, el hambre, y el odio.. porque nunca sintieron amor que es lo que nos diferencia.

Dicho esto el guerrero humano tomo su pose de combate y espero el momento justo para desenvainar su espada.

Delderius sonrió, apenas, ante las palabras de Juan. Dos ataques, uno al brazo izquierdo, otro a la pierna izquierda, dejaron la defensa de su adversario debilitada, aunque aun vivo.

Decidido a terminar el combate cuanto antes, Delderius lanzó un potente ataque contra la cabeza de su rival.

Juan Bautista en un despliegue de destreza en combate, se adelanta a los movimientos de Delderius atacando primero su pierna de apoyo y luego haciendo un movimiento de finta para esquivar su ataque a su brazo derecho. Cuando el espadachin pensaba que ya tenia todo controlado, el elfo lo sorprendio con un giro de sus kukris que le abrieron aun mas la herida que el acido que caia del techo de la arena le habia causado.

-Maldicion... siempre tiene algo bajo la manga...